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CONSTRUYENDO CATEGORÍAS PARA

PENSAR LA AGENCIA POLÍTICA EN


SOCIEDADES DESIGUALES. UNA
REFLEXIÓN SOBRE ARENDT Y BUTLER
BUILDING CATEGORIES TO THINK THE POLITICAL AGENCY
IN UNEQUAL SOCIETIES. A REFLECTION ON ARENDT AND
BUTLER

Mayarí Castillo Gallardo Recibido: Junio de 2012


Antropóloga Social y Doctora © en Sociología Aceptado: octubre de 2012
[mayari.castillo@gmail.com]

Palabras claves: Agencia política, sociedades desiguales, Arendt, Butler.


Keywords: political agency, unequal societies, Arendt, Butler.

Resumen: Reflexión teórica sobre la agencia política, orientada a generar


conceptos para el análisis de sociedades desiguales. El punto de partida
es la idea de acción y espacio político como “espacio de aparición” de
Arendt, para una definición de política en torno a la construcción de un
“mundo común”. Luego y a partir del trabajo de Butler, se incorporan
dimensiones que están ausentes en el pensamiento de Arendt: las posi-
ciones desiguales y el rol del espacio privado en la constitución del sujeto
político. Así, el trabajo establecer líneas de análisis para entender los
sujetos políticos en sociedades desiguales, definiendo la agencia política
como orientada a logro de objetivos, pero también como clave para la
producción de un mundo compartido.

Abstract: Theoretical reflection on the political agency, oriented to create


concepts for the analysis of unequal societies. The starting point is the
concept of action and political space as “space of appearance” in Arendt,
for a definition of politics by the construction of the “common world”.
Through Butler’s work, the article incorporates missing dimensions in the
Arendt’s thought: the unequal positions and the role of the private space
in the constitution of the political subject. The article tries to set lines of
analysis to understand the political actors in unequal societies, defining
political agency as goal oriented, but also as a key to the production of a
shared world.

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1. Introducción 2. La política de lo
compartido. Hannah Arendt y
El siguiente artículo tiene por objetivo de- la acción
sarrollar herramientas conceptuales para
el análisis político de sociedades desigua- “La valentía es la primera de las virtudes
les, recuperando en un argumento con- políticas”
junto dos autoras que si bien provienen (Hannah Arendt)
de matrices y trayectorias teóricas dispa-
La reflexión sobre el concepto de agencia
res, comparten una serie de elementos
es fundamental en las ciencias sociales,
que pueden enriquecer sustantivamente ya que se encuentra relacionada con el
este debate a la luz: Hannah Arendt y desarrollo teórico de uno de los concep-
Judith Butler. Ambas autoras, de un alto tos estructurantes de estas disciplinas: la
grado de abstracción, desarrollan herra- noción de sujeto. Como parte constitutiva
mientas para pensar el problema de lo de ésta, se ha transformado en uno de los
político desde un lugar que pone en el ejes alrededor del cual se ha articulado
centro la pregunta por la igualdad y por la la reflexión sobre la política, tanto en el
agencia del sujeto, interpelando respecto pensamiento moderno clásico como en el
a los alcances y potencialidades de estos que ha sido desarrollado en el marco de
elementos en la construcción del espacio las transformaciones societales de fin de
político. Estas preguntas adquieren singu- siglo.
lar pertinencia en el contexto actual, en el
cual la reflexión política debe enfrentarse En el marco de esta centralidad, cualquier
a sociedades altamente desiguales, en intento por reconstruir exhaustivamente
las que la reflexión sobre quiénes, cómo este debate, extenso y bastante difundi-
y qué tipo de sociedad construyen debe do, supera por mucho el objetivo de un
estar en el centro de cualquier debate. solo texto, razón por la que este trabajo se
enfoca en el análisis de estas categorías
A partir del análisis de estos aspectos se
en dos autoras: Hannah Arendt y Judith
busca relevar las condiciones implícitas
Butler. Ambas autoras, aunque distantes
en todo proceso orientado a la construc-
tanto en el tiempo como en los objetivos
ción de orden colectivo o, parafraseando
de su trabajo, comparten una preocupa-
a Lechner (2006), a la producción de
ción común en torno a la configuración y
toda sociedad por ella misma, poniendo
características de la agencia en el plano
el acento en la agencia de los sujetos y
de lo político, marcada por el énfasis dado
en la necesidad de recuperación de algu-
a la acción en el devenir de los sujetos en
nos de los aspectos éticos propios de todo
este espacio y por su énfasis en las condi-
proceso político.
ciones de igualdad en éste.
El punto de inicio de este trabajo es la
reflexión de Arendt sobre el concepto de
acción. Si bien algunos autores sitúan su
concepto de espacio público como el eje
del pensamiento de esta autora (Benha-
bib, 1988; Habermas, 1977), para el caso
de este trabajo se rescata una lectura que

