PARED CELULAR

La pared celular es una capa rígida que se localiza en el exterior de la membrana plasmática en los
vegetales, en la mayoría de las células fúngicas, en algunas algas y en las células bacterianas. Protege los
contenidos de la célula, funciona como mediadora en todas las relaciones de la célula con el entorno y
actúa como compartimiento celular. En el caso de hongos y plantas, define la estructura y proporciona
soporte a los tejidos.
La pared celular vegetal es de 10 a 100 veces más gruesa que la membrana plasmática. Consiste en fibras
del polisacárido celulosa embebidas en una matriz de otros polisacáridos y proteínas. Todos sus
componentes son sintetizados y secretados por la propia célula. La pared celular vegetal está compuesta
de 3 capas: lamina media, pared primaria y pared secundaria:
La primera capa que se forma a partir de la membrana plasmática es la lámina media, mantiene unidas
a dos células contiguas y compuesta principalmente por pectinas.
Entre la lámina media y la membrana plasmática se depositan hasta 3 capas. La pared primaria, aparee
en células todavía jóvenes, es semirrígida y está compuesta de hemicelulosa, pectinas y proteinas.
Cuando la célula deja de crecer, puede conservar sólo la pared primaria, engrosándola a veces, o
depositar nuevas capas de distintos compuestos originando la pared secundaria que tiene una
composición más constante que la primaria y estará constituida por celulosa, hemicelulosas y ligninas
MEMBRANA PLASMATICA
La membrana plasmática es la estructura más externa de las células animales que separa el interior de la célula
de su entorno, mientras que en las células vegetales se encuentra por debajo de la pared celular. La membrana
delimita el territorio de la célula, controla su contenido químico y a través de ella se transmiten mensajes que
permiten a las células realizar numerosas funciones. El espesor de las membranas varía entre los 6 y los 10 nm, lo
cual indica que no todas las membranas son exactamente iguales.

Las funciones de la membrana plasmática son:

 Regula el paso de sustancias hacia el interior de la célula y viceversa. Permite el paso de ciertas sustancias
e impide el paso de otras, actuando como barrera con permeabilidad selectiva.
 Es una estructura continua que rodea a la célula. Por un lado, está en contacto con el citoplasma (medio
interno) y por el otro, con el medio extracelular que representa el medio externo.
 Contiene receptores específicos que permiten a la célula interaccionar con mensajeros químicos y emitir
la respuesta adecuada y, por consiguiente, proporciona el medio apropiado para el funcionamiento de las
proteínas de membrana.
 Aísla y protege a la célula del ambiente externo, confiriéndole su individualidad, al separarla del medio
externo.

Las membranas celulares están formadas por lípidos, proteínas y, en menor medida, por carbohidratos. La
estructura y la organización de las membranas celulares, así como sus propiedades, están condicionadas
fundamentalmente por los lípidos. En la membrana plasmática de la célula eucariota se localizan tres tipos de
lípidos: fosfolípidos, glucolípidos y colesterol.

Entre los lípidos se anclan las proteínas denominadas integrales que forman parte de la membrana de manera
permanente. Se dividen en tres grupos: las transmembranas, la integradas en una monocapa y las unidas
covalentemente a moléculas que forman parte de la membrana.

Algunas funciones de estas proteínas son: formar canales que facilitan el paso de iones y moléculas específicas a
través de la membrana, actuar como receptores en los procesos de comunicación entre células y desarrollan
actividades enzimáticas, fijar los filamentos del citoesqueleto a la membrana celular, reconocer por medio de
receptores a antígenos y células extrañas y etc.

La membrana también posee otro tipo de proteínas, las periféricas que se localizan a un lado u otro de la bicapa
lipídica y están unidas débilmente a las cabezas polares de los lípidos de la membrana o a proteínas integrales por
enlaces de hidrógeno.
CITOPLASMA
El citoplasma es considerado un organelo celular, está limitado por la membrana, rodea al núcleo de la célula y su
volumen varía de unas células a otras. Casi todos los procesos metabólicos celulares suceden en el citoplasma,
dirigidos por el núcleo celular.

Es el material liquido que ocupa toda la célula, presenta una parte liquida llamada citosol y una cuasi sólida
llamada protoplasma, formado en mayor proporción por agua, contiene proteínas, carbohidratos, lípidos,
vitamina, minerales, hormonas, enzimas, coenzimas, nucleótidos y moléculas orgánicas pequeñas, así como iones
inorgánicos.

También se sintetizan en el citosol algunas proteínas mediante los ribosomas que se encuentran libres en él. En
el citosol se almacenan algunos productos de la biosíntesis, sobre todo sustancias de reserva, como azucares y
lípidos con lo cual se asegura el mantenimiento de los niveles de adenosin trifosfato (ATP), la molécula energética
necesaria para el buen funcionamiento de la célula. Por otro lado, contiene a todos los organelos celulares y por
ende al citoesqueleto.

CITOESQUELETO
El citoesqueleto o esqueleto del citoplasma, es un armazón formado por una densa red de fibras de proteínas que
proporciona a las células resistencia mecánica y soporte importante para mantener la forma, capacidad para
moverse, transportar materiales dentro de la célula, el movimiento de organelos y los movimientos de los
cromosomas durante la división celular y la separación de las células hijas. Por lo tanto, el citoesqueleto se
compara con frecuencia con los huesos y los músculos de un animal.

El citoesqueleto está formado por tres tipos de estructuras proteicas alargadas: microfilamentos o filamentos de
actina, filamentos intermedios y microtúbulos. Las proteínas que componen el citoesqueleto se interconectan y
se extienden desde el núcleo hasta la membrana plasmática en células eucarióticas.

Microfilamentos o filamentos de actina: Son extremadamente delgados, miden aproximadamente 7 nm de

diámetro. Los microfilamentos son bastones helicoidales sólidos constituidos principalmente por una proteína
globular llamada actina. Cada microfilamento es una doble cadena entrelazada de moléculas de actina, parecido
a las perlas. Los microfilamentos de actina participan en el cambio de forma y el movimiento de las células. Los
microfilamentos en sí no pueden contraerse, pero pueden generar movimiento ensamblándose (agregando
subunidades) y desensamblándose (perdiendo subunidades) rápidamente.

Filamentos intermedios: Se les llama así, debido a que tienen una medida intermedia entre los filamentos de
actina y los microtúbulos. Miden de 8-11 nm de diámetro. Están constituidos por polipéptidos fibrosos y tienen
forma de mecate, pero cada tipo de filamento es específico para cada tejido. Los filamentos intermedios funcionan
principalmente como bastones de refuerzo para resistir la tensión, pero también ayudan a fijar ciertos organelos.
Por ejemplo, el núcleo suele conservar su posición gracias a una jaula entretejida de estos filamentos. Algunos
filamentos intermedios soportan la envoltura nuclear, otros sostienen la membrana plasmática y forman parte de
las uniones entre célula y célula.

Microtúbulos: Son los componentes de mayor tamaño del citoesqueleto. Son cilindros huecos rectos que miden
aproximadamente 25 nm de diámetro y de 0.2-25 nm de longitud. Los microtúbulos están constituidos por dos
proteínas globulares que son similares: alfa(α) tubulina y beta(β) tubulina.