Está en la página 1de 12

UNIDAD I: Nos reencontramos y organizamos el aula

Los niños y niñas del segundo grado ya han alcanzado en el año anterior
aprendizajes muy importantes como parte de su escolaridad: se han integrado a
un nuevo nivel educativo, han aprendido a comunicarse en diferentes
situaciones utilizando el sistema de escritura alfabético, etc. Este grado les
presenta nuevos desafíos en su camino de desenvolverse con autonomía como
lectores y escritores, así como en su comprensión de mensajes orales cada vez
más complejos. Del mismo modo en su organización tanto grupal como del
espacio en el que se encuentran. Ante esto surgen las siguientes interrogantes:
¿cómo podemos organizarnos y organizar nuestra aula?, ¿Qué retos nos plantea
esta organización con respecto a la lectura y escritura?
Por ello, en esta primera unidad, proponemos diferentes situaciones en las que,
a través de la organización de los estudiantes y del letrado del aula, los niños y
niñas harán uso de la lectura y escritura para leer y producir diversos textos, que
usarán diariamente como parte de sus actividades cotidianas. Del mismo modo,
podrán expresarse y comprender mensajes orales compartiendo diversas
experiencias y emitiendo su opinión en diversas situaciones de la vida del aula.
UNIDAD I: Nos organizamos para aprender
Los niños y las niñas de segundo grado inician una nueva etapa escolar, en la cual vivirán
experiencias que les permitirán reencontrarse con sus compañeros, conocer un nuevo
ambiente de trabajo y explorar los materiales que los ayudarán a aprender. En este
sentido, requieren de un aula acogedora y organizada según sus necesidades de
aprendizaje y sus preferencias, donde se sientan cómodos y compartan actividades con
alegría. Uno de los principales retos que se les presenta en esta unidad comprende la
siguiente pregunta: ¿cómo y dónde podrían ubicar sus materiales para utilizarlos
apropiadamente?
En virtud de lo expuesto, se proponen situaciones problemáticas en las que los
estudiantes explorarán ubicaciones, ordenamientos, clasificación y uso de sus
materiales en el sector de Matemática, implementarán La tiendita, elaborarán
materiales que los ayudarán a construir y usar nociones matemáticas prenuméricas —
como la clasificación y la seriación—, y otras relacionadas con la representación de
cantidades (decena), la lateralidad y la ubicación espacial; todo ello, mediante la
participación en actividades lúdicas y vinculadas con su vida cotidiana (por ejemplo,
compra y venta en contextos auténticos como mercados, ferias, tienda escolar, etc.), en
un ambiente de disfrute, amistad y respeto entre compañeros.
UNIDAD II: Nos conocemos y compartimos nuestros talentos en un festival
Los estudiantes de segundo grado, después de trabajar en la organización
de su aula y establecer las normas de convivencia, empiezan a participar
en diferentes actividades lúdicas, trabajos y dinámicas donde van
afianzando relaciones de amistad y compañerismo.
Para que estos encuentros sean óptimos, se propone seguir desarrollando
sus habilidades como lectores y escritores, promoviendo el desarrollo de
su autonomía con la finalidad de que sean capaces de leer, escribir y tomar
la palabra, y compartir sus características, cualidades y emociones a partir
de la reflexión personal y colectiva.
Se les plantea el siguiente reto: ¿cómo hacer para compartir lo que van
descubriendo sobre el código escrito y sobre sí mismos?, ¿qué
actividades podrían realizar?
Por ello, esta unidad brinda a los niños y a las niñas la posibilidad de
conocerse a sí mismos y de conocer a sus compañeros, con quienes
conviven y afrontan diversas situaciones, a través de un conjunto de
actividades vivenciales que implican la lectura y escritura de diversos
textos y diálogos, que les darán la oportunidad de valorar sus
características, cualidades, emociones y talentos, y compartirlos con los
demás en el desarrollo de un festival.
