Pequeño Manual Del Proyecto Sostenible - (PG 9 - 30) 3 13

emplazamiento
01
¿Permite el emplazamiento
escogido densificar la
ciudad?
La dispersión urbana es una las causas más importan-

tes de la emisión de gases de efecto invernadero.
Genera desplazamientos significativos y la transfor-

mación de los suelos en impermeables por efecto de
la edificación. Reduce los espacios con vegetación o
susceptibles de acogerla, en particular, las tierras cul-
tivables.
Por estas razones, la densificación de las ciudades es

prioritaria para un desarrollo urbano “sostenible”.
La colmatación de los vacíos urbanos, el uso del suelo
bajo rasante y la construcción de más plantas sobre
los edificios permiten preservar los espacios naturales
o cultivados.
Copyright © 2012. Editorial Gustavo Gili. All rights reserved.
Hoy en día, es posible dar respuesta a las nuevas nece-

sidades edificatorias en el interior de los perímetros ya
urbanizados, lo cual permite rentabilizar las infraes-
tructuras existentes.
Jourda, Françoise-Hélène. <i>Pequeño manual del proyecto sostenible</i>, Editorial Gustavo

Gili, 2012. ProQuest Ebook Central, http://ebookcentral.proquest.com/lib/unadsp/detail.action?docID=4421900.
Created from unadsp on 2019-08-27 19:08:18.
02
¿Son suficientes y
satisfactorias las
infraestructuras
existentes o previstas?
Las infraestructuras necesarias para la subsistencia de

un edificio y de sus usuarios son numerosas: acometida
de agua, conexión a la red de abastecimiento energéti-
co y de recogida de aguas residuales.
Si estas infraestructuras no existen, construirlas reque-

rirá importantes gastos en términos de recursos en ge-
neral (en energía consumida y en energía gris, en
particular) y ocasionará numerosas molestias.
Por esta razón, deben privilegiarse los entornos que ya

cuentan con infraestructuras y que, en caso necesario,
solo deberán ser mejoradas o completadas.

emplazamiento
03
¿Está conectado el
emplazamiento a la red de
transporte público de forma
satisfactoria? ¿Es accesible
a los peatones y los usuarios
de medios de transporte
alternativos al motorizado?
Es urgente reducir las emisiones de gases de efecto

invernadero (en particular CO2) producidas por los
medios de transporte, en particular por los vehículos
particulares.
Los transportes en automóvil (coche, camión) generan

alrededor del 30,7 % del total de las emisiones.
Por ello, deben privilegiarse los medios de transporte

público, si es posible, de baja emisión de CO2, y, sobre
todo, los modos de transporte no motorizados.
Se puede considerar que un medio de transporte

público es accesible si está situado a menos de 400
metros de un edificio. Estos transportes, autobuses,
tranvías o metros, deben permitir un acceso cómodo
a los servicios que ofrece la ciudad: el lugar de trabajo,
los comercios, los equipamientos culturales, deporti-
vos, sanitarios y administrativos.

04
¿Existen servicios de
proximidad en el entorno
inmediato?
Según la definición del desarrollo sostenible, la igual-

dad de oportunidades entre las diferentes generacio-
nes y las diferentes categorías sociales constituye un
factor de evaluación crucial de un proyecto. La accesi-
bilidad a los equipamientos escolares, a las guarderías,
así como a los servicios administrativos públicos, a los
comercios o a los equipamientos deportivos o cultura-
les, garantiza tanto la calidad de vida como la igualdad
de oportunidades y, por consiguiente, la paz social.
La integración social del mayor número posible de

individuos amplía el abanico de oportunidades de las
futuras generaciones. Si la propuesta de edificación no
puede aprovechar servicios existentes o previstos, en
la mayoría de los casos es mejor renunciar a llevarlo
a cabo.

emplazamiento
05
¿Es indispensable responder
a las necesidades con una
edificación de nueva planta?
Los edificios existentes en un emplazamiento han

requerido el empleo de un gran número de materia-
les que, en general, no son renovables. También han
requerido de una cierta cantidad de energía para su
construcción.
Su derribo, abandono o reciclaje requerirán de nuevo

un consumo de energía, acarrearán molestias (ruido,
polvo, etc.) y, probablemente, tendrán consecuencias
de orden social o cultural.
La mayor parte de los materiales resultantes del
derribo no podrán ser reciclados y, por tanto, se perde-
rán definitivamente.
Es indispensable valorar la pertinencia del derribo de

los edificios existentes en el emplazamiento. Desde el
punto de vista de la huella ecológica de la operación,

suele ser más pertinente la rehabilitación o ampliación
que el derribo.
A menudo, para justificar un derribo, se invoca a la falta

de adaptabilidad de los edificios existentes. Pero, esta
falta de adaptabilidad, que hoy parece un argumento
válido, ¿lo será mañana?

