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La Familia, célula fundamental de la

Sociedad.

La familia es la célula y la base fundamental de la sociedad sobre la cual se


construyen los Estados y la Iglesia. Sin embargo, debido a una serie de
causas, la familia se halla, en la actualidad, en crisis sufriendo constantes
conflictos entre esposos, que dan lugar a una cantidad alarmante y
progresiva de matrimonios rotos, tolerados, separados, divorciados y
anulados y a una serie de relaciones problemáticas, discusiones tirantes,
distanciamientos odiosos y malos modos entre padres e hijos.

El concepto de familia ha evolucionado históricamente, desde la familia


patriarcal, compuesta por tres o más generaciones que viven juntas y
participan de las mismas actividades siendo más solidarias y de apoyo mutuo,
a las familias actuales de diversa tipología que van desde familia matrimonial,
clásica, adoptiva y rehecha, compuesta de padre y madre e hijos, a las
familias de hecho y monoparentales. Estas, sean del tipo que sean deben ser
centros de amor, paz y educación cívica, de relaciones íntimas y gratificantes,
de fácil comunicación, de apoyo práctico, de estabilidad emocional,
seguridad y permanencia. Tienen tres funciones:

1. Ofrecer un ambiente seguro y estable a sus hijos donde puedan


alimentarse, vestirse y cobijarse compartiendo todos sus miembros las
tareas y responsabilidades del hogar.
2. Enseñarles unas normas ético-sociales de conducta en relación con las
demás personas.
3. Conseguir que sus hijos se sienta queridos y libres.

Para conseguir todo esto es necesario un buen gobierno familiar, en el que


los padres e hijos fomentan la igualdad, la libertad responsable, el afecto,
respeto, trabajo, la amabilidad y complacencia para satisfacer las
necesidades mutuas de cada uno. La genética personal, las creencias, la
educación, los mitos, los contratos, las reglas, los roles familiares y el medio
ambiente tiene mucha importancia en el buen gobierno familiar.
El diálogo claro, abierto y sereno debe ser el medio de entendimiento y
comprensión familiar indispensable para la comunicación y para expresión
mutua de las ideas, sentimientos y opiniones de cada uno de los miembros,
buscando siempre la ocasión propicia para hablar y escuchar, y mirándose
atentamente con respeto, porque ante todo las familias deben ser escuelas
de amor y sacrificio.

 Definición de Familia: La familia es un grupo de personas formado


por individuos unidos, primordialmente, por relaciones de filiación o
de pareja. Que también podemos definir desde la perspectiva de que
son muchas con frecuencia un grupo de personas emparentadas entre
sí que viven juntas, lo que lleva implícito los conceptos de parentesco y
convivencia, aunque existen otros modos, como la adopción. Los lazos
principales que definen una familia son de dos tipos: vínculos de
afinidad derivados del establecimiento de un vínculo reconocido
socialmente, como el matrimonio que, en algunas sociedades, solo
permite la unión entre dos personas mientras que en otras es posible
la poligamia—, y vínculos de consanguinidad, como la filiación entre
padres e hijos o los lazos que se establecen entre los hermanos que
descienden de un mismo padre. También puede diferenciarse la familia
según el grado de parentesco entre sus miembros.
No hay consenso sobre una definición universal de la familia. Es un
concepto antropológico que puede relacionarse con otros conceptos,
como los de clan, tribu y nación; sociológico e incluso económico
(unidad mínima de empresa). La familia nuclear, fundada en la unión
entre hombre y mujer, es el modelo principal de familia como tal, y la
estructura difundida mayormente en la actualidad; pero las formas de
vida familiar son muy diversas, dependiendo de factores sociales,
culturales, económicos y afectivos. La familia, como cualquier
institución social, tiende a adaptarse al contexto de una sociedad. La
familia puede ser un grupo de personas que conviven bajo un mismo
techo, o también puede serlo sin vivir bajo el mismo techo.
 Etimología: El término familia procede del latín famīlia, "grupo de
siervos y esclavos patrimonio del jefe de la gens", a su vez derivado de
famŭlus, "siervo, esclavo", que a su vez deriva del osco famel. El
término abrió su campo semántico para incluir también a la esposa e
hijos del pater familias, a quien legalmente pertenecían, hasta que
acabó reemplazando a gens. Tradicionalmente se ha vinculado la
palabra famŭlus, y sus términos asociados, a la raíz fames («hambre»),
de forma que la voz se refiere, al conjunto de personas que se
alimentan juntas en la misma casa y a los que un pater familias tiene la
obligación de alimentar.
 Origen o constitución de las familias: La familia supone por un
lado una alianza, el matrimonio, y por el otro una filiación, los hijos.
Según expone Claude Lévi-Strauss, la familia tiene su origen en el
establecimiento de una alianza entre dos o más grupos de
descendencia a través del enlace matrimonial entre dos de sus
miembros. La familia está constituida por los parientes, es decir,
aquellas personas que por cuestiones de consanguinidad, afinidad,
adopción u otras razones diversas, hayan sido acogidas como
miembros de esa colectividad. Las familias suelen estar constituidas
por unos pocos miembros que suelen compartir la misma residencia.
Dependiendo de la naturaleza de las relaciones de parentesco entre
sus miembros, una familia puede ser catalogada como familia nuclear
o familia extensa.
La integración de los miembros de la familia, como en el caso de los
grupos de parentesco más amplios como los linajes, se realiza a través
de mecanismos de reproducción sexual o de reclutamiento de nuevos
miembros. Si se considerara que la familia debe reproducirse
biológicamente, no podrían conceptualizarse como «familias» aquellos
grupos donde su consorte (o ambos) están incapacitados de
reproducirse biológicamente. En estos casos, la función reproductiva se
traslada a los mecanismos de reclutamiento socialmente aceptables —
como la adopción—. El reclutamiento de nuevos miembros de una
familia garantiza su trascendencia

