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1 eevee EELsduEsuuLUELNer re FILOSOFIA 2195 wnt De sin limites a lamitados . Poe DE SIN Cinype A unarrapes Los limites no sélo prohiben, también permiten. Entendemos ios limites como una operacién necisa- sia y fundante del ser humano cuya funcién es prove- €emos de un marco légico para la convivencia. Porque vivimas dentro de ciertos limites establecidos es que Ja vida adquiere alyiin orden aprendible y aprehensi bie, las relaciones entre las personas resultan regula das y contamos con la capacidad de anticipacién y previsién, ya que lo que pueda ocurrit, seré dentra de ciortos margenes. El limite es come una moneda con dos caras, aunqu nunca las veamnes at mismo tiempo, Poderos conce biry por fo tanto, enunciar el limite bajo su cara ce ka prohibicién o bajo su cara de la posibilidad. Es decir, el fundamento ultimo © primero por cl qui: thuns al qn Ray ee buat 0p GF te do ato aus queda probe sino pore amen qe dt Sienpe ue eecines habia aeedotenles aig tn coxa pun acclee, pra qu ls ep Galego Gea via sean crs ta se puede css, como einln pita ue poses ta "79 2 pov acd ona en te mest oi cain” Punsenios en cualquier juego relado, coma per jemplo, el ajedrez, éCudl es el valor da su enseran 22? Precisamente, que pone en acto la funcién de los inves, le permite @l suleto Ie acquisicion de reglas legicas como condicién de posibtidad para e! des artollo de sus capacidades simbéticas (conce>tuali- in, dascentrariento, abstraccién, anticinaciér El valor y ei sentidy dz los limites no estén solamente en lo que prahiber sino en lo que etc.) La aceptacién de fas reglas que habilitan el juego, que no es otra cosa que el reconocimienta de clerta legatidad, conlleva de manera implicta fa otra cara del limite, la sujeci6n y conformidad ko que ‘queda prohibido, 0 sea, el acto de renuncia al ‘vale Todo" 0 “como a mi se me ocurrar Volviendo al ejemplo del ajedrer, resulta evidente cue la presentacién de las reglas por el lado desi, facil ta su comprensién y apropiacién. Cuando a un chico ‘e dacimos: “el peda se mueve de a un casilero por vez y siempre hacia delante; la torre se mueve en este sentico y el ail en este otro, ec.", ya esté en condi- clones de ponerse a jugar. Si se entusiasma y acepta of desalia, aprender que cuanto mas se someta y \fescubra la Hogica del juego, mas se le abrird un cami- no de posibilidades. Cn cambio, la presentacién de tas reglas por o lato de 10 prohibide le agrega al mensaje un grado de ccomplejidad enorme, ya que exige del chico et ‘esfuerzo de decodilica- én, para pasar de lo que no se puede a fo que le queda como permitido, a [a vez que no le faciita encontrar et sentido de fo que se le impone, es deci, “para que Este alanteo de fos imites come posibilidad ns leva 2 excontear ’a razon de [os "no" que circulan en 1a fescuele, ro pore! lado de fo prohibide sino en funcién de aquello que quereros habilitar, en fa tarea misma (Que 1s convoca, éCules son los limites que neces! oman sostener para habiltar la ensefanza? {Como as bases ara una convivencia 2 par- seria construr ua tir de lo que querenvos que c&urra se TEAIALES PARALLA CA23% Para soguir pensando: Un grupo de decentes de misica* alcanza cinrtos acuertios tobre acuelios fimites que consideran necesarios para habiltar la ensefacza en su araa. La adsqueda del Sentido de fos mismos Ja sos tienen por el lado dol "s* 0 del ‘para qué. Decimos que si: + a la expresién desde lo que ya sabemos y hacemys hasta las off@s CnSa5 que no conocemes. «+9 estar abiertos @ conocer las ccsas que no son Pabitunle. + conserva’ Jos instrumentos come un medio pari conesta:se con ef placer y disfrutar, + 3 compartir los materiales. ‘= un lugar placentera en el que padamos hacer y escuchar la misica, Becimos que no: + al ado vate" «a fa utilizacién de fos sonidos sin la organizaci6e y [2 intencicnalided de hacer musica, Es interesante cbservar que, en primer