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Julieta Lugo Vázquez

EVALUACIÓN
Unidad 3

Evaluación
Los objetivos de la evaluación de un paciente portador de una disfagia Orofaríngea son:
1) Evaluar la integridad funcional de la deglución orofaríngea.
2) Identificar la presencia de causas estructurales o mecánicas de disfagia.
3) Evaluar el riesgo de aspiración y la seguridad de alimentar al paciente por vía oral.
4) Determinar si el patrón de disfagia es tratable y, de ser así, evaluar la eficacia de los
tratamientos.

Cuestionario Nestlé
Este test permite, a partir de la evaluación de síntomas específicos de disfagia, obtener
una puntuación directa. Si la puntuación total que se obtiene es mayor o igual a 3, la
persona puede presentar problemas para tragar de manera eficaz y segura y debe ser
evaluada más exhaustivamente.

Prueba Volumen-Viscosidad V-V


Se trata de una prueba sencilla, rápida y segura si lo realiza un profesional entrenado.
Consiste en administrar agua espesada a viscosidad néctar y pudin en diferentes
volúmenes crecientes (20 ml, 10 ml y 5 ml), y observar la reacción del paciente, buscando
la posible existencia de algún signo de trastorno de la deglución. Los principales signos
que se observan son: tos durante o después de la ingesta, cambios en la calidad de la voz y
la presencia de residuos del agua espesada en la boca o en la garganta.
Una vez acabada la prueba V-V, si los resultados obtenidos no son concluyentes, el
paciente puede ser estudiado con más detenimiento y profundidad a través de una prueba
de endoscopia (fibrolaringoscopia) y/o videoradiológica (videofluoroscopia) de la deglución,
con la finalidad de obtener el diagnóstico definitivo.

Miofuncional
Algunos de los aspectos que se pueden valorar en el paciente al realizar esta prueba son:
Valoración de las estructuras anatómicas: labios, lengua, paladar, encías, piezas
dentarias y oclusión; observar si hay asimetría facial, fatigabilidad; función motora oral y
faríngea: tono y fuerza muscular, exploración de la sensibilidad orofaríngea: tacto, gusto,
temperatura y dolor, existencia de reflejos de náusea y deglutorio, exploración de la voz:
si el paciente tiene una voz húmeda, que mejora con carraspeo, es signo de penetración ya
que la saliva puede permanecer retenida en el vestíbulo laríngeo y estado de las
glándulas salivares.

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