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pone en el centro el concepto de acción, Sin embargo, lo particular de la vida hu-
piedra angular de su idea de lo político. mana es que además de insertarse en la
La importancia de que tiene esta cate- naturaleza y en el mundo de las necesida-
goría en el trabajo teórico de Arendt fue des básicas, se incorpora en un espacio
recalcada por la misma autora en el título pleno de significado, que le antecede y
del libro “Vita Activa”, tradicionalmente que le sobrevivirá a su muerte: el mundo
traducido y conocido como “La Condición de los “artefactos humanos”, cómo le lla-
Humana” (1958), marcando la centrali- ma Arendt, creado a través del trabajo, la
dad de la acción en la estructura del argu- actividad permanente y estable de trans-
mento (Knauer, 1980, Dolan, 1995). Por formación del medio. Este mundo “huma-
otro lado, una interpretación de los textos no” les permite a los individuos no sólo
de Arendt centrada en la acción permite trascender su propia mortalidad, sino que
pensar la distinción entre lo público y lo a través de la relación entre mundo obje-
privado como definida por el tipo de ac- tivo y mundo subjetivo, recuperar y poner
tividad, más que por características inhe- en evidencia la particularidad y unicidad
rentes al espacio o a los sujetos que en él de quienes lo componen. El hombre –dice
se encuentran. Esto vuelve la frontera en- Arendt– nace solo y se inserta en el mun-
tre ambos espacios flexible y contingente, do de la naturaleza, pero también está
discutiendo con las críticas que apuntan rodeado de otros hombres con los cuales
al carácter conservador y estático de las comparte un mundo significativo, estable
definiciones de lo público y lo privado de y duradero. En este marco, este mundo
Arendt, así como a su incapacidad de común no puede ser solamente como un
comprender tópicos como la politización espacio para la satisfacción de necesida-
del espacio doméstico o introducción en des sino que debe ser también un espacio
el debate público de temas o actores tra- que permite la relación con los otros y la
dicionalmente “asociados” a lo privado creación:
(Benhabib, 1988; Habermas, 1977). El mundo común es algo en que nos aden-
Partiendo de estas observaciones, este tramos al nacer y dejamos al morir. Tras-
trabajo tiene su punto de inicio en la dis- ciende a nuestro tiempo vital tanto hacia el
tinción realizada por la autora entre labor, pasado como hacia el futuro; estaba allí an-
trabajo y acción. El primer concepto –la- tes de que llegáramos y sobrevivirá a nues-
tra breve estancia. Es lo que tenemos en co-
bor– se relaciona con la satisfacción de
mún no sólo con nuestros contemporáneos,
necesidades básicas compartidas por to-
sino también con quienes estuvieron antes
dos los seres humanos y está signado por
y con los que vendrán después de nosotros.
elementos como la repetición, lo cíclico y
Pero tal mundo en común sólo puede so-
la no-sociabilidad. La labor no requiere de brevivir al paso de las generaciones en la
la presencia de otros: puede ser realizada medida que aparezca en público” (Arendt,
por cada individuo en soledad. La obli- 1958: 64).
gación de satisfacer estas necesidades
básicas a través de la labor recuerda que Este “aparecer en público” constituye
el individuo, desde el momento de su na- el núcleo de la acción, connotada por la
cimiento, se encuentra vinculado con la autora como aquellos actos capaces de
naturaleza, y al igual que otras especies, crear algo nuevo, de trascender la vida in-
depende de ella. dividual y de crear vínculos con los otros

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seres humanos. Si la labor está caracte- pacidad de otorgar un sentido inicial a lo
rizada por Arendt como la necesidad, la que se realiza, aún cuando dicho sentido
repetición, la previsibilidad y la inmuta- esté posteriormente sujeto a la interpreta-
bilidad, la acción está delimitada por la ción de los otros sujetos presentes en el
libertad, la creación, la imprevisibilidad, espacio político1.
la trascendencia y sobre todo, por la pre-
Me detengo en la exposición del pensa-
sencia de otros. Mientras que la labor es
miento de la autora en este punto, pues
concebida como una actividad solitaria, la rescatar el pensamiento de Arendt para
acción tendrá lugar en el mundo público, pensar la agencia política en sociedades
ya que sólo puede transcurrir en el espa- desiguales implica dos grandes desafíos.
cio “entre” (zwischen) los seres humanos. En primer lugar, implica hacerse cargo de
Este mundo común es lugar de la política las numerosas críticas que su trabajo tuvo
para Arendt. y sigue teniendo hoy día, tanto en la filoso-
Así, el devenir de política está marcado fía política como en las ciencias sociales,
por la noción de agencia. La comuni- sobre todo las que han acusado a la au-
dad política requiere la permanente ac- tora de proponer una concepción de po-
ción de los individuos que la componen, lítica basada en una “nostalgia clásica”,
siendo a través de ésta que los sujetos carente de conflicto, poder e inaplicable
políticos adquieren forma ante otros y en sociedades complejas. En segundo
se involucran en el devenir del mundo lugar, se requiere un trabajo importante
que les sobrevivirá. Este “aparecer en lo sobre categorías en un alto grado de abs-
público” es un ejercicio de libertad - no tracción, con el fin de generar conceptos
en el sentido de no encontrarse libre de capaces de dirigir una investigación sobre
restricciones - sino en el sentido de estar el fenómeno político. Para resolver estos
en condiciones de comenzar algo nuevo, puntos es preciso centrarse n una prime-
cuyas consecuencias y significado no de- ra instancia en la resolución de tres de las
penderán solamente del sujeto actuante,
1 Un análisis extenso de este punto en una matriz
sino también de los otros que le otorgarán teórica similar a la que se encuentra en el trabajo
sentido y significado. En ese marco, para de Butler y, por ello, concordante con la mirada
Arendt la acción no es un acto soberano general de este trabajo se encuentra contenido en
del sujeto ya conformado, sino condición los primeros trabajos de Ernesto Laclau y Mouffe,
de su existencia delimitada por la mira- condensados en el libro “Hegemonía y Estrategia
da y presencia de otros. Esta forma de Socialista” (1985). En éste, a partir del concepto
gramsciano de hegemonía se discute la necesidad
entender la aparición de un sujeto y su
de rescatar una mirada sobre lo político en la cual
agencia permite entender a los actores los actores no se encuentran predeterminados ni
políticos en el marco de su propia articu- son preexistentes, sino que se conforman a partir
lación, no dejando espacio para la idea de articulaciones contingentes producto de sus
de sujetos preconstituidos en este cam- acciones en el campo político. Este enfoque, que
po. Acá es importante destacar el rol que rescata la dimensión discusiva de esta construc-
Arendt le otorga al soporte discursivo de ción de sujeto, es concordante con el énfasis de
Arendt en la acción y en los aspectos “narrati-
la acción, no estableciendo una distinción
vos” de la “aparición” de un sujeto en el espacio
entre “hechos y palabras” y suponiendo público y va en la línea también del énfasis dado
una relación de mutua dependencia entre por Butler al carácter performativo que tiene sobre
ellos: la agencia política se vincula a la ca- los sujetos la acción en el espacio político.

