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Introducción

Los compresores son máquinas rotativas capaces de impulsar gases de un punto


a otro aumentando a su vez la presión, permitiendo el desplazamiento del fluido y
su suministro a mayor presión. Hay que tener en cuenta que el gas es un fluido
compresible cuyo volumen cambia con la presión, temperatura y composición del
mismo, por lo que el estudio termodinámico es imprescindible.
En 1650, Guericke invento la primera bomba de aire, la cual podía producir un
vacío parcial y el mismo uso esta para estudiar el fenómeno del vacío y el papel
del aire en la combustión y la respiración. En 1829, la primera fase o componente
del compresor de aire fue patentada.
Dicho componente comprimía aire en cilindros sucesivos.
En 1872, la eficiencia del compresor fue mejorada mediante el enfriamiento de los
cilindros por motores de agua, que causo a su vez la invención de cilindros de
agua.
Uno de los primeros usos modernos de los compresores de aire fue gracias a los
buzos de mares profundos, quienes necesitaban un suministro de la superficie
para sobrevivir. Los buzos que emplearon compresores de aire tuvieron lugar en
1943. Los primeros mineros utilizaron motores de vapor para producir suficiente
presión para operar sus taladros, incluso cuando dichos dispositivos eran
extremadamente peligrosos para los mineros. El aire comprimido es una
herramienta sumamente importante y hoy en día su eficiencia, la contaminación y
su accesibilidad le dan la popularidad que tienen en el mercado.
Procesos de compresión politrópico, isentrópico, isotérmico.

La ley de Charles, establece que:


“Cuando un gas es comprimido, la temperatura aumenta”.
Hay tres relaciones posibles entre la temperatura y la presión en un volumen de
gas que es sometido a compresión:

Isoterma
 El gas permanece a temperatura constante a través del proceso.
 La energía interna es removida del sistema en forma de calor a la misma
velocidad que es “añadida” por el trabajo mecánico de compresión.
 La compresión o expansión isoterma es favorecida por una gran superficie de
intercambio de calor, un volumen pequeño de gas, o un lapso de tiempo largo.
 Con dispositivos reales, la compresión isoterma generalmente no es posible
puesto que cualquier dispositivo genera calor durante su uso.

Adiabática:
 En este proceso no hay transferencia de calor entre el sistema y su entorno, y
todo el trabajo añadido es (producido) agregado (añadido) a la energía interna
del gas, resultando un incremento de temperatura y presión.
 Teóricamente el incremento de temperatura es:

Dónde: T1 y T2 en grados kelvin o rankine.


K, es la razón de calores específicos, K=1.4 para el aire estándar.
 La compresión o expansión adiabática es favorecida por el buen aislamiento,
un gran volumen de gas, o un lapso corto de tiempo.
 En la práctica siempre habrá una cierta cantidad de flujo de calor, pues hacer
un sistema adiabático perfecto requeriría un perfecto aislamiento térmico de
todas las partes de una máquina.

Politropica:
Esto sugiere que el calor puede entrar o salir del sistema, y que el trabajo en el eje
que entra al sistema puede aumentar la presión (trabajo generalmente útil) y la
temperatura por encima del adiabático (generalmente perdidas debido a la
eficiencia del ciclo). La eficiencia del proceso es la razón de aumento de
temperatura en un teórico 100% (adiabático) frente al real (politrópico).

Tanto la transformación adiabática como la isotérmica son imposibles de realizar


en la práctica. La primera requiere que no haya ningún intercambio de calor entre
el gas y las paredes del compresor y la segunda que el calor se transmita tan
perfectamente que la temperatura del gas se mantenga constante a pesar del
aumento de energía que provoca la compresión. Por consiguiente, en la realidad,
la compresión sigue una transformación politropica intermediaria entre la
adiabática y la isotérmica.
Como en el caso del aire, el exponente adiabático es aproximadamente igual a 1,4
los valores del exponente de la politropica estarán comprendidos entre este valor y
1 que es el exponente de la isoterma.

Factor de comprensibilidad.

