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PERIODISTA-.

¿Cómo se llevaba con las


matemáticas?
EL PAÍS DE LOS SIN-CEROS (Adaptación)
GOBERNADOR-. Bastante bien. Antes de
Autor: Gastón Quiroga empezar primer grado ya sabía todos los
números.
ACTO I
PERIODISTA-. ¿Cuál es su número preferido?
Escena I-En un canal de televisión.
GOBERNADOR-. El uno. Es el más simple, el
(Se escucha la cortina musical de un programa más fácil de escribir, y el más utilizado.
de entrevistas. El presentador aparece en
escena.) PERIODISTA-. ¿Así que el uno es su número
favorito?
PERIODISTA-. ¡Buenas noches...! ¡Tenemos
hoy una visita! ¡Sí, sí, sí! ¡Un invitado muy IGOR-. Y el mío también.
especial! Estimado público... ¡Señoras y
señores, recibamos con un fuerte aplauso al PERIODISTA-. ¿Y un número que le
señor Gobernador! (Se escuchan aplausos. desagrade?
Entra el Gobernador, seguido por Igor, su
secretario privado) GOBERNADOR-. El cero. Es un número
desagradable por su aspecto insulso y vacío.
GOBERNADOR-. Es un placer estar en su Un número que representa a lo que no existe
programa. no sirve para nada. Debería desaparecer.

PERIODISTA-. Damos también la bienvenida PERIODISTA-. Muy interesante ha resultado


al señor Igor, su secretario privada. la observación que el señor Gobernador ha
realizado con respecto a los números.
IGOR-. Gracias, y un saludo a todos.
IGOR-. Ya es tarde, señor. Debe ir a
GOBERNADOR-. Tengo poco tiempo, y descansar. Mañana temprano tiene una
quisiera responder ya mismo a todas sus reunión con el Ministro de Economía.
preguntas.
GOBERNADOR-. Si no le molesta, ya debo
PERIODISTA-.Vayamos a la primera: marcharme. Pero antes quisiera enviar saludos
Háblenos de su infancia. Señor Gobernador, a mi abuelita, que mañana cumple cien años.
¿cómo se portaba en la escuela?
PERIODISTA-. ¿Cien años? ¡Toda una vida!
GOBERNADOR-. Siempre fui un poco ¡Espero que su abuelita se sienta más joven
travieso, aunque nunca llegué a tener graves que nunca! Muchas gracias por su presencia en
problemas de conducta. nuestro programa. (Habla al público) Y
ustedes, ya saben: Los ceros no sirven para
PERIODISTA-. ¿Qué recuerdo tiene de sus nada...
maestros?
LOS TRES-. ¡Deberían desaparecer...!
GOBERNADOR-. Muy buen recuerdo.

IGOR-. Salvo de la de quinto grado, que lo


suspendió por tres días cuando casi incendia la Escena II-Al otro día, en la Casa de
biblioteca. Gobierno.
OTTO-. como de otra... ¡Otto! ¿Me estás prestando
atención?
CANTO I
OTTO-. Sí, señor Igor.
¡Tengo un gran problema, tengo un
problemón! IGOR -. Pues nadie lo diría. ¿Qué es lo que
haces?
¡En este gobierno todo lo hago yo!
OTTO-. Debo terminar estas cuentas para
¡Soy el secretario del secretario! poder entregar unas planillas que...

¡Todo lo hago yo! ¡Todo lo hago yo! IGOR -. ¿Aún no has completado esas
planillas? Debiste haberlas entregado ayer.
El señor ordena, el lo delega,
OTTO-. Ya lo sé. Y todas las cuentas estaban
¡Y todo lo hago yo! hechas. Pero los resultados de hoy no son los
mismos que los de ayer. Han cambiado. He
Mientras los señores dan explicaciones estado sacando cuentas toda la mañana y no
logro resolver esta multiplicación.
Por televisión, ¡todo lo hago yo!
IGOR -. (Arrebatándole la libreta) Veamos...
¡Todo lo hago yo! ¿Dos por cinco? ¿Con esto has estado
perdiendo el tiempo toda la mañana? ¿Esta es
Soy el secretario del secretario la cuenta que no puedes resolver...? ¿Dos por
cinco? ¡Dos por cinco es diez!
del Gobernador.
OTTO-. Ya lo sé. Y así ha sido desde que yo
¡Todo lo hago yo! ¡Todo lo hago yo! iba a la escuela primaria. Pero parece que las
cosas han cambiado, porque toda la mañana
OTTO-. ¡Desde la limpieza hasta las cuentas, he sacado la misma cuenta. Y siempre me ha
todo lo hago yo! (Saca cuentas con un lápiz y dado uno.
una libreta.) Dos por dos cuatro, dos por tres
seis, dos por cuatro ocho, dos por cinco... IGOR -. ¡Qué estupidez! ¡Dos por cinco uno!
Uno. ¿Dos por cinco uno? ¡No puede ser! Dos Seguramente has estado bebiendo. ¡Dame un
por dos cuatro, dos por tres seis, dos por lápiz! ¡Dos por cinco uno! Es la insensatez más
cuatro ocho, dos por cinco... Es inútil. ¡Me doy grande que oí en mi vida. Dos por cinco es,
por vencido! ¡Las matemáticas no son mi fue, y siempre será diez. ¡Este lápiz no escribe!
fuerte!
OTTO-. ¿Ha visto? El lápiz escribe todos los
IGOR-. (Entrando) Buenos, días, Otto. números menos el cero.

OTTO-. Buenos días. IGOR -. Supongo que tu lápiz ha estado


bebiendo contigo. Intentaré con mi lapicera.
IGOR-. ¿Me has visto anoche por televisión?
OTTO-. Lo he intentado con una docena de
OTTO-. Sí, la he visto. lápices, lapiceras, tizas y pinturitas de colores.
Todos se niegan a escribir el cero.
IGOR -. Todos me dijeron que me parecía a
Bratt peat. Hay quienes lucen mejor
personalmente, pero yo... tanto de una forma
IGOR -. En tal caso multaremos al sindicato de IGOR -. ¿Dónde están los resultados que
lápices. ¿Cómo pueden negarse a escribir un debiste entregarme ayer por la tarde?
cero?
OTTO-. ¿Dónde están?
OTTO-. No me entendió. No son los lápices los
que se niegan a escribir, sino los ceros que se IGOR -. ¿Dónde están?
niegan a aparecer.
OTTO-. ¿Dónde están?
IGOR -. (Intentando hacer la cuenta en la
libreta) ¡Es inútil! ¡Dos por cinco da uno! El IGOR -. Usted me pidió esos resultados y yo
cero no quiere aparecer en la hoja. se los encargué a Otto, señor.

