Autor: Johannes Vermeer. Cronología: 1665-1667. Estilo: Barroco. Técnica: Óleo. Soporte: Tabla. Ubicación: Museo Mauritshuis, Paises Bajos.
Recién iniciada la película, en el taller del artista se muestran un tipo de maniquíes,
los cuales tienen una pose religiosa por la posición de sus manos y que, seguramente han sido usados como modelos para pinturas, ya que, dentro de la casa del pintor, se pueden apreciar tanto obras en escenas religiosas como de momentos cotidianos. Un rasgo destacable de quien realiza las obras pictóricas es el de su excentricidad, temperamento y misterio que lo hacen un personaje peculiar. Esto es importante para la época del barroco, en esta época se busca la expresión sentimental y emocional individual, así como el ostento frente a lo conservador del artista como contraposición al movimiento precedente. En la película destaca el deseo de pintar por placer e inspiración, no por encargo. Los colores utilizados son creados en el mismo taller y los materiales necesarios para estos, son encargados en comercios especializados dentro de la ciudad. Se utilizan materiales orgánicos, inorgánicos y minerales como el lapislázuli (material caro y exuberante). La pintura principal posee algunas características únicas e innovadoras, lo primero y más importante es el punctum, el cual es la perla. Se destaca el uso del claroscuro, tendencia iniciada por Caravaggio, el juego de luz y sombra tan marcado da un tono dramático a la obra. El rostro de la modelo gira tres cuartos, con la mirada fija, en el espectador para dar un contexto más realista. El uso de dorado y azul que cubren el cabello de la joven da un tono de elegancia, además Kevin Oswin García Pérez
de ser colores difíciles de conseguir y que, anteriormente se utilizaban únicamente