lugar, pensar da por aquel proverbio chino: *si quieres calmar el 1 limites desde esta perspectiva, Neva a asurnir una hambeo de uns persona por un dia, dale un pescado, posicién decidida con respecto a lo que tenemos pare S. qu'eres calmarlo para siempre, enséiiale 2 pes: chrecer a los chicos y lo que quoreros para ellos. Por como un par; a cada limite que le imponemas | Acompafiames de una campensacién, “Sacate el chupete asi puedo entendar lo que me decis', *No ‘ms paiales para que puedas correr como os otres chicos", "Para que todos entiandan lo que escrbis, tenés que hacerlo de tal manera’, “Si vamos 2 jugar al fatbo!, nece: sitamos conocer y res- petar sus reglas", “Las personas no resolve: mes los que llega al mundo lie te apio para la vida". proslemas pegando sino hablandet y as! podria seguir con tos eslucr2os que vemanda crete. Este proceso de humanizacién conlleva el nest ‘que estes compenzaciones 0 satislacciones sustitut 13s se vayan "hacigndo carne" con tal fuerze que ter minan siende tan imperiosas come un instinto. ts ovis, estas nvcesicades que so existen en “la at En palabras de Cas‘oricdis, "la sociedad esté aqui para humenizar a este pequeito monstruo raleza", por ser netamente culturales, nos acaban resu'tando subjetivamente tanto o mas imprescingi bles que las biolégicas. Sélo el ser humano puede rechazar la comida en nombre de una idea y embar- carse en una huelga de hambre o pasarse horas pin: tance 0 estudiando sin reparar en las sefales del cuerpo come cansancio, suefo o liambre. Pero aste medio —la cultura— no esté dado previa- mente, se transmite cada vez a cada nuevo ser. Oe to 52 trata, también, la escuela: de inocular a fos nifos que pasan por ella con este virus de fa cultura El deseo por saber, et placer de fa Lectura, el aprecio por la vida, el euidade do sy del otto, disfrutar de un ‘buen bate 0 reconacernos en el olor de une comida, _ son “sinlomas cle que nos hemos enfesmadio ue cule ura", si me permiten jugar con la metafora, Las respuestas a 1a5 dificullades pata transmit los limites no las encontraremos si las buscamos sola mente éel lado de los chicos. Ef camino al que 90s abre fa pregunta *iqué problema tiene oste chico que no acepla ls Ii tes”, nos conduce @ un desvio con respect @ ta tarea docente ido para que resul~ En cambio, si la plan: teamos del lado de |9 soc sad, la pregunta recae sobre los medios de ave disponenios para la tansmision de elamentos cultu rales, para reconoceros como portadores y pasado: tes de una lengua, de una historia, de una genealo- fin. y para instalar 2 ‘2 jeveqes come herederes, dono deudores, como un eslabén en esta cadena Gjue nos constituye con'o sujetos; adultos que tene- res un legado para 12s nuevas generaciones con + PARA LA GAPICITAC! libertad para tomar aquello que han heredado, sgn palabeas de Jacques Hassoun ‘Al quedar planteado de nuestee lado, la pregunts rocae sabre tas condiciones que habilitan que cada nuevo ser “se enferine de cultura‘, en cuyo recorrido, ira apropidndose de los recursos que se le ofrecen 3 cambio de los modos de respuestas primitivas que se le exige abendonar. Entonces, la pregunta recae tn lo quie coma sociedad le ofrecemos a cambio de Jo que se le exige, Porque debemes reconecer que ser civilizado* e8 una exigencia por la que recibimos 2 cambio el reconocimiento de los otros, el afecto de las personas significativas par osotrds, una ima- gen de uno mismo que nos raconcilia con nuestro fespejo, un lugar de pertenencia, disirutar de tos Jogros, satisfacciones sustitutivas valoradas social mente, etc. Por supuesto, para algunos chicos este abanico es mas rico que para otros. Si en lugar de verlos como sin limites, los reconoce: mos como profunda y dolorosamente limitadss, PLestia tarea toma otro sentido. Limitads, precisa mate, de 9 toi, el tna iota, eo any usar de parterencia, de lazus afectivos, de un majiana, 6e un porqué y de un pare qué vivir, en sin