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OBJETIVOS.
Objetivo General.
v Dar a conocer a la comunidad estudiantil, que combinando varios materiales se puede logar
reacciones químicas sorprendentes, no dañino para el medio ambiente.
Objetivos Específicos.
v Fomentar en nosotros los jóvenes, el deseo de conocer formas prácticas y fáciles de realizar
combinaciones químicas.
¿Qué la comunidad estudiantil conozca porque se da este resultado con la combustión y que
reacciones químicas están implicadas?
Nosotros haremos este experimento con la finalidad de mostrar una reacción química
sorprendente, nos llamó mucho la atención la manera en que mezclando los diferentes materiales,
y someterlos a una alta temperatura se pueden lograr reacciones sorprendentes.
INTRODUCCION
Este experimento químico es fácil de realizar capta la atención por su inusual reacción. De esta
forma se puede difundir a todos los alumnos del colegio brindando una explicación científica sobre
el proceso químico que se da en el momento; de una manera más fácil y entretenida de tal forma
que además de aprender se vive una experiencia confortable.
“MAMBA NEGRA”
Nuestro proyecto trata de representar la forma fácil y practica como combinar elementos
químicos para hacer experimentos que den como resultado un “mamba negra llamada también
Serpiente del faraón”.
La serpiente del faraón, es un tipo de fuego artificial, en el que después de encender una
pequeña porción, el producto comienza a producir humos y cenizas que son expelidas de forma
que asemejan el crecimiento de una serpiente. Las cenizas permanecen en el suelo y no emiten
explosiones, sonidos o lanzamiento de proyectiles, pero pueden liberar humo.
El bicarbonato de sodio con azúcar son los compuestos químicos comúnmente usadas en ese tipo
de fuego de artificio.
La versión más tradicional de la serpiente de faraón produce una cobra muy marcada visualmente,
pero usa tiocianato de mercurio, y debe realizarse con extrema precaución debido la alta toxicidad
de los humos, que contienen vapor de mercurio.
Es un experimento muy simple que consiste en deshidratar el azúcar. Se hace con calor y un
iniciador de la reacción como el bicarbonato de sodio. Tradicionalmente, este experimento se
hacía con Tiocianato de Mercurio, pero debido a la alta toxicidad de los humos, que contienen
vapor de mercurio, no es buena idea hacerlo de esta manera. Además, es un componente difícil de
conseguir y bastante caro.
Al mismo tiempo, el azúcar se carameliza por acción del calor. En este estado plástico, el azúcar se
infla por acción del gas desprendido. Mientras el azúcar se infla y la reacción continua, el azúcar
termina por quemarse en una reacción que combina la combustión y la deshidratación.
Lo que se obtiene de la reacción es carbono inflado, con una forma que recuerda a una serpiente.
Materiales:
Alcohol Etílico
Bicarbonato de Sodio
Azúcar
·
Plato
Arena
Observaciones:
Mientras que la combustión del azúcar produce vapor de agua y dióxido de carbono.
En este estado plástico, el azúcar se infla por acción del gas desprendido.
Mientras el azúcar se infla y la reacción continua, el azúcar termina por quemarse en una reacción
que combina la combustión y la deshidratación:
Lo que se obtiene de la reacción es carbono inflado, con una forma que recuerda a una serpiente.
Procedimiento:
En un vaso se agrega bicarbonato sódico, azúcar y alcohol industrial, se mezcla de tal manera que
quede como una masa, en la boca de una botella se echa esa mezcla para que obtengan una forma
de capsulas.
Cuando ya tengas una cantidad de 4 capsulas, en un plato agregas arena; encima las capsulas
mencionada se moja con alcohol industrial, con fósforos o mecheras se enciende eso y dará este
resultado.
2)En la boca de una botella se echa la mezcla para que posteriormente se obtenga la forma de
cápsulas.