Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Juegos Matematicos PDF
Juegos Matematicos PDF
Juan M.R. Parrondo
Juegos Matemáticos (2001‐2008)
1. Perder+perder=ganar. Juegos paradójicos (Julio 2001).
2. Teoría de la información y juegos de preguntas sí/no (Agosto 2001).
3. Experimentos con compresores de ficheros (Septiembre 2001).
4. Las matemáticas de la opinión pública (Octubre 2001).
5. Las matemáticas del aprendizaje y la generalización (Noviembre 2001).
6. Juegos cuánticos (Diciembre 2001).
7. Información y juegos de azar: el problema de Monty Hall y la paradoja de los dos sobres (Enero 2002).
8. La paradoja de los dos sobres (Febrero 2002).
9. Paradojas democráticas (Marzo 2002).
10. Ventajas engañosas (Abril 2002).
11. Jugar con opciones y futuros (Mayo 2002).
12. Juegos equitativos con dados y monedas trucadas (Junio 2002).
13. Caos, determinismo y voluntad (Julio 2002).
14. Repartir escasez (Agosto 2002).
15. Paradojas y atascos de tráfico (Septiembre 2002).
16. Monedas, balanzas e información (Octubre 2002).
17. Ruletas, monedas y entropía (Noviembre 2002).
18. La misteriosa ley del primer dígito (Diciembre 2002).
19. El número de oro (Enero 2003).
20. Números y palabras (Febrero 2003).
21. Más sobre números y palabras (Marzo 2003).
22. Fluctuaciones fatales (Abril 2003).
23. El examen inesperado y la teoría de juegos (Mayo 2003).
24. Ruidos reveladores (Junio 2003).
25. La paradoja de Simpson (Julio 2003).
26. Un mundo sin números (Agosto 2003).
27. El problema del secador de manos (Septiembre 2003).
28. La paradoja de la Biblioteca de Babel (Octubre 2003).
29. Zenón y los camellos (Noviembre 2003).
30. Cita a ciegas (Diciembre 2003).
31. La frecuencia fantasma (Enero 2004).
32. Las ventajas de la solidaridad (Febrero 2004).
33. La teoría matemática de la consonancia (Marzo 2004).
34. Cuestión de escala (Abril 2004).
35. Matemáticas electorales (Mayo 2004).
36. La paradoja del autostopista (Junio 2004).
37. Matemáticas sostenibles (Julio 2004).
38. El reparto de poder en la Unión Europea (Agosto 2004).
39. Democracia ineficiente (Septiembre 2004).
40. Más sobre el reparto de poder (Octubre 2004).
41. Numerogooglia (Noviembre 2004).
42. Calculistas prodigiosos (Diciembre 2004).
43. El número mayor y la información misteriosa (Enero 2005).
44. Problemas de aparcamiento (Febrero 2005).
45. La dote del sultán (Marzo 2005).
46. Fósiles y lotería (Abril 2005).
47. Sorteos polémicos (Mayo 2005).
48. La forma de un iceberg (Junio 2005).
49. ¿Amigos para siempre? (Julio 2005).
50. Cribas y números primos (Agosto 2005).
51. Más paradojas de alternancia (Septiembre 2005).
52. Hagan sus apuestas (Octubre 2005).
53. Quién ríe el último... (Noviembre 2005).
54. Finalmente... sudoku (Diciembre 2005).
55. ¿Hay quien dé más? (enero 2006).
56. Incentivar la sinceridad (Febrero 2006).
57. El número h (Marzo 2006).
58. Caos, recurrencia y consonancia musical (Abril 2006).
59. El espacio‐tiempo (Mayo 2006).
60. Espacio‐tiempo y azar (Junio 2006).
61. Otras formas de contar (Julio 2006).
62. Ganancia segura (Agosto 2006).
63. Medir la desigualdad (Septiembre 2006).
64. El juego del ultimátum (Octubre 2006).
65. Los dados misteriosos y la razón áurea (Noviembre 2006).
66. La joya oculta (Diciembre 2006).
67. Los logaritmos de Brigss (Enero 2007).
68. La paradoja de San Petersburgo (Febrero 2007).
69. La paradoja de San Petersburgo y la teoría de la utilidad (Marzo 2007).
70. Loterías y decisiones (Abril 2007).
71. La asombrosa fórmula de Tupper (Mayo 2007).
72. Pensamiento formal y pensamiento concreto (Junio 2007).
73. Sutilezas estadísticas (Julio 2007).
74. Móviles y vectores (Agosto 2007).
75. Números pseudoaleatorios (Septiembre 2007).
76. Más sobre números aleatorios (Octubre 2007).
77. Carreras cuadriculadas (Noviembre 2007).
78. El caso de la moneda cambiada (Diciembre 2007).
79. El juego de las avalanchas (Enero 2008).
80. Sorpresas termodinámicas (Febrero 2008).
81. Estimaciones (Marzo 2008).
82. Cifras y letras (Abril 2008).
83. Encuestas electorales (Mayo 2008).
84. El problema de los tres dioses (Junio 2008).
85. Piensa un número (Julio 2008).
Temas
Probabilidad
1. Perder+perder=ganar. Juegos paradójicos (Julio 2001).
7. Información y juegos de azar: el problema de Monty Hall y la paradoja de los dos sobres (Enero 2002).
8. La paradoja de los dos sobres (Febrero 2002).
10. Ventajas engañosas (Abril 2002).
22. Fluctuaciones fatales (Abril 2003).
24. Ruidos reveladores (Junio 2003).
31. La frecuencia fantasma (Enero 2004).
36. La paradoja del autostopista (Junio 2004).
43. El número mayor y la información misteriosa (Enero 2005).
44. Problemas de aparcamiento (Febrero 2005).
45. La dote del sultán (Marzo 2005).
50. Cribas y números primos (Agosto 2005).
51. Más paradojas de alternancia (Septiembre 2005).
52. Hagan sus apuestas (Octubre 2005).
53. Quién ríe el último... (Noviembre 2005).
65. Los dados misteriosos y la razón áurea (Noviembre 2006).
68. La paradoja de San Petersburgo (Febrero 2007).
69. La paradoja de San Petersburgo y la teoría de la utilidad (Marzo 2007).
73. Más sobre números aleatorios (Octubre 2007).
75. El caso de la moneda cambiada (Diciembre 2007).
Estadística
18. La misteriosa ley del primer dígito (Diciembre 2002).
20. Números y palabras (Febrero 2003).
21. Más sobre números y palabras (Marzo 2003).
25. La paradoja de Simpson (Julio 2003).
41. Numerogooglia (Noviembre 2004).
46. Fósiles y lotería (Abril 2005).
47. Sorteos polémicos (Mayo 2005).
61. Otras formas de contar (Julio 2006).
70. Sutilezas estadísticas (Julio 2007).
80. Encuestas electorales (Mayo 2008).
Teoría de la información
2. Teoría de la información y juegos de preguntas sí/no (Agosto 2001).
3. Experimentos con compresores de ficheros (Septiembre 2001).
5. Las matemáticas del aprendizaje y la generalización (Noviembre 2001).
12. Juegos equitativos con dados y monedas trucadas (Junio 2002).
16. Monedas, balanzas e información (Octubre 2002).
28. La paradoja de la Biblioteca de Babel (Octubre 2003).
72. Números pseudoaleatorios (Septiembre 2007).
Teoría de juegos y economía y sociología
4. Las matemáticas de la opinión pública (Octubre 2001).
9. Paradojas democráticas (Marzo 2002).
14. Repartir escasez (Agosto 2002).
15. Paradojas y atascos de tráfico (Septiembre 2002).
11. Jugar con opciones y futuros (Mayo 2002).
23. El examen inesperado y la teoría de juegos (Mayo 2003).
30. Cita a ciegas (Diciembre 2003).
32. Las ventajas de la solidaridad (Febrero 2004).
35. Matemáticas electorales (Mayo 2004).
38. El reparto de poder en la Unión Europea (Agosto 2004).
39. Democracia ineficiente (Septiembre 2004).
40. Más sobre el reparto de poder (Octubre 2004).
49. ¿Amigos para siempre? (Julio 2005).
55. ¿Hay quien dé más? (enero 2006).
56. Incentivar la sinceridad (Febrero 2006).
57. El número h (Marzo 2006).
63. Medir la desigualdad (Septiembre 2006).
64. El juego del ultimátum (Octubre 2006).
67. Loterías y decisiones (Abril 2007).
Física
6. Juegos cuánticos (Diciembre 2001).
17. Ruletas, monedas y entropía (Noviembre 2002).
48. La forma de un iceberg (Junio 2005).
59. El espacio‐tiempo (Mayo 2006).
60. Espacio‐tiempo y azar (Junio 2006).
76. El juego de las avalanchas (Enero 2008).
77. Sorpresas termodinámicas (Febrero 2008).
78. Estimaciones (Marzo 2008).
Filosofía e historia
13. Caos, determinismo y voluntad (Julio 2002).
19. El número de oro (Enero 2003).
26. Un mundo sin números (Agosto 2003).
66. La joya oculta (Diciembre 2006).
67. Los logaritmos de Brigss (Enero 2007).
69. Pensamiento formal y pensamiento concreto (Junio 2007).
Análisis matemático, álgebra y optimización
27. El problema del secador de manos (Septiembre 2003).
29. Zenón y los camellos (Noviembre 2003).
37. Matemáticas sostenibles (Julio 2004).
71. Móviles y vectores (Agosto 2007).
Música
33. La teoría matemática de la consonancia (Marzo 2004).
34. Cuestión de escala (Abril 2004).
58. Caos, recurrencia y consonancia musical (Abril 2006).
Matemática recreativa
42. Calculistas prodigiosos (Diciembre 2004).
54. Finalmente... sudoku (Diciembre 2005).
62. Ganancia segura (Agosto 2006).
68. La asombrosa fórmula de Tupper (Mayo 2007).
74. Carreras cuadriculadas (Noviembre 2007).
79. Cifras y letras (Abril 2008).
81. El problema de los tres dioses (Junio 2008).
82. Piensa un número (Julio 2008).
Jupc os MAT EMÁ rrco s
Perder+perder-ganar.
Juegos de azar paradójico s
I estudio de ciertas propie- una probabilidad del 55,5 7o (esras se observa en la figura 2, en la que
dades del movimiento brow- probabilidadesno coinciden exac- se muestra el capital promedio de
niano -el movimiento aza- tamente con las de la ruleta, pero 5000 jugadores independientesen
roso que experimentan pequeñas nos permitirán describir de modo función del número de turnos ju-
partículas debido a las colisiones sencillo la paradoja). gados. Las curvas descendentes in-
con las moléculas del fluido en que En el segundojuego -lo llama- d i c a n l o s c a s o se n q u e s e j u e g a a
están inmersas y cuya teoría fue remosjuego B-, en cada turno tam- A o B separadamente.Las curvas
establecidapor Einstein en 1905- b i é n g a n a m o so p e r d e m o s1 , p e r o ascendentescorrespondena distintas
ha inspirado recientementeuna cu- ahora las probabilidades dependen combinaciones :12,21significa que
riosa paradoja. Se trata de dos jue- de lo que llevamos ganado hasta el Jugamosla sucesiónAABBAABB...,
gos de azar muy simples diseñados momento (que puede ser una can- [3,2] 1a sucesiónAAABBAAABB. ..,
de modo tal que el jugador, en pro- tidad negativa): si lo que llevamos "combinación
etc. Finalmente, la
medio, pierde en ambos. La para- ganado-lo llamaremos¿/ capital- aleatoria" consisteen que, en cada
doja consiste en que esta tenden- es múltiplo de 3, entoncesganamos turno, elegimos completamenteal
cia se invierte cuando los juegos I con probabilidad9,5Vo;si el ca- a z a r a c u á l d e l o s d o s j u e g o sj u -
se alternan, en cuyo caso el juga- pital no es múltiplo de 3, la pro- gamos.
dor tiene una tendencia ganadora babilidad de ganar es del 14,57o. No es difícil entender por qué
constante.Veamos en detalle las re- Las reglas de los dos juegos se o c u r r e e s t e c o m p o r t a m i e n t op a r a -
glas de estos dos juegos. muestran en la figura 1. dójico. Obsérveseque, en el juego
El primero de ellos -lo llama- Ambos juegos son desfavorables, B, la probabilidad de ganar es muy
remosjuego A- es similar a apos- es decir, la tendenciapromedio es baja cuando el capital es múltiplo
tar una cierta cantidad, digamos perdedora (esto es evidente en el de 3 y bastante alta cuando no lo
I euro, a rojo o negro en la ru- caso del juego A; el juego B re- es. Podríamos decir que el juego B
leta de un casino: ganamos I con quiere un análisis más detallado, contiene dos tendencias, una favo-
una probabilidad ligeramente in- pero puede también demostrarse rable y otra desfavorable.Las pro-
ferior al 50Vo y perdemos I con que es desfavorableen promedio). babilidades están elegidas de mo-
una probabilidad ligeramente su- Sin embargo, ciertas combinacio- do tal, que el juego es ligeramente
perior al 50Vo, ya que con el cero nes de los dos juegos tienen una perdedor, es decir, la tendenciades-
gana siempre la banca. Suponga- tendencia media ganadora. Este favorable domina sobre la favora-
mos que se gana con una proba- comportamiento inesperado,que se ble. Lo que ocurre cuando combi-
bilidad del 49,5 7o y se pierde con conoce como Paradoja de Parrondo, namos ambos juegos es que el A
invierte este dominio. A pesar de
que el juego A es en sí ligéramenre
J U E G OA J U E G OB desfavorable, hace que el capital
sea menos veces múltiplo de 3 y
que, por tanto, juguemos más ve-
¿ES Ml CAPITALMULTIPLODE 3?
MONEDA1 ces con la probabilidad alta de ga-
nar, la del 74,5Vo. El juego A, en
la alternancia, cumple un doble pa-
'\
L pel: añade por un lado su propia
/ MONEDA2 tendencia desfavorable, pero, por
*'/ MONEDA3
otro lado, refuerza la tendencia fa-
\"
GANAR PERDER
",,.,
, , , , ,i i ' I t t l t i f i
,, 'r¡,t;¡iilllitr
vorable del juego B. El resultado
global de este doble papel es, en
,u,u lrn, casos como los de la figura, in-
f \,0,u n"/ \no,u vertir la tendencia y dar lugar al
\ comportamiento paradójico.
GANAR PERDER GANAR PERDER
E x i s t eo l r o m e c a n i s m oi n t e r e s a n t e
tras la paradoja. Lo podemos ilus-
l. Reglas de los juegos paradójicos trar con el siguiente ejemplo en la
88 y CrENcrA,
INvesrrcrcróN iulio, 2001
13,21
[2,2]
C.ALEATORIA
O 14,41
z
z.
6 o
JUEGOA
JUEGOB
- 1, 5 '
0 20 60 80 100
DETURNOS
NUMERO
2. Ganancia media en cada uno de los juegos y en sus combinac iones
E
n una capital de provincias probabilísticos, que hoy dejaremos vinar un personaje. ¿Es hombre o
se ha descubierto un virus de lado.) mujer? ¿español o extranjero?, etcé-
letal que se propaga por vía Con toda lógica los responsables tera. Preguntas para las cuales la
sanguínea. El Instituto Nacional de de los bancos piensan que el pro- probabilidad de la respuesta afir-
la Salud establece un protocolo de ceso de mezclas puede aplicarse mativa es igual a la de la respuesta
prueba, que detecta la presencia de nuevo cuando la prueba de la negativa, es decir, 1/2.
del virus. La prudencia aconseja primera mezcla es positiva. En este De acuerdo con la teoría de la
que toda donación de sangre se so- caso tenemos un cierto número de información la pregunta óptima es
meta a la prueba. donantes, entre los cuales sabemos aquella cuya respuesta tiene una
Pero los reactivos que se utili- que existe al menos uno infectado. probabilidad 1/2 de ser SÍ, y una
zan son muy caros. Además, la in- Y podemos someter a otra prueba probabilidad 1/2 de ser NO. Receta
cidencia del virus en la población a ciertas mezclas de estos donan- sencilla que vale para el juego de
es aún baja, de un exiguo 0,01 %. tes. ¿Cuál será entonces el diseño adivinación y para el problema de
A los responsables de los bancos óptimo de las nuevas mezclas? El las mezclas de sangre.
de sangre no se les escapa un viejo problema ahora es bastante más Imaginemos, por ejemplo, que
truco: mezclar la sangre de un complicado. Sin embargo, la solu- nos pidieran adivinar un número
grupo de donantes y pasar la mez- ción se revela de una extraordina- entre el 1 y el 16. Podríamos co-
cla por la prueba. Si sale nega- ria sencillez. Guarda relación con menzar preguntando si es par o
tivo, ausencia de virus, podemos la teoría de la información y con impar. De este modo descartamos
asegurar que ninguno de los inte- dos aplicaciones suyas, la codifi- 8 números y nos quedamos con 8.
grantes de la mezcla está infec- cación de mensajes y la compre- La siguiente pregunta tendría que
tado. Si sale positivo, presencia de sión de ficheros de datos. descartar 4 números. En efecto, si
virus, se procede a un análisis in- El problema de la mezcla de san- nos han respondido que el número
dividualizado de cuantos compo- gre es similar a los juegos en los es par, podríamos ahora inquirir:
nen el grupo de la mezcla. Pero, que se tiene que adivinar algo —un ¿es múltiplo de cuatro? La tercera
¿cuándo podemos decir que el nú- personaje, un objeto de la habita- pregunta debe descartar 2 núme-
mero de integrantes del grupo de ción— mediante preguntas que sólo ros; por último, la cuarta decidirá
donantes aunado para la mezcla es admiten una respuesta, afirmativa entre los dos que quedan. Con esta
el óptimo? Dicho de otro modo: o negativa. ¿Cuál es la mejor es- estrategia siempre acertamos el nú-
¿cuál es el tamaño de la mezcla trategia en este tipo de juegos? Sin mero tras cuatro preguntas, no im-
exigido para realizar, en media, el advertirlo, la mayoría de la gente porta cuál sea la cifra.
menor número de pruebas? (El pro- encuentra la óptima de modo un Podemos diseñar estrategias me-
blema así planteado puede resol- intuitivo, al menos en las primeras jores para ciertos números. Si em-
verse con determinados recursos fases del juego. Sea por caso adi- pezamos preguntando ¿es el 16?,
la estrategia sería muy buena en
el caso de que el número pensado
fuera el 16, pero habríamos prác-
ticamente desperdiciado el turno si
no lo fuera; tras esa pregunta di-
recta, sólo se ha descartado un nú-
mero de los 16 posibles y la in-
certidumbre inicial apenas ha
disminuido.
No resulta difícil demostrar que
la estrategia primera —la de adi-
vinar un número tras cuatro pre-
guntas, con una probabilidad 1/2
de respuesta afirmativa en cada
una— es, en media, la que requiere
1. Cartones para adivinar menor número de preguntas. Esta
un número del 1 al 16 estrategia óptima se utiliza en un
juego de adivinación bastante di- Con esta información no le cos- el número es el 11, Benito le dirá
fundido. Participan dos jugadores, tará mucho. Bastará con que Alicia que se encuentra en el primero y
llamémosles Benito y Alicia. Benito sume 8 si Benito le dice que está tercer cartones. Sumará entonces
piensa en un número entre 1 y 16, en el primer cartón, más 4 si está 8 + 2 + 1 y obtendrá el número
que Alicia debe adivinar. Le mues- en el segundo, más 2 si se halla deseado.
tra cuatro cartones, como los de en el tercero, más 1 si está en el El lector habrá adivinado ense-
la figura 1. Alicia debe averiguar último cartón. Finalmente, a esta guida que los cartones no son más
en cuál de ellos se encuentra el suma se le añade 1 y se obtiene que la representación binaria del
número pensado. el número secreto. Por ejemplo, si número secreto menos 1. En el
T
oda persona que utilice Internet se habrá dado tante sea el más corto posible que no haya aparecido
cuenta de lo importante que es comprimir la antes. Por ejemplo, en la cadena de bit:
información antes de enviarla a través de la 1011100010101010100
red. Un nuevo modo de comprimir datos puede ori- la fragmentación proporcionará:
ginar a veces a una auténtica revolución en este mun- 1,0,11,10,00,101,01,010,100
dillo, como ha ocurrido con el formato mp3. Pero la El lector puede observar que cada fragmento es
compresión de datos es un problema matemático cuya siempre la concatenación de un fragmento aparecido
importancia va más allá de estas aplicaciones y afecta con anterioridad y de un bit 0 o 1. Los llamaremos
a cuestiones tan fundamentales como la definición fragmento prefijo y bit adicional, respectivamente.
objetiva del azar. Por ejemplo, el tercer fragmento, 11, es el primero
Claude Shannon demostró que el tamaño mínimo seguido de un 1; el sexto fragmento, 101, es el cuarto
al que se puede reducir un fichero de datos es igual seguido de un 1; y así sucesivamente. Podemos ahora
a su incertidumbre o entropía y mostró la manera de numerar los fragmentos y sustituir cada uno de ellos
calcular esta entropía en casos sencillos [véase Juegos por el número del prefijo y por el bit adicional. El
matemáticos del mes de agosto]. En este artículo 0 indicará por convención la falta de prefijo o “pre-
mostraremos algunos experimentos sencillos que ilus- fijo vacío”. En nuestro ejemplo:
tran el teorema de Shannon y que nos ayudarán tam- (0,1),(0,0),(1,1),(1,0),(2,0),(4,1),(2,1),(7,0),(4,0)
bién a investigar cuánta información contenga una Finalmente se representan en binario los números
sonata de Beethoven o el Ulises de Joyce. Nos bas- que indican el prefijo para obtener una nueva cadena
tará para ello cualquier programa de compresión de de bit. Veamos cómo se realiza este paso en nues-
ficheros para Windows, Macintosh o UNIX. tro ejemplo. Como hemos utilizado siete prefijos, se
Uno de los algoritmos de compresión más cono- necesitan tres bit para representar cada uno de ellos:
cido es el llamado de Lempel-Ziv (LZ). El programa (000,1),(000,0),(001,1),(001,0),(010,0),(100,1),(010,1),
compress del sistema operativo UNIX y todos los pro- (111,0),(100,0)
gramas que generan ficheros .arj, .zip o .gif en Windows Ahora se pueden quitar los paréntesis y las comas
utilizan variantes suyas. Lo que hace el algoritmo es y obtener así la cadena de bit comprimida:
aprovechar de forma bastante simple las repeticiones 000100000011001001001001010111101000
de ciertas “frases” que aparecen en una cadena de La descompresión es muy sencilla, puesto que la
bit, es decir, en una cadena de dígitos 0 o 1. Para representación binaria del número del prefijo tiene
ello se fragmenta primero la cadena de modo que no siempre el mismo número de bit, tres en nuestro
aparezca la misma frase dos veces. Esto se consigue ejemplo. Sabemos entonces que cada fragmento está
colocando comas de forma sucesiva: se coloca una codificado por cuatro bit: tres para el prefijo y uno
coma después del primer dígito; la siguiente se co- para el bit adicional.
loca de modo que el fragmento entre comas resul- La cadena resultante de nuestro ejemplo es bas-
tante más larga que la original, en contra del propó-
sito del algoritmo. Esto se debe a la escasa eficacia
que éste tiene en el caso de cadenas muy cortas.
Cuando se aplica a una cadena muy larga, los frag-
mentos cada vez son más grandes, mientras que el
número de bit necesario para describirlos crece de
manera más lenta. Por ejemplo, supongamos que una
cadena de cien mil bit se ha dividido en mil frag-
mentos con un tamaño medio de cien bit (los pri-
meros serán más cortos y los últimos más largos,
probablemente). Para describir el prefijo no se ne-
cesitan más que 10 bit, ya que 210 = 1024. Por tanto
cada fragmento estará codificado por 11 bit (los 10
del prefijo más el bit adicional), mientras que su lon-
gitud original era de 100 bit. Es decir, el algoritmo
ha logrado comprimir este fichero de datos a un 10 %
de su tamaño original.
1. El resultado de comprimir ficheros con cien mil Está claro que cuanto más largos sean los frag-
bit aleatorios mentos, más eficaz será el algoritmo. Esto ocurre si
40 40
NUMERO DE SIMPATIZANTES DEL PARTIDO AZUL
NUMERO DE SIMPATIZANTES DEL PARTIDO AZUL
35 35
30 30
25 25
20 20
15 15
10 10
5 5
0 0
0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 ×104 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 ×104
TURNOS TURNOS
1. Número de simpatizantes del partido Azul 2. Número de simpatizantes del partido Azul
en función del número de turnos jugados, cuando en función del número de turnos jugados, cuando
los habitantes del pueblo tienen una probabilidad los habitantes del pueblo tienen una probabilidad
0,75 de alinearse con el partido mayoritario 0,25 de alinearse con el partido mayoritario
tendremos N/n grupos. Por tanto, 0,45 Observemos también que la res-
el número total de pruebas, en me- 0,4 puesta no coincide con la que da
dia, es: 0,35 la teoría de la información, tal y
0,3 como apuntábamos en el número
N/n (1 + 0,0001 × n2) =
de agosto. Con dicha estrategia la
= N (1/n + 0,0001 × n)
0,25
A
nselmo Tajante es un tipo inteligente-necio y generoso-tacaño. ciones y escoger una de ellas a
al que no le gustan las me- Con unos pocos ejemplos más, in- través de ejemplos. Normalmente
dias tintas. Para él las per- cluso tomados al azar, Tajante aca- se emplea una red neuronal, que
sonas son simpáticas o antipáticas, baría por deducir el significado de es un conjunto de pequeñas uni-
inteligentes o necias, generosas o lazy y diligent. dades de procesamiento conectadas
tacañas, diligentes o perezosas. El El método de aprendizaje a través entre sí. Dependiendo de la es-
Sr. Tajante es, además, un tanto de ejemplos se utiliza ampliamente tructura y la intensidad de las co-
limitado: sólo dispone de estas cua- en el campo de la inteligencia ar- nexiones, la red clasifica los da-
tro categorías para clasificar a las tificial. Supongamos que queremos tos de entrada de una u otra forma.
personas que conoce. Para él, su diseñar un programa de ordenador No nos interesa ahora el funcio-
amiga Alicia es simpática, inteli- o un dispositivo que decida, a par- namiento detallado de una red neu-
gente, tacaña y perezosa, y su primo tir de una serie de datos, si una ronal. Lo único importante es que
Bruno es antipático, inteligente, ta- persona padece o no una determi- se trata de un dispositivo con un
caño y diligente. De este modo, nada enfermedad. Una tarea como repertorio de clasificaciones y que
cada individuo puede ser codifi- ésta puede resultar tan complicada, podemos “enseñarla” a través de
cado mediante un número con cua- que sea prácticamente imposible ejemplos: se toman los datos de
tro dígitos binarios, en donde el diseñar un algoritmo que la lleve una serie de individuos que se sabe
primero es un 1 si la persona es a cabo. si han contraído o no la enferme-
simpática y un 0 si es antipática; Una alternativa al diseño de al- dad y se modifican las conexiones
el segundo dígito es un 1 si la goritmos es utilizar un sistema ca- de la red de modo que los clasi-
persona es inteligente y un 0 si es paz de realizar muchas clasifica- fique correctamente, esperando que
necia, y así sucesivamente. Alicia así sea capaz de extraer las
estaría codificada, para la reduci- pautas que se esconden tras los
da capacidad de apreciación de ejemplos y clasifique correcta-
Anselmo, con el número 1100, mente a nuevos pacientes.
y Bruno con el 0101. Como El procedimiento es idéntico
sólo existen 24 = 16 números al seguido por Dull para ha-
con cuatro dígitos binarios, cerle entender a Tajante el sig-
Tajante es capaz de distinguir nificado de lazy. Y, al igual
únicamente entre 16 categorías que ocurría entonces, la rapi-
“psicológicas”. dez con la que la red aprende
Esta sensibilidad tan tosca le es mayor cuanto menor sea su
facilita enormemente la gene- repertorio de clasificaciones. La
ralización a partir de unos po- diferencia con la historia de
cos ejemplos. Supongamos que Dull y Tajante es que los dos
Tajante se encuentra con Mister compartían el mismo reperto-
Dull, un inglés que dispone del rio de clasificaciones, con lo
mismo conjunto de categorías cual el aprendizaje acaba siem-
psicológicas. Para Dull no será pre en la solución correcta. Por
muy difícil “enseñar” a Tajante el contrario, en el caso de la
el significado de los términos red neuronal, la clasificación
lazy (perezoso) y diligent (di- que queremos conseguir es parte
ligente) a través de ejemplos. del mundo real. Debemos, por
Suponiendo que Dull conozca tanto, asegurarnos de que el
también a Alicia y a Bruno, y repertorio de clasificaciones de
tenga la misma opinión de ellos, 1. La secante define dos clasifica- la red es suficientemente amplio
señalaría a ella como lazy y a él ciones en el círculo: una que asigna como para contener la clasifica-
como diligent. Con estos datos, 1 a los puntos verdes y 0 a los ro- ción deseada, pero al mismo tiempo,
Tajante descartaría de su reperto- jos y otra que asigna 0 a los suficientemente reducido como para
rio de categorías a los binomios verdes y 1 a los rojos que la red pueda “aprender” o “ge-
Juegos cuánticos
S
upongo que la mayoría de los separarse o, si las dos partículas elevar al cuadrado el valor de la
lectores de Investigación y se atraen, formar una molécula o función de onda en cada punto del
Ciencia han oído hablar de agregado. espacio, sí tiene un significado fí-
la mecánica cuántica y conocen ¿Cómo es entonces posible que sico preciso: es la probabilidad de
sus tres principales características: la luz, los electrones o los proto- detectar al objeto en dicho punto.
que se aplica a lo muy pequeño, nes se comporten en ciertas oca- Si medimos la posición del objeto
que introduce el azar de forma siones como ondas y en otras como con una pantalla o un detector,
ineludible en nuestra descripción partículas? ¿Cómo pueden reconci- sensible a fotones individuales, lo
de la naturaleza y que es suma- liarse en un mismo objeto estas dos encontraremos en un solo punto,
mente extraña. naturalezas tan dispares? La mecá- es decir, la pantalla obliga al ob-
Una de las propiedades que do- nica cuántica resuelve el problema jeto a manifestarse como partícula.
tan a la mecánica cuántica de ese de la siguiente forma. El objeto — El lugar en donde lo encontremos
carácter extraño es la llamada dua- un electrón, un protón o un fotón— es aleatorio, pero la probabilidad
lidad onda-partícula. Muchos ex- está descrito por la función de onda. de que el objeto aparezca en un
perimentos de interferencia mues- La función de onda es una onda, punto dado es igual a la función
tran que la luz es una onda; sin es decir, ondulaciones de una de- de onda al cuadrado. Por ello, el
embargo, un fenómeno conocido terminada propiedad que puede to- valor de la función de onda en un
como efecto fotoeléctrico no puede mar valores positivos o negativos. punto se llama también amplitud
explicarse si no se admite que la Pero esta propiedad no se parece de probabilidad. La mecánica cuán-
luz tiene un comportamiento cor- a nada familiar: no es un campo tica parece demostrar que existe
puscular, es decir, que se trata de eléctrico, ni una presión o una tem- un azar ineludible en la naturaleza,
un conjunto de partículas o corpús- peratura. De hecho, esta propiedad un azar que no puede eliminarse
culos. Por otro lado, las partícu- ni siquiera puede medirse directa- con un mayor conocimiento del es-
las que forman la materia (elec- mente. Por ello algunos científicos tado de un sistema. Pero este azar
trones, protones y neutrones), en y filósofos opinan que no corres- tiene además propiedades sorpren-
la mayoría de las situaciones se ponde a nada físico y que es un dentes y muy distintas de las del
comportan como corpúsculos, pero puro artificio matemático. azar al que estamos acostumbra-
también pueden mostrar un com- Es cierto que la función de onda dos en el mundo macroscópico, so-
portamiento ondulatorio en ciertos no se parece a ninguna propiedad bre todo cuando se combinan va-
experimentos de interferencia. física conocida. Sin embargo, su rios sucesos.
Sin embargo, ondas y partículas cuadrado, es decir, el resultado de ¿Cuál es la probabilidad de que
son cosas muy diferentes. Una onda al tirar dos dados salga un 5? El
consiste en ondulaciones de una cruz〉 5 puede obtenerse de varias for-
cierta propiedad: el campo elec- mas: con un 1 en el primer dado
tromagnético, la presión del aire o y un 4 en el segundo; con un 4
la altura del agua en la superficie en el primero y un 1 en el se-
de un estanque. En estas ondula- gundo; con un 2 y un 3 o, final-
ciones la propiedad en cuestión mente, con un 3 y un 2. Si los
puede tomar valores positivos y dados no están trucados, la pro-
negativos en distintos puntos del cara〉 babilidad de cada una de estas cua-
espacio. Cuando una onda se en- tro posibilidades es igual a 1/36
cuentra con otra, los valores se su- (1/6 por 1/6). La probabilidad de
man, de modo que en los puntos que salga 5 es la probabilidad de
en donde la primera onda es po- que ocurra cualquiera de las cua-
sitiva y la segunda es negativa se tro posibilidades y se calcula sim-
produce una interferencia destruc- plemente sumando cada una de
tiva; esos puntos se comportan Cómo cambia la función de onda ellas: 1/36 + 1/36 + 1/36 + 1/36 =
como si no existiera ninguna onda. de la moneda cuando Piccard le da = 1/9. De este modo se trabaja con
Una partícula, por el contrario, no la vuelta: la flecha roja indica el probabilidades: la probabilidad de
puede interferir destructivamente estado cuántico de la moneda an- que ocurra un suceso que puede
con otra: cuando se encuentra con tes de la acción de Piccard y la darse de distintas formas (todas
una segunda partícula, lo único que flecha azul el estado después de ellas incompatibles entre sí) es sim-
puede hacer es chocar y volver a la misma plemente la suma de las probabi-
L
a forma en que se añade in- cambiar de cofre. En una serie de ha sido el superviviente de la ins-
formación a una situación charlas sobre probabilidad esceni- pección realizada por Monty.
incierta puede dar lugar a fiqué el concurso de Monty Hall El problema de Monty Hall nos
enigmas y paradojas. Un ejemplo y todos los “concursantes” sin ex- enseña dos cosas interesantes acerca
ya clásico en la teoría de la pro- cepción prefirieron quedarse con el de la probabilidad y el azar. La
babilidad es el problema de Monty cofre elegido en primer lugar. primera es que, al introducir in-
Hall. Otro no tan conocido, aun- Sin embargo, lo mejor que puede formación en un sistema, cambian
que no menos interesante, es la hacer el concursante es cambiar su las probabilidades de los distintos
paradoja de los dos sobres, que decisión inicial. Veamos por qué. sucesos que pueden ocurrir en di-
presentaremos en este artículo pero Conviene primero que se imagine cho sistema. La segunda es más
a la que dedicaremos una exposi- no un solo concurso, sino un gran metodológica: el problema de Monty
ción detallada en el próximo. número de ellos. Imagínese que el Hall es más difícil de entender si
Monty Hall es el presentador de concursante tiene oportunidad de no se introducen las réplicas, es
un viejo concurso de la televisión repetir el juego 900 veces, es de- decir, si se piensa en un único
en Estados Unidos. En la fase fi- cir, imagínese 900 réplicas del con- concurso.
nal del concurso Monty enseña tres curso, cada una con el premio en Veamos ahora la paradoja de los
cofres a un sufrido concursante. un cofre tomado al azar. Cuando dos sobres, que tiene una formu-
En uno de ellos hay un gran pre- el concursante elige por primera lación análoga al juego de Monty
mio y los otros dos están vacíos. vez uno de los tres cofres, es evi- Hall, pero que da lugar a una si-
El concursante elige nervioso uno dente que aproximadamente un ter- tuación bastante más sorprendente
de los cofres. Monty aparta en- cio de las veces acertará y dos ter- y cuya solución requiere adentrarse
tonces el cofre elegido y mira lenta cios de las veces se equivocará. en conceptos más sutiles de la teo-
y teatralmente en el interior de los Es decir, solamente en un tercio ría de la probabilidad.
otros dos. Cierra de nuevo uno de de las réplicas, unas 300, el pre- Ahora el presentador toma dos
ellos, toma el otro con las dos ma- mio está en el cofre elegido por sobres e introduce en uno de ellos
nos y lo vuelca ante los ojos del el concursante. Monty descubre el una cantidad de dinero x, desco-
concursante y el público: está vacío. cofre vacío y quedan dos cofres nocida para el concursante, y en
El concursante suspira aliviado, cerrados. Recordemos que sólo en el otro el doble de dicha cantidad,
aunque no tiene ninguna razón para un tercio de las réplicas el premio 2x. El concursante elige uno de
ello. Monty, generoso, le enseña está en el cofre elegido inicial- los dos sobre y lo abre. Supongamos
los dos cofres que quedan cerra- mente. En el resto de las réplicas, que encuentra 1000 euros. El pre-
dos y le ofrece la posibilidad de el premio estará en el otro cofre. sentador entonces le ofrece al con-
reconsiderar su decisión inicial: Por tanto, si el concursante man- cursante la posibilidad de cambiar
“Puede ahora escoger cualquiera de tiene su decisión inicial, ganará un su elección original. ¿Cuál es la
ellos”, anuncia con un redoble de tercio de las veces. Si cambia, ga- estrategia a seguir? En principio,
batería. ¿Qué debería hacer el con- nará dos tercios de las veces. Este los dos sobres parecen equivalen-
cursante? argumento se muestra en la figura, tes y, por tanto, nadie creería que
Mucha gente piensa que, una vez en donde hemos supuesto 9 répli- cambiar de sobre pueda suponer
eliminado uno de los cofres, el cas del juego. En términos de pro- alguna ventaja. Sin embargo, en el
premio puede estar por igual en babilidad, podemos decir que la sobre cerrado puede haber 2000
los dos que quedan. Por lo tanto, probabilidad de ganar manteniendo euros o 500 euros. Como no sa-
no importa el cofre que se elija: la decisión inicial es un tercio, y bemos nada de las cantidades in-
la probabilidad de ganar el premio la probabilidad de ganar al cam- troducidas en los sobres, cada una
es del 50 %. Si a eso añadimos biar de cofre es de dos tercios. de estas posibilidades se dará con
que, en la mayoría de la gente, Los dos cofres no son equivalen- una probabilidad 1/2. Por consi-
modificar una decisión correcta pro- tes, como podía parecer a primera guiente, en el sobre cerrado habrá,
duce una sensación bastante más vista. Uno de ellos ha sido tomado en media, una cantidad 2000/2 +
dolorosa que mantenerse en una al azar entre tres cofres en prin- 500/2, es decir, 1250 euros. Si nos
incorrecta, no es de extrañar que cipio iguales (con igual probabili- quedamos con el sobre abierto ga-
casi todo el mundo se niegue a dad de contener el premio). El otro namos 1000 euros, pero si cam-
2/3
1/3
COFRE ABIERTO
POR MONTY
E
l mes pasado abordábamos, en uno de los sobres hay el doble Resumiendo: si el concursante en-
junto con otros problemas de de dinero que en el otro, pero no cuentra en el primer sobre una can-
probabilidad, la paradoja de sabemos nada acerca de cómo se tidad superior a 1000 P, entonces
los dos sobres. El presentador de ha elegido la cantidad encerrada en no debe cambiar, mientras que si
un concurso enseña dos sobres a un cada uno de ellos. encuentra una cantidad igual o in-
concursante. En uno de ellos ha in- Si, por ejemplo, sabemos que en ferior a 1000 P, deberá cambiar de
troducido cierta cantidad de dinero el concurso no se van a utilizar sobre. Como vemos, en el segundo
y en el otro el doble de dicha can- céntimos de euro y obtenemos 99 P sobre puede haber 2x o x/2, pero
tidad. El concursante elige uno de en el primer sobre, podemos infe- las dos posibilidades tienen la misma
los dos sobres, lo abre y comprueba rir inmediatamente que en el se- probabilidad sólo en el caso en que
que hay 100 euros. El presentador gundo sobre habrá 198 P, ya que x sea igual o inferior a 1000 P y
le ofrece ahora la posibilidad de no puede contener 49,5 P. Cuando par. Si x es impar, entonces la po-
cambiar de sobre. ¿Cuál es la me- no conocemos cómo se han ele- sibilidad 2x tiene probabilidad 1 y
jor estrategia para el concursante? gido las cantidades depositadas en la posibilidad x/2 tiene probabili-
Un argumento muy simple nos los sobres, nada puede indicarnos dad nula. Por último, si x es ma-
indica que el concursante debe cam- si una de las dos posibilidades es yor que 1000 P (y necesariamente
biar de sobre. En efecto, en el so- más probable que la otra, de modo par), entonces la posibilidad x/2 se
bre cerrado puede haber o bien que lo más sensato es considerar da con probabilidad 1 y la posibi-
200 euros o bien 50. Si cada una que cada una tiene una probabili- lidad 2x no se da nunca.
de estas posibilidades es igual de dad 1/2 de ocurrir. Sin embargo, ¿Puede haber un procedimiento
probable, entonces el valor medio se puede demostrar que la suposi- de elección de las cantidades en el
del dinero contenido en el sobre ción es incorrecta, cualquiera que que, para cualquier x, las dos po-
cerrado es (200 + 50)/2 = 125, que sea el procedimiento seguido para sibilidades, 2x y x/2, se den con
es superior a 100 euros. El argu- elegir las cantidades depositadas en probabilidad 1/2? En un procedi-
mento es válido cualquiera que sea los sobres. Vamos a ver primero miento de este tipo el 100 tendría
la cantidad encontrada en el pri- un ejemplo que nos ayudará a en- que ser igual de probable que el
mer sobre. Si esa cantidad es x, tender el problema. 50 y el 200, y, a su vez, igual de
en el segundo sobre puede haber Imaginemos que las cantidades probable que el 25 y el 400, y así
2x o x/2; si ambas posibilidades se depositadas en los sobres se eligen sucesivamente. En otras palabras,
dan con la misma probabilidad, el de la siguiente forma: se toma al todos los números de la secuencia
valor medio del dinero contenido azar una cantidad entera (sin de- infinita: ..., x/8, x/4, x/2, x, 2x, 4x,
en el segundo sobre será (2x + cimales) de euros entre 0 y 1000 P. 8x,... tendrían que aparecer con la
+ x/2)/2 = 5x/4, que es mayor que x. Se introduce en un sobre dicha misma probabilidad. Pero no existe
Por tanto, cambiar de sobre es siem- cantidad y en el otro el doble. Su- un procedimiento capaz de extraer
pre ventajoso. Resulta innecesario pongamos que el concursante co- números de una secuencia infinita
entonces mirar el contenido del pri- noce el procedimiento descrito. Si con igual probabilidad. Por eso, el
mer sobre, ya que la decisión correc- en el primer sobre encuentra una argumento que dábamos al princi-
ta es siempre cambiar. Pero esta cantidad superior a 1000 P, es evi- pio del artículo es incorrecto no
conclusión es absurda, puesto que dente que no debe cambiar de so- sólo para ciertos procedimientos de
el mismo argumento se podría apli- bre. Si encuentra una cantidad x elección de las cantidades, sino para
car una y otra vez, sin abrir los igual o inferior a 1000 P y par, cualquier procedimiento imaginable.
sobres, y nos aconsejaría cambiar entonces en el otro sobre puede ha- Pero, ¿qué ocurre cuando el con-
de uno a otro, con la disparatada ber o bien 2x o bien x/2; ambas cursante desconoce por completo
pretensión de aumentar el valor posibilidades se dan con probabi- el procedimiento seguido para ele-
medio de nuestra posible ganancia lidad 1/2. Se trata en este caso de gir las cantidades de los sobres?
cada vez que cambiamos de sobre. una situación similar a la descrita ¿No hemos de suponer que las dos
¿Dónde reside el error del argu- al principio del artículo y la con- posibilidades, 2x y x/2, son igual-
mento expuesto? El error consiste clusión es la misma: el concursante mente probables? ¿Por qué habría
en suponer que las dos posibles debe cambiar de sobre. de ser más probable una que otra?
cantidades para el segundo sobre, Finalmente, si encuentra una can- Lo que sabemos es que la proba-
200 o 50 euros, se dan con la mis- tidad inferior a 1000 P e impar, en bilidad de cada una de esas posi-
ma probabilidad. En principio pa- el segundo sobre tiene que haber el bilidades depende de la cantidad
rece una suposición razonable, puesto doble de dicha cantidad; por tanto, encontrada en el primer sobre, aun-
que lo único que sabemos es que lo más conveniente será cambiar. que el concursante no puede cal-
Paradojas democráticas
E
n un congreso de teoría de tonces preferirá a Inés antes que La confusión se apodera de los
juegos oí una charla sobre a Carolina. Esta propiedad se llama alumnos.
la votación para elegir la transitividad y permite asociar a Nuestra desorientada clase ha sido
capital de la Alemania reunificada cada estudiante un orden de pre- víctima de la llamada paradoja de
y cómo el resultado habría sido ferencia. En nuestro ejemplo, di- Condorcet, en honor de Antoine de
distinto si se hubiera utilizado otro cho orden sería Inés, Diego, Caritat Condorcet, que estudió el
método de votación. Más tarde, Carolina. Lo indicaremos con la problema a finales del siglo XVIII
Raúl Toral, de la Universidad de notación I > D > C. Supongamos que con la intención de encontrar el ta-
las Islas Baleares, me envió un en nuestra clase 21 alumnos tie- maño óptimo de los jurados que
capítulo de un pequeño libro de nen como orden de preferencia I> instauraría la revolución francesa.
Héctor Antoñana, La Danza de los > C > D, 3 alumnos tienen el orden La paradoja advierte, en pocas pa-
Números, que trataba de la para- C > I > D, 4 alumnos el C > D > I, 16 labras, que la transitividad de las
doja de Condorcet. Contaba his- alumnos el D > C > I y, finalmente, preferencias de cada individuo no
torias curiosas sobre cómo el mé- 5 alumnos tienen el orden D > I > C tiene por qué dar lugar a transiti-
todo de votación puede influir en (obsérvese que, en este ejemplo vidad en las preferencias de un co-
el resultado. Algunas se referían a concreto, ningún alumno tiene el lectivo. En efecto, que una mayoría
asuntos de cierta relevancia, como orden I > D > C). Estas preferencias de la clase prefiera a Inés antes
el caso de la capitalidad alemana, están representadas en la figura. que a Carolina y a Carolina antes
pero parecía que no eran más que Si se elige al delegado por me- que a Diego no conduce necesa-
casos singulares, poco útiles para dio de una votación única, y si riamente a que Inés sea preferida
reflexionar acerca de las limita- cada alumno vota a su candidato mayoritariamente sobre Diego. Se
ciones de la democracia. preferido, Inés obtendrá 21 votos, puede formar así un ciclo en las
Sin embargo, esta impresión ha Diego otros 21 (16 + 5) y Carolina preferencias colectivas, como en el
cambiado al indagar más sobre el sólo 7 votos (4 + 3). Para romper caso de nuestro ejemplo.
tema. Políticos y organizaciones, el empate entre Inés y Diego po- La paradoja de Condorcet no se
especialmente en Estados Unidos, demos hacer una nueva votación. produce siempre. Por ejemplo, si
están tratando de abrir el debate Si todos los alumnos votan al can- en nuestra clase eliminamos a los
sobre los procedimientos de vota- didato que prefieren entre los dos cinco votantes cuyas preferencias
ción en las elecciones al senado y que quedan en esta segunda vuelta, son D > I > C, entonces las vota-
a los ayuntamientos, y defienden entonces Diego ganará con 25 vo- ciones “cara a cara” tendrían los
determinados métodos, como la lla- tos (4 + 16 + 5) frente a 24 (21 + 3) siguientes resultados: Carolina ob-
mada votación aprobatoria o el de Inés. tendría 28 votos (21 + 3 + 4) frente
método Condorcet. Incluso ha ha- Sin embargo, cuando van a nom- a 16 de Diego. Inés, con 24 vo-
bido proposiciones de ley al res- brar a Diego delegado de la clase, tos (21 + 3), también vencería a
pecto, debatidas pero no aproba- un seguidor de Carolina pide que Diego con 20 (4 + 16). Y, final-
das, en algunos estados. levanten la mano los alumnos que mente, Carolina derrotaría a Inés
De modo que lo que comenzó prefieren a Carolina antes que a con 23 votos (3 + 4 + 16) frente a
como un juego matemático ha re- Diego. Para sorpresa de todos, 21. En este caso Carolina es pre-
sultado tener más trascendencia de 28 (21 + 3 + 4) alzan con decisión ferida a los otros dos candidatos.
lo que parecía inicialmente. Veamos su mano, frente a sólo 21 (16 + 5) Decimos entonces que Carolina es
cuál es la matemática que hay que prefieren a Diego. Cuando en una ganadora Condorcet. La exis-
detrás de una simple votación. la clase comienza extenderse la tencia de la paradoja de Condorcet
Supongamos que una clase con idea de que es absurdo tener como es equivalente a que no exista
49 alumnos debe elegir a su de- delegado a Diego cuando sólo una ningún ganador Condorcet.
legado o representante. Hay tres minoría lo prefiere a Carolina, y El sistema de enfrentar los can-
candidatos, Inés, Diego y Carolina. se está a punto de nombrar a ésta didatos por pares y quedarse con
Cada estudiante tiene sus propias delegada de la clase, un seguidor el ganador Condorcet es uno de los
predilecciones. Una suposición bá- de Inés pregunta de nuevo: ¿Quién varios métodos posibles de elec-
sica, y bastante razonable, de la prefiere a Inés antes que a Carolina? ción de un candidato. Como he-
teoría matemática de la votación Se cuentan las manos levantadas mos visto, de vez en cuando falla,
afirma que si un estudiante pre- y resulta que 26 (21 + 5) alumnos puesto que ninguno de los candi-
fiere a Inés antes que a Diego, y prefieren a Inés, frente a 23 (3 + 4 + datos es capaz de derrotar al resto.
a Diego antes que a Carolina, en- + 16) que se quedarían con Carolina. Cuando esto ocurre, el método de
Ventajas engañosas
¿Q ué diría usted si en un
juego de azar le ofrecie-
ran aumentar las proba-
bilidades de ganar en cada turno?
1
2
3
4
67
66
65
64
cer turno esa ganancia se can-
cela y, finalmente, en el cuarto
volvemos a ganar un euro.
Si la moneda no está trucada,
6 62
Probablemente pensaría que su 7 61
es decir, si p es 1/2, el jugador
oponente había perdido el juicio. 8 60 no tiene ninguna ventaja ni des-
Sin embargo, en ocasiones, lo que 16 15 14 13 11 10 9 59 58 57 55 54 53 52
ventaja: el juego es justo y no
en principio parece ventajoso puede hay una mayor tendencia a ga-
ser incluso desfavorable. Recor- nar o a perder. Pero ¿qué ocu-
demos, por ejemplo, las reglas 18 19 20 21 23 24 25 43 44 45 47 48 49 50 rre si modificamos p? ¿Qué es
26 42
del juego del parchís. Sacar un 27 41 más beneficioso para el jugador,
seis en el dado es muy venta- 28 40 que p aumente o que disminuya?
joso, puesto que avanzamos el 30 38
Un modo de encontrar la res-
mayor número de casillas y además 31 37 puesta es realizar una simulación
repetimos tirada. Existe, eso sí, 32 36 por ordenador del juego para dis-
33 35
una regla, que podríamos llamar tintos valores de la probabilidad
“de compensación”, según la cual 1. En el parchís tres seises nos “de- p. Pero también es posible en-
si se saca seis tres veces conse- vuelven a casa”. ¿Merece la pena ju- contrar la solución mediante un
cutivas la última ficha movida gar con un dado trucado en el que el argumento matemático. Para ello
vuelve a casa. Si alguien nos seis sale con mayor probabilidad? se requieren algunos conocimientos
ofrece jugar al parchís con un básicos de matemáticas y un poco
dado trucado, en el que el seis tiene una probabili- de reflexión. En el recuadro se describe este argu-
dad de salir mayor de lo habitual, ¿deberíamos acep- mento para los lectores interesados. El resultado fi-
tar la oferta, o será preferible jugar con un dado nor- nal se puede ver en la gráfica, en la que se mues-
mal? Responder a esta pregunta es bastante complicado. tra la ganancia media en cada turno en función de
Más adelante haremos un análisis parcial del pro- p. Como cabría esperar, el juego es justo si p = 1/2.
blema. Veamos antes un juego más simple en el que Lo interesante es que, para p entre 0 y 1/2, la ga-
aumentar las probabilidades de ganar en cada turno nancia media es positiva, es decir, el juego es ga-
da lugar a una disminución de las ganancias. nador, mientras que para p entre 1/2 y 1 es perde-
Christian van den Broeck y Bart Cleuren, físicos dor. Es decir, si comenzamos con el juego justo,
del Centro Universitario de Limburg, en Bélgica, es- p = 1/2, y aumentamos la probabilidad p de ganar en
tudian juegos de este tipo y sistemas físicos y quí- cada turno, convertimos al juego en perdedor, mien-
micos relacionados con ellos, como un conjunto de tras que si disminuimos la probabilidad de ganar en
partículas que, al ser empujadas en un sentido, se cada turno, hacemos que el juego sea ganador. Tenemos
mueven en el contrario. Ellos las llaman donkey par- por tanto un claro ejemplo de “juego burro”, en el
ticles, es decir, “partículas burro”, aludiendo a la cos- que aumentar p es una “ventaja engañosa”.
tumbre que estos tozudos animales tienen de moverse Volvamos a la pregunta de partida acerca de las
siempre en contra de la fuerza que se ejerce sobre ventajas de un dado trucado en el parchís. Hacer un
ellos. Por extensión, los juegos en los que las ga- análisis completo del juego es muy complicado, ya
nancias disminuyen cuando se aumentan las proba- que habría que tener en cuenta la probabilidad de
bilidades de ganar en cada turno se llaman donkey obtener un 5 para sacar fichas de casa, y detalles de
games o “juegos burro”. este tipo. Para encontrar una respuesta al menos apro-
Veamos el más simple de esos juegos burro, es- ximada he simplificado bastante el problema. Considero
trechamente relacionado con la regla del parchís que un juego parecido al de Van den Broeck y Cleuren:
hemos mencionado antes. Se juega con una moneda se lanza un dado en el que la probabilidad de que
en la que sale CARA con probabilidad p y CRUZ salga un seis es p y la probabilidad de que salga
con probabilidad 1 – p. Si al lanzar la moneda sale otro número, del uno al cinco, es (1 – p)/5. Una fi-
CARA, entonces el jugador gana un euro. Si sale cha avanza tantas casillas como marque el dado.
