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Acerca de la esterilidad

¿Qué pasa cuando no damos frutos, cuando nos quedamos estancados?

Al principio Dios dijo: "Yo soy el Dios Todopoderoso. Sé fecundo y multiplícate; Una nación y
multitud de naciones vendrán de ti, Y reyes saldrán de tus entrañas. Génesis 35:11

Esto nos enseña que al ser creados fuimos diseñados para dar vida, el plan de Dios desde un
principio es que la tierra sea llena y que de los suyos surja un linaje poderoso que gobierne la
tierra.

Lo contrario a esto es la esterilidad, es todo lo opuesto al mandato divino del Señor cuando nos
dice MULTIPLICATE, humanamente es doloroso y es un mal como lo es la muerte, sin embargo
para Dios que es Todopoderoso es posible hacer que lo estéril tenga vida.

Todo hombre y mujer de Dios tiene la oportunidad de dar vida, el plan de Dios es que nos
multipliquemos y esto significa que debemos dar frutos, dar Fruto no es una cuestión biológica
solamente, trata de estar dispuestos y preparados para ir y ganar a otros con las herramientas que
ya se nos han entregado, Él nos dio vida y nos dio de su gracia para ir y dar frutos y no quedarnos
como adornos o simplemente dar sombra. Es muy rico estar bajo un árbol que de buena sombra
pero aquel quien la sembró espera que un día pueda comer del fruto de sus manos y no tener solo
un simple arbolon que siendo esplendoroso no da ningún fruto para el comer y compartirlo con los
suyos. La esterilidad desde un principio trae dolor y tristeza, es por eso que debemos desecharla y
comenzar a tener una mentalidad de multiplicación en todas las áreas de nuestras vidas. Si
quedamos estancados sucederá como la higuera la cual Jesús maldijo por no dar fruto porque no
era su tiempo, es importante saber que nosotros hemos sido llamados a dar fruto a tiempo y fuera
de tiempo. En el caso personal creo que es tiempo de destapar nuestra vista y entender que si ha
habido esterilidad en nuestra vida a as u alrededor debemos desecharla, y si el caso es
estancamiento debemos reconocer que no lo hemos hecho todo y arrepentirnos de no ir y ganar a
otros y extender el reino de Dios, pues al Señor sea a gloria porque somos hijos pero afuera hay
muchas almas por ganar y Jesús está cerca de segunda venida, y solo aquellos que trabajen
ganando a otros recibirán como regalo la corona que el tiene preparada para cada unos de
aquellos que siendo fieles se multiplicaron. Que Dios nos de la fuerza y la voluntad en estos
tiempos y desde ya sean abiertos los ojos para aumentar la disposición y acción de
multiplicarnos.AMEN.

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