Yo soy Santa Rosa de Lima. Mi nombre de cuna fue, Isabel
Flores de Oliva, fui una laica consagrada a Dios y al prójimo, dado que vivir mi vida dedicada a servir a los necesitados. T/. Señor estamos llamados a ser santos viviendo con amor y ofreciendo el propio testimonio en las ocupaciones de cada día. Ayúnanos a ser santos hoy, en el estudio, en la tarea bien hecha, en el respeto y aprecio a mis compañeros, en las cosas pequeñas de esta etapa de mi vida. Padre nuestro …
Yo soy Santo Toribio de Mogrovejo: Estuve a cargo de organizar
la Iglesia católica. Planté los catecismos en los idiomas nativos de quechua y aimara en en el año 1582. T/. Señor hazme dócil a tu gracia y que tenga el corazón abierto a Ti, para elegirte una y otra vez, y que no tenga miedo, pues sé que tengo la fuerza de tu Espíritu que me hace Santo desde mi frágil realidad como ser humano que soy. Dios te salve María ….
Yo soy San Martín de Porres: demostré que la santidad es lo más
importante en la sociedad, a la que todos estamos invitados. T/. Señor nos llamas a la santidad diciéndonos «Sean santos, porque yo soy santo». Que todos los fieles, cristianos, de cualquier condición y estado, fortalecidos con tantos y tan poderosos medios de salvación, sean llamados por ti Señor, cada uno por su camino, a la santidad desde lo cotidiano. Dios te salve María …. Yo soy juan macías: Fui un fraile dominico, amigo personal de San Martín. Yo era un santo que ayudaba mucho a los pobres. Viví mi vida en la profunda oración, la penitencia y la caridad. T/. Señor, ilumina mi vida para que como creyente, discierna mi propio camino y saque a la luz lo mejor de mi persona, aquello que Tú has puesto en mí, y que no me desgaste intentando imitar algo que no ha sido pensado para mí.
Dios te salve María ….
Yo soy San Francisco Solano: fui un misionero que me dedicó a
predicar y evangelizar por toda Suramérica como fraile franciscano, en absoluta sencillez. T/. Señor, cada día tengo la oportunidad de crecer en santidad con pequeños gestos y obras, mi alegría, el saludo diario, la clase atendida, el respeto a mis compañeros, la comunicación con mis padres, la verdad anunciada... Ayúdame a vivir lo ordinario de manera extraordinaria. Dios te salve María …. ORACIÓN VOCACIONAL
Oh Jesús, Tú quieres que pidamos al Señor de
los campos, que envíe a ellos buenos operarios. Dígnate conceder a tu Iglesia, especialmente en nuestra Patria Peruana muchos santos sacerdotes, religiosos y religiosas, que procuren por su sagrado ministerio, la gloria del Padre y la salvación de los hombres. Madre bondadosa de los hombres; despierta las vocaciones que duermen; descubre las ocultas; anima las que vacilan; da fuerza a las que son combatidas y regálanos vocaciones maristas de hermanos y laicos. Enciende este noble ideal en los niños de las familias cristianas y en la generosa juventud del Perú. Amén. Para ser santo hay que ser feliz No hay santidad sin felicidad Para ser santo hay que ser feliz primero Para ser santo hay que ser sencillo
no hay santidad sin sencillez
Para ser santo hay que ser sencillo primero Para ser santo hay que estar un poco loco, un poco loco
Un poco loco para ser feliz
Un poco loco para ser sencillo Un poco loco para estar enamorado y loco por Dios Para ser santo hay que dar amor
No hay santidad si no hay amor
Para ser santo hay que trabajar y jugar Para ser santo hay que dar mucho amor primero Para ser santo hay que obedecer
No hay santidad sin obediencia
Para ser santo hay que obedecer primero Para ser santo hay que hacerse como un niño, como un niño para ser santo
Un poco loco para dar amor un poco loco para obedecer
Un poco loco para estar enamorado y loco por Dios Para ser santo hay que orar y cantar
No hay santidad sin oración
Para ser santo hay que orar y cantar primero Para ser santo hay que trabajar no hay santidad si no hay esfuerzo Para ser santo hay que trabajar primero
Para ser santo hay que trabajar y jugar todo a su tiempo
Y darse tiempo para orar y cantar Y darse tiempo para amar Y darse tiempo para estar enamorado y loco por Dios.
Un poco loco para dar amor
Un poco loco para ser feliz ¡Un poco loco para estar enamorado y loco por Dios.!