OTTO-. ¿Cuánto es cinco por cuatro? GOBERNADOR- ¿Adónde están los resultados,
Otto?
IGOR -. ¡Qué pregunta! ¡Cinco por cuatro es
veinte! OTTO-.Señor Gobernador, me temo que los
resultados no se encuentran.
OTTO-. Trate de escribirlo.
GOBERNADOR-. ¿Los has perdido?
IGOR -. ¡No puedo! Cinco por cuatro... ¡dos!
¡El cero no aparece! OTTO-. No exactamente.

OTTO-. Los ceros me han vuelto loco toda la GOBERNADOR-. ¿Los han robado?
mañana. ¡Se niegan a aparecer en las cuentas!
OTTO-. No exactamente.
IGOR -. Trae una calculadora.
GOBERNADOR-. ¿Adónde están los
OTTO-. Ya hice la prueba. Tampoco hay ceros resultados?
en las calculadoras.
OTTO-. Me temo que se han marchado, señor.
IGOR -. ¡Esto es increíble!
GOBERNADOR-. ¿Que se han marchado?
OTTO-. ¡Realmente increíble! ¿Adónde?

IGOR -. Debemos informar al Gobernador. OTTO-. No lo sé. Quizás se hayan ido a visitar
Aunque difícilmente nos crea. a algún pariente lejano, o tal vez se han
tomado vacaciones.
OTTO-. Nunca van a cerrar bien las cuentas, si
los ceros brillan por su ausencia. (Entra el GOBERNADOR-. ¡Igor!
Gobernador)
IGOR -. ¡Señor!
ESCENA III
GOBERNADOR-. ¿Hasta cuándo tendré que
GOBERNADOR-. ¡Igor...! soportar las burlas de tu secretario?

IGOR Y OTTO-. ¡Señor Gobernador...! IGOR -. Creo que Otto no se está burlando,
señor.
IGOR -. Hablábamos de usted, justamente.
OTTO-. Estoy diciendo la verdad.
OTTO-. ¡Justamente!
IGOR -. Tenemos malas noticias. GOBERNADOR-. ¿Y quién es el responsable
de semejante barbaridad?
OTTO-. Más que malas son malísimas.
IGOR -. Creo que sé quien es la responsable:
IGOR -. Mejor que le cuente Otto. ¡La goma de borrar! Seguramente ha estado
bailando sobre las hojas y ha borrado a todos
OTTO-. ¡Los ceros me han roto el coco! los ceros.

IGOR -. ¡Parece cosa de locos! OTTO-. Lo dudo. En ese caso podrían volver a
escribirse, tarea que resulta imposible.
GOBERNADOR-. ¡Igor!
GOBERNADOR-. Otto tiene razón. Debe haber
IGOR -. ¡Señor! otro responsable.

GOBERNADOR-. ¡Exijo una explicación! IGOR -. ¿Recuerda el señor, los comentarios


realizados anoche en ese programa de
IGOR -. Está bien, señor. Al parecer... los televisión?
ceros...
GOBERNADOR-. ¿Acerca de mi maestra de
IGOR Y OTTO-. ¡Se han escapado de la tabla quinto grado?
de multiplicar!
IGOR -. No, señor. Me refiero a los
GOBERNADOR-. ¿Qué? comentarios acerca de los ceros.

IGOR -. Sabía que no iba a creernos. Los OTTO-. Yo lo escuché, señor.


ceros, señor, no aparecen en la tabla del dos.
IGOR -. Todo el país lo escuchó.
OTTO-. Ni en la del tres.
OTTO-. Usted dijo que los ceros no servían
IGOR -. Ni en ninguna. Es imposible verlos. para nada.

OTTO-. O escribirlos IGOR -. Que daba lo mismo si estaban o no.

IGOR -. Se han ocultado quién sabe dónde. IGOR Y OTTO-. ¡Qué debían desaparecer!

OTTO-. Tal vez estén entre nosotros. GOBERNADOR-. No pueden habérselo


tomado tan a pecho. Un número no tiene
IGOR -. Tal vez nos estén espiando. derecho a ofenderse, y luego escaparse como
si nada de las tablas de multiplicar.
OTTO-. Tal vez se hayan muerto.
IGOR -. De hecho se han escapado, señor.
IGOR -. El asunto es...
OTTO-. Así es.
IGOR Y OTTO-. ¡Que nos hemos quedado sin
ceros! GOBERNADOR-. Llamaré a los demás
números. Ellos podrán darnos más
GOBERNADOR-. ¿Sin ceros? información. ¡Que se suspendan por ahora
todas las operaciones matemáticas! ¡Y no
OTTO-. No ha quedado ni uno. ¡Hasta se han informen a la prensa! Ya saben como son los
ido de las calculadoras! periodistas. Les gusta escandalizar y harán de
esto un problema más grave de lo que CALENDARIO-. No, no, no, no...
realmente es. (Sale.)
OTTO-. ¿Ha visto a alguno?
Escena IV
CALENDARIO-. No, no, no, no...
IGOR -. ¿Has escuchado, Otto? Ni una palabra
a nadie. IGOR -. ¿Sabe cuándo volverán?

OTTO-. No necesito que me lo repita. (Entra el CALENDARIO-. No, no, no, no...
"Calendario". Su cuerpo es un gran block de
hojas. En la primera se puede leer "18 de Abril) OTTO-. ¡Bueno, ya! ¡Basta de no, no! ¿Cuál es
la información que viene a traer?
CALENDARIO-. Buenos días.
CALENDARIO-. La información es que los
IGOR -. ¿Quién es usted? ceros no sólo se han ido de la tabla de
multiplicar. También han desaparecido del
CALENDARIO-. Soy el Calendario Oficial, y Calendario.
vengo a hablar con el Gobernador.
IGOR -. ¿Cómo dice?
IGOR -. El señor Gobernador está muy
ocupado. OTTO-. ¡Lo que faltaba!