UNIDAD II: Nos conocemos mejor para trabajar en equipo
Los estudiantes de segundo grado ya se reconocen como niños o niñas con características que los
distinguen. Al compartir diversas actividades, han logrado identificar que cada uno posee
preferencias particulares, así como también talentos o cualidades que les permiten interactuar y
conocerse mejor. Algunos quizá han descubierto que son muy buenos dibujando o pintando,
mientras que otros, tal vez, cuentan con mayores habilidades para el cálculo y las matemáticas.
La situación descrita despierta en ellos, sin duda, gran interés, pues además del conocimiento
personal y de quienes los rodean en sus contextos más cercanos, logran ampliar y fortalecer sus
vínculos amicales, factor muy importante en esta etapa escolar, ya que los ayuda a optimizar sus
aprendizajes y a dinamizar un trabajo cooperativo en el cual cada uno realizará una actividad de
acuerdo a sus potencialidades individuales. Sobre esta base, es pertinente presentarles el
siguiente reto: ¿en qué actividades nos desempeñamos mejor?
En concordancia con lo señalado, la presente unidad busca que los estudiantes construyan
nociones matemáticas relacionadas con el recojo de datos y la elaboración de gráficos estadísticos
en situaciones de incertidumbre, con la exploración y construcción de patrones gráficos de
repetición, con la comparación, estimación y representación de números naturales con diversos
materiales y de distintas formas, así como con el uso de los números ordinales; todo ello, a partir
de problemas retadores e interesantes, donde se propicien el juego y la participación de todos en
un ambiente de disfrute, amistad y reconocimiento de sus cualidades.
UNIDAD III: Conocemos y difundimos los derechos de los niños y las niñas
Es de vital importancia que los niños y las niñas de segundo grado se
reconozcan a sí mismos como sujetos de derechos, de modo que puedan
hacerlos valer en los diferentes ámbitos en los que se desenvuelven. De la
misma manera, es necesario que estén enterados sobre las instituciones
encargadas de velar por la vigencia de sus derechos, para que puedan recurrir
a ellas en caso de que estos sean vulnerados.
Ante esta situación, se presentan los siguientes retos: ¿cuáles son nuestros
derechos?, ¿qué tenemos que hacer para que otros los conozcan?, ¿qué otros
aspectos tenemos que aprender para cuidarnos y cuidar nuestro cuerpo?
En esta unidad se presentan una serie de sesiones con una secuencia
orientada a que los estudiantes conozcan, de manera general, sus principales
derechos. Se enfatizará en el conocimiento de algunos como el derecho al buen
trato, a la educación, a la salud, a la recreación.
Proponemos un conjunto de actividades de lectura, escritura y oralidad
mediante las cuales los niños y las niñas tendrán la oportunidad de asumir
retos como lectores y escritores, no solo para conocer en qué consisten sus
derechos, los aspectos de su cuerpo que tienen que conocer y cuidar, sino
también para opinar y realizar acciones que les permitan difundirlos entre su
comunidad educativa y local, con el fin de promover su respeto.
UNIDAD III: Tenemos derechos
Los estudiantes de segundo grado tienen la necesidad de investigar sobre la
importancia de conocer sus derechos, especialmente los derechos a la salud, a la
recreación y a la alimentación pues permiten un desarrollo mejor e integral de sus
vidas.
En un contexto en el que se leen noticias sobre la vulneración de los derechos del
niño por falta de conocimiento, es importante que ellos conozcan sobre sus
derechos y es necesario que estén enterados sobre las personas e instituciones,
encargadas de velar por la vigencia de sus derechos, para que recurran a ellas en
caso sean vulnerados. Es por ello que en esta unidad se les presenta el siguiente
reto: ¿Qué actividades realizaremos que nos permitan conocer más sobre cómo
ejercer nuestros derechos?