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críticas que se han realizado al trabajo a se hará de ella. Así, el trabajo de Arendt
Arendt, las más contingentes a este tra- es claro en este punto al señalar que toda
bajo. acción lleva adherida “un sentido” impre-
sa en ella por la voluntad del sujeto ac-
La primera de estas críticas es la que se
tuante, es decir, si existe un objetivo para
refiere a la ausencia de objetivos o la au-
la realización de una acción, sólo que éste
sencia de acción estratégica en el campo
y su posterior realización es contingente
de la política. Como ha señalado Thomp-
son (1969:659), uno de los problemas de a la mirada y evaluación de los otros pre-
la forma de concebir la acción política en sentes en este espacio, frente a los cuales
Arendt es la incorporación en el análisis se “revela el significado final de la acción”
elementos del orden de los objetivos, dis- y se “descubre el sujeto actuante”. Esto
tanciando completamente la acción polí- último es importante si lo que se busca es
tica del pensamiento estratégico y/o ins- entender los sujetos políticos como articu-
trumental y poniéndolo mucho más cerca laciones contingentes delimitados por sus
de una acción puramente expresiva. Esta acciones en el campo, más que por sus
crítica también fue enunciada posterior- características preexistentes.
mente por Habermas (1977:16) y Jay Así, no es que el modelo teórico de Arendt
(1978:352-353), para quienes el concep- no admita la acción estratégica, sino que
to de acción de la autora iguala la acción pone el acento en que la acción política
estratégica a un tipo de acción que instru- debe estar definida más bien por una ca-
mentaliza y que no está dirigida a “estar racterística básica: su orientación a estar
con otros” en el espacio público, sino a “entre” individuos, con lo que se enfati-
utilizarlos como medios en la consecución za la dimensión relacional de la acción y
de objetivos. En ese sentido, para Haber- la necesidad del reconocimiento de los
mas la autora pone la acción estratégica otros, ya sea como aliados o adversa-
fuera del campo de lo político y la sitúa rios posibles. Como bien señala Knauer
casi en el plano de la violencia, razón por (1980:725), esta crítica al concepto de
la que se hace difícil concebir dentro de Arendt intenta oscurecer el aporte pri-
su noción de lo político un concepto de mordial de su pensamiento, centrando la
poder que implique tanto la generación acción política en el plano del individuo
de éste como su mantención y ejercicio. y sus propósitos, olvidando la dimensión
En estos términos, los autores coinciden constitutiva de mundo común que ésta
en que el pensamiento de Arendt tiene un tiene y el requerimiento de la acción en-
contenido fuertemente normativo, que im- tre iguales, legítimamente reconocidos
pediría la inclusión de la consecución de para actuar en este espacio. La acción
objetivos inherente a todo proceso político. instrumental que queda fuera del mar-
Frente a estas críticas y siguiendo Knauer co de lo político es aquella que pone al
(1980:725) es posible decir que la acción otro en el lugar de objeto, estableciendo
en Arendt no se encuentra desprovista de una relación desigual, no orientada a in-
objetivos en ningún caso, sino que su én- volucrarse en un mundo común sino a
fasis está puesto más bien en que el obje- perseguir fines individuales. Siguiendo a
tivo y sentido de una acción no depende Estrada (2007:153), es posible decir que
solamente de quien la emprende y éste toda acción que esté orientada por la idea
no es quien determina la lectura final que de vida en común es política, al recrear y

