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El magnetismo
.
Comparación de datos oceanográficos y geomagnéticos que muestran que la
tendencia secular en la variación está estrechamente correlacionada con la
tendencia de la intensidad del flujo de los océanos
Ryskin ha calculado la forma en que son arrastradas las líneas del campo
magnético terrestre por las corrientes oceánicas y cómo éste es modificado
por los líneas del campo magnético propio del océano. Encontró que el
movimiento encaja perfectamente con las observaciones de cómo el campo
magnético ha ido cambiando con el tiempo, y en particular la forma en que
los polos geomagnéticos se han estado moviendo.
"Cuando el agua salada del océano fluye a través del campo magnético de
la Tierra, se genera un campo eléctrico y este nuevo campo eléctrico crea
un campo magnético", explicó el Dr. Hermann Lühr, del Centro Alemán de
Investigación de Geociencias (GFZ, por su siglas en inglés) e investigador
principal en Swarm.
"Esperamos tener la posibilidad de medir las corrientes oceánicas que son
tan importantes para la dinámica del clima, ya que los océanos transportan
una gran cantidad de calor. El misión alemana Champ fue la primera en ver
la señal de las mareas, pero con Swarm queremos ser capaces de
monitorear las corrientes mismas".
La mayor parte del campo magnético global de la Tierra se genera por la convección de
hierro fundido en el núcleo externo líquido del planeta, pero hay otros componentes que
contribuyen a la señal en general, incluyendo el magnetismo retenido en las rocas.
ANOMALÍAS MAGNÉTICAS
Anomalías magnéticas cerca de la cresta de la Dorsal Central Atlántica. Las áreas negras son
anomalías positivas mientras las blancas son anomalías negativas.
Si la idea de Vilne era acertada disponíamos de algo así como un magnetófono que
había registrado la velocidad de la cinta transportadora oceánica (extensión de los
océanos), siempre y cuando se conociese bien la historia de las inversiones
magnéticas.
. El cambio de actitud para muchos de ellos fue tan brusco que simuló una revolución
copernicana o una inversión magnética.
En la actualidad el satélite Langeos 2 mide la deriva continental. Situado a 5900 Km.
de altura posee 426 reflectores que reciben haces de laser de 19 estaciones terrestres. Su
precisión es de 2 mm por año.
En la Tierra estos modelos son producidos por las placas tectonicas. Las cadenas
dorsales que recorren el centro del océano hacen emerger material que luego se esparce
lateralmente dejando al solidificarse un registro del campo magnético cambiante de la
Tierra. Los modelos similares sobre Marte se ven como una evidencia de que Marte
tuvo alguna vez moviendo lateral de placas tectónicas y un campo magnético
cambiante, aunque ambos procesos - todavía activos sobre la Tierra- no existan desde
hace tiempo en Marte planeta más pequeño. Estas medidas del magnetismo marciano
de alta resolución fueron posibles por el acercamiento de las órbitas del la nave MGS y
no estaban originalmente planificadas.
Causas
Los métodos de cálculo actuales han utilizado grandes simplificaciones, para producir
los modelos que corren en aceptables escalas de tiempo para programas de
investigación.
Una opinión minoritaria, sustentada por figuras como Richard A. Muller, es que las
reversiones geomagnéticas no son procesos espontáneos, sino más bien que éstos son
accionados por eventos externos los cuales interrumpen directamente el flujo dentro del
núcleo de la tierra. Tales procesos pueden incluir la llegada de trozos continentales
llevados hacia abajo del manto por la acción de las placas tectónicas en las zonas de
subducción, la iniciación de nuevas protuberancias en los límites del manto central y
posiblemente fuerzas de cizalla debidas a algún Impacto astronómico.
Los sustentantes de esta teoría afirman que cualquiera de estos eventos pueden conducir
a una interrupción a gran escala del dínamo terrestre, al desactivar efectivamente el
campo geomagnético. Desde que el campo se encuentra fijo en la orientación Norte-Sur
actual o una orientación invertida, proponen que cuando el campo se recupera de tal
interrupción, elige de manera espontánea ya sea uno u otro estado, de tal manera que la
recuperación es vista como una reversión en cerca de la mitad de todos los casos.
Las interrupciones breves que no tienen como resultado una reversión son conocidas y
se les conoce como excursiones geomagnéticas.