En consecuencia, proponemos un conjunto de sesiones que presentan secuencias
didácticas orientadas a que los estudiantes conozcan de manera general, sus
principales derechos, enfatizando en el conocimiento de algunos como los
derechos a la alimentación, a la recreación y a la salud. De esta manera,
estimulamos y desarrollamos en los niños y las niñas la conciencia del ejercicio
ciudadano de sus derechos.
En el transcurso de la unidad los niños y las niñas se enfrentarán a situaciones en
las que trazarán el recorrido hasta la posta médica más cercana y hasta el tópico
del colegio. También a situaciones relacionadas con el derecho a la recreación,
realizando juegos orientados al aprendizaje de la Matemática y a conocer cómo es
una alimentación saludable.
UNIDAD IV: Organizamos una galería para dar a conocer nuestras costumbres y tradiciones
Se observa que los estudiantes de segundo grado demuestran poco interés por las
costumbres y tradiciones de su comunidad, a pesar de que en ella conviven
diariamente niños y niñas cuyas familias tienen diferentes raíces culturales.
Este desapego se hace evidente cuando participan en las actuaciones y en los
eventos culturales que se realizan dentro y fuera de la escuela. En este contexto, es
importante que los niños y las niñas conozcan y se apropien de esta diversidad
cultural expresada en textos orales (leyendas, pregones, canciones, etcétera) y que
se encuentra también en manifestaciones como la gastronomía, la artesanía y los
sitios arqueológicos que forman parte de nuestra historia. Así podrán valorar,
cuidar y respetar su cultura y la de los otros, de modo que sea posible una adecuada
convivencia.
Ante esto, se plantean las siguientes interrogantes: ¿qué costumbres y tradiciones
tiene mi comunidad?, ¿cómo se celebran?, ¿qué podemos hacer para conocer
mejor y valorar nuestras costumbres y tradiciones?
En esta unidad proponemos que los estudiantes indaguen sobre su patrimonio
cultural a partir de las situaciones que se plantean en las sesiones de aprendizaje,
en las que interactuarán con diversos tipos de textos: narrativos, informativos e
instructivos. Estos les permitirán elaborar productos que se presentarán en una
galería a la que hemos llamado “Nuestras costumbres y tradiciones” y cuyo
propósito consiste en dar a conocer y promover los diferentes aspectos de su
cultura a sus compañeros y compañeras de otros grados y a los padres de familia.
UNIDAD IV: Conocemos los lugares de nuestro Perú
Los rostros del Perú son diversos. La variedad de grupos étnicos que existen en el país genera esa riqueza
que le es propia y que se aprecia en distintas manifestaciones culturales, tanto en una alejada tribu de la
selva amazónica como en el cálido pueblo de la Costa o en la pintoresca comunidad campesina de la Sierra.
Los estudiantes no son ajenos a esta realidad: ellos y sus familias proceden de muchos lugares del Perú.
Es en esta diversidad donde se debe buscar las oportunidades para que aprendan a pensar, a valorar sus
propias costumbres y a entender el entorno social y cultural y actuar en él. Saben, además, que estas
diferencias no han impedido nuestra convivencia en sociedad.
Desde la escuela se puede aprender a valorar nuestra diversidad cultural, lo que implica, antes que nada,
conocerla. Es posible, por ejemplo, aprovechar esta diversidad para el desarrollo de capacidades y la
adquisición de conocimientos matemáticos. Entender y aprender a usar esta forma de conocimiento en
ámbitos diversos va a permitir a los estudiantes emplearlo en situaciones reales comunes y complejas de
su vida cotidiana, en un clima de respeto, diálogo y paz.
Teniendo en cuenta lo anterior, aquí se presenta el siguiente reto: ¿cómo podemos conocer la diversidad
nacional a partir del saber de dónde proceden nuestros padres?
En esta unidad, el hilo conductor de las sesiones será el contexto cultural nacional, expresado en la
elaboración de un mural donde se aprecien los lugares turísticos, costumbres y artesanías de nuestro Perú.