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reproducir la comunidad de la que es par- es posible decir que ciertamente la políti-
te. No es su carácter estratégico lo que le ca contiene en su seno un conflicto per-
quita su carácter político, sino la ausencia manente por lo que se considera justo y
de interlocutores capaces de reconocer al deseable, pero su objetivo fundamental
sujeto. es la producción y reproducción de una
sociedad por sí misma. En ese sentido,
La segunda gran crítica que resulta rele-
Arendt intenta discutir con aquellos en-
vante para este artículo es la que apunta a
foques que definen la política sólo como
la fragilidad de la política en el marco del
pensamiento de Arendt, transversal a casi conflicto, aludiendo que esto conlleva el
todos sus críticos (Habermas, 1977:22). riesgo de oscurecer esta dimensión es-
El concepto de acción política de Arendt tructurante de ésta: de cara a sus críti-
intenta discutir con la idea de “animal cos dirá que es a partir de la concepción
político”, mostrando que lo político no es de la política como puro conflicto que es
una condición dada del hombre en tan- posible pensar el fin de la política ¿Qué
to ser social sino que requiere un mundo pasa en aquellas sociedades en las que
común y acción, sujetos que recreen una los principales conflictos estén resueltos?
comunidad de manera permanente, por ¿Adviene la muerte de la política? Para
lo que es posible pensar que la política la autora, la respuesta es clara: mientras
puede ser destruida. Para los críticos de haya mundo humano, la política puede y
Arendt, ésta es una de las consecuencias debe seguir existiendo.
más graves de su concepción de la polí- Finalmente, la tercera crítica importante
tica pues excluye toda una serie de fenó- para este trabajo es la que se centra en
menos relacionados con luchas de poder la ausencia de las relaciones económicas
y deja fuera la resolución de conflictos y de las posiciones desiguales, quizás
en contextos convulsionados. En estos la más atingente para este trabajo. Esta
casos, dada la ausencia de condiciones puede ser ejemplificada en el trabajo de
para el surgimiento de la acción, la polí- Habermas (1977:19), quien critica la se-
tica enmudecería y no quedaría más que paración del campo económico del po-
la violencia pura, la fuerza o en enfrenta- lítico que hace la autora, a partir de su
miento. distinción entre labor, trabajo y acción.
Respecto a esto, la autora desarrolló ex- Desde su punto de vista, esta distinción
tensamente una respuesta en “Los Orí- deja fuera de la acción política todo el
genes del Totalitarismo” (1951). En este entramado económico de una sociedad,
trabajo, señala que su enfoque no nece- razón por que no es capaz de percibir la
sariamente pretende desplazar la centrali- violencia estructural que muchas veces
dad del conflicto inherente a todo proceso interviene en la configuración de un es-
político, sino que busca rescatar su rol en pacio político (1977:22). Así, la política
la construcción de mundo común y en la empieza donde acaba el reino de la ne-
creación de un orden humano. En ese cesidad y la “vida misma” –como señala
sentido, la autora vincula el proceso políti- Agamben (1995:209)– no tiene espacio
co al fenómeno de vivir “juntos”, marcado en ella, más que como condición previa
por distintas acciones que se enfrentan en a la acción. Una de las consecuencias de
el marco de la pregunta por el orden de- esto sería la imposibilidad de la teoría de
seado. Siguiendo a Lechner (1981:162), Arendt de ver las posiciones diferencia-

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das a partir de las cuales los sujetos se necesario aclarar cuál es la relación con-
insertan en la esfera de lo político y que cebida entre el ejercicio de la política y
determinan que éstos “aparezcan” en el la posición/características que tienen los
espacio público desde posiciones no sólo individuos en el mundo de lo privado, en
plurales, sino también jerarquizadas y segundo lugar, es preciso determinar qué
desiguales. Los sujetos en el campo po- mecanismos en la construcción de esta
lítico no sólo son juzgados a partir de sus igualdad serían válidos en el marco del
“hechos y palabras” en este espacio, sino pensamiento arendtiano.
que estas acciones y palabras no tienen
Respecto al primer tema, lo que se des-
el mismo impacto o recepción en los otros
prende del pensamiento de la autora es
en función de elementos no directamente
que estas posiciones/ características que
relacionados con esta esfera: una parte
pertenecen a lo privado no mantienen una
importante del contenido y resolución de
mayor relación con una de las caracterís-
un conflicto político se encuentra cruza-
ticas más relevantes para la surgimiento y
da por las posiciones diferenciadas que
contenido de la acción: la capacidad de
los individuos tienen mucho antes de
juicio del sujeto, que para la autora implica
devenir sujetos. En ese marco, cualquier
la posibilidad de realizar distinciones mo-
intento de aplicar algunos de los concep-
rales y actuar de acuerdo a ellas. La capa-
tos de Arendt sobre la política tiene que
cidad de juicio sólo puede desarrollarse a
enfrentarse a la pregunta sobre quiénes
partir de una constante acción en el mun-
son legítimos de actuar o “aparecer” en
do público, estando “entre” otros en el
el espacio público, mediante qué actos y
mundo en común, razón por la que para
qué palabras construyen y disputan esa
Arendt ésta es “la más política de todas
legitimidad, considerando que para la au-
las facultades” (1971:8). Tal como señala
tora el sujeto no puede existir sino existe
Benhabib (1988:31), si bien el trabajo de
el reconocimiento de los otros presentes
Arendt sobre el tema dejó importantes va-
en este espacio.
cíos teóricos y resulta a veces confuso en
La autora no desarrolló una resolución a relación a su distinción entre juicio y polí-
este problema. Sin embargo, es posible tica, otorga un punto de inicio interesante
proponer algunas vías a partir de las cuá- para trabajar sobre esta relación, subra-
les abrir la posibilidad de pensar el aporte yando que toda capacidad de juicio está
de Arendt al análisis de sociedades des- fundada en la presencia de otros. Esto po-
iguales, a partir de sus ideas sobre la ac- dría dar a pensar que para Arendt el plano
ción. Para la autora, para que ésta exista de las relaciones económicas y relaciones
es necesario que el sujeto se encuentre de dominación –ubicadas en lo privado–
“entre” otros en condiciones de igualdad, no tienen un rol significativo en la confi-
de manera tal que sea juzgado sólo por guración y sentido de la acción política,
sus “hechos y palabras” en este espacio, así como tampoco en devenir del sujeto.
sin tomar en consideración otras carac- Sin embargo, la imposición del horizonte
terísticas individuales previas o del ámbi- normativo de la igualdad en el espacio
to privado. Esta solución teórica plantea público parece decir lo contrario. Siguien-
serios vacíos que deben ser resueltos si do a Knauer (1980:731), para Arendt la
es que se busca replantear en el marco opresión del ser humano atenta contra la
de una investigación: en primer lugar, es comunidad política y contra las posibilida-