Tipos de familias
Ya en todo lo que antecede a este punto podemos ver que la ¨Familia¨ tiene
tantas perspectivas y definiciones, puesto que ¨Familia¨ para muchos no sólo
es el vinculo consanguíneo, sino más bien la cercanía y fraternidad que
compartimos con distintas personas. Pero desde la definición más lógica y
principal, veremos la clasificación de la ¨Familia¨ en los siguientes tipos:

 Familia nuclear: Formada por los progenitores y uno o más hijos.


Las definiciones más amplias consideran en un núcleo familiar tanto a
los grupos formados por dos adultos emparejados, con hijos o sin
hijos, como a los formados por un adulto con uno o varios hijos.
Algunas definiciones más restrictivas la reducen a los casos en los que
están presentes los dos progenitores.
El cambio de las estructuras familiares extensas a las nucleares en
muchas sociedades no occidentales obedece en muchas ocasiones a la
difusión de los valores y civilización occidentales.
 Familia extensa: Abuelos, tíos, primos y otros parientes
consanguíneos o afines. Aquella estructura de parentesco que habita
en una misma unidad doméstica (u hogar) y está conformada por
parientes pertenecientes a distintas generaciones.
 Familia monoparental: Este núcleo puede constituir por sí solo una
familia independiente (familia nuclear monoparental), o puede
convivir con otras personas emparentadas. Por ejemplo, una madre
(sin pareja) con dos hijos que conviva con sus padres constituye un
núcleo monoparental en una familia extensa.
 Familia homoparental: Aquella donde una pareja de hombres o de
mujeres se convierten en tutores de uno o más hijos. Las parejas
homoparentales pueden ser padres o madres a través de la adopción,
de la maternidad subrogada o de la inseminación artificial en el caso
de las mujeres. También se consideran familias homoparentales
aquellas en las que uno de los dos miembros tiene hijos de forma
natural de una relación anterior
 Familia de padres separados: En la que el hijo o hijos conviven
con un solo progenitor o alternan la convivencia entre ambos, dado
que los progenitores ya no son pareja, no conviven y disponen de un
régimen de custodia sobre los descendientes.
 Familia ensamblada, reconstruida o mixta: Es en la cual uno o
ambos miembros de la pareja actual tiene uno o varios hijos de
parejas anteriores. Dentro de esta categoría entran tanto las segundas
parejas de viudos como de divorciados y de madres solteras.
 Familia acogida: En la que los menores no son descendientes de los
adultos, pero han sido acogidos legalmente por estos de forma
urgente, temporal o permanentemente mientras están tutelados por
la administración.
 Familia sin hijos por elección: En la que los conformantes de la
familia toman la decisión de no tener descendientes.
Funciones de la Familia.
La familia es una institución que tiene sus propias funciones sociales.
Así como la escuela tiene (entre otras) las funciones de transmitir a los niños
el conocimiento que las sociedades han acumulado, enseñarles los valores y
las normas grupales y ofrecerles un espacio para la convivencia de par a par
(de niño a niño); así como las Cámaras de Diputados y Senadores tienen,
entre otras, las funciones de hacer y revisar las leyes del país; así la familia,
como institución, tiene sus propias funciones. De las cuales algunas son:

 El hogar es el espacio en el que las personas desarrollamos relaciones


personales íntimas, pues nos enriquecen y nos dan satisfacción.
 La familia es el espacio para la procreación de la especie. En este
espacio nacen las niñas y los niños.
 La familia es la célula en la que las personas de todas las edades
resolvemos nuestras necesidades de protección, compañía, alimento y
cuidado de la salud.
 A través de la familia, las sociedades transmiten sus valores y
costumbres a los hijos. La lengua, el modo de vestir, la manera de
celebrar los nacimientos o de enterrar a los muertos, las estrategias
para el trabajo y la producción, la manera de pensar y de analizar la
historia, los modos comunitarios de aprender o de relacionarse con
otras personas o grupos sociales, son todas herencias culturales que se
transmiten en familia.
 Una función de vital importancia es la socialización.
 La familia es la célula en la que las personas de todas las edades
resolvemos nuestras necesidades de protección, compañía, alimento y
cuidado de la salud.
 En familia, niñas y niños construyen su identidad personal. Esta
identidad que, en familia, se construye en la infancia y la niñez,
determina en gran medida la manera en la que el niño o la niña se
relacionarán, producirá o participará como adulta y adulto en la vida
familiar y social de su grupo de pertenencia.
Organización de la Familia.

A la mayoría de nosotros, nos gustaría que nuestra familia funcionara con un


orden, pero hemos de detenernos a establecer claramente que normas y
hábitos son los imprescindibles para nuestra familia en particular.
La rigidez no es buena, hay que saber ser flexibles cuando haga falta, pero si
las normas están claras, la rutina diaria nos va a resultar mucho más sencilla.

Existen tantos modelos de “organización” como familias existen. Nunca


mejor aplicado el refrán “Cada familia es un mundo”. Nosotros mismos
debemos reflexionar sobre el modelo que nos gustaría, todos son buenos si
satisfacen nuestras necesidades particulares.
El modelo de familia, está condicionado por factores socio-culturales e
ideológicos, cada época diferente, y también por cómo han sido nuestras
experiencias personales durante la infancia, como hemos sentido la
imposición de nuestros padres cuando éramos niños y adolescentes. Si no
han sido positivas, no dejemos que condicionen el estilo de vida para la
nueva familia que hemos formado.

Toda “disciplina” supone un entrenamiento, la tendencia natural es hacer lo


que nos resulta más fácil o más cómodo, pero conseguiremos formar la
voluntad si vamos exigiendo cada día un poco más en el cumplimiento de las
normas. Los padres son los que tienen la capacidad para establecer las reglas,
su imposición tiene que estar basada en el prestigio (firmeza, consistencia y
mucho cariño) y no en el poder (patrones anticuados, en donde se obedecía
por temor). Todos reconocemos que educar es una labor muy complicada
hoy en día, y por eso mismo, que es tan difícil, no debemos improvisar,
tenemos que tener unos principios teóricos claros, con mucha tranquilidad, y
mucho amor a nuestros hijos debemos educarlos para que nuestro esfuerzo
revierta en el bienestar familiar.
Según los estudios realizados por Mello (1992) es común que la organización
familiar, en algunos casos, permanezca en una situación de dependencia
afectiva, la cual, se convierte en una cuestión de dependencia afectiva, ya
que, en muchos casos, la unión entre todos los miembros es debida a
cuestiones de supervivencia, principalmente en familias con nivel
socioeconómico (NSE) bajo, en las cuales, la cohabitación entre todos es
crucial para responder a las necesidades familiares (Mello, 1992).
De acuerdo con Pratta y Santos (2007) la organización familiar es la influencia
más significativa en lo que se refiere al desarrollo de sus niños y de sus
adolescentes, por lo que es a través de la misma que se establecen derechos
y deberes, límites, principios y valores, entre los más jóvenes y los más
mayores.

