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CapiruLo 2 LA SOCIOLOGIA DEL TURISMO COMO DISCIPLINA GrecorIo MENDEZ MUELA (Universidad Politécnica de Madrid) 1. Aproximacién a la sociologia del turismo Debido a la relativa juventud del turismo como actividad socioeco- némica generalizada, y a su complejo caracter multidisciplinar (el turis- mo engloba una gran variedad de sectores econémicos y de disciplinas ‘académicas), hay una ausencia de definiciones conceptuales claras que delimiten la actividad turfstica y la distingan de otros sectores (OMT, 1997: 41). Como en muchas otras areas de la investigacion en la sociolo- gia, el estudio del turismo no esta sustentado por una extensa base teéri- cay sc hace necesario obtenerla de otras areas de las ciencias sociales, en particular de la economia, la antropologia y, preferentemente, de los es- tudios geograficos realizados en los espacios turfsticos internacionales, situacién que se dio durante los afios sesenta y setenta del pasado siglo en Jos patses en vias de desarrollo y en las zonas & islas mas exéticas y atrac- tivas del planeta. La Sociologfa del Turismo es una especialidad emergente que tiene que ver con el estudio de las relaciones, roles y motivaciones turisticas, sus instituciones y su impacto en las sociedades receptoras. Elestudio cientffi- co se origin6 en la Europa continental, que fue la primera regién en experi- mentar el turismo masivo. Bodino publicé el primer articulo cientifico so- cial sobre la materia en 1899, pero las primeras contribuciones fueron ale- manas. Los primeros escritos especfficamente sobre el turismo tienen su punto de partida con el articulo clasico de L. von Wiese (1930) siguiendo Ios trabajos de G. Simmel en su anilisis de los viajeros extranjeros. El pri- mer libro sobre turismo tratado desde el punto de vista de la Sociologia es el libro de Ogilvie (1933), seguido del trabajo de Norval (1936) sobre la in- dustria turistica. Aun asf, no se presta mucha atencién a Ja materia hasta después de la Segunda Guerra Mundial, periodo en el que el rapido creci- 44 SOCIOLOGIA DEL TURISMO. miento del turismo tiene como resultado algunos escritos criticos (Mit- ford, 1959 y Boorstin, 1964) y los primeros estudios empiricos (Nufiez, 1963 y Forster, 1964). No obsiante, el primer estudio especificamente so- cioldgico es el trabajo realizado por H. J. Knebel (1960): Sociologia del Tat- rismo: los cambios estructurales en el turismo moderno (1976), investigan- do por primera vez el turismo como funci6n de cambio social." Elestudio del turismo como algo mas que un tema «exético» surge en los afios setenta con las tipologias de Cohen (1972) y las primeras sintesis tedricas de MacCannell (1973). Desde mediados de los afios setenta el campo de la sociologia ha crecido rapidamente, publicéndose varios tra- bajos y revisiones. Desde el estricto campo sociolégico, en el tiltimo tercio del siglo xx muchos autores se han interesado por el tema: Apostolopuolos 1993, 1995a, b, 1996; Boorstin 1992; Britton, S. 1982; Cohen 1972-1974a, 1979a, b, 1984a, y 1988a, b; Dann 1977): Dann y Cohen 1991; De Kadt 1979; J. Forster, J. 1964: Graburn 1989; Karch y Dann 1981; Lanfant 1980; MacCannell 1976; Machlis y Burch 1983; P. L. Pearce, 1982a; Turner y Ash 1976; Van den Berghe 1992; Young 1973; Urry (1990). Todos ellos se han centrado en el crecimiento del turismo como un fenémeno econémico y cultural y por su profundo impacto tanto en los paises desarrollados como en vias de desarrollo. La Sociologia del Turismo a finales de los ochenta empieza a generar un interés y debate, aumentando las asociaciones profesionales y los orga- nismos que contribuyen al desarrollo de la investigacién del turismo y la cooperacién entre otras entidades. Un dato de especial importancia para Ja investigacion académica, fue