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des de la acción, razón por que si bien no lo político es la clausura, que significa
se considera la generación de un orden la creación de un espacio político en el
justo el objetivo de un proceso político, la cual sólo actúan quiénes cumplen cier-
existencia de éste es un requisito básico tos requisitos básicos, con el fin de que
para que una comunidad política exista y la “aparición” ante otros sea realizada en
se mantenga. condiciones de igualdad. Este mecanismo
Aunque Arendt no específica en térmi- tiene dos obstáculos desde la teoría de
nos claros a qué se refiere en términos Arendt. El primer obstáculo es que para
estrictos con igualdad, su énfasis en la la autora el sujeto sólo se revela a través
existencia de pluralidad en el espacio de de la acción y requiere del reconocimien-
la acción implica que no se refiere a las to de otros, quienes sólo lo pueden hacer
características personales de cada indivi- a través de sus “hechos y palabras”. Al
duo, sino a lo que ella denomina igualdad restringir el acceso a quienes cumplen
“de condiciones para actuar” y para “ser con determinados requisitos, el recono-
visto y oído por otros”. El imperativo de cimiento de los otros hacia un sujeto de-
pluralidad de Arendt implica inclusión de terminado es dependiente condiciones
diferencias, pero ¿qué diferencias son vá- anteriores a su “aparición”, por ejemplo,
lidas para que se cumpla su imperativo ser propietario, ser hombre, ser blanco y
de igualdad? ¿Es la diferencia de raza una ser mayor de 21 años. En ese sentido, el
fuente de pluralidad o un golpe contra sujeto, su reconocimiento y legitimidad
este imperativo de igualdad y, por ello, un no se construye a partir de la acción en
problema para que se produzca la acción? el espacio político, sino que está dada
Todo parece apuntar a que la diferencia de antemano por características previas.
como fuente de pluralidad –aceptada en El segundo obstáculo de este mecanis-
lo político– se distancia para Arendt de mo es la imposibilidad de pensar desde
la diferencia que es fuente de opresión. este espacio clausurado el surgimiento de
Así, a pesar que la acción en lo político nuevos sujetos y la inclusión de sectores
debe estar desprendida de determinacio- tradicionalmente excluidos, puesto que
nes propias del mundo privado la autora su acción implicaría una modificación de
impone condiciones importantes: para los requisitos de entrada que sólo podría
que lo político exista, las diferencias pro- negociarse entre los miembros. Así, sería
pias del mundo privado no deben llegar a imposible entender buena parte de la di-
convertirse en posiciones desiguales que námica de lo político del siglo XX, sobre
obstaculicen el surgimiento de acción. todo si se intenta aplicar estos conceptos
al análisis de un caso empírico, por ejem-
Pero ¿cómo lograr que el imperativo de la
plo, la inclusión de la mujer al espacio
igualdad se cumpla? El trabajo de Arendt
público.
es extremadamente vago en este punto.
Sin embargo, la consideración de meca- El segundo mecanismo - que parece más
nismos a través de los cuales se puede adecuado para este trabajo y sus objetivos
lograr este horizonte normativo merece un - implicaría pensar el imperativo de igual-
análisis más profundo, dadas las posibili- dad en lo político como un horizonte en
dades que otorga para pensar lo político construcción y conflicto, en el marco de
hoy. El primer mecanismo que permitiría la acción de los individuos orientada a ser
satisfacer el imperativo de igualdad en “vistos y oídos”. Esto requiere mirar más

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hacia la relación entre política y mundo este proceso que escasamente tratado en
privado, atendiendo a que la construcción el pensamiento de Arendt. Para ello se in-
permanente del horizonte de igualdad en corporael trabajo de Judith Butler en esta
lo político tiene cabida sólo a partir de una reflexión.
permanente embestida contra aquellas
diferencias que son fuentes de desigual-
dad y opresión, estando éstas ubicadas 3. El derecho de “aparecer”.
en el mundo privado o público. Así, los Judith Butler y la conquista
actores devienen sujeto en lo político, a de la agencia
partir de acciones que desmantelan, re-
vierten o resignifican las diferencias pri-
“La libertad es una condición que depende
vadas que obstaculizan su presencia en
de la igualdad para realizarse”
el espacio público. La capacidad de ac-
tuar y la condición de sujeto político es (Judith Butler)
entonces una conquista arrancada a los Buena parte de la reflexión de Judith But-
otros en el marco de un proceso conflic- ler tiene que ver con el tema que titula
tivo, razón por la que su articulación es este apartado, enmarcado en su preocu-
singular y contingente a determinados pación por el proceso de constitución de
contextos y posibilidades. Introduciendo los sujetos y de su agencia. En el marco
estos elementos, es posible ver el trabajo de su trabajo sobre género, aunque sin
de Arendt lejos de la “nostalgia clásica” limitarse a este tema, la autora ha hecho
que se le imputa y mucho más cerca de avances que junto con lo anteriormente
una reflexión sobre el poder. expuesto son relevantes para trabajar so-
En este permanente proceso es importan- bre el tema de la agencia política en los
te para responder la pregunta sobre quié- términos que este trabajo se propone.
nes pueden y no pueden aparecer en el Butler comienza su análisis sobre la
espacio público, ejemplificado por Arendt construcción de sujetos y de su agencia
en la figura del excluido –el apátrida, el a partir de la teoría de Foucault. Toman-
esclavo y la mujer en el mundo griego– in- do como base el trabajo de este autor,
visibilizado y definido en función de aque- plantea el surgimiento del sujeto como
llos atributos propios de la naturaleza. En un proceso vinculado a la introducción
este caso la existencia de estos individuos de un espacio normado por un determi-
es privatizada, su atributo de igualdad es nado régimen de verdad, delimitado por
arrebatado y se les considera fuera de la las relaciones de poder existentes en un
comunidad política: excluidos del mundo determinado momento histórico. Com-
humano, pierden su condición de sujeto plementando esta visión del trabajo de
posible y su capacidad de acción (Quin- Foucault con elementos de la teoría laca-
tana, 2009:196). El proceso a través del niana, Butler concibe al lenguaje como el
cual estos individuos son capaces de re- mecanismo primordial de constitución del
vertir estas diferencias y conquistar un sujeto, a través del cual el ser humano es
lugar en el espacio político requiere una introducido a un determinado orden cul-
idea de agencia política que, si bien tome tural y se le otorga un lugar desde dónde
en consideración los aspectos ya expues- reconocerse y ser reconocido: se le da un
tos sea capaz de incorporar un análisis de nombre, a partir del cual se inaugura su