Es con base en la organización familiar que el niño y el adolescente construye


sus competencias sociales que les permite vivir de acuerdo con los principios
de ciudadanía, en sociedad, en la etapa adulta. (Pratta, & Santos, 2007). “…la
institución familiar es muchas veces designada como el primer grupo social
del cual el individuo forma parte” (Tallón, Ferro, Gomes, & Parra, 1999, cit in
Pratta, & Santos, 2007, p. 248).Teniendo en cuenta la gran influencia que la
sociedad y la cultura hacen en relación a la organización familiar, podemos
decir que las familias difieren entre sí, teniendo en cuenta variables como el
patrón cultural, el ambiente, los aspectos sociales, el diferente NSE, la
política, la religión, entre otras (Pratta, & Santos, 2007).
Sin embargo, los mismos estudios destacan que, en los últimos años, la
organización familiar sufrió varios ajustes, lo que alteró significativamente el
desempeño de los papeles de sus diferentes miembros (Pratta, & Santos,
2007). Si en el inicio del siglo XX la familia era encarada de forma tradicional,
constituida por marido, esposa e hijos, cada uno con su papel específico (el
hombre garantiza el sustento de la casa, la mujer trataba de las tareas
domésticas y los hijos quedaban a los cuidados de la madre); en la segunda
mitad del siglo XX hubo grandes alteraciones con la revolución industrial y la
emancipación de la mujer, es decir, su entrada en el mercado de trabajo
(Pratta, & Santos, 2007). En ese momento la mujer comenzó a volverse
independiente del marido, llegó incluso a aumentar el número de
separaciones y divorcios y las familias comenzaron a ser menos numerosas,
aunque también se haya asistido a la disminución de la mortalidad infantil,
muy común anteriormente, debido a la ausencia de cuidados médicos
adecuados (Pratta, & Santos, 2007).

No obstante, los estudios de Mello (1992) destacan la realidad de algunas


organizaciones familiares, entre las cuales, aún se encuentra la tradicional
responsabilidad del marido por el sustento de la familia y de la esposa por los
quehaceres de la casa, sin embargo, en situaciones cuya organización familiar
se encuentra totalmente disfuncional debido al NSE por debajo del límite de
la pobreza. En estas situaciones, el único vínculo de la familia al mercado de
trabajo es el marido, por lo que los recursos se vuelven más escasos (Mello,
1992).
La organización familiar se refiere a la interacción entre todos sus miembros
y la forma como los principios, valores, cultura, ambiente, etc., influyen en el
desarrollo de cada uno, tanto individual como colectivamente. En este
sentido, se verifican alteraciones en la constitución de la misma desde la
segunda mitad del siglo XX, por lo que, la antigua y tradicional constitución
de los miembros por marido, esposa e hijos, fue siendo remodelada dando
lugar a nuevas realidades, como por ejemplo, los divorcios.
La Familia Venezolana.

La familia venezolana actual es el resultado de la integración entre el


español, el negro y el indio, durante la época de la conquista y la
colonización. La base de la sociedad humana es la familia, su origen es el
padre y la madre. La constitución de la familia tiene su origen en el
matrimonio. En el matrimonio, un hombre y una mujer se unen, (es decir, se
casan o contraen nupcias) conforme a la ley. En el acto de casarse, son
contrayentes; cuando ya se han casado son cónyuges. Así queda constituida
en principio, la familia, que luego, con los hijos y sus descendientes, formará
una familia completa. En las sociedades modernas, la familia es monogámica:
un hombre puede tener una sola esposa, y una mujer un esposo, unidos en
matrimonio. La familia monogámica, tal como lo concebimos, puede
clasificarse en: Familia nuclear y Familia extendida (de las cuales ya hablamos
a detalle en páginas anteriores), las cuales son los cimientos principales que
conforman a las familias venezolanas.

 La evolución de la familia venezolana: La familia está ligada y es


una consecuencia natural del proceso histórico de los pueblos. Por tal
motivo, a través del tiempo, la familia venezolana ha recibido
influencias diferentes. Así la familia venezolana fue distinta: antes del
Descubrimiento, durante la Conquista, en la Colonia y a partir de
nuestra Independencia, hasta llegar a la actual. Entre ellas tenemos
varias etapas:

 Primera Etapa: La familia pre-colombina.