CRUZ, lo pierde. Pero si sale el mismo resultado Cuando sale un seis tres veces seguidas la ficha re-
dos veces seguidas, se cancela la ganancia o pérdida trocede 36 casillas (el número de casillas de “casa”
anterior. Por ejemplo, si obtenemos CRUZ-CARA- a “meta” en el parchís es 72, por eso la posición
CARA-CARA la ganancia final será cero, ya que pri- media de una ficha será, aproximadamente, 36). Al
mero perdemos un euro, luego lo ganamos, en el ter- calcular el avance medio en una tirada resulta la
E
10
se compran y venden cio de opción y, a diferen-
acciones, es decir, par- cia de los futuros, el com-
ticipaciones en el capital de 5 prador debe pagar al vendedor
las empresas, sino que, desde GANANCIA una cierta cantidad, una prima
hace unas cuantas décadas, que se pacta entre los dos
0
se intercambian además pro- contratantes. En este caso,
ductos derivados, de los cua- en la fecha de vencimiento
les los más conocidos son -5
el comprador no tiene obli-
probablemente los contratos gación de comprar el sub-
de futuros y de opciones. Este yacente. Por lo tanto, si el
mes vamos a presentar un jue- -10 precio de mercado del sub-
go que reproduce este mer- 5 10 15 20 25 yacente es inferior al precio
cado. Se debe a David Epstein, VALOR DEL SUBYACENTE EN LA FECHA DE VENCIMIENTO de opción, el comprador de
un alumno del conocido ex- la opción no la ejecutará y
perto en análisis financieros 1. Ganancia para el comprador de diferentes con- habrá perdido la prima. Pero
tratos en función del valor del subyacente: en azul,
Paul Wilmott. Pero veamos si el precio del subyacente
un futuro a 15, en rojo una opción de compra
antes en qué consisten esos (call) a 12 y con una prima de 4, y en verde una es mayor que el precio de
productos derivados. opción de venta (put) a 16 con una prima de 2 opción, entonces el com-
Un contrato de futuro es prador ejercerá la opción de
un acuerdo entre dos indi- compra y su ganancia en la
viduos por el cual uno de ellos (el comprador) se transacción será la diferencia entre el valor del sub-
compromete a comprar algo en una determinada fe- yacente y el precio de opción. La ganancia total será
cha futura al otro individuo (el vendedor) y a un entonces el valor del subyacente menos el precio de
precio pactado en el contrato, que se llama precio opción menos la prima, tal y como se muestra en la
de futuro. Es decir, un contrato de futuro no es más curva roja de figura 1 para un ejemplo de opción a
que una venta aplazada, en la que el precio se es- 12 con una prima de 4.
tablece en el momento de realizar el contrato pero En la opción de venta (put) ocurre al contrario. El
la venta no se completa hasta la fecha de venci- comprador de la opción adquiere, a cambio de la
miento. Lo que se va a comprar o vender se llama prima, la opción de vender el subyacente. La ga-
activo subyacente, y puede tratarse de acciones que nancia del comprador de la opción es ahora mayor
cotizan en bolsa, divisas, oro o incluso naranjas. cuanto menor sea el precio del subyacente, como in-
Siempre se trata de cosas que tienen un precio en dica la curva verde de la figura 1, que representa la
algún mercado, ya sea en la bolsa, en el mercado de ganancia del comprador de una opción de venta a
divisas o en el de cítricos, pero este precio sufre va- 16 con una prima de 2.
riaciones en principio impredecibles. El futuro es por Veamos ahora el juego de Epstein. Para jugar sólo
tanto una apuesta: si en la fecha de vencimiento, el hace falta un dado normal, que marcará el precio del
precio del subyacente en el mercado es inferior al subyacente, y unas cuantas cuartillas y bolígrafos. En
precio de futuro, entonces el comprador pierde, por- la versión original, uno de los jugadores debe ejer-
que está obligado a comprar a un precio superior al cer el papel de organizador: decide cuántos turnos
del mercado. Si el precio del subyacente es alto y habrá en el juego, la duración de los mismos, el tipo
supera al precio de futuro, entonces el que gana es de contratos y el precio de las opciones. Actúa tam-
el comprador. En la figura 1, la curva azul repre- bién como árbitro de las transacciones y como “ani-
senta la ganancia del comprador de un futuro a 15 mador” del mercado cuando éste presenta poca acti-
en función del precio del subyacente. La ganancia vidad. Si embargo, es también posible prescindir del
del vendedor es la misma cambiada de signo. organizador si los jugadores se ponen de acuerdo al
Los contratos de opciones pueden ser de dos tipos: principio de la partida acerca de todas estas cues-
opciones de compra (call) y opciones de venta (put). tiones. Un turno consiste en lanzar el dado y a con-
Una opción de compra es un contrato por el cual un tinuación realizar transacciones entre los jugadores
individuo (el comprador de la opción) adquiere la op- durante el tiempo establecido. Cada jugador tiene una
ción de comprarle algo (el activo subyacente) a otro tabla en donde se anotan las transacciones realiza-
(el vendedor de la opción) por un precio y en una das. Una vez que dos jugadores acuerdan una tran-
determinada fecha acordados en el contrato. Ahora el sacción, anotan en su tabla lo siguiente:
que comprar y el otro que vender cada uno de esos CALL 12 VENDER 10 2 17 - 12 = 5 2 - 5 = -3 -3 × 10 = -30
un acuerdo de compra, otro tiene que rellenar una PUT 12 VENDER 5 3 0 3-0=3 3 × 5 = 15
casilla con la orden de venta correspondiente. De FUTURO 14 VENDER 10 0 17 - 14 = 3 0 - 3 = -3 -3 × 10 = -30
este modo se realizan las transacciones. No hay lí- CALL 12 COMPRAR 10 2 17 - 12 = 5 5-2=3 3 × 10 = 30
mite para el número de contratos y la única forma CALL 12 VENDER 10 3 17 - 12 = 5 3 - 5 = -2 -2 × 10 = -20
de “deshacerse” de ellos es realizar una nueva ope- GANANCIA TOTAL -5
n la sección del pasado mes cada par de tiradas, obtenemos un ción de Claude Shannon, a la que
E de abril propuse a los lec- bit sin sesgar sólo si el resultado es hemos dedicado ya algunos artícu-
tores el siguiente problema: cara-cruz o cruz-cara. La probabili- los (véanse los Juegos Matemáticos
¿es posible diseñar un juego de dad de cada uno de estos resultados de agosto y septiembre de 2001).
azar equitativo utilizando una mo- es p(1 – p) y la probabilidad de que De hecho, más que una ley de con-
neda trucada, aun sin conocer las aparezca uno u otro es 2p(1 – p). servación de la incertidumbre, se
probabilidades de que salga cara o Por tanto, el número medio de bits trata de una ley de conservación de
cruz al lanzarla? Von Neumann sin sesgo que obtendremos después la información, ya que información
enunció este problema en 1957; le de 2N tiradas será Nbits = N[2p(1 – p)]. e incertidumbre son equivalentes
dio una solución que ya era cono- Podemos definir la “eficiencia”, E, en la teoría de Shannon.
cida popularmente y que me han he- del método como el número de bits Aunque parezca una perogrullada,
cho llegar varios lectores. Lanzamos sin sesgar que conseguimos en me- una serie de, digamos, 1000 bits
dos veces la moneda: si sale cara- dia por cada lanzamiento de moneda, sin sesgo contiene exactamente 1000
cruz, entonces gana un jugador; si es decir: bits de información; una de 1000
sale cruz-cara, gana el otro; final- bits sesgados, en cambio, contendrá
N
mente, si sale cara-cara o cruz-cruz E = bits =p(1– p ). menos. Un ejemplo límite sería una
se repite el doble lanzamiento. Las 2N serie en donde todos los bits fue-
dos posibilidades cara-cruz y cruz- La curva azul de la figura 1 re- sen iguales a cero o a uno, cuyo
cara son evidentemente simétricas presenta esta eficiencia, que es muy contenido informativo es práctica-
y por tanto tienen la misma proba- baja cuando p se acerca a cero o a mente nulo. Shannon, encontró la
bilidad de ocurrir, se haya trucado uno. La razón es que, cuando la mo- siguiente fórmula matemática para
como se haya trucado la moneda. neda está tan cargada que apenas calcular la información contenida en
Von Neumann enunció el pro- sale cruz, será muy difícil conse- una serie de N bits sesgados, en la
blema relacionándolo con la gene- guir bits que no estén sesgados: no que el uno aparece con probabili-
ración de bits sin sesgo. Recordemos se puede obtener incertidumbre a dad p y el cero con probabilidad
que un bit puede tomar sólo dos partir de algo que es prácticamente 1 – p:
valores, 0 y 1. Una moneda se puede determinista. Parece como si hubiera
considerar como un generador de una “ley de conservación de la in- I = –N [ p log2 p + (1– p )log2 (1– p )].
bits si asociamos, por ejemplo, un certidumbre”, parecida a la ley de
0 a cara y un 1 a cruz. Si la mo- la conservación de la energía. De Según esta fórmula, la informa-
neda está trucada, es decir, si la pro- hecho, puede formularse esta ley ción es nula si p es cero o uno, es
babilidad de que salga cara es p, con precisión matemática, y dicha decir, si en la serie no hay incerti-
siendo p distinto de 1/2, entonces formulación constituye una de las dumbre alguna, mientras que es má-
los bits generados tendrán un cierto bases de la teoría de la informa- xima si p es 1/2, caso en que la in-
sesgo: la fracción de unos formación es igual al tamaño
en la serie generada por la 1 N de la serie.
moneda será aproximada- ¿Cómo se aplica la teoría
mente igual a p si la lanza- 0,8 de la información al proble-
mos un número muy grande ma de la generación de bits
de veces. El problema de con- sin sesgo con la moneda tru-
EFICIENCIA
0,6
seguir un juego equitativo a cada? Nuestra moneda ge-
partir de una moneda trucada nera una serie de bits con
0,4
es entonces equivalente al de un contenido informativo
conseguir bits sin sesgo a dado por la fórmula de Shan-
partir de bits sesgados. 0,2 non. Por otro lado, una sim-
La solución expuesta, aun- ple manipulación de la serie
que correcta, es bastante ine- 0 no puede crear nueva infor-
ficiente. Supongamos que lan- 0 0,2 0,4 0,6 0,8 1 mación. Por tanto, con N ti-
zamos la moneda 2N veces PROBABILIDAD (p ) radas de la moneda podre-
(recordemos que el número 1. La eficiencia del método de las parejas (en azul) mos obtener, como máximo,
de lanzamientos ha de ser par). y del método de los grupos de cuatro (en rojo). En I bits aleatorios. Tenemos
¿Cuántos bits sin sesgo con- verde se puede ver la eficiencia máxima dada por por tanto un valor máximo
seguiremos, en media? De la teoría de la información para la eficiencia:
28,7
alcance la eficiencia máxima? 0,1 0,15 0,2 curvas difieren bastante para
Un método más eficiente 60 valores altos de p, debido a
IA
Repartir escasez
licia y Bruno están de enhorabuena. Un tío le- entre los N individuos, es decir, asignar una cantidad
400
300
20
200
100
0 7,5
1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10
2. A la izquierda, en azul, se representa el número de curva azul es el tiempo que tardan los que han elegido
coches que optan por el tramo ACB cada día, que son ACD o ADB, la curva roja el tiempo de los que van por
los mismos que optan por el ADB; la curva roja es el ACDB y la curva verde el tiempo medio de todos los
número de coches que escogen ACDB. A la derecha: la conductores
ste mes vamos a analizar un falsa se encuentra entre las mone- mación posible”, conviene analizar
94 v CreNcre,
INvrsrrcecróN noviembre,
2002
dad de la secuenciay del número la serie; sólo le interesa el típo de
de posibilidades,y el resultado lo s e cu e n ci a .
he dibujado en rojo en la misma fi- En un sistemafísico, llamamos es- @ é @
gura. La curva roja tiene su má- tados microscópicos a las secuen-
ximo en n = 90. Este resultadoera
esperable: puesto que la probabiti-
cias concretasy estadosmacroscó-
picos a los tipos de secuencias.La
* h
é .s#
dad de que salga cara es 0,45, en probabilidad de que se dé un estado
un número grandede tiradasdeberán microscópico es mayor cuanto me-
salir un 45 7o de caras y tn 55 %ode nor es su energía. Pero esa proba- wffiffi#**ffiffiffiffi
cruces,y eI 45Vo de 200 es 90. bilidad es la de un estado mi-
Lo interesante es que las se- croscópico concreto, igual que la
cuencias concretasque constan de curva verde de la figura I es la pro- @ @@ -@
90 caras y 110 cruces son mucho babilidad de una secuenciaconcreta. r h é a
menos probables que la secuencia Al pasar al mundo macroscópico " -ó
con 200 cruces, como se ve en la las cosascambianradicalmente,igual ó&
curva verde. La probabilidad de cada que en el ejemplo de la moneda las
-@ d&.& @
tipo, es decir, la curva roja, es el probabilidades de los tipos de se-
resultado de la combinación de las cuencia difieren mucho de las pro-
@
otras dos curvas. A finales del si- b a b i l i d a d e sd e l a s s e c u e n c i a sc o n -
glo XIx, el físico austríaco Ludwig cretas.Esto es debido a que también 2. Un gas cuyas moléculas pueden
B oltzmann utlIizó esta combinación un estadomacroscópicopuede darse estar en el recinto superior o en el
para resolver uno de los enigmas en forma de un gran número de es- inferior. En el inferior la energía es
más profundos de la física: conci- tados microscópicos.En un sistema menor pero, debido al efecto de la
liar el comportamiento del mundo físico, el equivalente ala curva azul entropía,el estadomacroscópicomás
probablees aquelen el que unafrac-
macroscópico con las leyes que ri- de la figura 1 es el número de es-
ción apreciable de moléculas se
gen el mundo microscópico de los tadosmicroscópicoscompatiblescon
encuentrctn en el recinto superior
átomos y las moléculas. Cada uno un estado macroscópico dado.
de estosmundos se comporta de ma- Boltzmann demostróque la entropía,
nera diferente: en el microscópico una magnitud que había aparecido en el recinto superior. El valor con-
e l m o v i m i e n t on o c e s a .n o h a y i r i c - al estudiar gases y motores térmi- creto de esta fracción es el resulta-
ción, la energia no se pierde, no cos pero cuya natura),eza era alún do de la combinación de un factor
hay una flecha del tiempo que dis- misteriosa, estaba relacionada con energético y de un factor entró-
tinga el pasado del futuro; en el ese número de estados microscópi- p i c o , q u e s o n l o s a n á l o g o s a l a s
macroscópico, los cuerpos sufren cos compatibles. En concreto, la curvas verde y azul, respectivamente,
fuerzas de fricción y tienden a pa- entropía es proporcional al logaritmo de la figura 1. Los detalles mate-
rarse, la energía se disipa en forma de dicho número, y la importancia máticos, aunque no son muy com-
de calor inutilizable y hay infini- de esta relación matemática es tal plicados, van más allá de la inten-
dad de procesosirreversibles,como que se encuentra grabada sobre la ción de este artículo. Pero sí es
cuando se hace añicos una copa de tumba de Boltzmann en el cemen- interesante mencionar que, cuanto
cristal al caer al suelo. terio de Viena. menos pesadasson las moléculasy
Boltzmann se dio cuenta de que Pensemos,por ejemplo, en un gas m á s c a l i e n t e s e s t á n , m á s i m p o r -
l a d i f e r e n c i ae n t r e e l m u n d o m i - c o n t e n i d oe n u n r e c i p i e n t e .a s u tante es el factor entrópico y, por
croscópico y el macroscópico era vez dividido en dos por una pared tanto, las moléculastienden a estar
en realidad una diferencia "de mi- permeable. La energía es menor en repartidaspor igual en los dos re-
r a d a " .y q u e e s a d i f e r e n c i a a
. un tan el recinto inferior. Por lo tanto, cada cintos. Fíjense también que, si no
simple y sutil, podía explicar los molécula "prefeúrá" estar en esere- fuera por el factor entrópico, el es-
distintos comportamientos de cada cinto, igual que con nuestramoneda tado más probable sería aquel en el
uno de los mundos. Cuando mira- cada tirada "prefería" ser cruz en que todas las moléculas se encon-
mos el mundo microscópicovemos lugar de cara. Sin embargo, en una traríar en el recinto inferior, con la
el movimiento detallado de cada observación macroscópica no nos mínima energía posible. De hecho,
partícula que nos rodea, mientras interesa el comportamiento de cada así ocurre cuando la temperatura es
que cuando miramos el macroscó- una de las moléculas sino sólo el de menos 273 grados centígrados.
pico sólo vemos los comportamientos comportamiento colectivo, que en Si no fuera por la entropía,las molé-
colectivos. este caso podría ser la fracción de culas que componen el aire que
Estos dos tipos de "mirada" se moléculasque haya en cadarecinto. respiramos se precipitarían al sue-
dan también en nuestro ejemplo de El problema del gas es entonces lo. La entropía también explica por
l a s s e c u e n c i a s .U n j u g a d o r " m i - idéntico al problema de la moneda, q u é m o l é c u l a s m u y l i g e r a s . c o m o
croscópico" apostaráa qué secuen- y de la misma manera que lo hici- las de hidrógeno, no pueden ser re-
cia concreta saldrá en 200 tiradas mos con las 200 tiradas, se puede tenidas por el campo gravitatorio
de una moneda. Por el contrario, demostrar que en el estado ma- terrestre y no forman parte de la
cópico"
uno "macros será el que croscópico más probable habrá una composición del aire.
apuesteal número total de caras de fracción apreciable de moléculas parr-km0@zenon.fis.ucm.es
INv¡srrc¡cróNy CrENcrA,
noviembre,
2002 95
JUEGOS MATEMÁTICOS
Juan M. R. Parrondo
El número de oro
l número de oro, φ = (1 + √5)/2 = si realmente es o no más placen-
E = 1,6180339887499..., es uno
de los protagonistas indis-
cutibles de ese misterioso espacio
tero, y, en caso de serlo, cuánto de
esa sensación es producto de nues-
tra cultura. Sin embargo, en mi opi-
1
en donde se encuentran matemáti- nión, hay una cualidad de los rectán-
cas, arte y ciencia. Es un número gulos áureos que se puede apreciar
singular desde el punto de vista en la fachada de los templos grie-
matemático pero también estético, gos. Se trata de una especie de re-
al menos según el canon iniciado ferencia a alguna medida humana
por los griegos. Los rectángulos de que hace que el edificio, aun siendo φ
oro o áureos, es decir, rectángulos monumental, se muestre asequible, 1. Si de un rectángulo áureo, de la-
en los que el cociente entre el lado cercano. Quizás esta sensación pro- dos 1 y φ , retiramos el cuadrado
mayor y menor es el número de venga no tanto de la forma del blanco de lado 1, el rectángulo re-
oro, se hallan por doquier en el rectángulo, como de que su pro- sultante (en verde) es también áureo
Partenón, en templos y construc- porción se repita en todas las es-
ciones griegas y en la composición calas, desde los capiteles y los al-
de edificios, cuadros y fotografías tares hasta la planta del templo y se suele escribir x = [a0; a1, a2,
a lo largo de toda la historia del completo. En cualquier caso, creo a3,...]. El desarrollo en fracciones
arte. que cualquiera que se haya aproxi- continuas es una forma de repre-
Los rectángulos de oro están ca- mado a uno de estos templos habrá sentar números tan válida como nues-
racterizados por una interesante pro- podido percibir esta combinación de tro sistema decimal o como la re-
piedad de autosimilaridad. Si de un grandeza y accesibilidad. presentación binaria que utilizan los
rectángulo áureo extraemos un cua- Todas estas cuestiones han sido ordenadores. Todas ellas son for-
drado cuyo lado coincida con el lado el objeto, e incluso la obsesión, de mas de escribir números. En algu-
menor, el rectángulo que queda es muchos y voluminosos estudios que nas de ellas ciertas operaciones son
también áureo, como ocurre con el entrecruzan matemáticas e historia más sencillas que en otras. Por ejem-
rectángulo verde de la figura 1. del arte. En Internet pueden tam- plo, la suma es fácil de realizar en
Podríamos extraer un nuevo cua- bién encontrar cientos de páginas el sistema decimal o en el binario.
drado y quedarnos con un rectán- dedicadas a este tema. Nosotros va- En el decimal es muy sencillo mul-
gulo áureo más pequeño, y así su- mos a ser más modestos y nos cen- tiplicar o dividir por 10. Sin em-
cesivamente, encontrando siempre traremos en algunas de las propie- bargo, en los desarrollos en frac-
rectángulos áureos. dades matemáticas y geométricas ciones continuas es muy simple, por
Numéricamente, esta autosimila- de φ. De la última de las ecuacio- ejemplo, hallar el inverso de un
ridad equivale a lo siguiente: nes anteriores, se deduce que el número. En efecto, el lector puede
número de oro puede escribirse de comprobar que, si x = [a0; a1, a2,
1 φ-1
= esta curiosa manera:
φ 1
1
La ecuación anterior puede tam- φ=
bién escribirse en la forma: 1
1+
1
1 1+
φ =1+
φ 1 +...
que nos indica que el desarrollo Esta forma de escribir un número
decimal del inverso del número de como quebrados encabalgados unos
oro es igual al desarrollo del pro- sobre otros se llama desarrollo en
pio número, es decir φ = 1,618033... fracciones continuas. En general,
y 1/φ = 1,618033... el desarrollo de cualquier número x
Pero, al margen de estas curiosi- es: 2. Construcción de un rectángulo áu-
dades matemáticas, ¿es este rec- 1 reo a partir de cuadrados cuyos la-
tángulo el “más placentero a la x = a0 + dos siguen la serie de números de
1
vista”, el más armonioso, como se a1 + Fibonacci: dos cuadrados de lado
supone que afirma el canon clásico? a + 1
2 1, otro de lado 2, otro de lado 3, 5,
Probablemente no se pueda saber a3 + ... 8, 13 y 21
Números y palabras
ara la mayoría de la gente los números y las pa- nes, como “el”, “de” o “que”, que aparecerán un gran
FRECUENCIA
misma frecuencia mientras que el plural “unos” sale 1000
42 veces y “unas” sólo 20. Lo mismo ocurre con otros
pronombres y adjetivos. Por ejemplo, “ese” sale 75
100
veces y “esa” 105, mientras que “esos” sale 30 y
“esas” sólo 11. “Otro” sale 106, “otra” 93 veces, “otros”
55 y “otras” 21. En los plurales las diferencias siem- 10
pre son bastante significativas. Se podría pensar que
es debido a que en castellano se toma el masculino 1
para plurales en donde hay tanto mujeres como varo- 1 10 100 1000 10.000 100.000
nes, pero, analizando las distintas apariciones de “otros” RANGO
y “otras”, por ejemplo, se puede comprobar que este
argumento no da cuenta de la diferencia. En mi opi- 2. Ley de Zipf para el Quijote. La línea roja es la ley
nión, una posible explicación se encuentra en el he- de potencia que mejor se ajusta a los datos (puntos
cho de que existe un gran número de sustantivos fe- azules), mientras que la línea verde es una ley de Zipf
“genuina” con exponente b = 1
meninos en castellano que se refieren a cualidades,
como “blancura” o “pereza”, y cuyo plural es inexis-
tente o muy raro. 100.000
Volviendo a la ley de Zipf, en la figura 1 pueden
ver la gráfica de la frecuencia en función del rango. 10.000
Los puntos azules son las frecuencias de cada palabra FRECUENCIA
en el texto y la línea roja es la recta que mejor se 1000
aproxima a los puntos: una ley de potencias con
a = 13.083 y b = 1,0086. El exponente b es muy cer- 100
cano a 1, de modo que podemos decir que la ley de
Zipf original se cumple con bastante aproximación en
10
la novela de García Márquez.
En la figura 2 podemos ver la ley de Zipf para Don
Quijote, en el que hay 22.941 tipos de palabras entre 1
las 381.222 que componen el texto. La línea roja re- 1 10 100 1000 10.000 100.000
presenta de nuevo la ley de potencias que mejor se RANGO
ajusta a los datos “experimentales” y en este caso es 3. La ley de Zipf para el original en inglés del Ulises
la función f = 142.271 r–1,2136, es decir, una ley de po- de Joyce
tencias con exponente b = 1,2136. El exponente se aleja
significativamente de 1, el exponente de la ley de Zipf
original, pero también podemos observar que no re- con a = 52.467 y exponente b = 1,0793, aunque se ob-
produce bien el comportamiento de las palabras más serva una desviación con respecto a la ley en las pa-
frecuentes. He dibujado en verde la ley de Zipf “ge- labras más frecuentes.
nuina”, es decir, con exponente b = 1, que mejor se Zipf introdujo su ley en 1949, en un libro titulado
ajusta a los datos y el resultado no es peor que el de El comportamiento humano y la ley del mínimo es-
la mejor ley de potencias. Lo que ocurre en este caso fuerzo. La razón de este título es que la ley puede de-
es que la ley de Zipf genuina se ajusta bien a los pun- rivarse suponiendo que el lenguaje natural se ha de-
tos con mayor frecuencia, pero se desvía de los pun- sarrollado de modo que transmita la mayor cantidad
tos con mayor rango y menor frecuencia. ¿Qué se puede de información con el menor número de palabras. Benoit
concluir entonces? Yo diría que ni la ley de Zipf ni Mandelbrot también realizó en 1951 una demostración
la de potencias se ajustan a los datos de El Quijote. similar. Sin embargo, ambas demostraciones implican
Aunque las palabras más frecuentes sí cumplen aqué- una relación entre el rango de la palabra y su longi-
lla, parece haber un número demasiado pequeño de tud, de modo que las palabras más frecuentes son las
palabras “raras”, es decir, de palabras que aparecen más cortas. Esta relación es cierta, como se ve en el
sólo una vez. Esta escasez hace que al ajustar una ley caso de Cien años de Soledad, cuyas palabras más fre-
de potencias, ésta se incline en exceso y no pueda dar cuentes son de una o dos sílabas, pero deja de ser
cuenta de modo preciso del comportamiento de las pa- cierta para palabras de mayor rango.
labras más frecuentes. Otra herramienta que sin duda atraerá al curioso por
Para ver la universalidad de la ley de Zipf, les pre- el lenguaje es la consulta del corpus diacrónico de la
sento el análisis del original en inglés del Ulises de Real Academia Española, que puede realizarse por
James Joyce. A pesar de ser una novela en donde hay Internet (www.rae.es, Consulta Banco de datos) y en
una mayor experimentación con el lenguaje, los datos el que se pueden buscar palabras y expresiones y ob-
se ajustan bastante bien a la ley de Zipf. Frecuencia servar su utilización desde el origen de nuestra lengua
y rango están relacionados por una ley de potencias hasta nuestros días.
n el último artículo de Juegos das las palabras del texto se orde- Existen algunas modificaciones de
1000
suma por una integral de la fun-
ción 1/r). El resultado es
100 N = V ln V
Vocabulario
En cada libro vemos cómo el vo- 25.000
cabulario va creciendo en función
del tamaño del texto. Finalmente, 20.000
la curva negra es la fórmula que
acabamos de deducir a partir de la
15.000
ley de Zipf. Observen que la fór-
mula nos da el tamaño a partir del
vocabulario, mientras que en la grá- 10.000
fica dibujamos la relación inversa,
es decir, el vocabulario en función 5000
del tamaño del texto. Sería desea-
ble despejar V en función de N en 0
la ecuación anterior, pero esto no 0 100.000 200.000 300.000 400.000
es posible y por lo tanto no dispo- Tamaño del texto
nemos de una fórmula sencilla y
compacta que nos diga el vocabu- 2. Cómo crece el vocabulario en tres conocidos textos en función
lario de un texto de tamaño dado. del tamaño o número total de palabras. La curva negra representa
Sin embargo, esto no es ningún pro- el resultado derivado a partir de la ley de Zipf
blema para el programa informá-
tico que he utilizado para dibujar
la curva negra de la figura 2 a par- rico es El Quijote, cuyo vocabula- tamaño del texto. En principio uno
tir de la fórmula N = V ln V. rio es menor del que se espera, es podría pensar que en un texto la
De nuevo, a pesar de que exis- decir, en la segunda parte de la fracción de palabras distintas, es de-
ten ciertas discrepancias, la fórmula novela aparecen menos palabras cir, el vocabulario dividido por el
nos ofrece una descripción aproxi- nuevas de las que predice la ley tamaño, es constante. Sin embargo,
mada de cómo aumenta el voca- de Zipf. no puede ser así porque, cuanto
bulario en cada texto. La novela Observen que el crecimiento del mayor es el texto, más difícil es
que más se aleja del resultado teó- vocabulario no es proporcional al encontrar palabras que no hayan
aparecido con anterioridad. De he-
cho, la fórmula del logaritmo ne-
periano tiene una propiedad que no
RANGO PALABRA FRECUENCIA LEY DE ZIPF pueden verificar los textos reales.
El vocabulario crece indefinidamen-
1 de 8684 16.019 te con el tamaño del texto, lo cual
es imposible porque el número to-
2 la 6110 8010 tal de palabras de una lengua, in-
3 que 4679 5340 cluyendo todas las variantes mor-
fológicas —plurales, conjugaciones
4 y 4147 4005 verbales, etc.— es finito. Quizás está
5 el 4054 3204 finitud en el léxico de la lengua es
lo que hace que el vocabulario de
6 en 3880 2670 El Quijote no alcance las predic-
7 a 3162 2288 ciones de la ley de Zipf. Algunos
investigadores han desarrollado fór-
8 los 2373 2002 mulas más complejas que tienen en
9 se 2142 1780
cuenta estas limitaciones y se adap-
tan a todo tipo de texto. Con ellas
10 con 1983 1602 deducen también relaciones entre
11 un 1785 1456 el vocabulario y el tamaño, utili-
zando técnicas matemáticas sofisti-
12 las 1535 1335 cadas. Como ven, la estadística es
capaz de encontrar y cuantificar re-
13 una 1505 1232
gularidades en algo tan humano
14 por 1465 16.019 como es el uso del lenguaje, e in-
cluso en su vertiente más personal
Palabras más frecuentes en Cien años de soledad y creativa: la literatura.
Fluctuaciones fatales
isponemos de un cultivo de no trucado.Cuantasmás veceslanza- individuo es portador de la misma.
bacterias que crece por di- mos el dado, más se acercarála frac- Por tanto, aunque la mutación sea
visión de cada uno de los ción de cincos a 1/6. No obstante, ventajosa, su éxito depende de la
individuos que lo forman. Supon- siempre habrá algunas desviaciones suerte que corra este único por-
gamos que, de un día para otro, cada con respecto a 1/6 (que no es otra tador de la mutacióny sus inme-
bacteria tiene una probabilidad 1/5 cosaque la probabilidadde que salga diatos descendientes. Podemos
de morir, una probabilidad 3/5 de un cinco). Estasdesviaciones ue- comprobarlo analizando el compor-
duplicarse y una probabilidad 1/5 len llamarse "fluctuaciones". tamiento de nuestra colonia. En la
de seguir viva sin reproducirse.Si Las fluctuaciones son menores figura se dibuja su tamaño en fun-
inicialmente hay 1000 bacteriasen cuanto mayor es el número de tira- ción del tiempo para diferentes si-
la colonia, aproximadamente 200 das del dado y, en el caso de la co- mulaciones hechas por ordenador.
morirán, 600 se duplicarán y 200 lonia, serán menores cuanto mayor D e l a s n u e v e s i m u l a c i o n e s ,s ó l o
se mantendrán vivas sin reprodu- sea la población de bacterias. Así, cinco prosperaron.mientrasque cua-
cirse. Al día siguiente tendremos, si inicialmente el cultivo dispone tro se extinguieron en los primeros
por tanto, 1400 bacteriasvivas. Es de 1000 bacterias, las fluctuaciones seis días. Observen que, en estos
decir, en media, la población crece no serán muy importantes: morirán primeros días, cualquiera de las
un 40 7o cada día: el segundo día unas 200 y se reproduciránunas 600. nueve corre el riesgo de extinguirse.
habrá 1960 individuos, el tercer día Las pequeñasdesviacionescon res- ¿Cuá1es la probabilidad de que,
2744, y así sucesivamente.La po- pecto a estos valores no cambiarán partiendo de un solo individuo, la
blación crece exponencialmente si demasiado el comportamiento del colonia se extinga? En otras pala-
nuestras suposicionesacerca de la cultivo, que crecerá, como hemos bras, si repetimos el experimento
r e p r o d u c c i ó ny m u e r t e s e s i g u e n visto, aproximadamenteen un 40 7o de la figura un gran número de ve-
manteniendo.En diez días,por ejem- cada día. En pocas palabras: en po- ces. ¿qué fracción de trayectorias
plo, la colonia alcanzaría casi los blaciones grandes, los valores me- acaba cayendo en el eje horizontal?
30 mil individuos y en doscientos dios son casi iguales a los valores El cálculo de esta probabilidad de
días llegaría hasta 1032.Este número reales. Por el contrario, en pobla- extinción es un problema muy com-
es demasiado grande para un cul- ciones pequeñas las fluctuaciones plicado a primera vista. Si en el
tivo real, lo cual indica que las su- pueden ser de vital importancia. primer día la colonia consta de un
posiciones no se pueden mantener ¿Qué ocurre si, inicialmente, dis- solo individuo, en el segundo se
durante todo el tiempo debido a ponemos de una única bacteria?Al habrá extinguido con probabilidad
que la competenciaentre las bac- día siguiente nos encontraremosque 1/5, seguirá con un solo individuo
terias por los nutrientes o simple- nuestro valioso y solitario individuo con probabilidad 1/5 o tendrá dos
mente por el espacio dentro del ha muerto con una probabilidad 1/5 con una probabilidad 3/5. En el ter-
cultivo hará sin duda disminuir las y se ha reproducido con una pro- cer día las posibilidades aumentan:
probabilidades de reproducción y babilidad 3/5. Si ha muerto, la co- la colonia puede ahora constar de
aumentar las de muerte. En conse- lonia se habrá extinguido irreme- cero hasta cuatro individuos. Para
cuencia, nuestro modelo simplifi- diablemente.Si se ha reproducido, calcular la probabilidad de cada una
cado sólo puede ser válido para po- podemos mantener la esperanzade de estasposibilidades hay que tener
blaciones pequeñas y para los que la colonia ctezca en los próxi- en cuenta todos los modos en que
primeros días de evolución de la co- mos días, aunque bien pueden es- cadapoblaciónpuedealcanzarse.Por
lonia. Aun así, su análisis revelará tos dos individuos morir al día si- ejemplo, 1a población de cuatro in-
algunos efectos interesantes. guiente, algo que ocurrirá con dividuos en el segundodía sólo puede
Como acabamosde ver, 1a pobla- p r o b a b i l i d a d I / 5 x l / 5 = l / 2 5 . E s alcanzarse si el patriarca se repro-
ción de la colonia de bacteriascrece, evidente que los primeros días de dujo en el primero y segundo día y
en media, día tras día. La indica- esta colonia mínima son bastante su vástago lo hizo en el segundo.
"en
ción media" es aquí muy rele- críticos.Los escasosindividuos que Eso ocurre con probabilidad 3/5 x
vante. "En media" significa que sólo la forman son los patriarcas de una x 3/5 x 3/5. La probabilidad de que
aproximadamente 1/5 de las bacte- familia que, sólo al alcanzarun cierto la colonia se extinga en el segundo
rias morirán de un día para otro y tamaño, estará libre de desaparecer día puede calcularse del mismo
sólo aproximadamente3/5 se repro- debido a "fluctuaciones fatales". Esto modo: o bien el patriarca muere el
ducirán, igual que sólo aproximada- es lo que probablemente ocurre en primer día (probabilidad 1/5), o bien
mente 1/6 de las veces obtenemos la evolución de las especies.Cuando sobrevive al primer día pero muere
un cinco cuando lanzamos un dado se produce una mutación, sólo un en el segundo (probabilidad 1/5 x
86 INvesrrc¡cróN
v Cr¡Ncre.abril. 2003
x 1/5) o bien se reproduce el pri-
mer día pero tanto é1 como su hijo
mueren en el segundo día (probabi-
lidad 3/5 x l/5 x 1/5). Por lo tanto,
la probabilidad de que la colonia se
extinga en el segundo día es
"(ur)-8- É"+)=#
o=f+f
en donde he colocado entre parén-
tesis las probabilidades de los even-
tos que ocurren en el segundo día, ...
¡-{'-r--f
por razonesque seránevidentesden-
tro de un momento.
Este modo de calcular la proba-
7ññ
bilidad de extinción se complica con-
g
siderablemente al añadir más días,
ya que el árbol de posibilidades se *t 600
()
va ramificando un día tras otro.
Existe, sin embargo,un método bas- fr 5oo
tante ingenioso para calcular la pro-
babilidad de extinción. Llamemos tr 400
q a esta probabilidad, es decir, a la )
probabilidad de que se extinga una z 3oo
colonia que inicialmente consta de
un solo individuo. ¿Cuál es la pro-
babilidad de que se extinga una co-
lonia que parte de dos individuos?
Como la "estirpe" de cada indivi-
duo no interacciona con la del otro 8 2 0
2 4 6 8 1 0 1 2 1 4 1 6 1
(no hay ni reproducción sexual ni
DfAS
competencia),la probabilidad de que
se extingan las dos estirpes será simulación por ordenador de la colonia de bacterias que se describe en er
q x q o qz (igual que la probabili- texto. De las nueve veces que se realizó la simulación, en cuatro ocasiones
dad de sacar un seis doble al tirar la colonia se extinguió y sólo en cinco contínuó creciendo exponencíal-
dos dados es l/6 x I/6). mente. En la ampliación de los primeros días puede yerse, en rojo y línea
Volvamos ahora a la colonia que discontínua, la trayectoria de las colonias extínguidas. sólo pueden verse
parte de un solo individuo. En su tres porque dos de las colonias se extinguieron en el segundo día y sus bre-
segundo día pueden haber ocurrido ves trayectorias coinciden
tres cosas: A) que el patriarca haya
muerto (probabilidad 1/5), B) que Ahora tenemos una ecuación bas- Observenque en el segundodía sólo
siga vivo sin reproducirse (proba- tante simple para q. Lo que en rea- se extingue 1/5. El resto, 2/15, lo
bilidad l/5) y C) que se haya re- lidad hemos hecho para llegar a esta hace en días sucesivos.
producido (probabilidad 3/5). Si nos ecuación es tomar las tres primeras Piensen ahora que la colonia de
situamos en este segundo día, ¿cuál ramas del árbol de posibilidades bacteriasque consta de un solo in-
es la probabilidad de extinción para del que hablábamos antes y darnos dividuo puede ser una nueva muta-
cada una de estas tres posibilida- cuenta de que cada una se puede ción naciente en la biosfera, el vi-
des?Para A es claramenteI puesto tratar como un nuevo árbol de po- rus solitario que inhalo antes de
que la colonia ya está extinta en el sibilidades.Fíjense que esta ecua- contraerla gripe e incluso un neutrón
segundo día. Para B, la probabili- ción es la misma que la anterior, que surge aI azar en un material ra-
dad de extinción es de nuevo a. Y pero sustituyendo los dos parénte- dioactivo y puede comenzar una
p a r a C . c o m o h e m o sv i s t o e n e l p á - sis por q y q2, respectivamente. reacción en cadena.En todos estos
rrafo anterior, la probabilidad de ex- La solución de la ecuación ante- casoslas fluctuacionesiniciales son
tinción es q2. La probabilidad 4 de rior es e = ll3 (q = I es también críticas. Pueden destruir la muta-
que se extinga la colonia inicial se solución, pero no tiene ningún sig- ción, la posibilidad de prolifera-
puede escribir entonces como una nificado ni interés en el problema). ción del virus o hacer que el efecto
suma que tenga en cuentaestastres Es decir, si hiciéramos un gran del neutrón no vaya más allá de unos
posibilidades: número de simulacionescon las oro- cuantosdestellosde radiación. Son
b a b i l i d a d e sd e m u e r t e y r . p r o á u . - sólo pequeños golpes de azar, pero
q=!*Iq+1q2 ción de nuestra colonia, un tercio capaces de cambiar por completo
c c 5 de ellas acabarían extinsuiéndose. el destino de toda la biosfera.
Ruidos reveladores
ntender a alguien que nos habla en una estación mayor cantidad de ruido, la información se perdería y
La paradoja de Simpson
Calda la Nueva
Mujeres
30%
Hombres
80%
Total
45%
rir susceptibilidades. El partido A ganó en Calda la Vieja Calda la Vieja 20% 75% 53%
y el B en la Nueva, con el consiguiente disgusto de
Arturo, líder comarcal del partido A, que siempre había
triunfado en los dos pueblos. Nuestro líder se dispuso En esta tabla se encuentra la esencia de la para-
a analizar los escrutinios y a comparar los de los dos doja. Los porcentajes por sectores son superiores en
pueblos, para tratar de encontrar en qué sectores se Calda la Nueva y, sin embargo, el total es inferior.
habían perdido o ganado votos y las razones de la de- Parece imposible que pueda ocurrir algo así, pero es-
rrota en Calda la Nueva. La comparación parecía en tos números son los que se obtienen del reparto de
principio sencilla, porque en los dos pueblos habían votos indicado en la primera tabla.
votado exactamente mil ciudadanos. Sin embargo, al La razón de este extraño comportamiento estriba en
político le esperaba alguna que otra sorpresa. que se están comparando porcentajes parciales de sec-
Arturo comenzó estudiando el voto masculino y el tores que no tienen el mismo tamaño. Si escribimos
femenino. En Calda la Nueva, su partido había obte- una tabla con la participación en cada pueblo y en
nido un 30 % del voto femenino y un 80 % en del mas- cada sector:
culino. No estaba nada mal, a pesar de haber perdido.
La sorpresa llegó cuando quiso comparar estos resul-
Participación Mujeres Hombres Total
tados con los del pueblo donde había ganado, Calda
la Vieja. Allí sólo había obtenido el 20 % del voto fe- Calda la Nueva 700 300 1000
menino y el 75 % del voto masculino. En los dos sec-
Calda la Vieja 400 600 1000
tores el porcentaje de votos en Calda la Nueva era su-
perior al de Calda la Vieja. Sin embargo, en este
último se había ganado y en el primero se había per- vemos que el voto femenino en Calda la Nueva ha
dido. ¿Cómo es esto posible? sido muy superior al masculino, lo que ha hecho pre-
Nuestro líder político está siendo víctima de la lla- valecer su opción mayoritaria, que era el partido B.
mada paradoja de Simpson, un fenómeno bastante co- Por el contrario, en Calda la Vieja son los hombres los
nocido en estadística. Veamos, a partir de los votos que han depositado más votos en la urna y, como lo
obtenidos por el partido A en cada pueblo, cómo es han hecho en un alto porcentaje al partido B, ha sido
posible que ocurra esta paradoja. En la siguiente ta- éste el ganador.
bla se muestran los votos de cada partido: La solución de la paradoja se hace aún más evi-
dente en la representación gráfica de la figura 1. Los
rectángulos representan el total de votos emitidos en
Partido A / Partido B Mujeres Hombres Total cada pueblo. Separamos los femeninos de los mas-
culinos con una línea verde vertical, y los que han
Calda la Nueva 210/490 240/60 450/550 sido para el partido A con líneas horizontales en cada
Calda la Vieja 80/320 450/150 530/470 sector (rojas en Calda la Nueva y azules en la Vieja).
El porcentaje o fracción de votos en cada sector y en
cada pueblo viene dado por la altura que alcanza la
Como ya hemos dicho, el total de votos en cada línea horizontal correspondiente, mientras que el por-
pueblo es 1000. Arturo había calculado bien los por- centaje total en cada pueblo viene dado por el área
centajes. En Calda la Nueva su partido había obte- coloreada.
nido 210 de los 700 votos femeninos, es decir, un La versión geométrica de la paradoja es que las lí-
30 %, y 240 de los 300 votos masculinos, es decir, neas horizontales rojas pueden estar por encima de las
un 80 %. A su vez, en Calda la Vieja habían obtenido azules y, sin embargo, el área roja puede ser menor
80 de 400 votos femeninos, es decir, un 20 %, y 450 que el área azul. Esto es perfectamente posible, como
de los 600 votos emitidos por hombres, es decir, un podemos ver en el tercer rectángulo que no es más
75 %. La siguiente tabla resume estos porcentajes, que la superposición de los dos anteriores: el área azul
que se pueden obtener inmediatamente de la tabla posee un rectángulo entre las dos líneas verdes que
anterior: puede compensar el exceso de área roja en los extre-
Porcentajes
les, es decir, en cada sector, los porcentajes de votos
al partido A son mayores en Calda la Nueva. Sin em-
bargo, el área total azul es mayor que la roja, lo que
equivale a que el porcentaje total de votos al partido A
sea mayor en Calda la Vieja
Mujeres Hombres
Porcentajes
ser grande y, por tanto, lo debe ser su base, que es
la distancia entra las dos líneas verdes y su altura. Es
decir, tienen que ser grandes tanto la diferencia entre
los tamaños de los sectores en un pueblo y otro, como
la diferencia entre los porcentajes de cada sector.
Mujeres Hombres
La paradoja de Simpson no es sólo una curiosidad
matemática. Puede darse en situaciones reales, como
en la evaluación de terapias y fármacos, y nos ad- que los hombres. Sin embargo, este sesgo se invertía
vierte de que hay que interpretar con cuidado los da- en los datos de los departamentos, en donde la fre-
tos estadísticos. El caso más conocido ocurrió en la cuencia de rechazo de los hombres era mayor. Se
Universidad de California en Berkeley. Para analizar trataba de un nuevo caso de la paradoja de Simpson.
si había algún tipo de discriminación de género, se La respuesta se encontraba en que hombres y muje-
realizó un estudio sobre el porcentaje de solicitudes res no solicitaban la admisión en los departamentos
de admisión rechazadas en los distintos departamen- de modo uniforme, sino que ellas lo hacían en mayor
tos. Los datos globales de la universidad indicaban medida en los departamentos en donde era más difí-
que las mujeres eran rechazadas más frecuentemente cil ser admitido.
LOS EJEMPLARES DE
FORMAN VOLUMENES
DE INTERES PERMANENTE
Para que pueda conservar y con-
sultar mejor la revista, ponemos a
su disposición tapas para colec-
cionar sus ejemplares.
0,15
PE (T/d)
PROBABILIDAD
GASTO
denador. La curva roja muestra el resultado para la 1,6
campana de Gauss y la azul el correspondiente a la
distribución uniforme. ¿Cuál es finalmente la duración
1,4
óptima? Depende mucho de la distribución. De hecho,
es sorprendente que la dependencia sea tan acusada.
Por ejemplo, en el caso de la campana de Gauss, la 1,2
duración óptima es de 23,5 segundos, con un gasto
medio aproximado de 1,225 céntimos de euro por se- 1
cado. Pero esa misma duración produciría un gasto de 0 5 10 15 20 25 30
1,59 céntimos si la distribución fuese uniforme. DURACION
Un poco desanimado por estos resultados, pero con 2. Gasto medio por individuo que utiliza el secador, en
la obstinación típica del científico, le dije a Andrés: función de la duración con la que está programado. La
— Lo mejor que podemos hacer es apostarnos du- curva verde corresponde al caso en que todos los indi-
rante varios días en la puerta del servicio y medir cuánto viduos necesitan exactamente 20 segundos para
tarda cada cliente en secarse. Así tendríamos la dis- secarse, la azul corresponde a la distribución de tiem-
tribución real, podríamos calcular la duración óptima y pos uniforme y la roja a la campana de Gauss
programarla en el secador.
Mi amigo Andrés, que no es muy experto en ma- diga al fabricante, pero lo más probable es que no lo
temáticas, pero tiene la sabiduría de un buen barman, conecte de nuevo y se vaya a su mesa sacudiéndo-
respondió con tranquilidad sin dejar de sacar brillo a las para que acaben de secarse.
las copas: Definitivamente, me di por vencido. Lo que Andrés
— Todo esto está muy bien, pero me parece que no intuye es un caso de retroalimentación y un problema
va a sernos muy útil. Lo más probable es que eso que de ese tipo es bastante más difícil de resolver. Desde
llamas distribución de tiempos dependa de la propia entonces no he vuelto a pulsar dos veces el botón del
duración del secador. Si a un tipo se le para el seca- secador en el bar de mi amigo y salgo siempre sacu-
dor con las manos ligeramente húmedas, quizá mal- diendo las manos al aire.
LOS EJEMPLARES DE
FORMAN VOLUMENES
DE INTERES PERMANENTE
Para que pueda conservar y con-
sultar mejor la revista, ponemos a
su disposición tapas para colec-
cionar sus ejemplares.
Laparadoja
delaBiblioteca
deSabel
I granemperador de Babelordenóa sus escri- ciónde la Biblioteca cabenen unahojade papel.Por
banosquecaligrafiaran unoa unolosvolúme- otrolado,comoE/ Quijote, porejemplo, es unode los
nesde unagrandiosa Biblioteca,unaBibliotecavolúmenes de la Biblioteca, ¡estáclaroquesólohace
quecontendría todosloslibrosde 500páginas escri- faltaseguiresasinstrucciones paraescribirlo! ¿Cómo
tosy porescribir. Lasinstrucciones quedioal jefede es oosible?
losescribanos eranmuysencillas. Deberían tomarlas Estamismaparadoja ocurreen uncampode lasma-
27 letrasdelalfabeto, el espacio y lossignosde pun- temáticas, la complejidad algorítmica, creadapor los
",u ",' "'u tt'" tt'" ttl"
tUaCión y haCef tOdaS laS matemáticos Kolmogorov, Chaitiny Solomonoff. Ya ha-
combinaciones posibles que se ajustaran a las 500 blamosde ellacuandoanalizamos la relación entrela
páginas de cadalibro.Empezarían con un libroen compresión de ficheros de datosy la teoríade la in-
blanco; después conun libroquesólotuviera (Juegos
la letra formación matemáticos deseptiembre de2001).
"a"en su comienzo estando en blancoel resto.Otro La complejidad algorítmica de unacadenade símbo-
con la letra"b",y así sucesivamente. Luegose em- loses la cantidad de instrucciones quehayquedara
pezaríacon pares"aa","ab","ac",etc. El últimodg una persona o a un ordenador paraque reconstruya
losvolúmenes seríaun librocuyas500páginas con- dichacadena. Si la cadenaes muygrandeperores-
sistiríanen unasucesión interrumpida de sionosde pondea unadeterminada pautalógica, su complejidad
interrogación "?". Entreel primerlibroen b'1anco y algorítmicaes pequeña. Porejemplo, la complejidadal-
esteúltimoy misterioso librollenode interrogaciones gorítmica
delnúmero de dosmildígitos:
estarían todoslos librosescritos y por escribir. La
mayoría seríanininteligibles o absurdos, peroen al- 27272727...27
gunode los estantes de la Biblioteca de Babeles-
taríanDon Quijote,La Críticade la RazónPurao la es muypequeña. Porquebastanlas instrucciones "es-
exposición (sinfórmulas matemáticas) de la teoríade criba27 mil vecesseguidas" parareconstruirla. Sin
la relatividad. embargo,el número:
Elemperador estaba muycontento consu Biblioteca
hastaque un jovenestudiante pidióaudiencia y le 12221 12121221112122...
hablóasí:
"Majestad, habéiscreadounagranobraconvues- quese construye tirando unamoneda dosmilvecesy
tra Biblioteca, puestoqueencierra todaslasverdades poniendo un 2 si salecarao un 1 si salecruz,tiene
(y todaslas mentiras), todaslas historias y todaslas unacomplejidad algorítmica muygrande, ya quesi los
bellezas delmundoquepueden expresarse conpala- resultados dellanzamiento dela moneda sonrealmente
bras.Perohayalgoen elloqueno acabode enten- aleatorios, lo másprobable es quenotenganpautaal-
der.Lasinstrucciones quedisteisa vuestros escriba- gunay las únicasinstrucciones quepermitan recons-
nosparacrearla Biblioteca se pueden dictarenmenos truirese número en concreto consistan en indicaral
de cincominutos y cabrían en unasimplehojade pa- sujetoquequierareconstruirlo todoslos dígitos, uno
pel.Esahojade papelcontendría lasinstrucciones ne- poruno,quelo forman. En otraspalabras, el número
cesarias paracrearlade nuevo.Si con unasinstruc- esincompresible: la información quecontiene nopuede
cionestan brevespodemos creartodaslas verdades reducirse a unasinstrucciones másbreves queel pro-
(y todaslas mentiras) delmundo, entonces cadauna pio número; la únicaformade describirlo es detallar,
de estasverdades, o cadaunode esoslibros,puede unaporuna,todaslascifrasquelo forman.
crearse conesasmismas instrucciones, o incluso con La paradoja a la que se enfrenta el emperador de
menos, puesto quecadalibroes sólounaínfima parte Babilonia,expuesta en términos de la complejidad al-
de la Biblioteca. Consu Biblioteca, Su Majestad ha gorítmicade Kolmogorov, Chaitiny Solomonoff sería
demostrado quetodasy cadaunade las verdades y la siguiente:
lashistorias de loshombres cabenen unasimple hoja ¿Cómo es posible quela complejidad algorítmica
de
de papel." unasecuencia seamuypequeña y que,sinembargo,
Elemperador oyóal estudiante conatención, sinsa- la complejidad de un subconjunto de dichasecuencia
bercómoresponder. Trasdespedirlo, se encerró du- seagrande? O: ¿cómoes posible quela complejidad
rantesemanas en losaposentos másretirados delpa- algorítmica de la Biblioteca seapequeña mientrasque
lacio,sumido en unaprofunda confusión. la complejidadde unode sus volúmenes, El Quijote
El argumento del jovenestudiante pareceabsurdo, porejemplo, es grande?
perono puededescartarse fácilmente, y el Emperador Paraver cómoy porquées estoposible, conside-
lo sabía.Es ciertoquelasinstrucciones oarala crea- remosla cadenaC de dígitosformadapor la conca-
86 y Cr¡rucln.