El factor de compresibilidad (Z), conocido también como el factor de compresión,


es la razón del volumen molar de un gas con relación al volumen molar de un gas
ideal a la misma temperatura y presión. Es una propiedad termodinámica útil para
aplicar la ley de los gases ideales al comportamiento de un gas real. En general,
la desviación del comportamiento ideal se vuelve más significativa entre más
cercano esté un gas a un cambio de fase, sea menor la temperatura o más grande
la cual toma constantes empíricas de compuestos específicos como datos de
entrada. Para un gas que sea una mezcla de dos o más gases puros (aire o gas
natural, ejemplo), es requerida una composición del gas para que la
compresibilidad sea calculada.
De manera alternativa, el factor de compresibilidad para gases específicos puede
ser leído a partir de gráficos de compresibilidad generalizados que grafiquen Z
como una función de la presión a temperatura constante.
El factor de comprensibilidad es definido como

Donde, es el volumen molar


es el volumen del correspondiente gas ideal

Para un gas ideal, el factor de compresibilidad es Z=1 por definición. En muchas


aplicaciones del mundo real, los requerimientos de precisión demandan que las
desviaciones del comportamiento de un gas, esto es, el comportamiento de un gas
real, sean tomadas en cuenta. El valor de Z generalmente se incrementan con la
presión y decrecen con la temperatura; a altas presiones las moléculas colisionan
más a menudo, y esto permite que las fuerzas repulsivas entre las moléculas
tengan un efecto notable, volviendo al volumen molar del gas real ( ) más
grande que el volumen molar del correspondiente gas ideal (
), lo que causa que sea mayor a 1. Cuando las presiones son menores, las
moléculas son libres de moverse; en este caso, dominan las fuerzas de atracción,
haciendo que Z<1 . Cuanto más cercano esté el gas a su punto crítico o su punto
de ebullición, se desviará más del caso ideal.

Tablas de aire.

Es extremadamente difícil generalizar a qué valores de presión o temperatura se


vuelve importante la desviación del comportamiento de gas ideal. Como regla
general, la ley de los gases ideales es razonablemente precisa hasta una presión
de alrededor de 2 atmósferas, e incluso mayor para moléculas pequeñas no
asociantes. Por ejemplo para el clorometano, una molécula altamente polar y por
tanto con fuerzas intermoleculares significativas, el valor experimental para el
factor de compresibilidad es de Z=0.9152 a una presión de 10 atm y una
temperatura de 100 °C. Para el aire (pequeñas moléculas no polares) en
aproximadamente las mismas condiciones, el factor de compresibilidad es de
solo Z= 1.0025.
El aire normal se comprende en números crudos de alrededor de 80 por ciento
de nitrógeno N2 y 20 por ciento de oxígeno O2. Ambas moléculas son pequeñas y
no polares (y por tanto, no asociantes). Se puede por tanto esperar que el
comportamiento del aire dentro de rangos amplios de temperatura y presión pueda
ser aproximado con razonable precisión como el de un gas ideal. Los valores
experimentales para el factor de compresibilidad confirman esto.

Tabla 1. Factor de compresibilidad para el aire (valores experimentales)


Proceso de compresión en varias etapas.

En teoría, el aire o gas se puede comprimir de manera isentrópica (a


entropía constante) o isotérmica (a temperatura constante). Cualquiera
de estos procesos puede ser parte de un ciclo teóricamente reversible. Si
el gas comprimido se puede utilizar inmediatamente después de la
compresión a su temperatura final, el proceso de compresión isentrópica
tendría ciertas ventajas. En realidad, el aire o gas raramente se utiliza
directamente después de la compresión, y normalmente se enfría a
temperatura ambiente antes de su uso. Por consiguiente, se prefiere el
proceso de compresión isotérmica, ya que requiere menos trabajo. Un
enfoque práctico y común para ejecutar este proceso de compresión
isotérmica implica la refrigeración del gas durante la compresión. A una
presión de trabajo efectiva de 7 bares, la compresión isentrópica requiere
teóricamente un 37 % más de energía que la compresión isotérmica.

Un método para reducir el calentamiento del gas es dividir la compresión


en varias etapas. El gas se enfría después de cada etapa antes de
comprimirse más hasta la presión final. Esto también aumenta la
eficiencia energética, obteniéndose los mejores resultados cuando cada
etapa de compresión tiene la misma relación de presiones. Al aumentar
el número de etapas de compresión, todo el proceso se acerca a la
compresión isotérmica. Sin embargo, hay un límite económico del
número de etapas que puede utilizar el diseño de una instalación real.

Turbocompresores radiales.

