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EL CHAVISMO SIN CHAVES: LA DERIVA DE UN POPULISMO SIN

CARISMA.
REVISTA NUEVA SOCIEDAD
ENERO-FEBRERO 2016

El chavismo ha sido uno de los movimientos más fuertes de los últimos años en
Latinoamérica, aunque muchos argumentan su desaparición progresiva en el
tiempo acusa de la muerte su ilustre representante, Hugo Chávez. Nelly Arenas
sicóloga venezolana, investigadora sociopolítica, con postgrado en historia de
América y además candidata a doctora de ciencias políticas, nos argumenta
como el chavismo se catalogó por ser un régimen dotado de carisma y con una
construcción fuertemente emocional. Este factor fue determinante para que
Hugo Chávez pudiera continuar con su llamada revolución a pesar de la
adversidades que ya se comenzaban a vislumbrar al final de su mandato.

Arenas, en medio de su análisis específica el discurso político del chavismo


como estratégica comunicativa basada en lo que históricamente conocemos
como discurso emocional, un discurso que busca unificar y poner en lo más alto
a su líder, casi convirtiéndolo en un semidiós; como le fue por mucho tiempo para
el pueblo venezolano el “Comandante”. Con la llegada de Nicolás Maduro al
poder este poder carismático de la revolución se fue perdiendo y más aún con la
muerte de su líder natural.

La traspaso del poder de Chávez a Maduro se dio en consecuencia a la grave


enfermedad del comandante, por medio de un discurso muy emotivo en donde
Chávez invitaba a los ciudadanos a votar por su nuevo sucesor, exponiendo de
forma emotiva como este era el único que podía sacar adelante la revolución. Y
esto fue así durante un buen tiempo pero el pueblo comenzó a dudar del nuevo
líder; lo veían como un hombre débil, indica Arenas en artículo.

El argumento final del texto nos revela de manera temporal los esfuerzos del
nuevo gobierno, liderado por Maduro, en la construcción carismática por medio
de la imagen de Chávez. Además nos hace una breve analogía de lo ocurrido
con Stalin, líder de la unión soviética y su antecesor Lenín, ya que por medio de
la figura construida de Lenín ante la sociedad, Stalin logró convertiste de manera
exitosa en el nuevo líder. Aunque esto último fue intentado múltiples veces por
el gobierno de Maduro, fracasó la misma cantidad de veces, reduciendo el
número de seguidores a fines con la revolución; a esto sumado la gran crisis en
la renta del petróleo y las múltiples problemáticas de seguridad, alimentación y
salud en el país. Lo que nuevamente destaca el argumento de Arenas y su teoría
del carisma en la desaparición del Chavismo.

Si bien es cierto que la muerte de Chávez fue clave para la reducción del
fanatismo alrededor de la tan llamada revolución, es claro decir que esta ya se
encontraba en decaimiento sobre el final de su mandato, no solo por las
oposiciones que se tornaban mucho más sólidas, sino por los muchos problemas
sociales y censuras a los medios.

También hay que recalcar que el chavismo fue muy sólido aún cuando el
gobierno y sus ideológias no lo eran, dando razón a lo que Arenas nos sustenta
en el artículo, la construcción de la imagen chavista en el pueblo venezolano era
estratégicamente bien elaborada y su carisma con las masas que aún así no lo
apoyaban era imposible de negar. El pueblo giraba entorno a el y sus
ideológicas, daban razón a sus discursos y se reunían entorno a un enemigo
común.

Como conclusión podemos afirmar que el chavismo efectivamente está en


decadencia y la falta de un líder carismático pero sobretodo un líder robusto
genera mucho más dudas en los que aún persiguen la revolución en Venezuela.
Por último la construcción de un mensaje que unifique las ideas del populismo
en Venezuela requiere de gobierno que solucione y ataque de raíz las principales
problemáticas sociales para recuperar la confianza en un pueblo sin Dios.

Arenas, N. (2016). EL CHAVISMO SIN CHAVES: LA DERIVA DE UN


POPULISMO SIN CARISMA. Nueva Sociedad, (Enero-Febrero del 2016), 13-22,

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