La Familia Precolombina: Antes del Descubrimiento, había gran diferencia
entre las familias que habitaban nuestro territorio. Existían tribus, cuyo jefe
era el Cacique. El cacique gobernaba a la tribu, era el hombre más fuerte, el
más astuto, o el más valiente, y ello le daba la autoridad para dirigir a su
Tribu en la guerra o en la búsqueda de alimentos. Todavía no tenían una
verdadera organización familiar y vivían errantes.
 Segunda Etapa: La familia durante la conquista.
Siguiendo la influencia española, el padre era la máxima autoridad dentro
de la familia. Su poder absoluto, sus decisiones, indiscutibles. Esa autoridad
es de orden moral por mandato de Dios.

 Tercera Etapa: La familia colonial.


Siguiendo la norma española, conforme al catolicismo, el matrimonio es
monogámico, indisoluble y permanente. Los aborígenes, convertidos a la Fe
Cristiana, aceptan tal sistema. No se admite el divorcio, que se considera
contrario a la Ley de Cristo y por tanto pecado. La sociedad Colonial está
dividida en clases: los nobles que sólo realizaban matrimonios entre ellos,
pues consideran a los demás inferiores; los soldados, que se mezclaban con
los naturales del país dando origen al mestizaje; los indios, los negros, los
pardos. Entre éstos si había matrimonios. La familia colonial es
intransigente: no permite el matrimonio entre la nobleza y las clases
populares. Había grandes privilegios, que favorecían a los españoles
peninsulares, en perjuicio de los criollos.

 Cuarta Etapa: La familia durante nuestra independencia.


Al desaparecer muchos privilegios coloniales, comienza un considerable
avance y progreso en la vida familiar venezolana. Con el tiempo desaparece
la esclavitud; hay libertad de cultos religiosos; se acepta el matrimonio
entre las distintas clases sociales, se admite el divorcio y se implantan la
libertad de enseñanza, de asociación, de expresión y de reunión. La familia
actual venezolana disfruta hoy de todos los derechos humanos (políticos,
sociales, económicos, religiosos) que las modernas leyes conceden al
hombre. Como consecuencia de esto, la Constitución Nacional de
Venezuela en el Artículo 73, declaró: “El Estado protegerá a la familia como
célula fundamental de la sociedad, y velará por el mejoramiento de su
situación moral y económica”. “La ley protegerá el matrimonio, favorecerá
la organización del patrimonio familiar inembargable y preverá lo
conducente a facilitar a cada familia la adquisición de vivienda cómoda e
higiénica”
Sin embargo, existen algunas características en la familia venezolana que entorpecen su
formación básica, de acuerdo con los principios morales que han de regir en el seno
familiar; destacándose entre ellas las uniones entre el hombre y la mujer que viven en
común, sin contraer matrimonio, y que al no legalizar su situación, representan un grave
problema social.
Cuando el grupo familiar está integrado por los padres y los hijos, recibe el nombre de
familia nuclear, que es la que predomina en los grandes centros urbanos. Y la familia
extendida, integrada por padres, hijos parientes consanguíneos, es mucho más amplia en
número y en grados de parentesco. Este núcleo familiar es característico de las zonas
rurales del país.

 Relación Familia-Clase: Destacamos que el tipo de familia produce


efectos sobre el logro educativo diferentes para hombres y para
mujeres. No es posible profundizar en los motivos de estas diferencias
de manifestaciones, para lo que será necesario compararlas o en tal
caso solo nombrarlas.
Se podrá decir que en nuestro país existen 2 tipos de familia, las cuales
son:

 Familia Capital/Urbanidad:
- Tienen mayores ingresos, pero también más egresos.
- La mujer trabaja en la calle para contribuir al sostenimiento del
hogar.
- Tienen pocos hijos.
- Hay mayores posibilidades educativas.
- Frecuenta el divorcio.
 Familia Rural:
- Bajo nivel económico.
- La mujer realiza sólo oficios domésticos.
- Tienen muchos hijos.
- Bajo nivel educativo.
- Numerosos Concubinatos.
El capital familiar sigue siendo un determinante importante en el logro
educativo y social de las familias. El efecto de la clase social sobre el logro
educativo de la familia parece más favorable para las clases altas en tanto
que es significativa y positiva la pertenencia a las clases intermedias.
A una evidencia mixta que lleva a proponer un marco que permita integrar
ambas clases sociales. Por un lado, debemos reconocer los aspectos de
cálculo de coste y beneficio implicados en las decisiones educativas. Pero,
por otro, no parece lo más adecuado suponer que las preferencias de todos
los agentes sociales son las mismas. Más bien se augura que pueden estar
determinadas por su posición social, cabe destacar especialmente las
diferencias de posición social entre hombres y mujeres, que se manifiestan
en los distintos efectos del tipo de familia, el sexo del sustentador principal y
la actividad económica de la madre.

