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Huella de CO2 para servicios públicos, productos quimicos y catalizadores

El consumo anual y las cifras de producción de servicios públicos, productos químicos y


catalizadores se estiman para determinar los costos operativos en la sección anterior.
Multiplicando las cifras de consumo y producción con su correspondiente factor de emisión
equivalente de CO2, se puede estimar el equivalente anual de CO2.Para algunos productos
químicos y catalizadores, no se encontró ningún factor en la literatura. Para esos productos
químicos y catalizadores, se toma un factor de un componente comparable. En la figura 9 la
emisión anual equivalente de CO2 para los servicios públicos, químicos y catalizadores son
dados por la configuración de diferentes SREs. En el apéndice D los factores de emisión de
CO2 asumidos son dados como referencia. De la Figura 9, la configuración catalítica de TGTU
tiene el mejor desempeño con respecto a la huella de CO2 en comparación con las opciones
de aminas a base de TGTU. Con mayores eficiencias de recuperación de azufre, las
emisiones de CO2 aumentan exponencialmente. También está claro que una pequeña
reducción en las emisiones de SO2 causará un aumento de orden de magnitud en las
emisiones de CO2.

CONSIDERACIONES
Los resultados y la discusión presentados aquí son aplicables solo para este caso específico y
los supuestos utilizados para evaluar las diferentes configuraciones en este artículo. Si se
requiere un SRE mínimo de 99.5%, es muy probable que los procesos de conversión catalítica
más simples superen a otras tecnologías con respecto al costo de inversión, costo de
operación, VPN y emisiones equivalentes de CO2. Sin embargo, si LP vapor está disponible
gratuitamente en el sitio, sin un costo unitario apreciable, el proceso catalítico de TGTU podría
generar costos operativos y emisiones de CO2 similar a las opciones de TGTU a base de
amina. En tal caso, la eficiencia energética general de la planta debe optimizarse, lo que da
como resultado una aplicación más eficiente del exceso de vapor de LP. Esto a su vez resalta
la necesidad de un estudio de viabilidad inicial de las opciones tecnológicas antes de definir y
ajustar la línea de procesos para el diseño.
Aunque para el 99.5% SRE las emisiones catalíticas de TGTU SO2 son más altas a 3300 t / a,
en todos los demás criterios de evaluación, esta opción supera a las otras configuraciones con
SRE más altas. Vale la pena señalar que la mejora del rendimiento es relativamente pequeña
cuando se aumenta de 99.9% a 99.98%, reduciendo las emisiones de SO2 en solo 400 t / a.
Sin embargo, hay costos significativos asociado con esta mejora en el rendimiento cuando
considera los aumentos en el costo, los requerimientos de servicios públicos y las emisiones
netas equivalentes de CO2. Cuando los países comienzan a implementar el Acuerdo de París
sobre el cambio climático o siguen otros mecanismos de fijación de precios del carbono, la
industria comenzará a ver cambios en la viabilidad económica de la planta de gas. Para
mantener el aumento de la temperatura global dentro de los 2 ° C, las simulaciones muestran
que los costos de las emisiones de CO2 deberían aumentar a € 100 / t. En este escenario, uno
puede imaginar que los precios de los servicios públicos para el procesamiento de gas
aumentarán considerablemente. En consecuencia, esto podría tener un grave impacto en la
economía de la planta de gas. Es posible que minimizar las emisiones de CO2 se convierta en
un parámetro clave en la selección de tecnología de recuperación de azufre en el futuro.
Alternativamente, Las emisiones de SO2 podrían negociarse con la autoridad ambiental local al
tomar en consideración las emisiones de CO2 correspondientes.

¿Valor agregado al reducir emisiones de SO2?

