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Mantra y

meditación para sanar mi linaje femenino

Mantra y meditación para sanar mi linaje


femenino
Parte del paquete kármico de ser mujer es sanar a la madre y a la abuela.
Es la manera como podremos expresar nuestro ser femenino
creativamente y para sanar a la Tierra.

Sanar todo aquello en lo que juzgas o no estás de acuerdo con tu madre o


tu abuela. Hay que ser claras en que no necesariamente te tienes que llevar
mal con ellas para sanar determinados aspectos.

Pensemos en algo: la evolución humana va moviéndose rápidamente, la


comunicación nos abre nuevos caminos y va tumbando paradigmas.
Imagina hace cuánto tiempo que nació tu abuela y hace cuánto naciste tú.
La verdad es que no es tanto de diferencia cuando tomas de parámetro la
evolución mental que la humanidad experimenta todos los días. Sin
embargo, el mundo que vivió tu abuela y el mundo que vives tú parecieran
separados por galaxias.

Así de fácil, algunas de nuestras abuelas no tuvieron un televisor en casa o


sería un lujo, hoy en día, relativamente pocos años después, no solo todo
el mundo tiene un televisor, sino que el internet vino a cambiarlo todo. Eso
lo podemos traspolar a tantas situaciones que nos daremos cuenta que
vivimos en mundos completamente diferentes.

Otra cosa que hay que tener en cuenta es que la educación, la cultura etc…
hace que vayamos pasando paradigmas o ideas establecidas a siguientes
generaciones que por naturaleza van a querer romper con ello.

Entonces, podemos entender que nuestras madres y abuelas hicieron lo que


pudieron, con mucho menos información de la que hoy tenemos, ellas
hicieron lo que estaba a su alcance, no solo material, sino emocionalmente.

Ahora, sí es verdad que algunas cosas nos pueden enojar o marcar de por
vida: el abandono, la falta de tiempo, la falta de amor expresado, el
compensar con dinero los momentos, abuso físico o verbal etc, pero esas
cosas son exactamente las que, si no sanamos, se encargan de hacer que,
paradójicamente, cometamos errores muy parecidos en nuestra propia
vida de los que cometieron nuestras madres y abuelas

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