La Familia: Indígena-Rural-Urbana.

 Familia Indígena: Las poblaciones indígenas o aborígenes son


aquellas que estaban viviendo en sus tierras antes de que llegaran los
colonizadores de otros lugares, los cuales al convertirse en el grupo
dominante - mediante la conquista, la ocupación, la colonización o por
otros medios - segregan o discriminan a los pobladores originarios.
Cada vez que los pueblos vecinos dominadores han ampliado sus
territorios o llegan colonizadores de tierras lejanas, las culturas y el
sustento de los indígenas han estado en peligro. Estas amenazas han
evolucionado a través de los años, sin embargo no han desaparecido
por lo que las poblaciones autóctonas son consideradas como uno de
los grupos más desfavorecidos en el mundo.
Debido a esto, las Naciones Unidas se ocupan de forma creciente en
promover los derechos de los indígenas. Más de 300 millones de
personas forman alrededor de 5000 poblaciones indígenas en 70
países del mundo y han estado sometidas a la opresión, exclusión de
los procesos de toma de decisiones, marginación, explotación,
asimilación forzosa y represión cuando tratan de pugnar por sus
derechos. También llegan a ser perseguidos por lo que muchos se
convierten en refugiados.
Actualmente los problemas, las quejas y los intereses de los pueblos
indígenas suelen ser muy semejantes, especialmente en lo relacionado
con mantener su identidad y patrimonio cultural.

 Familia Rural: La familia popular es un proceso de vida en acto que


posee sus propias claves de comprensión, de modo que disecarla en
objeto es ya de partida hacer imposible en acceso a su realidad. La
pareja no forma parte del modelo popular de familia. Si seda
realmente, y no sólo formalmente, es una excepción que no invalida el
modelo. La familia existe sin ella, como existe también sin el padre. El
padre no tiene ningún puesto en el centro-familia sino como
instrumento indispensable para producirlo, instrumento externo, por
tanto. Producida la familia, el padre permanece fuera. Podrá funcionar
con un satélite que la ayuda, pero tampoco es necesario. En estricto
sentido, esta familia se define como matricentrada, porque es la
madredad (imposible sin el hijo) su núcleo estructural y además el
sentido completo de la relación madre-hijo que es su totalidad.

Esta es por tanto una estructura tan sólida como cualquier otra, no
carente de fisuras pues ninguna está libre de ellas. Estructura sólida no
significa estática, cerrada a todo cambio. Como toda realidad cultural,
es dinámica y está abierta a posibilidades de cambio. El problema será
calibrar esas posibilidades. En este modelo de familia se produce un
tipo humano, una manera de ser persona, muy distinto del modelo de
hombre considerado como deseable en la cultura occidental. En esta
cultura, que llamamos moderna, el hombre se concibe ante todo como
sujeto autónomo, individuo, capaz de realizarse por sí mismo en un
sistema de relaciones personales e institucionales que él mismo
establece y controla una vez constituido en sujeto, después de su
infancia. En la cultura popular, cada ser humano es estructuralmente
madre e hijo; la mujer: hija-madre; el varón: hijo-hijo. Esto durante
toda la vida.

