ESCARBANDO, LO ATESORADO

Proverbios 4:23
“Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón;
Porque de él mana la vida.”

Introducción:
Vamos a hablar en esta noche del corazón; científicamente el corazón
es un órgano de nuestro cuerpo que bombea sangre para las venas y
arterias que recorren todo el cuerpo y cerebro por ende nosotros
estamos con vida, si no tuviéramos este órgano morimos. Quiere decir
que Dios nos dio este órgano importante y a la vez frágil en esta tierra;
hablando espiritualmente, se contamina tan rápido, podemos destruir
a otros y autodestruirnos.
El corazón es el que determina quienes somos, como nos comportamos
y es desde donde tomamos toda decisión en nuestra vida.
Un niño 5 años me dice mi papi le lanzó una palabrota a mi mamá, no
le voy a decir porque se asustaría, le pregunto a su madre cuando fue
eso, me dice el año pasado, sigue relacionándolo aún en la actualidad.
Este niño ya lo tiene grabado en el corazón.
Recorremos más atrás, un pre adolescente que no quiere ir a la iglesia,
que tiene como aires de rebeldía, aún cambia su forma de vestir,
conducta, etc…. Le llevamos al psicólogo, al psiquiatra, etc… y nos
quejamos, pero realmente será responsable este pequeño (a)? Que
paso aun cuando la mujer estaba embarazada, acaso esta mujer
renegó de estar gestando? O sintió el rechazo del padres o padres
peleando y maltratándose delante de los niños. Esto pasa muy a
menudo, no puedo decir que es ohhhh!!!... En realidad no nacemos
sabiendo ser esposo(a), padres o hijos; pero nosotros como hijos de
Dios debemos de ser más como nuestro Padre Celestial, debemos de
parecernos a Él, ya que somos imagen y semejanza de Él, hasta oler a
Él, que desde nuestro poros salgan a ese olor fragante que es a Él.
Pensando y viendo todo esto, vamos a hacernos 3 preguntas:
I. ¿Qué hemos atesorado en nuestro corazón? En este versículo
dice “sobre toda cosa guardada,…” entonces esto quiere decir
que nosotros almacenamos sucesos en nuestro diario vivir, pero
como nos debemos de dar cuenta que hay cosas que no es
agradable delante de Dios y están en nuestro corazón?, realmente
muchos de nosotros no queremos reconocer como estamos,
pensamos solo en los pecados que son “grande” y no en nuestras
actitudes; y pues entonces me encuentro con Mateo 15:18-19
“18Pero lo que sale de la boca, del corazón sale; y esto contamina
 al hombre. 19Porque del corazón salen los malos pensamientos,
los homicidios (hace dos años atrás más o menos se dio una
noticia que un pastor cristiano se suicidó, a que conclusión
podemos llegar; claro que satanás le engaño, pero porque…
como…), los adulterios (Hombres cristianos golpeando a sus
mujeres), las fornicaciones, los hurtos, los falsos testimonios, las
blasfemias.” Mateo 12:34 “¡Generación de víboras! ¿Cómo podéis
hablar lo bueno, siendo malos? Porque de la abundancia del
corazón habla la boca.”

En Tito 1:15 “Todas las cosas son puras para los puros, más para
los corrompidos e incrédulos nada les es puro; pues hasta su
mente y su conciencia están corrompidas.” En este versículo habla
a los cristianos y a los no cristianos. Cuando almacenamos lo que
satanás nos susurra a nuestra mente y lo almacenamos en el
corazón, sin darnos cuenta poco a poco como una gangrena va a
corriendo por todo nuestra vida y nos corrompemos, por
almacenar pecado, esto es pecado hermanos, tener cosas que nos
dañan en nuestro corazón es pecado, así hayamos hecho muchas
cosas aquí en la tierra, obras, etc, si seguimos atesorando cosas
que nos dañaron en algún momento de nuestra vida, pues
estamos PECANDO.

Imaginemos a una mujer gestante y la mujer no se siente dicha

de estar gestando o el padre no quiere aceptar al bebe, que pasa
con este bebe, nacen niños con baja autoestima, no se sienten
amados, etc.. es demostrada mayormente en la pre adolescencia
y adolescencia.

A una pareja de esposos, que atesoran en su corazón, gritos?

