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INlA
KAMPENAIKE
Siembra de Alfalfa
ANTECEDENTES GENERALES
La Alfalfa es una de las forrajeras
más recomendadas para la zona
de transición y algunos sitios de la
estepa. Debido a su raíz
profundizadora puede soportar
importantes restricciones hídricas,
producir entre 6 y 12 toneladas de
materia seca por hectárea al año y
por más de 15 años. Presenta
además versatilidad de uso, puede
ser utilizada tanto para producir
forraje conservado (heno, ensilaje)
como en pastoreo directo. Desde
el punto de vista nutricional,
presenta un alto contenido de
proteína y moderado de energía.
En general, por razones
económicas, se recomienda
producir en secano, aunque el riego
puede incrementar la producción
de manera significativa. Se puede
establecer alfalfa en cero labranza
(Ver Informativo N° 22) o asociada
a gramíneas en estepa (Ver
Informativo N° 23).
ASPECTOS AGRONÓMICOS
Elección del suelo
Esta especie no se adapta a suelos
que se inunden en algún momento
del año. Son preferibles los suelos
de texturas no arcillosas. No es
recomendable sembrar en suelos
con un pH menor a 5,6. Suelos que
hayan sido fondos de laguna, pero
con texturas medias, pueden ser
utilizados aunque es necesarío
medir la conductividad eléctrica del
suelo, ya que no pueden ser
Mayo de 2012, Punta Ar:enas
Oscar Strauch Bertin
Investigador INIA-Kampenaike
salinos (ideal <2,0 mmho/cm).
Sectores con una importante
cobertura de matas, son buenos
sitios para establecer alfalfa, debido
a que normalmente son suelos más
profundos.
Habilitación del sitio
Es básico eliminar al máximo la
biomasa residente del sitio antes
de mover el suelo, para ello es
recomendable el pastoreo intensivo
desde la temporada anterior. La
utilización de vacunos y caballos
son una alternativa adicional a los
ovinos. Por otra parte, la aislación
con alambrado previo al pastoreo
intensivo es fundamental, ya que
permite emplear altas presiones de
pastoreo. En el caso de existir una
importante cobertura de matas,
favorecer el desmate en hileras.
Es ideal establecer estas especies
sobre suelos cultivados
previamente, por ejemplo con
avena o brásicas forrajeras porque
mejora condiciones del suelo como
microrelieve y la presencia de restos
vegetales.
Sistema de siembra
La preparación de suelo completa
puede considerar: i) rotura de la
cubierta vegetal con
rototiller,rotovator (una pasada) o
rastra, ii) aradura y iii)posterior
mullimiento con rototiller (una o dos
pasadas). La siembra se puede
realizar al voleo aunque es ideal
ejecutarla con máquina sem-
bradora, (ejemplo: de triple disco)
que permita distribuir semillas
pequeñas (alfalfa), semillas grandes
(cereales) y fertilizantes en dosis y
profundidad (3 - 4cm) correcta. La
compactación de la línea de
siembra con la máquina
sembradora es fundamental,
además se recomienda rodillar
antes y después de la siembra. Se
puede sembrar asociado a un
cereal, como la avena (ideal es
utilizar semilla certificada), lo que
permite un mejor establecimiento.
Cultivar y dosis de semilla
Utilizar cultivares con latencia 3 o
4. La dosis de semilla inoculada y
peletizada es de 15 kg/ha. En el
caso de utilizar avena como cultivo
protector, utilizar una baja dosis de
semilla de 40 kg/ha en la zona más
húmeda y 60 kg/ha en la zona más
seca de la región de Magallanes.
Fertilización
La dosis de fertilización a la siembra
depende del análisis de suelo y del
potencial productivo. Una
fertilización tradicional a la siembra
podría considerar: 40, 30 Y20 un/ha
de P205, K20 Y S-S04, respec-
tivamente. (Equivale aproxima-
damente a 85, 50 Y 130 kg/ha de
superfosfato triple, muriato de
potasio y fertiyeso granulado,
respectivamente). Si se siembra ¡
asociada a avena agregar 20 un/ha ¡
¡
de N, equivalente a 45 kg/ha de !
urea. ~
Otras consideraciones
I¡
Algunas aves y guanacos pueden
ser una Iimitante importante en el
I
¡

proceso de establecimiento y
utilización posterior. Para este
último, una opción es el
levantamiento de los cercos
tradicionales a 2 m de altura,
agregando 2 a 3 hebras sobre el
alambrado tradicional. Durante el
primer año, no utilizar el cultivo
salvo que se siembre asociado a
avena donde se recomienda cortar
a fines del verano. El
establecimiento de un alfalfar puede
tardar entre dos y tres temporadas
antes de poder ser utilizado de
Alfalfar de 20 años. INIA-Kampenalke. Mes de Noviembre.
manera comercial.
Utilización
En el caso de conservar forraje, el
corte dependerá del desarrollo del
cultivo, siendo ideal cortar cuando
existen rebrotes en la corona. Para
cosechar un forraje de mejor calidad
realizar un primer corte a fines de
diciembre ya que además el rebrote
puede permitir un segundo corte
en marzo. En el caso de preferir un
heno de calidad intermedia-baja,
cortar el forraje a mediados de
enero, sin embargo, el rebrote a
marzo será muy bajo pudiendo
utilizarse en pastoreo. En el caso
de cortar para heno o pastorear un
sector muy temprano, se
recomienda en la siguiente
temporada comenzar en un orden
inverso para favorecer la
recuperación.
El pastoreo invernal de un alfalfar
como manejo de limpieza se
aconseja estando el suelo
congelado y los animales se deben
retirar a más tardar el 15 de agosto
para no afectar el rebrote.