la creacion en 1988 dela «Asamblea Inter- nacional para el estudio del Turismo»; igualmente, la inclusién por prime- ra vez de una seccidn sobre Sociologia del turismo, con un grupo tematico propio, en el XII Congreso The International Sociological Association, ce- jebrado en Madrid, julio de 1990 (Méndez de la Muela, 1990). No obstante, Ja ausencia de la academia como soporte de la sociologia del turismo ha sido uno de los elementos para no contar con una base teorética. Segiin Apostolopoulos (1993) y Cohen (1984a), como la mayoria de los aspectos de la vida moderna, el desarrollo y la expansién dela industria del turismo, ha supuesto «sacrificios» y «calamidades» tanto en la esfera eco- némica como sociocultural. En el ambito socioecondmico, el turismo ha 1, Es importante conocerla estructura metodolégica empleada por Knebel en sutra bajo, pues, a parte de ser uno de los primeros estudios de la Sociologia del Turismo, es, a nuestro entender, el primero que relaciona el turismo con el estudio sociolégico del Cambio Social. ¢Cémo podrian comprenderse las alteraciones y cambios de ser del turista, si éstos son siempre alteraciones y cambios de nuestra sociedad? Para responder a su hipétesis cen- tral, Knebel plantea que el estudio del movimiento de los forasteros no ha sido todavia sa- tisfecho y se encuentra sociolégicamente falto de estructuracién, resultando demasiado es- trecho para la definicion de turista. La novedad y aportacién a la Sociologia del Turismo de Knebel consiste en presentar e investigar el turismo como funcién de cambio social; intere~ sado por conocer hasta qué punto la separaci6n, captada por Ogburn (cultzral lag: retraso cultural), entre cultura material e inmaterial repercute en las instituciones turisticas (Kne- bel, 1976: 10). LA SOCIOLOGIA DEL TURISMO COMO DISCIPLINA 45 afectado sustancialmente al intercambio extranjero, a los ingresos, al em- pleo, a los precios, a la distribucién del beneficio, a la propiedad y el con- trol, al desarrollo y a los beneficios gubernamentales. En la esfera socio- cultural, el turismo ha afectado al entramado social en una estructura cada vez mas complicada, a la naturaleza de las relaciones interpersona- es, a las bases de la organizacién social, al ritmo de la vida social, a la in- migraci6n, a la divisién del trabajo, a la estratificaci6n, a la distribucién del poder, a las costumbres yal arte. De hecho, ninguna otra industria con- tempordnea ha tenido un impacto tan crucial y de tan largo alcance en tan- tas facetas de la sociedad. Por su parte, el editor de Annals of Tourism Research, J. Jafari, define el estudio del turismo como el estudio del hombre fuera de su habitat, del aparato y la estructura turistica, del mundo tanto ordinario («en casa»), como en el mundo no ordinario («turistico») y su relacién dialéctica. El tu- rismo s6lo se puede entender si se estudia de forma holistica (totalizadora) y se adopta una «plataforma basada en el conocimiento» (Jafari, 1987b: 43). Para Jafari, el impacto del turismo como disciplina dentro de las cien- cias sociales se puede clasificar en cuatro «plataformas» subdivididas en dos lineas principales: Defensa y Aviso; cada una de ellas supone un punto de vista sobre el turismo y han ido surgiendo en un proceso cronologico, pero sin remplazarse unas a otras. En los trabajos posteriores realizados sobre esta perspectiva cientifica Jafari matiza sus primeras aportaciones, definiendo lo Bueno y lo Malo del impacto del turismo en la sociedad si- guiendo el sistema de plataformas y su proyeccién cientifica sobre la base de los estudios del turismo cada vez mas precisos y cientfficos (Jafari, 1999: 5) (cuadro 2.1). Hay que resaltar, no obstante, que no todas las tendencias de los inves- tigadores del turismo en este inicio de siglo comparten estos caminos, Mas