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condición de posibilidad. Así, para Butler clusiva del sujeto, sin considerar que éste
la introducción al mundo de lo humano –si no es no es una herramienta transparente
se piensa en términos arendtianos– está puesta en manos del individuo, sino que
marcada por la adquisición del lenguaje, se apoya en una serie de reglas y conven-
proceso a partir del cual el individuo se ciones que apelan a un horizonte común
hace parte de un mundo significativo, con de iterabilidad que no sólo generan inter-
historicidad y con un entramado de rela- pretaciones del acto que no estaban con-
ciones de poder cuyas marcas se encuen- tenidas en las intenciones del sujeto, sino
tran de manera ineludible en la estructura que a veces ejecuta actos por sí mismo
misma del lenguaje. a través de su función performativa. Así,
la capacidad de acción no está solamente
Desde ese punto de vista y siguiendo a
remitida a los sujetos, sino que el lenguaje
Foucault, Butler señala que este proceso
mismo posee una agencia que lo consti-
de constitución de sujeto se da en dos
tuye como un elemento intermedio entre
movimientos: en primer lugar hay un pro-
el sujeto, la acción, su resultado e inter-
ceso de sujeción al régimen de verdad, a
pretación.
las relaciones de poder que estructuran el
orden del discurso y que condicionan de La soberanía del sujeto y sus acciones no
manera importante los sujetos posibles y sólo están vinculadas a su necesidad de
pensables en ciertos universos culturales. reconocimiento y por su imbricación con
Este primer movimiento establece un vín- las relaciones de poder de una sociedad
culo constitutivo entre el sujeto y las rela- determinada, sino también por la agen-
ciones de poder de la sociedad en la que cia del lenguaje. Butler tiene cuidado en
se inserta. En segundo lugar y rescatan- advertir, sin embargo, que la pérdida de
do la idea de productividad del poder en soberanía del sujeto si bien implica la dis-
Foucault, Butler señala que este proceso minución de la capacidad de agencia y
de sujeción es precisamente el que inau- de voluntad, es precisamente que la hace
gura la posibilidad existencia y acción del posible:
sujeto, aunque la autora llama la atención “Yo propongo que la agencia comienza allí
a que su idea de agencia está muy lejos donde la soberanía declina. Aquel que ac-
de la idea de agencia soberana, propia del túa (que no es lo mismo que el sujeto sobe-
concepto moderno de sujeto. rano) actúa precisamente en la medida que
En este punto se encuentra la especi- él o ella es constituido en tanto que actor y,
ficidad del trabajo de Butler. Si bien en por lo tanto, opera desde el principio den-
Arendt tampoco puede hablarse de una tro de un campo lingüístico de restricciones
agencia soberana en estricto rigor, ya que que son al mismo posibilidades” (Butler,
la acción, su resultado y la identidad de 1997: 37).
un sujeto dependen del reconocimiento En desde este lugar que Butler se incor-
e interpretación de otros, para Butler la pora a la reflexión sobre lo político. Resca-
agencia del sujeto está mediada por otra tando el trabajo de Arendt sobre el espacio
agencia que juega un rol fundamental: la de aparición, la autora enfoca su trabajo
del lenguaje. Para la autora, el problema reciente a responder la pregunta sobre
de las teorías modernas para pensar la quiénes son legítimos de aparecer en un
agencia reside en que todos la conciben universo cultural determinado, cómo está
como una característica o capacidad ex- construida esta legitimidad y cuáles son

