Debido al deseo de la población de aplicar atributos subjetivos y
emocionales a un estudio matemático, la economía se dividió en dos
ramas de estudio, llamadas economía positiva y economía normativa
La economía positiva se encarga de describir y explicar los
fenómenos económicos en busca de leyes que permitan construir y probar teorías económicas, dejando de lado los juicios de valor. La economía positiva parte de un fenómeno económico y busca encontrar su causa (lo que fue) y sus consecuencias (lo que será). Para ello se trata de establecer una cadena de relaciones causa-efecto entre los distintos fenómenos económicos, de manera que se puedan conocer las consecuencias en la realidad de cualquier cambio en las variables estudiadas.
Ejemplos de economía positiva
El crecimiento del PBI durante el 2017 fue de 5.5%. La inflación disminuyó un 3% en el mes de marzo.
A diferencia de la economía normativa, la economía positiva se centra en
las causas y los efectos, las relaciones de comportamiento y los hechos involucrados en la evolución y el desarrollo de las teorías económicas.
La economía normativa se encarga de proponer
recomendaciones, políticas y acciones basadas en juicios personales subjetivos o en “lo que debería ser”. Para ello se basa en la teoría económica “No es bueno el despoblamiento de las zonas rurales.” La economía normativa recomendará la siguiente política: “Deben subvencionarse los sueldos de las zonas rurales para evitar que la diferencia de sueldos lleve a la gente a la ciudad.”