INVESTTGAcTóN octubre.2003
en tre0 y 10 20 001'-
de tod oslos nú me ros
ten aci ón
est acad enaC esc rib imopri
Pa racon str uir s me ro
oos
lee ece ros
;1' :#; i;;g olé gg "óá to'v un1' lue so
V un 2, y asi suc esl vam entEs e'dec ir'con cat ena mo s
iod oslos núm erooe s dos mil cifr as'em . pez andporo
el cer o,el 1, el 2, eli' "ilá ttárftg utal 102 0001'- Es ta
a enacon tlen e
inm ens cad
20 00x 10 20 002=x 10 20 03
díq itosper , osu com ple iidaalg d orí tmi caes mu y pe-
;lH ;'Á ñoi a-n ien , én ia cad en?c com
1-t l.t. ttn - 1'o
sub cad ena s oslos .nú 'itio tént tt cei oy 102 000
tod
v alq unode est osnum ero-co s mo el ale ato rio que
t.i," .l"" itiJ unt "t- ütto t ten eruna com ple iidaal- d
qor ítm ica mu cnoma yor No' s enc ont ram os de nue vo
il'il
""i;;tá ,io¡ " o. tá Bib liot ecade Ba b'e l'.
.fi; ióñ 'áe ta par áoo ¡aes la.sig uie -ntPie e' nse n Un sen citl opro gra ma pod ría
oe ord ena dor una
.n lr"ñ 'lt.ó ale ato rio de dos mil cifr asque hem os bib liot ecaque ¡nc uye sálod ót bs libr os'pos -geible
ner ar
ild ;;'d;l:,ena:"I'i
u'' io;¡ffT T :
?; .h no pod ria' molee
s'Per o
tro de la cad f T :i, '.. l;
en el list adode esei'iri Á"
oü i.i ql i;: tlq
s r El
:'lZiil&,!:'o?'i!3!rl
ilJ" ,ili iát
tru cci onep"r
áec pa rade sc r'rb
áá lói itti tt n' La sins - Tot
ir '"'"é Via al, iePorel u
ú,s ¿), ,?,',J:[:3:
s u |..r on" rirJñir J.ri "n: .(a)con strú yasCe Ñic otá sietf t & We ber -Fe rro
S'R 'L'
v (b)enc uén tre se n otn tiode C' Sa bem .os quelasins -
l::.'a i'dhfl¿ii"il'l;;i;;"F[=¡tii'i-[i'ii]l.i¿.s
ff sif:ifJ'?''}
'J:iiiá
HH pis ^o
;9roel pas o(a),l1 l':: vbre
{,J :"ü
.ái- ;i';arre
üar ;;;.vai
;ábácab son
ves .Pe ro,¿q uéocu rráóáñer pas o(b) ?De ntr ode la
mu
ái]ttt,q?tt',I
J:v ^:'-?;
seopa sóse ma naind
Er bib rio tec ari s ica ndar
o
;il; ó: éi'n rlm ero n em Pie za
20x'00
en el siti o:
l#'if
Lue go,par apre crs ar
con abs oru ta
exa ctit ud
;:?:':';$¿nlt"*l"
t:tr
lilm
{i!{':i:tq:{1
dón de mó str aüo r'ü i"ü ibji ;i;. ár.r'"¡ con tod o
, i" con oci do
em pien, zaite nd ram or# ;;il b-. r1g o*i Ji. . ioá 'iá s-á é oo ¡^o uii ote
á.i áir pit v' ar
v sa nc ho
titu detpro pio rj ;';r .iy ol5 1li lfr; ;;.-1 1- mi smtitt
nú me ro'ó*i en co ntr ad
o óó ' r'tn 'ía la so an
o luc iÓ rapa -
'nü
C es com ple tam ent e tiino not aho rranin gun ins
a - ttti ";'. no
;tru ilil, ';,; , quelos libr osde la Bib liot eca
99 p99 tí"n
on iaen co ntrgs p taso ruc ióna ord en ar, d;;;r t"t Qu e-l aL are elrlus ar
deade scr ibi
ta pa rad oja
pe, rono ü;; f;i. ,-,. ótt "*io
n.i ánoo no Jit 'át tt*t it Et- py iio no are '
te eq uiv ali en
Laen co ntril;. t;;' .;
oa lac io. o ü.- ;;.o -oe su s.n iüi ;;; óit u,rret
o ,i"p ;;i. i;;.E. Eto ú¡¡ aeco
, moencu alq uie r
rio s,De sp uéo., mu .to l-i- iá.
oé.i.r rri. ntJ i'o" riiü - enun aren gurea
ot' otio ro. iór ito a l'ha vuncie"qrtogra oo
tespe ns am ien i.l" ü;- , p;ü i,g o.r
..r,o, . á.i ud ;;ié , o. ,ro un iiiHi;l "u"
?tl, p]o de tráde
' s un a "sie m-
de cidco ns urtpo ,.
ió aró¡r ár.vb zarg únvo lr* rnoerá pr. .p. rJü co n.rcuo, alel bib lio tec se
iá- rnu ari o
(no
Bib tio tec alo ha nün"n o nu ncha
á sta ';;i l#; i Re du nd an cta
bg ¡li dJ r"; ólñ toá '9¡ ^in dic ac ion
puer
rasran
seaceracó dotarauda
o,,nÍl',TTil?ii.ij, íü{,. es '
blio tec arlo : ,:*tr
_H e oíd ohab raroe un ribr odiv erti do
#ii lli:ül_li_..:m#
y a la vez rev e- de lorp res a" sin o que es par cta to rota rr¡r vrrtv'::
uq "'o co Írol4 "l e '-y
(1– r)r r2
repartos infinitos en donde sólo hay una per-
sona beneficiaria del reparto. Supongamos un (1– r)r 2 r3
segmento de longitud unidad. Lo dividimos en
..
dos partes, una de longitud 1 – r y otra de lon- ..
gitud r, y damos a la beneficiaria la primera de ..
las dos partes (en rojo en la figura). Volvemos
a dividir el segmento sobrante en dos fracciones dadas por 1 – r y r y entregamos la primera. Repetimos
la división infinitas veces, tal y como se muestra en la figura, dando siempre el intervalo rojo y dejando el
azul para el reparto siguiente. Después de infinitos repartos, habremos entregado todo el intervalo de lon-
gitud unidad, que debe ser igual a la suma de todos lo segmentos rojos. Es decir:
o también:
1
1 + r 2 + r 3 + ... =
1– r
Las distintas fórmulas de sumas infinitas que aparecen en el texto no son más que casos particulares
de ésta que acabamos de deducir.
en cuestión que un cuerpo pueda moverse, digamos, potencial. Aristóteles, por ejemplo, propone una com-
de un extremo a otro de una habitación. Su conocido plicada distinción entre el segmento sin dividir y el
argumento nos dice que el cuerpo tendrá primero que segmento dividido infinitas veces; el primero era “ac-
alcanzar el punto medio de su recorrido, después el tual”, el segundo, “potencial”, y dudaba de que la lon-
punto medio de lo que le queda por recorrer, des- gitud de uno fuera igual a la del otro.
pués el siguiente punto medio y así sucesivamente. Lo que quizás estaba en cuestión, tanto en la mente
El cuerpo tiene que alcanzar infinitos puntos o, dicho de Zenón como en la de Aristóteles, era la propia na-
de otra manera, consumar un número infinito de pe- turaleza del tiempo y el espacio y la posibilidad de
queños recorridos. Si, por ejemplo, la longitud total subdividirlos infinitamente. Otra de las paradojas de
del movimiento es un metro, el cuerpo tendrá que re- Zenón sobre el movimiento, la conocida como de la
correr primero la mitad, 1/2, luego la mitad de la mi- flecha y quizá la más sugerente de todas ellas, nos
tad, 1/4, luego 1/8, y así sucesivamente. Si tiene que dice que en un instante dado una flecha está en un
hacer un número infinito de recorridos, y en cada uno cierto lugar, ocupando el mismo espacio que ocupa-
de ellos invierte una cantidad finita de tiempo, en- ría si estuviera en reposo. Considerando sólo ese ins-
tonces, siguiendo siempre el argumento de Zenón, el tante, la flecha en movimiento no se distingue en
cuerpo tardará un tiempo infinito en realizar su mo- nada de la flecha en reposo y podemos por tanto de-
vimiento. Con ello Zenón demostraba que el movi- cir que en ese instante la flecha se haya en reposo.
miento es imposible o, al menos, algo propio del mun- Si se haya en reposo en cada instante, la flecha se
do de las apariencias y que presenta inconsistencias haya siempre en reposo, luego no se mueve nunca.
lógicas. Aunque parece un mero juego de palabras, la para-
Es curioso que Zenón no se diera cuenta de que doja de la flecha se pregunta por algo que aún es
una suma con infinitos términos puede ser finita. Por misterioso para la física, al menos para la no relati-
su propio argumento, y sin fijarnos en el tiempo que vista: si es posible generar un universo dinámico, en
tarda el cuerpo en hacer cada recorrido sino sólo en movimiento, a partir tan sólo de una sucesión conti-
las longitudes de éstos, no es difícil darse cuenta de nua de instantes y qué tipo de conexión causal o de
que la suma de los intervalos en los que sucesiva- continuidad hace falta para ello. De todos modos,
mente dividimos el recorrido tiene, por necesidad, que para muchos físicos esta pregunta no tiene sentido.
ser igual a la longitud total, es decir: Más bien pensamos que el instante es una idealiza-
ción, carente de realidad física. Recientemente, un jo-
1 + 1 + 1 + ... = 1 ven estudiante de física australiano, Peter Lynds, ha
2 22 23 recibido una considerable, pero en mi opinión no me-
recida, atención de los medios de comunicación por
Sin embargo, los griegos todavía tenían dificultades analizar las paradojas y proponer esta vieja solución:
con la noción de un infinito que no fuera meramente la negación del instante.
Cita a ciegas
unque al lector ajeno al mundo de la investiga- Si las citas son una buena medida de la importan-
PROBABILIDAD
sado en un modelo probabilístico conduce a un valor 0,001
casi idéntico, R = 0,22.
Si los científicos citan copiando la lista de referen- 0,0001
cias de otros artículos en lugar de leer las referencias
originales, entonces puede que tenga lugar un efecto 0,00001
“bola de nieve” en las citas que recibe un artículo.
Simkin y Roychowdhury, en un segundo trabajo, han 0,000001
demostrado que esto es posible. Han diseñado un mo-
delo muy simple que reproduce la estadística de las 0,0000001
citas. El modelo podría llamarse de “cita a ciegas”, ya 2. La gráfica muestra la probabilidad de que un artículo
que supone que cada científico elige las citas al azar, tenga un número de citas determinado. Sólo aproxima-
de acuerdo con las reglas siguientes. Supongamos damente uno de cada un millón de artículos es citado
que se han escrito N artículos y que un científico es- más de 1000 veces. La línea azul corresponde
cribe uno nuevo. El científico escoge al azar m artículos al modelo de “cita a ciegas”, mientras que los puntos
de los N existentes, los cita y cita también, con una color magenta son los datos reales tomados del ISI.
probabilidad p, las referencias que aparecen en esos [Figura cedida por M. V. Simkin]
m artículos.
El modelo es tan simple que se puede simular fá-
cilmente con un programa de ordenador, comenzando tados, tal y como muestra la figura 2. Y es ésta la dis-
con m artículos sin lista de referencias. Puede in- tribución a la que se ajustan los datos reales.
cluso resolverse de modo aproximado, aunque la forma Otra cantidad que puede extraerse fácilmente del mo-
de hacerlo es demasiado complicada para esta sec- delo es el número medio de citas en cada artículo.
ción. En la figura 2 se muestra la solución del mo- Supongamos que, cuando hay N artículos publicados,
delo con m = 3 y p = 1/4. Estos son los valores que la lista de referencias de cada uno ellos tiene, de me-
mejor se ajustan a los datos reales, extraídos del ISI, dia, c(N) referencias. Un nuevo artículo aparece y, en
y que también se muestran en la figura. La gráfica media, tendrá un número de referencias:
representa la probabilidad de que un artículo haya
c(N + 1) = m + mpc(N)
sido citado k veces, o equivalentemente, la fracción
de artículos citados k veces, en función de k . Como como se deduce fácilmente de las reglas del modelo
se ve en la figura, el modelo reproduce bastante bien de cita a ciegas. Cuando el número total de artículos
los datos reales. Podemos también comprobar el efecto N es muy grande, el tamaño medio de la lista de re-
“bola de nieve” mencionado antes. Supongamos que ferencias apenas cambia. Si c es este valor casi cons-
hay N artículos y que uno de ellos ha sido citado k tante, entonces tiene que verificar c = m + mpc, lo que
veces. ¿Cuál es la probabilidad de que lo cite el ar- da un valor para el tamaño medio de la lista de refe-
tículo N + 1? Recordemos que en el modelo un nuevo rencias:
artículo elige m al azar entre los N existentes, los m
cita y cita con probabilidad p los artículos que apa- c=
1 – mp
recen en las listas de referencias de los m elegidos.
Por tanto, hay dos posibilidades para ser citado: o Esta fórmula es sólo válida si mp es menor que uno.
bien a) el artículo es elegido entre los m primeros, o Si no fuera así, las listas de referencias crecerían in-
b) está en la lista de referencias de algunos de es- definidamente. Los valores que mejor reproducen los
tos m primeros artículos. La probabilidad de que ocu- datos reales son, m = 3 y p = 1/4, lo que da un ta-
rra a) es, aproximadamente, m/N y la de que ocurra maño medio de c = 12 referencias. Los datos del ISI
b) es km/N . Pero, en el caso b) el artículo es sólo indican que este número es ligeramente superior, en
citado con una probabilidad p . Por tanto, la probabi- torno a 15. Sin embargo, el acuerdo sigue siendo bueno,
lidad de que nuestro artículo con k citas sea citado especialmente si se tiene en cuenta la simplicidad del
de nuevo es: modelo.
Aunque es cierto que los científicos muchas veces
m + pkm citan artículos que no han leído, no lo hacen real-
N mente a ciegas, por supuesto. Sin embargo, el modelo
sí pone de manifiesto que la red de citas, que puede
y es mayor cuanto mayor sea k. De hecho, si k es considerarse como la red en la que se crea y por la
pequeño, será muy poco probable que el artículo sea que se transmite el conocimiento científico, tiene una
citado de nuevo. En el modelo de cita a ciegas habrá estructura bastante homogénea y sorprendentemente
muchos artículos apenas citados y unos pocos muy ci- sencilla.
La frecuencia fantasma
a mayoría de las lectoras y lectores de Investigación 0,5 sen (2π × 880 × t) + 0,5 sen (2π × 1320 × t)
Lasventajas
delasolidaridad
| | acemásdedosañosquecomenzamos estanueva de las lslasBaleares, ha demostrado queun simple
J{ etapade la secciónde Juegosmatemát¡cos, y reparto delcapitalpuedeconvertir un juegoperdedor
I I to hicimos comentando dosjuegos de azarcuyo en ganaoor,
comportamient esosorprendente (Juegos matemáti- Paraentender cómoes estoposible, analizaremos
cos,julio2001).En ambos, un individuo juegacontra primero unode losmecanismos queexplican la para-
un casinoy tieneciertasprobabilidades de ganary dojaoriginal. Piensepor un momento cuántas veces
oerderun euroen cadaturno, se utilizala moneda malacuando jugamos B un gran
El primero de ellos-lo llamaremos juegoA- es número de turnosseguidos. A primera vista,parece
similara apostar un 1 euroa rojoo negroen la ru' oue la moneda malase debería utilizarun terciode
letade un casino: ganamos 1 euroconunaprobabi- losturnos, puestoquese lanzasiempre queel capi-
lidadligeramente inferior al 50o/o y perdemos 1 euro tal es múltiplo de tres,Sinembargo, si se juegaB en
conunaprobabilidad ligeramente superior al 50%,ya todoslosturnos,resulta quela moneda malase uti-
queconel ceroganasiempre la banca.Supongamosliza5ll3= 0,3846... de lasvecesquesejuega,es de'
q u e s e g a n ac o n u n ap r o b a b i l i ddaedl 4 9 , 5 %y s e cir,mása menudo queun terciode lasveces.La ra-
pierdeconunaprobabilidad del 50,5% (estasproba' zónse encuentra en laspropias reglasdeljuegoB y
bilidades no coinciden exactamente conlasde la ru- se hacemásclarasi representamos el juegocomoel
leta,peronossirven paradescribir laparadoja). Podemos movimiento de unafichaa lo largode la líneade la
también imaginar esteiuegocomounaapuesta sobre figura2. Cadavez que ganamos, movemos la ficha
el resultado del lanzamiento de una monedaligera- unacasilla haciala derecha y, cuando perdemos, una
m e n t es e s g a d aE. l s e g u n djou e g o- l o l l a m a r e m o scasillahaciala izquierda, ConlasreglasdeljuegoB,
juegoB- es un pocomáscomplicado y, obviamente,cuando la fichaestáen unacasilla roja,su movimiento
no puedeencontrarse en ningún casino. lgualqueen másprobable es haciala izquierda, puestoqueutili-
el juegoA, en cadaturnoganamos o perdemos 1€, zamosla moneda mala,quetieneunaprobabilidad de
peroahoralasprobabilidades dependen de lo quelle- ganarmuyreducida, del9,5ok.Porel contrario, en las
vamosganado hastael momento (quepuedeseruna casillas verdesel movimiento másprobable es hacia
cantidad negativa): si lo quellevamos ganado -lo lla- la derecha. Si la fichase encuentra en la casilla 2, por
maremos el capital- es múltiplo de tres,entonces ejemplo, su movimiento másprobable es haciala ca-
ganamos 1€ conprobabilidad 9,5%; si el capitalno silla3. Pero,en el siguiente turno,lo másprobable es
es múltiplo de tres,la probabilidad de ganares del ouevuelvaa la 2. Portanto,la fichase encontrará la
74,5o/o. Es decir,en el juegoB se utilizan dos mo' mayorpartedeltiempo saltando entre2 y 3, o, en ge'
nedas, unamuydesfavorable parael jugador, quese neral,entreun múltiplo de tresy su inmediato inferior.
lanzacuandoel capitales múltiplo de tres,y la otra Estohacequela frecuencia conla quela fichavisita
bastante favorable, quese lanzacuando el capital no lascasillas rojas,es decir,la frecuencia conla quese
es múltiplo de tres,En la figura1 se esque'
matizan las reglasde los dosjuegos,repre-
sentándose enrojolasmonedas desfavorables JuegoA JuegoB
y en verdela favorable. ¿Es mi capitalmúltiplode 3?
Aunque se tratede juegosde azar,el juga-
dor pierdeen mediasi juegamuchos turnos MonedaI
seguidos a cualquiera de losdosjuegos, Ao
B. Sinembargo, si juegaalternándolos, ya sea @
al azaro siguiendo algunasecuencia perió- 4e,5 f \50,5
Moneda2 Moneda3
dicacomoAABBAABB...,
dia.Estecomportamient
gana
entonces enme-
esoa primera
/
vista ganar perder
\
74,5
@
n,u
sorprendente y porellose conoce a estosjue- | \e0,5
goscomojuegosparadójicos o también como / \ .
ganar peroer
Paradojade Parrondo.
En los últimos años,algunos físicosy ma' 1. Las reglasde |osjuegosparadóiicosA y B. Lasmonedas
temáticos han estudiado variantes de la pa' que se utilizanen cadajuego son roias o verdessegúnsean
radojaoriginaly encontrado nuevaspropie' desfavorables o benefíciosas para el jugador
dadessorprendentes deestosjuegos. Eneste
artículo vamosa comentar unade ellas,que
tienelugarcuando variosindividuos juegana
B y se les permite repartir las ganancias en- - 3 - 2 - 1 0 1 2 3 4 5 6
treturnoy turno.RaúlToral,de la Universidad 2. Representación esquemátíca del capitalen el iuego B
86 v Ct¡trlcln,
lruv¡srenclóru 2004
febrero,
utili zala mon edamaladelju ego B, seasupe rior a 1/3, - SóloB
ya queestafrecu encies a la quecorr espo rider a ía
uná - RBRB ...
fichaque se mue vecom pletá menal' teá¿ar sin
, nin_ - RRBR RB...
- RRR BRRR B..,
gunapref eren cia de salto .pero prec isam ente este - SóloR
mov imie ntoporcom pleto al azares el quJtieneel ca_
t
prracuan dose jueg aal jueg oA. Estaes unade las
:
crav esde ta parc dojacuan doel jueg oB se alter ná E
a pesa rde ser- perd edor
con el A,..est eúltim o,. ,
hace ;
quese utilic emen osfrecu ente mentátemon eoámirá F
ü
deljueg oB y por eilosu efec tofinat;" p;.-i tirr'yü
ia ltaser gana dora .
alter nancresu
Elju egoA hacequeét capi tal seamásalea torio de
,_
ro que es cuan dose jueg asóloB; de estemod o,la
fichavisit amen osveóe s-las iolas ] pod. ro,
ilás
cas¡tar,'
A ayud aa ',sal esiá scas¡ ilas
gr9 et,ju ego
l.^.ir.en
ro_ 1000
oL
jas, don deel
¡ueg dB es muyoeri áuo irir..
está njuga ndo
ut van osJug ado res con trala ban ca, ,,00juga doreen
estemism oefec tose pued e'có nseg uir de-u naform a 3. capi taltotatde s func ióndelnúm ero
illa:
mássenc a los iuga dore s.les
ei óos¡ óleconv ertir de turno s
para disti niaí
iomi ¡nac s jueg oB
¡onedet
B en gana áorsin mas!;; Ld];; ;brir enrr e y ta redis tribL tcrcn
H
.91
turn oy g.,
i-u-. turn osus gana ncia s,
Supongamos',ño,Yi1:::g9j,,'qqnco ntra|abanca1o.0o0
aljueg oB.Aho ranodisp one moé Oei.¡ue gon, peroóó- |
dem os uircaiit atentr elos'á is"ti ni
redi stribet
res.Llam are moi o ,.0. ..3t ¡.11 flx0 f,: I
a éstadist ribu ción --F
Estejueg oR cum ple o ér
el mismpap | oo f
qré? ñd;; 'A ; -f
€ uo
,:i: iTt **,
í;i: ,*u
nl: ; i
nlif,?'áfl,,;,,'¿'ÍilÍ[,iij;!'j,i?,.
con unaproo áoiti oao
1/2,y recib une eurode él con €
Fp
, É
unaprob abili dad
1t2.U¡ turn ode jueg on cons ¡iie- é; t I É
ffü##ffffiffiu
JugadoSyparadistintasredistribuc
el
lyes! 1a , capit al
cuan dono se reali
tribu ciónes deci r,cyal docaoainoiv ¡oüo
fa 9anc aaljue goB sin inter cam o¡ar
naái
iones.Lac,'uáá',l5000o s
zaning unaredis _
¡r.ga cont ra
c'ónsuscom -
n /^^
s
qe^t urnocuan
N,í,ñ erod¡,..-^
Númó,^i^ ^
etur nos x10s
s func ióndetnúm ero
-, vapi talde dosiuga doreen
iueg ansóloa B (curv as
do azul es).
pane En esecaso ,todo slosjuga dorepierd
ros'
'31 fj:*,ff¿ J:, liil"',il ,!ii,iiio:,#;tT¿l:,i;:i:::::J:l:,:ll\
i:iru:,?
s enen
lll' 3f rii#
i'.i.1.ñ com, oocurreen lascurvasroja, (cur vas
verd es)
nosde redis tribu ción
s ny el capi taliói
verd ey añil,todo slosjuga doreg"ná
'
tal aum entacuan turn osen la pre:er prim erore,da ar segu ndo
doselt¡ tizanñ''rc ñoé 1€ conunaprob abi-
redis tribu ción '
la gana ncia
se hacemen or,-a unqu si-e i¡oa¿liz, g.,g:9l segu ndo quie nre da al prim ero1€
guesien doposi tiva' com oen el jueg oR el^c apita l ..ñ-p i"l"¡i l¡oao ilá'e n-..ü á'trr no de redis tribu ción
to-
talni aum enta
ni dism inul(el ri ;- i.otr arJn ;1,.erlá -r,rp r.',e üJt? ¡ouc
,e¡Áá ivlJ.il, ¡on itar
decap tien e
losturn os
seutili zan uircáp ital
enieo¡ itrioel y nose üno iefec tos
cruc iar'e derjueg o.
.ñ sJ-o. r"rro fro En
jueg anun caal iueo oB, el cap ital y el re-
nó uañ áta h ;igr- r;4 mos tramer oscap itar
de cad aunode ros
sult adoserála're c-ta hori zon iái
toiá 0"-;{ jiglt liÉ. cua ndo no hayrepa rto, cua ndosora men te
com ovem os' en esto s.iu gqo .oms páttes :,:ü:
¡t s¡n il a
óuo ira-yrepa rto jueg anun ca
y no.s e. a B,y cua ndo se in-
Raratodo s',úo lü:q .tlFq re-m ade tafi-
ben efici oso 9 jueg óe condosturn osderepa rto.
t"ióa rí,]n .,trrldg
gura 2'lo queestáocu rrienes doquecüa
, ndo secom - Lá rei¡s tri¡u cionáeif fitá- o-ón erciaaamb os,mie n-
la avud adelveci nbpue deracir itarr
part eel capi tal, ae - qiirll l;;d. ; l,íiiii i, L oe nue voperd edo r.
;á¡
o ar
unindi vidusalt lá casi lla
.j{t d;;;i ene ricie de erlnáo .róoó rára ieni" ñ"-a rgo quees cad avez
lasmon edabue s nas del- lueoB: o $ Ñár ía.o ecir
qüé re. n"ó! ."rioreco rdar énto.ti.rp osquecorr en,es-
estoesequ ivale nte a sup eral una"má larach a" .on ór óá.i .1'iá .tra losdefe nso res mo:
detneo libe ralisla re-
apo yod e algú nami go o de la cole ctivi dad . dist ribu ción
delá sa ta co_
. ,il;;á '-e"s iene t¡ciopara
El erec t'se pue decons eguinclu ir so consólodos p..,l to.
diir¡ d;; . incru só re gen erar
r.iin üspe nsabpara
juga doreEns. estecasora , ñd¡s tribu ciónásmuysim- crec imie ntoeco nóm ico.
y Cl¡w cln,
lruv¡ srrcn clóru febre ro,
2004 87
MATEMATIC J u a nM . R P
. arrondo
Lateoría delaconsonancia
matemática
as matemáticas y la músicahan estadounidasal
menosdesdela civilización griega.Los pitagóri-
cos se dieroncuentade que dos notastocadas
simultáneamente eranagradables si entreellasexistía
una relaciónmatemática simple.Al pulsaruna cuerda
tensadasuenauna nota,que dependede la tensión,
la longitudy la densidad de la cuerda.Si disminuimos
la longitudde la cuerdaa la mitad,sin variarsu ten-
sión,por ejemplo,colocando una cuñacomoen la fi-
gura1, sonaráuna notamásaltaque la primera, pero
la combinación de ambasserá agradable al oído.Es
más,la segundanotasuenaen realidad muy parecida
a la orrmera.El intervaloentreestasdos notasse de- 1 . L o sp r i m e r oi nst e r v a l op si t a g ó r i c oAsl d. i v i d ilra l o n g i t udde
nominaoctavay su sonidoes tan parecido, queen mú- u n ac u e r dpao rl a m i t a ds e p a s ad e u n an o t aD o ,p o re i e m p laol,
sica las dos notasse denominan con el mismonom- D od e l a 0 c t a v sa u p e r i oAr l. d i s m i n ul ai rc u e r dhaa s t a2 / 3d e s u
bre.Si la primeraes Do, por ejemplo, la segundanota l o n g i t uodr i g i n as le p a s ad e lD oa l S o l .
seráotro Do, aunqueen una octavasuperior.
Pero no sólo el intervalode octavaes agradable
musicalmente. Losgriegosdescubrieron que,si la cuerda sus sucesivos múltiplos o armónicos, es decir,tonos
se acortahasta2/3 de su longitudoriginal,la nueva de frecuencias2x440 = 880hertz,3x 440=1320herlz,
notatambiénse combinaagradablemente con la nota etc. (véaseJuegosMatemáticos de enerode 2004).El
correspondiente a la cuerdacompleta(véaseIa figura1). tono puro de frecuenciamás baja,o fundamental, de-
Suponiendo de nuevoque la nota originales Do, la terminala alturadel sonidoque percibimos. Por otra
nota de la cuerda213más corta sería Sol. Hay algu- oarte.en el casode una cuerdapulsada,la frecuen-
nos otros intervalosagradables, que técnicamente se cia fundamental es inversamente proporcional a la lon-
llamanconsonantes, mientrasque otros, la mayoría, gitudde la misma.De modoque el intervalo de oc-
son desagradables o disonantes. tavalo formandos notasde frecuencias fundamentales
No existeunaclasificación nítidaentreintervalos con- v y 2v, y el intervalo de quintaconsisteen dos notas
sonantesy disonantes. Sí se da un gradode conso- de frecuencias v y 3v12.De ello se deducetambién
nanciao disonancia, que inclusodependedel instru- que el intervalo que formandos notasno dependede
mentoen el oue se tocael intervalo o de la alturade la diferencia de sus frecuencias sino de su cociente,
las notasque lo forman.Porejemplo,un intervalo Do- un hechode especialtrascendencia en la teoríama-
Mi es claramente consonante; ahorabien,si estasdos temáticade la música.
notasse tocanen las escalasmás bajasde un piano, Las teoríaspreviasde la consonancia se basaban,
el sonidoque resultano es del todo agradable. La o bienen la viejaideapitagórica de que el universo,
consonancia tambiéndepende, salvoen casosmuycla- desdelos planetashastala armoníamusical,se rige
ros,comola octava,de la culturay la educación mu- p o r r e l a c i o n ees n t r en ú m e r o se n t e r o sp e q u e ñ o so,
sicaldel oyente. bienen el hechode quealgunos intervalos consonantes
Tantola consonancia como la disonancia de inter- estánformados pornotasquecomparten muchosarmó-
valosconstituyen la basede la armoníaen la música nicos.La teoríade Plompy Leveltmejoray completa
occidental. Graciasa ellasse construyen las tensio- estaúltimaidea.En primerlugar,investigaron la con-
nes y las resoluciones que formanel discursomusi- sonanciade dos tonospurosde distintas frecuencias,
cal. Sin embargo,no hemostenidouna teoríasatis- v,,vr, haciendoque variosoyenteslos escucharan y
factoriade la consonancia hastahace poco.Fueron evaluaran en una escalade 1 a 7 el desagrado que
Plompy Leveltquienes,en 1965,elaboraron la teoría les producía. Descubrieron que dostonospuroscuyas
más aceptada, despuésde revisarideasde Galileo, frecuencias esténsuficientemente alejadas suenansiem-
Leibniz,Eulery Helmholtz, entreotros. pre bien. Más precisamente, existeuna bandacrítica
La notade un piano,de una flautao una guitarra, de frecuencias, de modoque,si la diferencia entrelas
es la suma de varios tonospuros. Un tono puro es frecuencias de los dos tonosourosexcedeel ancho
una onda sinusoidal: una vibracióndel aire cuya ex- de estabandacrítica,entonces losdostonossoncon-
presiónmatemática es A sen(2nvt),en dondeA es la sonantes. El anchode la bandacríticadependea su
amplituddel tono puroy v su frecuencia, es decir,el vez de la frecuencia media,V = (vl + vr)12,de los dos
númerode oscilaciones por segundo.La notaLa cen- tonospurospresentados, tal y comose apreciaen la
traldel pianoestácompuesta por un tonopurode fre- figura2. No disponemos de unaexpresión matemática
cuencia440 herlz (440 oscilaciones por segundo)y parala bandacrítica,puestoque se obtienemediante
88 lruv¡sle 2004
marzo,
Y CtENctA,
ncróru
N
I
o .q
I E U,b
E .9
.6
0,4
E
=
o
o
2. Anch ura a
dela bandcrític en dela frecu enci
a func ión meda ia 3. Diso nancde
ia dostono spuro sen func iónde la difer encia
de
dedosnotaVs = (vl + v2ll2y com paracon
dauninter valo
deun susfrecu encia s ida
divid porla anch ura de la band acrític a.
0 deDoa Re)y unodeterce ra
t0n0(c0mel men or o de
(comel
Laa Do). fund ame ntal y cinc o.arm ónic os, -o sde igua l
todo sello
amp litudpara
. calc ularla con son anc iadiso nan cia
expe rime ntac ión
conindiv iduo s. , buen a de esto sdosson idosbas
Sinemb argouna la diso nan cia
, tacalc ular en_
apro xima ción
vien edadapor la ecua cióñ to¡ tono spuro squelosform anutiti zán oo
ta fórm u_
|1e
ra anre nory sum artoda slas pare jasde rono spuro s.
_ 10S
= 2111 1+ 2gg ¡ s-v/1 ooo
Avcr it o mue stra
El resu ltadse en ta tigu rá4, én don detam -
biénse. repr ese ntan e as'r ój"svert icat es
med iant6ári
. Plom
py Leve lttamb iéncuan tifica ron de las siet enotr . áá lá'es catajust a
la diso nanc ia las frec uen cias
dent rode la band acrític a.El resu ltado,. rnr.. tru ,n de.D omay or.Esta snota sse rela cion an-celonDo ini_
la figur a3, en dond ese oose rvaque la difer enci ade cialmed ianttos e sigu ient e-s ; l, Re (9/8 ),
tact oróióoii
más diso nant ees un cirar toOe'l aanch ura Mi
frecu enci as Fa_ (4tB ),5o
!:s! 4),, ts/2r ),
láJ" ál7r ', (15 i8). (En
de la band acrític a.De nuev ola cuiv i JJ prr"r .nt" , Do cent ratOetpian o'tie íe'uñ a
real idadel frec uenc ia
perose pued eapro ximapor
expe r¡me ntal, r ia func ión: fund ame ntal de 261,6 Hz, y no Oe ZSO¡]2, com o se
de ta gráf ica,pero 'heeteg idoésta úttim afre_
- 4txl ledu cg
d(v,, v r) = !,1s¡ls1 taexp osic lón)
sim ptifi car
3elosdosson idoshe rn .rugaOe r ra
otso nan ,^rr
:1.:. ]:^p c¡a
entr , dibu jado
la con -
en^d ondex= (Vl- v2)lL vct.t . queno es másquela Oiso nan cía
son anc ia, cam biad a
Consideremos'ahoia do"d'snoidos compuestospor va- de-sign o.Se pue deobs ervacOm r n
oapá iece pico sen
Tom arem os
riosarm ónic os. ta fund am,j niáio .¡'pr imárlos inte rval os s Mi,Oci_ fa,-O o_,S
con son anteDo- ot,
Oo_
de 250 hert zy varia remo sta Oet- segu noo
soni d_o en_ V (haytam bién,n ..ito pi.o 'q'recoin cide
llt el,D.o .:?o
r^0_
h9r
0 p,.esdec ir,,;t*ü * com pre ta.con Mi bem ol).EI lect orpue deiÁte ntá- r odu cir
repr
I:^i: 9"I_
üup ono rem osquecad ason idoestácom pue sto ia .i* ;;ü;s , form ado s
por la ta curv ade con son ancpará
p0r otro sarm ónic os s
con dist intaamp litud es.
De he_
Frecuenc¡a
dela segunda
nota cho ,inclu sose p.ue de n
enc ontr arun á'áó i...ióJava
350 400 quedibu jaesta sgráf icasparadife rent es
:-1.l ngt s,
nlerento s deta llad as
Inst rum así com oexp licác ione ines
delJen óme no. Esp ecia rme ntereco men oaoes teerribro
Mat hem aticand s Mus ic,de Dá;; B;;s on, oe ta
Univ ersi dadde Geo rgiaque , se pue dedes -"-' carg ar
gra_
tuita mendeste desu p¿'g ina ,r.O i----
todo smod os,la te-o ría de plom py Lev eltno ex_
,.De.com plet ame nte son ancy'dió
plica ia ona ncia
racon de in-
. nR. pier ce,auto rde ótrolibrodeli cios o
terv alosJoh
quetam bién hab lade la con son anc ¡a, to,i Son ¡¿os áá
la Mús ica ca ntifi c
(Bib tioteScie jem ostr óque
ricin ¡
la con son ancde ia cier tosson¡me
idostoim áOopor s rono s
s
puro queno sonarm ónic peroqueprod uceun
os n va_
sica l,, o
. diso nan cia,
balode, noestan,,mu com la con _
-7 lo1 anc ia
son de losinte rval oscon son ante des lá esca lade
Do Mi Fa
queét á.or O.-O o_n ¡¡-S ol,
mgy La exp tica ción
or.. Oe
paradosnota s.[a prim era
4. La curv ade cons onan cia es un Do por o
^D_ejem plo,seatan agra dab l'e al oído ,,á'"n .r.nt ru
de 250 Hzy ra frecu encia
de ra segu nda varíaiesde2b0 hast a no sóloen la aus enc ia óe tono sprro sii.*" ntes sino
500 Hza lo largodelejehoriz onta del la gráfi ca.
Enrojose tam bién en que las tresnota ssbn arm ónlc os de una
lassietenota sde la esca la
seña lan de Domavo r. mism a fund ame ntat : situa do
etDo oo. á.tá uá.,as aOá ¡o,
y Ct¡tr lctn,
lruv¡ slenc lóru narzo ,2004 89
MATEMATICt)S JuanM.R.Parrondo
Cuestión
deescala
I a música y lasmatemáticas tie- gar,el intervalo entredosnotasestá mayor porencima (51\y el Sol,una
I n e n m u c h o
e n c o m ú ne, s p e - determinado porel cociente de sus quinta porencima (3/2). Después se
lr cialmente enOccidente. Yaco- frecuencias y no por la diferencia.construye el acorde deSolsubiendo
mentamos el mespasadoen esta Ensegundo lugar,losintervaloscon- al Si mediante una terceramayor
mismasección el tratamiento ma- sonantes suelenestarformados por (312 x 514= 15/8), y al Remediante
temático de la consonancia y la di- elcociente denúmeros enteros sen- unaquinta(312x312 = 9/4).Final-
sonancia entredos notas.Otrode cillos(aunque yavimosel mespasa- mente,se construye el acordede
los oroblemas en dondelas ma- do quela teoríade la consonanclaFa de modoque la terceranota
temáticas tienenun papelcrucial es bastante máscompleja). Ambos seael Do inicial. Así,el Fa estaría
es en el diseñode escalas musi- aspectos estándeterminados por una quintapor debajodel Do, es
cales.Unaescalaes unaseriede nuestrosistemaauditivo y por el decir,su frecuencia seríade 213.
notasconlasquese hacenlasme- modocomoasignamos notasa los Paracolocar el Fa dentrode la es-
lodías delascanciones y piezas mu- sonidos queescuchamos. cala,subimos unaoctavamultipli-
sicales queescuchamos todoslos Diseñar
unaescala noesmásque candopordosy obtenemos la fre-
días.Peroestaseriede notases colocar variasnotasentreunanota cuencia de 413.A partirde eseFa
el resultado de unaevolución muy dada,porejemplo el Do,y su oc- subimos unaterceramayory obte-
compleja, quese explica en parte tavasuperior. En la músicaocci- n e m o se l L a ( 4 1 3x 5 l 4 = 5 / 3 ) .L a
porrazones físicas, peroqueademás dental,se utilizala llamadaescala quintaporencima delFatieneuna
estájalonada pordecisiones máso igualtemperada o simplemente es- frecuencia 4l3x3l2= 2 que es el
menos arbitrarias ouetomaron mú- calatemperada. Aunouetieneun Dode la octavasuperior. La escala
sicosy constructores deinstrumentossencillo fundamento, dividirla oc- justatienelos tresacordes de Do,
de distintas éoocas. tavaen doceintervalos iguales, su Sol y Fa perfectos, formados por
Recordemos cuálesson los pa- historia es algotortuosa. La razón intervalos completamente conso-
res de notaso intervalos conso- es quela escala temperada es una nantes. Sinembargo, el intervalo en-
nantes, es decir,los másagrada- solución aproximada a unproblema tre Re y La no es unaquinta, sino
blesal oídoy los que,por tanto, matemáticamente irresoluble:cómo quevale5/3:9/8 = 40127 = 1,481, un
deberían encontrarse en cualouierdiseñar unaescala en la quetodos valorligeramente inferiora los 3/2
escalamusical. El másconsonantelos intervalos seanconsonantes.de la quintaperfecta. Estohace
de todoses la octava,el intervalo Veamos porqué. queel acorde de Resueneunpoco
formado oordosnotasde frecuen- Unaescalaque se construye a desafinado en la escalajusta.
cias f y 2f. De hecho,dos notas oartirde intervalos consonantes es Los intervalos de quintasontan
conesasfrecuencias suenanorác- la llamadaescalajusta.La escala importantes, que existeunaescala
ticamente igualy por eso en mú- iustade sietenotases: construida a partirde ellos,se trata
sicatienenel mismonombre. Por de la escalapitagórica. Ladiseñaron
ejemplo, el La central delpianoes los pitagóricos al descubrir la con-
un sonido quevibra440vecespor sonancia y la relación matemática
segundo. Decimos quesu frecuen- sencillade la quintay de la octava.
ciaes de 440hertz.Unsonidoque La escalapitagórica de sietenotas
vibrea 220hertzes también un La, tienelasfrecuencias siguientes:
unaoctavamásabajo,y otroque
vibrea 880hertzes un La unaoc-
tavamásarriba.Todasestasnotas
suenan tanparecidas, queuname-
lodíase puedetocaren cualquier
octavao en variasoctavas a la vez
y s e r p e r f e c t a m e nr e
t ec o n o c i b l e . '15/8= 1
,875
Otrosintervalos consonantes son
la quinta, queconstade dosnotas
cuyocociente defrecuencias es3/2,
la cuarta, definida por un cociente Se construye de modoque los
i g u a la 4 1 3 l,a t e r c e r am a y o rd e principales acordes de tres notas
514,elc.Haydosaspectos relevantes esténformados por intervalos con- 243fi28 = 1,898
en la definición de intervalo y de sonantes. Se comienza conla nota
intervalo consonante. En primerlu- Do y se añadeel Mi, unatercera
86 v Crrrucrn.
lruvrsrrencróru abril.2004
P a r ac o n s t r u i rel as m u Yú t i l e l
llamado círculo de quintas que,en
realidad, es unaesPiral quecerra-
remos mástardeenformadecírcu-
lo. La figuramuestra el círculode
quintas. Si lo recorremos enel sen-
tido de las agujasdel reloj,cada
notaestáuna quintaPorencima La espiral pitagótica
de la orecedente es, decir,la fre- de quintas es ilimitada
cuenciade cadanotaes 312de la en lasdosdirecciones.
precedente La. escalaPitagórica
seconstruye a partirdelcírculo "ba- A l o l a r g od e l a c u r v a ,
jando"lasnotastantasoctavas las notasestánsepa.
como
seanecesario paraquequeden den- radas siempre poruna
tro de la escala.Por ejemPlo, la quinta.El méritode
frecuencia delRedelcírculo es3/2x la escala temperada
x3l2 = 9/4,queestáentre2 y 4 y consiste en cerrarla
queda,por tanto,una octavaPor espiral en un círculo.
encimade nuestraescala.Baja-
mosdividiendo por dos (recorde-
mosqueparasubirunaoctava te'
nemos quemultiplicar la frecuencia Losproblemas delasescalas justa La escalatemperada tienetam-
por2 y parabajarla, dividirPor2) y pitagórica, y de muchas otrasque biénla virtudde cerrarla espiral de
y obtenemos los 9/8 del Re de la sediseñaron enlossiglos xvlly xvlll, quintas. En ellael Si sostenido es
escala.Lasnotasde la escalaPi- no sonexcesivame nte gravessi se exactament e queel Do,como
igual
tagórica tienenfrecuencias de la tocaconellasunapiezamusical que podemos observar en el teclado de
lorma(312\nl2n, en donden Y m nocambia detonalidad. Enlosejem- un piano.Aunasí,conviene recor-
sonnúmeros enteros; o bien,si re- plosquehemos visto,unaPieza en darquela escala temperada es una
corremos la espiralen el sentido Do sonarárazonablem ente bienen solución "decompromiso a un" pro-
c o n t r a r iao l a s a g u j a sd e l r e l o j , cualquier
escala. Sinembargo, los blemairresoluble.
(213)n x 2m. músicos
barrocos queríandar más Estaes sólo una Parteminús-
La escalapitagórica tienealgu- riqueza a su música pasando deuna culade la historia de las escalas,
n o s p r o b l e m aE s .n p r i m e rl u g a r , tonalidad
a otraa lo largode una Unahistoria en la que han inter-
ciertosintervalos de la escalano mismapieza.Paraello se diseñó venidomúsicos y científicos como
sonconsonantePor s. ejemPlo, en- la escalatemperada, queoptaPor Galileo o Euler.Existeen Holanda
t r e D o y M i n o h a y u n a t e r c e r a dividirla octavaen 12 intervalos un institutoenteramentdedicado e
mayor(5/a).En segundo lugar,la iguales o semitonos. Dosnotasse- a este tema,la Huygens-F okker
espiralnuncase cierraporqueno paradas porunsemitono tienenfre- Foundation Una. desusactividades
existeningúnpar de enterosn Y cuencias cuyocociente es 21112. Si másesoectacula res consiste en el
m talesque (3/2)n = 2m,es decir, subimos 12 semitonos a Partirde desarrollo del programa informá-
nuncase vuelvea un Do al reco- unanota,es decir,si multiplicam ostico Sca/a,con el que se pueden
rrerla curva.Sinembargo, en oca- su frecuencia pot21t12 doceveces, diseñar escalas a partirde 11 al-
sioneslas notasde la esPiral Pa- h a b r e m oms u l t i p l i c a dp o r 2 , e s goritmos,entrelosquese incluYen
sanmuycercaunasde otras.Eso decir,habremos subidounaoctava. e l p i t a g ó r i cyo e l t e m p e r a d o E.l
ocurre,por ejemplo, cada12 no- La escalatemperada de sieteno- programa dispone también de más
tas del círculo.En efecto,(3lZ\tz t a s v i e n ed a d ap o r l a s i g u i e n t e de tres mil escalasdiferentes, to-
= 129,75es muy parecidoa 27= t a b l a : das ellasutilizadas en la historia
= 128.Recorrer la espiral de quin- de la música occidental o en la de
tas 12 puestoshaciala derecha otrasculturas.
nosllevaría a unSisostenido (véase Lasescalas sontambién de gran
la figura),que es prácticame nte imoortancia en la músicacontem-
iguala un Do. El intervalo entre poránea, que estáconstantem ente
esteSi sostenido y el Do máscer- explorando nuevos diseños, másallá
cano: 21t6 = 1,122 de la escalatemperada de 12 no-
tas.Finalmente para
, el lectorinte-
=,
(+l'1 e12
:; = 1,0136
21ts= 1,26
27h2= 1,499
resado,recomiendo
excelente
de nuevoel
textode DaveBenson,
Mathematicand s Music,que se
puededescargar gratuitamenen te
es bastante pequeño, máso me- 211112 - 1,ggg lnternet.
Estaobradedicamásde
nosun noveno de tonoy se llama 70 páginasa la teoríade las es-
comapitagórica. calas.
y CtENctA,
lruv¡sttencr 2004
órrl abril,
MATEMATIC()S . arrondo
J u a nM . R P
lVlatemátiaas
eleetorales
o s d í a s s i g u i e n t e sa l a s e l e c c i o n e g s e n e r a l e s hay un escañoque quedasin repartir. El redondeo de
siemprese oye y se lee acercade las arbitra- las cuotasno resuelve, pues.el problema del reparto.
riedadesy agraviosdel sistemaelectoral: cómo Un métodoque sí lo soluciona es el de Hamilton, o
un diputadorequieremenosvotos en determinadas de las partesdecimales mayores.En estemétodo,se
provincias, cómotal formación tienecincovecesmás asignaa cadapartidoun númerode escañosiguala
votosque otra pero la mitadde diputados, etc. Las la parteenterade su cuota.Tras ese primerreparto,
críticasgiran sobre todo en torno a la regla D'Hont. q u e d a r ápno r a s i g n aar l g u n o e s s c a ñ o ss:e a t r i b u i r á n ,
Señalaésta cómoasignarlos escañosde cada pro- uno a uno,a los partidoscuya cuotaalcancela ma-
vinciaa los partidospolíticos segúnel númerode vo- yor partedecimal.Con los datosiniciales. el método
tos recibidos. La reglaD'Hontes una de las posibles de Hamilton funcionaría de la siouiente forma:
solucionesdel problemade reparto,que encontramos
en cualquier situaciónen la que deba repartirse algo
NUMERO CUOTA PARTE
f o r m a d op o r u n i d a d e isn d i v i s i b l e( sl o s d i p u t a d odse l PARTIDO DEVOTOS DEREPARTO ENTERA ESCANOS
congreso).
Supongamos que tres partidospolíticos, A, B y C, 300 3,0 3
han obtenido,respectivamente, 300, 140 y 60 votos, B 140 1,4 1
en una provincia a la que corresponden cincodiputa- u
60 0,6 0
dos. La fracciónde votosdel partidoA es 300/500=
= 0,6.Su representación en el parlamento deberíaser
proporcional; es decir,lo másjustoes que alcanzara E n l a p r r m e ' a s c r a c : ó nh e m o sr e p a r t i dsoó l o4 e s -
0,6 x 5 = 3 diputados. Hastaaquí el repartova bien. c a ñ o s3. p a ' aA , ' : : ' a B E e s c a ñ q o u es o b r as e
Perola fracciónde votosdel partidoB es 140/500= q o r v l r oo r p c r , u - - - , = l - : : a : : ^ ; a a raVO'pafte de-
= 0 , 2 8 y l e c o r r e s p o n d e0n, 2 8x 5 = 1 , 4 d i p u t a d o s . c i m a lE . n e s t ec a s , le s : ' 3 a - , ¿ = a - . ?l e 3 i r l a e
j s0,6.
Finalmente, al partidoC le corresponden (60/500) x 5 = s u p e r i oar 0 . 0 m a l e : : : - z : . z : . . - . a r e 4 1 y a 0 4
= 0.6 dioutados. ( p a r t ed e c i m adle a c - : : a : : 3 f - e l c ¡ o o e H a m i l t o n
Ahorabien:no puedehaberdiputados fraccionarios.p a r e c ej u s t oa o ' r - 3 ' : . s : : S ^ e - o a r g o .p r e s e n t a
Hayqueaproximar el repartoa números enteros.(Podría una gravedefcier: =- Dz'= :aca!'laa la luz, veamos
considerarse un parlamento en el oue el valordel voto q u é o c u r r es i , e n ' , e z i : s : a ñ o s . s e t r a t ad e r e p a r t i r
de los diputadosfuera fraccionario, pero semejante 1 2 .L a t a b l ae s e - : 1 . : ¿ s, ' e c o r d e m oqsu el a c u o t ad e
posibilidad supondría una complicación excesiva en el un partidocoÍrx r'c:cses ahora(x/500) x 12):
funcionamiento de la cámara).El númerofraccionario
de diputados que le correspondería a cadapartidose
NUIIERO CUOTA PARTE
denomina cuotade reparto.En nuestroejemplo,la cuota PARTIDO DE\,UTOS DEBEPARTO ENTERA EscAÑOS
de repartode A es 3, la de B es 1,4 y la de C es 0,6.