06
¿Se beneficia el emplazamiento
de un buen asoleo?
El entorno cercano puede ser fuente de sombras pro-

yectadas o de obstrucción solar, debido a la orienta-
ción o a las alturas de los edificios y las distancias
entre ellos.
La falta de asoleo de un emplazamiento puede tener

consecuencias sobre el uso. Un asoleo suficiente es
indispensable tanto para favorecer los aportes sola-
res pasivos como para ofrecer confort y calidad de
vida a los usuarios.
Por consiguiente, en el marco de los estudios de aso-

leo, es importante no olvidar que el ángulo de inciden-
cia de la radiación solar varía según los periodos del
año, siendo más horizontal en invierno y más vertical
en verano.

emplazamiento
07
¿Está contaminado el suelo?
Muchos suelos están contaminados como consecuen-

cia de actividades industriales que se desarrollaron
anteriormente en el lugar, o bien debido a materiales
almacenados en el terreno.
Una nueva construcción puede constituir una oportu-

nidad de descontaminación del suelo o de control de
los suelos contaminados. Los nuevos edificios situados
sobre esos suelos reducirán la migración de sustancias
contaminantes debida a la infiltración de aguas de llu-
via hacia la capa freática.
Por ello, aunque pueda extrañar a primera vista, es pre-

ferible construir allí donde los suelos están contamina-
dos que donde exista un ecosistema que soporte una
fauna y una flora diversificada y rica.

08
¿La vegetación existente en
el emplazamiento tiene la
calidad suficiente?
La vegetación de las ciudades tiene una función espe-

cialmente importante por su capacidad de absorber el
CO2, producir oxígeno, absorber el polvo y mejorar la
higrometría ambiente.
Nuestras ciudades sufren de manera generalizada de

una carencia de vegetación. Muy a menudo, la vege-
tación “salvaje” o pionera se desprecia por razones
estéticas, aunque constituya un factor importante de la
mejora de la calidad del aire. Por lo tanto, es necesario
argumentar la decisión de mantener o suprimir la vege-
tación existente en el emplazamiento.
En algunos casos, es factible destruir ciertos elemen-

tos vegetales y plantar otros. En cualquier caso, hay
que tener en cuenta el tiempo de crecimiento de las
nuevas especies, sus necesidades en términos de man-

tenimiento, riego y adaptación al clima. La eliminación
de vegetación debe ser mínima y compensada en el
propio emplazamiento o en el entorno cercano para no
deteriorar el equilibrio existente.

emplazamiento
09
¿Existen en el emplazamiento
elementos que provoquen
molestias?
Algunos emplazamientos no son apropiados para cier-

tos usos y pueden suponer riesgos para la salud de los
habitantes: se trata, sobre todo, de molestias acústicas,
olfativas, electromagnéticas o relacionadas con la con-
taminación del aire.
Es importante estudiar con cuidado el entorno exis-

tente, de esta forma, se puede llegar a adoptar medi-
das relativas a las emisiones sonoras o a las ondas
electromagnéticas (en función de la presencia de ante-
nas, de líneas de alta tensión, etc.).
Se pueden tomar muestras en el emplazamiento para

medir la calidad sanitaria del aire (en caso de que exis-
tan instalaciones industriales cercanas, por ejemplo).
En principio, el planeamiento urbanístico debe resol-
ver este tipo de conflicto entre usos y molestias. Sin

embargo, es responsabilidad del arquitecto plantear las
preguntas adecuadas al promotor.

capítulo 2 :
Programa de
necesidades
Los elementos constitutivos del programa de
necesidades de un edificio determinan su obje-
tivo y su uso. Los requerimientos en función del
tipo de espacios, superficie, confort, usos per-
mitidos y actividades a desarrollar afectarán a
la posibilidad o imposibilidad de preservar
recursos, reducir las molestias o favorecer la
vida colectiva.
Por ejemplo, la construcción de una vivienda
unifamiliar aislada no puede, en general, alcan-
zar un nivel aceptable de “virtud” en términos
de desarrollo sostenible.

