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Estrategias Optativas Antes de Enviar Los Niños A Icbf
Estrategias Optativas Antes de Enviar Los Niños A Icbf
En un intento por cambiar las polémicas y hasta inadecuadas prácticas actuales, establecidas por muchos
coordinadores y docentes de aula (no definidas con claridad en muchos Manuales de Convivencia), frente
a esta incómoda situación que se presenta cotidianamente en las Instituciones Educativas en todo el país,
cuya casi que única respuesta para solucionar y de paso sancionar (¿pedagógicamente?) – por no decir
“castigar”- a los padres y madres impuntuales con el horario establecido para la entrada y recogida de
sus hijos, es prácticamente enviarlos al ICBF, por intermedio de la Policía de Infancia, o amenazar a los
acudientes con hacerlo la próxima vez que recojan tarde a su hijo/a, como parte de su
“Corresponsabilidad (Borja, 2018)2” (artículos 67 y 68 Constitución Política; artículo 7 Ley 115 de 1994;
artículo 3 Decreto 1286 de 2005; artículos 10 y 23 Ley 1098/2006; artículo 1 Ley 1404 de 2010; artículo
2.3.3.1.2.2 Decreto 1075 de 2015; artículo 2.3.3.5.2.3.6 Decreto 1421 de 2017; articulo 1 Acuerdo 738
de 2019 ESCNNA).
Además de las anteriores normas, la Resolución 1740 de 2010 regula la tasa compensatoria que deben
pagar los padres de familia o personas responsables de niños y niñas entre 6 meses y menores de 5 años
de edad (y excepciones contempladas en la Resolución 1064 de 2007) que sean beneficiarios de los
Hogares Infantiles, desprotegidos temporalmente por la ausencia diaria de sus padres o acudientes por
razones de trabajo, estudio y otras circunstancias especiales comprobadas y pertenecientes a sectores de
población con vulnerabilidad económica, social o psicoafectiva (…) teniendo atención prioritaria los que
estén bajo medida de restablecimiento de derechos del ICBF y los niños y niñas de familias en condición
de desplazamiento (artículo 2. BENEFICIARIOS DE LOS HOGARES INFANTILES).
Artículo 2347 del Código Civil3 establece: “toda persona es responsable, no sólo de sus propias acciones
para el efecto de indemnizar el daño sino del hecho de aquellos que estuvieren a su cuidado. Así, los
padres son responsables solidariamente del hecho de los hijos menores que habiten en la misma casa.
(…) Así, los directores de colegios y escuelas responden del hecho de los discípulos mientras están bajo
su cuidado (…) Pero cesará la responsabilidad de tales personas, si con la autoridad y el cuidado que su
respectiva calidad les confiere y prescribe, no hubieren podido impedir el hecho. (…).” La obligación de
vigilancia se extiende incluso a las horas consagradas al recreo y a los paseos; comienza desde que el
1
Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, más información en: https://www.icbf.gov.co/
2
Recuperado de: 2018)https://drive.google.com/drive/folders/0ByGQe1z7Xe65QjZEM2RIaGFwVXM
estudiante queda autorizado para entrar en los locales destinados a la enseñanza y cesa desde el instante
en que sale de ellos, a menos que el profesor se encargue de la vigilancia de los estudiantes durante el
trayecto entre el colegio y la casa; subsiste también, aunque no sea ejercida efectivamente, si el profesor
se ausenta sin motivo legítimo.
Debe advertirse que el deber de vigilancia de los centros educativos por los daños que causen o puedan
sufrir los estudiantes, es inversamente proporcional a su edad o capacidad de discernimiento, es
decir, es mayor frente a alumnos menores o con limitaciones físicas o psicológicas, pero será más
moderado en relación con estudiantes mayores de edad. (…) el deber de cuidado se deriva de la relación
de subordinación que existe entre el docente y el estudiante, donde el primero debe tener tanto la
idoneidad para la enseñanza de un campo del conocimiento como también para tomar las decisiones del
caso, prever los posibles peligros y tomar las decisiones a que haya lugar (…).
