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Joanni C Fernández P
Nací en Araya, el 30 de Mayo de 1979, mis padres Héctor Fernández, y Nancy Pereda;
Soy la tercera de cinco hermanos, viví mi infancia al lado de mi abuela materna (Carmen Vásquez),
infancia que recuerdo lleno de muy buenos momentos, con juegos de la época, que era en aquel
tiempo nuestra mejor distracción; A pesar de tener carencias materiales y de vivir en una casa
humilde, al recordarla, siento anhelo de trasladarme por un momentico y volver a vivirlo, ya que
tiene mucho significado, esos primeros años de vida; donde aprendí a tener el valor precisamente
por lo que prácticamente fue imposible para mí; valoraba mucho el único par de zapatos o la poquita
ropa y aun así cuidaba al extremo lo que con mucho sacrificio mi madre me compraba. Me gusto
siempre cantar.
Cursé mis estudios de preescolar en Bello Monte (puerto la Cruz), luego primaria en la
Unidad Educativa Cruz Salmerón Acosta (Araya) de 1° A 6° Grado, recuerdo con mucho amor a mi
maestra de 1° y 2° grado, (Zulay) nunca olvidé sus ojos azules, ni su sonrisa adorable, al recibirnos
en el aula de clases y la forma como impartía su enseñanza; en la escuela tuve grandes maestros
que no solo se posicionaron a ser maestros, sino también amigos de sus estudiantes, de verdad
tuve muy buenos maestros. En el bachillerato fui una estudiante regular, recuerdo tener una
experiencia con mi profesora de castellano de 2° año, no me permitió entrar al aula por llegar con
unos zapatos que según su criterio, no estaban aptos, me sentí totalmente humillada delante de
mis compañeros, la discriminación fue tan grande, que no pude aguantar las ganas de llorar e irme
del sitio, motivo por el cual la profesora fue llamada a dirección y no le quedó más de otra que
disculparse por tal atrocidad, mis compañeros mostraron su generosidad para conmigo haciéndome
sentir que no estaba sola, eso marcó parte de mi vida la lealtad de un grupo de amigos, me hizo
hacer a un lado el trauma causado por la profesora.
No puedo dejar de nombrar que en estos momentos no solamente soy docente en una
institución sino también, cristiana y Pastora de una iglesia para la Gloria y Honra de Dios, a Él le
doy gracias por permitirme tener toda esta experiencia personal y laboral que me ha ayudado a
tener la fortaleza para enfrentar y seguir adelante a pesar de cualquier adversidad de la vida.