OTTO-. ¡Ocupadísimo! CALENDARIO-. Y no daré mayor información


hasta que me atienda el Gobernador en
IGOR -. Dudo que pueda atenderlo. persona

CALENDARIO-. No me iré de aquí hasta que IGOR -. ¡Otto, ve a buscarlo! ¡Rápido! (Sale
escuche lo que vengo a decir. Otto) ¿Cómo han podido los ceros escaparse
del Calendario?
IGOR -. El señor Gobernador está atendiendo
en estos momentos asuntos de suma CALENDARIO-.Como lo hace todo el mundo.
importancia. ¿Acaso no se escapan los animales de sus
jaulas, los presos de las cárceles, o los locos de
CALENDARIO-. ¿Cómo cuáles? los manicomios? Pues bien, esta vez los ceros
se han escapado del Calendario.
IGOR -. Secreto de estado.
IGOR -. Lo dice usted de una forma tan
OTTO-. Los ceros se han escapado de la tabla sencilla. No puedo entender cómo una multitud
de multiplicar. de ceros puede haber escapado sin que nadie
los haya visto.
IGOR -. ¡Otto!
CALENDARIO-. Yo los he visto.
OTTO-. Perdón.
IGOR -. ¿Qué dice? ¿Ha visto a los ceros
CALENDARIO-. No me extraña. Justamente escapar?
traigo información acerca del tema.
CALENDARIO-. Así es.
IGOR -. ¿Acaso usted sabe dónde se han ido
los ceros? IGOR -. Al señor Gobernador le encantará oír
esto.
GOBERNADOR-. (Vuelve seguido por Otto) CALENDARIO-. No la abrieron. Pasaron por
¿Quién me llama? debajo. Aunque hubo algunos que saltaron y
huyeron por el agujero de la cerradura.
IGOR -. Señor, el Calendario Oficial quiere
hablar con usted. Los ceros también han huido GOBERNADOR-. ¿Cuántos eran?
del Calendario, y él los vio cuando escapaban.
CALENDARIO-. ¡Miles! ¡Imagínese cuántos
GOBERNADOR-. ¿Es eso cierto? ceros hay en un Calendario adulto, completo y
prolijito como yo!
CALENDARIO-. Totalmente.
GOBERNADOR-. Mientras ellos huían, ¿usted
GOBERNADOR-. Cuénteme todo lo que sepa. no pensó en seguirlos?
¡Igor!
CALENDARIO-. Pensé que no valdría la pena
IGOR -. ¿Señor? preocuparse por un número que prácticamente
no existe. Pero esta mañana... ¡descubrí algo
GOBERNADOR-. Toma nota. espantoso!

IGOR -. ¡Otto! GOBERNADOR-. ¿Qué?

OTTO-. ¿Sí? CALENDARIO-. Fíjese usted mismo. (Señala


su panza, en la que se lee claramente "18 de
IGOR -. ¡Toma nota! Yo iré a interrogar al Abril")
resto de los números. (Sale, y Otto comienza a
anotar las declaraciones del Calendario) GOBERNADOR-. Dieciocho de abril. ¡Qué
novedad! Todos sabemos que hoy es dieciocho
GOBERNADOR-. Señor almanaque... de abril.

CALENDARIO-. ¡Calendario! CALENDARIO-. ¿Qué fecha es mañana?

GOBERNADOR-.Como sea. Lo escucho. GOBERNADOR Y OTTO-. Diecinueve de abril.

CALENDARIO-. Esta madrugada, estaba yo CALENDARIO-. Fíjense. (Levantan una hoja y


descansando sobre el escritorio de su despacho se lee:"19 de Abril") ¿Y pasado mañana?
cuando comencé a sentir un cosquilleo en la
barriga. Fue entonces cuando noté que un cero GOBERNADOR Y OTTO-. Veinte de abril.
se salía del número diez, dejando al uno solito
y abandonado. En pocos segundos, todos los CALENDARIO-. Fíjense. (Levantan otra hoja,
ceros restantes se salieron de mis hojas, y se lee": 2 de Abril")
saltaron al escritorio, y huyeron en forma
despavorida. GOBERNADOR Y OTTO-. ¡Falta el cero!

GOBERNADOR-¿Corrían? CALENDARIO-. De manera que en dos días


será dos de abril, y luego tres, y cuatro, y así
CALENDARIO-¡Señor Gobernador! ¿Cómo sucesivamente hasta llegar al diez, que ya no
puede correr un cero si no tiene piernas? será diez, sino uno.
¡Rodaban!
OTTO-. ¡Luego del nueve de abril, vendrá el
GOBERNADOR-. ¿Cómo pudieron abrir la primero de mayo!
puerta?
CALENDARIO-. De modo que si los ceros no CALENDARIO-. ¡Calendario...!
aparecen, todos los meses del año tendrán
nueve días. GOBERNADOR-. Prometo que pronto
hallaremos una solución.
OTTO-. ¡El tiempo pasará rapidísimo!
CALENDARIO-. Así espero, señor Gobernador.
CALENDARIO-. Y pronto llegaremos al año Me retiro.
cinco mil, que como no tendrá ceros, será el
año cinco. GOBERNADOR-. Hasta luego. Otto,
acompáñalo hasta la puerta. (Sale el
GOBERNADOR-. (Algo confundido) ¡Esto es Calendario. Otto lo acompaña.)
ridículo! ¡Después del nueve de abril viene el
diez de abril! ¡Aunque le falte el cero, sigue Escena V
siendo un diez!
OTTO-. (Volviendo) Señor, el señor Fortunato
OTTO-. ¡Señor! Fortunati acaba de llegar y aguarda impaciente
desde hace una hora.
CALENDARIO-. (Indignado) ¡Cómo dice
semejante barbaridad! GOBERNADOR-. ¿Cómo una hora si acaba de
llegar?
OTTO-. ¡Que no lo escuche la oposición!
OTTO-. Sí, hace seis minutos. ¿Olvida el señor
CALENDARIO-. ¿Dónde se ha visto un diez sin que la hora no tiene ya sesenta minutos sino
cero? seis?

OTTO-. ¡Es inconcebible! GOBERNADOR-. Es verdad. Hazlo pasar.


(Otto va hacia la puerta, pero la señor
CALENDARIO-. Si al diez le falta el cero ya no Fortunato ya ha entrado. Otto se retira.)
es más un diez. ¡Es un uno y se acabó!
FORTUNATO-. ¡Aquí estoy! ¡Y exijo una
GOBERNADOR-. ¿Esto significa que no sólo explicación!
hemos perdido al cero sino también al diez?
GOBERNADOR-. ¿Qué explicación?
CALENDARIO-. Y al veinte.
FORTUNATO-. ¿Qué explicación? ¡Qué
OTTO-. Y al treinta. explicación! ¡Tenía hasta ayer trescientos
pastores ingleses custodiando mi mansión y
CALENDARIO-. Y a todos los números que sólo me quedan tres! ¡De mis ciento ocho
necesitaban un cero para poder existir. mucamos han quedado dieciocho, y mi fortuna
de doscientos millones de pesos se ha reducido
GOBERNADOR-. ¡En buen embrollo nos a dos! ¿Y el señor Gobernador se da el lujo de
hemos metido! preguntarme qué explicación?

CALENDARIO-. No podré cumplir con mis GOBERNADOR-. Señor Fortunato Fortunati,


obligaciones mientras las cosas no vuelvan a la me temo que hay para esto una sola
normalidad. explicación.