Con base en esta última frase, se diseña este procedimiento alternativo que propone otras acciones
divergentes -con intención conciliatoria y empática-, más humanitarias, comprensivas, solidarias,
mediadoras y menos traumáticas para los mismos niños (sumándole la angustia y miedo infundado a ser
abandonados). Que brinden a los padres y madres la posibilidad de reflexionar / aprender cuales
compromisos y acuerdos puede estar incumpliendo con la Escuela y enmendarlos. Además, que posibilita
su acercamiento positivo de forma serena y tranquila con los docentes, participar en los estamentos del
Colegio, asistir con mayor disposición y animo a las Escuelas de Padres/Madres lideradas por
Orientación Escolar; fortaleciendo la articulación Familias-Escuela.
Primera Vez
La docente directora de curso habla con el padre, madre o acudiente para conocer el motivo por el cual
no lo recogieron a tiempo, recordándoles su compromiso y acuerdos establecidos desde su
corresponsabilidad como primeros cuidadores.
Segunda Vez
Solicitar la citación desde Orientación Escolar, para realizar una entrevista semiestructurada a los
acudientes, caracterizando el núcleo familiar del niño, con el propósito de conocer con profundidad las
condiciones actuales en el hogar, detectando posibles riesgos, problemáticas y dificultades que puedan
estar ocurriendo en casa, con sus padres, acudientes y demás familiares que convivan con el estudiante,
ofreciéndoles apoyo / asesoría desde Orientación, para que encuentren manera apropiadas de
solucionarlas; explicándoles legalmente el Colegio que debe hacer y que puede ocurrir con el niño si se
sigue presentando estos retardos, en la entrada o la salida. Además, identificando situaciones como:
- Los acudientes evidencian negligencia, pereza, descuido o indiferencia con la recogida del niño.
- Los cuidadores, quienes tienen la custodia no son los padres biológicos del niño, sino otro familiar
hasta cuarto grado de consanguinidad o persona externa reintegrada en el núcleo poligenético (familia
reconstituida, reestructurada, recompuesta…).
- El estudiante puede encontrarse en riesgo de abandono, pasar mucho tiempo solo en el hogar,
permanecer encerrado o en la calle, y similares.
- Puede estar sufriendo algún tipo de violencia (física, sexual, psicológica, emocional, etc).
- Hay vulneración de derechos básicos (alimentación, salud, cuidados especiales, afecto y amor,
recreación, entre otros).
- Realmente están teniendo inconvenientes para llegar a tiempo al colegio, porque están pasando una
situación difícil, una calamidad doméstica, tienen problemas económicos, los padres se están
separando, han sido desplazados, sacados o desarraigados de sus viviendas y territorios.
- El cuidado / protección y movilización al colegio están a cargo de otro menor de edad, asumiendo la
“paternalización” (responsabilidades y obligaciones de adultos, realizadas por menores de 14 años).
- Matricularlo en una Escuela más cerca de su residencia o cambiarlo de jornada.
- Pensar en la posibilidad de trastearse más cerca del colegio, si vive en arriendo.
- Se evidencia la intención de los acudientes de dejar que ICBF les quite los niños, para liberarse de
esta responsabilidad, por diferentes motivos.
- Otras no contempladas.
Tercera Vez
Desde Coordinación de Convivencia, se envía en la agenda del niño, una citación a reunión conjunta con
la docente titular del curso donde está el niño, para conocer las razones del incumplimiento del
compromiso ya establecido con la docente. Dejando consignado en acta los compromisos acordados,
proponiendo opciones en la recogida del estudiante como:
- Autorizar a otro familiar de confianza que el niño identifique y conozca bien, comience a llevarlo.
- Colocarlo en ruta de transporte o tramitar el subsidio de transporte, si aplica.
- Cambiar la hora de salida desde la casa, para tener un margen de tiempo por si se presenta alguna
demora.
- Llamar a la profesora para avisarle que llega tarde.
- Otra propuesta por el mismo acudiente.
CARLOS BORJA
Psicólogo Orientador y Asesor Escolar
Secretaria de Educación Distrital
Bogotá Colombia
https://www.facebook.com/groups/CarlosBorja/