bien empiezan a aparecer criticas a los postulados estaticos y las bendicio- nes de la «academia» internacional en el crecimiento de los departamentos de turismo, especialidades y publicaciones cientificas del turismo. En esta Iinea, el profesor J. Arramberri (2001: 261), uno de los principales y més criticos investigadores del turismo en nuestro pais, pone el dedo en la aga comentando que ninguna rama del saber académico puede legitimarse por completo sobre la base de un aumento numérico del contenido de profeso- res, revistas, articulos y reuniones internacionales si se pierde el contenido cientifico y se mantienen los mitos que algunas investigaciones del turis- mo han generado a lo largo de los tiltimos afios: 2. Annals of Tourism Research, puede considerarse la fuente donde poder encontrar toda la posible informacién sobre las ciencias sociales y el turismo, recogiendo todo tipo de investigaciones, estudios y ensayos desde distintas vertientes. Respecto a la Sociologia del Turismo ha realizado dos mimeros especiales: Special Issue on Sociology of Tourism, vol, VI, tim. 1, enero/marzo, 1979 y Special Issue, Methodological Issues in Tourism Research, vol. 15, 1, 1988. Documentos que nos serviran de base principalmente como referencia del est dio de la Sociologia turistica en este capitulo. Cuapro 2.1. Posiciones de la plataforma que «preconiza» y la plataforma que «alecciona» respecto a los impactos del turismo (ejemplos) (1999) Plataforma de defensa Economta Turismo supone _ trabajo: tiempo completo estacional no cualificado, Genera intercambio exterior. Se puede construir sobre in- fraestructuras ya existentes. Se puede desarrollar con pro- ductos locales. Extiende el desarrollo. Complementa la produccién de otras actividades econé- micas. Tiene grandes efectos multi- plicadores. Sociocultural ‘Turismo amplfa la educacion. Promueve el entendimiento y Ja paz internacional. Reduce: las barreras del len- guaje, barreras sociocultu- rales, barreras raciales, ba- rreras politicas, barreras re- ligiosas, barreras de sexo. Ayuda a la conservacién del patrimonio. Promueve una visién global del mundo y de miembro de ala aldea global». Refuerza la apreciacién de la propia cultura. Economia ‘Turismo causa inflacién. Favorece la fuga de capital. Supone estacionalidad y cau- sa desempleo. Es susceptible de cambio, ru- mores, extensién de enfer- medades y fluctuacién eco- némica. Supone un desarrollo eocné- mico desnivelado. Lleva a la dependencia exte- rior. Incrementa los efectos de de- ‘mostracién. Destruye recursos y crea con- taminacion. Plataforma de «aviso» Sociocultural Turismo contribuyente a la falta de entendimiento. Conlleva xenofobia. Supone contaminacién so- cial, ‘Comercializa: la cultura, la re- ligion, el arte. Amenaza la estructura fami- liar. Contribuye a la prostitucién. Incrementa los casos de cri- men, Conduce al conflicto en la co- munidad receptora. LA SOCIOLOGIA DEL TURISMO COMO DISCIPLINA 47 — El paradigma sobre anfitriones e invitados (host-gues) en Smith, (1989). — Laactividad turistica como conducta no ordinaria (Graburn, 1989; Jafari, 1984; Smith, 1992). — La teorta del ciclo de vida de las atracciones turtsticas (Butler, 1980; Opperman, 1995). — La teoria de la autenticidad en el turismo (Broostin, 1964; Cohen, 1979a, 1979b, 1988). El propésito de este primer capitulo, por lo tanto, es ofrecer una pe- quefia reflexi6n,’ desde la éptica de la Sociologia del Turismo sobre el pa- pel que ha desempafiado la disciplina cientifica de la sociologia turfstica en el tiltimo tercio del siglo pasado, principalmente en el 4mbito interna- cional, con sus mitos y sus aportaciones sustantivas al conocimiento del turismo. Con un doble objeto: por un lado, que sirva para que los estudian- tes de turismo conozcan la evolucién y tendencias de la sociologia