GOBERNADOR-. Muy bien, señor FORTUNATO-. ¿Una sola?


almanaque...
GOBERNADOR-. No puede haber más de FORTUNATO-. En realidad... Es difícil ser feliz
nueve. cuando no se tiene con quien compartir tanta
riqueza.
FORTUNATO-. ¿Qué dice?
GOBERNADOR-. Sin embargo conozco a
GOBERNADOR-. Digo que los ceros se han mucha gente que la admira y que quisiera
marchado y sólo nos quedan los números del ganarse su amistad.
uno al nueve.
FORTUNATO-. ¡Bah..., sólo por interés! Así ha
FORTUNATO-. ¿Está diciendo que los ceros se sido siempre. Nunca nadie me ha querido por
han fugado? lo que soy. Y al final de cuentas, mi corazón es
el más solitario y pobre de los corazones.
GOBERNADOR-. Así es.
FORTUNATO-.
FORTUNATO-. ¡Es ridículo!
CANTO II
GOBERNADOR-. Así es.
Soy el pobre Fortunato Fortunati,
FORTUNATO-. ¡Es absurdo!
el hombre más rico del país.
GOBERNADOR-. Así es.
He viajado por El Cairo y Nagasaki,
FORTUNATO-. ¡Es un inútil!
por New York, por Londres y París.
GOBERNADOR-. Así es... ¿Cómo...?

FORTUNATO-. ¿Cómo es posible que un


Gobernador provoque una huelga de números, Mi mansión es puro brillo, ¡todo un lujo!
sólo por tener la lengua más rápida que la
cabeza? ¡He perdido por su culpa toda su Un palacio estilo bien francés,
fortuna! ¡Doscientos millones de pesos! ¡Creo
que voy a desfallecer! con setenta habitaciones en desuso,

GOBERNADOR-. Señor Fortunati, ¿cuál es su y un salón para tomar el café.


grupo sanguíneo?

FORTUNATO-. Cero, RH positivo.


Tengo cinco limousines, muchos autos,
GOBERNADOR-. El grupo cero ha
desaparecido. No hay sangre para propagarla, un tractor, tres barcos y un avión...
así que le ruego que mantenga la calma.
Un cayado para cada día del año,
FORTUNATO-. (Al borde del llanto) ¡Cómo
puedo calmarme si mis autos cero kilómetro ya y un sólo y triste corazón...
son todos viejos, y un billete de dos pesos es
todo lo que me queda! ¡Y un sólo y triste

GOBERNADOR-. Señor Fortunati, ¿era usted corazón...!


feliz ayer, cuando los ceros estaban en su
lugar, y sus bienes valían una fortuna? ¡Y un sólo y triste corazón...!
desaparecer del almanaque la fecha de mi
casamiento!
FORTUNATO-. Acabo de darme cuenta de que
siempre he sido rico, pero pobre por dentro. VOZ EN OFF-. ¡En el aire! (Música de un
programa de noticias. Ambos miran hacia una
GOBERNADOR-. Fíjese qué poco importan las su-puesta cámara.)
cosas materiales. Ayer valían una fortuna y hoy
han perdido todo su valor. ASISTENTE -. ¡Reiteramos...! ¡Noticia del día!

FORTUNATO-. Tal vez ahora que ya no soy PERIODISTA-. Los ceros han desaparecido
millonario encuentre personas que me quieran del país.
de verdad, y a las que no les preocupe cuánto
guardo en mi caja fuerte. ASISTENTE -. Es la primera vez en la historia
que los números hacen paro.
GOBERNADOR-. Que así sea.
PERIODISTA-. Ya no se encuentran ceros en
FORTUNATO-. Hasta pronto señor los almanaques ni en las cajas registradoras.
Gobernador, y espero que esos números
traviesos no le creen más problemas. ASISTENTE -. No se podrá retirar dinero de
las cuentas bancarias hasta que los ceros
GOBERNADOR-. Eso espero, señor Fortunato. vuelvan a su lugar.
Eso espero... (Queda pensativo mientras
Fortunato se marcha.) PERIODISTA-. El colectivo de la línea ciento
tres está haciendo el recorrido de la línea trece
Escena VI-En el canal de televisión.
ASISTENTE -Si usted vive en un edificio alto
(El mismo presentador del programa anterior recuerde que el décimo piso ya no existe.
es ahora conductor de un noticiero. Entra junto
a su asistente, también conductor) PERIODISTA-. Los que antes vivían en el
décimo, ahora viven en el primero.
ASISTENTE-. ¿Alguna novedad?
ASISTENTE -. El canal cincuenta y el canal
PERIODISTA-. Todas malas. cinco emiten la misma programación.

ASISTENTE -. ¿Qué hay de los ceros? PERIODISTA-. Recordamos a las amas de


casa que la harina cuatro ceros no se consigue
PERIODISTA-.Ni rastros. Parece que se los ha ya en ningún supermercado.
llevado el viento.
ASISTENTE -. Pronóstico del tiempo: la
ASISTENTE -. ¿Y qué hay de su novia? No temperatura máxima pronosticada para
podrán casarse. mañana es de veintinueve grados, y la mínima:
dos grados bajo... ¡Dos grados bajos!
PERIODISTA-. ¿Cómo?
PERIODISTA-. En todos los hospitales se
ASISTENTE -. Se iba a casar veinte de abril y necesita sangre del grupo cero. A quienes
el veinte de abril ya no existe. ¡Le falta el cero! puedan suministrarla se les ruega llamar a los
teléfonos: cero cuarenta y cuatro... ¡Cero
PERIODISTA-. ¡Es la primera vez que alguien cuarenta y cuatro! ¡Dios mío! ¡No habrá nadie
acepta casarse conmigo, y algún gracioso hizo que pueda comunicarse!
ASISTENTE -. La situación es caótica. El día GOBERNADOR-. ¡Dios mío! ¡El número cien
de hoy ha sido desesperante para muchos. lleva dos ceros!
Esperemos que mañana todo vuelva a la
normalidad. IGOR -. Que ya no están.

PERIODISTA -. yo iba a casarme el veinte de GOBERNADOR-. ¿Adónde está mi abuela?


abril. Si algún cero nos está mirando, le pido...,
les ruego... ¡le suplico...!, que por favor... IGOR -. Está con su señora. Y fíjese que al no
haber ceros, la pobre cree que ha cumplido un
ASISTENTE -. ¡Vuelvan a sus lugares! año y ha vuelto a usar chupete.

Escena VII-En la Casa de Gobierno. GOBERNADOR-. ¡No…!

IGOR -. Señor, su esposa está en el teléfono. IGOR -. Ha perdido el habla, balbucea cosas
ininteligibles, ha dejado su bastón, y gatea
GOBERNADOR-. No puedo atenderla ahora. como un bebé por toda la casa.
Que llame más tarde.
GOBERNADOR-. ¿Mi abuela?
IGOR -. Ya se lo dije, señor. Pero parece que
es urgente. Está muy preocupada. IGOR -. Sí, señor. En este momento su esposa
está dándole la mamadera.
GOBERNADOR-. No es para menos. ¿Quién
no lo está? GOBERNADOR-. Esto no puede seguir así.
Hay que hallar a los ceros cueste lo que cueste
IGOR -. Dice que debe ir a ver a su abuela en o en pocas horas… ¡nos volveremos com-ple-
forma inmediata. ta-men-te-lo-cos…!