 Familia Urbana: La estructura de la familia venezolana ha variado


considerablemente durante el siglo XX y lo que ha transcurrido del
siglo XXI debido al aumento de años en la esperanza de vida del
venezolano y el mayor acceso a la educación.
La composición actual de la familia venezolana es derivada de una
variación demográfica que ha permitido una mejor calidad de vida,
índices de mortalidad más bajos y control de la fecundidad. Esto se
puede observar en los resultados del Censo General de Población y
Vivienda 2001, al hacer una comparación con datos previos. En el
período 1950-1970 el promedio de hijos por mujer era de 6,8. Para la
época el índice de analfabetismo era alto, especialmente en las
mujeres, las cuales se dedicaban a las labores del hogar. No se hablaba
de divorcio.Durante los años 1970-1980 baja el índice de fecundidad.
En esta etapa aumenta la esperanza de vida a 68 años y los avances
tecnológicos disminuyen drásticamente la mortalidad infantil un 26%.
El promedio de hijos es de 4,3. Los ingresos de la actividad petrolera
benefician a la sociedad, la cual cambia su estilo de vida, se satura la
fuerza de trabajo, la educación aumenta, lo cual altera la estructura de
la familia. Ahora la madre toma decisiones en el hogar, tiene un nivel
educativo más alto que la generación que le precedió, trabaja y tiene
control de su vida. Aumentan los divorcios, lo que influye en las
relaciones entre padres e hijos y en el número de la descendencia.
Entre 1980 y 2000 la esperanza de vida sube a 73,3 años, el nivel de
fecundidad se reduce a 2,6 hijos por mujer y se evidencia un deterioro
severo de la calidad de vida de la población. Los excesos de los ochenta
pasan factura y comienza la austeridad. Esto afecta nuevamente la
estructura familiar; en primer lugar por la crisis de la vivienda, que
muchas veces obliga a las nuevas parejas a compartir el techo con sus
padres.
El desempleo es otro factor que influye en la disminución de la tasa de
fecundidad. La importancia de mantener un trabajo y de desarrollarse
profesionalmente, así como el deseo de prestar más atención a los
hijos, hace que muchas mujeres prefieran postergar el momento de su
primera gestación. Así en esta etapa la maternidad no sólo disminuye
sino que comienza a una edad más avanzada.

(Todo esto siendo comprendido desde este punto como la situación


que arraiga la sociedad venezolana para con las familias de la nación
hasta la actualidad.)

Derechos, protección y defensa de la Familia


Venezolana.

Los problemas de la familia deben tratarse dentro de parámetros que se


establecen entre los miembros. Se destaca aquí la importancia de
comprender la estructura de la familia y sus pautas de funcionamiento, pues
la familia tiene un carácter formativo y educativo y, al mismo tiempo, está
orientada a la ayuda mutua entre sus miembros, como lo dice el artículo 75
de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (2000): “...Las
relaciones familiares se basan en la igualdad de derechos y deberes, la solidaridad, el
esfuerzo común, la comprensión mutua y el respeto recíproco entre sus integrantes” (p.88)

Por otro lado, es importante también hablar de que los valores, como el
respeto, mencionado anteriormente, la solidaridad, el amor, la buena
convivencia se aprenden en casa, pues es la familia quien comienza a
incentivarlos y hace que se transmitan a los demás como forma natural de
vida. Además, ayudar a los padres cuando lo necesiten, es algo que los hijos
no van a comprender si sus padres no cultivan los valores en ellos, si no
saben que deben procurar el bienestar y la felicidad entre ellos mismos. A
pesar de ser la familia quien debe educar a sus hijos, el Estado también tiene
una participación en esto, con el objetivo de evitar peleas intrafamiliares.

Es así como en el artículo 76 de la CRBV (1999) dice:


¨El padre y la madre tienen el deber compartido e irrenunciable de criar, formar, educar,
mantener y asistir a sus hijos o hijas, y éstos o éstas tienen el deber de asistirlos o asistirlas
cuando aquel o aquella no puedan hacerlo por sí mismos o por sí mismas (p.88).¨

Para esto, también está el artículo 34 de la Ley para la protección de las


familias, la maternidad y la paternidad (2007) que dice:
¨Los consejos comunales promoverán actividades de educación, información y
sensibilización dirigidas a generar conciencia en las comunidades acerca de la importancia
de la paz y la convivencia en el seno familiar, así como la prevención de todo factor, riesgo
o amenaza de situaciones de conflictos intrafamiliares para el bienestar de las familias y la
propia comunidad (p.10).¨

El artículo 79 de la CRBV (2007) dicta:


¨ Los jóvenes y las jóvenes tienen el derecho y el deber de ser activos del proceso de
desarrollo. El Estado, con la participación solidaria de las familias y la sociedad, creará
oportunidades para estimular su tránsito productivo hacia la vida adulta y, en particular,
para la capacitación y el acceso al primer empleo, de conformidad con la ley. (p.89)¨

En tal sentido, los padres son responsables de ayudarlos a iniciarse en la vida adulta, con
ayuda del Estado; a su vez, los mismos jóvenes, al tener una actitud participativa y al
aprovechar todas las herramientas que obtienen en su capacitación; que sean individuos
que ofrezcan todas sus habilidades y conocimientos a la Nación en retribución al apoyo
recibido.

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