Los compresores centrífugos incrementan la energía cinética de un gas


aumentando la velocidad tangencial del gas. El gas entra en el compresor a
través de la tobera de admisión, pasando por el impulsor o rodete, generando un
flujo turbulento. El impulsor, que es como un disco con palas, está montado sobre
un eje rotatorio. Este recibe el gas desde la tobera de admisión y lo comprime
incrementando la energía cinética del gas, que se puede considerar proporcional
al producto de la velocidad en la punta del alabe U y la velocidad tangencial en el
impulsor. W representa la velocidad relativa del alabe. La velocidad resultante C
es el vector suma de la velocidad relativa y la velocidad en la punta del alabe.
Rodeando al impulsor, se encuentra el difusor, que tiene la misión de reducir
gradualmente la velocidad del gas cuando este sale del impulsor. El difusor
convierte la velocidad de la energía cinética a un nivel de presión superior. En un
compresor de una etapa, el gas abandona el difusor atravesando un canal que se
encuentra en la carcasa, y finalmente sale por la tobera o caracol de descarga. En
un compresor de varias etapas, el gas que sale del difusor va directamente al
impulsor de la siguiente etapa.

Fig.1. Compresor centrifugo (radial) de una etapa.

Números específicos de revoluciones.

El número específico adimensional de revoluciones θ de un compresor se define:



Donde es el coeficiente de carga o de presion y es el coeficiente
de caudal. Estos coeficientes a su vez se definen como:

Tomándose el caudal Q en condiciones estáticas, es una sección que depende


del tipo de rotor, y y se refieren al diámetro exterior.
Los valores usuales del coeficiente de caudal Φ en los compresores son de 0,01 a
0,15 para los compresores centrífugos.
El número específico de revoluciones 'E se refiere a las condiciones de
rendimiento óptimo, y se define como:

Siendo en la mayoría de los casos prácticos, √

Efecto de 1 y 2.

El parámetro fundamental que caracteriza el álabe de un turbocompresor


centrífugo es el ángulo de salida del rodete, denominado β2. El estudio de este
parámetro se realiza a través del grado de reacción. Si se hace la hipótesis de que
la velocidad absoluta a la entrada del rodete tiene entrada axial, α1=0, y se
supone que la velocidad meridiana cm es constante a lo largo del rotor, tanto el
trabajo específico como el grado de reacción pueden definirse como sigue:
𝑊 = 2( 2 − 2 𝛽2)
= 1 2 + 1 2 2 2 𝛽2
De este modo, existe un valor de β2 que anula el segundo término dentro del
paréntesis de la expresión del trabajo y, a partir de este, pueden clasificarse los
álabes del rodete. Si se toma como referencia la dirección tangencial al rodete,
valores de β2 menores de 90º dan lugar a álabes curvados hacia atrás. De la
misma forma, con valores de β2 mayores de 90º surgen álabes curvados hacia
delante y con β2 igual a 90º, los álabes serán rectos a la salida del rodete.
Fig.2. Rodete de turbocompresor centrífugo con álabes: a) curvados hacia atrás; b)
curvados hacia delante; c) de salida radial.

Los álabes curvados hacia atrás dan lugar a compresores más estables. A
relaciones de compresión bajas, no aparece límite de inestabilidad y la curva de
actuación es relativamente plana. Al tener un grado de reacción mayor de 0,5, se
comprime más en el rodete que el difusor, lo que genera un mayor rendimiento. A
día de hoy, se conoce que el difusor es la zona de menor rendimiento, aunque las
razones que originan este hecho sean aún una incógnita. Este factor hace que el
diseño se centre en comprimir sobre todo en el rodete, aunque el trabajo
específico sea menor. Este tipo de álabes se emplea en aplicaciones industriales
donde el tamaño del compresor no sea una limitación de diseño. Por otra parte, en
aviación el tamaño sí es una de las principales condiciones a la hora de diseñar,
por lo que suele emplearse grado de reacción 0,5 y, en consecuencia, álabes
radiales. El trabajo específico es mayor en este caso que con álabes curvados
hacia atrás. La curva de actuación es también una característica que premia el uso
de este tipo de álabes. Sin embargo, cuando se emplean álabes curvados hacia
delante, al tener estos escalonamientos un grado de reacción menor de 0,5 y
comprimir más en la zona de bajo rendimiento, implican generalmente un aumento
del trabajo absorbido respecto de los casos anteriores. La curva de
funcionamiento es más inestable que las anteriores, lo que genera un
comportamiento desconocido fuera del punto de diseño. Por este motivo, no
suelen emplearse este tipo de álabes.
El ángulo de entrada al rodete, α1, se consigue mediante el uso de álabes guía.
Estos pueden ser fijos móviles, pudiendo variar así el ángulo de entrada según
convenga en el punto de funcionamiento. La entrada puede ser en contra rotación,
si α1 es menor de la unidad; axial, si α1 vale cero; prerotación, si α1 es mayor que
cero. Lo más habitual es encontrar entrada axial o en prerotación, ya que la
entrada en contra rotación conduce a velocidades de flujo relativo demasiado
altas, que pueden provocar ondas de choque. Valores habituales del ángulo de
entrada son entre 15º y 20º.