Las reversiones pasadas del campo geomagnético pueden ser y han sido registradas en
minerales ferromagnéticos congelados o depósitos sedimentarios de flujos volcánicos
enfriados en la tierra, originalmente. No obstante, el registro de pasadas reversiones
geomagneticas fue advertido primero al observar las "anomalías" de las bandas
magnéticas en el fondo del océano. Dado que el fondo del mar se extiende con una tasa
más o menos constante, esto tiene como resultado la aparición de franjas anchamente
evidentes de que la polaridad pasada del campo puede ser inferida al mirar los datos
reunidos por el simple arrastre de un magnetómetro por el lecho marino. Sin embargo,
desde que no existe ninguna subducción del fondo del mar ( ni el empuje del fondo del
mar en las placas continentales como en el caso de Ophiolytes) que es más viejo con
cerca de 180 millones de años de edad, es necesario el uso de otros métodos para
detectar reversiones pasadas. La gran mayoría de las rocas sedimentarias incorporan
delgadas cantidades de minerales enriquecidos con hierro, cuya orientación es
influenciada por el ambiente magnético bajo el cual se formaron. Bajo condiciones
favorables, es así posible extraer información de las variaciones del campo magnético
en muchas rocas sedimentarias. Sin embargo los procesos diagenéticos -al quedar
sepultadas- pueden borrar la evidencia del campo magnético original.
Dado que el campo magnético terrestre está presente de manera global, hallar patrones
similares en las variaciones magnéticas en diferentes sitios es un método usado para
correlacionar edades a través de diferentes localidades. En las pasadas cuatro décadas,
grandes cantidades de datos paleomagnéticos han sido acumulados para arrojar una
edad del fondo marino de unos 250 millones de años y de tal suerte que han venido a ser
una importante y conveniente herramienta usada para estimar la edad de capas
geológicas en el campo. Aunque no es en si un método independiente de datación, sino
que depende de otros como datación a base de radioisótopos, ha venido a ser usado
especialmente por los geólogos metamórficos e ígneos donde el uso de fósiles en la
estimación de las edades están raramente disponibles.
En las zonas continentales la mayor parte del calor proviene de la corteza en donde
existe mayor cantidad de material radiactivo. Sin embargo, en los océanos las
mediciones de flujo térmico han dado resultados muy similares a los de los continentes,
lo que llevó a los científicos a preguntarse de donde venía el calor en los océanos. Al
tratar de resolver esta pregunta se pensó nuevamente en la teoría de las corrientes de
convección en el manto como mecanismo para la transmisión de calor. Y se descubrió
que los fenómenos térmicos en la Tierra están ligados con los fenómenos eléctricos y
magnéticos.
Aumenta la velocidad del desplazamiento del Polo Norte
Magnético
Hay otras investigaciones que han detectado anomalías atribuidas a los cambios en el
campo magnético terrestre. Tal como publicamos en un anterior artículo, se ha
descubierto que la fuerza del campo magnético terrestre ha disminuido un 10 % en los
últimos 160 años, mucho más rápido de lo que podría esperarse por evolución
espontánea, debido en gran medida a su debilitamiento en una región del Atlántico Sur
conocida como “anomalía sudatlántica”.
Según los autores de esta investigación, este debilitamiento del campo magnético
aumenta la vulnerabilidad del planeta a las radiaciones cósmicas y anuncia su posible
desaparición dentro de 1.500 años, así como una nueva inversión de los polos tal como
ocurrió hace 780.000 años.
Por otro lado, una investigación ha determinado a su vez que la estrella Polar brilla hoy
2,5 veces más intensamente que hace 2.000 años, un fenómeno que, como publicamos
también en Tendencias21, puede estar relacionado con las modificaciones del campo
magnético terrestre, así como con posibles alteraciones en el ritmo de pulsación de la
estrella Polar.
El campo magnético terrestre posee dos polos: el Polo Norte Magnético, situado en el
Ártico canadiense, y el Polo Sur Magnético, situado en la Antártida, al sur de Australia.
En el Polo Norte Magnético, las líneas del campo magnético terrestre se orientan
directamente hacia el centro de la Tierra.
Opinión
El campo magnético en el océano y corrientes de agua sobre territorio
continental son muy importantes ya que nos pueden ayudar a entender
sobre los cambios que a hora último estamos pasando en la actualidad.