GOBERNADOR-. ¡Mi abuela! ¡Hoy cumple CANTO III


años! ¡Con todo este lío lo había olvidado!
GOBERNADOR- ¡Qué problemón! ¡No
IGOR -. Justamente de eso se trata. Parece puede ser!
ser que su abuelita se encuentra un poco
confundida. ¿Cómo es que nadie los puede ver?

GOBERNADOR-. ¿Y quién no? ¡Se han escapado sin vacilar

IGOR -. La desaparición de los ceros la ha de la tabla de multiplicar!


afectado mucho. Y el problema la ha
tocado muy de cerca.

GOBERNADOR-. ¿Qué tan cerca? IGOR -. Los maestros de la


escuela,
IGOR -. ¿Recuerda usted cuántos años cumple
hoy su abuelita? los soldados del cuartel...

GOBERNADOR-. ¡Cómo no! Cien años. Todo el mundo está en las calles

IGOR -. Eso en la teoría, pero en la práctica… revisando por doquier...


TODOS-. Gobernador-. ¡Hemos llegado al colmo! ¡La
iglesia también ha entrado en crisis! (Lee)
Nadie puede saber dónde se han de esconder,
"Los diez mandamientos ya no existen. Sólo ha
abajo del sofá o adentro de una nuez. quedado uno. La gente dice mentiras como
nunca, y hasta los más decentes han salido a
Busquen en la sopa, en la cama y entre la robar. Dios que nos proteja con su bendición."
ropa. ¡El país se está hundiendo! ¡Quisiera saber
dónde se han metido mis asistentes!
Hurguen en cada rincón.
(Entran Otto e Igor. Casi peleándose por
Es tan triste y tan feo hablar.)

que desaparezca el cero IGOR -. ¡Señor Gobernador!

como el tres o el dos. OTTO-.¡Señor Gobernador!

OTTO-. GOBERNADOR-.¿Qué pasa?

¡Qué problemón! ¡Qué insensatez! IGOR -.Tenemos que decirle algo.

¿Cómo han huído? ¡Quiero saber! OTTO-.¡Algo muy importante!

GOBERNADOR-. GOBERNADOR-.¡No quiero más malas


noticias!
¿Adónde fueron? ¿Dónde estarán?
IGOR -.Es algo muy bueno.
¡Quizás ya nunca regresarán!
OTTO-.¡Buenísimo!
IGOR -.
GOBERNADOR-.¿De qué se trata?
Los bomberos, las abuelas,
IGOR Y OTTO-. ¡Hemos encontrado un cero!
policías y bebés...
GOBERNADOR-. ¿Qué?
¡Todo el mundo está en las calles
OTTO-. Lo encontré yo.
a punto de enloquecer!
IGOR -. ¡Yo lo vi primero!

OTTO-. Porque yo se lo había señalado antes.


ACTO II
IGOR -. ¡No es cierto!
Escena I-En la Casa de Gobierno. Un día
después. GOBERNADOR-. ¡Basta! ¿Adónde está ese
cero? ¡Quiero verlo!
(Entra el Gobernador leyendo una carta. Se lo
ve nervioso, preocupado.) IGOR -. Se lo hemos traído.

OTTO-. ¡Fui yo el que lo trajo!


GOBERNADOR-. ¿Está aquí? ¿Está vivo? haciendo cosas de chiquitos! Respóndame:
¿Adónde se oculta el resto de los ceros?
IGOR Y OTTO-. ¡Por supuesto, señor
Gobernador! O-. No lo sé.

GOBERNADOR-. Háganlo pasar. Quiero IGOR -. ¡Qué caradura!


interrogarlo. (Salen Otto e Igor.) Este cero me
dará la solución. Lo obligaré a que me informe OTTO-. ¿Cómo le falta así el respeto al
el paradero de sus compañeros. De lo contrario Gobernador?
se lo someterá a juicio por complot y
encubrimiento. (Vuelven Otto e Igor, traen al GOBERNADOR-. ¿Pretende hacerme creer
supuesto cero atado y amordazado.) que no sabe adónde se han ido los demás
ceros?
ESCENA II
O-. Si lo supiera se lo diría. Pero no tengo la
OTTO-. Debemos tener mucho cuidado. menor idea, así que déjeme ir.

IGOR -. Puede intentar escaparse. OTTO-. No podemos dejarlo ir. ¿Acaso no sabe
lo que está ocurriendo allí afuera? Todos están
OTTO-. Se resistía a venir. desesperados tratando de encontrar un cero. Si
lo vieran caminando por ahí, se le tirarían
IGOR -. Estaba medio dormido cuando lo encima.
capturamos.
IGOR -. ¡Lo secuestrarían!
OTTO-. ¿Capturamos? ¡Fui yo el que lo
capturé! OTTO-. Lo encerrarían en una caja fuerte.

IGOR -. ¡No mientas, Otto! O-. Sólo los idiotas como ustedes harían
tamaña estupidez.
GOBERNADOR-.¡Igor!
IGOR -. ¡Nos llamó idiotas!
IGOR -. ¡Señor!
OTTO-. ¡En presencia del Gobernador!
GOBERNADOR-. No informen a la prensa
hasta que sepamos dónde está el resto de los GOBERNADOR-. Díganos dónde se esconden
ceros. Que esto sea un secreto de estado. los demás y lo dejaremos ir. La iglesia ha
¡Desátenlo!(Igor y Otto obedecen). perdido sus diez mandamientos, las fechas han
cambiado, y los números andan corriendo de
OTTO-. Fíjese qué buen cero, señor. No pude aquí para allá sin saber dónde deben pararse.
haber hallado uno mejor. Todos han enloquecido. ¡No podemos vivir sin
ceros!
IGOR -. Es un cero gordito y bien dibujado. Se
nota que lo ha hecho algún experto en la O-. ¿No dijo usted por televisión que los ceros
materia. no servían para nada? ¿Que eran
insignificantes? ¿Que debían desaparecer?
GOBERNADOR-. ¡Déjenme interrogarlo! Muy
bien, señor... Usted y sus compañeros han GOBERNADOR-. ¡Me retracto! Nunca pensé
cometido una falta muy grave. ¿Le parece que un cero pudiera complicarme tanto la vida
bien? ¡Fugarse de un día para el otro sin avisar
a las autoridades! ¡Un número tan grandote O-. Pues dígaselo a los ceros.
GOBERNADOR-. ¡Se lo estoy diciendo a OTTO-. Dijo:"Otto, allí hay un cero. ¡Atrápalo!"
usted!
IGOR -. ¡No es verdad!
O-. ¡Yo no soy un cero!
GOBERNADOR-. ¡Igor!
IGOR -. ¡Qué cero más mentiroso!
IGOR -. ¡Señor!
OTTO-. Los números cada vez vienen peores...
GOBERNADOR-. ¿Dónde encontraron a este
GOBERNADOR-. ¿Así que no es un cero? sujeto?
¿Podría explicarme entonces, qué cosa es
usted? IGOR -. Lo encontramos en una rotisería.