El problema del repartoconsiste en diseñarun método A 300 7 7
q u e a p r o x i m ee s t o s n ú m e r o sa n ú m e r o se n t e r o s . B 140 3,36 3
Podríamop s e n s a re n r e d o n d e a r l o p s ,r o c e d i m i e n t o
60 1,44 2
habitual en las cienciasexoerimentales: si la oartede-
cimalde la cuotade repartoes inferiora 0.5. redon-
deamosal enteroinferiory si es superiora 0,5, re- El escañoque quedasin repartircon las partesen-
dondeamos al enterosuperior.Con este método,al terasse va al partidoC, porquetiene la cuotacon
partidoA le corresponderían 3 diputados, al B 1 di- partedecimalmayor(0,44).Si repartimos 13 escaños,
putadoy al C 1 diputado. Peroocurreque no siempre la tablasería:
la sumade lascuotasredondeadas es igualal número
de diputados a repartir. NUMERO CUOTA PARTE
Veámoslo. Con los resultados de la tablasiouiente. PARTIDO DEVOTOS DEREPARTO ENTERA ESCANOS
si pretendemos repartircincoescaños:
300 7,8 7 I
B 140 3,64 3 4
NUMERO CUOTA
PARTIDO DEVOTOS DEREPARTO ESCANOS
60 t,co 1 I
230 2
B 140 1,4 1 ya quelosescañossobrantes Ay
pasana lospartidos
B. Paranuestra
sorpresa, C poseeahorame-
el partido
130 1,3 1
nosescañosqueantes,pesea haberaumentadoel nú-
86 ncróru
lruvtsre 2004
mayo,
v Cr¡rucrn,
merototalde escaños.Tal situación, conocidapor pa- pre algo y ese sacrificioconstituye ya una decisión
radojade Alabama,se dio en un estudiosobrela asig- política. Muchospiensan quelasparadojas de Alabama
nac¡ónde escañosa los distintos estadosde EE.UU. y de la población son más dañinasque la condición
en 1880,lo que condujoal congresoa adoptarotro de la cuotay, en consecuencia, defienden el método
métodode repartoen 1901.Sinembargo en Españael D'Honty otrosmétodosque utilizanun divisorcomún,
repartode escañospor provincias siguehaciéndose Losmétodos deldivisorcomúnse basanen el mismo
medianteel métodode Hamilton. Finalmente, el mé- principio que el D'Hont.Se dividenlosvotospor un di-
t o d o d e H a m i l t o na d o l e c ed e u n s e g u n d oi n c o n v e - visorcomúnd. Losmétodos difieren en la formade re-
niente.En ocasiones, el aumentode votosde un par- dondearloscocientes obtenidos. El métodode Webster,
tido,mantenréndose constante el númerode votosdel por ejemplo, los redondea del modohabitual, tomando
resto,puededeterminar que dichaformación política el enterosuperiorsi la partedecimaldel cocientees
vea mermada su representación parlamentaria: se trata mayoro igualque 0,5. En nuestroejemplo, el método
de la paradojade la población.Lo deseablesería un de Websterdaríaun reparto6,3,1para d=50; 4,2,2
métodoexentode ambasparadojas. p a r ad = 7 5 ; y 3 , 1 , 1p a r ad = 1 0 0 .E l d i v i s o cr o r r e c t o
La famosareglaD'Hont,que en EE.UU.se conoce sería100y el repartofinal,3,1,1,diferente del reparto
comométodode Jefferson, se hallalibrede talesde- D'Hont.En estecaso,el métodode Webstersí cum-
ficiencias. La reglaD'Hontconsiste en elegirun común ple la condición de la cuota,perose puedenencontrar
divisord que divideel númerode votosconseguido otrosejemplos en dondeno la verifica.
por cada partido.Los númerosresultantes se redon- De los métodosdel divisor,¿cuáles mejor?Como
deanpor abajo,es decir,eliminando la partedecimal. ya hemosdicho,ningunoes perfecto.Sin embargo,
S e o b t i e n e a, s í , u n n ú m e r od e e s c a ñ o sa s i g n a d o s puededemostrarse que el D'Hontfavorecelos parti-
cuyototalpuedeo no ser igualal númerototalde es- dos con mayornúmerode votos(en nuestroejemplo
cañosa repartir.Se ajustaentoncesel divisord, de estesesgoes evidente). De hecho,en EE.UU.lo pro-
m o d oq u ec o i n c i d aanm b o sn ú m e r o s¿.C ó m oa c t ú ae n pusoJefferson porquesu estado,Virginia, era el más
nuestroejemplosi queremosrepartircincoescaños? pobladoen 1790.Estesesgohaciapartidosgrandes
P r o b e m o sp.o r e j e m p l ol ,o s t r e sd i v i s o r eds = 5 0 , 7 5 , ha sido muy controvertido en nuestropaís. Por otro
100y calculemos los cocientes: lado,tambiénBalinskiy Youngdemostraron en 1980
que el únicométodoque carecede sesgoshaciapar-
NUMERO
tidoscon más, o con menos,votoses precisamente
PARTIDO DEVOTOS d= 50 d=75 d= 100 el de Webster.Quizáséste últimosea un métodode
repartoa considerar paranuestrosistemaelectoral.
A 300 A
Algunoslectoresquizáse hayansorprendido de la
D 140 2,8 1.87 1 A exposición que hemoshechoaquíde la reglaD'Hont.
Habitualmente se explicadel siguientemodo.Se di-
60 1 2 0,8 0,6
v i d ee l n ú m e r o oor1,2,3,
d e v o t o sd e c a d ap a r t i d p
..., n, siendon el númerode escañosa repartir.De
Vemosque el divisor50 da lugaral reparto6, 2, 1, todosesoscocientes se eligenlos n mayoresy se ob-
es decir,un totalde 9 escaños, que es mayorque los tieneasí el reparto(en nuestropaís,además,se eli-
cincoescañosa repartir.El divisor100, por et con- minanantesde haceresta tablalos oartidoscon un
trario,resultademasiado alto,ya que conduceal re- porcentaje de votosinferioral 3%). En nuestroejem-
parto3, 1, 0, cuyototales 4. El divisor75 produceel plo la tablade cocientes sería:
r e p a r t od e s e a d o4: . 1 , 0 ,q u e s u m a nu n t o t a ld e c i n c o
escaños.
P e r o e l m é t o d oD ' H o n t i e n e u n s e r i o p r o b l e m a . PARTIDO NUMERO votos/4
DEVOTOS votos/2 votos/3 votos/s
Recordemos que la cuotade repartodel partidoA es
e x a c t a m e n t3e S i n e m b a r g ol,a r e g l aD ' H o n tl e h a 30*. ::l$* ttü 75' 60
otorgado4 escaños.Lo deseable seríaque cualquier B r{rl , 70 46,67 35 28
métodoasignasea todoslos partidosun númerode
a 60 30 20 15 12
escañosque fueseo bienel enteroinferiora su cuota
o el enteroinmediatamente superiora su cuota.Por
ejemplo, si la cuotaes 2.9.el partidodeberíaobtener Loscincococientes mayores son:300,150,140,100
comomáximo3 escañosy comomínlmo2. Estapro- y 75. Cuatrode ellosen la fila del partidoA y 1, en la
piedadse llamacondiciónde la cuotay parecelógico del B. Portanto,el repartoes 4,1,0,que coincide con
exigirque cualquier méiodojustola cumpla. el que hemoshalladouiilizando el métododel divisor.
Ahorabien,el métodoD'Hontno la satisface, según El lectorpuededemostrar que estaformade hallarel
hemosvisto. ¿Deberíamos por ello desecharlo? La repartoD'Hontes equivalente a la del divisor.
respuesta no es sencilla.Balinskiy Youngdemostra- Hemosvistosólo una pequeñapartede las mate-
ron en 1960que no existeningúnmétodoque verifi- máticas electorales. Si deseanprofundizar másen ellas,
que la condición de la cuotay que estéexentode las les recomiendo la páginaweb "La elecciónsocial:un
paradojas de la población y de Alabama.Estosma- sueñoimposible", de Bartolomé Barceló, profesor de la
temáticosdemostraron, por tanto,que no existeun Universidad Autónoma de Madrid(http://www. uam.es/bar-
métodode repartoperfecto.Hay que sacrificar siem- tolome.barcelo/cu rso.himl).
y Cl¡rucln,
lruv¡slencróru 2004
mayo, 87
U E G (M
) SA T E M A T I C ( ) S J u a nM . R P
. arrondo
Laparadoja
delautostopista
upongamos quese lanzaun dadono trucadoun
grannúmerode vecesy que apostamos un ( n ) =1 x 1 * zr l , . 1 * g " l 9 l " 1 * . . .
euroa quesaldráun cinco.El pagojustode 6 6 6 \6/ 6
estaapuestaseríade 6 euros, puesto que la proba-
1
bilidadde queel resultado de unatiradaseacincoes + nx (*)"' x -+...
1i6.Porpagoentendemos lo queel jugador recibea 6
cambiodeleuroquedepositó, es decir,recibe6 euros
en totalo, si lo prefieren, recibe5 másel euroque peroresultaunasumacon infinitos términos quees
depositó. difícilde evaluar. Unaformasencilla de calcular el va-
Un posible resultadodeljuegoes el quese ve en lormedio<n>es la siguiente. Si jugamos un grannú-
la figura1. He escritoen rojotodoslos cincosque merode turnos,pongamos 6000,el cincoaparecerá,
aparecen en la secuencia de tiradas.Unacantidad aproximadamente, unsextodelasveces, esdecir,unas
interesante desdeel puntode vistaprobabilístico es 1000veces.La sumade las distancias entrecincos
el númerode tiradasque separanun cincodel si- consecutivos es iguala la distancia entreel primery
guiente.Todoaficionado al parchís, y a cualquier juego el último cinco.Estasumaes sóloligeramente inferior
de azar,sabeque estacantidades sumamente ca- a 6000,de modoque la distancia mediaes, aproxi-
prichosa. Enocasiones podemos esperar muchos tur- madamente 6000/1000 = 6. El errorcometido conesta
nos hastaque aparezca el númerodeseado, mien- aproximación se hacecadavezmáspequeño si aumen-
trasqueotrasvecespuedeaparecer en treso hasta tamosel númerode turnosjugados, de modoque,
en cuatrotiradasseguidas. En la secuencia de la fi- paraun número infinito de turnos, el valormedioserá
gura1, porejemplo, entreel primery segundo cinco exactamente 6.
hay8 turnos, entreel segundo y el tercero, 7 turnos, Supongamos ahoraque ustedllegaa la mesade
y así sucesivamente. Las respectivas distancias se juegoconla partida ya empezada. ¿Cuáles entonces
indican en azul,encimade la llavequeunedoscin- e l n ú m e r o m e d i od e t i r a d a sq u et i e n eq u e e s p e r a r
cosconsecutivos. hastaquesalgael primercinco?La respuesta es de
¿Cuáles la probabilidad de queesadistancia sea, nuevo6 turnos.La razónes ouecadatiradaes com-
digamos, iguala 4? Paraqueentreun cincoy el si- pletamente independiente de lasanteriores. El dadono
guientehaya4 turnos,es necesario queno aparczca "recuerda" cuántohaceque salióun cinco,de modo
un cincodurante tresturnos,y queaparezca unopre- quela probabilidad de quesalgaen el primer turnoa
cisamente en el cuartoturno.La probabilidad de que partirde la incorporación deljugador es 1/6,la de que
estoocurraes el producto de las probabilidades de salgaen el segundo turnoes 5/6 x 1i6,y así sucesi-
cadaunode los eventos, es decir: vamente. Es decir,la probabilidad de que salgael
cincoen el enésimo turnoes exactamente iguala la
= 4]' = *r9t t probabilidad de que la distancia entre dos cincos con-
Prob[distancia 6 6 9r 6 6 secutivos sean. Portanto,el número mediode tiradas
quenuestro jugador tienequeesperar hastaquesalga
ya quela probabilidad de quenosalgael cincoes 5/6 el primercincoes también 6. Estoes en ciertomodo
y la de quesí salgaes 1/6.En general, la probabili-sorprendente, sobretodosi planteamos la cuestión de
dadde quedoscincosconsecutivos esténseparados otromodo,tal y comose haceen el gráficosuperior
porn turnoses: de la figura3. En rojose muestran lasdistintas apari-
cionesde los cincos.La flechaverdeindicael mo-
mentoen el queel jugadorse incorpora a la partida.
Prob[distancia= n]' = l*)'-'" I De la figuraparecedesprenderse quela distancia en-
\6/ 6
tredoscincosconsecutivos serásiempre mayorqueel
En la figura2 se puedever unagráficade estapro- númerode turnosque tieneque esperar el jugador
babilidad en funciónde la distancia n (puntos azules).
En contrade lo quea primera vistacabríaesperar, la
distancia másprobable es de sóloun turno.Sinem- 8 turnos 7 turnos 2 lur. 3 tur. 7 turnos 3 turnos
bargo,el valormediode esadistancia, /r, es iguala 6 , 4 , 6 , 5 , 31 , 6 , 61, , 1 , 2 , 5 , 4 , 4 , 3 , 41,,35,,l , 5 , 2 , 1 , 5 , 4 ,13,,1 , 3 , 2 , 51,, 3 , 5 , 4
6. Estevalormediopuedecalcularse sumando todas
las posibles distanciaspesadas con su correspon- 1 . 3 5 t i r a d adsed a d oE. l c i n c oh as a l i d o7 v e c e ys l a sl l a v e s
dienteorobabilidad: indican el número de turnosentreun cincoy el siguiente.
84 v Cr¡rucrn,
Invrsilcncrón 2004
lunio,
dequehayaque
2. Probabilidad La paradoja del autostopistse a ha aplicadore-
esperar hasta
/, turnos la aparición cientemente al transporte de partículas brownianas '
delprimer enel iuego
cinco, del Cualquier partículapequeña en el senode un líquido
dadolronbosazulesl y enel iuego o un gas,comounaproteína en el interior de la cé'
dondelosnúmeros siguen unase' lula,unamotade hollínen el aireo un granode po-
lenen agua,experiment una movimiento erráticoque
cuenciaperiódica
lcuadrados roiosl.
se llamamovimiento browniano, debidoa queel pri-
meroenobservarlo fueel botánico inglésRobert Brown,
en 1827,al mirara travésdel microscopi o gra-
unos
nos de poleninmersos en agua.Desdehaceunos
años,se estánestudiando mecanismopara s trans-
formarestemovimiento errático en un movimiento di-
rigidoen unadirección. Unode estosmecanismo ess
10 20 30 uña especiede válvulaque atrapaa la partícula
deturnoshastael primer
Número cinco browniana que llegapor la izquierda, la dejapasar
haciala derecha, perono le permite regresar' Hernán
L. Martínez,de la Universidad estatalde California,
paraverel primercinco.Sinembargo, la "faltade me- y yo mismohemosestudiado distintos modosde re-
moria"deldadonosasegura lo contrario'El valorme- estasválvulas
il¡étr¡nu¡r a lo largode unalínea.Si las
diode ambascantidades es exactament elemismo. válvulasaparecen y desaparececada n ciertotiempo,
Pensemos en una variante,aparenteme nte trivial, resultamásefectivodiseminarlaals azarque perió-
deljuego.Supongamo que
s en lugarde un dado,los dicamente. La razónes precisamenla teparadoja del
números vansaliendo consecutiva mente1, 2, 3, 4, 5, autostooistPiensen
a. en la líneahorizontal de la fi-
6, 1, 2, 3, etc. En estecaso,la distancia entredos
cincosconsecutivo esssiempre la misma: 6 turnos, tal
y comose muestra en el gráficoinferiorde la figura
3. Si un jugadorse incorpora a la partidaen un turno
elegidoal azar,el númeroqueaparece en eseturno
puedesercualquiera de losseisy el número de tur- Distancia entre la llegada
nosquetienequeesperar hastael primercincopuede del jugadory el primercinco
ser1, 2, 3, 4, 5 ó 6, todosellosconla mismaproba-
bilidad.Portanto,el valormediode estenúmerode
Iurnoses:
I
( n )= * x ( 1+ 2 + 3 + 4 + 5 + 6=) 3 , 5
6
Esteresultado es másacordeconnuestra intuición' Distanciaentrela llegada
deljugadorYel Primer cinco
Si entredoscincoshayunaciertadistancia media,lo
que uno esperaes que la distancia entrela llegada 3. Representació esquemática
n de losdosiuegos descritos
deljugador y el siguiente cincosea,máso menos, la en el texto.Enel primero se lanzaun dado.mientras queen
mitad,En el casode la secuencia fija de números, el segundo losnúmeros aparecen consecutivam ente.Enambos,
estoes lo que ocurre.Sin embargo, en la secuencia el jugadorllegaen algúnturnoescogido al azar.
de tiradasdel dadono es así:la distancia mediaen-
tre cincoses iguala la distancia mediaentrela lle-
gaday el siguiente cinco.Estehechose conocecomo gura3 comoel espacio querecorre la partícula.
Las
la paradojadelautostoplsfa porque
, puedetambiénre- líneasverticales rojasen la figura3, que antesre-
formularsedelsiguiente modo.Un autostopista llegaa presentabalas n apariciones del cincoo las llegadas
unacarretera muypococoncurrida, pordondelosco- de loscoches, seríanahoralasválvulas. Cuando és-
chespasanaleatoriame nte, perode formaqueel tiem- tasreaparecen la ,partícula se encuentra en un punto
po medioentreun cochey otroes de 15 minutos. El al azar,que estaríarepresentadpor o la flechaver-
autostopistacreequetendráqueesperar unos7 minu- de de la figura3. La distancia quepuedellegara re-
tosy mediohastala llegada delsiguiente coche,pero correrla partícula en su movimiento erráticoes pre-
no es así.Si loscochesaparecen de la mismaforma cisamente la queabarcan lasllavesverdesde lafigura'
que los cincosen nuestrojuego,entonces el tiempo Hemosvistoqueesadistancia, en media,es casiel
mediode esperaserátambién de 15 minutos. Si el dobleen el casode la distribución aleatoria queen
autostopista en, lugarde esperarcochesque llegan el casode la distribución periódica. Portanto,si se
pudiera
aleatoriame nte, ir a unaparadade autobús en distribuyen las válvulasaleatoriame nte, se podrán
dondeéstosllegaran, pongamos, cada15 minutos(y transportar las partículas brownianas haciala dere-
conpuntualidad ),
entonces el tiempomediode espera chamásrápidoquesi se distribuyen periódicam ente'
sí seríade 7 minutos y medio.El esquema de ambas Estees otrocasocuriosoen el queel desorden o el
situacioneses idéntico al de la figura3. azarmejoran el rendimiento de un sistema.
Y Clrructl,
Inv¡srtenctó 2004
ru lunio.
S MATEMATI . arrondo
J u a nM , R P
Matemáticas
sostenibles
un pequeño "Sí-respondeAlicia-,peroa partirdelcentésimo
/l liciay Brunoquieren explotar ma-
A nantial de agua mineral, La productividad del d í a t i e n e se l m a n a n t i a l c oc o m ol a m o j a m aT. e
se
, I manantial, es decir,el número de litrosquese puedodemostrar quela mejorpolítica sosfenlb/e es la
puedee n x t r a eer n u n d í a ,d e p e n ddee l u s oq u es e mía.Porsostenible entiendo oueel manantial se va a
le hayadadoen losdíasanteriores. Si un díase ex- utilizar por un tiempoindefinido. lmagina queextrae-
t r a ea g u ad e lm a n a n t i(aslu p o n d r e mqouseo b i e nn o mosaguan diasseguidos, dejamos descansar el ma-
se extraenadao se extraela cantidad determinadanantialotrosm díasseguidos, y repetimos estase-
por la productividad del día),la productividad dismi- cuencia continuamente. Estáclaroquen tienequeser
n u y ee n u n l i t r od i a r i oS, i u n d í an o s e e x t r a en a d a iguala m. Si fueramayor,la productividad acabaría
y se permite así que la capafreática del manantialsiendonulay, si fueramenor, estaríamos dejando de
se recupere, su productividad aumentará en un litro extraer aguaincluso conproductividad máxima, Esde-
d i a r i os,i e m p rqeu en o e x c e d lao s1 0 0 .E l p r i m edr í a cir,tenemos queextraer aguan díasy dejardescan-
l a p r o d u c t i v i deasdl a m á x i m ae,s d e c i r ,1 0 0l i t r o s sar el manantial otrosn díasparaque recupere su
diarios. productividad inicialde 100litrosdiarios, Al cabode
Losdossociosdiscuten sobrela formaóptimade e s o s2 n d í a s ,h a b r e m oesx t r a í d u o n a c a n t i d ad e
explotar el manantial. Brunoopinaquelo mejores ex- a g u a :
traeraguasiempre quela productividad no seanula,
peroAliciaprontole demuestra que ésa no es una ('ot=')'
1 0 0 + 9 9 + 9 8 + . . , + ( 1 0 0 -=n + ' t ) ",r0..
buenaidea,Es ciertoqueextraerán agualoscienpri- ¿
merosdías, pero en el día 101la productividad será
nulay no podrán extraer nada.Tendrían queesperar Laproductividad media seobtiene dividiendo estacan-
otros100díassin utilizar el manantial oaraoueéste tidadtotalde aguaporel número de días;es decir:
recuperase su productividad máxima de 100litrosdia-
rios.Aliciase inclinapor la siguiente estrategia: ex- ( 2 0 1- n ) n _ 2 0 1- n
' ¡¡q/Aí2.
r i' +
traeraguaun díasí y otrono.De estemodola pro- 2x(2n\ 4
ductividad oscilará entre100y 99 y se extraerán 100
litroscadados días,manteniendo una productividad y es mayorcuantomenorsea n. El valoróptimoes
mediade 50 litrosoordía. p o rt a n t on = 1 , q u ec o i n c i dceo nl a e s t r a t e gqi u
a ey o
S i n e m b a r g od,e s p u édse h a c e ra l g u n acsu e n t a s d e f e n ddí e s d ee l c o m i e n zsoa: c a ra g u au n d í a s í y
Bruno volvió a defender su ideainicial. "lmagina -dice otronoy mantener raproductividad siempre entre100
Bruno- que explotamos el manantial durante 100días y 99 litrospordía",
taly comoy0 propongo, extrayendo aguatodoslosdías. "Acepto la derrota -dijo Bruno,Aunasí,mi estra-
El primer día extraemos 100litros la y productividad que
tegiaes mejor la tuyasi tuviéramos queexplotar
bajaa 99litrospordía.Elsegundo díaextraemos 99li- e l m a n a n t isaól l od u r a n t1e0 0d í a s ,¿ C u áel s e n t o n -
trosy la productividad bajaa 98 litros/día, y asi suce- ces la mejorestrategia si el plazode explotación es
sivamente, Enel centésimo día,extraemos sólo1 litro d e N d í a s ? "
y la productividad bajaa cero.En los ciendías,ha- La pregunta de Brunono es sencilla, Si el plazoes
bremosextraído un totalde muyamplio, es decir,si N es muygrande, entonces
parece claroquelo másconveniente es adoptar la es-
( 1 0+0 1 )x 1 0 0 trategia de Alicia durante el comienzo de la explota-
1 0 0+ 9 9 + 9 8 + .+. ,2 + 1 - = 5 0 5 t0i t r o s .
2 ción,Sinembargo, cuando el finaldelplazose acerca
c o n v i e neex t r a em r á sa g u aa p e s a rd e d i s m i n uliar
Antela expresión de extrañeza de Alicia,Brunole productividad del manantial, puestoqueno nospreo-
replica: "¿Yano te acuerdas cómose sumaunapro- cupacómoquedeéstecuando el plazode explotación
g r e s i ógne o m é t r i c o am , o1 , 2 , 3 , . . . , 9 89,9 ,1 0 0 ?L a venza. Analicemos entonces lasiguiente estrategia: du-
s u m ae s i g u a a l l númerd o
o e s u m a n d oms u l t i p l i c a d rante N - n díasutilizaremos la estrategia sostenible
porla mediadel primero y el último." y en el resto,es decir,en los últimos n días,utiliza-
"Calculemos ahora-prosigueBruno- la produc- remosel manantial a diario.Llamaré períodososteni-
cióntotalutilizando tu política de extracción cadados b/ea los primerosN - n díasy períodode extracción
días.En estecasoextraemos 100litrosel primerdía, exhaustiva a los últimosn días,También tomaremos
100litrosel tercero, 100el quinto,etc.Al final,ha- n de formaqueN - n seapar,De estemodo,el úl-
bremosutilizado el manantial 50 días.Portanto,la timodíadelperíodo sostenible no se extraeagua(re-
producción totalseráde 50x 100= 5000litros. ouees cordemos que la estrategia sostenible es extraerel
menorde lo conseguido conmi estrategia." primer día,descansar elsegundo, y asísucesivamente)
86 lruv¡srcncróru julio,2004
v Crrrucrn,
1400 ductividadoscilaentre100y 9g durante el período
y luegobajahastaS0litrospordía,
sostenible
g 1200 posible?
Pero,¿eséstalamejorestrategia ¿Nopuede
; haberotrascombinacione s mayorproducción?
con
s 1000 lasquela productividad, porejem-
¿Combinacion enes
g 800 plo,bajelentamente y no tengael comportamien to
I
(D abrupto de la figura2? Yo no he sidocapazde en-
E ooo contrarninguna, peroemplazo a loslectores a hacerlo
o, ensu defecto,a encontrar unargumento quepruebe
E 4oo quela estrategia de la figura2 es la óptima.
E
oo 2oo LuisDinís,de la UniversidadComplutense deMadrid,
Chrisvan den Broecky BartCleuren, del Limburg
Universitair
Centrum y yo mismo,
(Bélgica), hemos tra-
0
bajadoen estosproblemas de optimización. Vanden
n Broeckllama"estrategia avariciosa"a la de Bruno,
puestoquetratade obtenerel máximoposiblecada
1. Cantidad
totalde aguaextraída
{obviandoel término
b0Í/)en
díasinpreocuparse de lo queocurrirá al díasiguiente.
función
delnúmero de días¿ delplazode extracción
exhaustiva.
Dinísy yo tambiénsolemosreferirnos a ellá como
"matara la gallinade los huevosde oro",Ambasde-
y el período de extracción exhaustiva comenzará con nominaciones indican que la estrategia de Brunoes
productividad 100 litros/día,El aguaextraída en el unaoptimización de lasganancias inmediatas quere-
período sostenible es sultamuynegativa a largoplazo,algoquedesgracia-
damente ocurreconfrecuencia en la gestiónpoiítica
y
100 titros empresarialde nuestro tiempo,
+x
100
y la producción
totalen el períodode extracción
ex- 90
haustivaes
80
( 2 0 -1' ) ' 70
1 0 0 + 9 9 + 9 8 + . . . + ( 1 0 01-' )n=+ 2 titror, 60
50
Porlo tanto,la cantidad
totalextraída
con nuesrra
combinada
estrategia es 40
30
l 0 0 N + 1 0 1 n -n 2 20
litros, ''|0
y CtENctA,
lruv¡sretclóru julio,
2004 87
TEMATI J u a nM . R P
. arrondo
delpoder
Elreparto Europea
enlaUnión
n los últimos mesesha habidounaintensa dis- sejo.Si hayN votantes, el número de coaliciones que
cusiónpolíticaacercadel repartode poderen pueden formar(incluyendo la totalidad del consejo y
la futuraConstitución de la UniónEurooea. Uno la coalición vacía)es 2N.De ellas,algunas seránga-
de lospuntos máspolémicos es la reglaporla queel nadoras, es decir,capaces de sacaradelante unare-
Consejo de Ministros de la UniónEuropea aprueba o solución, y otrasperdedoras. Decimos queun votante
rechaza proposiciones de la Comisión y el Parlamentoes indispensable en una coalición ganadora si, al
Europeo. Estareglaha variadoconsiderablemente en abandonarla, éstase convierte en perdedora. Es evi-
el últimoaño,desdeel Tratado de Nizahastael borra- dentequeel poderde un votante es altosi es indis-
dorfinalde la Constitución Europea aprobado el pa- oensable en muchas coaliciones. El índicede ooder
sadomesde junio. de Banzhaf de unvotante x es proporcional al número
El Consejo estáformado porlosprimeros ministrosro"de coaliciones en las que el votantees indispen-
de los25 paísesintegrantes. En el tratadode Nizase sable.Másprecisamente, el índicees iguala la pro-
asignaba un pesoal votode cadaestadomiembro, babilidad de queel votante seaindispensable en una
mientras oueel borrador de la Constitución Europea coalición elegida al azarde entretodaslasqueel vo-
establece el sistema de la doblemayoría. Cualquiertantepuedeformarcon sus compañeros. Comohay
resolución delconsejo necesita losvotosde al menos 2N-1coaliciones quecontienen a x, el índice de poder
15 estados miembros y quela población totalde los de Banzhaf será
estados quevotanafirmativamente alcance un 65%
de la población totalde la Unión.En el pasadomes \x= $xl2F1'
de juniose relajóestesegundo requisito: paraque
una proposición sea denegada es necesario que se Veamos un ejemplo concreto. Supongamos un con-
opongan a ellaal menoscuatropaíses. De modoque sejointegrado portrespersonas, A, B y C, quetie-
si seoponen sólotrespaíses, la proposición seríaacep- nen,respectivamente, 2, 5 y 6 votos,y en el queson
tadaaunsinalcanzar el 65%de la población. Estaúl- necesarios 8 votosparaaprobaruna resolución. Es
timadisposición impideesencialmente quetresesta- decir,la resolución se aprueba sólosi obtiene 8 o más
dosgrandes, comoAlemania, Francia y ReinoUnido, votos.Estenúmeromínimode votosnecesarios para
porejemplo, puedan bloquear unaproposición en con- aprobarla resolución se llamacuota.Lascoaliciones
tra del restodel Consejo. ganadoras son la A,B,C, es decir,la unanimidad, la
La discusión en nuestrooaísse ha centrado en la A,C y la B,C. El votante A es indispensable en la se-
pérdida de poderquesupone la Constitución en rela- gundacoalición, B es indispensable en la tercera yC
cióncon el Tratado de Niza.¿Existe algúnmétodo lo es en todasellas.Portanto,el índicede poderdel
paramedirel poderde unanación en el Consejo? votante A es q, = 1122 = 1/4,el índicede B_estambién
El problema del "poder" de un individuo o paísen \ B = 1 1 4m , i e n i r aq su ee l d e C e s \ c = 3 1 2 2 = 3 l 4 . V e -
un sistema de votación oonderado ha sidoestudiadomosquelosvotantes A y B tienenel mismopoder,a
matemáticamente desde1940.Prontolos investiga-pesarde queB tienemásdeldoblede votos,Sinem-
doresse dieroncuentade queel "poder" no es pro- bargo,C, consóloun votomásqueB, tienetresve-
porcional al número de votos.Supongamos unaem- cesmásooder.
presacondosaccionistas. Unode ellostieneel 40% Enocasiones, en lugarde dividir el número de coa-
de lasacciones y, portanto,tiene4 votosen el con- liciones decisivas de un votante entreel número total
sejode accionistas, mientras que el otro poseeel 2N-1de coaliciones quelo incluyen, se tomael tanto
60% y dispone de 6 votos.Es evidente que el ac- por cientode coaliciones decisivas del votante x en
cionista mayoritario tienetodoel podersi las resolu- relación a la sumatotalde coaliciones decisivas para
c i o n e sd e l c o n s e j os e t o m a np o r m a y o r í a
s i m p l e , todoslosvotantes. Esteíndicese llamaíndicede po-
mientras queel poder delaccionista minoritario esnulo: derde Banzhaf normalizado, mientras queel que he-
susvotos,a pesarde constituir un 40o/o de losvotos mosdefinido en el párrafo anterior se denomina pro-
totales,no tienenninguna influencia en el consejo. babilístico. Ennuestro ejemplo, lasiguiente tablamuestra
LionelPenrose (padrede losconocidos físicosRoger lascoaliciones decisivas, el índicede Banzhaf proba-
y OliverPenrose) en Inglaterra y JohnF. Banzhaf en bilístico v el normalizado:
losEstados Unidos estudiaron el problema y llegaron
a la misma solución demodoindependiente. Definieron
unacantidad, quehoyse conoce comoíndicede po-
derde Banzhaf, quemideel poderrealde unvotante
en un consejo,
El índicede poderde Banzhaf tieneen cuentalas
coaliciones que puedenformarlos votantes del con-
88 lruv¡silenclóru
v Cltrucln,
agosto,
2004
Losdos índices guardan la mismaproporción en- coaliciones en las queél estéy quetenganexacta-
tre sí. Porejemplo el de C es en losdoscasos,pro- menteN/2individuos. El número de coaliciones deci-
babilístico y normalizado, tresvecesel de A y B. Los sivases el número combinatorio
, que
í n d i c ens o r m a l i z a daous n n o t i e n e nn i n g u nian -
terpretación probabilística ,
suman
lo que son másútllescuandose tratade comparar
siempre100,por
'"=fi;rt)= (N-1)!
(Nt2)t(Nt2-1)t'
í n d i c e sd e p o d e re n t r ed o s s i t u a c i o n edsi s t i n t a s ,
comola Constitución Europea y el Tratado de Niza, Conalgode matemáticas superiores, se puedede-
porejemplo. m^ggtlq gueestenúmeroes aproximadameigual nte a
JesúsMarioBilbao, catedrático de matemática apli- 2N-1\lZm. Portanto,el índicede poderdelciudádano
cadade la Universidad de Sevilla y cuyoscomenta- es ¡nversamente proporcional a la raízcuadrada de la
riosy sugerencias han sidoindispensable para
s la población del país.Si los habitantes del paísvotan
elaboración de esteartículo, ha calculado estosíndices unaresolución y luegosu primerministro transmite la
paralosdistintos sistemas de votación propuestos pa- decisión al consejo, puedetambién demostrarse que
ra el Consejo de Ministros de la UniónEuropea, desde el índicede poderdelciudadano en esteproceso de
el ya obsoleto Tratadode Nizahastalas últlmasver- dosniveles es el producto de losdos índices de oo-
sionesde la Constitución. Los resultados comoletosder:el quetieneel ciudadano dentrode su paísy el
puedenverseen su páginaweb http://www.es i2. r i n i s t reon e l C o n s e j op,o r l o
q u et i e n es u p r i m e m
us.es/-mbilba o. loscálculos
Según delprofesor Bilbao, tanto,paraquetodoslosciudadanos de la Unióntu-
el índice de podernormalizado de losseisoaíses más vieranel mismoíndicede poder,el índicedelprimer
poblados de la Uniónes: ministro en el consejo debería ser proporcional a la
raízcuadrada de la población del país.De estemodo
el producto del índicedel ciudadano y el del primer
ministro seríael mismoparatodoslospaíses.
Inspirados poresteargumento, Iosmatemáticos po-
lacosSlomczynki y Zyczkowski han propuesto la lla-
':::4"!. madareglaPenrose-62, que consisteen dar a cada
rRlNcn : 1 3 ,1 8 8 ñ 6 0 0 ' 9,4887 7,5805 paísun votoproporcional a la raízde su población y
BEINOUNIDO 18,052 8,5600 9,4281 7,5395
establecer una cuota del 62% de los votos totales.
Unacartaa los gobiernos de la UniónEuropea, fir-
ITALIA 12,610 8,5600 9,1807 7,3818 madapor másde 40 investigadore destodaEuropa,
ESPAÑA 9,141 8,1221 7,0202 5,8233 defiende la adopción de la reglaPenrose-62 en la fu-
POLONIA 8,408 8,1221 6,7677 turaConstitución. Conestareglalosíndices deBanzhaf
seríantambién aproximadam ente proporcionale a las
raízcuadrada de la población.
En la segunda columna se detallael porcentaje de El problema es suficientemen te comoparaque
serio
población del paíscon respecto a la población total todosestosargumentos se tomenen consideración .
de la Unión;en la tercerael índicede podersegún Se puedeentender queaparezcan ciertasreticencias
lasnormasdelTratado de Niza;en la cuartasegúnel a la adopción de unareglabasada en la raízcuadrada
primerborrador de la Constitución Europea, queesta- de la población. Un paíscon4 millones de habitantes
bleceque unaproposición se aprueba con una ma- tendría2000votos,pero,si se dividedos mitades,
yoríade estados (13)quecomprendan un 60%de la cadanuevopaístendría1414votos,haciendo un to-
población; y en la quintael índicede podersegúnla tal de 2828.Pareceextrañoque el paísganepoder
versión de la Constitución acordada el pasadomesde porel merohechode dividirse en dos.Sinembargo,
junio,queestablece queunaresolución se aprueba si hayqueteneren cuenta quela voluntad de cadaciu-
al menos15estados votana favory esosestados tie- dadano se transmite al Consejo deformadiferente an-
nenun 65%de la población, siempre queseanmás tesy después de la división.
de cuatroestados los quevotanen contra. d e l í n d i c ed e p o d e rd e
E n m i o p i n i ó ne,l c á l c u l o
El problema quesuscitan estascifrasno es tantosi Banzhaf tienealgunas limitaciones. Porejemplo, todas
se pierdeo ganacon respecto al Tratado de Niza, las coaliciones se suponen igualde probables. Sin
sinocuáles la distribución de podermásjusta.Con embargo, es evidente quehaypaísesconmayores afi-
las reglasadoptadas en losdistintos borradores de la nidades o intereses comunes, lo quehacequeciertas
Constitución Europea, el índicede poderes aoroxt- coaliciones puedan surgirde manera mássencilla. En
madamente proporcional a la población de cadapaís, particular, el profesor Bilbaodemuestra en sustraba-
locualparece a primera vistarazonable. Sinembargo,jos quela reglaqueimpone un mínimo de cuatropaí-
existeunargumento debido a LionelPenrose segúnel sesparabloquear unaresolución apenas influye en el
cualel índicede poderdebería ser proporcional a la índice de poderde lospaíses. Sinembargo, si se tie-
raízcuadrada de la población. El argumento es el si- nenen cuentalas afinidades entrelos paísesde la
guiente. Calculemos el índice de poderde Banzhaf de UniónEuropea, el requerimiento de loscuatropaíses
un ciudadano quevotaen un paíscon N habitantes,de bloqueo puedetenerrelevancia.
conN pary siendola cuotaNl2,es decir,la mayoría
simple. Esteciudadano seráindispensable sóloen las parr@seneca.f is.ucm.es
y C¡¡rucrn,
l¡lv¡srrcnctótrl agosto,
2004 89
JuanM,R.Parrondo
ineficiente
Demscraeia
49,5|
@ \ 50,5 Moneda 2
Pero,¿quéocurresi haymásde unjugador?
caso,algunos de losjugadores pueden
Eneste
tenercapital
/ \ múltiplo de tresy otrosno,Tienen quetomarunade-
ganar perder 74,5 cisióncolectiva, perosus"intereses" sonahoraopues-
tos. Un modorazonable de tomarla decisión es el
voto.Cadajugadorvota por uno u otrojuegoy se
adoptala decisión de la mayoría, Veamos quéocurre
1.Lasreglas delosjuegos paradójicos A y B.Lasmonedas que si se adoptaestasolución democrática. En la figura
seutilizan encadajuego sonrojaso verdes según seandesfavo. 2 se muestra el capitalporjugador(capital totaldivi-
rables o beneficiosas parael jugador. didopor N, el númerode jugadores) en funcióndel
86 y CtENctA,
lruv¡slsnclóru 2004
septiembre,
p e n s a rq u e l o s 1 0 0 0j u g a d o r q : , , n o , p u e h
dae cne r
nadameio rquetoma rbsiadeci sión dem ocrá tica' Al
ii. i .iián ,i,-ó on
ellacons egu imosquela may oría
másvent ajosSin
;; t;,;il ;.i'oñ iutg r. al iue- go o'
emb arboel, aspe ctopara dójicde o los jueg oscon'
ár..-r "*u óonó iulion áistin ta' Reco rdemque, os segú n
h óáái l¡. origi nal, bast aconalter nar losjueg os'in-
.rr'.ó ü.'fo rmáalea toriapara , que el resu ltado sea
áána Oor. Si nues tros 1000luga dore s,..e luga n rde vo-
i;; ;;it;.i on oe sus int'e reseelige s, ncom pleta '
iñán i. al ara,el iueg oque se iueg aen cadaturno '
i;ñ;. ñaia
-mueñlstra, p-oo emoverlo s -enla figur a3' La
bürv áro¡a de nuev o,la gana ncia por iuga '
áór óot.h io.con la vota ción"ego ísta".mie ,
ntras
que
la .utu. azulmue stra la gana ncia cuan do el jueg ose
Jigá cómp retam ente al ázar 'Se pued enobte nerin-
Turno s óirlo oaná ncias mayo res si se comb inaunaestra te-
por
2. Capit al lugad or en funció del
n núme ro de turno s cuand el
o
áiá-. oóiit av una aléa toria La' curv averd e,poreje.T '
j u e g o ' seel i g ed e m o c r á t i c a m e ;ü.;".-r,lo"
j;;;ña nciai uano oel-jugá jueg ose dore s porvota ción
elige
Lna ct eu'r v aa z u el s e l c a s oi l - ' l '
= ñLio üii lo"n de l9s egoí sta'
l a v e r d iel l 0 Y l a r o i al V ' 1 0 0 0 '
inen temien tras que el 307oresta nte ,vota su voto
decid e
al azar.
núm ero de turn osy paravario svalo res de N' La ; Poroué un votoalea torio es meio rque un voto
luiuáátulrepr esen ia'la gana ncia paraunsolojuga - .g[í.i .ilá iázO nes queel votopura m^enegoí te sta'
áorru= 1. Vóm os que,i pesade r lasfluct uaci ones éilv es sufic iente men gran
tó de, cond uce a queB se
óióo e
'reht iu.de un jueg ódtl dzdt ,latend encies a clara ' ái¡i.éñt,odolos s turno s'-En efec to, paraqueB pierd a
asce ndeñ te' La curv averd ees la gana ncla me- es nece sario que másde la mita dde los juga dore s
Oiápot juga dorcuan doN = 10 juga doreys la curv a i*oáñ -cáp ital'm últipde lo 3, pues toque ésto sson
iái"'* aiio" ,j N = 1000 .La gana ñcia para10 iuga do' ió.1, oitni é.de n. d¡ rues gran de, es muyimpr g!3,
;;;; iedu cecons idera blem ente com,para da conel ble oue estoocur ra.En méd ia,sóloenileun 33%
casoN= 1, Y para1000luga doreel s resu ltado es u ' u n ' g 8 ; uá". l o s j u g a d o r et si e n e nc a p i t aml últiplo
óüiá t.nt.' d'es alen tado bl-ca
r: pital dism inuy lenta
e á.-g, i.niá iite jrágá A comoB o unacomb inaci ón
oeroimPl acab leme nte.
'-in áé áln¡J t. Por lo tañto ,la reglade la mayo ríaelige
..i.iii éJra . hem ossupu esto quecadajuga dor ;'reri ó¡;B salvofluct uaci onés que son más raras
"ego
vota -con viene ísta- menes te", decir ,votapor el jueg oque órán i. rnáll óisea N. Com oel jueg o.B es perd ed.o .r'
rnást. en cadamom entoSi ' su capit ales ái iesul taob de la reglade la mayo ríaes la p-érd ida
ün *útip rode tres,vota ráporA, mien tras quesi el óo..t '*ié que refle lañ las curv asrojasde lasfigur as
;;piü ;;;t mutt ipio detres,vota ráporB' se podr ía á i g Sinbmb argosi, en el votose inclu ye algode
átéa torie dad, en álgu nos turno sse iuga ráA haci endo
qr. It óára áoia eñtreen acció ny el resu ltado final
seagana
--poü ii.tnodor,
t
expli carestainefi cacia del votoegoí sta
en térm inos men osmate máti cos' Las dos mon edas
á.t jr.go B se pued encons ideramala r sy buen asra-
chaópáracadajuga dor.En la decis ión dem ocrá tica'
ióJo. 'io.juga dore jque
6
está nen buen arach aquie ren
aoió vecn árrá v fuerz ánconsu votola elecc ión de B'
P;¿ lt tin;rí a de losjuga doreque s está nen la mala
rach ase venaltam enté pirju dicad os p9restadecis ión
r ái tÑriá oo glob ales'n egat ivo' De hech o'en cada
irino lá-tá .hade un juga dorcam bia, por lo que et
uoioeooi staquele oeñe j¡cia en un turnole perju dica
.ñ otrócon un resu ltado tamb iénnega tivo paracaoa
iuo.d olinOiv iOua Lat'mora leja es simil ara la queob-
queexpl icamen
i;i;i" üiioi áf.o n losiues bs fe'
os
br.tó o. 2004 :conv iené eñ ocas ionesacr
s ificarlas
Turno s y a cortoplazoy echa rasíuna
ááná ncit.indiv idua les
poriugad or
3. Capit al enlunci ón
delnúme ro deturnoys para ñr;;;; tqret tosqueeitán pasa ndo unamalarach a'
/V= 1000lugad ores.
Lacurvaazulcorre spon casoenel que
alde ÑJ Joü p6ür . ei buen o[ara toda,la colec tivida d'
losiuegoses eligeal la rolaa la elecc ión
n azar, y a
demo crátic siÁoporq ue¡lued eser unomism oquie nen el futur o
la ver¿ea unaelecc ión
demo cráticenala queel 70% dela po' esté¡'enel aguj ero" '
votaegoís tameynte
blaci ón el 30% resta ntealeat oriam ente' oarr@ sene ca'fi s.uc m'es
Itllv¡s lonclvÓn
Ct¡nc tn, 2004
septi embr e, 8i
U E G OMSA T E M Á T I C t ) S J u a nM .R .P a r r o n d o
Mássobre depoder
elreparto
In losJuegos Matemáticos de agosto tratamos as- bar una resolución) del 62% de los votostotales.Con
F pectos matemáticos delreparto depoder. Unpro- esta reglalos índicesde Banzhafde todoslos ciuda-
I- blemacon ciertasimplicaciones en un asunto danoseuropeosseríanaproximadamente iguales.
p o l é m i ccoo m oe s e l d e l a s n o r m a sq u e l a f u t u r a Algunoslectoreshanmostradosu disconformidad con
Constitución Europea propone parala tomade deci- este argumento, puestoque se basaen las coalicio-
siones:la famosadoblemayoría. En aquelartículo nes decisivaso coaliciones en las que el ciudadano
analizamos el temacon ciertodetalle, peroalgunos es indisoensable. Estascoaliciones debentenerexac-
lectores me hanenviado preguntas y comentarios que tamenteN/2+1individuos, lo cual las hacealtamente
merecen quevolvamos a dedicarle unanuevaentrega. improbables. ¿Es entoncesválidoun argumento que
Recordemos oueel índicede Banzhaf es unaforma se sustentasobrecoaliciones que nuncase van a dar
de medirel poderde un votante en un consejo que en la práctica?
sigueun s¡stema de votación ponderado, es decir,un La objeciónno se sostieneporquelas coaliciones
sistema en el ouecadavotante tieneun número de decisivas son sóloun modode presentar la definición
votosdistinto. Se calculaa partirde las coalicionesdel índicede Banzhaf.Hay sin embargootraspropie-
quepuedenformarlosvotantes delconsejo. Si hayN dadesdel índiceen las oue las coaliciones decisivas
votantes, el número de coaliciones quepueden formar no son importantes. Veamosuna de ellas.
( i n c l u y e n dl ao t o t a l i d adde l c o n s e j o
y l a c o a l i c i ó n Supongamos un individuo x en un consejocon N vo-
vacía)es 2N.De ellas,algunas seránganadoras, es tantes.Comoya hemosmencionado, existen2N coa-
decir,capaces desacaradelante unaresolución, y otras liciones posibles
entremiembros delconsejo. Tomemos
sonperdedoras. Decimos queun votantees indispen- una de ellasal azat y supongamos que la coalición
sableen unacoalición ganadora si, al abandonarla,elegidavotaafirmativamente una resolución y el resto
éstase convierte en perdedora. El índicede poderde de los miembrosdel consejovotanen contra.¿Con
Banzhaf de un votante x es proporcional al número rrl" qué probabilidad nuestroindividuo x se encontrará en
de coaliciones en lasqueel votante es indispensable, el bandoque ganala votación?
quese llaman coaliciones decisivas. Másprecisamente, En la figurase esquematiza esta situación con to-
el índicees iguala la probabilidad de queel votante dos los casosposibles. La coalición elegida,que vota
seaindispensable en unacoalición elegida al azarde afirmativamente, puedeser de variostipos:ganadora
entretodaslas queel votantepuedeformarconsus (G),perdedora (P) o de bloqueo(B).Unacoalición ga-
compañeros. Comohay 2M1coaliciones que contie- nadoraes la que gana si vota afirmativamente, una
nena x, el índicede poderde Banzhaf será perdedora
coalición es la que pierdesi votatantoafir-
mativacomo negativamente y una coaliciónde blo-
0'
nt x. -- queo es la que gana si vota negativamente y pierde
2N_1
si vota afirmativamente. Esta distinción
es necesaria
En aquelartículo,
calculamos el índicede poderde siempreque las votaciones no se ganenpor mayoría
Banzhafde un ciudadanoque votaen un paíscon N simple.Porejemplo, si en un consejode 50 votossólo
habitantes,
suponiendo N par y que las resolucionesse aorueban las resolucionesque tienen30 o másvo-
seaprueban pormayoría simple.Este tos afirmativos y haydos coalicio-
ciudadano seráindispensable sólo nesenfrentadas, cadaunade ellas
en lascoalicionesen lasoueél esté coAltcroN coAlrcroN con 25 votos,la que votaafirmati-
ELEGIDA COMPLEMENTARIA
y quetenganexactamente Nl2+1in- (vorAsr) (voTA
No) vamente pierdey la quevotanega-
dividuos.Conalgode combinatoria \ tivamente gana.Ambasson coali-
se puededemostrar finalmenteque I cionesde bloqueo: no soncapaces
el índicede Banzhaf delciudadano I desacaradelante resoluciones, pero
es inversamente proporcional a la o, s í s o n c a p a c e sd e b l o q u e a r l a s .
I
raízcuadrada de N. I Aunquelas coaliciones de bloqueo
Estadependencia con N es una I gananlasvotaciones cuando votan
de las justificaciones
de la llamada I neqativamente, reservamos la deno-
normaPenrose-62, propuesta porlos miñación "coalición ganadora" úni-
3
)rt
matemáticos polacosSlomczynki y I para
camente aquellas quepueden
Zyczkowski, y queconsiste en dara I sacaradelante resoluciones. Sonsólo
cadapaísun votoen el Consejo de I estascoaliciones ganadoras lasque
Ministrosde la Uniónproporcional a I setienen encuenta enel cálculo del
la raízcuadrada
habitantes
(número
del númerode sus
y establecer una cuota
paraapro- r/
|
j índicede Banzhaf.
observar
Comose puede
en la figura,si unacoali-
devotosmínimos ciónes ganadora, su complementa-
s2 y CrENctA.
lruvrsT|cnclóru 2004
sctubre,
ria será perdedora; mientrasque si una coaliciónes 1-n, 1-tlp
de bloqueo la complementaria serátambién de bloqueo. 2 ^ 2
Finalmente, con el subíndice x denotamos las coali-
cionesa las que perteneceel individuox y con nx Sumando ambasprobabilidades la proba-
obtenemos
aouellasa las que no Pertenece. queresulta
bilidadde estaren el bandoganador, ser:
De acuerdocon la figura,nuestroindividuo x está
que ganala votaciónen los trescasos p ^ ^ ^ ^ _ -1 + l x l p
en la coalición sdrrar
siguientes: cuandoestáen la coalición elegiday ésta 2
lruv¡srcncróru
v Crrrucln.
octubre.
2004 93
EG MATEMATI J u a nM . R P
. arrondo
Numerogooglia
n unode esosmomentos en losque,delante del En la segundapartedel argumento inicial,suponía-
ordenador, unono encuentra inspiración pornin- mos que todos los númerosde menosde sietecifras
gunaparte,escribícasimecánicamente mi nú- aparecenpor igual.Estasuposiciónes incorrecta. Los
merode teléfono en el casillero de Google, el másco- númeroscon menoscifrasson evidentemente más co-
nocidoy eficazbuscador en lnternet. Googlerespon- munes.Lo podemosver buscandoen Googlemi nú-
dió inmediatamente quehabíaencontrado 31 páginas merode teléfonoy quitándolecifrasde derechaa iz-
weben lasqueaparecía mi número, el 3686105. El re- quierda,es decir,buscando3, 36, 368, 3686, hasta
sultadome pareciósorprendente. ¿Erami númerode 3.686.105. El resultado puedeverseen la figura1, en
teléfono especial, comoparaestarcontenido en tantas dondetambiénhe incluidoel resultado del mismoex-
páginas, o estasapariciones eranúnicamente frutode perimentorealizadocon otronúmerode sietecifrasto-
la casua!idad? madoal azar, el5.477.232.El comportamiento de las
Google tieneindexadas aproximadamente 6000mi- dos gráficas,en escalalogarítmica, es similar:el lo-
llonesde páginas. Suponiendo queen todasellashu- garitmodel númerode páginasdecrecede manera
bieraunnúmero (ysólouno)alazarentre1 y 10.000.000,casi linealy con una pendientede 716= 1,17.Esto
la probabilidad de que mi teléfono estuviera en una
páginaseríade 10-7y el númeromediode páginas '1,00E+10
conmi número sería6 x 10ex 10-7= 600.Estees,por ,^ 1,00E+09
supuesto, un argumento muygrosero: ni todaslaspá- j t,ooe+oa
1,00E+07
ginascontienen un solonúmero ni todoslosnúmeros fr 1,00E+06
ff
sonigualde probables. H 1,00E+05
¿Podríamos refinarun pocomásel argumento? En f, 1,00E+04
primerlugar,¿cuántas páginas webcontienen núme- ff 1,00E+03
ros?Unaformade estimar la fracción de páginas que !Z 1,00E+02
1,00E+01
contienen números, utilizando sólolasfunciones debús- 1,00E+00
quedade Google, podríaser la siguiente. Buscamos 1 2 3 4 5 6 7
unapalabra muycomún, como'the',quese encuentra NUMERO DECIFRAS
en5790millones depáginas. A continuación buscamos 1. Número de páginas,en escala quecontienen
logarítmica,
la misma palabra peroeliminando laspáginas quecon- lasprimeras
tienen ' 1 ' , ' 2 ' , ' 3 ' ,
e t c .L a m e n t a b l e m eGnot e
o ,g lseó l o
cifrasde dosnúmeros de sietecifrastomados
de '10palabras
(barras
azulesly 5.477.232lbarrasnoradasl.
permite un máximo en susbúsquedas.al azar:3.686.105
Porello,sólopodemos buscarpáginas quecontengan
'the'(hayqueponerun+ antesde la palabra paraque quiere decirque,al añadirunacifra,el número de pá-
el buscador la admita)y que no contengan nueveci- ginasse multiplica aproximadamente por10-7t6 - 0,068.
fras.Haciendo distintas pruebas, vemosqueel número Podemos pensar queestefactores el producto de dos
de páginas quequedan después de eliminar las que probabilidades: la probabilidad de queen unapágina
contienen números es,aproximadamente, de 26,6mi- aparczca un número conunaciframás,queseríadel
llones.Estosignifica que el 99,54o/o de las páginas 680/o, \ la probabilidad de que la cifraadicional sea
contienen las primeras cifras.Sin embargo, estemé- precisamente la de nuestro número, quetendríaque
todono es fiabley el resultado varíasi en lugarde estaren tornoal 10%.
