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Dos amigos viajaban
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por el desierto y en un determinado
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punto del viaje discutieron.
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El otro, ofendido,
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sin nada que decir, escribió en la arena:
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"Hoy mi mejor amigo me pegó una bofetada en el rostro".
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Siguieron adelante y llegaron
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a un oasis donde resolvieron bañarse.
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El que había sido abofeteado
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y lastimado comenzó a ahogarse,
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siendo salvado por el amigo.
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Al recuperarse tomó un estilete y escribió en una piedra:
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"Hoy mi mejor amigo me salvó la vida".
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Intrigado, el amigo preguntó:
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-¿Por qué, después que te lastimé,
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escribiste en la arena, y ahora escribes en una piedra?
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Sonriendo, el otro amigo respondió:
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-Cuando un gran amigo nos ofende,
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deberemos escribir en la arena
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donde el viento del olvido y
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el perdón se encargarán
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de borrarlo y apagarlo; por otro lado,
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cuando nos pase algo grandioso,
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deberemos grabarlo en la piedra
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de la memoria del corazón donde viento ninguno en todo el
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mundo podrá borrarlo.
FIN
OTRO CUENTO PARA PRACTICAR
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Había un gorrión minúsculo que,
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cuando retumbaba el trueno
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de la tormenta,
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se tumbaba en el suelo y
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levantaba sus patitas hacia el cielo.
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-¿Por qué haces eso?
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-le preguntó un zorro.
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-¡Para proteger a la tierra,
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que contiene muchos seres vivos!
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-contestó el gorrión-.
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Si por desgracia el cielo cayese de repente,
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¿te das cuenta de lo que ocurriría? Por eso levanto mis patas
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para sostenerlo
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-¿Con tus enclenques patitas
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quieres sostener el inmenso cielo?
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-preguntó el zorro.
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-Aquí abajo cada uno tiene su cielo
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-dijo el gorrión-. Vete... tú no lo puedes comprender...
FIN
UNA FABULA
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Se encontraba una higuera
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a la orilla de un camino,
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y una zorra vio junto a ella una
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serpiente dormida.
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Envidiando aquel cuerpo tan largo,
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y pensando en que podría igualarlo,
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se echó la zorra a tierra al lado de
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la serpiente e intentó estirarse cuanto pudo.
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Tanto esfuerzo hizo, hasta que al fin,
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por vanidosa, se reventó.
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Un joven adolescente robó un libro
a uno de sus compañeros
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de escuela y se lo mostró a su madre.
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Ella no solamente se abstuvo de castigarlo,
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sino más bien lo estimuló.
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A la siguiente oportunidad se robó una capa y se la llevó a su
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madre quien de nuevo lo alabó.
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El joven creció y ya adulto
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fue robando cada vez cosas
de más valor hasta que un día fue capturado
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en el acto,
y con las manos atadas fue
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conducido al cadalso
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para su ejecución pública.
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Su madre lo siguió
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entre la multitud y se golpeaba
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violentamente su pecho de tristeza.
Al verla el ladrón dijo:
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-Deseo decirle algo a mi madre en su oído.
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Ella acercó su oído a él, y
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éste rápidamente mordió su oreja cortándosela.
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Su madre le reclamó
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que era un hijo desnaturalizado,
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a lo que él replicó:
-¡Ah! Si me hubieras reprendido
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en mi primer robo del libro aquel,
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nunca hubiera llegado a esto y
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ser condenado a una ingrata muerte.
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Instalado en la plaza pública, un adivino
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se entregaba a su oficio.
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De repente se le acercó un pueblerino,
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anunciándole que las puertas
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de su casa estaban abiertas y
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que habían robado todo lo que había en su interior.
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Levantóse de un saldo y corrió,
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desencajado y suspirando, para
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ver lo que había sucedido. Uno de los
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que allí se encontraban,
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viéndole correr, le dijo:
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-Oye, amigo: tú que te picas de
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prever lo que ocurrirá a los otros,
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¿por qué no has previsto
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lo que te sucedería a ti?
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Siempre hay personas
que pretenden dirigir lo que no
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les corresponde, pero
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no pueden manejar sus propios asuntos.
Otro cuento
1 Corintios 13:11
Cuando yo era niño, hablaba como niño,
pensaba como niño, razonaba como niño; pero
cuando llegué a ser hombre, dejé las
cosas de niño.