IGOR -. ¿Qué barbaridad irá a decir ahora? GOBERNADOR-. ¿En una rotisería?

OTTO-. ¡Otra mentira más! IGOR -. Sí, señor.

O-. Soy la letra "O" mayúscula. GOBERNADOR-. ¿Acaso suelen ir los ceros a
comprar comidas para llevar?
GOBERNADOR, IGOR Y OTTO-. ¿Queeeé...?
IGOR -. No, señor. No se encontraba dentro
O-. Soy la "O" mayúscula. de la rotisería sino arriba.

IGOR -.Parece un cero... GOBERNADOR-. No entiendo.

OTTO-. ¡Es idéntica! IGOR -. Arriba, casi llegando al techo. Lo diré


con otras palabras: Otto y yo hallamos al
GOBERNADOR-. ¿Cómo sabemos que está sujeto en una rotisería. En el letrero: "RO-TI-SE
diciendo la verdad? RI-A".Allí, entre la R y la T estaba el sujeto.

O-. Pregúnteles a esos dos tontos de dónde me GOBERNADOR-. ¿En un letrero?


sacaron.
IGOR -. Entre la R y la T: "ROT-ISERIA"
GOBERNADOR-. ¡Igor!
O-. ¿Puedo irme ya?
IGOR -. ¡Señor!
GOBERNADOR-. ¡Igor!
GOBERNADOR-. ¿De dónde sacaron a este
sujeto? IGOR -. ¡Señor!

IGOR -.¡Otto lo encontró! GOBERNADOR-. ¿Cómo han podido confundir


a una letra con un número?
OTTO.-(A Igor) Pero fue usted quien me
ordenó sacarlo de donde estaba. IGOR -. Se habrá percatado usted, señor, de
que el número cero y la letra O son bastante
IGOR -. ¡No, no, no, no! Yo, lo que dije fue: parecidos.
"Otto, mira a aquel sujeto que se encuentra allí
arriba. ¿No crees que tiene un leve parecido OTTO-. ¡Idénticos!
con uno de esos ceros que estamos buscando?
O-. ¿Puedo irme ya?
GOBERNADOR-. Liberen a esa letra antes de IGOR -. Se me acaba de ocurrir algo.
que los periodistas se enteren de este gran
papelón. OTTO-. ¡Ya era hora!

O-. Enseguida notarán mi ausencia, ya que soy IGOR -. ¡La letra hache!
una letra muy requerida. Si se hubiesen llevado
a la X o a la W, la falta no hubiese sido tan GOBERNADOR-. ¿Qué pasa con la letra
grave. ¡Pero llevarse a la O mayúscula! ¡Que hache? ¡Dejemos a las letras en paz!
falta de sentido común!
IGOR -. La letra hache cumple entre todas las
GOBERNADOR-. O mayúscula, puede usted letras casi la misma función que cumple el cero
marcharse. Le pido mil disculpas. entre los números.

O-. Sólo puedo darle una. Recuerde que el GOBERNADOR-. ¿Cómo?


número mil ya no existe.
IGOR -. ¿No ha notado, que salvo en algunas
GOBERNADOR-. Tiene usted razón. Le pido excepciones, la letra hache prácticamente no
una disculpa. Adiós, y déle mis saludos a se pronuncia?
todo el abecedario.
GOBERNADOR-. Es verdad. Cuando una
O-. Serán dados. Hasta pronto. (Sale.) palabra lleva hache da lo mismo si ésta se
encuentra o no.
ESCENA III
IGOR -. ¡No repita eso, señor Gobernador!
GOBERNADOR-. (Muy alterado, va a dirigirse
a Igor, pero ésta lo advierte y...) OTTO-. Las haches podrían ofenderse.

IGOR -¡Señor...! IGOR -. Y ya tenemos bastante con haber


perdido a los ceros. La letra hache es parte de
GOBERNADOR-. ¡Qué vergüenza me han nuestro idioma. No podríamos manejarnos sin
hecho pasar! ella, como sucede con los ceros. Aunque
algunos crean que la hache no sirve para nada,
IGOR -. No volverá a suceder, señor. Otto, su importancia es indiscutible. Sin embargo,
promete al Gobernador que jamás volverás a muchos la dejan de lado y se olvidan de
confundir a una letra con un número. incluirla en las palabras.

OTTO-. ¡Fue usted la que se confundió! OTTO-. ¡Pobre letra hache!

IGOR -. ¡Otto! ¿Atrapaste o no a esa letra IGOR -. Siempre la han tratado como una
confundiéndola con un cero? inútil.

OTTO-. ¡Usted me lo ordenó! OTTO-. (Llorando) ¡Pobre letra hache!

IGOR -. Es inútil hablar con él, señor. Ha IGOR -. Supongamos que un día, la hache,
estado bebiendo. cansada de pasar desapercibida, cansada de
que se olviden de ella, decidiera marcharse.
OTTO-. ¡No he estado bebiendo! ¿Adónde se iría?

GOBERNADOR-. ¡Basta ya! ¡Dejen de discutir OTTO-. ¿Adónde se iría?


y denme una solución!
GOBERNADOR-. ¿Adónde se iría? Esperamos que regresen pronto a sus lugares,
y que todo vuelva a la normalidad. Muchas
IGOR -. Habría que preguntárselo a ella gracias.
misma. Y entonces tendríamos una pista acerca
de dónde se han ido los ceros. PERIODISTA-. (Apaga el micrófono) Ha
hecho bien en pedirles perdón.
GOBERNADOR-. ¡Traigan ya mismo a la letra
hache! GOBERNADOR-. Ya lo creo.

IGOR -. ¡Otto! ¡Encárgate! (Sale) PERIODISTA-. Señor Gobernador... Mañana


era el día de mi casamiento. ¿Cree que los
OTTO-¿Porqué yo? ceros volverán para esta noche?

IGOR -. ¡No discutas, Otto! ¡Ve a buscar a la GOBERNADOR-. No lo sé.


letra hache! Yo iré a dar explicaciones a la
prensa. (Sale) PERIODISTA-Si encuentra alguno antes de
mañana, le ruego que me lo envíe por correo,
OTTO-. (Protestando) Primero me obligaron a así se lo agrego al dos, y puedo casarme el
atrapar a una O, ahora a una hache... ¡Todas veinte de abril.
las letras acabarán odiándome! (Sale)
GOBERNADOR-. Haré lo posible.
Escena IV
PERIODISTA-. Gracias...
PERIODISTA-. (Persiguiendo al Gobernador
con un micrófono) Señor Gobernador, ¿hay Escena V
alguna novedad sobre los ceros?
(Entran Igor y Otto discutiendo)
GOBERNADOR-. Ninguna por el momento.
IGOR -. ¡Siempre he dicho que eres un inútil!
PERIODISTA-. Se comenta que han sido
secuestrados por extraterrestres. ¿Puede esto OTTO-. ¡Hice lo que usted me ordenó!
ser cierto?
IGOR -. ¿Si te ordenara comer piedras también
GOBERNADOR-. Lo dudo. lo harías?