del tu- rismo en sus distintas etapas; y, por otro, mds especifico, para que los in- vestigadores del turismo y de la sociologia turistica en particular, puedan conocer esta disciplina a través de sus autores mas directos, con sus ten- dencias y aportaciones metodolégicas, que permita ayudarles en las inves- tigaciones sobre la necesidad de objetivar o refutar los contenidos clasicos del turismo, seg las nuevas tendencias del mercado turistico en los co- mienzos del siglo xx1. Tiempos en los que los procesos de globalizacién es- t4n incidiendo de forma muy concreta en el comportamiento social de la poblacién: de los turistas y viajeros como clientes no como invitados, en las modernas sociedades complejas y, por tanto, en el conocimiento y en- tendimiento del turismo. 2. Tendencias y etapas de la sociologia del turismo 2.1. DEL Granp TOUR AL TURISMO DE MASAS Alo largo de la historia ha habido toda una serie de movimientos de forasteros: En la antigtiedad griega se producian multiples viajes entre las diferentes Ciudades-Estado; en la Roma Clasica, en el apogeo del Imperio Romano, durante los meses estivales, se producian considerables movi- mientos de personas que desde Roma se dirigian hacia el campo y hacia Jos lugares de veranco situados a las orillas del mar. En la Edad Media, es- tos Viajes practicamente desaparecieron, y s6lo en las peregrinaciones reli- ziosas (a Santiago de Compostela, Roma, Canterbury oa Tierra Santa), si- 3, El micleo central de este articulo corresponde al segundo apartado del capitulo primero de la tesis doctoral del autor: «Evolucién del Turismo Nautico en Espafia en los Ultimos Treinta Afios: Una aproximacién a la Sociologia del Turismo», Universidad Com- plutense, en prensa, 2000, pp. 19-91. 48 SOCIOLOGIA DEL TURISMO milares al turismo religioso de hoy, se producfan un numero de viajes im- portante; los viajes educacionales de la nobleza y clase media britanica ha- cia el continente europeo que comienzan en el siglo xv1; el Grand Tour aris- tocratico de los siglos xvu y xvut dio paso a la era industrial que hizo acce- sible el viaje para la clase media; y, en nuestro pais, los Bavios de Oledje de las playas de Santander son un claro indicio del poder terapéutico del mar a finales del siglo ux. Estos y otros ejemplos en algunos casos pueden asi- mmilarse al moderno concepto de turismo, pero de cualquier modo, se pue- den considerar los precedentes del turismo moderno. No obstante, para que se pudieran dar los acontecimientos del turis- mo como lo entendemos hoy era necesario la aportacion de los cambios ‘econémicos, sociales y tecnol6gicos y su incidencia en el sector. El turismo no es un fenémeno trivial. Es el resultado visible de la cuarta gran oleada de la tecnologia, habida cuenta que todas ellas han transformado la geo- grafia social del mundo desde el siglo xix.‘ Primero, fue el ferrocarril, que abrié continentes enteros al transporte de alimentos y materiales; gracias al ferrocarril fueron posibles las grandes ciudades industriales del si glo xix, Llegaron después los barcos de vapor, que hicieron las veces de ten- dones al permitir que los imperios creciesen. organicamente, se extendie- sen por todo el planeta y que tomasen cuanto desearan de sus nuevas colo- nias. El automévil inicié la descentralizaci6n de las naciones al proporcio- nar savia nueva a las ciudades mediante el desarrollo de amplios subur- bios. Por tiltimo, el avion, al existir intimamente vinculado a una creciente opulencia, ha dado lugar al nacimiento de toda una nueva tribu: la de los turistas en masa, es decir, los barbaros de nuestra Edad del Ocio. «La Hor- da Dorada» (Turner y J. Ash, 1991: 9). Pero para la aparicion del turismo de masas, asimismo, tenfan que darse dos requisitos que no se produjeron hasta después de la Segunda Guerra Mundial: Ia revolucién en los transportes y su acceso a un gran nG- mero de personas, que acercaba enormemente en tiempo y dinero lugares previamente muy lejanos, y una extensién de cierto bienestar entre las cla- ses populares que sélo fue posible con el Estado del Bienestar. De hecho, la primera definicién académica de turismo se produce en 1942, coincidien- do con dicha guerra. Estas condiciones socioeconémicas unidas evidente- mente. los avances tecnolégicos, y no otras, son las que permiten a Turner & Ash poder hablar de los «Némadas de la Opulencia, los que proceden de las nuevas Constantinoplas —de ciudades como Nueva York, Londres, Hamburgo o Tokio—, quienes han creado un nuevo territorio, tanto social como geografico, sumamente dependiente: la Periferia del Placer» (Turner y J. Ash, 1991: 10). = 4, «Aprovechéndose de los avances de la tecnologia del transporte, “Thomas Cook & Son’ llevé a cabo toda una revolucién en el turismo ya a finales de siglo 21x. El turismo ha ‘bia dejado de ser un coto vedado de los aristécratas y los excéntricos peripatéticos: se habia convertido en una Industria», L. Turner y J. Ash (1991: 85). LA SOCIOLOGIA DEL TURISMO COMO DISCIPLINA 49 2.2, TENDENCIAS DE LA SOCIOLOGIA DEL TURISMO Como veremos a lo largo de estas paginas, a través'del estudio de las tendencias y las etapas de la sociologia del turismo en los uiltimos treinta aiios, algunos clasicos planeamientos han ido perdiendo fuerza con las nuevas investigaciones de las ciencias sociales, ante la identidad y la trans- formacién de la industria turistica, principalmente desde los afios noventa con la inclusién del turismo como elemento de consumo en la vida cotidia- na de las sociedades industrializadas. 2.2.1. Las definiciones del turismo desde distintas tendencias El turismo, el mayor movimiento pacifico de gente (Greenwood, 1972), se presenta como un fenémeno sociocultural en evolucién. Desde la Segunda Guerra Mundial, como hemos comprobado, el crecimiento de la industria del turismo y su promocién por parte de organizaciones finan- cieras internacionales como un agente de desarrollo y cambio ripido, no ha tenido precedente. Ante el fenémeno del turismo, ya falta de una defini- cion académica por parte de la sociologia, las tendencias se superponen para definir los contenidos de la nueva industria emergente. De ahi, como comenta Apostolopoulos (1996: 1-12), que varios autores planteen defini- ciones del turismo desde distintas tendencias y opciones: — QBs el turismo una cbendici6n» 0 un cinfortunio», un «engafior 0 un «regalo», una para disfrute del turista, pero como varios auto- res sefialan (Andronicou, 1979; Boissevain, 1977 y Cohen, 1983c) también ha supuesto un renacimiento de artes que estaban mori- bundos o como otros sefialan (Graburn, 1976; Cohen, 1983c) el na- cimiento de nuevas formas de arte. 2.3.3. Los «seudo-eventos» y las teortas de la Autenticidad Desde otras tendencias de las investigaciones de la Sociologia del Tu- rismo respecto al comportamiento del turista en las décadas del setenta y el ochenta, Urry (1990: 9-14) en su obra plantea a través de distintos auto- res las principales aproximaciones te6ricas al estudio del turismo que han intentado dar un sentido sociolégico: — Los andlisis de Boorstin (1964) basados en lo que él denomina los: «seudo-eventtos». El turista viaja aislado de las sociedades recepto- ras y viven una experiencia ecreada» para ellos que nada tiene que ver con la realidad. Esta serfa la caracteristica del turismo moder- no y el cambio del «viajero individual» al turismo masivo. — Varios autores posteriormente han desarrollado esta teorfa, de es- pecial importancia son los trabajos de Turner y Ash (1975) que sos- tienen la tesis segtin la cual el turista se sittia en el centro del mun- do estrictamente circunscrito. Unos padres