Factor de disminución del trabajo.

En el diseño de un compresor es preciso calcular la relación de presiones


deseada, teniendo en cuenta los datos iniciales, y el salto periférico en el impulsor,
definido por la ecuación de Euler. La determinación de este salto se calcula en la
siguiente forma:
1. Se determina en el diagrama i-s el salto adiabático isentropico
2. Se divide dicho salto por el rendimiento interno para obtener la energía
comunicada al fluido en el impulsor.
Si la teoría unidimensional fuese cierta, el salto así obtenido seria el expresado por
la ecuación de Euler. Sin embargo, este impulsor no alcanzaría en el banco de
ensayos la presión deseada, debido a que la teoría unidimensional no es más que
una aproximación a la realidad (supone un número infinito de alabes), ya que en
realidad el impulsor tiene un numero de alabes finito.
En el rodete real con numero finito de alabes la corriente no es guiada
perfectamente por los alabes, sino que a la corriente relativa de desplazamiento
del gas en el impulsor se superpone un torbellino potencial por las curvas cerradas
o un giro relativo de la corriente en el espacio comprendido entre cada dos alabes
consecutivos, un deslizamiento, siendo el factor de deslizamiento el factor de
corrección μ o coeficiente de influencia del número de alabes.
Según la experiencia, los valores de μ oscilan entre 1,02 < μ < 1,07, aunque rara
vez exceden el valor de 1,04.

Turbocompresores axiales.

Un compresor axial consta de un eje con alabes rotativos (rotor) y una carcasa
cónica con alabes fijos (estator). Cada conjunto de alabes del rotor esta
acompañado por los alabes del estator. El gas entra por la tobera de admisión, la
cual guía el gas hasta la voluta (zona de descarga). En la entrada de la voluta, el
gas se acelera, atravesando los alabes del estator. Los alabes del estator hacen
que la velocidad del gas aumente, incrementando así la energía cinética del gas.
Los alabes del rotor actúan como difusores, haciendo que la velocidad del gas
disminuya, provocando un aumento de la presión.

Los alabes del estator orientan el gas hacia el siguiente conjunto de alabes. De
esta manera, se va acelerando y decelerando el gas hasta su descarga. La
presión aumenta cada vez que el gas circula por los alabes del estator.
Finalmente, el gas pasa por la salida de la voluta y por la tobera de descarga,
abandonando el compresor.

Fig.3. Compresor axial multi-etapa.

Ganancia de presión en un escalonamiento.

El incremento de entalpía en un escalonamiento de compresor adiabático es:

En el supuesto de que la energía cinética es sensiblemente la misma a la salida


del escalonamiento (3) que a la entrada del escalonamiento (1), c3 ≅ c1.
El trabajo de compresión realizado es:
𝛽 𝛽

Como en un turbocompresor axial el incremento de presión por escalonamiento es


muy reducido, la variación de la densidad será también muy pequeña; si en
primera aproximación se supone para un escalón que la densidad ρ = Cte, (no en
el turbocompresor completo), se obtiene:
| |

Por lo que el incremento de presión teórico en un escalonamiento de


turbocompresor axial con ρ = Cte, y c3 ≅ c1 es:
El aumento de entalpía en el rotor está ligado el aumento de presión estática,
fenómeno que sólo es debido a un proceso de difusión del flujo relativo por ser,
w1>w2.
La energía aportada por el rotor se emplea en aumentar la presión debido a un
proceso de difusión, la velocidad del aire c2 > c1 y en vencer las distintas
pérdidas. El establecer la hipótesis ρ = Cte, equivale a tratar al compresor axial
como una bomba axial, por lo que las ecuaciones anteriores son idénticas a las
que proporcionan los incrementos de presión en la bomba axial o en un ventilador.