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las posibilidades de aparición de nuevos corazón mismo del ejercicio de la política
sujetos, en el marco de un campo lingüís- y es aquello que la moviliza, transforma y
tico marcado por relaciones de poder y produce sociedades con configuraciones
dominación que limitan las posibilidades específicas. Sin embargo, para que la con-
de ciertos sujetos de ser “vistos y oídos” quista de la agencia exista, es preciso que
como iguales en esta esfera (Butler, 2010; exista la vida y el cuerpo que la sostiene,
2011). que tenga condiciones para desarrollarse,
Con este fin, Butler utiliza la noción de aparecer y transformar los marcos que le
“marcos” para aludir a estas estructuras hacen una vida “indigna de luto”. En ese
simbólicas que operan en lo político, que sentido, al igual que Arendt, para Butler
no sólo delimitan la forma en que los ac- el problema de condiciones materiales no
tores perciben un problema, relevando es el centro de lo político, pero es condi-
ciertos aspectos y oscureciendo otros, ción necesaria para que este se produzca
sino que también generan ontologías del y para que exista una disputa que amplíe
sujeto específicas y contingentes a cada los horizontes del principio de igualdad en
momento histórico (Butler, 2010:17). La una sociedad. Para que exista acción en
autora muestra como estos marcos deter- este plano y por ende comunidad política,
minan que haya “sujetos” que desapare- se deben generar condiciones para que
cen del campo de lo pensable, delimitan- este ejercicio se produzca, como impera-
do tanto el contenido como la dirección de tivo ético fundamental de toda sociedad.
la acción en el campo político. Dentro de “Nuestras obligaciones son tales, precisa-
esos marcos y a pesar de que la existen- mente, para con las condiciones que hacen
cia del cuerpo físico pone a los seres hu- posible la vida, no para con “la vida en sí”;
manos en condiciones de vulnerabilidad mejor dicho, nuestras obligaciones surgen
similares, se establece una distribución de la idea que no puede haber una vida sos-
desigual de la vulnerabilidad que decide tenida sin esas condiciones sostenedoras y
quiénes serán considerados como iguales de que esas condiciones son, a la vez, una
y quiénes serán considerados como ex- responsabilidad política nuestra” (Butler,
cluidos de la esfera de aparición (Butler, 2010:43).
2011: 34). Los excluidos - en este punto Sin embargo, resulta válido preguntar-
Butler coincide con Arendt - son definidos se entonces cuáles son las posibilidades
desde ese momento por atributos fuera de que estos individuos sean capaces de
de este espacio y su capacidad de agen- revertir esta condición de exclusión o de
cia les es negada: se convierten en cifras, que surjan nuevos sujetos que amplíen
cuerpos, “sacrificios necesarios” u obje- este horizonte de igualdad en el marco
to de la acción de otros. Al negárseles su de la teoría de Butler, considerando que
condición de igualdad, estos marcos es- los sujetos se encuentran ligados a la
tructuran el grado de horror, indiferencia estructura de poder en tanto ésta es su
o la empatía que nos produce la situación condición de posibilidad. En ese sentido,
de estos individuos. la teoría de Butler podría enfrentar críti-
Es desde ahí desde donde la autora sitúa cas similares a las que se le han hecho
el problema de la relación entre igualdad a la teoría de Foucault: ¿Cómo concebir
y política. La disputa por el derecho a apa- lo nuevo? ¿Cómo concebir la resistencia
recer –negado a ciertos sujetos– está en el al poder? A diferencia de éste, Butler res-

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ponde a esta pregunta a partir de dos ele- político y más aún, que pueda subvertir
mentos: el primero de ellos es el rol que voluntariamente el entramado de signifi-
tiene en su teoría la agencia del lenguaje caciones de una sociedad, aún cuando
y el segundo refiere al rol del cuerpo del deja espacio para que esto se produzca.
hablante.
En segundo lugar, la incorporar el cuer-
Con respecto al primer punto, para Butler po del hablante como soporte material y
la posibilidad de concebir nuevos sujetos significativo en el acto habla la teoría de
radica justamente en las posibilidades del Butler permite también concebir un es-
campo lingüístico, en donde la agencia pacio para el surgimiento de la agencia
del sujeto es capaz de modificar ciertos política de los nuevos sujetos, pues seña-
elementos que delimitan su condición de la que éste no puede ser reducido sola-
posibilidad. Si bien el lenguaje se apoya mente a su existencia lingüística. En este
en una serie de restricciones y conven- punto, Butler levanta también una crítica
ciones, parte sustantiva de la agencia de a Arendt, para quien la existencia del su-
los sujetos se da en la disputa por deter- jeto en el espacio público es narrativa e
minados significantes, la modificación de incorpórea, mostrando que el soporte cor-
su significado y la inauguración de nue- poral del sujeto tiene un rol fundamental
vas posibilidades dentro de este campo en su constitución y en su capacidad de
de restricciones. En ese marco, dado que agencia: si bien la relación del sujeto con
la teoría de Butler no concibe al lenguaje el cuerpo es algo que está mediado por
como un sistema cerrado como condición un determinado orden de discurso, éste
para la construcción del significado, las posee también un registro que está en el
posibilidades del sujeto radican en la rup- orden de lo indecible, que queda fuera de
tura e introducción de nuevos elementos, los márgenes del lenguaje. Así, si bien el
que pueden modificar de manera funda- lenguaje puede amenazar la existencia
mental el universo de lo pensable, lo deci- del sujeto, en términos de dejarle sin “lu-
ble y lo posible. gar” en lo decible o en lo pensable, exis-
te de todos modos una corporalidad que
Pensar lo político para Butler es pensar en
subsiste a esta amenaza, que permane-
un espacio permanentemente tensionado
ce y que muchas veces, puede empujar
por conformación y transformación de
cambios significativos en el campo lin-
significantes, proceso asociado a las po-
güístico de una sociedad histórica. O de
sibilidades de constitución de nuevos su-
manera inversa, el exterminio físico de un
jetos políticos que demandan igualdad de
sujeto puede no significar su inexistencia
ser “reconocidos”. Sin embargo, concebir
en el campo lingüístico, pero la ausencia
la agencia del sujeto como mediada por
del soporte corporal del sujeto hablante
la agencia del lenguaje implica también
modifica de manera evidente sus posibi-
comprender que este proceso de ruptura
lidades como sujeto.
es dificultoso, dado el carácter de con-
vención del sistema de reglas lingüísticas Esta relación entre corporalidad, lenguaje
y su relación estrecha con la estructura y sujeto permite pensar de manera distin-
de poder de una sociedad. Así, al igual ta la agencia en lo político, sobre todo si
que Arendt, Butler muestra la dificultad se considera este espacio como “espacio
de que un sujeto pueda predecir todas las de aparición”. Para Butler, la introducción
consecuencias de sus actos en el campo de este elemento corporal resulta funda-