tosis, de anuolios ree Wiluyen como sujetos i 1g simbalicns ane 905 cans cluidos en una trama de sen tidos sociales, Sabeiros que este fendineno 5 un signa de la época, Yy que por 1 tanto, atraviesa todos fos scctores soria lus, ctltura’es y coundimicos. Sin embargo, desde ur punto de vista metodolégico, las observaciones y ‘analisis no pueden hacerse de manera generalizada sn contemplar sus parlicularidades y diferencias. Clue ¢ texto recorte esta tematica en fos sectores mas Cesprotagidos y vulnerables de la sociedad se debe, centre otres motives, a las circunstancias y contextos abajo para for que fue pensade. ee sin A WuaTaEas Un desafio para la escuela El desatio més grande para la escusla no surge de la regunta por “cémo poneries iimites a es'os chicos", sino por como compensar estes desigualdades en los Fecursos con fos que cuentan para transformar esos impulsos primitivos en acciones socialmente acepta- bles, para encontrar canales de expresién mas suti- les, para dejar de hablar con las manos 0 a los gol: es y aprender a hacerlo con un lenguaje simbélico, para dejar de actuar por impulso e ir encontrando mediaciones culturales. La dificultad estriba en ‘encontrar cémo operar en aquelles contextos en ce {os procesos de desintegracién simbélica y la inscrip- cidn de fa violencia en los cuerpos resultan tan des- camados. Sabemos que no es sencilla ta tarea de ensefianza cuando muchos chicos llegan a la excue- la sin la adquisicién de habites cotidianos coma ‘conicr sentadas a una mesa o esperar el momento er que el padre vuelva de su trabajo, sin horarios para levantarse 0 para irse @ dormir, sin haber aprendido a cuidar sus cosas porque no tienci la experiencia “fo propia’, sin un adulto que les pregunte si tienen larea 0 qué aprenieron hoy. Los docentes suelen fleminciar que la escuela *no pueds toro" y 6s ver dai, Pero ain cuando ef macst-o se quede con Ia snnsacidn de que es poco to que puede, si seguimos trabajando en educacién es porque estamos conven- Para seguit pensando: cides de que ese poco es mucho, *..dada que la con- Ciencia dela privacién decrece a medida que erece la ‘tivacibn, los individuos més timitados de los recur- 508 para apropiarse de Ios bienes culturales son los ‘més completamente desposeidos de ta conciencia de 282 desposesiéno La enseitanza en contextos de pobreza simbélica nos plantea ta exigencla de generar las condiciones para que el chico descubra el valor de fas aprencizajes © ¢ entusiasme con Io que puede saber, para que no quiera perdérselo. Cualquier persona colocada ante lun mensaje demasiado lejano para lla, se siente “aclastatiat o desiste de hacer el intento, Si. tal como plantea Pierre Bourdieu, "la necesidad cultural como necesidad cultivada s@ incrementa a madida que se sacia y cada nueva apropiacién tien- de 8 reforzar la capacidad de apropiacién ast como las satislaeciones que nos brinda', entonces, nece lames romper con et circulo vicioso que encierra a tos 15 mas limitades en Ia imposibilidad de recibir 1o 1e105.corresponde como derecho y lo que meracen isttac. A-medida que vivan experiencias que los cenecten con los bienes cullurales, crecerén en ellos la cisposicién y ‘as ganas de aprender. Una profesora de Educacién Fisica comenta de manera muy conmovedcra un taller de velas y jabo~ ‘nes que reali26 en un grado. En lugar de echar descdarante para tapar los olores 0 hablar la importancia de fa higiene = chicos que no tienen garantiza apropiarse del placer de un bana 0 la sensacién ds "ole lindo’, esta profesore a 0 en contenido de enserianza y darles.l2 opertunidad de ue s@ encuentren conla expe sobre 5 Jas condiciones minimas p22 ue. reclom@ Uisirutar de distitas Hagancias y perfumes. Fina'mente eran fas mists chicos fas que ‘ect ‘ban y 3e encargaban de encender fas valas para certumar el aula ‘iim Son's Ba Vice Comper ss ements one ra 9 coment, EU ses 3

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