Grado de reacción y tipo de escalonamiento.

Si se sigue manteniendo la teoría unidimensional ρ = Cte, el grado de reacción de


un turbocompresor axial se puede definir utilizando la misma ecuación que define
el grado de reacción de las turbomáquinas hidráulicas, es decir:

El grado de reacción de un turbocompresor axial puede tener un valor cualquiera


comprendido entre 0 y 1 e incluso tomar valores menores que 0 y mayores que 1.
Todos estos valores se pueden conseguir con una corona móvil, y una corona fija,
que en el caso general se puede disponer antes o después de la corona móvil.
El grado de reacción = 0 correspondiente al escalonamiento puro de acción y el
< 0 se utilizan algunas veces cuando es posible la instalación de un difusor del
compresor para la transformación de energía, por ejemplo, en los exhaustores.
El grado de reacción = 1 corresponde al escalonamiento puro de reacción.
En general, el grado de reacción más utilizado en un turbocompresor axial está
comprendido entre 0.4< <1, siendo algunas veces mayor que 1. Dentro de esta
gama se encuentran los tres tipos de escalonamientos correspondientes a los
triángulos de velocidades de la Fig 4, que constituyen una clasificación que ha
sido muy empleada, en los que, c3 = c1:
- Escalonamiento simétrico: σ = 0,5; α1 < 90º; β2 < 90º, Fig 4.a
- Escalonamiento sin rotación (a la entrada): 0,5 < σ < 1; α1 = 90º; β2 < 90º, Fig
4.b
-Escalonamiento con contrarotación (a la entrada); σ > 1; α1 > 90º; β2 < 90º, Fig
4.c. Este tipo de escalonamiento se suele diseñar para la salida del rodete axial,
α2 = 90º.
Fig.4. Triángulos de velocidades e incrementos de presión en la corona fija y en la
corona móvil, para los tres tipos de escalonamientos más corrientes de
turbocompresores axiales.

Coeficientes de diseño.

Coeficiente de presión Ψ.- El coeficiente de carga o de presión Ψ de un


escalonamiento, referido al extremo del álabe, expresa la capacidad de trabajo
por unidad de masa desarrollado por el escalonamiento, se define como:

Siendo Tu el salto energético isentálpico en el escalonamiento; el coeficiente así


definido varía de la base al extremo, a lo largo de la longitud radial del álabe, por
lo que viene referido en cada caso a la sección de que se trate. En los
turbocompresores de varios escalonamientos los valores de Ψ en la base y en la
mitad del álabe son:
base< 1 ; mitad del álabe < 0,7

Coeficiente de caudal o de flujo .- Está relacionado con el tamaño de la


máquina para un gasto másico G dado, y se define en la forma:

En el diseño de los turbocompresores axiales de varios escalonamientos, se


recomienda mantener:

Los valores usuales de Φa referidos al diámetro medio, suelen estar comprendidos
entre (0,5 - 0,8).

Relación de cubo .- Se define como la relación entre el radio de la base y el


radio exterior del álabe:
El coeficiente se escoge tanto mayor, cuanto mayor sea el coeficiente de presión
adoptado; la experiencia demuestra que el valor óptimo oscila entre un mínimo y
un máximo en la forma:

Número específico adimensional de revoluciones .- El número


específico adimensional de un escalón en los turbocompresores axiales se define
en la forma:

N° de Mach M. - Sabemos que para un escalonamiento se tiene:

Aumentar la relación de compresión de un escalonamiento equivale a aumentar


Tu para lo cual, una vez escogido un valor de ψ, la velocidad periférica u
aumentará, lo que implica, para valores constantes de cm y Δcu a la entrada del
rodete, un aumento creciente de w1, que al acercarse a la velocidad del sonido cs
aumenta el nº Mach, , hasta llegar al valor crítico, que viene a estar
comprendido entre 0,65 y 0,85, pasando de régimen subsónico a transónico.
En los álabes de gran espesor y gran curvatura el número crítico es aún menor, y
disminuye al aumentar el ángulo de ataque, dependiendo finalmente del ángulo de
posición del perfil en el enrejado.
Si el régimen pasa de supersónico a subsónico, en el compresor se crean ondas
de choque, con desprendimientos locales de la capa límite, aumento de las
pérdidas y disminución del rendimiento. Para que se produzcan estos fenómenos
basta con que en algún punto del perfil, que se encuentra de ordinario en la
superficie convexa, se llegue a la velocidad del sonido; allí la velocidad local es
muy superior a la velocidad media de la corriente.
Como el nº de Mach crítico se determina a la velocidad media, esto explica que los
fenómenos supersónicos ocurran antes de que la velocidad media de la corriente
alcance la velocidad del sonido; en esta situación aumenta la resistencia al
arrastre, y disminuye simultáneamente el empuje ascensional, lo que equivale a
un descenso rápido del rendimiento del turbocompresor en el enrejado de álabes.
Para un mismo enrejado de álabes, en el que se mantiene la semejanza de los
triángulos de velocidades, un aumento de u implica un aumento de
̅̅̅̅ y ̅̅̅̅ ,por lo que la limitación de estas últimas velocidades implica la limitación
de la velocidad periférica ̅.
En los turbocompresores de varios escalonamientos, aun manteniendo M > Mcrít
se puede lograr un aumento del salto entálpico por escalonamiento, con la
consiguiente reducción del número de los mismos, aprovechando el hecho de que
la temperatura del aire aumenta con la compresión y, por lo tanto, la velocidad del
sonido, siendo su valor del orden de: √
Curvas características.

Las curvas características universales de un compresor son válidas solo para un


tamaño determinado, pero para cualesquiera condiciones en la admisión, y por
esto se denominan características universales de un compresor.
Aunque el compresor axial tiene mejor rendimiento que el centrifugo, es mucho
más sensible a las variaciones de la carga, su rendimiento disminuye más
rápidamente al variar las condiciones de funcionamiento con relación al punto de
diseño, l curva de rendimiento en función del gasto másico del compresor
centrifugo es más plana (horizontal) que la del compresor axial.

Fig.5. Curvas típicas de rendimiento a cargas parciales de un compresor.

En la siguiente figura se indican las curvas características relación de presiones


en función del caudal volumétrico a la entrada de la máquina, a diferentes
números de revoluciones, correspondientes a un compresor centrífugo y uno axial.

Fig.6.Curvas características de un compresor: a) Centrífugo; b) axial.


En el punto nominal o de diseño, que viene determinado por el caudal volumétrico
nominal a la entrada y la relación de presiones nominal
En los compresores, para cada valor de “n” revoluciones hay un caudal mínimo
por debajo del cual el flujo se rompe y su funcionamiento se vuelve inestable,
dicho valor esta expresado en la curva característica del compresor como una
“frontera de bombeo”, el funcionamiento bajo estos valores origina vibración y
ruido en los compresores.

Comparación entre los turbocompresores radiales y axiales.


El compresor centrífugo tiene las siguientes ventajas sobre el axial:
 Mayor robustez, y por tanto, mayor seguridad en la explotación.
 Menor número de escalonamientos.
 Mayor facilidad de alojamiento de los sistemas de refrigeración
intermedia.
 Mayor zona de estabilidad de funcionamiento, por lo que respecta al
fenómeno de bombeo.

El compresor axial ofrece las siguientes ventajas con relación al centrífugo:


 Mejor rendimiento.
 Para un mismo gasto másico y presión, mayor número de revoluciones.
 El compresor axial tiene menor volumen, menor superficie frontal, y menor
peso para igualdad de gasto másico y de relación de compresión. Esta
ventaja es excepcionalmente importante en aviación, e históricamente
constituyo el estímulo para la evolución del compresor axial con destino a
los turborreactores. La ventaja se hace patente en el campo de las
relaciones de compresión elevadas y grandes potencias. Por esta razón, los
compresores de las turbinas de gas de gran potencia suelen ser axiales y
los de turbina de gas de pequeña potencia, centrífugos.

Si la relación de compresión es pequeña, esta se puede lograr con un compresor


centrifugo de un solo escalonamiento o etapa, con lo cual el peso y volumen de la
maquina será menor que si se empleara un compresor axial, que necesariamente
tendría que ser de varios escalonamientos.

La relación de compresión por escalonamiento es:

Tabla 2. Relaciones de compresión por escalonamiento de los compresores.

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