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Idioma español

Llegada a Isla Negra.

Voy llegando a Isla Negra, lo que siento en este momento no lo puedo describir. Parece
que voy hacia algo desconocido que me amenaza. Estoy angustiada.
Cuando se abrió el portón y entré, sentí que sólo en ese momento me daba cuenta de
mi gran soledad; nunca antes supe en esta casa, el significado de esa palabra. Me pareció que
había un gran silencio.
Siento un miedo paralizante, algo me detiene. Allí en la entrada todo está igual y todo
es diferente; de pronto, unos gemidos casi silenciosos, suaves, tiernos: es mi perra. La Panda se
restriega en mis piernas invitándome a entrar, como dándome valor, consuelo, con su calor y
ternura de perra. El jardín está florido. La naturaleza se ha vestido de fiesta, los árboles
vestidos de verde nuevo. Todo está gritando alegremente: llegó la primavera; mis ojos miran
esta fiesta de colores y algo muy adentro quiere protestar: no. No hay primavera, todo está
oscuro, como una inmensa cárcel, no hay ventanas, no hay aire, no hay luz, el mundo es un
pozo que se cierra y que me va estrangulando.

Matilde Urrutia de “Mi vida con Pablo Neruda”

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Idioma español

Llegada a Isla Negra.

Voy llegando a Isla Negra, lo que siento en este momento no lo puedo describir. Parece
que voy hacia algo desconocido que me amenaza. Estoy angustiada.
Cuando se abrió el portón y entré, sentí que sólo en ese momento me daba cuenta de
mi gran soledad; nunca antes supe en esta casa, el significado de esa palabra. Me pareció que
había un gran silencio.
Siento un miedo paralizante, algo me detiene. Allí en la entrada todo está igual y todo
es diferente; de pronto, unos gemidos casi silenciosos, suaves, tiernos: es mi perra. La Panda se
restriega en mis piernas invitándome a entrar, como dándome valor, consuelo, con su calor y
ternura de perra. El jardín está florido. La naturaleza se ha vestido de fiesta, los árboles
vestidos de verde nuevo. Todo está gritando alegremente: llegó la primavera; mis ojos miran
esta fiesta de colores y algo muy adentro quiere protestar: no. No hay primavera, todo está
oscuro, como una inmensa cárcel, no hay ventanas, no hay aire, no hay luz, el mundo es un
pozo que se cierra y que me va estrangulando.

Matilde Urrutia de “Mi vida con Pablo Neruda”

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