'the'se utilizan otraspalabras. Esteresultado sí parececonsistente y permiteob-
Poralgunarazónquedesconozco, el algoritmo de tenerla siguiente aproximación parael número de pá-
Google paraeliminar palabras no conduce a resultadosginasquecontienen un número dadode c cifras:
consistentes. Porejemplo, si buscamos 'time'obtenemos
405millones depáginas. Buscando'time -space', es de- N = no(0,068)"-1
cir,laspáginas quecontienen la palabra 'time'y queno
contienen la palabra 'space', obtenemos 24,5millones. en dondenoes el número de páginas quecontienen
Finalmente, buscando 'timespace',es decir,todaslas la primera cifradel número. Aunque enseguida vere-
páginas quecontienen las dospalabras, lo quese ob- mos un modode refinarel cálculode D6,se puede
tienees 10,7millones. Evidentemente, el número de pá- comprobar, buscando páginas quecontengan el 1, el
ginascon'time'y'space', 10,7millones, másel número 2, elc.,que n0 estáen tornoa los 1000millones de
de páginas con 'time'y sin 'space', 24,5millones, de- páginas. Insertando estedatoen la fórmulaanterior,
beríaserigualal número de páginas con'time'.Sinem- obtenemos que un númeroconcreto de 7 cifrasde-
bargo,no llegaa la décimaparte.Conotrosparesde beríaaparecer en unas100páginas, unode 8 cifras
palabras se obtienen resultados similares. Demodoque en unas7 y unode 9 cifrassóloen 0,46páginas. Se
utilizar
la opción de eliminar palabras no es nadafiable. trata,porsupuesto, de unaaproximación muygrosera,
88 lruvtslonclóru
v Cleructn.
noviembre.
2004
peroel lectorpuedecomprobaalguna r de estaspre- ffi o,ss
z
dicciones , ejemplo,
Por pruebea introducir números o o r
de ochocifrasy veráque Googleencuenrra ,
como O
E ncc
mucho,unao dos páginas. Quíteleunacifraal nú- (L
meroy veráquese encuentraunas n pocasdecenas, UO
n r¡
tal y comopredice nuestra fórmula. -
La aproximac se ión puede refinarun poco máste- uJ z
niendo en cuentaunaviejay misteriosamiga: a la ley f , n n E
de Benford, a la quededicamolos s JuegosMatemáti- tIIJ I O
cos de diciembre de 2002.La ley diceque,en un L
conjunto de datosnuméricoque s provengadel n ,,mun- NUMERO
do real",la probabilidde adqueel primer dígitode los
datosseaun 1 es mayorqueIa de queseaun 2, un conla queaparecen
2. Frecuencia números de unasolacifra
3, etc.Conmásprecisión la, probabilidde ad queel (barrasmoradas) comparada conla ley de Benford(banasazulesl.
primerdígitosead es, segúnla leyde Benford;
dentemen te, superael número de páginas indexada s
Po=tog,nf -\ t .1) porque en una misma página puede haber varios nú-
dl meros).Paraun númerode 7 cifrascomenzan do por
Utilizando estafórmula se encuentra que.oarad= 1 1, la fórmula nosda 134páginas, mientras quepara
la probabilid ad es, aproximad amente, del gO%,para unoquecomienza por3 essólode56páginas. Jugando
d=2 del17,6o/0, parad= 3 del 12,5o/o, parad=4 del conalgunos números escritos al azar,se puedecom-
9,7o/o,parad = 5 del7,9o/o, plre,d = 6 del6,7ok,para probarque la fórmulaprediceaceptable mente los re-
d =7 del5,8o/o, parad= 8 del5,1./oy parad = g del sultados de lasbúsqueda s.
4,6%.Qomovemos,el 1 es másde seisvecesmás Podemos ahoravolvera la pregunta inicial: ¿esmi
probable que el 9, unadiferencia considera ble. ¿Se número de teléfono especialm ente frecuente o sus01
verificala ley de Benford en Internet? aparicionepueden
s serfrutodel azar?La fórmulaan-
He realizado dosexperimen tos relacionad con os la teriornosdicequeun número de 7 cifrascomenzan do
leydeBenford. Enel primero deellosbuscoenGooole por3 debería aparecer enunas56páginas. porlotanto
números '1,
de sólounacifra:el el 2, elc.,y calcülo mi númeroes relativame nte raro.Comparen tas mo-
s
lasfrecuenciarelativas, es decir,el número de pági- destas 31 aparicioncon es las 199.000 delnúmero de
nasen queaparece un dígitoconcreto dividido porel
número de páginas en dondeaparece unocualquier a
de.los 9 dígitos.El resultado se muestra en la iigura U> uJ n?
2 (barras moradas) y se compara conla leyde Benford z
(barrasazules).El predominidel o dígito1 no es en <¡ E
o,es
los datosrealestan grandecomoel predicho por la
ley;sin embargo, la tendencia descende nte es ctara. uJ t 0,2
o nrc
. Perola leyde Benford se aplicaal primerdígitode
los números y no a las vecesqueaparecen tosOigi- ;iz 0 1
por
tos separado. Unsegundo experimenmásacorde tU to
conel significad o la leyes el siguiente
de .
Tomamos IÍ o,os
un númerode seiscifrasal azary vamoscambiand o u 0
su primerdígitodesdeel t hastael g. por ejemplo, 1 2 3 4 5 6 7 8
tomando el 183.954, buscaríameste os número, luego PRIMER DIGITO
el 283.954, el 383.954, etc.Anotamos los resultadó s
de las búsquedayscalculamode s nuevolasfrecuen- 3. Frecuencia
de apariciones
cambiando el primerdígito
cias relativas. En la figura3 se ven las frecuencr as de distintos números de seiscifras,comparada conla lev
comparad as conla fórmula de Benford. El acueroo es de Benfordlcurvaazu\.
mayorqueen el casode la figura2.
Estamos ahoraen condicion es de refinaraún más 7 cifras1.234.567Este . sí es un númeropeculiar.
nuestra fórmula parael número de aparicion es, susti- ¿Podríautilizarse algunavez Googleparacuantifica r
tuyendono por un númeroproporcio nal a la frecuen- lo "raro"o lo "familiar" quees un número?
cia dadapor la ley de Benford. Conello,el número Nolo sé,perocreoqueGoogle, además de seruna
de páginas en lasquedebería aparecer un número ta
de herramieninsustitui parael internauta
ble es, un es-
c cifrascuyaprimera cifraes d es: tupendo bancode pruebas parajugarcon números.
He obtenido el factor45x 108imponien do que la lnvitoal lectora continuar eslanumerogo oglra consus
propios experime ntos o juegos. Aquívanalgunas pre-
N = 4 5x 1 0 8x t o g-.\, o ( l * + ) ,( 0 , 0 6 8 ) " - 1 guntas:¿cuáles el númerode 7 cifrascon menos
dI aparicion es? ¿Cuáles el que aparecemásveces?
sumade páginas para todovalorde d v de c sea0e Curiosam ente, no es el1.254.5 67. He encontrad o
uno
10.000 millones, quees un pocosuperior a Ia suma queaparece enmásde600milpáginas. lmaginen cuá|.
de todaslasaparicionede s números de unacifralevi- parr@ seneca.f is.ucm.es
lruvtslctclyóru
CtENctA,
noviembre
2004. 89
MATEMAT1COS
UEG()S J u a nM . R P
. arrondo
prodigios
Calculista s os
. I-s posible calcularla raíz13 de un número novena o decimotercede raun número se puedesim-
t F de 100cifrasen 0,15segundos? Un cal- plificarbastante (siempre suponiendo queel resultado
( tlr culistacolombiano, JaimeGarcíaSerrano, es un número entero). Conun pocode entrenamien to
"!'*ura ostentareste récorden el libroGuiness. podemos convertirnos en calculistas prodigiosos y cal-
Des"graciad amente, es algoque no he podidocom- cularla raízquinta de unnúmero de 10cifras. Veamos
probar. Tampoco he podidoaveriguar cómose realizó cómo.
ia prueba. La raíztrecede un número de 100cifras La raízquintade un númgro de diezcifrastendráa
tieneentre7 y B cifrasy supongo quese tardamás l o s u m o2 c i f r a sy, a q u eV 1 0 1 01=0 0 .L a ú l t i m ad e
de 0,15segundos en escribirlao decirlade vivavoz. esascifrases precisament laeúltimacifradel número
Quizálos 0,15segundos se refieren a lo que tardó original. Porlo tanto,sólotenemos quecalcular la pri-
GarcíaSerrano en empezar a dar la solución. meracifra,la de lasdecenas. Paraellobastarecordar
En cualquier caso,algoque me resultó curioso al la potencia quintade todaslasdecenas, del10al 90,y
documentarm e calculistas
sobre prodigiososesquemu- nisiquiera esnecesario recordarla conexactitud. Podemos
chosde ellosse especializan en calcularraícesquin- calcular la raízdecualquier nÚmero si memorizamo loss
tasy decimoterce ras. ¿Porquéestapredilección La? números queaparecen en la siguiente tabla:
respuesta es quelas potencias quinta,novena y de-
cimotercera de un número enteroconservan el último
dígitodelnúmero. Conellose consigue unapequeña
ventajaen el cálculode la raí2.En estatablase
muestra potencias:
el últimodígitode las distintas
82 Y Cl¡ructn,
lruvrsronctóru diciembre,
2004
potencias
la pruebadel nuevea las distintas de un de práctica,el cálculode raícesquintasde números
'15
número: de cifras.El númeroelegidotendríaen este caso
tres cifras.Las unidades se obtienende formatrivial,
puescoinciden con las de la potencia quinta.Lascen-
tenasse puedencalcularcon una tablaparecidaa la
de las potencias quintasde las decenas.La tablaes
idénticaa la de las decenas,con la salvedadde que
en la primeracolumnaaparecerían centenasy la se-
z:; '{*Ét
, I :
¡.:::i
It1,i:;:.:.1 4
',
gundacolumnacorrespondería
el métododescritoanteriormente.
a n11010. Aplicaríamos
oeroeliminando las
diezúltimascifrasde la potencia en lugarde las cinco
s'l; g g g .
últimas.Finalmente, obtendríamos las decenascon la
7 1 i 4 ' oruebadel nueve.
P o r e j e m p l o :¿ c u á le s l a r a í z q u i n t ad e 2 4 . 9 5 3 .
5 7 I 4 2 I 5 960.486.368? Eliminamos las últimasdiezcifrasy ob-
tenemos2495.Estáentre1000y 3000,luegola cifra
6 I I I I I I de las centenasde la raíz debe ser un 4. Por otro
lado,la cifrade las unidadeses 8. Finalmente, apli-
7 4 1 7 4 1 7
candola pruebadel nueveobtenemos un 1. Portanto,
I 1 I 1 8 1 B l a s u m ad e l a sc i f r a sd e l a r a í zd e b es e r 1 , c o nl o c u a l
la cifrade las decenastieneque ser necesariamente
I I I 9 9 I 9 7. El resultado es entonces 478.
Si la pruebadel nueveda precisamente g, se puede
Paraobtenerla, al igualqueocurría conla tabladel aún decidirentrelas tres posibilidades. Veamos,por
últimodígito,no es necesario hacergrandes opera- ejemplo,la raíz quintade 48.524J39.602.976. La ci-
ciones.Por ejemplo, la fila correspondiente al 5 se fra de las unidadeses 6. Paralas centenaselimina-
calcula de la siguiente forma: 52= 25 da 5 + 2 = 7; 7 x mos los diez últimosdígitos,quedándonos con 4852,
x 5 = 3 5d a 3 + 5 = B ;8 x 5 = 4 0d a 4 + 0 = 4 ;y a s í que está entre3000y 8000.La cifrade las centenas
sucesivamente. En estecaso,salvoel 3 y el 6, cuyas es entoncesun 5. La pruebadel nueveda 9, con lo
potencias siempredan 9, es en la potencia séptima cualIa raízbuscadapuedeser 516 (da 3 en la prueba
cuandovuelvea aparecer el númerooriginal. Esto del nueve),546 (da 6) o 576 (da 9). Como4852está
ocurre también conla potencia 13.Quizáporelloesta lejostantode 3000 comode 8000,la mejorestima-
potencia sea tan utilizada por los calculistas. La po- ción es 546, el resultadocorrecto.Sé que no es un
tencia13 es la máspequeña en la queel últimodí- métodomuy preciso,pero con un poco de práctica
gitoy la prueba delnuevese recuerdan confacilidad.funcionaen la mayoríade los casos.
Conla potencia quinta,tampocoes difícilrecordar Todosestos métodosmuestranque, en las poten-
el resultado de la oruebadel nueve.Aoarecen todos ciasde númerosenteros,hay una considerable redun-
losdígitos, salvoel 3 y el 6. Lo únicoquehayquere- dancia,utilizada de maneramuy hábilpor los calculis-
cordares queel 5 y el 2 estánpermutados, asícomo tas prodigiosos. Sinembargo, no hemosde restarméritos
el 7 y el4. Conestenuevotrucopodemos calcular de a estosmagosde los números.E incluso,másalláde
nuevola raízquintade 844.596,301. Si aplicamos la los trucosque utilicen, creoque son casosinteresan-
regladel nueveobtenemos 4. Paraellono hacefalta tes para indagarsobreuna cuestiónde bastantemás
sumartodaslascifras, porque podemos agruparlas en calado:¿hay una aptitudmatemática intrínsecaal ser
paresquesumennuevey eliminar dichospares.Del humano,o son las matemáticas una puraconstrucción
número original,844.596.301, podemos eliminar de un cultural?En lo que se refierea estacuestión, el caso
vistazolascifras45.963y, conun pocomásde aten- másintrigante es probablemente el de Ramanujan, cu-
ción,el par8-1.Nosquedaentonces 4. Segúnla ta- yas increíbles habilidades no se limitaban al cálculoal-
blaanterior, lascifrasdel número quebuscamos de- gebraicosinoque abarcaban el razonamiento abstracto
ben sumarentonces 7. Comola últimaes un 1, la en muchasramasde la matemática.
orimera debeser6. Otro caso llamativode calculistaprodigioso, que ha
El método tienepor supuesto el riesgode que la aportadoalgode luz al estudiode la historiade las ma-
sumade las cifrasde la potencia quintasea 9, en temáticas,es el de ThomasFuller,un africanonacido
cuyocasola sumade las cifrasdel número elegido en 1710en la actualLiberiay quefue llevadocomoes-
puedesertanto3, como6 o 9. Sinembargo, al estar clavoa losEE.UU.en 1724.Murióen Virginia a la edad
estostres números bastante separados entresí, po- de 80 añosy alcanzóbastantefama comocalculista.A
demosacudira la tablade las potencias quintas de pesarde no saberleerni escribir,era capazde realizar
las decenas, recordando ahorasólode formaaoroxi- complicados cálculoscon rapidez.En los últimosaños,
madalasentradas del30,60 y 90. los estudiosos de estecasohan llegadoa la conclusión
Peropuedeser muchomásespectacular combinar de que Fulleradquirió muchasde sushabilidades en su
los dos métodos: el de la tablade las potencias de infanciaen Africa,revelándose asíquela matemática de
lasdecenas y el de la prueba delnueve. Conambos, los pueblosafricanosdel sigloxvu teníaun desarrollo
se puedelograrsinmuchoesfuerzo, aunque conalgo mayordel que se consideraba hastaahora.
y Cl¡rucln,
lruvrsflolcróru diciembre,
2004 83
) SA T E M A T I C O S
U E G (M . arrondo
J u a nM . R P
Elnúmero y lainformación
mayor misteriosa
. l^l e puedeobtener información delanada?Hay xrro. Si el númeroque leemosen nuestropapello su-
) _\ un sencillo problemade probabilidad en el pera,diremosque dichonúmeroes el mayory si no
U t-¿ queunotienela impresión de queargose- lo supera,diremosque el númeroocultoes el mayor.
mejantees posible.El problemaes eljuegodelnúmero ¿Escapazestaestrategia de aumentarla probabilidad
mayory consiste en lo siguiente.
Alguien eligedosnú- de ganarel juego?Llamemosa al mayorde los dos
merosal azat,percdistintos entresí, escribe
cadauno númerosy b al menor.En nuestropapelestaráa con
de ellosen un papely nosda a elegirunode losdos probabilidad 112yb conprobabilidad 112.Puedendarse
papeles.Nosotros tomamos unode los papeles y lee- tres casos:que tanto a como b esténpor encimadel
mossu contenido. Conestainformación, tenemos que umbral,que esténpor debajo,o que a esté por en-
adivinarcuálde losdosnúmeros es el mavor. cima y b por debajo(véasela figura2). No sabemos
con qué probabilidad se da cada uno de estoscasos,
pero lo que es seguroes que si se da el tercerode
ellos,nuestrométododel umbralacertará.En los otros
dos casosel métododel umbraltiene una probabili-
dad 112de acertar.Por tanto, la probabilidad media
de acertares mayor que 112,siempreque el tercer
caso (a > Xunb>b) se dé algunavez, y es iguala 1/2
si no se da nunca.Es decir,hemosconseguido aumen-
tar la probabilidad de ganar,siempreque coloquemos
e l u m b r adl e m o d ot a l q u e e l c a s oá ) x u n b > b s e d é
en algunaocasión.
El lectorpuedepensarque aquí no hay nadamis-
1. Eljuego:
debemos cuáldedosnúmeros
adivinar aleatorios terioso.Podemosacertarcon probabilidad mayorque
unosólodeellos.
conocido
esel mayor, 112,pero necesitamos algo de información para colo-
car el umbraladecuadamente. Si tomamos100 como
umbraly los númerosse eligentirandoun dado de
Lo únicoque conocemos paraadivinarcuál de los seis caraso al azar entre 1000y 2000, la estrategia
númeroses mayores el númeroescritoen nuestro no tiene ningúnefecto.Para cuantificar mejorla in-
papel.No sabemosnadaacercade cómose han ele- fluenciadel umbralsobrela probabilidad de acertar,
gido los números.Puedeque sean positivos, negati- supongamos que cada uno de los dos númerosse
vos, entre1 y 100 o entre10.000y 40.000.Parece elige al azar, de forma independiente, y tal que P(x/
entonces que leerel númerode nuestropapelno nos es la probabilidad de que el númeroelegidosea me-
puedeaportarningunainformación. El otronúmero,el nor que x. Entonces, la probabilidad del primercaso
oculto,puedeser cualquieray, por tanto,tenemos (a,b, xrr6)es P1=11- P(xu^6))2: la probabilidad del
una probabilidad112de acertar,tanto si apostamos segundocaso (a, b < xumb)es P2= P(xumb)z; y la del
por nuestronúmerocomo si lo hacemospor el nú- tercercaso(d> Xumb> b) es Pr=2P(xrr6)11 - P(xumil.
merooculto. La probabilidad de acertares entonces:
Sin embargo, se puedeaumentaresta probabilidad
con un truco sorprendentementesencillo.Bastapara Pacertar
" = ! + P (xu^) 11- P(x,.b)l
=l tR * Pr\ + P,
ello que elijamosantesdel juego un númeroumbral z' 2
APOSTAMOS
PORNUESTRO
NUMERO
APOSTAMOS
POREL NUMERO
re
OCULTO Xumb
2. Lostrescasosposibles
en la estrategia
delumbral:
el mayor pordebajo (casointermedio), se aciertasiempre,
mientrasque,si
de losdosnúmeros,
a, se representaconun puntomoradoy el ambos estánporencima o pordebajo (casosuperior se
e inferior)
menor,á, conunoazul.Cuando a estáporencimadelumbralyó a c i e r t cao np r o b a b i l i d1a/ d
2.
88 y Cl¡¡lctn,
INVESTTGA0TóN 2005
enero,
La probabilidad de acertarmás
alta es Pacertar= 3/4 y se alcanzasi
p o n e m o se l u m b r a dl e f o r m aq u e
P ( x u n b=)1 1 2 .P o r e j e m p l os, i l o s
númerosse escogenal azar enlre
1 y ' f 0 0 , P ( x ) = Y 1 1 0y 0e l u m b r a l P(a)- P(b)
óptimoserá 50. En general,si los
númerosse escogenal azar en un
ciertorango,el umbralóptimoserá
el puntomediode dichorango.Por 3 . E s t r a t e gai lae a t o r isai:y e s e l n ú m e rqou ee n c o n t r a me0nsn u e s t rp0a p e al , p o s t a m o s
'l
el contrario,si P(xrr6)= 0 o , los porél conunaprobabilidad Ilyl lcurvarojal.
dos númeroselegidossiemprees-
tarán por encimao por debajodel
umbral,respectivamente, y, portanto,el métododel um- cima o por debajodel umbral,pero es 1 si a está
bralno ofreceningunaventaja(Par",tr,=1/2).Necesitamos p o r e n c i m ay b p o r d e b a j o .
portantoconocer cómose eligenlos números paraen- Es ciertoque la ventajasobrela elecciónaleatoria
contrarun umbraladecuado. (Pur*t",es112)puedeser mínima.Téngaseen cuenta
Sin embargo, una modificación del trucodel umbral que Q(y)tieneque crecerde 0 a 1 cuandoy crecede
perm¡teacertarcon probabilidad mayorque 112sin co- menosinfinitoa infinito.Por tanto,en algunostramos
nocernada acercade cómo se han elegidolos nú- Q(y)tieneque crecermuydespacio,comoocurrepara
merosinicialmente. En lugarde un umbralque nos valorespequeñoso grandesde y en la curvaroja de
dice por qué númeroapostar,elijamosuna probabili- la figura3. Si el rangode valoresque puedentomar
dad aM entre0 y 1 de apostaral númeroy que hay los dos númeroselegidosestáen una zonaen donde
en nuestropapel.La estrategia es en sí mismaalea- Q(y)crecemuydespacio,entoncesla ventajade nues-
toria,es decir,no nos dice por qué númeroapostar tro métodoserá muy pequeña.Aun así, lo sorpren-
sinoque nos da la probabilidad de hacerlopor uno u dentees que si Q(y/crecesiempre,dichaventajaserá
otro:si el númeroque leemosen nuestropapeles y, mayorquecero,admitido que los númerosiniciales se
diremosque es el mayorcon una probabilidad Q(y,). han obtenidoal azary de forma independiente, pero
Lo asombrosoes que esta probabilidad puedeser sin importarsu distribución de probabilidad.
cualquiera, con tal de que aumentecuandolo hagay, ¿De dóndehemossacadola información que nos
como la curvaroja de la figura3. Esto es razonable: permitepredecircuálde los dos númeroses el mayor
cuantomayorseay con másprobabilidad diremosque con una probabilidad superiora 112?En mi opinión,
es el númeromayor. es un auténticomisterio.Creo que la pregunta"¿cuál
Comoantes,llamemosa al númeromayory b al es el númeromayor?"es extremadamente sensiblea
menor.El númeroy en nuestropapelseráa con pro- cualquier pequeñainformación acercade cómose oo-
babilidad112y b con probabilidad 112.Acertamossi tienenlos números.Si conocemos la distribución de
y = a y decimosque es el mayor,algoque ocurrecon probabilidad conla quese hanobtenido, podemosacer-
probabilidad Q(aIz; o bien,si y = 6 y decimosque el tar con una probabilidad 3/4, utilizando el métododel
númeroocultoes el mayor,algoque ocurrecon pro- umbralóptimo.Bastaríainclusoconocerel rangoen
babilidad | - A@112. Portanto,la probabitidad de acer- el cualpuedenestarlos númerosparaescogerun um-
tar es: braladecuado (aunqueno el óptimo).La estrategia de
Q(y) pareceutilizarsimplemente el hechode que los
p _ ._ _ Q ( a ) + 1 - O ( b ) _ 1 * Q ( a ) - Q ( b ) númeroselegidosestánen un ciertorango,o, lo que
acerar
2 2 2' 2 es lo mismo,¡utilizael simplehechode que los nú-
merosexisten!
que es mayorque 112,puestoque a > b y, por tanto, Porúltimo,conviene recordar que las probabilidades
Q(a)> Q(b),comose muestraen la figura3. ¡Obsérvese no tienenmuchosentidocuandose aplicana un solo
que el resultadoes válidopara cualquierpar de nú- turno del juego.Habríaque aplicarla estrategia de
meros elegidosy para cualquierprobabitidad Q(y)! Q(y)a un grannúmerode turnosparaobservarta ven-
Lo úniconecesariopara demostrarque la probabili- taja de la que hemosestadohablando.Pero,en el
dad de acertares mayorque 112es que Q(y)uezca casode jugarvariosturnos,y siemprequese nosper-
cuandoüece y. Aunqueparezcaincreíble,el argu- mitacambiarde estrategia en cadaunode ellos,podría-
mentoes correcto.Es ciertoque, para encontrarla mos utilizarla información de turnosanteriores para
verdaderaprobabilidad de acertar,habríaque pro- modificar aU). Mi impresión es que la mejorestrate-
mediarsobre los posiblesvaloresde a y b (con a gia seríautilizarcomoumbralla medianade los nú-
mayorque b), perodichopromedioserásiemprema- merosque han salidohastael momento, es decir,un
yor que 112,por ser Q(a/- O(b) una cantidadposi- umbralque estépor debajode la mitadde dichosnú-
tiva para cualquierpar de valoresa, b con a mayor merosy por encimade la otra mitad.De todosmo-
que b. Para la elecciónconcreta"Q(y)es iguala 1 dos,quizálos lectoresencuentren una estrategia me-
cuandoy supera Xunby 0 si no lo supera"recupe- jor o puedanarrojaralgo de luz sobreel enigmático
r a m o se l m é t o d oi n i c i a ld e l u m b r a l ,y v e m o s q u e origende la ventajaproporcionada por la estrategia de
Pacertar es 112si a y b estánamboso bien por en- la figura3. <parr@ seneca.f is.ucm.es>
y Ct¡ructn,
lruv¡snenclóru enero.
200b 89
MATEMÁTICOS J u a nM . R P
. arrondo
Problema
desaparcami ento
¡lr¡ i ustedviveen unagranciudady cometela im- segundos en dar la vueltaen cochea todoel aparca-
\ prudencia de ir a unteatrodelcentro en su pro- miento. Hayqueandarun pocodeprisa paraello,pero
lvf pio coche,probableme nte se hayaencontradoestono afectaa nuestroproblema. Se puedede he-
en unasituación parecida a la quese muestra en la chosuponer unavelocidad menor. Lo únicoimportante
figura1. A unaciertadistancia de su destino, ponga- es la relación entreel tiempoinvertido en dar una
mos500metros, ve unlugarparaaparcar' ¿Debe apro- vueltaen cochehastael aparcamient y oel tiempoin-
vecharlo o es mejorcontinuar y confiaren queva a vertidoen recorrer andando lossitiosquenosseparen
encontrar un sitiolibremáscercadelteatroal quese delteatro.
dirige? Si empezamos a buscaraparcamient cuando
o esta-
La figura1 muestra una situación muysimpleen mosa unadistancia n del teatro,la probabilidad de
dondesólose puedeaparcar en unacallede sentido no encontrar ningún sitioes pn,puesto queéstaes la
único,en cuyoextremo se encuentra el teatro.Unco- probabilidad de quelos n sitiosen dondebuscamos
chequealcance el teatrosin haberencontrado apar- esténocupados. Por otrolado,encontraremun os si-
camiento debevolveral comienzo porotracalleen la tio a unadistancia k del teatrosi los primeros n- k
que no se puedeaparcar e invierte un tiempof en sitiosestánocupados y el siguiente libre.Estoocurre
dar todala vuelta.Supondremtambién os que cada conunaprobabilidad ,n-x ( - p), dondek puedeser
unode los posibles aparcamienestá tos ocupado con 1, 2, 3,...,n. Portanto,la de encontrar aparcamien to
unaprobabilidad p, que,desgraciada mente, serácer- a unadistancia k después de haberdadovvueltas es:
c a n aa 1 .
La situación asídescrita no es muyrealista, porque p n vp n _ k ( l _ p )
normalment e se puedeacercar
uno o alejardelteatro
porvariasrutasen lasquees posibleaparcar, . e p u e d ve e rq u el a
Sinem- e n d o n d ev p u e d es e r0 , 1 , 2 , . .S
bargo,la obligación de dar la vueltaa la manzana y sumade estasprobabilidadaes todoslosposibles va-
el tiempof que se invierteen ello constituye una loresde k y v es iguala 1, siempre quep seamenor
formasencilla de penalizar el tntento de acercarnos al que1, lo cualindicaqueen alguna ocasión debemos
teatrodespreciandsitios o libresy nos va a permitir encontrar sitio,
realizar algunos cálculos. Si damosv vueltas y encontramo aparcamien
s ato
Supongamo lassiguienteestrategia: aparcaremo ens unadistancia k del teatro,¿cuálseráel tiempototal
cualquier sitioqueestéa unadistancia menoro igual invertido en aparcar y llegarandando a nuestro des-
quen delteatro(medida en número de coches, como tino?Comohemossupuesto quetardamos f segun-
muestra la figura1).¿Cuáles el número n óptimo? Un dosen darla vueltaa la manzana y 1 segundo en re-
criterio de optimización razonable es minimizar el tiem- correrandando cadasitiode aparcamientelo,tiempo
po totalquetardamos en llegaral teatro.Admitamostotalserá Tv+ k segundos. En realidad, la expresión
quetardamos un segundo en atravesar andando cada paraeltiempo totalesmáscompleja, yaquedeberíamos
posiblelugarde aparcamient y oquese tardanf = 50 ieneren cuentael tiempoquepasamos en el coche
desdeel comienzo de la calledeltea-
trohastael lugarendondeaparcamos.
Sinembargo, si f es el tiemPo que
se invierte en ir desdeel finalde
la calledel teatrohastasu co-
mienzo, y siestetiemPo f esmu'
chomayorqueel tiemPo que
se tardaen recorreren co-
c h e d i c h ac a l l e ,f v + k s í
constituiría unabuena aPro'
1 . ¿ D e b e maopsr o v e c heal r
s i t i ol i b r ea u n ad i s t a n c i a
/ , 0 b u s c aur n a p a r c a '
mientomáscercano?
88 febrero,
v Cl¡rucln,
lruvrsrcnclóu 2005
7
ii
ximación deltiempototalinvertido.
Supondremos que
es estolo queocurre,aunque hayqueadvertir quela
figura1 no representa
adecuadamente estasituación,
puestoqueparaelloel recorrido desdeel finalde la
calledelteatrohastasu comienzo deberíasermucho
máslargoquela propiacalle.
Finalmente.Daraencontrarel tiempototalmedio,te-
nemosque promediar Tv+ k utilizando las probabili-
dadesanterioresparak y v. El cálculono es sencillo
y requiere algunas
conocer fórmulas sobrela sumade t¡Jó
progresiones geométricas.
Sin embargo, el resultado:s c c
no es excesivamentecomplicado:
I.JJ
Tpn+n p
t, =
1-pn-14
y CtENcrA,
lruv¡sl0lclóru febrero,
2005 89
Éjrq! ¡i
UEGOS
MATEMATIC()S J u a nM . RP. a r r o n d o
Ladotedelsultán
88 y Cr¡rucln.
lruv¡snonclóru marzo.
2005
0,45 En estafórmula, neperiano
In es el logaritmo yy
e. o'4 es un númeroque vale0,5772y se llamaconstante
de Euler-Mascheroni.Estaconstante ejerceun papel
k u,óc
uJ
(J n?
importante en distintasramasy problemas de la
matemática, comolateoríade números de
o el cálculo
tJJ ^ ^-
o u,z¡ Laaproximación
seriese integrales. es bastante buena,
o comopuedeapreciarse en la figura2, Si aplicamos
< (- \-,
o
de Eulera la prooabilidad
la aproximación de acertar,
t o,rs obtenemos:
cD n r
Í n /n-1 \
fL n^q -
pacertar= 'n |rlv¡
N /
0
n C u a n d ot a n t oN c o m on s o n m u y g r a n d e sl ,a
probabilidad de acertardepende sólode o,= n/N,es
1 . P r o b a b i l i ddaeda c e r t aern f u n c i édne ln ú m e rno d e h i i a s
decir,de la fracción de hijasrechazadas de antemano:
a sa.d ac u r v ac o r r e s p o naduen n ú m e rtoo t a ld e h i i a s
r e c h a z a dC -o' Ina. A partirdeestaexpresión, loslectores
distinto N:= 1 0 ,2 0 ,3 0 , . . .1, 0 0 .
Pacertar=
cón álgunosconocimientos de análisismatemático
oodrán encontrar sin muchadificultadel valormáximo
de la probabilidad se alcanza
de acertar: parau = lle
La probabilidad de acertares entonces la sumade y valeprecisamente 1/e.Casualmente,
Pacertar.max= la
estasprobabilidades extendida a todoslos posibles máximaorobabilidad de acértarcoincide con el valor
valores de k, quevande 0 hastaN - n - 1, es decir: óptimode s. En la solución aparece otronúmerode
n l 1 1 1 1 \
Pacertar= * +
N \; n*l n+2+"'+ *1 /'
y CrENcrA,
lruv¡sletcró¡r marzo,
2005 89
l:::=.:.::.:r:l
J UEGOS MATEMÁTICOS Juan M.R. Parrondo
Fósiles y lotería
N
ormalmente jugamos a la lotería comprando un representar en una cuadrícula en donde están todos los
décimo, es decir, tratando de adivinar qué número posibles pares (x,N), como en la figura 1. Los círculos
saldrá de un bombo que contiene un cierto rojos representan la estrategia de apostar siempre por
número de bolas. Los paleontólogos se enfrentan en N = 10, independientemente del valor de x. La probabi-
ocasiones a un juego casi opuesto: conocen el número lidad de ganar, Pganar = 20 %, puede también obtenerse
que ha salido de un bombo y tienen que averiguar cuántas sumando lo que vale P(N,x) en los 10 círculos rojos
bolas hay en él. de la figura 1.
Este problema, cuyo planteamiento y parte de su Pero es posible imaginar otras estrategias. Por ejemplo,
análisis me han sido sugeridos por Antonio Fernández, en la representada por los círculos azules de la figura 1,
profesor de matemáticas del Instituto Salvador Allende se apuesta por el N más pequeño compatible con la
de Fuenlabrada, parece un tanto trivial. Si, por ejemplo, bola extraída x, es decir, N = 6 si x = 1, 2, ..., 6, y
N = x si x = 7, 8, 9 o 10. La probabilidad de ganar con
esta estrategia se obtiene sumando las 10 probabilida-
10 des P(N,x) de los puntos azules de la figura, y resulta
ser: Pganar ≈ 29,6 %. Esta estrategia es por tanto más
9 eficaz que la anterior. No es difícil demostrar que es
la estrategia óptima: Los puntos azules no se pueden
mover hacia abajo, puesto que entonces apostaríamos
N 8
por un número N de bolas en el bombo inferior al nú-
7 mero extraído x, lo cual es absurdo. Pero si movemos
cualquiera de los puntos hacia arriba, aumenta N y
6 disminuye la probabilidad P(N,x). Por tanto, cualquier
desviación de la estrategia de los puntos azules tiene
1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 como consecuencia una disminución en la probabilidad
x de ganar.
1. Diferentes estrategias para adivinar el número N de bolas de Es curioso que la mejor estrategia consista en decir
un bombo del que se ha extraído la bola x.
que el bombo tiene el menor número de bolas compa-
tible con el número extraído x. Mucha gente piensa que
la bola extraída x es una estimación razonable de la
nos dicen que la bola extraída de un bombo es la 8, el mitad del tamaño del bombo y que se debería apostar
número total de bolas N puede ser igual o mayor que 8. por algún número N cercano a 2x y compatible con las
En principio da la impresión de que no importa por qué reglas del juego. Sin embargo, acabamos de demostrar
número apostemos, con tal de que sea mayor o igual que esta idea no es correcta.
que 8. Sin embargo, esto no es siempre cierto. Un método muy general de resolver problemas como
Veamos un caso muy sencillo en el que supondremos éste es la llamada inferencia bayesiana. Este método
que el número total de bolas N se elige al azar entre 6
y 10. Es decir, sólo puede ser 6, 7, 8, 9 o 10, y toma 40
cada uno de estos valores con probabilidad 1/5. En el
bombo se introducen N bolas numeradas de 1 a N y se 35
extrae una de ellas. La probabilidad de que el número 30
PROBABILIDAD (%)
Sorteos polémicos
E
n ocasiones, las administraciones públicas se de dicha lista. Finalmente, cuando en un colegio se
ven obligadas a diseñar sorteos con importantes cubren todas las plazas libres, los siguientes aspirantes
repercusiones para los ciudadanos. Algunos de son asignados al centro que eligieron como segunda
ellos han sido polémicos por un uso incorrecto de las leyes opción en su solicitud, y así sucesivamente.
de la probabilidad. Hace unos años tuvo cierta repercusión Este tipo de sorteo es claramente injusto, a pesar
un sorteo realizado por el Ministerio de Defensa para de que se utiliza en muchas comunidades autónomas.
determinar quiénes se librarían del servicio militar: los Alguien llamado Alejandro González Zunzunegui, por
llamados “excedentes de cupo”. En el sorteo se asignaba ejemplo, elegirá después de todos los García y todos los
un número de forma aleatoria a cada individuo y se González independientemente de la letra que salga en
extraía luego en un acto público un número de unos el sorteo. Como estos apellidos son muy comunes, es
bombos. A partir de dicho número se empezaban a contar posible que Alejandro se quede sin plaza en el colegio
los excedentes. El sistema de bombos resultó un fiasco que haya elegido, sea cual sea el resultado del sorteo.
porque los números mayores tenían una probabilidad más Se puede objetar que el número de plazas libres frente
alta de salir, debido a un error bastante evidente en el al número de empates no es tan pequeño como para que
método de extracción. El caso ocupó las páginas de los se agoten con una sola letra. Normalmente el número de
periódicos e incluso hubo interpelaciones parlamentarias plazas libres está entre 1/3 y 1/2 del número de empates.
pidiendo al gobierno la repetición del sorteo. No hubo En cada colegio se admitiría por tanto más o menos a
necesidad de ello, puesto que la asignación inicial de la mitad de los aspirantes empatados; se recorrería la
números había sido aleatoria (aunque no pública), con mitad de la lista alfabética. Si es así, las irregularidades
lo que el proceso completo era equitativo. No vamos en la distribución de apellidos apenas deberían afectar
a entrar en detalles sobre aquel pequeño escándalo al reparto. Sin embargo, un análisis más minucioso in-
probabilístico (los lectores interesados pueden encontrar dica que este argumento no es correcto, incluso con
en el número de febrero de 1998 de la revista Suma un fracciones de aceptación de 1/2 y 1/3.
estudio muy completo del caso, realizado por Roberto Para realizar este análisis es necesario conocer la
Marcellán), sino que analizaremos otro sorteo polémico distribución de apellidos según su inicial. Una estima-
más actual y que afecta enormemente a muchas familias. ción razonable se puede obtener de la guía telefónica.
Se trata de los métodos que las comunidades autónomas En la figura 1 se muestra el número de páginas que
utilizan para distribuir las plazas escolares de los colegios la guía telefónica de Madrid dedica a cada letra del
públicos. Ramón Muñoz Tapia, profesor de física de la alfabeto (he eliminado la “ñ”, por la que empiezan muy
Universidad Autónoma de Barcelona, me ha enviado un pocos apellidos). Como la guía tiene 1660 páginas,
análisis de sus deficiencias que deja en evidencia los supondré una población de 1660 ciudadanos que han
escasos conocimientos de teoría de probabilidad que de someterse al sorteo de la primera letra, con apelli-
exhibe la administración. dos distribuidos igual que en la guía. Es decir, habrá
En muchos colegios públicos hay más solicitudes que tantos individuos empezando por una letra dada como
plazas libres. Para conceder dichas plazas, existe un páginas de la guía correspondientes a dicha letra. Fi-
baremo que tiene en cuenta la proximidad geográfica, nalmente, para realizar el sorteo hay que fijar la frac-
el número de hermanos en el centro y otros criterios. ción p de plazas en litigio con respecto al número de
Aun así, se dan numerosos empates, porque los criterios aspirantes en cada centro, fracción que supondré igual
del baremo son escasos y la mayoría de los aspirantes para todos los centros. Con todas estas hipótesis, que
cumplen algunos de ellos. Para dilucidar estos empates el no se alejan excesivamente de la realidad, se puede
gobierno de la comunidad autónoma
elige una letra en un sorteo públi- 250
co. Se comienza entonces a asignar
NUMERO DE PAGINAS EN LA GUIA
0,5 nunca: son los últimos con apellidos que empiezan por
C, G y M. Ello se debe a que el número de aspirantes
0,4
que empiezan por estas tres letras es 172, 179 y 191,
0,3 respectivamente, que son cifras superiores al número
total de plazas a repartir: 166.
0,2 El sorteo de la letra es, por tanto, manifiestamente
0,1
injusto. En algunas comunidades autónomas hubo quejas
y se mejoró el sistema sorteando las dos primeras letras
0 del apellido en lugar de sólo una. Esta modificación,
0 500 1000 1500
sin embargo, no es suficiente para que el sistema sea
ASPIRANTES
completamente equitativo. Este año, la Generalidad ha
2. Probabilidad de obtener plaza en el centro elegido en primera dispuesto un sorteo aparentemente justo: se numeran
opción para los aspirantes ordenados por orden alfabético y para todos los solicitantes de la comunidad autónoma por
distintos valores de p: 1/2 (puntos azules), 1/3 (puntos rojos) y orden alfabético y, en sorteo público, se obtiene un nú-
1/10 (puntos verdes). mero correspondiente a uno de ellos, a partir del cual
se comienzan a aceptar solicitudes en cada centro. Con
este sistema se eliminan las injusticias que hemos ana-
calcular la probabilidad de que un aspirante “gane” el lizado aquí.
sorteo, es decir, que obtenga plaza en el colegio elegido Sin embargo, hay otra nada desdeñable. El método
como primera opción en su solicitud. Para ello basta sería justo si las distribuciones de apellidos en los as-
identificar qué aspirantes ganan con cada letra, algo pirantes de cada colegio fueran iguales a la distribución
que depende de la fracción p. Por ejemplo, si p = 1/2 en la totalidad de aspirantes de Cataluña. Imaginen que
y en el sorteo sale la letra A, ganarán los primeros en un determinado colegio todos los aspirantes se llaman
830 aspirantes en orden alfabético. Si sale la letra L, García. En ese caso, los últimos de la lista de aspirantes
ganarán los últimos de la lista a partir del 842 (que a plaza en ese colegio tendrían una probabilidad aproxi-
es el primer aspirante que empieza por L) y los 12 madamente 1/S de obtenerla, siendo S el número total de
primeros de la lista, porque, al llegar al final de lista aspirantes en toda Cataluña, mientras que los primeros
sin haber repartido todas las plazas se continúa por la obtendrían con probabilidad 1–1/S. El número S suele
el principio de la misma. Finalmente, para calcular la ser muy alto. Este año está en torno a 100.000. Por eso
probabilidad de ganar de un determinado aspirante, se la ventaja de los primeros García frente a los últimos en
cuenta el número de letras con las que dicho aspirante nuestro singular colegio sería de 0,99999 a 0,00001. ¡Un
gana y se divide por 26 (que es el número total de sesgo considerable! Aunque éste es un ejemplo extremo,
letras). El cálculo es un poco tedioso, pero se puede cualquier diferencia entre la distribución de apellidos en
realizar con algún programa informático. un colegio y en toda la comunidad autónoma produci-
El resultado se muestra en la figura 2, para distintos rá sesgos en el reparto. Estas diferencias pueden ser
valores de p: 1/2 (puntos azules), 1/3 (puntos rojos) y bastante apreciables, ya que hay barrios con una mayor
1/10 (puntos verdes). La figura muestra que el sorteo concentración de población extranjera o con abundancia
dista bastante de ser equitativo. Para p = 1/2, todos los de ciertos apellidos. Consultando Idescat, el servicio
aspirantes deberían tener una probabilidad 1/2 de ganar. estadístico de la Generalidad, se puede comprobar que
Sin embargo, los diez primeros aspirantes (ordenados tales diferencias existen. El apellido García, por ejemplo,
alfabéticamente) gozan de una probabilidad del 65 %, lo tienen un 24,29 % de residentes en Cataluña, pero en
mientras que los que se encuentran entre los puestos una comarca el porcentaje se eleva hasta casi un 31 %
830 y 850, es decir, con apellidos que empiezan por K mientras que en otra desciende hasta el 7,15 %. Otros
y L, o entre 1040 y 1110, franja que corresponde a los apellidos presentan valores más extremos, como Masip,
últimos puestos de la M y los primeros de la N, tienen que llega al 20,91 % en el Priorato mientras que sólo
una probabilidad de ganar del 38,5 %, porque sólo ganan alcanza un 0,39 % en toda Cataluña. Es de esperar que
con 10 letras. Aunque la curva es bastante irregular, estas diferencias sean mucho más acusadas en poblacio-
se puede explicar cualitativamente mediante los datos nes pequeñas, como la correspondiente a los aspirantes
representados en la figura 1. Los diez primeros aspiran- que viven en la misma zona de un municipio.
tes de la lista ganan con 17 letras: la A y de la K en En definitiva, parece inevitable eliminar los sesgos
adelante. La razón es que la mayoría de los apellidos en cualquier método de reparto que se base en una
se concentran en la primera mitad del abecedario. Por ordenación alfabética. Lo más justo sería ordenar al
ese mismo motivo, los aspirantes que están en la mitad azar a todos los aspirantes y extraer de los bombos el
de la lista son los más perjudicados en el sorteo. número a partir del cual se empieza a elegir plaza. Te-
Si la fracción p de plazas a repartir es menor, por niendo informatizadas todas las solicitudes, este sistema
ejemplo p = 1/10, las diferencias se acentúan. Los más no sería difícil de llevar a la práctica. Eso sí, requeriría
beneficiados siguen siendo los primeros en lista, porque que nuestros gestores tuvieran algunos conocimientos
las letras que preceden a la A, es decir, las últimas de probabilidad, o que se dejaran asesorar por mejores
letras del abecedario (recordemos que cuando se llega expertos en la materia.
La forma de un iceberg
T
odos sabemos que la mayor que han dedicado esfuerzos muchos
parte de la masa de un iceberg físicos, de Huygens a Sommerfeld.
se encuentra sumergida. La Para resolverla, debemos recordar
“punta del iceberg”, es decir, su parte que el peso de un cuerpo se puede
visible, es algo menos de un 10 % del considerar una fuerza aplicada en su
volumen total. centro de masas o centro de gravedad.
Hace unos meses, paseando por El peso es en realidad una fuerza que
un río parcialmente helado, comencé la tierra ejerce sobre todas y cada
a lanzar bloques de hielo al agua. una de las moléculas del cuerpo, pero
Pronto me di cuenta de que ninguno se puede demostrar que, a todos los
de ellos se parecía a la imagen de efectos, equivale a una fuerza aplicada
la figura 1. Intenté esculpir el hielo en dicho punto. Del mismo modo, el
para que adquiriera la forma del ice- empuje se puede considerar una fuer-
berg prototípico pero, al introducirlo za aplicada en el centro de gravedad
en el agua, el bloque se orientaba de la parte sumergida.
siempre con su lado más ancho hacia La condición de equilibrio para
la superficie. En otras palabras, un nuestro cuerpo flotante es sencilla:
trozo de hielo como el de la figura 1 1. Creación artística de un iceberg. el centro de gravedad del cuerpo y
giraría unos 90 grados hasta que el el centro de gravedad de la parte
lado más largo quedara horizontal. Según mis “expe- sumergida tienen que estar en la misma vertical. Si no
rimentos” la imagen clásica del iceberg es imposible. fuera así, el empuje y el peso harían girar al cuerpo.
¿Es esto cierto? Esta situación puede verse en la figura 2. En azul se
Todos nos imaginamos a Arquímedes envuelto en una muestra el centro de gravedad de la parte sumergida y
toalla y gritando Eureka por las calles de Siracusa. Sabe- el empuje, y en rojo el centro de gravedad del cuerpo
mos que un cuerpo sumergido en agua experimenta una y su peso. Si los dos centros de gravedad no están en
fuerza o empuje hacia arriba igual al peso del agua que la misma vertical (dibujo de la derecha), el peso y el
desaloja. Si un cuerpo de volumen V tiene una densidad empuje harán girar al cuerpo.
d inferior a la del agua (supondremos que la densidad del Sin embargo, en el problema de la orientación del
agua es igual a 1 gr/cm3 y mediremos la densidad d del cuerpo hay algo que da una impresión paradójica. Su-
cuerpo en estas unidades), el cuerpo flotará. Cuando el pongamos que giramos ligeramente hacia la izquierda
cuerpo llega a la superficie, se alcanza una situación de un cuerpo en equilibrio, como en la figura 2. El eje que
equilibrio en la que parte de su volumen sale al exterior forman los dos centros de gravedad, el del cuerpo y el
y queda sumergido un volumen Vsum < V. En la situación de la parte sumergida, habrá girado hacia la izquierda,
de equilibrio, el peso del cuerpo Vd tiene que ser igual al con lo que el centro de gravedad de la parte sumergida
empuje Vsum y, por tanto, la fracción de volumen sumergido (punto azul) quedará a la derecha del centro de grave-
Vsum/V coincide con la densidad d del cuerpo expresada dad del cuerpo (punto rojo). Como se ve en la figura, el
en gramos por centímetro cúbico. En el caso del hielo, la peso y el empuje forman ahora un par de fuerzas que
densidad es aproximadamente 0,9. Por eso la “punta del hace girar al cuerpo hacia la izquierda, alejándolo de su
iceberg” es sólo un 10 % de su volumen total. posición de equilibrio. El argumento puede repetirse para
La parte difícil del problema es encontrar la orienta- un giro hacia la derecha. Por lo tanto, cualquier pequeña FOTOMONTAJE DE UWE KILS, http://en.wikipedia.org/wiki/Iceberg (arriba)
ción que adquiere el cuerpo flotante, una cuestión a la desviación de la orientación de equilibrio crea un par
de fuerzas que lo aleja más aún de dicha orientación.
Sin embargo, basta observar un cubo de hielo flotando
en un vaso de agua para convencerse de que esto no
es cierto. Golpee el hielo para que gire un poco y verá
que enseguida recupera su situación original. Un cuer-
po flotante tiene siempre al menos una orientación de
equilibrio estable. ¿Cuál es entonces el error de nuestro
argumento? Es bastante simple: hemos supuesto que el
centro de gravedad de la parte sumergida gira igual que
el cuerpo, algo que no tiene por qué ser cierto, ya que la
2. La “paradoja” del cuerpo flotante: si giramos el cuerpo hacia propia geometría de la parte sumergida cambia. En una
la izquierda, aparece un par de fuerzas que hace que el cuerpo orientación de equilibrio estable, el centro de gravedad
gire también hacia la izquierda. ¿Es entonces inestable cualquier de la parte sumergida se mueve hacia la izquierda del
orientación del cuerpo? centro de gravedad del cuerpo cuando éste gira hacia
zado el hecho de que los centros de gravedad de los Para el hielo (d = 0,9) esta condición es a/b > 0,73. Vale
triángulos (puntos verdes en la figura 3) están a una decir: cualquier orientación con a > b es estable. Pero un
rectángulo en el que la relación entre el lado menor y el
a mayor sea superior a 0,73, se puede orientar de forma
estable tanto con su lado mayor horizontal como verti-
cal. Dependiendo del valor de d, pueden aparecer otras
orientaciones estables, e incluso asimétricas, con sólo
una o tres de las esquinas del triángulo sumergidas.
Sin embargo, la anchura del bloque de hielo de la
figura 1 es aproximadamente la mitad de su altura. Por
b lo tanto, la orientación del fotomontaje no es estable, al
b
(1 − d ) menos si el iceberg es homogéneo. Debo indicar que el
2 bd problema de la orientación de un iceberg reviste mayor
complejidad que la abordada aqui. Depende incluso de
su historia geológica. Por ejemplo, se sabe que la parte
sumergida se funde más rápido que la visible; por ello,
el iceberg puede volcar de modo repentino. No obstan-
te, creo que nuestro análisis ofrece razones suficientes
4. Cómo cambia el centro de gravedad de la parte sumergida para dudar de la imagen que la mayoría nos hacemos
cuando se gira ligeramente el cuerpo hacia la izquierda. de estos grandes bloques de hielo.
D
esde que John von Neumann y Oskar Morgensten donde compiten programas de ordenador. En el primero
crearan la teoría de juegos en los años cuarenta, de estos torneos resultó ganadora una estrategia de la
se intenta utilizar las matemáticas para estudiar mayor simplicidad: hacer exactamente lo que ha hecho
un asunto tan sinuoso e impreciso como las relaciones el contrario en el turno anterior. A pesar de que venciera
humanas. Se crean modelos que simplifican los conflictos esta estrategia tan ecuánime, un análisis matemático del
reales, pero aún retienen sus aspectos esenciales. Uno dilema del prisionero jugado un gran número de turnos
de los ejemplos clásicos es el dilema del prisionero, muestra que los jugadores “racionales”, es decir, juga-
que probablemente sea conocido por muchos lectores dores que tratan de minimizar sus pérdidas, tenderían a
de Investigación y Ciencia. defraudar constantemente. En los años noventa, Martin A.