Los estudiantes aprenderán a proponer preguntas para recolectar datos que expresarán en tablas simples
y gráficos de barras con material concreto, y emplearán estrategias de búsqueda o investigación de
documentos o fuentes históricas para completar, ampliar y crear patrones de repetición al elaborar
artesanías. Aprenderán también a resolver problemas de dos etapas que demanden acciones de juntar-
juntar, agregar-agregar y avanzar-avanzar, con cantidades de hasta dos cifras.
La evaluación tiene un espacio privilegiado en la unidad, tanto en el proceso como al término de ella. Se
aplicarán listas de cotejo con la finalidad de registrar lo que saben y lo que son capaces de hacer; al final
se hará una evaluación para indagar sobre los aprendizajes que hayan logrado y el desarrollo de las
capacidades y actitudes.
UNIDAD V: Conocemos el espacio donde vivimos para valorarlo y cuidarlo
Los niños y las niñas de segundo grado reconocen un espacio geográfico más
amplio, que no se limita solo a su casa o a la escuela, se dan cuenta de que se
interrelacionan con más personas, otros seres vivos y lugares.
Ellos observan que este espacio, que forma parte de su localidad, viene siendo
transformado por diversas actividades sociales y económicas, las cuales
repercuten en sus modos de vida y en los de otros seres. Así mismo, escuchan
que hay problemas ambientales que los afectan.
En ese contexto, surgen las siguientes interrogantes: ¿cómo es y cómo era el
lugar en el que vivimos?, ¿qué seres vivos lo conforman?, ¿cómo podemos
contribuir al cuidado de nuestra localidad?, ¿cómo prevenir situaciones de
riesgo en nuestra localidad?
Por ello, en esta unidad, los niños y las niñas movilizarán diversos aprendizajes
mediante el uso del lenguaje oral y escrito, para reflexionar sobre los espacios
geográficos de la localidad en la que viven y ser capaces de diferenciar los
elementos naturales de los sociales y vincularlos con su vida y el espacio
donde se desenvuelven, con el fin de promover su cuidado y prevenir
situaciones de riesgo. Además, leerán y producirán reflexivamente diversos
tipos de textos orales y escritos (entre ellos, descripciones) según sus
conocimientos de escritura y teniendo en cuenta la situación comunicativa.
UNIDAD V: Conocemos el espacio en que vivimos
Los niños y las niñas crecen y su vida se desarrolla con el afecto proveniente de la familia,
mediante el juego cotidiano y la interacción con el entorno. Para ellos, conocer su entorno es
vital en esta etapa, pues de este conocimiento depende la comprensión del mundo y de todo
lo que les rodea. El lugar donde se encuentran, así como las cosas que están a su alrededor,
despiertan en ellos una enorme curiosidad que propicia grandes descubrimientos, ya que por
naturaleza aprenden de él.
En este sentido, la escuela debe ofrecer espacios adecuados a los niños y a las niñas, pues
estos serán por mucho tiempo el medio donde se desenvuelvan, y no deben significar
solamente un lugar para estudiar, sino también un espacio físico agradable que promueva
tanto la estimulación de sus sentidos y movimientos, como su reconocimiento de pertenecer
y ser miembro integrante de una familia y comunidad. Es así que, en esta unidad, el
conocimiento del entorno físico, así como de los objetos y las cosas que están en él, serán el
eje central desde el cual se generen diversos aprendizajes, y sobre los cuales se ha propuesto
el siguiente reto: ¿qué objetos interesantes hay en su entorno?, ¿en qué lugar los encuentran?

A fin de que los estudiantes asuman dicho reto, en la presente unidad, se proponen una serie
de situaciones problemáticas, entre ellas: realizar un compartir que les permitirá integrarse y
conocerse al preparar juegos; elaborar recipientes y adornos con formas que se observan en
la naturaleza; ordenar los objetos dentro del aula y conocer su posición y el desplazamiento
que harían para ubicarlos; hallar las medidas de longitud de los objetos elaborados, las cuales
serán comparadas; aprender a determinar el peso de los objetos; conocer los patrones
geométricos al elaborar lindas tarjetas; y, además, resolver problemas que implican igualar
usando diversos materiales. Todo esto en un ambiente grato de respeto y compañerismo.
