El Aire es el tercer elemento en la creaci�n, es un fuego penetrante, volatil,

difuso y m�vil, el aire no puede existir sin el fuego como cuerpo, ni tampoco sin
el agua, siendo esta como las v�sceras de ese cuerpo, pues el elemento Aire es
quien veh�culiza y le da movimiento al fuego; en �l confluyen lo c�lido y lo
h�medo, el ardor del fuego que es menguado por el fr�o del agua. Es decir que el
aire templa, como si de un fuelle se tratara, al calor ardiente del fuego, para que
alcance a penetrar todos los cuerpos creados gracias a la fluidez del agua y pueda
llevarlos al punto justo de su maduraci�n. Una de las funciones del aire es
transportar el roc�o de la noche para ser derramado sobre la tierra que contiene
los tres reinos de la creaci�n, a saber: mineral, vegetal y animal. Esta humedad
vivificante hace que las especies se nutran, germinen y maduren, dando frutos que
renuevan la creaci�n con cada nuevo ciclo.
El Aire es soplo de vida, la dulce exhalaci�n que hace que las flores se abran, los
animales se muevan, y las piedras exuden; a mayor fuego que agua este se dilata y a
mayor agua que fuego, este se contrae, d�ndonos as�, las mareas de las nubes en el
cielo, la calidez del d�a y la frialdad de la noche en la constante �solve et
coagula� del mundo.
Asi como el Fuego puro representa la mente supraconciente o "universal" el Aire,
representa a nivel psicol�gico la mente autoconsciente o "particular".