Recordemos la formulación original del dilema. La Nowak y Robert M. May colocaron a un gran número de
policía arresta a dos sospechosos de un robo. No hay estos jugadores racionales en las casillas de un tablero,
pruebas suficientes para condenarlos por ese delito, sino de modo que cada uno de ellos jugara con sus cuatro
sólo por uno menor, como la posesión ilegal de armas. vecinos y cambiara de estrategia imitando al vecino más
Ante esta situación, el juez ofrece a cada uno de los exitoso. Descubrieron que en este caso sí pueden existir
dos sospechosos, y por separado, el siguiente trato: “Si de forma estable regiones en donde todos los jugadores
tú confiesas y tu cómplice no lo hace, él será condenado cooperan. En 1995, Nowak, May y Sigmund publicaron en
a 10 años de cárcel por el robo mientras que a ti te nuestra revista un análisis detallado de este modelo.
perdonaremos y saldrás libre mañana. Si él confiesa y tú Más recientemente, los físicos del Instituto Mediterrá-
callas, tú pasaras los 10 años en la cárcel y él quedará neo de Estudios Avanzados (IMEDEA) Víctor M. Eguiluz,
libre. Si ninguno de los dos confiesa, os encerraremos Martín G. Zimmermann y Maxi San Miguel, junto con el
por posesión de armas 1 año. Finalmente, si ambos filósofo de la Universidad de las Islas Baleares Camilo J.
confesáis, seréis condenados a 6 años de cárcel”. Cada Cela-Conde, han utilizado el dilema del prisionero para
uno de los prisioneros se enfrenta a un peliagudo dilema: crear un modelo simple de organización social en el que
“Si callo, puede que me caigan 1 o 10 años, mientras la cooperación es también estable. Para analizarlo, es
que si confieso puedo salir libre o pasar 6 años en la más conveniente formular el dilema como un juego en
cárcel. Mi compañero estará pensando lo mismo y lo más el que cada uno de los dos jugadores gana puntos en
probable es que me delate. Por lo tanto, voy a confesar.” lugar de años de cárcel. En la tabla siguiente se muestra
Razonando de esta forma, ambos prisioneros confiesan la puntuación del jugador 1 en cada una de las cuatro
y obtienen una pena considerable: 6 años. Si confiaran posibles situaciones (la puntuación del jugador 2 es la
en la lealtad del compañero, callarían ambos y saldrían misma sin más que cambiar filas por columnas):
bastante bien parados, con sólo 1 año de condena. Pero
esta confianza debe ser muy sólida. Si yo supongo que
ESTRATEGIA DEL JUGADOR 2
mi compañero me va a ser fiel, ¿por qué no delatarle
y salir libre? O peor aún: ¿no caerá él en esta misma COOPERAR DEFRAUDAR
tentación y me delatará? Si lo hace pasaré 10 años ESTRATEGIA COOPERAR 4 0
entre rejas. Luego, lo mejor es prevenir esta situación y DEL JUGADOR 1
DEFRAUDAR 7 0
confesar. Parece que delatar es la estrategia más segura
y, sin embargo, no es la óptima para el conjunto de los
dos sospechosos. Si pudieran negociar entre ellos y dar En el modelo del grupo del IMEDEA, un gran número de
de forma simultánea su respuesta ante el juez, lo más individuos juegan por parejas que se deciden inicialmente
probable es que acordaran callar. al azar. Cada jugador tiene una estrategia: o bien coopera
El dilema del prisionero es un ejemplo muy simplificado o bien defrauda, que también se elige inicialmente al azar.
de una situación común entre personas y organizaciones. Como en el sistema de Nowak y May, los jugadores “ven”
Por ejemplo, si falseo mi declaración de la renta para lo que ha ganado cada uno de sus vecinos y copian la
pagar menos impuestos y el resto de los ciudadanos estrategia del que tiene mayor puntuación (los empates se
es honrado, está claro que obtengo un cierto beneficio deshacen eligiendo la estrategia al azar). En la figura 1,
económico, siempre que no me descubran. Pero si todos se puede ver cómo cambian las estrategias en el primer
los contribuyentes defraudasen, los ingresos del estado turno (dibujo del centro). El lector puede comprobar que,
se reducirían de modo que todos saldríamos perjudicados. si sólo se aplicaran estas reglas de imitación, la red de la
Este caso es más complejo que el dilema del prisionero, figura 1 acabaría alternando entre dos configuraciones de
porque involucra muchas personas en lugar de sólo dos, estrategias en las que conviven jugadores que cooperan
pero se observa el mismo fenómeno: el defraudador y jugadores que defraudan.
gana solamente si es el único insolidario. Pero el modelo es más interesante si permitimos tam-
El dilema ha dado lugar a un gran número de trabajos bién a cada jugador escoger “sus amigos”, es decir, a
de investigación e incluso se han celebrado torneos en aquellos individuos con los que juega. Está claro que
4 4
4 4
U
no de los campos más fascinantes de la mate- bajo. Por ejemplo, el 49 se ha salvado de la criba del
mática es el estudio de los números enteros, la 2, 3 y 5, pero ha sido eliminado por la criba del 7. Por
llamada teoría de números. Dentro de este campo, otra parte, las cribas cada vez eliminan menos núme-
los números primos ocupan un lugar privilegiado. Su ros por dos razones: porque tachan menos números y
definición es extremadamente simple. Muchos estudiantes porque las cribas anteriores ya han eliminado muchos
de primaria saben qué es un número primo y incluso de ellos. Es por tanto cada vez menos “probable” que
pueden determinar si un número cualquiera lo es o no. las cribas de números altos eliminen nuevos números.
Sin embargo, los números primos guardan secretos que He escrito las palabras “probabilidad” y “probable” entre
sólo han podido revelarse mediante técnicas matemáticas comillas porque en las cribas de Eratóstenes no hay
muy refinadas y aún hoy plantean muchos desafíos. Un nada azaroso: se van tachando números en la lista de
ejemplo clásico es la conjetura de Goldbach, que afirma forma periódica, cada 2, 3, 5,... lugares. Sin embargo,
que cualquier número par puede expresarse como la el matemático David Hawkins tuvo la ingeniosa idea de
suma de dos primos (por ejemplo, 24 es 19 + 5). A pesar modificar estas cribas de forma que sí fueran aleatorias,
de la simplicidad de su enunciado, nadie ha podido aún dando lugar a los primos aleatorios de Hawkins.
demostrarla ni refutarla. La criba de Hawkins funciona de la siguiente manera.
Pero los matemáticos sí han podido adentrarse en algu- Como en la de Eratóstenes, se escribe una lista con los
no de los misterios de los números primos. Por ejemplo, números del 1 al N. El primer primo aleatorio es el 2. Lo
han estimado cuántos números primos hay entre 1 y n, llamaremos H1. A partir del 2 tachamos cada número con
una cantidad que suele denotarse por π(n). Ya Euclides una probabilidad 1/2, es decir, lanzamos una moneda en
demostró que hay infinitos primos, es decir, que π(n) cada número para decidir si lo tachamos o no. Observen
crece indefinidamente. Pero, ¿cómo crece? O en otras que el resultado de esta criba es similar a la de Eratós-
palabras, ¿cómo están distribuidos los números primos? tenes. Si N es muy grande, habremos tachado aproxima-
Por experiencia sabemos que su frecuencia disminuye: damente la mitad de los números de la lista. Tomamos
hay 168 entre 1 y 1000, 135 entre 1001 y 2000, 127 ahora el primer número mayor que 2 que no haya sido
entre 2001 y 3000, o ya sólo 83 entre 405.001 y 406.000. tachado. Será nuestro segundo primo H2, que no tiene
El descenso es muy lento pero continuado. La criba de por qué ser el 3, ya que ha podido quedar eliminado en
Eratóstenes, una de las formas clásicas de obtener una la criba aleatoria del 2. Supongamos que sí lo es, es
lista con todos los números primos, nos permite atisbar decir, que H2 = 3. La criba aleatoria correspondiente al
las razones de este descenso y de su lentitud. 3 consiste en tachar cada número mayor que 3 con una
La criba de Eratóstenes consiste en lo siguiente. Es- probabilidad 1/3. Como se puede comprobar, en estas
cribimos una lista con todos los números de 1 a N. A cribas aleatorias se tacha, de media, la misma cantidad
continuación tachamos los múltiplos de 2, es decir, los de números que en las cribas de Eratóstenes, pero, en
números pares. El primer número no tachado después lugar de hacerlo de forma periódica, se hace de forma
del 2 es el 3. Tachamos entonces los múltiplos de 3. aleatoria. La criba continúa de la misma manera. H3 es
Buscamos el siguiente número no tachado, que es el 5, el siguiente número de la lista no tachado. Se toma como
tachamos sus múltiplos, y así sucesivamente. De esta tercer primo aleatorio, se tachan los siguientes números
criba quedan unos pocos números no tachados, que son de la lista con probabilidad 1/H3, y así sucesivamente.
precisamente todos los primos del 1 al N. El resultado Los primos de Hawkins son realmente aleatorios, es decir,
de la criba de los 50 primeros números se puede ver cambian cada vez que uno repite el proceso completo
en la siguiente tabla, en donde se muestran en verde de criba. En la siguiente tabla pueden ver un ejemplo de
los números eliminados en la criba del 2, en naranja los criba de Hawkins hecha con los primeros 50 números. El
del 3, en azul los del 5 y en rojo los del 7: código de colores es similar al de la criba de Eratóstenes:
verde para los tachados en la criba de H1 = 2, naranja
1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 para la criba del segundo primo H2, que en este caso ha
11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 resultado ser el 3, azul para la de H3 = 5 y rojo para la
de H4 = 8. Hemos necesitado un color más, el amarillo,
21 22 23 24 25 26 27 28 29 30
para la criba del quinto primo H5 = 9, que no aparecía
31 32 33 34 35 36 37 38 39 40 en la de Eratóstenes:
41 42 43 44 45 46 47 48 49 50
1 2 3 4 5 6 7 8 9 10
La criba de Eratóstenes nos indica por qué los números 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20
primos son más escasos cuanto más avanzamos en la 21 22 23 24 25 26 27 28 29 30
lista. Un número alto puede ser tachado en cualquiera
de las cribas de los primos menores que él. Por lo tanto, 31 32 33 34 35 36 37 38 39 40
tiene más “probabilidad” de ser eliminado que un número 41 42 43 44 45 46 47 48 49 50
π(n)
100
pn
primos, el primero ha eliminado 25, el segundo
0,4
5, el tercero 3, el cuarto 1 y el quinto 2. Los
sucesivos primos cada vez eliminan menos 50
números, porque tachan con menor frecuencia 0,2
o probabilidad y también porque los primos
anteriores han eliminado ya bastantes números, 0 0
como ocurre en la criba de Eratóstenes. La 0 10 100 1000 0 10 100 1000
n n
criba de Hawkins reproduce, al menos de forma
estadística, los aspectos fundamentales de la En la gráfica de la izquierda se muestra la probabilidad pn de que n sea primo
criba de Eratóstenes. ¿Podrá entonces ayu- aleatorio (en azul) y se compara con la fórmula aproximada (en rojo). En la
darnos a estimar π(n)? Sí, porque los primos gráfica de la derecha se muestra π(n) (en azul), junto con el número medio de
aleatorios se distribuyen de forma parecida a primos aleatorios (en rojo) y la conjetura de Gauss (en verde).
los primos reales y es mucho más fácil calcular
cuántos primos aleatorios hay. y se representa en la figura mediante la curva azul, que
¿Cuál es la probabilidad pn de que un número cual- prácticamente es indistinguible de la roja para números
quiera n sea primo aleatorio? La probabilidad de que n n grandes. Los lectores con conocimientos avanzados de
sea primo es muy parecida a la de que lo sea n + 1, matemáticas pueden deducir esta fórmula aproximando
puesto que ambos han sufrido las mismas cribas antes la ley de recurrencia por una ecuación diferencial que
de llegar a la posible criba de n. Es más, si n resulta se resuelve con facilidad (la constante 1,2 se calcula
no ser primo, la probabilidad de que n + 1 lo sea vale ajustando la solución a los valores reales de pn). El
precisamente pn. Por otro lado, si n es primo, n + 1 número medio de primos aleatorios entre 1 y n será
sufrirá su criba y se tachará con una probabilidad 1/n. πaleat. (n) = p1 + p2 + ... + pn. Si ahora suponemos que
En este caso la probabilidad de que n + 1 sea primo los primos reales tienen una distribución parecida a la
es pn, que es la probabilidad de serlo antes de la criba de los primos aleatorios, encontramos que:
del n, multiplicado por 1 – 1/n, que es la probabilidad de
sobrevivir a la criba del n. Por otra parte, n es primo con π (n) ≈ p1 + p2 + ... + pn
probabilidad pn y no lo es con probabilidad 1 – pn. Tene-
mos entonces la siguiente tabla de probabilidades: y se puede demostrar que, para n muy grande, esta
suma es aproximadamente n/ln n. Este resultado, que
π(n) sea aproximadamente igual a n/ln n es uno de los
n n +1 Probabilidad
teoremas fundamentales de la teoría de números. Se
No primo Primo (1 – pn) × pn llama teorema de los números primos y fue intuido por
Gauss y demostrado más tarde por Riemann. En la fi-
Primo Primo ( )
pn × pn 1–
1
n
gura (gráfica de la derecha) se muestra el valor real de
π(n) junto con la conjetura de Gauss, n/ln n, y πaleat. (n).
Comprobamos que las dos últimas curvas prácticamente
Sumando la última columna, obtenemos la probabilidad coinciden y subestiman ligeramente el valor real de π(n),
de que n + 1 sea primo, independientemente de lo que aunque esta discrepancia se hace cada vez menor a
haya sido n: medida que aumenta n.
La demostración del teorema de los números primos
pn +1 = pn 1–( )
pn
n
.
es muy técnica. Sin embargo, la criba de Hawkins ha
permitido obtener el mismo resultado de una forma más
sencilla, aunque no rigurosa. Más aún, la criba de Hawkins
Como p2 = 1, podemos aplicar esta ecuación para nos proporciona una imagen de por qué los números
obtener las distintas probabilidades pn. Resulta p3 = primos se hacen cada vez más escasos y por qué lo
1/2, como cabía esperar, puesto que el 3 sólo sufre la hacen de forma tan lenta. Sanjoy Mahajan, que ha es-
criba del 2; p4 es 5/12 = 0,42..., p5 = 215/576 = 0,37..., crito en el Caltech, una muy recomendable tesis doctoral
etc. En la ilustración se pueden ver las probabilidades sobre cálculos de orden de magnitud en física en la que
de ser primo aleatorio para los primeros 1000 núme- se incluye un estudio detallado de los primos aleatorios,
ros naturales. Encontrar una fórmula general para pn considera a éstos un modelo de los primos reales, es
no es posible; sin embargo, sí puede encontrarse una decir, una versión simplificada de los primos reales que, sin
fórmula aproximada que es mejor cuanto mayor sea n. embargo, conserva sus principales características. En esta
La fórmula es: sección hemos visto en ocasiones modelos matemáticos
sencillos de sistemas físicos, económicos o sociológicos.
1 ¡Más sorprendente es que haya modelos matemáticos
pn ≈
In n + 1, 2 para conceptos también matemáticos!
M
ichel Steiver, de la Universidad de Colorado, me por un factor aleatorio, las fluctuaciones son bastante
ha hecho llegar un ejemplo muy interesante en grandes. Vemos que, partiendo de un euro, una de las
el que la combinación de dos juegos o inversiones curvas sube hasta 10.000 euros. Sin embargo, todas
perdedoras da lugar a un juego ganador. Un fenómeno ellas acaban bajando y se puede demostrar que, para
similar a la Paradoja de Parrondo, de la que hemos un tiempo lo bastante largo, el capital se hace siempre
hablado aquí en varias ocasiones. Esta vez el ejemplo prácticamente nulo.
está relacionado con situaciones bastante realistas que La idea de Steiver es combinar dos inversiones iguales
se dan en mercados financieros como la bolsa o los a la anterior. Deben ser además completamente indepen-
fondos de inversión. dientes, es decir, en un día una puede subir y la otra
Imagínense un cierto producto financiero, una acción de bajar, bajar ambas o subir ambas. El precio de cada
una empresa, un fondo de inversión, etc., que cada día una de estas acciones sigue una curva idéntica a las
da lugar o bien a una ganancia del 30 por ciento o bien de la gráfica de la izquierda de la figura. Sin embargo,
a una pérdida del 25 por ciento del capital invertido. Es y este es el curioso resultado de Steiver, si cada día
decir, cada euro invertido se convierte en un día, o bien distribuimos nuestro capital entre las dos acciones por
en 1,30 o bien en 0,75 euros. Supondremos también que igual, el resultado es el de la gráfica de la derecha en
cada una de estas dos posibilidades ocurre con la misma la figura. De nuevo observamos grandes fluctuaciones,
probabilidad: 1/2. Este tipo de comportamiento se llama pero el comportamiento de esta cartera de inversión
modelo de árbol binomial porque cada día pueden ocurrir combinada es bastante mejor que el del precio de cada
dos posibilidades que hacen que las posibles evoluciones acción por separado.
del precio de la acción a lo largo del tiempo crezcan Veamos en detalle qué está ocurriendo. En primer
como las ramas de un árbol. Se trata de un modelo muy lugar, analizaremos el precio de una sola acción, es
simplificado de la evolución del precio de una acción que decir, el comportamiento de las curvas en la gráfica
sirve para enseñar análisis financiero e incluso para hacer de la izquierda de la figura; más tarde estudiaremos
algunos cálculos del riesgo de una cierta inversión. la inversión combinada. Si inicialmente el precio de la
Da la impresión de que comprar esta acción o parti- acción es de un euro, tras N días será:
cipar en este fondo es una inversión ganadora, puesto
que la ganancia del 30 % es superior a la pérdida del PN = 1,3n × 0,75N–n
25 % y ambas posibilidades son igualmente probables.
Un análisis más minucioso de cómo evoluciona el capi- siendo n el número de días en los que el precio ha
tal invertido nos mostrará que la inversión es bastante subido y N – n el número de días en los que ha baja-
arriesgada. En la gráfica de la izquierda de la figura do. Tras un período largo de tiempo, lo más probable
vemos seis posibles evoluciones del capital invertido. En es que la mitad de los días el precio haya aumentado
cada una de las curvas se ha escogido aleatoriamente y la otra mitad haya disminuido. En ese caso, n = N/2
cada día la posibilidad ganadora, en la que el capital y el precio es:
se multiplica por 1,30, o perdedora, en la que se mul-
tiplica por 0,75. Como cada día el capital se multiplica PN ~ (1,3 × 0,75)N/2 = (√1,3 × 0,75)N ~ 0,987N
10000 100000
1000 10000
100
1000
VALOR DE LA ACCION
VALOR DE LA ACCION
10
100
1
10
0,1
1
0,01
0,001 0,1
0,0001 0,01
0 100 200 300 400 500 0 100 200 300 400 500
DIAS DIAS
Capital en función del tiempo para varias realizaciones de las carteras no diversificada (izquierda) y diversificada (derecha)
C
omo se supone que soy un experto en juegos embargo, hay ciertos periodos de mala suerte en donde
de azar, mucha gente me pregunta si no he un número continuado de pérdidas hace que el capital
aprovechado tanta sabiduría para hacerme rico baje considerablemente. Vemos una de estas malas ra-
en un casino. Lo cierto es que la única vez que he chas entre el turno 1000 y 2000, en donde la apuesta
jugado a la ruleta fue hace muchos años, fascinado por sube hasta 8192 (curva roja), después de 12 turnos sin
un método de apuestas supuestamente infalible pero ganar, y el capital desciende hasta casi –8000 euros. Es
con el que perdí casi todos mis ahorros en menos de decir, nuestro jugador habría necesitado un “colchón” de
un cuarto de hora. unos 8000 euros para superar esta mala racha. Lo malo
Existe un método clásico, probablemente conocido del método de martingala es que estas malas rachas
por muchos lectores, con el que, en teoría, siempre se pueden ser de cualquier intensidad. En la gráfica vemos
puede ganar en la ruleta. Casanova lo describe en sus que ha habido dos apuestas de 8192 euros, que es la
memorias, publicadas en 1754. Se apuesta siempre a cantidad a apostar después de 12 turnos sin ganar.
rojo, a negro o a cualquier jugada que dé como premio Pero bien podría haber sido también perdedor el turno
la misma cantidad que se apuesta. Se comienza con decimotercero, con lo que la apuesta habría subido a
una apuesta baja, un euro, por ejemplo. Cada vez que más de 16.000 euros. En definitiva, la martingala es un
se pierde, se dobla la cantidad apostada, mientras que método muy arriesgado. De hecho, algunos casinos han
si se gana se vuelve a empezar el proceso con un aumentado considerablemente las apuestas máximas ante
euro. Si, por ejemplo, perdemos cinco veces seguidas, la evidencia de que nadie se atreve a poner en práctica
las apuestas que debemos realizar son 1, 2, 4, 8 y 16 la martingala, al menos en su formulación original. En
euros en cada turno, lo que hace un total de 31 euros algunos casinos de Las Vegas, la apuesta máxima puede
perdidos. En el sexto turno apostaremos 32 euros y por llegar a ser 4.000 veces la apuesta mínima. En ellos
tanto, si ganamos, recuperamos todo lo perdido más un la martingala alcanzaría la apuesta máxima tras perder
euro. Ocurre lo mismo con cualquier número de turnos, 11 veces seguidas. Podría parecer que el casino está
debido a una conocida fórmula matemática: arriesgándose excesivamente. Sin embargo, para que
un jugador gane, por ejemplo, 1000 euros, necesitaría
1 + 2 + 22 + 23 + ... 2n = 2n+1 – 1 jugar aproximadamente 2000 veces y en esas dos mil
veces la probabilidad de perder 11 veces seguidas es
Con este sistema basta ganar una vez para ganar un de más de un 50 %.
euro, sin importar cuántas veces hayamos perdido antes En algunos libros y sitios de Internet se aconseja
de ese turno ganador. Como es imposible perder un esperar a que, por ejemplo, salga rojo 5 veces segui-
número infinito de veces, con el sistema de Casanova, das para comenzar a utilizar la martingala apostando a
que se conoce como martingala, se ganaría siempre. negro, con la supersticiosa creencia de que es prácti-
¿Por qué entonces no se ha arruinado todavía ningún camente imposible que en una tarde el rojo salga 15
casino? La respuesta es muy simple: porque es bastante
probable perder un gran número de veces seguidas y en 10000
ese caso la apuesta puede superar la apuesta máxima
8000
permitida o, lo que es peor, nuestros propios fondos.
En un conocido casino de Madrid, la apuesta máxima 6000
está entre 20 y 30 veces la apuesta mínima, con lo que la
martingala alcanzaría la apuesta máxima con sólo perder 4000
cinco veces seguidas y esto ocurre con una probabilidad
(19/37)5 = 0,03507 (hay 37 números en la ruleta, de los 2000
1345 6 G -2
34 7 P -9 6000
347 10 P -19
3 4 7 10 13 G -6 4000
47 11 G +5
2000
Después de estos 9 turnos, hemos tachado todos los
números de la lista. Puesto que todo lo que se gana
se tacha de la lista y todo lo que se pierde se apunta, 0
la ganancia neta al tachar todos los números es igual
a la suma de los números con los que comenzamos la
-2000
lista, es decir, 1 + 1 + 3 = 5 euros. Pero cada vez que
ganamos tachamos dos números (salvo si en la lista
sólo queda un número) mientras que apuntamos sólo -4000
0 1000 2000 3000 4000 5000 6000 7000 8000 9000 10000
uno cada vez que perdemos. Por lo tanto, si perdemos
Número de turnos
n veces, bastará ganar (n + 3)/2 veces (o el entero
inmediatamente superior si n es par) para tachar to- 2. Capital (en azul) y apuesta realizada (en rojo) en 10.000
dos los números y ganar 5 euros. En el ejemplo de la turnos utilizando el método de Labouchere.
tabla hemos perdido 5 veces y hemos ganado 4. Esta
diferencia se hace mayor cuantos más turnos juguemos Espero que se tomen estos métodos como meras
antes de tachar todos los números. Si, por ejemplo, curiosidades matemáticas y no los apliquen en el casino.
perdemos 20 veces, basta ganar 12 para conseguir los Para olvidar semejante idea, basta echar un vistazo a
5 euros. El método de Labouchere se basa en la misma las dos figuras e imaginarse a uno mismo aumentando
idea que la martingala: aumentar la apuesta cuando se más y más la apuesta en una de esas malas rachas.
pierde para, de ese modo, tener que ganar menos veces Eso es precisamente lo que me ocurrió hace años, utili-
para recuperar lo perdido. La ventaja frente a la martin- zando el método de Labouchere. La apuesta subió tanto,
gala es que la apuesta crece mucho más lentamente, que estuve a punto de perderlo todo al poco tiempo de
con lo cual parece difícil alcanzar la apuesta máxima empezar a jugar.
E
n el último libro del matemático la elección al contrincante, perdería a la casilla... EE. Si sale de nuevo
John Haigh, Matemáticas con toda seguridad. una E, volvemos a la casilla... EE. Se
y Juegos de Azar, hay una En algunos casos la segunda han especificado sólo las secuencias
buena colección de paradojas y elección es bastante sencilla. Si, relevantes para el juego. Podríamos
curiosidades sobre probabilidad y de por ejemplo, usted elige la secuen- haber añadido una casilla... EEE;
análisis interesantes de conocidos cia CCC, entonces mi elección es mas, para los efectos del juego con
concursos de televisión, loterías y bastante fácil: ECC. La única forma las secuencias elegidas, si las dos
quinielas. de que salga CCC antes que CCE es últimas tiradas son cruz, la antepe-
Uno de los ejemplos más sorpren- que el resultado de los tres primeros núltima es irrelevante.
dentes es el llamado Penney-ante, un lanzamientos sea cara, lo que ocurre Según los resultados de las tira-
juego propuesto por Walter Penney sólo con una probabilidad 1/8. Si la das, nos moveremos por las casillas
en 1974. Se juega con una moneda secuencia CCC aparece por primera del diagrama hasta alcanzar la verde,
completamente equitativa, es decir, vez en algún momento que no sea en en cuyo caso gano yo, o la roja, en
una moneda en la que los dos resul- las tres primeras tiradas, está claro cuyo caso gana usted. Pero el diagra-
tados al lanzarla, cara o cruz, tienen que la tirada anterior a la primera de ma no es simétrico. Una vez que han
la misma probabilidad, 1/2. El juego las tres caras será necesariamente aparecido dos cruces seguidas (...
es muy simple: cada jugador escoge cruz y, por tanto, ECC habrá apa- EE), no hay forma de volver hacia
una secuencia de tres tiradas, por recido antes. atrás. En otras, palabras, ganaré con
ejemplo CARA-CRUZ-CARA; se lan- Supongamos que usted elige ECC. toda seguridad la apuesta. Sin embar-
za la moneda repetidas veces y gana En este caso, puede demostrarse go, la secuencia... EC no le asegura a
el jugador cuya secuencia aparece que, si yo elijo EEC, tendré una usted la victoria, puesto que una cruz
en primer lugar. probabilidad de ganar mayor que la hace que el juego vuelva al estado...
Supongamos que jugamos usted suya. El diagrama de la figura explica E. Cada vez que nos encontramos
y yo al Penney-ante. En un alarde el origen de esta ventaja. En cada en el estado... E, la secuencia EEC
de generosidad, yo le ofrezco elegir una de las casillas del diagrama se tiene una probabilidad 1/2 de ganar,
en primer lugar su secuencia. Pue- muestran los resultados de las últi- mientras que la ECC sólo tiene una
de escoger cualquiera de las ocho mas tiradas y las flechas correspon- probabilidad 1/4, puesto que necesita
secuencias: den a los posibles resultados de la dos caras seguidas. Por lo tanto, la
tirada siguiente (cara, flechas azules; probabilidad de que yo gane es el
CCC CCE CEC CEE cruz, flechas amarillas). Si no ha apa- doble de la suya, es decir, yo gano
ECC ECE EEC EEE recido ninguna de las secuencias en con una probabilidad 2/3 y usted con
juego y el último resultado es cara, una probabilidad 1/3.
Utilizo C para Cara y E para Cruz o es como si empezáramos el juego, Acabamos de ver que EEC es cla-
Escudo. Una vez que usted haya he- puesto que ninguna de las secuen- ramente mejor que ECC. Por lo tanto,
cho su elección, yo elijo mi secuencia cias comienza por cara. El resto del en el siguiente turno usted puede
y comenzamos a lanzar la moneda. diagrama es evidente. Por ejemplo, elegir EEC. Sin embargo, en este
A primera vista, elegir en primer lu- si estamos en la casilla... E y el re- caso yo tengo de nuevo una elec-
gar sólo puede reportar ventajas: si sultado de la tirada es E, saltamos ción ganadora. Si elijo CEE, también
hubiera alguna secuencia mejor que
el resto, puede elegirla y dejarme
a mí una menos favorable; si todas E
las secuencias son igualmente pro-
bables, da igual quién elige primero. C
Sin embargo, en este juego ocurre C
algo bastante curioso: para cualquier E ...EE ...EEC
elección suya, yo puedo elegir una
secuencia mejor, es decir, una se- ...C E
cuencia que aparezca antes que la (o inicio) ...E
suya con una probabilidad mayor C
que 1/2. ¡Elegir primero resulta ser C
una desventaja! El Penney-ante es E ...EC ...ECC
parecido al conocido juego de pie-
dra, papel y tijeras, en el que, si un Diagrama del Penney-ante. El juego se mueve por las casillas hasta caer en la roja
jugador eligiera primero y mostrara (usted gana) o en la verde (yo gano).
Probabilidad
Su elección Mi elección de que yo gane
CCC ECC 7/8
CCE ECC 3/4
CEC CCE 2/3
CEE CCE 2/3
ECC EEC 2/3
ECE EEC 2/3
EEC CEE 3/4
EEE CEE 7/8
E
ra inevitable. No podía pasar un mes más sin que ellos, un número primo de tamaño considerable obteni-
el famoso sudoku apareciera en estas páginas. do por Felgenhauer el 23 de mayo de 2005, tras seis
El “pasatiempo del verano” ha sido sin duda este horas de computación en dos ordenadores personales.
sencillo rompecabezas de origen japonés que lleva ya El programa informático de Felgenhauer fue el fruto
varios años causando furor en el Reino Unido y que de una colaboración entre varias personas a través de
en pocos meses se ha hecho un hueco en las páginas un foro en Internet (www.sudoku.com/forums/viewtopic.
de casi todos los periódicos de nuestro país. Podemos php?t=44). Es fascinante seguir paso a paso las dis-
recibir sudokus incluso en el teléfono móvil. cusiones que mantuvieron durante días, en las que se
El sudoku, por si alguien aún conocieron Frazer y Bertram,
no lo sabe, consiste en rellenar 5 3 7 hasta dar con la solución final.
un tablero cuadrado de 9 × 9 ca- Aunque encontrar el número de
sillas, como el de la figura, con 6 1 9 5 sudokus no sea una gran proe-
números del 1 al 9, de modo que za matemática, sí creo que es
no se repita ningún número en 9 8 6 un caso único de que hayan
cada fila, en cada columna y en quedado registrados de manera
cada uno de los 9 bloques de 3 8 6 3 exhaustiva los avatares de una
× 3 casillas delimitados por líneas 4 8 3 1 colaboración científica, desde el
gruesas. Cada sudoku se presenta planteamiento hasta la solución
con algunas cifras ya colocadas 7 2 6 final del problema. Un registro
que determinan de forma unívo- además muy humano, porque
ca el resto del tablero. Aunque se 6 2 8 los mensajes están repletos
utilicen números para rellenar las de intentos fallidos, dudas y
casillas, el sudoku no tiene nada 4 1 9 5 entusiasmo.
que ver con la aritmética; se trata 8 7 9 Encontrar el número de sudo-
de un rompecabezas de pura ló- kus por el método de la fuerza
gica: en lugar de números podrían bruta, es decir, pidiendo a un
utilizarse letras o colores. La clave para resolverlo es ordenador que rellene de todas las formas posibles las
encontrar casillas en donde necesariamente debe es- 81 casillas, es una estrategia inviable. El ordenador más
cribirse un número determinado. En el sudoku de la potente tardaría años en terminar esta tarea. Felgenhauer
figura 1, por ejemplo, el 8 del bloque inferior-izquierda y Jarvis tuvieron que simplificar el cálculo buscando
debe estar en la casilla central, ya que el resto de filas simetrías en el problema hasta lograr que la búsqueda
y columnas tienen ya un 8. Esta es una deducción no se redujera a unas cuantas horas. Veamos alguno de
muy complicada. En ocasiones hay que tener en cuenta estos trucos. En primer lugar, no es difícil deducir el
más posibilidades e incompatibilidades hasta dar con el número de combinaciones posibles para los tres bloques
número que necesariamente se debe colocar en una superiores del tablero. Conviene denotar cada uno de los
cierta casilla. Cada sudoku tiene su nivel de dificultad nueve bloques del sudoku de la siguiente forma:
—desde “muy fácil” hasta “diabólico”—; suele ser más
alto cuantos menos números se presentan inicialmente B1 B2 B3
(aunque no siempre es así). B4 B5 B6
A pesar de su sencillez, el sudoku plantea algunos B7 B8 B9
problemas matemáticos y lógicos bastante complica-
dos: ¿cuántos sudokus diferentes se pueden construir? en donde cada bloque es un cuadrado de 3 × 3 casillas.
¿Existen algoritmos para resolver sudokus de forma auto- El primer bloque, B1, se puede llenar de 9! = 362.880
mática? ¿De qué depende el nivel de dificultad de un maneras diferentes, porque 9! es el número de posibles
sudoku? ¿Cuál es el mínimo número de cifras iniciales reordenaciones de 9 elementos (en este caso, las nueve
que determinan unívocamente el sudoku? cifras). Supongamos la siguiente configuración para B1:
La primera de estas preguntas ha sido resuelta esta
pasada primavera por Bertram Felgenhauer, de la Uni- 1 2 3
versidad Técnica de Dresde, y Frazer Jarvis, de la Uni- 4 5 6
versidad de Sheffield, con ordenadores personales y 7 8 9
una buena dosis de lógica y combinatoria. El resultado
es bastante sorprendente. El número de sudokus posi- y veamos las posibles formas de rellenar B2. Los números
bles es 6.670.903.752.021.072.936.960 ≈ 6,671 × 1021. 4, 5 y 6 tienen que estar en la fila superior o inferior de
Es sorprendente porque puede escribirse como (9!) × B2. Supongamos que llevamos los tres números a la fila
× 722 × 27 × 27.704.267.971. Cada uno de estos facto- superior. En este caso, 7, 8 y 9 deberán hallarse nece-
res puede explicarse razonablemente salvo el último de sariamente en la fila central y 1, 2 y 3 en la fila inferior.
¿ H aqyu i edném á s ?
I maginela siguiente lotería. Ustedeligeun número Enprimer lugar, existen varios mecanismos desubasta.
I del 1 al 100y lo anotaen un papel. A continuación En la subasta inglesa o de ofertacreciente, lospartici-
I se extraeun númerode un bombocon 100bolas, pantes, queestánpresentes en el proceso de subasta,
numEradas de 1 a 100.Ustedganasi el número que anuncian públicamente suspujasen ordenascendente
anotóes menoro igualque el númeroque saledel y ganala mayor. En las lonjasde nuestros puertos se
bombo, peroganala cantidad anotada en euros,Si el llevaa cabounsistema diferente y bastante espectacular,
número en el papeles mayorqueel queha salidoen la subasta de preciodecreciente. En ellael directorva
el sorteo, entonces ustedno gananada. cantando precios enordendescendente hastaquealguno
un delosparticipantes gritando"¡mío!",
¿Cuáles la mejorelección inicial?Si elegimos le interrumpe conlo
númerobajo,la probabilidad de ganares mayorpero queconsigue el artículo subastado porel últimoprecio
la ganancia serápequeña. Porel contrario, al elegir cantado. Se llamatambién holandesa porqueera éste
un númerograndeaumentamos la ganancia, perore- el método queutilizaban desdeel sigloxvlllosmayoris-
ducimos las probabilidades de ganar.Llamemos M al tasde floresen Holanda paradistribuir susexistencias.
númeroelegidoinicialmente. La probabilidad de ganar ¿Cuálde losdosmétodos es mejorparael subastador
es (101-M1100, puesto que,de los 100números que y parael comprador? Lasubasta de preciodescendente
hayen el bombo, 101-Msonmayores o iguales que es bastante másestresante parael comprador. Al fin y
M. La ganancia mediaal elegirM es portanto: al cabo,en la subasta de ofertaascendente unosabe
siempre quepuedequedarse conel artículo subastado
1 0 1 - Mx M si superala pujade losdemás, Sinembargo, en la de
100 preciodescendente, hayunaincertidumbre considerable:
Comocabríaesperar, si elegimos M = 1, la ganancia si esperoparaconseguir un mejorpreciome arriesgo
mediaes de un euro.Si elegimos M = 100,también la a queotroganela subasta; si me plantoen un precio
ganancia mediaes de un euro,porqueganamos 100 altoquizáhayaperdido la oportunidad de ahorrarme
eurosoerosóloun 1% de lasveces.El número M oue unabuenacantidad.
hacemayor laganancia mediaesM = 50o 51.Enambos En muchasocasiones se necesita realizaruna su-
casos,la ganancia mediaes 50x51/100 = 25,5. bastasin la presencia físicade los participantes. Si,
Siconsideramos unavariante delalotería anteriorenla porejemplo, queremos queel número de participantes
queloqueustedganaeslacantidad quehaaparecido en seael máximo posible, es mejorutilizar algúnmétodo
el bombo, en lugarde la queanotóenel papel, entonces en el quese puedapujar"a distancia". Ocurreasí en
la estrategia seríabastante mássencilla. Puesto queen lassubastas de Internet, cadavezmáspopulares. Pero
estecasola ganancia nodepende delo quepongausted ya en el sigloxtx se realizaban subastas de sellosde
enel papel, la mejor elección es M= 1.Conellosiempre correoen dondese pujabapor carta.Es también el
ganamos y la ganancia mediaseráde 50,5,quees el casode algunas grandes operaciones financieraso de
valormediode todoslosnúmeros delbombo. las adjudicaciones de licencias de telefonía móvil,que
Peroel títulode la columna de hoyhacereferencia a en muchospaíses(perono en España) se realizaron
unasubasta. ¿Quétienen queverestasextrañas loterías mediante subastas de estetipo.No sé cuáles la razón
conunasubasta? Cuando participamos en ciertostipos de no usaren estoscasossubastas conpresencia de
de subasta, nosencontramos en unasituación Quizáseaporque
similar, loslicitadores. da malaimpresión que
aunque inversa, al primero de lossorteos queacabamos unagranempresa decidagranpartede su futuroen el
de discutir.Si pujamos porunacantidad demasiado alta, calorde unapujapública.
probablemente ganemos la subasta peropagaremos un En estassubastas, llamadas de ofertasellada,las
precioexcesivo porel artículo subastado. Si queremos pujasse envíanen un sobrecerrado de la
al director
pagarmenos, tendremos quepujarconcantidades me- subastaquien,una vez recibidas todaslas ofertaso
noresdisminuyendo así la probabilidad de adquirir el pujas,decideel resultado. Lo máscomúnes quegane
artículo.Hayun compromiso obvioentreel deseode la subasta quienha realizado la ofertamásaltay que
ganarla subasta y el precioa pagar.Estaes la prin- pagueporel artículo subastado la cantidad queofertó.
cipalcaracterística de unasubasta y, en ciertomodo, Estesistema se llama"deprimerprecio".
su razónde ser.Sinembargo, a pesarde la aparente Vickreymostróque la subasta de ofertaselladade
sencillez de estosmecanismos, su análisis matemáticoprimerprecioesequivalente a la de preciodescendente.
puededepararnos algunaqueotrasorpresa. El estudio No es difícilentender porqué.Supongamos quehace-
de las subastas queel norteamericano William Vickrey mos un simulacro de subastade preciodescendente
realizóen losañossesenta, y su posterior extensión a conlasofertasrecibidas. Cadaofertaes el precioque
otrassituaciones, le hizomerecedor, en 1996y juntocon estádispuesto a pagarquienla remitió. Porlo tanto,si
JamesA. Mirrlees, delPremio delBancode Suecia, el comenzamos a cantarprecios en ordendescendente, el
malllamado Nobelde economía. primero en gritar"¡mío!" seráquienenvióla ofertamás
88 lruvrslcncróu
v Ctrrucln. 2006
enero.
alta.Ganará la subastya adquiri rá o
el artículsubast adoen unasubastde a Vickreyel, preciono depend ería de
por el precioofertad o, es decir,el preciofinalseráel su oferta,comoen nuestra a
segundlotería . interes a
Le
de la ofertamásalta. entonc esmaxim izar la probab ilidad de ganar,lo quese
¿Tiene la subast a
más habitua l,
la inglesa o de oferta consig ue
ofertan do
exacta mente 1000 euros.La subas_
ascend ente, su equiva lente de ofertaselladaVolvam? osta de Vickrey tieneunavirtudimporta nte: la estrate gia
a imagin ar un simula cro, estavez de subast a inglesa , óptimade todoslos particip antes es ,,decirla verdaá ,,,
realiza do conlasofertas recibid as.
lmagin emos quecaoa ofertarlo queparaellosvaleel objetosubast ado. Así
entante ,,
ofertatieneun "repres dispu-e sto a pujartan ocurretambié n .
en la subast ainglesaObserv en
la di_
su ofertacorresp ondien te. nza ferenci cona la subast a r
de ,,primeprecio, ,, la que
altocomoindique Comie en
la subast ya las pujasvansubien do, digamode s euro decirla verdadno produc eningúnbenefic io, porque ,
.
en euro,..¿hasta la ofertamásatta?No.Supon gamoscomohemosdicho,ganarla subastpor a 1000euroses
quela ofertamásalta,llamém osla A, es de 1000-e urosigualqueperder la. Hayquepujarun pocopordebajo ,
y que ta segund a ofertamásalta,B, es de 900euros. al igualque los particip antes en la subast a holand e'sa
Cu.andlaopujallegaa g00,el repres entante deA seráel espera n, connervios de acero,a queel precioestépor
unrco capazdesupera rla pujand901o euros. peroahora debajo .de lo queestaríadispuen a pagar.
stos
nadiesubiráa 902.por lo tanto,A ganala subast ya ¿Quéocurreconel subast ador? Conla subast a de
sólotienequepagarpor el artículllo precioofertad ó primerprecioobtieneofertasmás bajasperovende
por B (másla pequeñcantida a d un euroo mínimo el artícul opor el preciomásalto.Con la de Vickrev
de
increm ento depuja),esdecir, la segund aoferta másalta. consig ue las ofertasmáxim as, perovendepor la sé_
Estasubast de a ofertaselladaeñ , la queganaet que gundamásalta.¿Cuálde los dossistem as le reporta
ofrecemásperopagano lo queofertó, 'sino la segund a un mayorbenefic io? Esta pregun ta es más difíiil de
ta
ofertamásalta,se llama,,subasde Vickrey ,,o ,,d'ese_ contes tar
y dependde s
e cuántaperson particip en
as en
gundoprecio"A. primervista, a es unavariantun e tanto la subast a. Podem os resolveparcial
r mente' el
problem a
extrañaporquepareceque el subast ador estátirando en un.casomuyslmplif icado en el quelosprecios p de
piedras contrasu propiotejado:si A estabadispue sto N particip antes se encuen tran distribu ¡Oos al azarenrre,
? pqgar1000euros,¿porquévender le el artícul o por por ejempl o,900y 1000euros.Supon dremos tambié n
900?Vickreysin , embarg o, demos tró quetienevirtude s queestainforma ción es conoci da portodoslospartici_
consid erables ,
utilizan do
un argume nto estrech amente pantesEn. estecaso,la ofertaóptimaen la subastde a
relacio nado connuestrosorteós s iniciale s. primerprecioparaun particip ante quevaloreel artícul o
Slpong amos que se subast aun objetopor et que subast ado en un preciop se puedeencont rar por un
estáusteddispue sto a pagarcomomáxim 1000 o euós. argume nto similaral anterioyr resulta
Tenem os primerque o precisaqué r entend emos poreste
preciomáxim o. No es un preciodeterm inado por sus G = (1OOO - P.¡ P. -900
vicisitu deseconóm icas, su presup uesto mensu o su ar 100
patrimo nio. Esdecir,noes 1000eurosla cantidamáxi_ d -. Luegolasofertas enla subastde a primerprecio serán
maa pagarporque nose puedapermitiun r desem bolsoN s
númerodistribu al azarentre900y g50.En el
idos
de 1001euros,sino,simple mente, porqueparausted casode la subastde a Vickreylas , ofertas coincid en con
el objetosubast ado no vale1001euros.No tieneun los preciosserán : portanto,N númerodistribu s idos
al
deseoespeci al de poseer lo ni emocio nes de ninoún azarenlre900y 1000.paracompa rar losprecios finales
tipo..Es sólopuracuantif icación del valordel objéto. en las dossubast as necesi tamos sabercuántovaleel
Puedeconsid erar la subast a comoun juegoo loiería máxim ode N númerodistribu s entreg00y g50y
idos
en^don de, si consig ue el objetopor un'prei iop, gana el segundnúmero o másaltode N númeroO¡str¡n s u¡Ooó
-
1000 p euros,y no gananadasi pierdela subást a. entre900y 1000.Aunqu e estecálculoes compli cado,
Porlo tanto,le es absolu tament e
indifer enteganarla noesdifícilconven cerse deque,si N es suficie ntemen te
subastpora un preciop= 1000euroso irsea casacon grandees , másprobabque le el precio finalenla subast a
las manosvacías . seamayorqueen la de primerprecio.
de_Vic krey
Conestapremis a, quees consec uencia de la llamad a Porlo tanto,parecequeVickrey tienetodoa su favor:
"teoría de la utilidaduna ", de lasbasesde la econom ía porun ladolosparticip antes notienenqueestruja rse el
,
clásicapodem osanalizalos r distintotipos
s o calculasu
de subast a cerebr para r ofertani tienenqueadivinaor
de ofertasellada¿Cuál . es su mejoresirate gia cuando espiarlas intenci ones de sus contrin cantes en ;cuanto
participen a unasubast a de primerprecio?parasim- al subast ador, tieneunaaltaprobab ilidad de conseg uir
,
plificarsupong amos quela ofertamáxim a del restode un preciode ventamásalto.Si es así,¿porquéndse
particip antes es un número aleator io entre900v 1000 utilizacon másasiduid ad? Unade las-ret icéncia ens
euros.En estecaso,la subast aes similara nuestro contrade la subast de a segundprecio o es que,si los
pr¡mersorteo.Si su ofertaes p., la probab ilidad de particip antesno sonmuynumero sos, el preciofinalde
ganarla subastes a (p. - 900)/1 00. La gananc ia media ventapuedesermuchomenorqueen la subastde a pri_
seraentonc es: merprecio. Perohayotrarazónmássutil,quetieneque
p+900 verconla confian za de losparticip antes en la integri dad
-n *-_ del proces o.
Si ganam os unasubast de a Vicxreypero ,
2 no conoce mos al restode losparticip antes ni lasofertas
y resulta sermáximsi a p*- 950euros. Estaes portanto quehanenviad o, ¿cómo sabem os queel segundprecio o
la ofertaquedeberealizapor r. otrolado,si particip ara ha sidorealme nte el quenosdiceel organ- zador?
y Cl¡rucl
lruv¡slo nctóru ¡, 2006
enero. 89
J UEGOS MATEMÁTICOS Juan M.R. Parrondo
Incentivar la sinceridad
A
licia es presidente de una pequeña comunidad de ¿Qué suma dA debe ofrecer Alicia para maximizar
cuatro vecinos: ella misma, Berta, Carlos y Daniel. su ganancia UA? Ella no conoce el valor vB, vC, vD,
Alicia pretende construir un ascensor en el edificio. que tiene el ascensor para el resto de inquilinos, ni
El coste total asciende a 10.000 euros, pero no parece tampoco lo que éstos van a declarar. Pero sabe que el
justo que todos paguen lo mismo. Algunos tienen una ascensor se instalará si el total de ofertas supera los
mayor necesidad del ascensor, como los que viven en 10.000 euros, es decir, si:
los últimos pisos.
Alicia intenta en primer lugar un método bastante in- dA > 10.000 – (dB + dC + dD) = cA.
genuo. En una de las juntas pregunta públicamente a
cada vecino (incluyéndose a sí misma en la encuesta) Habrá, pues, ascensor si la oferta dA de Alicia supera
cuánto estaría dispuesto a pagar para tener el ascen- la cantidad cA que ella misma pagará en caso de que
sor. Enseguida se da cuenta de que todos tienden a la obra se acometa.
decir una cifra más baja de la que realmente estarían Si Alicia ofrece una suma dA mayor que el valor real
dispuestos a pagar, para ahorrarse algún dinero o por vA, puede ocurrir que el resto de ofertas sea tal, que
miedo a que los otros hagan lo mismo. dA > cA > vA. En este caso el ascensor se instalará y
¿Cómo hacer que todos digan la verdad? Existe una Alicia perderá dinero. Si, por el contrario, ofrece una
ingeniosa solución a este problema, aunque no comple- suma dA menor que el valor real vA, puede ocurrir que
tamente satisfactoria. Se trata del llamado mecanismo de el resto de ofertas sea tal que dA < cA < vA, con lo que
Vickrey-Clarke-Groves (VCG), inspirado en las subastas el ascensor no se construiría a pesar de que, si se hi-
de Vickrey y diseñado por los economistas norteameri- ciera, Alicia ganaría una cantidad UA positiva, porque su
canos Edward Clarke y Theodore Groves. Lo abordamos contribución cA sería inferior al valor vA que el ascensor
aquí el mes pasado. tiene para ella. Por lo tanto, la decisión óptima de Alicia
La idea es la siguiente. Alicia anuncia que va a pre- es decir la verdad: declarar exactamente el valor real
guntar a cada vecino lo que está dispuesto a pagar vA. Lo mismo ocurre para el resto de vecinos.
y que anotará las cantidades ofrecidas por cada uno, El mecanismo VCG está inteligentemente diseñado
que llamaremos dA, dB, dC y dD. Si la suma de las para que mentir sea una mala estrategia. Si usted leyó
cuatro ofertas alcanza los 10.000 euros, el ascensor se esta sección el mes pasado, podrá encontrar una cier-
instalará. Hasta ahora el sistema es idéntico al primer ta similitud entre el mecanismo VCG y la subasta de
intento ingenuo de Alicia. Lo que cambia en el me- Vickrey o de segundo precio. De hecho, hay también
canismo VCG es la contribución de cada vecino, que una subasta VCG que es una generalización de la
no pagará la cifra que ha declarado o ni siquiera una subasta de segundo precio y que se basa en la misma
cantidad proporcional. Alicia pagará una cantidad dada idea que acabamos de ver: la puja sirve para decidir
por la siguiente fórmula: el adjudicatario, pero la cantidad a pagar no depende
de su puja, sino de la del resto de los participantes
cA = 10.000 – (dB + dC + dD). en la subasta.
Sin embargo, en nuestro ejemplo del ascensor, como
Es decir, lo que paga Alicia no depende de lo que en cualquier problema de adquisición de bienes pú-
ella declara, sino sólo de lo que han ofrecido sus ve- blicos, el mecanismo VCG adolece de un serio incon-
cinos. veniente. Bruno no paga la cantidad que ofreció, d B,
Esta extraña regla tiene una gran virtud: induce a sino una cantidad c B dada por una fórmula análoga
decir la verdad. Supongamos que Alicia está dispuesta a la de Alicia:
a pagar una cantidad vA para tener el ascensor. Es
decir, el valor real del ascensor para Alicia es exacta- cB = 10.000 – (dA + dC + dD)
mente vA: si tuviera que pagar más estaría perdiendo
dinero y si tuviera que pagar menos estaría ganando. y así sucede con el resto de los vecinos. Por lo tanto,
(El mes pasado, al hablar de las subastas de Vickrey, si se decide hacer la obra, la cantidad total que pagan
comentamos con algo más de detalle el significado de nuestros cuatro amigos es:
este valor o “utilidad” de un bien, un concepto clave
en economía.) Con más precisión, en caso de que el C = cA + cB + cC + cD = 40.000 – 3D
ascensor se instalara, Alicia “ganaría” una cantidad (que
puede ser positiva o negativa): en donde D es el total ofertado: D = dA + dB +dC +
dD. C es mayor que 10.000 euros sólo si D es menor
UA = vA – cA que 10.000. Pero precisamente la condición para que el
El número h
D
esde hace unos meses la comunidad científica transmite en ocasiones hacia grupos de científicos que se
está sobresaltada. En los congresos, convenciones dedican a problemas cruciales o con más aplicaciones;
o simples charlas de café entre investigadores por ejemplo, el origen del universo y el diagnóstico del
y profesores de universidad, no se habla de otra cosa: cáncer, respectivamente. Es difícil prever cuáles de los
el número h. ¿Es una nueva constante fundamental de miles de pequeños avances científicos repercutirán de
la Naturaleza?, ¿la masa total del universo?, ¿alguna un modo determinante en el futuro.
cantidad crucial en el origen de la vida? No. Se trata de Una de las herramientas básicas para evaluar el im-
algo bastante más mundano, pero capaz de despertar pacto de un trabajo científico es el “número de citas”, es
tantas pasiones entre los investigadores como cualquiera decir, el número de artículos posteriores que lo mencio-
de los grandes enigmas de la ciencia. nan. Cuando en un artículo citamos un trabajo anterior,
El número h es un modo simple de evaluar la calidad significa que lo hemos utilizado, porque en él se desa-
de un científico. La idea original es de Jorge Hirsch, rrollaba una técnica que hemos empleado en el nuestro,
un físico argentino, profesor de la Universidad de Ca- porque se planteó un problema que ahora resolvemos
lifornia. Se publicó en septiembre del año pasado en o por cualquier otra razón. Así pues, las citas miden el
los Proceedings of the National Academy of Science. impacto científico de un trabajo, sin que ello suponga,
Desde entonces, no hay científico que no haya calculado por necesidad, una calidad indiscutible. En ocasiones, un
secretamente su número h y el de sus más queridos y artículo reiteradamente citado ha resultado ser erróneo;
odiados compañeros. cabe también que se le traiga a colación frecuente porque
Siempre es útil disponer de una herramienta objetiva haya dejaba abiertas cuestiones fáciles de resolver. En
para evaluar la calidad de alguna actividad. Pero en el cambio, puede muy bien acontecer que un artículo que
caso de la ciencia, una herramienta de este tipo se ha cierre definitivamente un problema, aunque se trate de
hecho indispensable por varias razones. En primer lugar, un problema de capital importancia, se cite menos que
porque la mayor parte de los recursos destinados a la un artículo de calidad inferior.
investigación básica son públicos y se necesitan criterios A pesar de todo, el número de citas sigue siendo el
objetivos para distribuirlos. Administradores y evaluadores parámetro común para medir la calidad de un trabajo.
académicos tienen constantemente que repartir fondos, En 1960, Eugene Garfield, experto en bibliometría, creó
conceder becas y contratos o aprobar proyectos. En una el Science Citation Index (SCI), un índice o registro de
empresa, la productividad de un departamento, incluido
el de investigación y desarrollo, puede evaluarse con
relativa facilidad en términos económicos. Sin embargo,
lo que la investigación básica aporta a la sociedad no
es siempre cuantificable económicamente o lo es a muy
largo plazo.