La Tabla 3 proporciona una visión general de la actividad y las emisiones de SO2 a nivel
mundial. Las emisiones de SO2 afectan el medio ambiente regionalmente. El SO2 se
convierte en la atmósfera a sulfato que atrae agua y forma aerosoles que se establecen dentro
de un par de semanas. A altas concentraciones esto causa smog y puede provocar la
acidificación del suelo y los sistemas acuáticos. Por lo tanto, las emisiones de SO2 necesitan
ser evaluado por caso y por ubicación porque otras fuentes de emisión también deben ser
consideradas. En respecto eso, las regulaciones para las emisiones de SO2 en Europa y
Canadá pueden ser consideradas una base muy válida para más discusión. Europa aplica las
pautas publicadas en el BREF (best available technology reference documents), que especifica
un SRE mínimo de 99.5%, pero también permite usar un "concepto de burbuja" para un sitio.
En ese caso, un sitio obtiene un límite máximo de emisión de SO2 asignado y el sitio puede
decidir en gran medida cómo mantenerse dentro de este límite. De esta manera, las
concentraciones máximas de SO2 a nivel del suelo se mantienen por debajo de los márgenes
seguros. El área central industrial, en el centro de Alberta, Canadá, está considerando utilizar
objetivos de emisión basados en la cantidad total de capacidad de SRU en un área geográfica
específica, independientemente de las capacidades de SRU de las plantas individuales. Con
este concepto concentraciones seguras a nivel del suelo de SO2 también se cumplirá,
minimizando la intensidad regional de las emisiones. De la tabla 3, se puede concluir que, en la
mayoría de las situaciones, la contribución de las SRU a las emisiones regionales totales de
SO2 es relativamente pequeña en comparación con las emisiones mundiales en tiempos
pasados. La contribución de todas las SRU a nivel mundial se estima alrededor del 0.3% de las
emisiones globales de SO2. Sin embargo, el SRE más adecuado para mantener
concentraciones seguras de SO2 a nivel del suelo podría evaluarse por sitio y región utilizando
un enfoque como el ejemplo de Alberta y Europa. Se ha demostrado que requerir una SRE del
99.98% no aporta una mejora apreciable del rendimiento con respecto a las emisiones de SO2
en comparación con el 99.9%, pero sí viene a expensas de costos operativos y de inversión
adicionales. La idoneidad del proceso catalítico de TGTU SRE al 99.5% podría depender de los
niveles regionales de emisiones de SO2 preexistentes. Puede que no tenga sentido en un área
altamente industrializada con muchos otros emisores locales. Pero en un área más remota,
esta tecnología podría conducir a concentraciones aceptables de SO2 a nivel del suelo, al
tiempo que ofrece las ventajas de minimizar las emisiones de CO2 y un buen rendimiento
económico. El debate político global se centra actualmente en prevenir el calentamiento global
limitando las emisiones de CO2. Se muestra que SO2 tiene un enfriamiento efecto ya que
forma aerosoles que reflejan la luz solar. Si la contribución de SO2 de una SRU a nivel del
suelo es pequeña en comparación con otras fuentes de emisión y por debajo de un valor
aceptable con respecto a la salud humana, el suelo y la vida acuática, no es una decisión
lógica reducir las emisiones de SO2 de un SRU además a costa de un aumento exponencial en
las emisiones de CO2. El proceso de TGTU catalítico SRE del 99.5% se está optimizando aún
más, con el objetivo final de lograr un SRE del 99.8% utilizando tecnologías fáciles de
implementar y una selección inteligente de los mejores parámetros operativos. Como resultado,
la tecnología de conversión catalítica tiene el potencial de combinar atractivo desempeño
económico con emisiones aceptables de SO2 a un mínimo de emisiones equivalentes de CO2.

CONCLUSIONES

Al decidir la mejor configuración posible de AGRU/SRU/TGTU, se recomienda


encarecidamente realizar un estudio por una parte que pueda ofrecer muchas soluciones
diferentes para comparar alternativas tecnológicas. Cifras importantes del proyecto como
costos de inversión, operación costos, valor actual neto y área de parcela debe ser considerado
y evaluado. Estos factores varían según ubicación geográfica y son sensibles a los precios de
los servicios públicos y la composición del gas de alimentación.
El método de estudio presentado en este artículo también proporciona datos adecuados para
las discusiones con las autoridades reguladoras ambientales locales.

Según la experiencia de Jacobs Comprimo, cada situación puede ser diferente y debe
evaluarse de manera oportuna y personalizada importancia, preferiblemente como un estudio
en el fase de prefactibilidad de un proyecto. Si un SRE de 99.5% fuera aceptable, el proceso de
conversión catalítica tiene el mejor puntaje en cada categoría evaluada. Jacob Comprimo está
trabajando para mejorar aún más el SRE de sus procesos de conversión catalítica y se llevó a
cabo una prueba reciente para demostrar que es posible un SRE del 99,6% de promedio.
Incluso en este alto SRE para un proceso de conversión catalítica, todavía hay espacio para
una mayor optimización de las condiciones de operación y el diseño del equipo, lo que cerrará
aún más la brecha con los procesos TGTU basados en aminas, brindando una gama más
amplia de opciones económicas de configuración de SRU a los productores de gas natural. Es
importante establecer objetivos razonables de emisión de SO2, en cooperación con las
autoridades ambientales, con un enfoque en las concentraciones de SO2 a nivel del suelo en la
región debido a la operación de la SRU en lugar de buscar el SRE máximo técnicamente
posible. Hacer cumplir objetivos de emisiones de SO2 muy bajos en un proyecto de renovación
o un proyecto de actualización de SRU puede tener un impacto muy negativo en la economía y
las emisiones de CO2 equivalentes. La economía general de la planta se vería especialmente
afectada si los costos de las emisiones de CO2 aumentaran significativamente con las futuras
regulaciones de precios del carbono.

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