La motosierra fantasma

Hace cuarenta años, había un señor llamado Uribe I, que caminaba por
Paisalandia tumbando árboles con su motosierra maldita, convirtiendo los bosques
en terrenos baldíos para la ganadería.
En 1983, el señor Uribe I y su hijo Santiago, viajaban en su carruaje volador
mágico, y aterrizaron en el reino de “Las Guacharacas”, donde unos ladrones
llamados “Los Elenos”, que estaban escondidos entre los árboles, intentaron robar
sus pertenencias.

El señor Uribe I peleó contra los Elenos con su motosierra maldita con gran valor y
coraje, pero una flecha envenenada hirió su corazón, dejándolo gravemente
herido. Antes de morir, el señor Uribe I pronunció una maldición, en la que su
motosierra, se convertiría en una motosierra fantasma que asustaría a todos los
viajeros que intentaran construir en sus terrenos baldíos…

Y así, comienza la historia de … “La motosierra Fantasma”

25 años después, un pequeño enano emprendedor llamado Alvarito fue electo

alcalde de Paisalandia, convirtiéndose así en el mejor alcalde duélale a quien le
duela, cuando de pronto, escuchó en su oficina a unos campesinos reclamando
algunos terrenos cercanos a “Las Guacharacas”. Ellos le contaron a Alvarito cómo
algunas de sus vacas y caballos fueron cortados en pedacitos por una motosierra
fantasma, y por eso estaban muy asustados y se querían ir a vivir a Bogotá.

Alvarito, persona serena, firme y de buenas costumbres les dijo: “Lo mejor es que
se vayan de aquí, o les van a dar por la cara maricas”. Así que la gente muy triste
dejó esos terrenos y se los vendieron a “compradores de buena fe”.

El problema con la motosierra se volvió tan incontrolable, que Alvarito no tuvo otra
solución que crear un grupo de aventureros mercenarios llamados “las convivir”,
que se enfrentarían a todos los fantasmas, brujas y peligros de la región: Los
Elenos, la motosierra fantasma y una terrible bruja llamada Marbelle que se comía
a los perros de los campesinos de la región.

Un año después, el grupo de las convivir se volvió muy prestigioso y muy

poderoso y nuestro gran líder Alvarito no pudo controlarlas más, así que buscó al
Rey de la nación, el gran “LuisCa Sarmiento I” y le pidió ayuda. El Rey LuisCa le
ayudó reuniendo un gran ejército, con ayuda de reinos cercanos, como el reino
Yanki, el reino Odebretch y otros reinos que ayudaron de buen corazón.

Así, se libró la batalla final del gremio de aventureros de “Las convivir”, que ahora
se hacían llamar “las AUC” contra el gran ejército del Rey LuisCa I. Pero ni con
todo gran ejercito pudieron vencer a “las convivir”, por lo que nuestro eterno
alcalde Alvarito, el mejor alcalde que ha tenido Paisalandia duélale a quien le
duela, le tocó tomar prestado el poder profano de la motosierra fantasma.
Así, Alvarito con su motosierra fantasma venció a los Elenos, a las convivir, a
Marbelle, a Godzilla y a todos los espantos que intentaron volver Castrochavista a
Paisalandia.

De Alvarito nunca más se supo nada. Unos dicen que lo ven escondido cerca a la
corte constitucional… otros dicen que cuida de Paisalandia con su motosierra
fantasma entre las sombras… otros dicen que cargó con la maldición de la
motosierra, por amor a Paisalandia.
Otros dicen que se fue a comprar cigarrillos y nunca volvió… pero de lo que sí
podemos estar seguros, es que gracias a nuestro eterno alcalde Uribe,
Paisalandia no se volvió como Venezuela.

Fin.