Pleitos? Enemistades? Contiendas? Celos/desconfianza?,etc…

Me preguntan, pastora y las cosas buenas que atesoramos,

ahhh!!! Eso es válido y de bien para nuestra vida, Gloria a Dios!!!!
Pero lamentablemente satanás quiere estropear y daña nuestras
vida y con nuestras relaciones; y a esto viene la pregunta 2.

II. ¿Cómo debemos guardar nuestro corazón?

En la palabra de Dios nos habla de 10 mandamientos, Pero nuestro
Señor dijo 2 de ellos eran los grandes mandamiento en la ley.
Mateo 22-36-40 “36 Maestro, ¿cuál es el gran mandamiento en la
ley? 37 Jesús le dijo: Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón,
y con toda tu alma, y con toda tu mente. 38 Este es el primero y
grande mandamiento. 39 Y el segundo es semejante: Amarás a tu
 prójimo como a ti mismo. 40 De estos dos mandamientos depende
toda la ley y los profetas.”
Mateo 5:8 “Bienaventurados los de limpio corazón (sano), porque
ellos verán a Dios”.
Mateo 12:35 “El hombre bueno, del buen tesoro del corazón saca
buenas cosas; y el hombre malo, del mal tesoro saca malas
cosas.”

Entonces ¿cómo debemos guardar nuestro corazón?

1. Orando (poner en hábito diario para no caer en tentación).
2. Estudiando la palabra de Dios (sacar un tiempo de tu diario
vivir).
3. Poniendo por obra la palabra de Dios (por los frutos los
conoceréis).
4. Poniéndole freno a las distracciones (todo lo que hay en
nuestro alrededor que daña nuestra vida) y mensajes nocivos
(no escuchar lo que nos conviene, si no lo que se debe hacer).
5. Escogiendo bien mis relaciones y amistades (no tener a
nuestro lado una persona toxica; mira con quién andas y te diré
quien eres).
6. Pidiendo ayuda a las personas indicadas (no contando a
todo el mundo tus problemas)

III. ¿Qué debe entonces atesorar nuestro corazón?

1. La palabra de Dios. Hebreos 10:16 “Este es el pacto que

haré con ellos. Después de aquellos días, dice el Señor;
pondré mis leyes en sus corazones. Y en sus mentes las
escribiré”.
2. Alegría, contentamiento. Proverbios 17:22 “El corazón
alegre constituye buen remedio. Mas el espíritu triste seca los
huesos”.
3. La verdad, honestidad, etc.. Filipenses 4:8 “Por lo demás,
hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo honesto, todo lo
justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen
nombre; si hay virtud alguna, si algo digno de alabanza, en
esto pensad.”
4. Los frutos del Espíritu Santo. Gálatas 5:22-23 “Mas el fruto
del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe,
23 mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley.”

Conclusión:
Nos ponemos sobre nuestros pies, por favor… Hermanos lindos,
nosotros como hijos de Dios debemos de entregar todo lo que hay en
nuestro corazón, tenemos que renunciar a muchas cosas, como
actitudes, lo que nuestra lengua habla o que hay en nuestro
pensamiento; debemos de humillarnos y pedir perdón a Dios por lo que
hemos atesorado en nuestro corazón; a veces no nos damos cuenta o
no lo tomamos en cuenta; hay que pedirle al Espíritu Santo que nos
ayude y que seamos como a él le agrada, no como nosotros pensamos
que estemos bien, hay que rendir nuestro corazón hermanos lindos,
vamos a pasar a delante vamos a orar y si tu corazón quiere llorar llora
no te detengas, deja que el Espíritu Santo ministre tu vida; si tienes
ganas de gritar, hazlo; si tienes el Espíritu Santo te dice que tienes que
pedir perdón a alguien que esté aquí o que este lejos o hasta que no
esté en esta tierra, pues hazlo, no lo tengas en tu corazón.
Salmos 22:14 “Mi corazón fue como cera, derritiéndose en medio de
mis entrañas”.
2 Corintios 3:15-18 “Y aun hasta el día de hoy, cuando se lee a Moisés,
el velo está puesto sobre el corazón de ellos. Pero cuando se conviertan
al Señor, el velo se quitará. Porque el Señor es el Espíritu; y donde
está el Espíritu del Señor, allí hay libertad. Por tanto, nosotros todos,
mirando a cara descubierta como en un espejo la gloria del Señor,
somos transformados de gloria en gloria en la misma imagen, como
por el Espíritu del Señor”.