sustitutivos (agencias de viajes, directores de hotel) liberan al turista de responsabilidad ylo protegen de la cruda realidad. El sentido de Jo sensual y lo esté- tico del turista est4 tan restringido en los puntos de destino como en sus lugares de origen. Este sentido superficial queda patente en la propia superficialidad que la poblacién local muestra al turista. No obstante, Cohen critica esta postura, argumentando que no hay un s6lo tipo de turista que se adapte a esta descripcién y desarrolla su tipologia («existencial», «experimental»). Por su parte Urry coincide con Cohen al afirmar que el desaffo mas significante a la posicién de Boorstin fueron las teorias de MacCannell (1976). MacCannell esta especialmente interesado en el caracter de las re- laciones sociales que emergen de la fascinacién que la gente tiene en la vida de los demas y sostiene que estas vidas reales se presentan al turista «teatralizadas». Asi, la «mirada» del turista implica la intrusién en la vida de otra gente lo que no es aceptado. De esta forma, la realidad de las socie- dades receptoras se va convirtiendo en algo inventado: 60 SOCIOLOGIA DEL TURISMO — Pearce y Moscardé (1985), han. desarrollado més la noci6n de au- tenticidad."” Estos autores mantienen que hay que distinguir entre Ja autenticidad de los grupos y la autenticidad de la poblacién local y entre los diversos elementos de la experiencia turisticas. — Crick! (1989) puntualiza que, en cierto sentido, todas las culturas estan «teatralizadas», de «in autenticidad», Las culturas se inven- tan, se refunden y sus elementos se reorganizan. Asi lo ateatraliza- do» del turismo no difiere de todas las culturas. — MacCannell” (1976) mantiene que hhay un proceso que convierte algo natural o cultural en un objeto sagrado del ritual turistico. Este proceso pasa por varios estados: Denominacion del lugar de in- terés turtstico; Marco y ascenso; Consagracion; Reproduccion meca- nica del objeto sagrado y Reproduccion social como nuevos lugares de interés turistico que irfan después del famoso. _— Para Turner (1973) al hablar del peregrino y de los ritos de pasaje que se dan en el transito de un estado a otro (proceso de sacraliza- Gon), hay tres diferentes estados: Separacién social y espacial del lugar de residencia y de sus vinculos sociales; «Licencia», el indi- viduo se encuentra a si mismo en una «anti-estructura», se Sus: penden sus vinculos sociales convencionales y se experimentan Fatensos lazos «comunitarios», hay una experiencia directa de lo sagrado 0 sobrenatural; y, Reintegracién en su grupo social, nor- malmente con un status més alto. Este andlisis ha sido aplicado especificamente al turista por otros autores como Cohen (19884) y J. Jafari (19862). Al tratar el tema acerca del estado de «dicencia», para Urry (1990) ha- bria que puntualizar que a MacCannell en sus teorias se Je escapa esta li- cencia permisiva en la que las obligaciones cotidianas son invertidas, in- Gluso suspendidas. Giddens (1984) cuestiona esto y apunta la idea de que la situacion que se crea no es mas que una situacién semi-rutinaria, un tipo de rutina «no rutinariay. En general, muchos autores (por ejemplo, Lett, 1983) han optado por una postura funcionalista, viendo en el turismo un elemento restructurador de la vida cotidiana, Iidico, como una via de tetomar fuerzas para la vida diaria. Otros han adoptado una postura me- nos funcionalista, e insisten en la necesidad del estudio profundo de los 10, Ver la critica de Tumer y Manning, 1988 0 la reciente publicacion de Armals of Tourism Research en espaol: InterpretaciGn del Turismo Etnico, vol. 1, nim. 1, junio 1999, Universitat de les Illes Balears, pp. 147-167. I xiste una version en castellano en la coleccién Turismo y sociedad, F. Jurdao,

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