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mental para comprender la irrupción de En primer lugar, cabe destacar que am-
sujetos en el espacio público en términos bas autoras ponen énfasis en la agencia
arendtianos: la aparición de los cuerpos política como eje constitutivo de los suje-
de los excluidos del “espacio de apari- tos en el campo. No es sino a partir de la
ción” confronta y fuerza a una reestruc- acción política que los sujetos se configu-
turación del espacio lingüístico, otorga ran como tales, acción que sólo puede ser
posibilidades de constitución a sujetos llevada a cabo en presencia y bajo la mi-
políticos que están articulados desde los rada de los otros. La acción política, des-
márgenes de lo pensable, dentro de un de esta mirada, es imprevisible en tanto
orden del discurso delimitado por las rela- sus efectos, consecuencias y significado
ciones de poder. Así también, la teoría de no se encuentran contenidos en las inten-
Butler otorga un lugar productivo desde ciones del sujeto que actúa. Todo análisis
donde pensar en qué manera influyen en que busque dar cuenta de la acción polí-
la política aquellos elementos que están tica debe entonces tener en cuenta el en-
relacionados con la corporalidad, su su- tramado de significados y efectos que una
pervivencia o su exterminio: elementos acción tiene en un determinado momento
como el miedo al dolor o el miedo a per- histórico, que escapan por mucho a las
der la vida son elementos que son proce- intenciones de quién la inicia.
sados desde un registro que, si bien se En segundo lugar, es importante señalar
articula con el mundo de lo simbólico, no que esta visión de la política centrada en
se encuentra completamente contenido la agencia implica una interpretación de
en él. Pensar la acción política así permite los sujetos políticos como contingentes,
que contemplar que, en muchos casos, establecidos a partir de una acción de
la posibilidad de la muerte es “real” en el consecuencias imprevisibles, razón por la
sentido lacaniano del término y la reac- que no existe una “sustancia” o “esencia”
ción ante ese peligro si bien se encuentra detrás de éstos: dependerá de las carac-
mediado por el lenguaje, tiene también su terísticas, sentido y efectos que la acción
base en un soporte corporal que lo supe- que ha emprendido tiene sobre el cam-
ra. po político. Así, el análisis político de un
sujeto político o una acción debería con-
4. Conclusiones siderar a todos los actores del campo en
una contingencia o coyuntura a analizar,
así como las transformaciones del sujeto
Aunque con un alto nivel de abstracción,
mismo a partir de acciones sucesivas. En
es importante destacar que el enfoque de-
este análisis resulta clave la incorporación
sarrollado en este trabajo intenta delimitar
de lo que en términos de Butler son los
categorías para en análisis de procesos
“marcos” a partir de los cuales se cons-
políticos, razón por la cual se ha intentado
truye una acción y un sujeto como legíti-
una exposición sintética del pensamien-
mo, válido o imaginable y cómo éste mar-
to de ambas autoras, ambos sumamen-
co también es transformado a partir de la
te extensos. Dentro de la obra de ambas
acción de los distintos sujetos.
existen coincidencias importantes que me
gustaría rescatar a la hora de las conclu- En tercer lugar, un elemento compartido
siones, por considerarles una vía fructífe- por las dos autoras es el establecimien-
ra para el análisis político hoy. to de un imperativo ético de igualdad en

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la esfera de lo político. Tanto para Arendt de lo político, sino que ésta debe consti-
como para Butler, la igualdad en el campo tuir un eje a partir del cual situar la acción
de lo político no constituye sólo un hori- de los sujetos en la construcción de este
zonte deseable, sino que constituye un horizonte ético. Para ambas autoras esto
elemento básico que debe estructurar las es fundamental, no como eje definitorio
relaciones. Esto no quiere decir, como ya de lo político, sino como la condición bá-
se he señalado anteriormente, que toda sica que asegura la producción y repro-
acción realizada en condiciones de des- ducción de toda comunidad política.
igualdad no sea política: toda acción es
El derecho de una sociedad de decidir so-
política si se orienta a influir en el mun-
bre ella misma se inaugura y recrea desde
do común. Si ésta se da en un contexto
esta mirada, en la constante embestida
de desigualdad, significa que los sujetos contra estas posiciones jerarquizadas que
intentan desmantelar aquellas diferen- obstaculizan el ejercicio de la política por
cias que les impiden su “aparición” en el parte de sus miembros. En ese contexto,
espacio político a través de acciones que un análisis de la política de las sociedades
obligan a la reorganización del campo. desiguales debe contemplar por un lado
Son acciones que revelan un nuevo su- la visibilización de estos movimientos de
jeto que está conquistando su derecho a ampliación del principio de igualdad a tra-
ser “visto y oído”, poniendo en cuestión el vés de la agencia de los sujetos. Por otro
“marco de interpretación” a partir del cual lado, debe orientarse a entregar herra-
se le ha sido arrebatada su capacidad de mientas para la comprensión y modifica-
agencia. En ese sentido, pensando con y ción de los mecanismos que subyacen en
contra Arendt, es posible decir que buena las limitaciones del principio de igualdad y
parte de la historia política del siglo XX es en la exclusión sistemática de ciertos su-
la historia de actores desmantelando las jetos, entendiendo que su mantención ge-
diferencias privadas que los excluían del nera dinámicas de desintegración social
espacio público, imponiendo una reor- que van en contra de la construcción de
ganización en el campo e instalando un cualquier comunidad política.
nuevo y frágil horizonte de igualdad.
Finalmente y en consecuencia con lo an-
terior, no resulta posible pensar un estu- Bibliografía
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