Programa de
necesidades
10
¿El edificio previsto aportará
diversidad de usos?
La diversidad de usos a la escala del edificio o del barrio

es un criterio fundamental del desarrollo sostenible
de la ciudad. La coexistencia en el mismo barrio de
diferentes usos (espacios de encuentro, trabajo, ocio,
comercio, educación o formación, etc.), permite mini-
mizar la necesidad de desplazamientos y, por lo tanto,
reducir de forma considerable las emisiones de gases
de efecto invernadero. Minimiza los tiempos de des-
plazamiento, el riesgo de accidentes y aporta un uso
cotidiano a los espacios públicos, y, por lo tanto, cierta
seguridad a los habitantes y usuarios de los diferentes
edificios. En consecuencia, su calidad de vida mejora
considerablemente.
Un urbanismo que separe las viviendas, los lugares de

trabajo, los de ocio y comercio, genera por lo general
una segregación espacial de los sectores de la pobla-
ción más desfavorecidos que refuerza el sentimiento

de exclusión.
Un edificio u operación inmobiliaria pueden generar o

mejorar esta diversidad e, incluso, integrar en su pro-
pio programa usos múltiples que mejoren la calidad de
vida de los usuarios.

11
¿Favorece el proyecto la
instauración de la mezcla
social?
La cohabitación de diferentes clases sociales y cultu-

rales garantiza que todo el mundo participe en la vida
pública. Evita la segregación social en el entorno y
minimiza los riesgos de conflictos sociales, pues favo-
rece la integración y la comunicación entre diferentes
culturas, clases sociales y franjas de edad. Facilita los
intercambios y la ayuda mutua sin menoscabar las dife-
rentes identidades culturales.
La oferta de espacios que admitan diferentes pro-

fesiones, diferentes tipologías de vivienda y de ocio,
adaptadas a los distintos tipos de población impide la
formación de guetos.
Debe buscarse la diversidad social y de niveles de renta

en el emplazamiento o en un perímetro ampliado del
mismo.

Programa de
necesidades
12
¿Es suficientemente denso el
programa?
El programa y las superficies a construir deben estar

adaptados al lugar. Hay que buscar la máxima densi-
dad para rentabilizar las infraestructuras existentes y
evitar la dispersión urbana. También deben evitarse las
densidades bajas, aunque den una imagen de confort
y positiva a los posibles usuarios.
El ejemplo de las urbanizaciones y las viviendas aisla-

das es muy instructivo en este sentido: movilizan gran
cantidad de suelo e infraestructuras para un número
muy reducido de habitantes por metro cuadrado.
A la inversa, una densidad demasiado elevada puede

tener efectos muy negativos sobre el entorno.
No existe una densidad ideal. Cada emplazamiento y
cada programa deben considerarse y adaptarse el uno
en función del otro con el objetivo de alcanzar la den-

sidad óptima.

13
¿Cuál es el impacto
social del edificio?
Los nuevos usos inducen la llegada de nuevos habi-

tantes o usuarios. Como consecuencia, la composición
social del barrio puede cambiar.
Pueden surgir nuevas necesidades en términos de

infraestructuras o de usos complementarios. Los nue-
vos programas refuerzan, agravan o, por el contrario,
mejoran una situación dada. La aparición de sectores
de población diferentes contribuye a la diversidad
social y modifica el equilibrio del barrio. Hay que con-
siderar y modificar el conjunto de la “oferta urbana”,
con el objetivo de aportar los nuevos servicios que los
futuros usuarios del edificio que se está proyectando
necesitarán.

Programa de
necesidades
14
¿Qué impacto tiene el uso del
edificio sobre el entorno
inmediato?
No existe construcción que no ejerza un impacto sobre

el entorno. Los diferentes programas previstos tendrán
consecuencias sobre las infraestructuras, y pueden
generar molestias (olfativas, acústicas, visuales, lumíni-
cas, etc.) que deben medirse para evaluar si son acep-
tables o no. El programa del proyecto debe tenerlas
en cuenta para poner remedio en caso de que se pro-
duzcan (espacio de amortiguación, distancia respecto
a los otros edificios, cubrición de espacios exteriores,
aislamiento, etc.).

15
¿Permite el programa
cierta flexibilidad?
Uno de los factores esenciales de un edificio respon-

sable en términos ecológicos es su durabilidad en el
tiempo. Además de adoptar medidas para garantizar la
perdurabilidad del edificio, el programa debe alentar su
adaptación a otros usos, los de las generaciones futuras,
que hoy desconocemos. Las exigencias programáticas
deben ser compatibles con los diferentes usos del edi-
ficio (incluso suscitarlos). El fomento de espacios muy
especializados puede suponer un freno a la hora de dar
respuesta a las necesidades futuras.
Hoy en día, las estaciones se transforman en museos,

los talleres, en viviendas. Es importante que el programa
prevea espacios y funcionamientos abiertos a otros
usos.