UNIDAD VI: Identificamos los recursos naturales y proponemos acciones
para su cuidado
Las niñas y los niños de segundo grado han aprendido cómo el espacio en el
que viven ha ido cambiando por las diversas actividades que realizan las
personas. Sin embargo, algunas de estas actividades están causando graves
problemas ambientales. Por ello, desde la escuela es urgente promover el
conocimiento de los recursos naturales que están siendo contaminados, con
la finalidad de indagar sobre ellos y fomentar su conservación.
En este contexto, la presente unidad plantea como retos las siguientes
interrogantes: ¿con qué recursos naturales contamos en nuestra localidad?,
¿cómo se usaban y se usan estos recursos?, ¿qué actividades del hombre las
están contaminando?, ¿cómo podemos contribuir al cuidado de estos
recursos?, ¿qué podemos hacer con los materiales que ya no utilizamos?
A partir de estas preguntas, las niñas y los niños podrán movilizar sus
aprendizajes haciendo uso del lenguaje oral y escrito para investigar,
reflexionar y aprender sobre los recursos naturales presentes en su
comunidad, y promover acciones para su cuidado. Para ello, dialogarán, leerán
y escribirán diversos tipos de textos; observarán y registrarán datos; harán
pequeños experimentos; participarán en exposiciones; y aprenderán a reciclar.
UNIDAD VI: Viendo más de cerca nuestro medio natural (agua, suelo y aire)
Contamos con un espacio donde el medio natural, la ciencia y la tecnología se encuentran; por ello,
es necesario sacarle el mayor provecho. Este contexto, que ofrece grandes posibilidades para el
aprendizaje, es donde se desenvuelven las niñas y los niños de nuestra patria.
En esta diversidad tenemos que buscar, desde la escuela, las oportunidades para que los
estudiantes aprendan a valorar el medio natural y a disfrutarlo con responsabilidad, y para ello deben
desarrollar capacidades matemáticas y adquirir nuevos aprendizajes.
Teniendo en cuenta lo expuesto, en esta unidad se presentan los siguientes retos: recrear el juego
popular de la cometa a partir de una propuesta innovadora, y aprovechar este juego para compartir
sanas competiciones entre grupos.
Para enfrentar dichos retos, en la presente unidad se proponen situaciones que buscan que los
estudiantes resuelvan problemas e interactúen con diversos materiales que los ayuden a construir
y utilizar nociones matemáticas para expresar sus preferencias a través de la organización e
interpretación de datos en pictogramas o gráficos de barras; construir y utilizar nociones sobre
formas bidimensionales para la elaboración de la cometa; expresar la estimación del tiempo con
referentes regionales y locales; interpretar y utilizar la simetría en la preparación de la cometa;
expresar la medida de superficie de objetos usando unidades de medida arbitrarias; resolver
problemas aditivos de una, dos o más etapas, que impliquen hacer representaciones gráficas y
simbólicas empleando propiedades y estrategias; comprender las nociones de “doble” y “mitad”.
Todo ello en un contexto que permita a los estudiantes desarrollar sus capacidades y su impacto en
situaciones de juego, y comprender y aprovechar los recursos del medio.
La evaluación es considerada punto central y tiene un espacio propio en la unidad, tanto durante el
proceso como al término de ella. Asimismo, se proponen listas de cotejo con la finalidad de registrar
lo que los estudiantes saben y lo que son capaces de hacer, y poder tomar decisiones oportunas. Al
cierre de la unidad, se realiza una evaluación final para saber qué aprendizajes han logrado las niñas
y los niños.

También podría gustarte