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15 de diciembre de 2019

Carta abierta a la Comunidad Combarbalina

Estimadas y estimados,
Me presento, me llamo Diland Castro, soy combarbalino, estudié en la escuela “América”
y en el liceo “Samuel Román Rojas”. Actualmente, resido en la ciudad de Santiago por motivos
de estudio. Soy estudiante de Ingeniería Civil Eléctrica de la Universidad de Chile (6to año) y
el próximo año ingresaré al programa de Magíster en Ciencias de la Ingeniería Eléctrica en la
misma casa de estudios.
Como debe ser de conocimiento de la mayoría, en Combarbalá está aprobada la
construcción de una central a diésel, que lleva por nombre “central de respaldo Combarbalá”,
en este contexto es que, me dirijo a ustedes, para expresar mi profundo desagrado y
preocupación por los dichos del señor Miguel Viera en la radio, pues, no sólo falta a la verdad
(tema que abordaré más adelante), sino que también llama lisa y llanamente a votar por la
opción no, de manera irresponsable y condenable.
Ya sea por conciencia o desconocimiento, el señor Viera miente totalmente al decir que
“de termo no tiene absolutamente nada, hay una equivocación del porte de un buque”. Quiero
explicarle que es todo lo contrario, de termo lo tiene absolutamente todo.
De acuerdo con la Comisión Nacional de Energía y Generadoras Chile (pueden buscarlo
en las referencias [1] y [2]) las centrales térmicas se definen como sigue: “En las centrales
térmicas convencionales (o termoeléctricas convencionales) se produce electricidad a partir
de combustibles fósiles como carbón, diésel o gas natural, mediante un ciclo termodinámico”.
Evidentemente una central a diésel es propiamente una termoeléctrica.
Por otro lado, una central de respaldo no es más que una central de generación de
energía que se caracteriza por una rápida actuación, lo cual no quita que sea también una
central termoeléctrica. Es más, las centrales de respaldo más comunes son las centrales
termoeléctricas a diésel.
Me parece inaceptable que el locutor al finalizar la intervención diga que está por el
desarrollo y sustentabilidad en la comuna, pues hace todo lo contrario con su actuar.
Espero que no se muy tarde, llamo a la información y a no decaer. Que nos opongamos
a todo, si es que ese “todo” está lleno de letras chicas que perjudican a futuro la vida de las
combarbalinas/os.
Se despide un combarbalino, que quiere sus cielos limpios, sus vecinos/as felices y poder
seguir disfrutando de mi Tierra.
¡Aguante Combarbalá, mi Tierra Querida!
Atte. Diland Castro Castro
“Periodistas de television
salven la vida de la sociedad
Extremistas de la sociedad
dejen tranquila a la humanidad”

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