Programa de
necesidades
16
¿Qué espacios pueden ser
puestos en común?
En el momento de analizar el programa, es importante

detectar aquellos espacios cuyas funciones pueden
ser compartidas por diversos usuarios. A través del
hecho de compartir se pretende fomentar una econo-
mía de espacio y, por lo tanto, de recursos, así como la
posibilidad de crear lugares de intercambio y comu-
nicación entre los diferentes habitantes o usuarios.
En los proyectos de vivienda plurifamiliar, los trasteros,
las lavanderías y las zonas de acceso o de actividades
colectivas contribuyen a lograr una vida más conforta-
ble, algo difícil de alcanzar únicamente en cada unidad
de vivienda o en casas unifamiliares aisladas.

capítulo 3 :
Estudios
previos
Ya desde los primeros bocetos, deben tomarse
decisiones estratégicas, relativas a los volúme-
nes construidos, su orientación, su implanta-
ción en el lugar. Estas decisiones condicionarán
la capacidad del edificio para reducir su huella
ecológica.
Así, una orientación inadecuada o una compa-

cidad insuficiente penalizarán, de entrada, el
futuro balance energético del edificio.

Estudios previos
17
¿Crea el edificio un
microclima urbano?
La posición en el emplazamiento, la altura y la longitud

del edificio van a tener un efecto sobre el clima de su
entorno, en positivo o en negativo.
Ciertos proyectos pueden inducir microclimas urba-

nos beneficiosos: creación de espacios protegidos
del viento, bien asoleados. Otros, inducen microcli-
mas negativos: creación de obstáculos a la ventilación
urbana o, al contrario, aceleración de los vientos, zonas
en sombra y humedad, etc.
Según el acabado utilizado en la fachada y en el pavi-

mento se pueden generar masas térmicas importantes
que absorben la energía solar y la restituyen por la
noche, o bien pueden constituir superficies reflectantes
que resulten incómodas o deslumbren.
Mediante los edificios construidos se pueden crear

espacios exteriores públicos o privados que se convier-
tan en lugares de encuentro confortables.

18
¿Genera el proyecto molestias
en el entorno inmediato?
Ciertos espacios del edificio y las actividades que en él

se desarrollen pueden generar molestias en el entorno
inmediato: sonoras (juegos ruidosos, reparto de mer-
cancías, plazas de aparcamiento), olfativas (residuos,
cocinas), visuales (superficies reflectantes por ejemplo)
o luminosas (rótulos, pantallas, alumbrado nocturno).
Es importante que los espacios se implanten de forma

que estos impactos negativos sobre el vecindario se
minimicen.

Estudios previos
19
¿Qué pasa con las aguas
pluviales y las residuales?
Las aguas de lluvia procedentes de superficies estan-

cas (cubiertas, pavimentos exteriores) pueden ser
recogidas e infiltradas de forma natural, o bien conser-
varse y utilizarse para otros usos.
Depósitos y fosos pueden también recoger las aguas

residuales de los edificios para tratarlas de forma eco-
lógica.
Siempre que sea posible, la implantación de los volú-

menes debe reservar un lugar adecuado para ello, y la
topografía debe integrar los declives necesarios para
que estos efluentes se recojan de forma natural.

20
¿el nuevo edificio proyecta
sombra sobre los edificios
vecinos?
En función de su altura y orientación, el nuevo edificio

proyectará sombras sobre su entorno. En general, las
normas relativas a las alturas y distancias mínimas
tienen en cuenta este parámetro, pero no siempre es así.
Es necesario hacer un estudio de asoleo y de las som-

bras proyectadas sobre el entorno inmediato ya desde
los primeros estudios previos, para asegurar que la
nueva construcción no afectará al confort del entorno
habitado vecino, ya sea de los edificios o de los espa-
cios exteriores.
En ocasiones, la sombra proyectada puede ser bene-

ficiosa (en ciertos climas) o poco molesta, si los luga-
res no requieren asoleo directo o, incluso, si deben
protegerse de él. Sin embargo, no hay que privar a las
edificaciones vecinas de la posibilidad de utilizar los

aportes solares para cubrir sus necesidades energéti-
cas, incluso a largo plazo, aunque sea de forma parcial.


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A menudo, para justificar un derribo, se invoca a la falta

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La oferta de espacios que admitan diferentes pro-

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El ejemplo de las urbanizaciones y las viviendas aisla-

A la inversa, una densidad demasiado elevada puede

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