En segundo lugar, la creciente especialización hace
.5-%2/ $% 02%-)/3 ./"%,
D
esde que Isaac Newton creara desarrollada por Jean 15
el cálculo infinitesimal para Pierre Eckmann, de la 10
estudiar el movimiento de los Universidad de Ginebra,
astros, una de las aplicaciones más es el diagrama de recu- 5
fructíferas de la matemática ha sido rrencia, que se aplica a 0
el estudio del cambio. Sabemos cómo series de datos. La idea −5
expresar matemáticamente las leyes es bastante simple. Si
que rigen la evolución de un sistema, tenemos una serie de −10
mediante las llamadas ecuaciones datos x1, x2, x3,..., xN, el −15
diferenciales, y conocemos un sinfín diagrama de recurrencia
de técnicas para resolverlas. También consiste en una cuadrí- 200 400 600 800 1000 1200 1400 1600 1800 2000 2200 2400 2600 2800 3000 3200 3400
disponemos de una herramienta cula con N × N casillas 1. Evolución de una de las variables del modelo de Lorenz.
muy potente, la transformada de en donde la luminosidad
Fourier, que nos permite detectar de la casilla (i,j) es in-
periodicidades en el comportamiento versamente proporcional a la distan- te visual. Permite hacerse una idea
de una magnitud. cia entre el punto xi y el xj. de cómo evoluciona la variable en
Sin embargo, después de tres si- En la fi gura 2 podemos ver el cuestión. En la figura 3 (izquierda)
glos de desarrollo continuado, y en diagrama de recurrencia de una de hemos representado el diagrama de
gran parte gracias a la aparición de las variables del modelo de Lorenz recurrencia de una señal perfecta-
los ordenadores, el estudio de los y un detalle de dicho diagrama. La mente periódica, sen(t). En este caso
sistemas que cambian en el tiem- diagonal es siempre muy luminosa, los patrones son también periódicos,
po experimentó una revolución con puesto que muestra la distancia en- como cabría esperar. Es interesan-
el descubrimiento de los sistemas tre puntos que son iguales (i = j), te comprobar cómo se modifica el
caóticos. Fue el meteorólogo Edward es decir, a una distancia nula. Las diagrama cuando añadimos ruido, es
N. Lorenz quien, al estudiar un mode- zonas oscuras del diagrama corres- decir, una cierta cantidad aleatoria,
lo muy simple de la atmósfera, des- ponden a puntos muy distantes entre a la señal periódica original. El re-
cubrió que una pequeña perturbación sí. La alternancia entre zonas claras sultado se muestra en la figura 3
podía modificar de forma drástica el y oscuras nos indica que la magnitud (derecha). El diagrama se ha difu-
comportamiento futuro del sistema. oscila. Por otra parte, en el diagrama minado ligeramente y ha aparecido
En la figura 1 podemos ver cómo no detectamos una periodicidad en- una textura en forma de malla, más
varía una de las variables del modelo tre zonas claras y oscuras a escalas visible en las zonas oscuras. Sin em-
de Lorenz. En períodos breves de grandes de tiempo, debido al carácter bargo, la estructura de la variable
tiempo la variable oscila de forma caótico del sistema. En el detalle se original se ha mantenido. Por lo tanto,
regular, pero en ocasiones se aleja de pueden observar unos patrones que el diagrama de recurrencia es útil
este comportamiento oscilatorio de un no son repetitivos, resultado también para analizar variables aunque estén
modo aparentemente imprevisible. de esa mezcla de regularidad y com- perturbadas por algún ruido.
En torno a los sistemas caóticos plejidad característica de algunos sis- En la figura 4 mostramos diagra-
surgieron nuevas técnicas para ana- temas caóticos. mas de series de datos reales. El de
lizar cómo cambia una magnitud con El diagrama de recurrencia es en la izquierda se ha obtenido con el
el tiempo. Una técnica muy conocida, principio una herramienta meramen- número medio de manchas solares
por año, desde 1700 hasta 1979 (280
3500 datos). Se aprecia cierta periodici-
1900 dad de unos 11 años, bien conocida.
3000
1800
Pero, al igual que en el modelo de
2500
1700
2. El diagrama de recurrencia de la varia-
2000 1600 ble del modelo de Lorenz que se repre-
1500
senta en la figura 1. En la figura de la
1500
izquierda se puede ver el diagrama comple-
1400
1000 to (3500 puntos) y en el de la derecha un
1300 detalle en torno a la diagonal (del punto
500 1150 al 2000). Los números de los ejes
1200
indican, como en las gráficas siguientes, el
500 1000 1500 2000 2500 3000 3500 1200 1300 1400 1500 1600 1700 1800 1900 número de dato en la serie de datos.
4600
la izquierda corresponde a una zona
en donde el intervalo es consonante,
150
4500
2000 puntos en torno a la quinta justa,
intervalo en donde las frecuencias es-
100 4400
tán en una relación 3:2, mientras que
el de la derecha está centrado alrede-
4300
dor de la quinta disminuida, un inter-
50
valo disonante de frecuencias 64:45.
4200
En la figura se aprecia fácilmente que
50 100 150 200 250 4200 4300 4400 4500 4600 4700 4800
la disonancia musical produce también
4. Diagramas de recurrencia de la intensidad de las manchas solares (izquierda) una “disonancia visual”. Lligoña y sus
y del índice Dow-Jones (derecha).
colaboradores han estudiado de forma
cuantitativa algunas características del
diagrama, como la densidad de pun-
tos claros, y las han relacionado con
la consonancia de los intervalos. Se
consigue así una explicación de la
consonancia muy diferente de la acep-
tada hasta la fecha, debida a Plomp
y Levelt (véase Juegos de marzo de
2004) y que no es aplicable a tonos
puros. No obstante, la teoría de Plomp
y Levelt ha explicado fenómenos más
complicados, como la dependencia de
la consonancia con el timbre. Quizá
los diagramas de recurrencia, apli-
cados a sonidos con timbre en lugar
5. El diagrama de recurrencia para un intervalo consonante (izquierda) y uno disonante de a tonos puros, arrojen nueva luz
(derecha). sobre esta cuestión.
E le s p a c i o - t i e m p o
/\uando en físicase diceque mallaformada por líneasparalelas losejesqueutilicemos. Pero,¿para
I - el espacio-tiempo tienecuatro a los ejesy separadas entresí por qué necesitamos diferentes ejes?
V dimensiones, queremos decir unaunidad de longitud, porejemplo ¿Nobastacon los habituales ejes
simplemente que,paraubicarun su- un centímetro. Estamalladefinelas perpendiculares?
ceso,bastacondarcuatronúmeros: coordenadas de cadapunto. Lasdel Utilizardistintosejessirvepara
lastrescoordenadas delpuntoespacial puntorojode la figuraizquierda son entendercómodos observadores
dondeel sucesoocurrey el instante (4 cm,3 cm).Dela misma forma,se pueden verla mismarealidad dedis-
detiempo enelqueocurre. Lapalabra oueden encontrar lascoordenadas de tintaforma.Lo podemos comprobar
"puntodel espacio{iempo" tieneun todoslospuntos dela malla, y enge- conunejemplo sencillo,endondeel
significado bastante ramplón: no es neral,utilizando números decimales,espacio tienesólounadimensión y,
másqueun lugary unafecha. de cualquier puntodelplano. por tanto,el espacio-tiempo es bi-
¿Porquéentonces tantomisterio Existenotrasformasde asignar dimensional. Supongamos que dos
en tornoal espacio{iempo y sus coordenadas que no son tan habi- observadores sincronizan susrelojes
cuatrodimensiones? Desplegar el tuales.En la figura1 (derecha) se en un determinado instante y lugar,
tiempo sobreunadimensión significa muestra unejemplo enelquelosejes esdecir, enundeterminado puntodel
dotarlo deunacierta"espacialidad" y nosonperpendiculares. Sinembargo,espacio-tiempo. Losdosobservado-
poneren un mismonivellosaconte- se puede también dibujarunamalla rescolocan su origende posiciones
cimientos pasados, presentes y futu- mediante líneasparalelas a losmis- y detiempos enestepunto, queten-
ros.Estotieneunindudable atractivo.mosy asignar coordenadas deforma drá coordenadas (0,0)paraambos.
Peroel espacio-tiempo ha adquirido similar a nuestro primer ejemplo. En Supongamos ahoraque el primero
de losobservadores, O, permanece
quietoy el segundo, 0, se mueve
a unavelocidad v. Si el primero de
ellosasigna unascoordenadas (x,f)a
unpuntodelespacio-tiempo, ¿cuáles
sonlascoordenadas (.t',f)queasig-
naráel segundo a esemismo punto?
La resouesta másintuitiva coincide
conel análisis de Galileo. Enorimer
lugar,el tiempoes universal: losdos
observadores datarán un eventocon
la mismacoordenada temooral. En
otraspalabras, hoyes5 demayotan-
to parausted,queestásentado ensu
plano. punlo = casaleyendo, comoparamí,aunque
1. Coordenadas enel Elnisno r0j0ltienecoordenadas
lcírculo x 4,
estéviajando en un trena 100kiló-
y = 3, conrespecto a losejesperpendiculares dela izquierda,y coordenadas
r'= 2, metrospor hora.Matemáticamente:
y' = 3, conrespectoa losejesoblicuos dela derecha. f = f. A la coordenada espacial no le
ocurrelo mismo,Puestoque O se
unasignificación muchomáspoten- estecaso,el puntorojo(quees el muevea velocidad v, veráalejarse
te e inesperada gracias a la teoría mismo queenel dibujo dela izquier- el origen, queya no tendrácoorde-
de la relatividad, al demostrar que da)tienecoordenadas (2 cm,3 cm). nadaespacial cero.La coordenada
ambostiposde "coordenadas", las El puntoes el mismoen losdosdi- espacial paraO' es x'= x-vt. En
espaciales y la temporal, no sonin- bujos; sinembargo, suscoordenadasefecto, si la velocidad v es positiva,
dependientes entresí, sinoquese sondistintas porque hemos cambiado el observador 0 se moverá haciala
entremezclan deformasorprendentelosejes.Estecambio esparecido a lo derecha y verácómoel origenx = 0
y contraria a la intuición. quele ocurrea unamagnitud cuan- se alejade él haciala izquierda, de
Antesdeadentrarnos enlosmiste- do se expresa endistintas unidades:modoque le asignará unacoorde-
riosdelespacio-tiempo, conviene que 10 centímetros y 0,1 metrossonla nadaespacialnegativa* = -vt. la
recordemos lasdiferentes formasde mismadistancia, aunquesu expre- transformación de Galileo:
asignar coordenadas a lospuntos de siónnumérica deoende obviamente x'=x-vt t'=t
un plano.La formamáshabitual es de las unidades. Conun ountodel indicacómose relacionan las coor-
trazardosejesperpendiculares, como espacio pasalo mismo: puedetener denadasque el observador O y el
en la figura1 (izquierda). A partirde expresiones numéricas diferentes,es observador O'asignan al mismopun-
estosdosejesse puededibujar una decir,coordenadas diferentes,según to delespacio-tiempo, ¿Quéaspecto
88 v Cl¡ucta,
lruvrsrencróru 2006
mayo,
despacio quela luz.Estalimitación
se representa gráficamente en la fi-
gura3. Elpunto amarillo enelcentro
deldibujo sólopuedeinfluir sobreel
triánguloverdeen el espacio-tiempo
y sólopuede serinfluido porsucesos
ocurridos eneltriángulo rojo. Sonen
realidad,y respectivamente, elfuturo
y el pasadodel puntoamarillo, si
entendemos porpasado aquello que
p aproau n o b s e r v a deonrr e p o sy0 0 t r 0q u e
2 . E j e sd e c o o r d e n a deanse l e s p a c i o - t i e m podemos recordar o quenospuede
mueve haciala derecha segúnGalileo (izquierdal y segúnEinstein lderechal. y porfuturo
influir aquello en lo que
aúntenemos la oosibilidad de inter-
tiene la transformación de Galileo? rentzson aproximadamente iguales venir.Estostriángulos decausalidad
¿Cómoson los ejescoordenados de a las de Galileo. Sin embargo, hay no deoenden delobservador. Porlo
O y de O' en el espacio-tiempo? La dosgrandes diferencias entreambas. tanto,entendidos de estaforma,el
respuesta se muestraen la figura2 En primer lugar, el denominador en pasadoy futurode cualquier punto
(izquierda), paraun observador O'que lastransformaciones deLorentz hace delespaciotiempo sonabsolutos. Por
se muevecon respectoa O a una quetantoel espacio comoel tiempo ejemplo, el orden temporal delpunto
velocidad de 213metrospor segun- se"contraigan" paraO':lasdistanciasrojoclaroy delverdeen la figura2
do haciala derecha. Comose ouede seránmáscortasy losobjetos más (derecha) es diferente paraO y para
apreciar, losejesespaciales de ambos pequeños enladirección desu movi- O', comoya hemosvisto.Sin em-
observadores coinciden. mientras oue miento. Lasegunda y másimportantebargo,el puntorojono es futuroni
el eje temporalde O' está inclinado diferencia es que el tiempoya no pasado delverde,y viceversa.
con respecto al de O. No he dibujado es universal, sinoquela coordenada
el mallado completo, comoen la figu- temporal se mezclaconla espacial
ra 1, sinosólolas líneascercanas a a travésdel términovx/é. En con-
losejes,parano complicar demasiado secuencia, losejesespaciales delos
la figura.El puntorojotienecoorde- dos observadores ya no coinciden,
n a d a sx = 5 , l = 3 , p a r aO , y x ' = 3 , comose ve en la gráfica de la dere-
f' = 3, para O', de acuerdocon las chade la figura2. El tiempo dejade
transformaciones de Galileo. serabsoluto. Porejemplo, paraO'los
Observenque los segundosdel puntos queestánsobreel ejex'son
eje temporalf' tienen una mayor simultáneos, es decir,a todosellos
longitudque los de f. Así debe ser O les asignala mismacoordenada
si queremosreproducir gráficamen- temporal f'= 0. Sinembargo, paraO
te las transformaciones de Galileo. esosmismos puntostienendistinta 3. Pasado y futuro segúnla teoríadela
A primera vista es tambiéncurioso coordenada temporal, creciente se- relatividad.
que losejesespaciales de O y de O' gúnnosmovemos a lo largodeleje
coincidan y los ejestemporales difie- haciala derecha. Enpocaspalabras, Con ellola teoríade la relatividad
ran,mientras que ocurrelo contrario la simultaneidad es relativa. Incluso recupera todasu coherencia. Sinem-
con las coordenadas. Reflexionandoel ordentemporal es relativo: paraO bargo,hayalgoen el espacio-tiempo
un poco,el lectorpuedecomprobar el círculorojoclarode la figuraes einsteiniano que siguesiendoenig-
que los ejes espaciales tienenque posterior al verde, mientras quepara mático,especialmente cuandouno
coincidirpara que f = f'. De hecho, O' es anterior en el tiemoo. considerasucesosaleatorios. Nos
el eje temporalde O' está definido Estarelatividad delordentemooral pareceque la tiradade un dado
por los puntoscon x' = 0, es decir, plantea enseguida un problema adi- establece de formanítidaun "antes"
por la propiatrayecioria de O'. cional: ocurre si en un punto A y un "después", un universoantes
¿qué
¿Qué ocurreen la teoriade la delespacio-tiempo ocurrealgoque de la tiraday un universodespuésde
relatividad? Einsteindescubrió oue es causade un evento en un ounto la tirada,inclusoaunquepuntosde
las transformaciones de Galileode- B? ¿Vería entonces O'elefecto antes ese universono ouedanverse en
bíanser sustituidas oor las llamadas de la causa? Unode losprincipiosabsolutoinfluidosoor el resultado
transformaciones de Lorentz: básicos de la teoríade la relatividadde la tirada.Sin embargo,un ob-
impideestetipode paradoja: nada servadorouedeconsiderar la tirada
x- vt t-vxlc2
¿ ,_- - - -
+ puedeviajara unavelocidad mayor anteriora ciertoevento,mientras que
1- ( v l c ) 2 111-(vlc), queladela luz,nicuerpos materialesotroobservador la puedeconsiderar
ni información. Porlo tanto,lo que oosterior. La inclusión del azaren el
en dondec es la velocidad de la ocurreen A puedeser causade lo espacio-tiempo einsteiniano parece
luz. Si la velocidaddel observador queocurreen B sólosi estosdos problemática, a pesarde no producir
O', y, es muy pequeñacomparada puntosdel espacio tiempopueden paradojas de causalidad. A estetema
con la velocidadde la luz, es fácil "comunicarse" entresí a través deun dedicaremos probablemente alguna
ver que las transformaciones de Lo- rayode luzo de algoqueviajemás reflexión en el futuro.
YCrENctA,
lruv¡silenclóru 2006
mayo, 89
J UEGOS MATEMÁTICOS Juan M.R. Parrondo
Espaciotiempo y azar
E
l mes pasado discutimos la O (izquierda), en reposo, y O’ (de- momento en que se encuentra sobre
sorprendente estructura del recha), que viaja hacia la derecha a el punto verde de la figura. Sin em-
espaciotiempo según la una velocidad de 90.000 kilómetros bargo, estos cuatro puntos no son
teoría especial de la relatividad. por segundo (0,3 veces la velocidad simultáneos para O’, quien, por ejem-
Tiempo y espacio se mezclan cuando de la luz). He escogido las distan- plo, data el evento amarillo unos dos
tratamos de relacionar cómo ven el cias de modo que los eventos estén minutos y medio antes que el evento
mundo observadores que viajan a localizados en la Tierra (punto ver- verde. La línea “ahora” de O es para
distinta velocidad. Supongamos dos de), Venus (puntos azules), Mercurio O’ una línea inclinada hacia abajo.
observadores, O en reposo y O’ (puntos rojos) y el Sol (punto amari- A su vez, la línea “ahora” de O’ es
moviéndose a una velocidad v, que llo). Recordemos que las dos figuras horizontal en la figura de la derecha,
colocan su origen de posiciones y representan los mismos puntos, pero pero sería oblicua, inclinada hacia
de tiempos en un mismo punto. Si localizados y datados por O y por arriba, en la figura de la izquierda, es
O asigna unas coordenadas (x,t) O’. He dibujado también las trayec- decir, en las coordenadas de O. Por
a un punto del espaciotiempo, las torias de O (en azul) y de O’ (en supuesto, todas estas líneas “ahora”
coordenadas (x’,t’) que asignará O’ rojo) y los llamados conos de luz suben paulatinamente, a medida que
son obviamente distintas. En la vieja de algunos eventos, en concreto de el tiempo avanza para cada uno de
mecánica de Galileo y Newton, la los dos eventos en Mercurio y del los observadores, aunque conservan-
relación entre ambas coordenadas segundo en Venus. Los conos son las do su inclinación.
es: dos líneas que parten de cada punto La simultaneidad es relativa. Pri-
x’ = x – vt t’ = t del espaciotiempo y representan la mer hallazgo de Einstein. Pero inclu-
trayectoria de dos rayos de luz emiti- so el orden temporal es relativo. El
mientras que, en la teoría de la rela- dos desde dicho punto. Estos conos evento azul superior en Venus ocurre
tividad especial, las coordenadas de tienen una propiedad fundamental: para O en un tiempo t = 100, unos
los dos observadores se relacionan su forma no varía de un observador veinte segundos antes que el even-
a través de las llamadas transforma- a otro. Siempre presentan el mismo to naranja que ocurre en Mercurio.
ciones de Lorentz: ángulo debido a que en las trans- Sin embargo, para O’, el segundo de
formaciones de Lorentz la velocidad estos dos eventos, es decir, el de
de la luz es la misma para todos los Mercurio, es unos veinte segundos
x − vt t − vx /c 2 observadores. Es una propiedad fácil anterior al de Venus. Como vimos el
x’ = t’=
1 − (v /c)2 1 − (v /c)2 de demostrar para el caso particular mes pasado, esta relatividad del or-
del cono de luz x = ct. den temporal de eventos no da lugar
Observemos la serie de eventos a paradojas causales. Si hay ambi-
en donde c es la velocidad de la que se encuentran a tiempo 0 para güedad en el orden temporal de dos
luz. O, es decir, los cuatro puntos que eventos, uno no puede influir sobre
Vamos a analizar algunas de las están en el eje horizontal de la figura el otro. La ambigüedad sólo ocurre
propiedades sorprendentes de las 1 (izquierda). Estos puntos son simul- entre puntos del espaciotiempo que
transformaciones de Lorentz. En táneos para O, ya que les asigna la no se pueden comunicar entre sí, o
los dos diagramas de la fi gura 1 misma coordenada temporal, t = 0. que podrían comunicarse sólo me-
representamos varios puntos del Por ello, el eje horizontal se deno- diante señales más rápidas que la
espaciotiempo, tal y como los ven mina la línea “ahora” para O en el luz, lo cual es imposible en el marco
de la relatividad especial.
Cuando se consideran eventos
300 300 aleatorios, como la tirada de un dado,
siguen sin darse paradojas causa-
TIEMPO (EN SEGUNDOS)
“E
l reciente censo invernal de aves acuáticas ha de peces que realmente hemos recapturado, una buena
contabilizado en Doñana 164.131 ejemplares”. estimación de la población total es:
“El número de ballenas jorobadas en Baja
California es aproximadamente 1450”. ¿No se han 100 × 100
preguntado nunca cómo se obtienen estos números? N=
n
¿Hay alguien que cuenta pacientemente todas las aves
o ballenas que pasan delante de sus narices? Y si es Es decir, si recapturo 20 peces, lo más probable es
así, ¿cómo se las apaña para no contar dos veces el que la población total sea de unos 500. En general, si
mismo animal? en la primera captura pesco n1 peces y en la segunda
La primera operación matemática que aprendemos n2, de los cuales n12 resultan estar marcados, entonces
es la de contar y cualquiera sabe hacerlo hoy en día. la mejor estimación de la población total de peces es:
Sin embargo, lo que no todo el mundo sabe es que
hay maneras más inteligentes de contar que la mera n1 × n2
N=
enumeración de objetos o individuos. n12
Para realizar censos de animales, se conoce desde el
siglo XIX una técnica bastante ingeniosa: el método de En la figura 1 podemos ver una representación es-
captura-recaptura. Supongamos que queremos saber el quemática del proceso.
número de peces de un estanque. Pescamos un cierto Esta es la versión más simple del método de captura-
número de ellos, digamos 100 (cuanto más alto, mejor). recaptura. Tal y como lo hemos formulado, son necesarias
Marcamos estos peces capturados de alguna forma y los varias condiciones para que la estimación sea válida. En
soltamos de nuevo en el estanque. Esperamos un tiempo primer lugar, no sólo el número de peces debe perma-
suficientemente largo para que los peces marcados se necer constante entre las dos capturas (si no fuera así,
mezclen con el resto —por ejemplo, una semana—, y no tendría sentido calcular dicho número), sino que no
volvemos a capturar 100 peces. De ellos, algunos es- puede haber muertes o nacimientos de peces. Si los
tarán marcados, por ser peces “recapturados”, y otros hubiera, la fracción de peces marcados en la segunda
no. La proporción de peces recapturados nos indicará captura sería menor que esa misma fracción en el mo-
la población total en el estanque. En efecto, si hay en mento de soltarlos al estanque, es decir, inmediatamen-
total N peces y he marcado 100, la probabilidad de te después de la primera captura, puesto que algunos
pescar en la segunda captura un pez marcado será habrán podido morir entre las dos capturas. Ocurriría
100/N. Por lo tanto, el número medio o “esperado” de lo mismo si los peces pudieran abandonar el lugar de
peces recapturados es 100 × 100/N. Si n es el número estudio, por ejemplo si fuera un río en lugar de un estan-
que. La segunda suposición es que las capturas tienen
que ser completamente aleatorias. Esta aleatoriedad es
en ocasiones difícil de conseguir, especialmente en la
segunda captura, porque los peces marcados pueden
haber “aprendido” a evitar las redes. En general, hay
que asegurarse de que los animales marcados no tienen
mayor o menor tendencia a ser recapturados que sus
congéneres no marcados.
Los métodos más avanzados de captura-recaptura son
bastante más complejos de lo que hemos descrito aquí y
tienen en cuenta la posibilidad de muertes y nacimientos
o de migraciones. Se basan no sólo en dos capturas,
sino en un número arbitrario de ellas, después de las
cuales los animales vuelven a soltarse, que conforman
una “historia” para cada animal capturado. Estas historias
suelen denotarse mediante cadenas de ceros y unos:
un uno significa que el animal ha sido capturado y un
cero significa que no lo ha sido. Por ejemplo, si se han
realizado cinco capturas, la historia 01100 indica que el
En la primera captura (línea roja) hemos obtenido 6 peces. animal ha sido capturado en la segunda y tercera de ellas
En la segunda (línea azul) hemos obtenido 9, de los cuales hay y se ha “escapado” en el resto, es decir, en la primera,
3 marcados. La estimación del número total de peces es cuarta y quinta. Cada animal tiene una historia. Incluso
6 × 9/3 = 18, ligeramente inferior al valor real, 19. se puede asociar la historia 00000 a los animales que
Ganancia segura
C
omo supuesto experto en probabilidad y juegos mos 1 × 2,22 = 2,22, ganando 12 céntimos de euro. Por
de azar, una de las preguntas que más veces otro lado, si el resultado fuera B, entonces recibiríamos
me han hecho en los últimos años es si conozco 1,10 × 2 = 2,20, ganando 10 céntimos. Es decir, ganamos
algún método para ganar en un casino o en la bolsa. sea cual sea el resultado.
La respuesta, invariablemente, es negativa. Sin embargo, Pero quizá hayamos pecado de optimistas. ¿Es posible
esta vez tengo buenas noticias. Voy a revelarles por fin encontrar en Internet las cuotas de la tabla anterior u
un método con el que, en principio, se puede ganar con otras que permitan obtener un beneficio seguro? Para
absoluta certeza en ciertas apuestas deportivas que ahora responder a esta pregunta tenemos que conocer el modo
abundan en Internet. No hay trampa ni cartón. Pero no en que las casas de apuestas establecen sus cuotas.
se hagan excesivas ilusiones: el método requiere ciertas Supongamos primero que la casa no se queda ninguna
condiciones que son muy difíciles de cumplir, debido a comisión, sino que reparte entre los participantes todo el
las comisiones de las casas de apuestas. dinero apostado. Consideraremos únicamente apuestas
La idea consiste en aprovechar las diferencias en el con dos resultados posibles, A o B. Si se ha apostado
pago que dos casas de apuestas distintas ofrecen por el un total de A euros a favor de A y B euros a favor de B,
mismo resultado de un acontecimiento deportivo. En efecto, cuando el resultado final sea A los ganadores recibirán,
estos pagos no son siempre iguales en todas las casas por cada euro apostado, una cantidad:
e incluso pueden cambiar con el tiempo en una misma
casa, puesto que dependen de la cantidad apostada a CA = A + B = 1
cada resultado por todos los participantes en la apuesta. A a
Los pagos se suelen indicar con un número mayor que que es precisamente la cuota de A. En esta fórmula
uno, la cuota, que es el dinero que se recibe por cada hemos llamado a a la fracción de apuestas en favor
euro apostado. Cada resultado tiene su propia cuota, que de A, es decir, a la cantidad A/(A + B). Por otro lado,
será en general más alta cuanto más improbable sea. la cuota de B será:
El método de ganancia segura es simplísimo a pri-
mera vista. Supongamos que, rastreando por Internet, CB = A + B = 1
encontramos una eliminatoria de un campeonato de B 1–a
fútbol para la que dos casas de apuestas ofrecen las Como era de esperar, la cuota de un resultado es
siguientes cuotas: mayor cuanto menor es la cantidad apostada a favor
de dicho resultado. Las cuotas de la tabla de nuestro
Para A Para B ejemplo se han calculado con estas fórmulas, supo-
Casa de apuestas 1 2 2 niendo que en la casa de apuestas 1 la mitad de las
Casa de apuestas 2 2,22 1,82 apuestas han sido a favor de A y la otra mitad a favor
de B, es decir, a = 1/2, y que en la casa 2 la fracción
Podríamos entonces apostar 1,10 euros a B en la casa de apuestas en favor de A es a = 0,55 y, en favor de
número 1, y 1 euro a A en la número 2. La apuesta total B, 0,45. Por tanto, ¡nuestra apuesta segura es perfec-
sería de 2,10 euros. Si el resultado fuera A, recibiría- tamente posible!
2,1 900
2,05 800
2 700
Ganancia de la casa
1,9 500
1,85 400
1,7 100
1,65 0
0 20 40 60 80 100 10 20 30 40 50 60 70 80 90 100
Total apuestas (×100) Total apuestas (×100)
Evolución de las cuotas (izquierda) y de la ganancia de la casa de apuestas (derecha) en función de la cantidad total
apostada a lo largo del tiempo.
Medir la desigualdad
L
a economía es una disciplina muy compleja. Aunque que dispone de una fracción dada de la riqueza o de
algunos economistas mediáticos se empeñen en los ingresos totales de un país.
convencernos de que es una ciencia exacta con Para entenderlo mejor, veamos un ejemplo con los
recetas indiscutibles (y la mayoría de las veces tendentes ingresos anuales de los hogares españoles en 2004,
al neoliberalismo), lo cierto es que nadie dispone de mostrados en la tabla. Se han dividido los hogares en
un modelo macroeconómico perfecto, ni suficientemente 6 tramos de acuerdo con sus ingresos anuales. En cada
contrastado. Algunos principios válidos para una época tramo podemos ver el número total de hogares y el total
o un país pueden dejar de funcionar en otro contexto de ingresos de dichos hogares (los datos han sido toma-
en el que sean diferentes los modos de producción, la dos del Instituto Nacional de Estadística, aunque han sido
técnica, los hábitos culturales y las motivaciones de la ligeramente modificados para no tener en cuenta hogares
población. También los métodos de medición de algunos con ingresos desconocidos y para calcular los ingresos
parámetros macroeconómicos, como el producto nacional por tramo de renta). A partir de estos datos he calculado
bruto, están sujetos a constante revisión y mejora. Y, el porcentaje sobre el total, tanto de hogares como de
aun disponiendo de datos precisos y modelos fiables, ingresos y, finalmente, los porcentajes acumulados, es
¿cuál debería ser el objetivo de la política económica? decir, la suma de porcentajes correspondientes a tramos
¿Aumentar el producto nacional bruto, la cohesión inferiores o iguales a uno dado. Estos porcentajes acu-
mulados, coloreados en la tabla, son los que se utilizan
para dibujar la curva de Lorenz, mostrada en la figura
2 (se suelen utilizar fracciones en lugar de porcentajes,
Número
por lo que he dividido entre 100 los datos de la tabla
de personas
para conseguir los puntos de la figura).
Cualquier curva de Lorenz, como le ocurre a la de
la figura 2, comienza en el punto (0,0) y termina en el
(1,1), y es creciente, cóncava y se encuentra siempre por
debajo de la diagonal. Nos informa de qué fracción de
población acumula una cierta fracción de ingresos. Por
ejemplo, a partir de la tabla o de la figura 2, podemos
decir que, en España, el 85,26 % de los hogares dispone
del 68,36 % de los ingresos totales. En ocasiones, para
Renta anual indicar la desigualdad de un país, se pueden leer en
la prensa afirmaciones como: “el 10 % de la población
1. Posible distribución de la renta en un país.
posee el 70 % de la riqueza total del país”, o, equiva-
lentemente, “el 90 % de la población sólo dispone del de algunas políticas sobre la desigualdad. Por ejemplo,
30 % de la riqueza”. Este dato no es más que un punto tanto en Reino Unido como en los Estados Unidos, se
en la curva de Lorenz, un punto cuya coordenada ho- aprecia un incremento de la desigualdad coincidente con
rizontal sería 0,9 y cuya coordenada vertical sería 0,3. las políticas económicas de Reagan y Thatcher.
Esta hipotética curva de Lorenz, afortunadamente muy El índice de Gini está sujeto a algunas ambigüedades
distinta de la de nuestro país, estaría muy pegada al en su cálculo, como la elección de familias o personas
eje horizontal, puesto que pasa por el punto (0.9, 0.3) para dibujar la curva de Lorenz o la forma de computar
y luego saltaría bruscamente hasta el punto (1,1). Es sus ingresos. Quizá la base de datos más rigurosa y
una curva de alta desigualdad. Por el contrario, la dia- documentada sobre desigualdad e índices de Gini sea la
gonal roja de la figura 2 corresponde a una sociedad del Instituto Mundial para la Investigación en Economía
completamente igualitaria, en donde todos los hogares del Desarrollo de la Universidad de las Naciones Unidas
tendrían los mismos ingresos. (WIDER, www.wider.unu.edu). Otra fuente importante de
Pues bien, el índice de Gini, G, mide cuánto se separa datos es el Programa de Desarrollo de las Naciones
la curva de Lorenz de esta diagonal que corresponde Unidas (www.undp.org), en donde pueden encontrar di-
a la igualdad perfecta. Más concretamente, es el área versos indicadores de desigualdad de todos los países
comprendida entre la curva y la diagonal, es decir, el
área de la región sombreada en amarillo en la figura Número Porcentaje Total ingresos Porcentaje
Porcentaje Porcentaje
2, multiplicada por 2. Esta multiplicación se realiza para de hogares
(en miles)
de hogares
acumulado
de hogares
(en millones
de euros)
de ingresos
acumulado
de ingresos
que el índice G tome valores entre 0 (igualdad absoluta) Hasta 9000
y 1 (desigualdad absoluta). euros 2762 18,80 18,80 12,43 4,04 4,04
Una de las ventajas del índice de Gini frente a otros De 9000
2376 16,18 34,98 27,32 8,88 12,91
a 14.000 euros
indicadores de desigualdad estriba en lo siguiente: puesto
De 14.000
que se define en términos de fracciones de población a 19.000 euros 2394 16,30 51,28 39,50 12,83 25,74
y riqueza, es independiente de los valores totales, es De 19.000
2317 15,77 67,05 50,97 16,56 42,30
decir, de la población y del producto interior bruto del a 25.000 euros
NUMERO DE JUGADORES
ticipantes que juegan al ultimátum con
100 euros por turno. En el recuadro interior 125 0 2 4 6 8 10
(en verde) se puede ver la evolución del um-
bral medio en función del tiempo (en millones 100
de turnos). [Tomada del Journal of Theoretical
Biology, vol. 235, 2005.] 75
50
organización social. Como en todos los
estudios antropológicos, los investigado- 25
res tienen que ser muy cuidadosos para
no influir inconscientemente sobre los 0
jugadores. Incluso la forma de explicar el 0 10 20 30 40 50 60 70 80 90 100
UMBRAL DE ACEPTACION (EN EUROS)
juego puede dar lugar a comportamien-
tos distintos entre un experimento y otro.
Aun así, el aspecto cuantitativo del juego del ultimátum Por otro lado, si ui ≤ uJ, j rechaza la oferta de i y
lo convierte en una herramienta útil para caracterizar los capitales de los dos jugadores no varían. El modelo
la propensión a la cooperación o el sentido de justicia incorpora el efecto de la selección natural eliminando,
en cada cultura. cada cierto número s de turnos, al jugador con menos
Recientemente se ha acuñado el término neuroeco- capital y sustituyéndolo por un “hijo” del jugador con más
nomía para referirse a un nuevo campo de investiga- capital. El umbral de este hijo será similar al de su padre.
ción que trata de encontrar y estudiar mecanismos de Más concretamente, si el jugador padre tiene un umbral
toma de decisiones con componentes no racionales. ui, el del hijo puede ser ui, ui + 1 o ui – 1, ocurriendo
En la neuroeconomía convergen investigaciones muy cada una de estas posibilidades con probabilidad 1/3. Con
variadas: desde los intentos de economistas de incluir ello se introducen mutaciones en el sistema, así como la
motivaciones emocionales en la función de utilidad hasta “selección natural” de los jugadores con más éxito.
estudios neurológicos. Por ejemplo, Alan G. Sanfey y El resultado de la simulación del modelo con 1000
sus colaboradores de la Universidad de Princeton han jugadores y M = 100 puede verse en la figura 2, para
analizado, mediante técnicas de resonancia magnética, el caso en el que la selección (reemplazo del peor ju-
qué zonas del cerebro se activan en los participantes gador por un descendiente del mejor jugador) se realiza
en el juego del ultimátum. El resultado fue el esperado: en cada turno (s = 1). Después de un gran número de
el rechazo viene siempre acompañado de la activación turnos (suficiente como para que todos jueguen con
de la ínsula anterior, una zona asociada con distintas todos varias veces), los umbrales se agrupan en torno
emociones negativas, como el asco, mientras que las a un cierto valor que cambia con el tiempo, variando
ofertas muy desiguales activan en el proponente el cór- entre los 25 y 50 euros. Para mutaciones más lentas,
tex cingulado anterior, que suele estar relacionado con s = 10.000, se alcanza una distribución estacionaria muy
conflictos cognitivos. concentrada en torno a los 47 euros. Es curioso que
El juego también se ha utilizado recientemente para los resultados de la simulación sean tan cercanos a
desentrañar el origen evolutivo de la cooperación. Angel los reales. Sánchez y Cuesta no pretenden dar una
Sánchez y José Cuesta, de la Universidad Carlos III de explicación evolutiva del comportamiento humano ante el
Madrid, han diseñado un modelo sencillo de evolución de juego y aún menos una explicación cuantitativa, puesto
individuos que se enfrentan unos a otros en el juego del que el juego del ultimátum es una construcción artificial
ultimátum repartiendo M euros en cada turno. Cada juga- a la que no hemos estado sometidos los humanos a lo
dor está caracterizado por el capital que ha acumulado largo de la evolución de nuestra especie (aunque quizá
Xi y por un umbral ui entre 0 y M, que es la cantidad haya situaciones “naturales” formalmente idénticas). Sin
mínima que está dispuesto a aceptar. En una primera embargo, la simulación muestra que la selección natural
versión del modelo, cada jugador “supone” que su con- puede dar lugar a comportamientos cooperativos, sin
trincante piensa como él y, por tanto, le ofrece el reparto: necesidad de memoria y simplemente a través de la
M – ui (para el proponente), ui (para el contestador). En interacción entre parejas de individuos.
cada turno se eligen al azar dos jugadores, i y j, y se Si quieren saber más sobre las matemáticas de la
les asigna, también al azar, el papel de proponente y cooperación, pueden consultar el excelente artículo de
contestador. Si, por ejemplo, i resulta ser el proponente revisión de Angel Sánchez en el número del pasado
y ui ≥ uJ, entonces el resultado del juego es: mes de junio de Matematicalia (www.matematicalia.net),
la revista digital de divulgación matemática de la Real
Xi → Xi + M – ui Sociedad Matemática Española.
Xj → Xj + ui parr@seneca.fis.ucm.es
5 4 6
5 4 6
5 4 2
5 3 2
1 3 2
1 3 2
5
4 ϕ 3 ϕ
A
B C
2 ϕ
1 3
1 4 3 3 2 5
B C A
84 lruv¡sflencytón 2006
diciembre,
Gl¡¡lcll,
Napiertomócomolongitud totalde la líneaazla can-
tidadr,v=106.Enla figura2 tenemos unade lastablas
de la Descilpfro,
cuyosvalores sonsorprendent emente
precisos.
Porejemplo, parax = 18.907, unacalculadora
y= LN(x) moderna nosdaLN(18.907) = 3.968.223,0que 55,difiere
porNapier,
delcalculado 3.968.242,ensólo1gunidades
en casicuatromillones.
de Napier,
Conla definición si dosparejas de puntos
del movimientode la líneainferiorguardan la misma
proporción:
\=xt
x2 Xt'
1 . L o sd o sm o v i m i e n d t oesN a p i eer :n e l d e a r r i b a
el móvil
a v a n zca0 nv e l o c i d a co d n s t a nyt ee n e l d e a b a j oc o nv e l o c i d a d entonceslospuntos
correspondi entes
enlalíneasuperior,
p r o p o r c i oan al al d i s t a n cxi aq u es e p a real p u n t od e lf i n a zl d e es decir,suslogaritmos, incrementos
tendrán iguales:
l a l í n e aP. a r au n ad i s t a n cri .a N a p i edre f i n e l l o g a r i t mooer .
LN(x.,)-LN( xr)= - LN(xo)
LN(xr)
LN(r)comola distancia y queha recorrido el móvilde la lÍnea
suoerior.
y estapropiedad es la claveparala funciónúltimade
loslogaritmos: convertir productos y cocientes ensumas
y resras.
¿Cómo pudocalcular Napier suslogaritmos conesta
increíble precisión? Utilizó algoquehoyllamamos ,,inte-
gración numérica de unaecuación diferencial,, pero, con
ry.v{ñ? rr
j*CIJ trucosbastante ingeniosos quele permitieron culminar
'.+*rl4 la tarea,aunqueempleara en ellounosveinteaños.
"
,¡q$¿ 1tWY4, f? Comenzó calculando la posición x del móvilde la línea
r8d l6 inferior con pequeños intervalos de tiempo. Si la velo-
cidadiniciales yn - 1, unaestimación de la oosición
fJ -de
seráx(1)=¡t¡-1= w(1
r*l $3lr? r+ -del1móvil al cabo unsegundo
, ) = ( w - 1-)( w - l ¡ t
l w )A. l c a b -doe 2 s e g u n d oxs( 2
f ,93?9rr r"l w=w(1-1lw) z(recordemo s la velocidad
que en cada r{,
t977t 9rt f ¡? r-* instantees xlw).Es decir,podemosencontrar la posi- 6
y Clrrucln,
lruv¡sflenclór u diciembre,
2006 85
J UEGOS MATEMÁTICOS Juan M.R. Parrondo
V
erano de 1615. El matemático Henry Briggs cruza para definir sus logaritmos, Briggs se basó únicamente
Gran Bretaña en diligencia. Hace meses cayó en en operaciones algebraicas. Su método radica en un
sus manos el recién publicado Mirifici logarithmo- ingenioso truco para calcular logaritmos de números
rum canonis descriptio de John Napier. Supo entonces muy cercanos a la unidad.
que se hallaba ante una obra de importancia histórica. Briggs comienza calculando la raíz cuadrada de 10,
Ha escrito varias cartas al autor del tratado, alabando luego la raíz cuadrada del resultado, y así sucesivamente
su trabajo y proponiendo algunas mejoras. Napier está hasta 54 veces. Hoy se pueden hacer estas operaciones
de acuerdo con ellas, pero a sus 65 años no se ve con con una calculadora de bolsillo en unos pocos segundos,
fuerzas para llevarlas a cabo. Briggs, catedrático del
Gresham College de Londres, donde años después se
originaría la Royal Society, se dirige hacia Edimburgo
para conocer al maestro.
Llega con bastante retraso a la cita. Llama a la puerta
de la casa de Napier y, según William Lilly, los dos hom-
bres pasan más de un cuarto de hora contemplándose
con admiración y sin pronunciar palabra. Finalmente,
Briggs dice: “Señor, he realizado este largo viaje con el
propósito de veros en persona y conocer por qué suerte
de ingenio o inteligencia vinisteis a ser el primero en
concebir ésta la más excelente ayuda a la astronomía:
los logaritmos.”
El mes pasado reconstruimos con algún detalle el
nacimiento de los logaritmos y el trabajo de Napier. La
idea fundamental, que se remonta a Arquímedes, con-
siste en relacionar una lista de números en progresión
geométrica (los elementos consecutivos tienen cocientes
iguales) con otra en progresión aritmética (los elementos
consecutivos tienen diferencias iguales). Lo que Briggs
le propuso a Napier en aquella visita fue utilizar como
base para los logaritmos el número 10. Esta idea les
condujo a la moderna definición de logaritmo en base
10: el logaritmo de un número x es el exponente y al
que hay que elevar 10 para obtener x, es decir, y es
el logaritmo de x si x = 10 y.
Después del encuentro de 1615, Briggs trabajó so-
bre estas ideas hasta publicar en 1624 la Arithmetica
Logarithmica (en latín), la primera tabla de logaritmos
en base 10 de la historia, calculados con tal precisión
que apenas tuvo que ser corregida en los cuatro siglos
siguientes. Como en el caso de Napier, lo más intere-
sante del trabajo de Briggs fue el ingenio desplegado
para reducir en lo posible los cálculos necesarios para la
elaboración de la tabla. También Briggs descubrió trucos
que vislumbraban la que luego sería la herramienta más
potente de la matemática: el cálculo diferencial, desarro-
llado por Newton y Leibniz a finales del siglo XVII.
El enfoque de Briggs, sin embargo, fue distinto del
seguido por Napier. Si éste utilizó un símil geométrico
E
n 1738, Daniel Bernoulli estudió un simple juego la primera cara aparece en la tirada décima, la ganancia
de azar sobre el que continúan reflexionando es de 1024 euros, y esto ocurre con una probabilidad de
economistas, filósofos y matemáticos. Se comienza 1 entre 1024. Las ganancias crecen exponencialmente
con un “bote” de dos euros. Se lanza una moneda al mientras que las probabilidades decrecen también ex-
aire: si sale cruz, yo doblo la cantidad que hay en el ponencialmente, siendo siempre el valor medio de cada
bote; si sale cara, usted se lleva el bote disponible en posible premio igual a un euro.
ese momento. Es decir, si la primera tirada es cara, En la figura 1 podemos ver diez “partidas” del juego
usted gana 2 euros, si la primera tirada es cruz y la de San Petersburgo, que constan de un millón de turnos
segunda cara, gana 4 euros, si la primera cara sale en del juego, que acaban cuando sale cara, con la ganancia
la tercera tirada gana 8 euros, y si la primera cara sale correspondiente. He dibujado las ganancias acumuladas
en la tirada n-ésima gana 2n euros. Obviamente, lo que en función del número de turnos. La mayoría de las
a usted más le conviene es que salga cara lo más tarde partidas acaban con una ganancia similar, en torno a
posible. En cualquier caso, usted gana siempre algo los 20 millones, salvo una de ellas, en las que ha ha-
de dinero, por lo que es justo que yo le cobre alguna
cantidad o cuota para permitirle participar en el juego. x 107
La pregunta que se hizo Bernouilli, y que en cierto modo 4
sigue sin resolverse, es: ¿cuál es la cuota de entrada
que se debería cobrar para que el juego fuera justo? 3,5
Para cualquier sorteo “normal”, la cuota de entrada
justa debe ser igual al valor medio de la ganancia. Por 3
ejemplo, cuando compra un número en una lotería de,
GANANCIA
PROBABILIDAD
en día se discuten posibles soluciones. Estos análisis y
soluciones pueden clasificarse en dos grandes grupos: 3
los que abordan el problema puramente matemático de
un juego con ganancia media infinita y los que tratan de
analizar cómo opera el “sentido común” y cómo valoramos 2
el riesgo en un sorteo como el de San Petersburgo. Los
trabajos que siguen esta última estrategia acaban casi 1
siempre enfrentándose a cuestiones de índole psicológica.
Uno y otro enfoque se corresponden con el problema al
que se enfrenta el organizador y el jugador del sorteo, 0
−1000 0 1000 2000 3000 4000 5000 6000
respectivamente. GANANCIA
Pongámonos en el papel del organizador de un sor-
teo de San Petersburgo. Somos dueños de un gran 2. Distribución de probabilidad de la ganancia del jugador después
casino que quiere introducir este juego: ¿qué cuota de de 50 (curva azul), 100 (curva roja) y 200 (curva verde) turnos,
entrada deberíamos cobrar para hacer frente el pago de suponiendo una cuota total por participar c = N log2 N.
los premios? La diferencia entre el casino y el jugador
es que el primero juega un gran número de veces y buena indicación de qué debe hacer el casino, pero, al
puede confiar en la estadística. Sin embargo, en el cliente que quiere jugar al sorteo de San Petersburgo,
caso del juego de San Petersburgo, cuantos más turnos le parecerá absurdo que le cobren por turnos en los
jugamos, más posibilidades hay de observar grandes que él no va a jugar. Incluso con un sólo cliente, una
saltos, como los de la figura 1. Varios matemáticos solución en donde la cuota dependa del número total
han estudiado la distribución de probabilidad de de turnos es bastante peculiar. ¿Qué pasa si el
la ganancia del jugador después de un gran casino y el cliente acuerdan prolongar la partida
número N de turnos. Estas distribuciones un millón de turnos más?
están concentradas en torno a una cantidad En 1985, el matemático sueco Martin Löf refinó
que obviamente crece con N, pero que el resultado de Feller, hallando la siguiente aproxi-
no es proporcional al número de turnos mación para la ganancia total G en N turnos:
N, sino que vale N log2 N.
Por tanto, si el casino quiere recuperar
el dinero que paga a los jugadores, ten-
drá que recaudar, después de N turnos, una
Prob ( G – N log2 N
N )
>x ≈ 1
x
cantidad N log2 N. De hecho, tendría que recaudar que es aceptable para valores de x superiores a 30.
una cantidad algo mayor. En la figura 2 se muestra la Esta fórmula se puede utilizar para encontrar cuotas más
distribución de probabilidad de las ganancias totales a precisas que la dada por Feller. Por ejemplo, si el casino
las que he restado N log2 N, para N = 50, 100 y 200 se contenta con que la probabilidad de perder dinero
turnos. Como vemos en la figura, las distribuciones están sea 1/x = 0,001, tendrá que cobrar una cuota total xN +
concentradas en torno a cero, como cabría esperar en + N log2 N, y una cuota por turno de x + log2 N = 1000 +
cualquier sorteo justo, aunque la parte de ganancias + log2 N euros, que es superior a la sugerida por Feller
positivas para el jugador es ligeramente superior a la en 1000 euros. Martin Löf señala que el término de
de ganancias negativas. Podríamos corregir este sesgo Feller log2 N es comparable con los 1000 euros sólo a
aumentando ligeramente la cuota. partir de números N muy grandes. Por ejemplo, para un
En cualquier caso, este resultado millón de turnos, dicho término es ligeramente inferior
nos indica que la recaudación a 20. Por tanto, la cuota que se deduce de su análisis
total no puede ser proporcio- es prácticamente independiente de N.
nal al número de turnos. Por Los resultados de Martin Löf son interesantes, pero no
el contrario, el casino debe se pueden considerar una solución de la paradoja, puesto
cobrar en cada turno una que nadie estaría dispuesto a pagar 1000 euros para
cantidad ligeramente supe- participar en el juego de San Petersburgo. La razón es
rior a log2 N, para así poder que la distribución de las ganancias tras un gran número
cubrir las pérdidas, siendo N de turnos es relevante para el casino, pero no para el
el número total de turnos que jugador que sólo va a jugar unas pocas veces. En este
está dispuesto a jugar con todos sus caso, es difícil valorar los premios muy improbables y no
clientes. Esta solución a la para- hay un consenso acerca de cuál es la cuota de entrada
doja, propuesta por Feller en que el jugador debería aceptar. El mes que viene anali-
1968, puede que sea una zaremos la paradoja desde esta perspectiva.
3
J UEGOS MATEMÁTICOS Juan M.R. Parrondo
E
l mes pasado analizamos la llamada Paradoja de
San Petersburgo, un juego de azar en el que se
lanza una moneda hasta que sale cara y el jugador 6
gana 2n euros si la primera cara ha salido en la tirada
n-ésima. La paradoja surge cuando intentamos responder
a la pregunta: ¿cuánto debería pagar un jugador para 5
entrar en el juego? Normalmente, la cuota de entrada en
un juego o sorteo debe ser igual a la ganancia media,
Loterías y decisiones
O
bserve la figura 1. En ella hay
dos urnas. La de la izquierda
contiene 100 papeletas, todas
y cada una de ellas con un premio de 89 papeletas
un millón de euros. La de la derecha de 1 millón €
contiene también 100 papeletas: 89
con un premio de un millón de euros,
una papeleta sin ningún premio y 100 papeletas 1 papeleta de 0 €
10 papeletas con un premio de de 1 millón de €
5 millones de euros. Usted tiene que
elegir una de las dos urnas y sacar
una papeleta de la urna selecciona- 10 papeletas
da. El premio que contenga la pa- de 5 millones de €
peleta será suyo ¿Cuál de las dos
urnas elegiría? ¿Prefiere el millón
de euros de la urna de la izquierda
(1a) o se atreve con la de la derecha 1a 1b
(1b), en la que puede ganar hasta
5 millones a costa de la posibilidad, 1. ¿Cuál de las dos urnas prefiere?
poco probable, de irse a casa con
las manos vacías? nuestro ejemplo, significa añadir o que el axioma de independencia no
Observe ahora la figura 2. Tiene quitar papeletas iguales de las dos reproduce adecuadamente nuestra
que elegir de nuevo entre dos urnas urnas. En otras palabras, el axioma valoración del riesgo.
con 100 papeletas cada una. La de la de indiferencia, en una formulación Veamos en qué momento la pre-
izquierda, 2a, tiene 89 papeletas sin simplificada y adaptada a las urnas ferencia entre las dos urnas cambia.
premio y 11 papeletas con un millón de las figuras, dice: si añadimos o Cuando retiramos las 89 papeletas
de euros. La de la derecha, 2b, tiene retiramos de cada una de las dos con premio de un millón, nos queda-
90 papeletas sin premio y 10 pape- urnas papeletas con el mismo pre- mos con 11 de un millón en la urna
letas con 5 millones de euros. ¿Cuál mio, entonces el orden de preferen- de la izquierda y 1 de cero euros y
es en este caso su elección? cia no debe cambiar. ¿Les parece 10 de 5 millones en la de la derecha.
Prácticamente todo el mundo pre- razonable? No debería ser así si han Creo que la mayor parte de la gente
fiere en el segundo caso la urna 2b. elegido 1a y 2b, porque esa elección que elige 1.A mantendría su decisión
En el primero, es 1a la urna elegida está en franca contradicción con el tras este cambio. A continuación, aña-
mayoritariamente, aunque una mi- axioma. dimos, una a una, 89 papeletas sin
noría apreciable asume el pequeño En efecto, tomen las dos urnas premio. Tendremos primero 11 pape-
riesgo de la papeleta sin premio y de la figura 1, retiren de las dos 89 letas con un millón y una papeleta
elige 1b. Si usted ha elegido 1a y 2b, papeletas con un millón de euros y con cero euros en la izquierda y 10
entonces coincide con la mayoría de reemplácenlas por 89 papeletas con papeletas con 5 millones y 2 con
la gente, pero ha contravenido uno 0 euros. El resultado son las dos ur- cero euros en la derecha. ¿Cambiaría
de los axiomas básicos de la teoría nas de la figura 2. Por lo tanto, si el entonces su preferencia hacia la urna
de la utilidad, una teoría que trata axioma fuera cierto, usted debería ha- de la derecha? ¿y después de añadir
de cuantificar las preferencias de las ber mantenido la preferencia después diez papeletas sin premio? ¿Puede
personas ante situaciones inciertas. del reemplazo de papeletas y haber precisar en qué momento cambia su
El axioma que ha contravenido es elegido en las dos figuras las urnas decisión?
el llamado axioma de independencia, de la izquierda o las de la derecha, El axioma de independencia no es
que a primera vista parece bastan- pero nunca la 1a y la 2b. sólo razonable, sino que también es
te razonable. El axioma dice que, Esta contradicción entre la elección compatible con criterios matemáticos
si prefiero una lotería a a una b y de la mayoría de la gente y el axioma de decisión muy generales. Uno de
realizo sobre ambas una modificación de indiferencia se llama paradoja de estos criterios consiste en comparar
idéntica, entonces la preferencia no Allais, en honor del economista fran- los valores medios de la ganancia en
debe cambiar, es decir, seguiré prefi- cés y premio Nobel Maurice Allais. cada una de las dos loterías. Este es
riendo a sobre b. ¿Qué entendemos No se trata en realidad de una pa- de hecho el criterio adecuado si uno
por una modificación idéntica? En radoja, sino de una forma de probar va a jugar un gran número de veces
U
no de mis ilustres predecesores en esta sección de sí misma, y por tanto es al mismo tiempo lenguaje
fue Douglas Hofstadter. Asumió la difícil tarea y metalenguaje.
de relevar a Martin Gardner en 1981 e imprimió Kurt Gödel utilizó esta mezcla de lenguaje y metalen-
a la sección un carácter peculiar, reflejo de sus propios guaje no para construir paradojas, sino para demostrar
intereses y obsesiones. De la lógica matemática y la uno de los resultados más profundos de la matemáti-
inteligencia artificial a los grabados de Escher y las ca, el teorema de incompletitud. El teorema afirma que
fugas de Bach, Hofstadter siempre ha refl exionado cualquier sistema de axiomas que pretenda describir la
acerca de la naturaleza y los límites del pensamiento. aritmética de los números naturales es necesariamen-
En esta reflexión y en sus columnas de INVESTIGACIÓN te incompleto, es decir, habrá afirmaciones verdaderas
Y CIENCIA, un tema recurrente fue la autorreferencia, es acerca de los números que no podrán demostrarse a
decir, la posibilidad de que una cierta entidad lingüística, partir de los axiomas.
matemática o computacional se refiera a sí misma. Gödel estableció una relación entre números y fórmulas,
La autorreferencia da lugar a razonamientos circulares asignando a cada fórmula aritmética un número natural,
y paradojas enigmáticas. Un ejemplo clásico es la para- y luego entre fórmulas y proposiciones metamatemáticas,
doja del mentiroso, de la que existen múltiples versiones. es decir, proposiciones acerca de las propias fórmulas.
La más simple consiste en una sola frase que afirma Finalmente, construyó una fórmula G, que decía, en esa
su propia falsedad: “Esta frase es falsa”. No puede ser relación entre matemática y metamatemática: “yo no soy
cierta ni falsa sin caer en una contradicción. demostrable”. Es decir, si G es verdadera entonces no
Consideren otro ejemplo lingüístico. Clasificamos los es demostrable y si es falsa entonces es demostrable.
adjetivos calificativos en dos grupos: llamaremos autócli- Si el conjunto de axiomas es consistente, esta segunda
tos a los adjetivos que pueden aplicarse a sí mismos y posibilidad no puede darse (no se puede deducir algo
heteróclitos a los que no pueden aplicarse a sí mismos. falso de un sistema de axiomas consistente). Por lo tanto,
Por ejemplo, el adjetivo “esdrújulo” es autóclito, porque G es indemostrable a partir de los axiomas.
esdrújulo es una palabra esdrújula. Otro ejemplo es El libro más conocido de Hofstadter lleva precisamente
“pentasílabo” que es una palabra con cinco sílabas y, por título Gödel, Escher, Bach y en él trataba el teorema
por tanto, pentasílaba. Es difícil dar más ejemplos (¿pue- de Gödel y lo relacionaba con la inteligencia artificial,
de el lector encontrar alguno?), puesto que la mayoría las fugas de Bach y los grabados de Escher. En sus
de los adjetivos, como “blanco”, “francés” o “estrecho”, artículos de Investigación y Ciencia escribió en numero-
son heteróclitos. Ahora intente responder a la siguiente sas ocasiones acerca de toda clase de autorreferencias,
pregunta: ¿es el adjetivo “heteróclito” autóclito o hete- desde el teorema de Gödel hasta un curioso juego, el
róclito? Si es autóclito, entonces se aplica a sí mismo Nomic, en el que los jugadores cambiaban las reglas
y es por tanto heteróclito; y si es heteróclito, entonces del propio juego a lo largo de la partida (de hecho, las
no se aplica a sí mismo y no puede ser heteróclito. De reglas iniciales del juego simplemente establecían los
nuevo una frase: “el adjetivo ‘heteróclito’ es heteróclito”, mecanismos para modificarlas). Pero la autorreferencia
afirma su propia falsedad. no sólo da lugar a paradojas o a grandes teoremas. El
Para resolver, o al menos arrojar luz sobre este tipo más familiar y más misterioso fenómeno de la Natu-
de paradojas, los lógicos introdujeron la distinción entre raleza, la conciencia que los seres humanos tenemos
un lenguaje y su correspondiente metalenguaje, que está de nosotros mismos, es en última instancia un tipo de
formado por lo que se puede decir acerca del lenguaje autorreferencia.
original. En la autorreferencia una proposición dice algo Este mes recordamos al maestro Hofstadter con un
nuevo ejemplo de autorreferencia, que sin duda habrá
1. El “autorretrato” de la fórmula de Tupper.
y
k +17
k x
0 106
O
bserven la figura 1. En ella hay cuatro cartas. está siempre acompañada de cierta propiedad Q (tener
Cada una de ellas tiene en uno de sus lados un 3 en una de las caras en el primer caso, ser mayor
una letra y en el reverso un número. Como ven, de 18 años en el segundo). En ambos se muestran
algunas presentan visible el número y otras la letra. cuatro casos: uno que verifica P, otro que no verifica Q,
Fíjense en la afirmación del recuadro que hay encima un tercero que no verifica P y un cuarto que verifica Q,
de las cartas: Detrás de toda letra D está el número 3. tal y como se ve en la figura 3. El lector puede compro-
¿Qué cartas tienen que voltear para comprobar que la bar que incluso el orden en que están dispuestos las
afirmación es cierta? Una pista: la afirmación dice sólo cartas de la figura 1 y los individuos de la figura 2 es
que demuestren que detrás de una D hay un 3, pero no formalmente el mismo que el de la figura 3.
dice nada acerca del reverso de un 3. ¿Han resuelto ya De este pequeño experimento, diseñado por el psicó-
el problema? Anoten la solución en un papel y pasemos logo Peter C. Wason en 1968, se deduce que los seres
a la siguiente prueba. humanos no pensamos formalmente, es decir, basándo-
Observen ahora la figura 2. Cuatro personas están nos sólo en relaciones lógicas, sino que lo hacemos en
en un bar consumiendo alguna bebida. En la figura se función del significado de las afirmaciones que tenemos
indica de cada uno de ellos o bien la edad o bien lo que que demostrar o comprobar. Nuestro modo de pensar
están bebiendo. Usted tiene que comprobar que todo el es semántico y no puramente lógico. A muchos puede
que bebe alcohol es mayor de 18 años. ¿A quién tiene parecerles esta afirmación evidente y un tanto trivial. Sin
que preguntar la edad o lo que bebe para comprobar embargo, los que nos dedicamos a la matemática o a la
dicha afirmación? enseñanza de la matemática tendemos a olvidarnos de
Supongo que este último “problema” les habrá resul- ello. Son mayoría los matemáticos que piensan que la
tado bastante trivial. La mayoría de la gente lo resuelve lógica formal es el esqueleto del pensamiento, sobre el
de forma casi inmediata: hay que preguntar la edad al que luego se añaden significados. Con esta concepción,
individuo que bebe cerveza y la bebida que está con- muchos profesores de matemáticas nos desesperamos
sumiendo la chica de 16 años. porque nuestros alumnos no son capaces de extrapolar un
Sin embargo, en el problema de la figura 1 la ma- argumento de una situación a otra. Deberíamos recordar
yoría de la gente se equivoca. Para confirmar la frase que el pensamiento formal es una construcción bastante
recuadrada hay que voltear la carta que tiene una D y elaborada y basada en el pensamiento referido a situa-
comprobar que en efecto hay un 3 en su reverso, pero ciones concretas, y que habría que partir de este último
también la que tiene un 1, para comprobar que no hay para llegar al primero. Creo que gran parte del fracaso
una D en su reverso, puesto que en ese caso tendríamos escolar en matemáticas se debe a que los “espíritus
una carta con el par D-1 y la afirmación recuadrada geómetras”, como decía Pascal, no somos conscientes de
sería falsa. Si usted ha fallado en el problema de la la artificialidad del pensamiento formal, que está basado
figura 1, no se preocupe: sólo alrededor de un 10 % en “principios [que] son palpables pero se apartan del
de la población encuentra la respuesta correcta y este uso común, de modo que nos cuesta volver la cabeza
porcentaje ni siquiera superó el 50 % cuando se realizó hacia ese lado, por falta de hábito”.
la prueba a profesores universitarios de matemáticas. El test de Wason es una herramienta excelente para
Lo curioso de este par de problemas es que formal- investigar cómo razonamos. Los resultados del test ponen
mente son idénticos. En ambos se pide comprobar que de manifiesto que utilizamos dos sistemas de razona-
cierta propiedad P (tener una D en una de sus caras en miento: uno inmediato, inconsciente e intuitivo, que en
el primer caso, beber alcohol en el segundo) implica o algunos artículos se denomina sistema 1, y otro formal
y consciente, el sistema 2. Cuando nos presentan el 2. ¿A quién hay que preguntar la edad o lo que está bebiendo
test, el sistema 1 elige las cartas que aparecen en la para comprobar la afirmación del cuadro superior?
afirmación que tenemos que comprobar, es decir, la carta
con la D y la carta con el 3. Es lo que los psicólogos multitud de experimentos, que sólo entre un 20 % y un
llaman “matching bias”, que podríamos traducir como 30 % de la gente encuentra la solución correcta en las
sesgo por afinidad. Después entra en juego el sistema reglas descriptivas, mientras que el porcentaje sube al
2, que corrige esta primera conclusión del sistema 1. 70 % o el 80 % en las reglas de contrato social y las
En esta etapa, mucha gente se da cuenta de que no de precaución. De ello deducen que los seres humanos
es necesario voltear la carta con el 3, puesto que sólo poseemos mecanismos de razonamiento intuitivo e in-
se nos pide comprobar que toda carta con una D tiene consciente, adaptados a este tipo de situaciones y que
un 3 en su reverso, pero nada se informa de las cartas se han desarrollado a lo largo de la evolución biológica
con un 3. En este análisis, sin embargo, la carta con el porque eran especialmente útiles para la supervivencia
1 pasa inadvertida para la mayoría de la gente (es lo de la especie.
que me pasó a mí cuando realicé el test). Como prueba Pero estas conclusiones se hallan sujetas a debate.
de estos mecanismos, se ha realizado el test registrando Una explicación alternativa a los resultados del test de
el movimiento de los ojos de los participantes y se ha Wason es la teoría de la relevancia cognitiva, que afirma
comprobado que éstos pasan la mayor parte del tiempo
analizando las cartas D y 3.
TODOS LOS QUE VERIFICAN P VERIFICAN Q
Otra forma, más interesante y más extendida, de expe-
rimentar con el test de Wason es dotar de significado a
las propiedades P y Q de la figura 3, tal y como hemos
hecho con el ejemplo del bar de la figura 2. Existen
numerosas variantes de este tipo clasificadas según el
significado de P y Q.
El grupo de John Tooby, de la Universidad de California
en Santa Bárbara, distingue tres situaciones diferentes:
reglas descriptivas, reglas de contrato social y reglas de
precaución. En la primera, P y Q son propiedades que
sólo describen algún objeto o situación. El test original 3. ¿Qué información es necesaria para comprobar la afirmación
con las cartas es un ejemplo de este tipo de regla. Peor del cuadro superior?
también los hay que utilizan propiedades del mundo
real: comprueben la afirmación “siempre que se poda que nuestro sistema de razonamiento inconsciente otorga
el jazmín a finales del invierno, florece en primavera”, un peso a las distintas realizaciones del test de acuerdo
en los cuatro casos siguientes: 1) un jazmín que se ha con su relevancia cognitiva, es decir, con la capacidad
podado, 2) otro que no ha florecido, 3) uno que no se ha de cada realización de cambiar nuestro conocimiento
podado y 4) otro que ha florecido. La respuesta correcta acerca del mundo. Este sistema de razonamiento es más
es: preguntar si 1) ha florecido y preguntar si 2) ha sido general que la propuesta de Tooby, en la que se supone
podado. ¿Encontraría el lector la respuesta correcta o la existencia de sistemas de razonamiento específicos
pasarían inadvertidos los jazmines no florecidos? para cierto tipo de situaciones, como la regla de contrato
El segundo tipo de situación es el contrato social, don- social y la de peligro/precaución.
de P consiste en algún tipo de beneficio y Q en alguna En cualquier caso, creo que la lección más importante
obligación. Por ejemplo, P puede ser “tomar prestado un que proporciona el test de Wason, especialmente para
coche” y Q “llenar el depósito de gasolina”. En la tercera quienes enseñamos matemáticas, es que hay que tener
regla, peligro/precaución, P es la exposición a un peligro, cuidado cuando tratamos de desarrollar en nuestros alum-
como “trabajar con muestras contaminadas”, y Q una nos el razonamiento formal. Por un lado, nos recuerda que
medida de seguridad, como “utilizar guantes”. Nuestro el razonamiento formal es una elaboración artificial a la
ejemplo del bar pertenecería a esta regla de precaución que no se tiene por qué acceder de un modo “natural”.
(aunque tiene también algo de contrato social). Tooby y Por otro, el test nos puede ayudar a encontrar ejemplos
sus colaboradores han llegado a la conclusión, mediante eficaces para enseñar ciertas reglas lógicas.
Sutilezas estadísticas
E
n los años noventa circuló en ambientes científicos sin más que saber cuándo comenzó y suponiendo que
un sorprendente resultado estadístico que más lo observamos en un instante completamente aleatorio
tarde resultó ser un fiasco: la regla de Gott, un dentro del tiempo de vida del mismo.
método sencillo, pero sorprendentemente general, para A esta suposición Gott la llama principio copernicano.
estimar la duración de un fenómeno cualquiera. Copérnico fue quien propuso una nueva imagen del
J. Richard Gott III es un imaginativo cosmólogo de la cosmos en la que la Tierra ya no era el centro del uni-
Universidad de Princeton que ha trabajado en temas muy verso, como creía el sistema ptolemaico. En el universo
sugerentes, como la posibilidad de viajar en el tiempo. copernicano la Tierra no tiene un estatuto especial, sino
En 1969 realizó un viaje por toda Europa y, ante el que ocupa una región más del universo. Esta declaración,
Muro de Berlín, se le ocurrió el siguiente argumento. Su extendida también al tiempo, se conoce en cosmología
visita a Berlín no tenía nada de especial. Podría haber como principio copernicano. Según el principio coperni-
sucedido en cualquier momento de la existencia del Muro. cano ni la Tierra ocupa un lugar especial en el universo
Cabe pensar entonces que ocurre en un instante al azar ni el presente tiene nada de especial en la historia del
de la vida del Muro. Si dividimos dicha vida en cuatro mismo. Para Gott, la expresión matemática de ese prin-
partes iguales, tal y como se muestra en la figura 1, la cipio, aplicada a la observación de cualquier fenómeno
probabilidad de que la visita de Gott ocurra en uno de independiente del observador, es que el tiempo t de
esos cuatro intervalos es 1/4. Por tanto, la probabilidad observación es un instante elegido al azar dentro del
de que la visita se dé en los dos intervalos centrales intervalo de vida del fenómeno.
(marrón en la figura 1) es 1/2. Pero, si la visita acontece El argumento de Gott puede generalizarse a márgenes
en estos dos intervalos, el Muro no puede durar menos de confianza superiores a 1/2. Supongamos que un fe-
de 8 + 8/3 años, ni más de 8 + 3 × 8 años. nómeno se inició en un tiempo t0 y que lo observamos
en un tiempo t. Si la duración total del fenómeno es T,
supondremos que t es un número aleatorio entre t0 y
t0 + T. Entonces, la probabilidad de que t se encuentre
entre t0 + aT y t0 + (1 – a)T es la fracción que ocupa
TIEMPO el área rayada en la figura 2, es decir:
tp
tp
OBSERVACION OBSERVACION
(t )
3. Si no fijamos el tiempo tp transcurrido entre el comienzo del fenó- (tp/T es una cantidad aleatoria entre 0 y 1) es válida. Sin embargo,
meno y la observación (esquema de la izquierda), la hipótesis de Gott si fijamos tp (esquema de la derecha) la hipótesis deja de ser cierta.
Móviles y vectores
T
ermina el primer tiempo del partido en un gran un usuario (3 en EE.UU. en canales de 30 kHz, y 8 en
estadio. En ese momento, miles de personas toman Europa y Asia en canales de 200 kHz) en intervalos de
su teléfono móvil para llamar a casa o a algún tiempo muy cortos, del orden de 30 o 40 milisegundos.
amigo. Aunque en este tipo de situaciones las líneas Cada usuario utiliza este intervalo de tiempo de forma
suelen saturarse, son muchos los que consiguen llamar. secuencial; el oído apenas nota las breves interrupciones,
¿No se han preguntado nunca cómo es posible que la aunque hay una pérdida de calidad apreciable. Es un
información proveniente de todos esos aparatitos pueda hecho reconocido que la segunda generación de telefonía
procesarse por separado? ¿Y cómo unas pocas antenas móvil perseguía el aumento de capacidad, aunque fuera
pueden distribuir a su vez información a todos ellos, de a costa de la calidad de la comunicación. Sin embargo,
forma dirigida, específica y bastante rápida? Denle las en este sistema, sigue siendo necesaria la planificación
gracias a las matemáticas. Más concretamente, a los de frecuencias y continúa sin aprovecharse todo el ancho
vectores y matrices que tantos quebraderos de cabeza de banda disponible.
provocan en nuestros estudiantes de secundaria y de Por último, la 3G o tercera generación de telefonía
universidad. utiliza el sistema de acceso múltiple por división de
En los comienzos de la telefonía móvil, la estrategia código, CDMA (de Code Division Multiple Access). Per-
para que la estación base se pudiera comunicar con mite aprovechar, de manera muy ingeniosa, la misma
varios teléfonos al mismo tiempo fue asignar a cada uno frecuencia (con un ancho de banda mayor) para todos
de ellos una frecuencia o canal, como si se trataran de los usuarios que se encuentran en el área de alcance
distintas cadenas radiofónicas. Este sistema de acceso de una determinada antena o base. No se requiere ya
múltiple por división de frecuencia (FDMA, acrónimo ninguna planificación de frecuencias, como se muestra
de Frequency Division Multiple Access) imperó en la en la figura 1 (izquierda); cada celda de la red puede
telefonía móvil hasta los años noventa. Pero no utiliza servirse, en principio, de todo el ancho de banda dis-
el ancho de banda disponible de manera óptima. Entre ponible.
otras razones porque, para evitar interferencias, cada El CDMA ha sido posible gracias a la digitalización
antena o base no puede emplear todas las frecuencias de la señal que viaja de nuestros teléfonos a la base
disponibles. Las antenas de telefonía móvil se disponen o antena más cercana (aunque esta digitalización ya se
formando una red aproximadamente hexagonal, como encontraba en el TDMA). El teléfono convierte nuestra
la que se muestra en la figura 1. Debido a posibles voz en una señal digital compuesta por ceros y unos.
interferencias, una celda no puede utilizar las mismas La base también transmite al teléfono una señal digital y
frecuencias que sus vecinas, lo cual obliga a una cuida- éste la convierte en el voltaje que finalmente reproduce
dosa planificación de las frecuencias asignadas a cada el sonido en el altavoz. Sin embargo, para explicar el
celda, como vemos en la figura 1 (derecha). Las celdas funcionamiento del CDMA es mejor recurrir a los valores
con distintas letras emplearán frecuencias diferentes; +1 y –1, en vez de unos y ceros. En esta representa-
así, cada una de ellas hará uso sólo de un séptimo del ción, que se denomina polar, +1 equivale a un uno y
ancho de banda disponible, con la pérdida consiguiente –1 equivale a un cero.
de capacidad para toda la red. A cada teléfono que recibe o realiza una llamada en
La segunda generación de telefonía móvil se basó el área correspondiente a una base, ésta le asigna un
en el sistema de acceso múltiple por división de tiem- número binario de varios dígitos, código que podemos
po, TDMA (de Time Division Multiple Access). En este representar como una serie de números, en este caso
sistema no sólo se divide el espectro de frecuencias, +1 o –1 (en matemáticas, un vector). Un código de cinco
sino también el tiempo. En cada canal habla más de dígitos podría ser, por ejemplo:
Números pseudoaleatorios
A
unque pueda parecer extraño, embargo, poseen muchas de las pro- ne combinando tres llaves: el último,
la aleatoriedad es un bien piedades de los números aleatorios, el segundo y el tercer registro. Es-
preciado. Ejércitos y empresas las suficientes como para que sean tas combinaciones se representan
de criptografía pagan considerables idóneos en aplicaciones científicas en la figura mediante flechas y el
cantidades de dinero por una fuente y de simulación. En criptografía se símbolo ⊕ que denota una operación
segura de números aleatorios, que utilizan también; mas, si se necesi- lógica muy simple entre dos núme-
son también esenciales en una gran ta un alto grado de seguridad, se ros binarios: si los dos números son
variedad de simulaciones por orde- recurre a otros métodos de gene- iguales, el resultado de la operación
nador: fluidos, meteorología, materia- ración, basados en el azar real de será 0; si son distintos, el resultado
les, moléculas, redes sociales, etc. fenómenos físicos, como el ruido en será 1. La operación se conoce como
¿Por qué resulta valioso algo tan los dispositivos eléctricos o incluso “disyunción exclusiva” o exclusive or
ubicuo como el azar? ¿No basta con las desintegraciones radiactivas. (XOR) en inglés, porque, si 1 repre-
tirar una moneda al aire para conse- Uno de los métodos habituales senta “cierto” y 0 “falso”, entonces p
guir un resultado aleatorio? En efecto, para obtener números pseudoalea- ⊕ q es equivalente a “p o q, pero no
pero en las aplicaciones mencionadas torios son los registros de despla- las dos a la vez”. Matemáticamente
se necesitan grandes cantidades de zamiento. Se trata de una serie de la operación ⊕ tiene también una
bits aleatorios producidos de modo registros en donde se almacenan bits, interpretación sencilla. Es la suma
automático. Hay además un cierto gra- es decir, ceros o unos, que se van módulo 2 de sus dos operandos:
do de “calidad” en las fuentes de nú- desplazando consecutivamente y de
x ⊕ y = (x + y) mod 2
meros aleatorios. Por ejemplo, el viejo modo circular. Si tenemos, por ejem-
lenguaje de programación BASIC dis- plo, siete registros con los valores en donde a mod 2 es igual al resto
ponía de una función que generaba iniciales 1011100, desplazamos todos cuando se divide a entre 2, es decir,
números aleatorios utilizando lo que hacia la derecha y el último de ellos, 0 si a es par y 1 si es impar.
el reloj del propio ordenador marcaba el 0, lo colocamos al principio, el l En el LFSR, el primer registro es
cuando la función se ejecutaba. resultado será 0101110. Después del simplemente la suma módulo 2 de
Es cierto que el instante en que segundo desplazamiento obtenemos todas las llaves. Para la configuración
la función se ejecuta depende de 0010111 y así sucesivamente. Obvia- de la figura 1, las tres llaves tienen
muchas variables: momento en que mente, el estado inicial se recupera valores 0, 1 y 1 respectivamente, por
se inicia el programa, longitud de tras siete pasos, dando lugar a una lo que 0 ⊕ 1 ⊕ 1 = 0 es el nuevo
éste, etcétera. Resulta prácticamente secuencia bastante trivial. Sin em- valor del primer registro. Desplaza-
impredecible. Sin embargo, las lla- bargo, una sencilla modificación de mos los demás hacia la derecha y
madas consecutivas a esa función estos desplazamientos circulares ge- obtenemos la combinación 00010. Un
de números aleatorios no garantizan nera secuencias bastante complejas. nuevo paso daría 00001, y así suce-
que éstos gocen de una distribución La modificación consiste en colocar sivamente. De todas estas configura-
uniforme y carezcan de correlación como primer dígito no el último regis- ciones, vamos tomando como salida
alguna. Lo mismo ocurre con los tro, sino una combinación de éste y del algoritmo en cada paso el último
lanzamientos de una moneda, que algunos otros, que se llaman llaves. de los registros. La cadena de bits
puede estar ligeramente sesgada. El algoritmo resultante se denomina de salida en nuestro ejemplo sería
Pero no faltan algoritmos determi- registro de desplazamiento con retroa- entonces 10100... Los cinco primeros
nistas que producen números con limentación lineal o LFSR (por Linear bits de esta cadena son los de la
una aleatoriedad falsa, aunque de Feedback Shift Register). configuración inicial. Mas, a partir del
“mayor calidad”. Como el algoritmo En la figura 1 podemos ver un sexto, la secuencia adquiere mayor
que los genera es predecible, se LFSR con cinco registros. En cada complejidad.
denominan pseudoaleatorios. Sin desplazamiento, el primero se obtie- Como vemos, un LFSR queda de-
terminado por el número de registros
y por las llaves utilizadas. Como el
último de los registros es siempre
una llave (si así no ocurriera, el
LFSR sería equivalente a uno con
menos registros), basta indicar todas
0 0 1 0 1 SALIDA las llaves para describir un LFSR.
Las llaves suelen escribirse en orden
decreciente entre corchetes, de modo
1. Esquema de un registro de desplazamiento con retroalimentación lineal (LFSR). que la primera da el tamaño total
0,9
0,8
0,7
0,6
z 0,5
0,4
0,3
0,2
0,1
0
1
0,9
0,8 1
0,7 0,8 0,9
0,6 0,7
0,5 0,6
0,4 0,4 0,5
0,3 0,3
y 0,2 0,2 x
0,1 0,1
0 0
2. Diagrama tridimensional del IBM RANDU con 100.000 puntos (tomado de Wikipedia).
Ni siquiera con estos métodos ción módulo, estarán entre 1 y b – 1 Este tipo de representación gráfi-
automatizados es posible generar la (el cero no es un valor deseable, ca de los números generados por el
cantidad de números aleatorios nece- porque, si en la secuencia aparece algoritmo es un buen test de alea-
saria para muchas simulaciones. Se un cero, todos los valores siguientes toriedad. Una representación similar
recurre entonces a números pseudoa- serán también nulos). Si se desean en tres dimensiones de puntos con
leatorios, como los que vimos el mes números entre 0 y 1, basta dividir coordenadas (I1,I2,I3), (I4,I5,I6), ...,
pasado. Son secuencias de números los In entre b – 1. Para comenzar la “desenmascaró” un algoritmo amplia-
obtenidos mediante algoritmos com- secuencia se escoge un valor inicial mente usado en los años sesenta
pletamente deterministas. Por tanto, I1, que suele llamarse semilla. Como del siglo pasado para todo tipo de
las secuencias son predecibles. Sin la fórmula es completamente determi- simulaciones, ya que estaba detrás
embargo, su comportamiento es muy nista, en cuanto vuelve a aparecer la de la función RANDU de los orde-
parecido al de los números genuina- semilla en la secuencia, los valores nadores de IBM. El RANDU utiliza
mente aleatorios, y son capaces de siguientes volverán a ser los mismos. a = 65539 = = 216 + 3 y b = 231 y
pasar muchos de los tests de aleato- En otras palabras, la secuencia es no muestra ninguna pauta en una
riedad. Algunos de ellos son además periódica y su período no puede ser representación bidimensional. Lo que
muy rápidos desde el punto de vista mayor que b – 1. Lo interesante es se ve al hacerla es una nube de pun-
computacional, lo que los hace idó- entonces que b sea muy grande y tos uniformemente distribuida sobre
neos para muchas aplicaciones. que la secuencia tenga período máxi- el plano. Sin embargo, la represen-
El mes pasado vimos un tipo de mo. Pero ni siquiera esto garantiza tación tridimensional mostró lo que
algoritmo que genera números pseu- que la secuencia genere unos “bue- se puede contemplar en la figura 2.
doaleatorios: los basados en despla- nos” números aleatorios. Todos los puntos se encuentran en
zamientos de registros. Los teléfonos Esta falta de calidad es en ocasio- 15 planos paralelos. De hecho, esta
móviles utilizan constantemente uno nes difícil de detectar. Por ejemplo, correlación tan significativa se pue-
de ellos para identificarse ante la con a = 1277, b = 131.072 y semilla de demostrar de forma relativamente
base. Pero los generadores más ex- In = 1, se obtiene una secuencia de sencilla y es ahora sorprendente que
tendidos, sobre todo en simulaciones período 32.769. No es de período nadie reparara en ella durante casi
numéricas, son los de congruencia máximo pero, hasta los 32 mil pri- una década.
lineal. La versión más simple consiste meros números, pasa sin dificultad Semejante “fiasco” puso en duda
en la fórmula siguiente: muchos de los tests de aleatorie- muchos de los resultados de las simu-
dad. Sin embargo, si uno dibuja en laciones numéricas realizadas en los
In+1 = (a x In)mod b el plano los pares de puntos (I1,I2), años sesenta y setenta y dio un toque
(I3,I4), etc., se encuentra con la fi- de atención a los científicos. Pocos se
En esta fórmula a y b son núme- gura 1, donde se han representado fían ya de los generadores de núme-
ros que caracterizan el algoritmo. La 5000 puntos. Las dos líneas oblicuas ros aleatorios que proporcionan los
operación módulo, x mod b consiste que aparecen en la gráfica indican sistemas operativos o los lenguajes
en dividir x entre b y tomar el resto. una pauta que no estaría presente de programación comerciales y los
In forma la secuencia de números si la secuencia fuera genuinamente diseñan ellos mismos o los obtienen
aleatorios, que debido a la opera- aleatoria. de centros de investigación fiables.
Carreras cuadriculadas
Un conocido y divertido juego, carreras de coches en papel cuadriculado,
puede ayudarnos a aprender algo de física
Juan M. R. Parrondo
P ablo entró en mi despacho jadean- cálculo y comenzamos a analizarlos. La en función de los parámetros descono-
do, despeinado y con el nudo de evolución del capital de mi amigo se cidos, y después buscar los parámetros
la corbata aflojado. Sin duda, había te- puede ver en la figura 1. Es difícil de- que hacen que esta probabilidad sea
nido un mal día: “¡Me han robado más terminar en qué momento cambió su máxima. De modo que apliqué la téc-
de tres mil euros! Tienes que ayudar- suerte. Hay varios períodos de pérdidas nica a los datos de mi amigo Pablo.
me.” Le pedí que se tranquilizara y to- sistemáticas, del turno 125 al 140, pero Supongamos que la moneda inicial
mara asiento. “Otra vez mi problema también un poco antes del turno 100 y es justa y que ha sido reemplazada in-
con el juego,... pero esta vez me han he- también alrededor del turno 30. Para mediatamente después del turno N por
cho trampas, me han engañado de ver- solucionar nuestro problema necesita- otra en donde la probabilidad de salir
dad, y te necesito para desenmascarar al mos un método más riguroso y cuanti- cara es p. Cualquier secuencia de resul-
estafador. Me propuso jugar con una tativo que la simple inspección visual de tados de los N primeros turnos es igual-
moneda: si salía cara, ganaba yo la figura. mente probable y su probabilidad es
100 euros, y si salía cruz, yo le daba En esta sección hemos abordado pro- (1/2)N. No ocurre así con los turnos si-
100 euros a él. Un juego estúpido, pero blemas similares (Fósiles y lotería, abril guientes, en donde la probabilidad de
ya sabes que soy incapaz de decir que de 2005), en los que se dispone de una una secuencia de resultados depende del
no. Probamos la moneda y me conven- serie de números o datos aleatorios, pero número n de caras que hayan apareci-
cí de que no estaba trucada. De hecho, se desconocen algunos parámetros del do. La probabilidad de una secuencia
en las primeras tiradas gané algo de di- procedimiento con el que dichos datos dada de resultados es el producto de 200
nero, pero después cambió mi suerte. El se han obtenido. En este caso, dispone- factores:
caso es que estoy convencido de que el mos de los resultados de las tiradas e ig-
tipo reemplazó secretamente la moneda noramos en qué momento se ha cam-
en algún momento durante las tres ho- biado la moneda y cuál es el sesgo de
( )
pn = 1
2
N
p n(1 – p)200-N-n
ras que estuvimos jugando. El casino la nueva moneda (aunque esto a mi ami- N factores valen 1/2, y corresponden
nos cedió una sala y grabó la partida en go no le importaba mucho). Uno de los a los resultados de los N primeros tur-
vídeo, pero el responsable se niega a dar- métodos más utilizados para resolver este nos jugados con la moneda justa; n fac-
me la cinta completa. Dice que única- tipo de problemas es el de máxima ve- tores valen p, que es la probabilidad de
mente puede dejarme revisar algunos rosimilitud. Consiste en calcular la pro- que salga cara con la moneda sesgada,
fragmentos. De modo que necesito sa- babilidad de que hayan salido los datos, y que corresponden a las n caras que
ber cuándo se hizo el cam- han salido con dicha mo-
bio. Y aquí entras tú. Ten- 1000 neda; finalmente, 200-N-
go la lista de los resulta- n es el número de cruces
dos de las 200 tiradas en 500 que han aparecido con la
que ha consistido la par- moneda sesgada y la pro-
tida. En algún momento 0 babilidad de que al lanzar
empezaron a aparecer más dicha moneda salga una
cruces que caras, pero no –500 cruz es 1 – p. Observen
soy capaz de averiguar que n depende de nues-
–1000
Capital
15 15
10 10
5 5
5 10 15 20 5 10 15 20
2. En la figura de la izquierda podemos ver el estado del tablero a tener 4 fichas y provoca una avalancha en la que están involu-
antes de una gran avalancha. Las casillas azul oscuro no tienen cradas más de la mitad de las casillas. En la figura de la derecha
ninguna ficha, las azules tienen una ficha, las azul claro 2 fichas y se pueden ver, en color claro, las casillas involucradas
las verdes, 3. Una nueva ficha se añade en la casilla roja, que pasa en la avalancha.
nos: terremotos, tormentas, pilas de are- 2003). Las leyes de potencias aparecen ta la tensión a las zonas colindantes. Zo-
na e incluso en la actividad neuronal. en muchos fenómenos, desde la frecuen- nas que pueden, a su vez, superar el
Para explicar este comportamiento tan cia de uso de palabras hasta la distribu- umbral y relajar difundiendo la tensión
generalizado, he simulado el modelo de ción de tamaños de ciudades o intensi- a lo largo de una amplia región del es-
Bak-Tang-Wiesenfeld (que, recordemos, dades de terremotos. pacio en forma de avalancha.
no es más que una partida de DisX Es probable que los terremotos
en un tablero mayor y donde las se generen mediante un mecanis-
104
fichas se colocan al azar) y he re- mo similar. El movimiento de las
gistrado el tamaño de las avalan- placas tectónicas genera tensión a
chas que se producen. La distribu- lo largo de una falla y, si esta ten-
Número de avalanchas
103
ción de tamaños se puede ver en sión supera determinado umbral
la figura 3. La forma de la distri- en algún lugar, el terreno se reajus-
bución se torna más evidente si se ta, transmitiendo la tensión a las
representan los datos en ejes loga- 102 zonas vecinas. Los grandes terre-
rítmicos, como se ha hecho en la motos son, según esta imagen, po-
figura. derosas avalanchas, similares a la
Como cabe observar, la distri- 101 que se representa en la figura 2.
bución sigue una línea bastante Además, el modelo explica correc-
recta para tamaños inferiores a 100 tamente la distribución de inten-
100
casillas y después se curva hacia 100 101 102 sidades de los terremotos reales,
abajo. Hay un gran número de ava- Tamaño que obedece a una ley de poten-
lanchas pequeñas, pero se produ- cias llamada de Gutenberg- Ri-
cen de vez en cuando algunas que abar- 3. Distribución de tamaños de avalanchas chter, con un exponente b cercano a 1,
can casi todo el tablero. Si hiciéramos en un tablero de 20 × 20. similar al que se obtiene en el modelo
éste más grande, veríamos que la distri- de Bak.
bución dibuja una línea recta en un ran- ¿Puede la SOC explicar estas leyes de Es probable que otros ejemplos de
go mayor de tamaños. potencias? La respuesta es: “no todas, leyes de potencias, como la distribución
Una recta en ejes logarítmicos signi- pero probablemente algunas de ellas”. de los tamaños de tormentas, las ava-
fica que las dos magnitudes: tamaño T En concreto, las que exhiben los rasgos lanchas en pilas de arenas o las fractu-
y número N(T) de avalanchas con dicho fundamentales del modelo de Bak: la ras en materiales, tengan su origen en
tamaño, están relacionadas mediante una existencia de una cierta energía o ten- la SOC, mientras que la ley de Zipf
ley de potencias, N(T) = AT–b, de la que sión (las fichas) distribuida en el espacio para la frecuencia de palabras, o leyes
hemos hablado en otras ocasiones (La (el tablero) y que, al superar cierto um- de potencias en redes sociales o redes
misteriosa ley del primer dígito, diciem- bral en una zona (4 fichas en una casi- genómicas, necesiten otro tipo de res-
bre, 2002; Números y palabras, febrero, lla), hace que esta zona relaje y transmi- puesta.
Sorpresas termodinámicas
Si ponemos en contacto dos cuerpos a distintas temperaturas, el más caliente se enfría y el más
frío se calienta hasta que las temperaturas de ambos se igualan. Sin embargo, con algo de
ingenio se puede desafiar esta afirmación sin contravenir las leyes de la termodinámica.
Juan M. R. Parrondo
50 100 25 75 25 50
0 50 25 75 50 75
0 0 62,5 62,5
que la temperatura se haga uniforme en Para lograrlo, basta generalizar el pro- ejemplo, para 10.000 fragmentos, las
cada una de ellas. La superior, una de cu- ceso de la figura 1, dividiendo las barras temperaturas finales son 99.4358o y
yas mitades está a 25o y la otra a 50o, al- en muchos fragmentos en lugar de sólo 0.5642o. El comportamiento de las tem-
canzará la temperatura media de 37,5o, dos. Por ejemplo, si dividimos las barras peraturas medias es siempre similar: son
mientras que la barra inferior se equilibra- en 50 partes y deslizamos una barra a lo casi líneas rectas durante todo el proceso
rá a 62,5 . (E lector habrá observado que largo de la otra, las temperaturas finales salvo en los últimos pasos. A pesar de
tanto en el primer ejemplo de los líquidos resultan ser: 92,0411o para la barra infe- ello, no he sido capaz de encontrar una
como en éste, la suma de las temperaturas rior (inicialmente a 0o) y 7,9589o para la expresión matemática para estas tempera-
finales es igual a la suma de las iniciales: superior (inicialmente a 100o). El proceso turas (las gráficas están hechas con un
este hecho es consecuencia del principio con 50 fragmentos consta de 100 pasos, sencillo programa informático). Ni si-
de conservación de la energía.) puesto que hay que deslizar la barra infe- quiera he podido demostrar que, cuando
Se podría realizar un proceso similar rior, tal y como se muestra en la figura 2. el número de fragmentos es infinito, las
con el agua y el vino de nuestro primer En la figura 3 se ofrece la evolución de temperaturas se intercambian, aunque in-
ejemplo, consiguiendo temperaturas fina- las temperaturas medias de cada barra a lo tuyo que existe un argumento de simetría
les de 60o para el vino y 40o para el agua. largo del proceso. Recordemos que la tem- relativamente sencillo ¿Puede el lector dar
Este método se muestra, pues, más eficaz peratura en cada barra no es uniforme, con él?
para intercambiar temperaturas (recorde- salvo inicialmente y cuando, después de El lector con conocimientos de física se
mos que nuestra primera solución al pro- separar las barras, dejamos que se equili- habrá percatado también de un hecho su-
blema conducía a temperaturas finales de bren. Por lo tanto, esta temperatura media mamente interesante: cuando las tempera-
54,44o y 45,56o, respectivamente). ¿Exis- sólo es significativa al final y al comienzo turas se intercambian de forma perfecta, la
te un procedimiento que permita inter- del proceso (aunque es proporcional a la entropía del sistema no crece. A pesar de
cambiar completamente las temperaturas, energía interna de cada barra). que las dos barras tienen al principio tem-
es decir, que el agua acabe a 10o y el vino La suma de las temperaturas medias es peraturas muy diferentes y han intercam-
a 90o o, en el caso de las barras, la supe- constante. Por la sencilla razón de que la biado calor durante todo el proceso, ¡este
rior a 0o y la inferior a 100o? La respuesta energía total del sistema se conserva. En es obviamente reversible si las temperatu-
es afirmativa. Con más precisión, pode- el paso 50, cuando las dos barras están ras finales son iguales a las iniciales!
mos acercarnos cuanto queramos al inter- alineadas, las dos temperaturas medias Los procesos descritos en las figuras 1
cambio perfecto de temperaturas. son iguales, ya que las dos barras están y 2 se pueden interpretar como el desli-
equilibradas fragmento a fragmento. Fi- zamiento de las barras en sentidos con-
3. Evolución de las temperaturas medias nalmente, si aumentamos el número de trarios. Una idea similar se utiliza en el
de las dos barras cuando éstas se dividen fragmentos, nos acercamos más al com- diseño de algunos intercambiadores de
en 50 fragmentos. pleto intercambio de temperaturas. Por calor, dispositivos con numerosas aplica-
ciones, sobre todo en sistemas de refrige-
100
ración, desde aparatos de aire acondicio-
nado hasta el radiador de un coche o los
refrigeradores de motores y calderas. Los
intercambiadores de calor más eficientes
80
son precisamente aquellos en los que un
fluido frío y otro caliente circulan por
tuberías adyacentes y en sentido contra-
rio, algo que recuerda bastante al desliza-
Temperaturas medias
60
miento de las barras que se muestra en la
figura 2. Incluso los delfines utilizan este
método para minimizar las pérdidas de
calor cuando están en aguas muy frías:
40 en el sistema circulatorio, algunas arte-
rias por las que circula sangre caliente
proveniente del corazón se hallan rodea-
das de capilares con sangre fría proce-
20 dente de la parte más exterior del ani-
mal. El intercambio de calor se produce
en esa red capilar, de modo que la sangre
que regresa al corazón está caliente y la
0 que llega a la parte exterior del animal
0 20 40 60 80 100
está a temperatura baja, disipando poco
Número de pasos calor al exterior.
Estimaciones
En muchas ocasiones nos tenemos que contentar con respuestas aproximadas. Pero un buen
argumento estimativo puede enseñarnos más que la solución exacta de un problema
Juan M. R. Parrondo
Cifras y letras
Un programa informático resuelve, con bastante ingenio,
los problemas numéricos y verbales del conocido concurso televisivo
Juan M. R. Parrondo
Encuestas electorales
Entre lo que declaran los ciudadanos en las encuestas electorales y la estimación de voto que
hacen las empresas demoscópicas hay grandes diferencias. ¿Cómo se obtiene la estimación del
voto a partir de las respuestas obtenidas en las encuestas?
Juan M. R. Parrondo
nes fueran mañana, ¿a qué partido vota- todos los partidos sobre los que se pre- nal del CIS (PSOE: 40,2 %, PP: 38,7 %,
ría?”. El resultado se denomina intención gunta. La columna “abstención” incluye IU: 5,8 %) difiere ligeramente de la cal-
de voto. A los que a esta pregunta respon- aquellos que, en las dos preguntas, no se culada aquí. Sin embargo, como pueden
den que votarían en blanco, no votarían o han decantado por ningún partido, es de- comprobar, la corrección por recuerdo de
no saben o no contestan, se les pregunta cir, lo que en la segunda han insistido en voto es la más importante de todas las
de nuevo “¿por cuál de los siguientes par- que no tienen preferencia por ninguno o que realiza el modelo del CIS.
tidos o coaliciones siente usted más sim- han vuelto a marcar la casilla “no sabe” o Sigue siendo un misterio la discrepan-
patía o cuál considera más cercano a sus “no contesta”. cia entre el recuerdo de voto declarado y
propias ideas?”. La intención más simpa- Disponemos ahora de todos los datos el voto real en 2004. Probablemente se
tía por un determinado partido se deter- necesarios para estimar el voto en las deba la suma de varios factores: algunos
mina sumando las respuestas a favor de elecciones. Para calcular el voto a IU, por desajustes en la elección de la muestra o
dicho partido en las dos preguntas. Los ejemplo, tomamos cada entrada de la sesgos en la disponibilidad de las personas
resultados se pueden ver en la Tabla II, tercera columna de la Tabla II y la multi- a contestar, respuestas no sinceras, o res-
cruzados con el recuerdo de voto. Los plicamos por el correspondiente porcen- puestas sinceras pero equivocadas. Estas
porcentajes están siempre calculados so- taje corregido de la Tabla I. Sumamos to- últimas no deberían en realidad corregir-
bre el total de respuestas de recuerdo de dos estos productos y obtenemos el se, puesto que el encuestado puede ser
voto por una determinada opción. Por porcentaje de voto final. Lo que hacemos sincero en su respuesta sobre intención de
eso las columnas no suman cien. Las filas así es aplicar la segunda fórmula de este voto, aunque sea algo olvidadizo. Las dos
sí deberían sumar 100, si incluyéramos artículo. Si se procede de esta forma con primeras razones de discrepancia sí se co-
los tres principales partidos y con la abs- rrigen adecuadamente con el método que
tención, se obtienen los siguientes resul- utiliza el CIS, puesto que si un individuo
tados: PSOE 30,39 %, PP 27,98 %, IU miente acerca de lo que votó en 2004, lo
4,60 %, abstención 27,62 %. Finalmen- más probable es que también lo haga so-
te, si queremos dar las estimaciones en bre su intención de voto. En cualquier
porcentajes sobre voto válido, tendremos caso, la corrección realizada resulta perti-
que eliminar la abstención, es decir, mul- nente, como lo demuestran los resultados
© iStockphoto/NOMBRE DEL AUTOR DE LA FOTO
tiplicar los valores anteriores por 100/ de las elecciones de este año (PSOE:
(100 – 27,62). Con ello se obtienen los 43,64 %, PP: 40,11 %, IU: 3,8 %). Las
siguientes resultados: PSOE 41,99 %, discrepancias entre la estimación y el re-
PP 38,66 %, IU 6,35 %. sultado final pueden deberse perfecta-
El algoritmo completo que utiliza el mente, además de a errores estadísticos, al
CIS tiene algunas correcciones adiciona- desarrollo de la campaña electoral, ya que
les que utilizan otros cruces y que aquí no la encuesta se realizó entre el 21 de enero
hemos incluido. Por eso la estimación fi- y el 4 de febrero de 2008.
Piensa un número
Un truco de adivinación de números de Lewis Carroll nos sirve de excusa para reflexionar
acerca de la “irrazonable efectividad de las matemáticas en las ciencias naturales”
Juan M. R. Parrondo
A: “Piensa un número.” nas de ellas, es posible siempre reconstruir ridades dependen sólo de cuán lejos está
B: [Piensa el 23]. el número original a partir de la informa- de ser múltiplo de 4 el número original.
A: “Multiplícalo por 3. ¿El resultado ción que proporciona B: la paridad de dos Podemos ver en la tabla siguiente
es par o impar?” de los resultados parciales y la cifra final. cómo evoluciona el cálculo según sea el
B: [Obtiene 23 x 3 = 69]. “Es impar.” Observen que, para que el truco fun- número inicial x un múltiplo de 4 más 1,
A: “Súmale 31 o 35, lo que prefieras, cione, es necesario que el “ruido” intro- 2, 3 o 4. En la tabla he indicado en ama-
y divídelo entre 2.” ducido cuando B suma cantidades elegi- rillo los resultados impares y en rojo los
B: [Suma 31 y obtiene (69 + 31)/2 = 50]. das por él (31 o 35 para resultados pares, en los pasos en que la paridad se re-
A: “Multiplícalo por 3 y dime impares, 80 o 100 para los pares) o cuan- vela a A. Muestro los posibles resultados
si el resultado es par o impar.” do añade una cifra cualquiera al número después de cada paso. Si éstos son más de
B: [Obtiene 50 x 3 = 150]. “Es par.” original, no haga que se pierda a lo largo dos, especifico, separados por comas, el
A: “Súmale 80 o 100, lo que prefieras, del cálculo la información acerca del nú- máximo y mínimo de los posibles valores.
y divídelo entre 2.” mero pensado inicialmente. Esto proba- Por ejemplo, el sexto paso (sumar el nú-
B: [Suma 100 y obtiene 250/2 = 125]. blemente no extrañe a muchos lectores. mero original x con una cifra añadida y,
A: “Ahora añádele el número que Las últimas divisiones entre 7 hacen desa- es decir, sumar 10x + y), aplicado a un
pensaste al principio seguido parecer el efecto de estas sumas. Veámos- número entre 9n + 109 y 9n + 134 (cuar-
de una cifra cualquiera.” lo en un ejemplo similar. Tomen un nú- ta columna x = 4n + 4), puede dar, como
B: [Añade al 23 un 7 y obtiene 237 + mero cualquiera x; si añadimos una cifra mínimo, 9n + 109 + 10(4n + 4) = 49n +
+ 125 = 362]. y a la derecha, el número que resulta es + 149 (es el caso en que y = 0) y, como
A: “Divide el resultado entre 7, 10x + y; sumando este número al inicial máximo, 9n + 134 + 10(4n + 4) + 9 =
desechando el resto.” obtenemos 11x + y. Si ahora dividimos = 49n + 183 (es el caso en que y = 9).
B: [Obtiene 51]. por 11 despreciando el resto, volvemos a Como ven, el resultado final, junto
A: “Vuelve a dividir entre 7, desechando obtener x, puesto que y es menor que 11. con la paridad de los resultados parciales,
el resto, y dime el resultado.” La adición de la cifra desconocida es un determina unívocamente el número ori-
B: “El resultado es 7.” cierto “ruido” que, sin embargo, desapa- ginal. Para el elegido por B, 23, el resulta-
A: “Pues bien, el número que pensaste rece en el cómputo final, debido a que do ha sido: impar, par y 7. Por lo tanto,
es 23.” hemos amplificado mucho la “señal” x nos encontramos en la tercera columna (x
antes de añadir dicho ruido. = 4n + 3), n será 7 – 2 = 5 y el número
Este pequeño diálogo es una versión, El método de adivinación de Carroll se pensado 4 × 5 + 3 = 23.
corregida y simplificada, de una nota que basa, en buena medida, en esta propiedad La versión original del Carroll es dife-
escribió Lewis Carroll en febrero de 1896, matemática, pero es menos trivial, ya que rente y además incorrecta, según ha seña-
dos años antes de su muerte. Sorprenden- utiliza tanbién información acerca de la lado y corregido el matemático R. F. Mc-
temente, a pesar de lo intrincado de las paridad de los resultados parciales del Coart. Mi versión es también ligeramente
operaciones y de la arbitrariedad de algu- cálculo. Se puede comprobar que estas pa- distinta de la propuesta por McCoart. No
x 4n + 1 4n + 2 4n + 3 4n + 4
Multiplica por 3 12n + 3 12n + 6 12n + 9 12n + 12
Regla par/impar 6n + 17 o 6n + 19 6n + 43 o 6n + 53 6n + 20 o 6n + 22 6n + 46 o 6n + 56
Multiplica por 3 18n + 51 o 18n + 57 18n + 129 o 18n + 159 18n + 60 o 18n + 66 18n + 138 o 18n + 168
Suma 10x + y 49n + 51, 49n + 65 49n + 100, 49n + 126 49n + 100, 49n + 122 49n + 149, 49n + 183