PERIODISTA-. ¿Es cierto que funcionarios del OTTO-. ¡No tuve la culpa!
Gobierno capturaron a una letra
confundiéndola con un cero? IGOR -. El Gobernador se enfadará contigo.

GOBERNADOR-. (Incómodo) Pasemos a otra OTTO-. Renunciaré a este trabajo. ¡Me cansé
pregunta. de estar persiguiendo números y letras! ¡Y todo
esfuerzo es inútil! Seguramente fueron
PERIODISTA-. ¿Qué mensaje les daría a los secuestrados por la oposición.
ceros si lo estuviesen viendo en este momento?
IGOR -. No me extrañaría. Empiezo a
GOBERNADOR-. Quisiera pedirles disculpas sospechar que alguien está detrás de todo
por haberlos ofendido. Ha quedado demostrado esto… ¡Ya lo tengo! ¡La esposa del
que los ceros son fundamentales en nuestras Gobernador! ¿Has notado lo gorda que está
vidas, y que no podemos vivir sin ellos. últimamente? Quizás se haya comido a los
Señores ceros: mis más modestas disculpas. ceros.
GOBERNADOR-. (Que acaba de entrar y la ha IGOR -. No pudo decir nada.
oído) ¡Igor!
OTTO-. ¡La letra hache es muda!
IGOR -. ¡Señor!
GOBERNADOR-. ¿Qué?
GOBERNADOR-. ¿Qué hay de la letra hache?
IGOR -. Otto pretendía que yo interrogase a
IGOR -. ¿La letra hache, señor…? una letra muda.

GOBERNADOR-. ¡Sí, la letra hache! OTTO-. ¿Por qué no pensó eso antes? ¿Acaso
olvidó que la hache es muda? Todo el mundo
IGOR -. Pues. Otto ha cometido otro error. sabe que todas las haches son mudas. ¿Para
qué me envió a buscarla?
OTTO-. ¡No fue mi error!
IGOR -. No todas las haches son mudas.
GOBERNADOR-. ¡No me digan que han
confundido a la hache con un número! OTTO-. Sí, lo son.

IGOR -. No, señor. IGOR -. No lo son. Cuando la hache va


precedida de la letra C, no es muda. C…, H.:
GOBERNADOR-. ¿La interrogaron? chancho, chorizo, churrasco… ¡chitrulo! ¡La CH
no es muda!
IGOR -. Sí, señor.
OTTO-. (Muy alterado) ¡Nadie me dijo que
GOBERNADOR-. ¿Qué dijo? trajera a la CH! ¡Me pidieron que trajera a la
hache sola! ¡Y las haches cuando están solas,
IGOR -. Nada, señor. siempre son mudas!

GOBERNADOR- ¿Nada? IGOR -. Otto, será mejor que te calmes.


¡Cómo se nota que has estado bebiendo!
IGOR – La letra hache no ha podido darnos ni
una sola pista. OTTO-. (Estalla) ¡No he estado bebiendo!

OTTO-. ¡Y no fue culpa mía! IGOR -. Señor Gobernador, como es lógico, a


hache no pudo decir una palabra. Sólo se
GOBERNADOR-. ¿Se negó a hablar? comunicaba con señas, y no teníamos un
traductor que dominase el lenguaje de las
IGOR -. No precisamente. señas, por lo tanto…

GOBERNADOR-. ¿Adónde está? GOBERNADOR-. ¡Igor!

IGOR -. Acaba de marcharse. IGOR -. ¡Señor!

GOBERNADOR-. ¿La han dejado ir? GOBERNADOR-. Mañana es otra vez dos de
abril. Hay dos personas que iban a casarse el
IGOR -. La letra hache no ha podido veinte. Y no podrán hacerlo si no aparece al
ayudarnos, señor. Otto no debió haberla traído. menos un cero para juntarlo al dos. Tenemos
que hacer algo por ellos. Buscaremos la forma
GOBERNADOR-. ¡Pero díganme de una vez de que mañana sea veinte de abril. ¡Cómo sea!
qué fue lo que dijo!
CANTO IV GOBERNADOR-. ¡Si no fuera porque el cero
no aparece!
PERIODISTA-. Desde el tiempo en que
iba al colegio ¡Solamente tenemos al
dos!
Una buena novia me
ha costado conseguir.

Me resisto a quedarme TODOS-. ¡Casamiento feliz, para el


soltero. veinte de abril!

¡Cómo sea llegará el ¡Con un cero podrá ir el


veinte de abril! novio al altar!

¡Casamiento feliz, para


el veinte de abril!
GOBERNADOR-. Yo prometo de alguna
manera ¡Con un cero podrá ir el
novio al altar!
devolverle los ceros al
país.

Pues tenemos un grave ESCENA VI


problema:
(Otto e Igor buscan a los ceros con dos
Sin los ceros nadie enormes lupas)
puede ya vivir.
OTTO-. ¡Aquí hay uno!

IGOR -. Eso no es un cero. Es un agujero en


PERIODISTA-. No hay quien pueda el piso.
quitarme esta pena.
OTTO-. Tiene forma de cero.
Sin un cero no me
puedo casar. IGOR -. (Abandonando la búsqueda) ¡Estoy
harto! ¿Es posible que no haya al menos un
Nadie tiene intenciones cero que se digne a aparecer?
tan buenas
OTTO-.(Buscando) ¡Otro agujero en el piso!
como la mujer que me ¡Esta Casa de Gobierno está llena de agujeros!
ama de verdad. (Entra el Gobernador)

GOBERNADOR-. ¡Igor!

PERIODISTA-. Quiero un desayuno en la IGOR -. ¡Señor!


cama,
GOBERNADOR-. ¿Han hallado algo?
y también que me tiren
del colchon. IGOR -. Revisamos hasta el último rincón de la
Casa de Gobierno. ¡Y nada!
Voz-. ¡La correspondencia del señor GOBERNADOR-. ¡Enciendan el aire
Gobernador! (Otto sale y vuelve enseguida con acondicionado!
unos sobres.)
OTTO-. Como si fuera poco, señor, el pueblo
OTTO-. (Volviendo. A Igor, mientras le entrega se ha reunido en la plaza. Están enfurecidos.
los sobres) La correspondencia del señor
Gobernador. ¡Piden una solución! (Vuelven a tiritar.)

IGOR -. (Recibe los sobres y los entrega al IGOR -. ¡Ohhh...! ¡O...o...otra vez el frío!
Gobernador) Su correspondencia, señor
Gobernador. GOBERNADOR-. ¡I...I...Igor...!