Hay tantas cosas para gozar y nuestro paso por la tierra es tan
corto, que sufrir es una pérdida de tiempo.
Y si tienes cáncer o sida, pueden pasar dos cosas y las dos son
buenas: si te gana, te libera del cuerpo que es tan molesto
(tengo hambre, tengo frío, tengo sueño, tengo ganas, tengo
razón, tengo dudas)... y si le ganas, serás más humilde, más
agradecido... por lo tanto, fácilmente feliz, libre del tremendo
peso de la culpa, la responsabilidad y la vanidad, dispuesto a
vivir cada instante profundamente, como debe ser.
Una bomba hace más ruido que una caricia, pero por cada
bomba que destruye, hay millones de caricias que alimentan a
la vida. Vale la pena, ¿verdad?.
Dios no te prometió días sin dolor, risa sin tristeza, sol sin lluvia,
pero él sí prometió fuerzas para cada día, consuelo para las
lágrimas, y luz para el camino.
Otro mensaje
Recuerde cada día y todos los días, que una parte muy
importante de usted mismo, es espiritual. No
olvide, unos pocos minutos cada día, su ser
interior. Allí radican sus más caros afectos, su
deseo de triunfar, su afán y su capacidad de
superación, la pasión con que ama a quienes ama,
el amor por su trabajo y su sentido de la
responsabilidad. Nunca lo olvide, en su ser
interior está lo más importante de usted
mismo.
La vida no es significado;
la vida es deseo.
Charles Chaplin
La posibilidad de realizar un
sueño es
lo que hace que la vida sea
interesante.
Paulo Coelho
La vida es aquello que te va sucediendo
mientras te empeñas en hacer otros
planes.
John Lennon
sentido a la vida.
Karl Wilhelm Von Humboldt
¿Que te parece leer es más interesante de lo que piensa mucha
gente?. Ya notaste que tu velocidad aumento y tu capacidad
para pasearte en la lectura bien pero ahora vamos al siguiente
paso la lectura de comprensión
(Recuerda practicar)
Cierto mercader envió a su hijo al más sabio de
todos los hombres para aprender el secreto de la
felicidad. El muchacho anduvo muchos días por el
desierto, hasta llego a un castillo, que se
encontraba en los altos de una montaña. El sabio
que el muchacho buscaba vivía allí.
Sin embargo, en vez de encontrar a un hombre santo,
nuestro héroe entró en una sala y vio una actividad
inmensa; mercaderes que entraban y salían, personas
que conversaban por los rincones, una pequeña
Hagamos otro
Un texto dice que al principio del mundo, cuando Dios decidió
crear a la mujer, encontró que había agotado todos los
materiales disponibles sólidos en el hombre y no tenía más de
que disponer.
Ante este dilema y después de una profunda meditación, hizo
esto: tomó la redondez de la luna, las suaves curvas de las olas,
la tierna adhesión de la enredadera, el trémulo movimiento de
las hojas, la esbeltez de la palmera, el tinte delicado de las
flores, la amorosa mirada del ciervo, la alegría del rayo del sol y
las gotas del llanto de las nubes, la inconstancia del viento y la
fidelidad del perro, la timidez de la tórtola y la vanidad del pavo
real, la suavidad de la pluma del cisne y la dureza del diamante,
la dulzura de la paloma y la crueldad del tigre, el ardor del fuego
y
Dorita era una niña que vivía en una granja de Kansas con sus
tíos y su perro Totó. Un día, mientras la niña jugaba con su
perro por los alrededores de la casa, nadie se dio cuenta de que
se acercaba un tornado. Cuando Dorita lo vio, intentó correr en
dirección a la casa, pero su tentativa de huida fue en vano. La
niña tropezó, se cayó, y acabó siendo llevaba, junto con su
perro, por el tornado. Los tíos vieron desaparecer en cielo a
Dorita y a Totó, sin que pudiesen hacer nada para evitarlo.
Dorita y su perro viajaron a través del tornado y aterrizaron en
un lugar totalmente desconocido para ellos. Allí, encontraron
unos extraños personajes y un hada que, respondiendo al deseo
de Dorita de encontrar el camino de vuelta a su casa, les
aconsejaron a que fueran visitar al mago de Oz. Les indicaron el
camino de baldosas amarillas, y Dorita y Totó lo siguieron.
FIN
FIN
Mi moraleja: