Está en la página 1de 3

ARRENDAMIENTO FINANCIERO (LEASING)

Normas de registro y valoración del Plan General de Contabilidad

El «leasing» es un contrato de arrendamiento financiero que incluye una opción de compra para
el arrendatario sobre el bien recibido y que podrá ejercitar al final del contrato por un precio
que se denomina «valor residual». Este valor debe figurar obligatoriamente en el contrato de
arrendamiento financiero.

El «leasing» es una forma de financiación a largo plazo, pues permite la utilización de bienes –
normalmente inmovilizado– sin realizar una alta inversión y, por consiguiente, procura al
arrendatario una agilización de su tesorería.

Se entiende por arrendamiento, a los efectos de la norma 8ª de registro y valoración del Plan
General de Contabilidad (PGC 2007), cualquier acuerdo, con independencia de su
instrumentación jurídica, por el que el arrendador cede al arrendatario, a cambio de percibir
una suma única de dinero o una serie de pagos o cuotas, el derecho a utilizar un activo durante
un periodo de tiempo determinado.

La calificación de los contratos como arrendamientos financieros u operativos depende de las


circunstancias de cada una de las partes del contrato por lo que podrán ser calificados de forma
diferente por el arrendatario y el arrendador.

Por el contrato de arrendamiento financiero, el arrendatario se obliga a pagar unas cuotas al


arrendador, que están destinadas a:

1. Pagar el precio del bien objeto del contrato.

2. Pagar los gastos financieros de la operación.

3. Pagar el IVA.

El desglose de estas cuotas figura en un anexo del contrato de arrendamiento financiero, en el


que también aparecen las fechas de los vencimientos.

Una vez que han sido abonadas todas las cuotas del «alquiler» del bien, el arrendatario tiene la
posibilidad de ejercer, mediante el pago de una cantidad, la opción de compra. En el caso de
que esto suceda, el bien objeto del contrato pasa a ser propiedad del arrendatario. El importe
de la opción de compra, normalmente, coincide con el importe de las cuotas que se han pagado
en el contrato, pero también puede ser otra cantidad.
Desde un punto de vista económico, el «leasing» permite la adquisición de bienes con una serie
de ventajas frente a una adquisición con pagos aplazados (compras a plazos).
Fundamentalmente, éstas son:

1. Las cuotas son íntegramente deducibles (son gasto deducible en el Impuesto sobre
Sociedades, aunque no es objeto de este Manual sus implicaciones y tratamiento fiscal)
a medida que se vayan pagando –en la práctica se autoriza una amortización acelerada
a efectos fiscales–; en tanto que en una adquisición, el proceso de deducción en el
Impuesto sobre Sociedades es por la vía amortización del inmovilizado, que se realiza
en función de la vida útil y las tablas correspondientes, durante un período superior.

2. El IVA se devenga conforme se vaya prestando el servicio, es decir según se vayan


pagando las cuotas. En cambio, si se trata de una adquisición, el impuesto se devenga
íntegramente en el momento inicial.

Características del arrendamiento financiero «leasing».

En la actualidad, en un arrendamiento financiero no existiesen dudas acerca del ejercicio de la


opción de compra al finalizar el contrato y considerar, como elemento determinante, la
transferencia sustancial al arrendatario de todos los riesgos y beneficios inherentes a la
propiedad del activo sobre el que se realiza el arrendamiento.

(Gómez, 2016)Se presume que se da la transferencia de los riesgos y beneficios inherentes a la


propiedad en los siguientes casos:

 Cuando la propiedad del activo se transfiere al arrendatario al finalizar el plazo del


arrendamiento.
 Cuando el período de alquiler coincida o cubra la mayor parte de la vida económica del
activo.
 Si los valores actuales de los pagos mínimos suponen un importe prácticamente igual al
del valor razonable del bien arrendado al principio del contrato.
 Cuando las características del activo objeto del contrato de arrendamiento hacen que
su utilidad quede restringida al arrendatario.
 Si el arrendatario puede cancelar el contrato y las pérdidas que vaya a sufrir el
arrendador las asume el arrendatario.
 Cuando los resultados derivados de las fluctuaciones en el valor razonable del importe
residual recaen sobre el arrendatario.
 Si el arrendatario puede prorrogar el contrato de arrendamiento durante un segundo
período, con unos pagos por arrendamiento sensiblemente inferiores a los del mercado.

Bibliografía
Gómez, J. (13 de Mayo de 2016). Arrendamiento financiero (leasing). Obtenido de
https://novagob.org/arrendamiento-financiero-
leasing/?fbclid=IwAR0eR6yXflnIGk_tPJGLwwj-Wy-
KVLDKB77wcuQb0f30So_GJqXexhARbU8

También podría gustarte