Pontificia Universidad Javeriana.

Johan Esteban Dávila Rodríguez.

Historia de América del Norte.

UNA IDENTIDAD LIGADA A LA MENTALIDAD.

La expansión hacia el Oeste parecía ser una mentalidad muy naturalizada en los
estadounidenses a comienzos del siglo XIX, una nación recién nacida, poco poblada y
limitada geográficamente. Manifest Destiny es una idea cuyos orígenes se remontan a la
llegada de los colonos ingleses y escoceses que en su mayoría eran protestantes y puritanos,
sin embargo, para el siglo XIX esta mentalidad había escalado sobre todos los
estadounidenses como una forma de justificación al el momento que se vivía (anexión de
Texas) y lo que se estaba por vivir. John L. O‟Sullivan era un periodista a favor de la anexión
de Texas a la Unión, y demostró su afinidad por ello en la edición de julio-agosto de 1845 del
„Democratic Review’ justificándola a través de las siguientes palabras: “El cumplimiento de nuestro
destino manifiesto es extendernos por el continente que nos ha sido asignado por la Providencia para
el libre desarrollo de nuestros millones de habitantes que se multiplican anualmente”1.

Muchos son los estudios que se han realizado sobre el aprecio a la frontera como un espacio
de construcción nacional, Frederick Jackson Turner explora estos y muchos otros conceptos
en su obra “The Significance of Frontiers in American History”. Aunque para Turner la
frontera puede ser un espacio geográfico, un proceso histórico o una condición de
diferenciación lo que es cierto es que la frontera debe ser asociada en la historia americana
como un proceso de desarrollo nacional. Lo “americano” surge entonces como un tipo
nacional que encarnó los valores del individualismo, de la democracia y en general de los
valores republicanos. [..]2. Ahora bien, no cabe duda que la expansión hacia el oeste trajo
consigo conflictos con las poblaciones nativas americanas, pues en palabras del profesor
Arístides Ramos la Frontera es la condición expansiva de una sociedad en un horizonte de
expectativas y que debe dar cuenta tanto de la sociedad que se expande como de aquella que

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http://repositorio.usil.edu.pe/bitstream/123456789/1413/1/2013_Solis_La-expansion-hacia-el-oeste-y-el-
crecimiento-economico.pdf
2
file:///C:/Users/Usuario/Downloads/3580-11442-2-PB.pdf pag 16
padece la expansión3, esto resalta entonces como un grupo social que se mueve hacia su
frontera barbariza a la población que habita en ella con el fin de legitimar la
desterritorialización del espacio, asi políticas como el “Indian Removal Act” de 1830
impulsadas por hombres como Andrew Jackson tomaron fuerza y comenzaron a configurar
lo que se conocería como los procesos que expansión territorial que cargarían consigo
transformaciones violentas, afianzamientos de la mentalidad expansiva, la construcción de
representaciones y la consolidación de que significaba ser estadounidense.

LA REPRESENTACION DE LA EXPANSIÓN.

“EL DIOS CREADOR DEL CIELO Y LA TIERRA es la respuesta con la cual los seres
humanos intentan instalar una potencia personificada y reconocible en sus hechos como un
techo protector entre ellos y su destino. Con la disposición de los seres humanos a someterse
a la voluntad de Dios, se calma y mitiga la angustia. Dios ocupa el lugar del destino. El
destino ha sido evocado y tratado de poner al servicio de la hechicería, para no quedar a
disposición ni de los individuos ni de la comunidad. A ellos se les impone como destino”4,
Las ideas se forman con un fin y al construir la representación de la frontera en el Oeste se
levanta la noción de modernidad sobre espacios “bárbaros” que se logran dominar y someter
a la dinámica de modernización. Una de las representaciones más conocida es la obra cromo
litográfica de John Gast “The American Progress” publicada alrededor de 1871, en ella

3
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4
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1).pdf