PRUEBA DE LENGUAJE 1º BÁSICO DIAGNÓSTICO

COLEGIO:

NOMBRE:

0.

1.

A B C

1
2.

A B C

3.

A B C

2
4.

A M J O
5.

A B C

3
6.

A B C

4
 El pez de aletas y cola rayada
María Eugenia Coeymans (Adaptación)

Ignacio tenía una pecera con un pez con aletas y Subían y bajaban dentro de la pileta, juntos los dos.
cola rayada. Día a día lo alimentaba y le cambiaba el Se veían contentos y acompañados.
agua. Lo quería mucho y se preocupaba por él.
Ignacio siguió visitándolos y llevándoles comida.
Un día vio muchas burbujas en la superficie del agua Los peces crecieron y la pileta empezó a hacerse
y a su pez moviendo la boca como si quisiera decir pequeña para ellos.
algo. Trató de adivinar qué sería y comprendió que
El niño otra vez vio burbujas en el agua pues su pez
decía: “Me siento encerrado, me siento encerrado…”
quería decirle algo.
Ignacio supo que necesitaba un espacio más grande.
Lo miró atentamente y creyó ver que le decía:
Esto lo apenó mucho, porque le gustaba tener el pez
“Necesitamos más espacio, necesitamos más
en su pieza.
espacio…”.
Tomó su pecera y fue a la plaza, donde había una
Él quería a sus peces, y pensaba: ¿qué puedo hacer
pileta grande con agua y sin peces. Lo depositó allí
por ellos?
con suavidad y vio cómo se alejaba moviendo la cola
en señal de alegría. Ahí fue cuando se acordó de que al día siguiente iría,
con sus padres y hermanos, a pasar la tarde junto a
Cada día iba a la plaza a visitar a su pez. Le llevaba
un río en la cordillera.
alimento y el pez lo reconocía y se acercaba.
Llevó los peces en su pecera y los entregó al río.
Pasaron varias semanas y nuevamente aparecieron
Sabía que ahí estarían bien alimentados y tendrían
burbujas en la superficie. Eso significaba que el pez
mucho espacio.
quería hablar. Ignacio creyó escuchar: “Me siento
solo…me siento solo…”. Igual que las personas, los -¡Adiós, pececitos! ¡Adiós! –les dijo y desde un rincón
peces también necesitan compañía. de la arena los echó al agua. Junto a ellos cayó
también una lágrima suya.
Pidió a su padre que le regalase, si podía, otro pez,
pues el suyo se sentía solo.
Fuente: María Eugenia Coeymans. Colección Alas Doradas,
Su padre le trajo un pez pequeñito, de color oscuro. Serie Cuentos Didácticos. Santiago de Chile: Editorial Patris.
Apenas llegó, Ignacio corrió con él a la plaza.

-¡Pececito, pececito! ¡Ven aquí! –lo llamó-. Te tengo

compañía…-Y echó al agua a su nuevo amigo, quien
fue al encuentro del pez rayado.

5
7.

A B C

8.

A B C
9.

A B C

10.

A B C
11.

A B C

12.

A B C
13.

I DO
A
J MN
B C
14.

15.
16.

17.

MAMÁ
18.

MANO
19.
20.