GOBERNADOR-. (Abre un sobre y lee) ¡Es del IGOR -. ¡Se...se...señor!


presidente! ¡Se dirige hacia aquí! Si los ceros
no aparecen para esta noche intervendrá GOBERNADOR-. ¡Tiene que aparecer un cero
nuestra provincia.(Se escuchan ruidos o vamos a quedar pa...pa...pasteurizados!
provenientes de la calle) ¿Y eso?
OTTO-. Pa...pa...Pasteur ¿y qué?
OTTO-. Iré a ver. (Sale.)
GOBERNADOR-. Pa...pa...¡pasteurizados!
GOBERNADOR-. El presidente en persona
viene a hacerse cargo del asunto. ¡Será el fin OTTO-. Pa...pa...¿Pasteur y Callao? (Vuelve el
de nuestro gobierno! ¡Se nos tildará de calor, y caminan desesperados de un lado a
incompetentes! (De repente, ambos comienzan otro mientras se abanican.)
a tiritar.) ¿Qué está su... su... cediendo...?
GOBERNADOR-. ¡Pasteurizados! ¡Como la
IGOR -. No lo sé. Recién nos leche! Se pasteuriza pasándola del calor al frío
mo...mo...moríamos de ca...ca...calor, y ahora hasta eliminar los microbios.
ha empezado a hacer mu...mu...mucho frío.
OTTO-. ¡Yo no tengo microbios!
GOBERNADOR-. ¡Que enciendan las estufas!
¡Ra...rápido...! IGOR -. ¡Yo tampoco!

OTTO-. (Vuelve. También tiritando.) Sé... sé... OTTO-. ¡Todo esto es culpa suya! Si no
señor, el té... temperatura oficial era de hubiese abierto su enorme bocota en contra de
veintinueve grados, y acaba de subir a treinta, los ceros...
pe... pero al faltar el cero...
GOBERNADOR-. ¡Otto!
IGOR -. ¡Ha descendido a tres!
IGOR -. Ignórelo señor. Ha estado bebiendo
GOBERNADOR-. ¡Me estoy otra vez.
co...co...congelando! (Repentinamente, dejan
de tiritar y se echan aire con los sobres.) OTTO-. ¡No he estado bebiendo!

IGOR -. ¡Qué calor! IGOR -. ¡Sí!

OTTO-. La temperatura debe haber vuelto a OTTO-. ¡No!


veintinueve grados.
IGOR -. ¡Sí! (Continúan discutiendo, y el IGOR -. ¡Señor!
Gobernador se interpone entre ellos, mientras
por un lateral entra rodando un cero.) GOBERNADOR-. ¡Que tapen mañana mismo
esos agujeros! De ahora en más nadie entrará
ESCENA VII sin permiso a la Casa de Gobierno. (Al cero) Y
usted, ¡retírese inmediatamente!
CERO-. (Incorporándose) Buenas noches.
(Nadie lo oye) ¡He dicho buenas noches...! CERO-. ¿Pero nadie va a oír lo que vengo a
(Los demás abandonan la discusión.) decir?

GOBERNADOR-. ¿Quién es usted? IGOR -. No podemos atenderlo ahora.

OTTO-. ¿Por dónde entró? OTTO-. Estamos muy ocupados.

IGOR -. ¿Tiene identificación? IGOR -. ¿No ha visto la televisión? ¿No sabe lo


que está ocurriendo?
CERO-. Vengo en representación de mis
compañeros. CERO-. Lo sé mejor que nadie. El pueblo ha
salido a las calles a reclamar justicia. Y es por
GOBERNADOR-. ¿De sus compañeros? eso que los ceros han decidido volver.

IGOR -. ¿De qué partido es usted? GOBERNADOR-. ¿Cómo lo sabe?

CERO-. De ninguno. El personal de seguridad CERO-. Porque soy uno de ellos. ¡Soy un cero!
no me permitía ingresar, de modo que no hallé
más remedio que colarme por un agujero. GOBERNADOR, OTTO E IGOR -. ¿Un
cero...?
OTTO-. ¡Esos dichosos agujeros!
IGOR -. ¿Y qué hace aquí?
IGOR -. (Al Gobernador, por lo bajo.) La mitad
del presupuesto del año pasado se fue por CERO-. Es lo que he estado tratando de
esos agujeros, señor. Algo hay que hacer con explicar desde que llegué.
ellos. Están por todas partes.
GOBERNADOR-. Muy bien... Lo escuchamos.
OTTO-. Por allí se mete cualquiera. ¡Es una
vergüenza! CERO-. El pueblo entero nos reclama. Todos
han tomado conciencia de que los ceros somos
GOBERNADOR-. (Al cero) ¡Cómo se atreve tan importantes como cualquier otro número.
usted a ingresar a la Casa de Gobierno, y (Con ironía) Aunque algunos... opinen lo
aparecerse como si nada en el despacho del contrario.
Gobernador... ¡en mi despacho!..., entrando
por un agujero! GOBERNADOR-. Reconozco que me he
equivocado. Sucede que a veces...
IGOR -. No es el primero, señor. Algunos han
entrado y se han quedado durante años. CERO-. (Interrumpiéndolo) Sucede que a
veces hacemos o decimos ciertas cosas sin
OTTO-. ¡Y cuánto trabajo ha costado que se pensar en las consecuencias. Todos los ceros
fueran! nos sentimos discriminados por sus
declaraciones, y nos fuimos del país para dar
GOBERNADOR-. ¡Igor! una lección. Y con desagrado, hemos
comprobado que en todo el mundo hay seres a Un país como yo quiero debe
los que injustamente se discrimina. ser

OTTO-. ¿En todo el mundo? ¿Y quiénes son los el lugar donde los sueños
responsables? puedan ser

CERO-. Cada uno de nosotros. Nada nos da alcanzados por la gente.


derecho a menospreciar o discriminar a otros.
Merecemos ser valorados y respetados por lo Ese es mi país por siempre.
que somos. Pues cada cual cumple una función
única e indispensable en esta vida.

GOBERNADOR-. Creo que las autoridades, y (Al finalizar la canción, se escucha una voz
el pueblo, hemos recapacitado, y lo hemos diciendo por un parlante:)
entendido perfectamente.

CERO-. Entonces, es hora de empezar a


trabajar. Señor Gobernador, dígame que hacer VOZ-. ¡Atención, por favor...! Se comunica a la
primero. población que hace tan sólo unos instantes, la
letra hache ha desaparecido del abecedario.
GOBERNADOR-. Hay dos enamorados (IGOR, Otto, y el Gobernador caen
esperando por usted. Vamos a celebrar esa desmayados. El cero los mira con
boda todos juntos. Y demos la noticia al resignación.)
mundo de que por fin, el caos ha terminado, y
hemos dejado de ser "El País de los Sin-Ceros".
APAGON FINAL
CANTO V

CERO-. Defender nuestros derechos,


es quizás,

una forma de vivir en libertad.

Una forma de querernos,

respetarnos y entendernos.

TODOS-. El País de los sinceros es tal


vez

un ejemplo muy certero, como


ves.

Somos todos importantes

para hacer al mundo grande.

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