La enseñanza para el desarrollo del conocimiento científico, todo esto como instrumento que posibilita y también puede limitar la adquisición del aprendizaje en los estudiantes, todos estos aspectos determinan la práctica del docente durante el abordaje pedagógico dentro y fuera del ambiente de clase, influenciado por el contexto para la toma de decisiones metodológicas. A su vez, le proporciona al profesor una gran responsabilidad al momento de planificar los contenidos curriculares debido a que los mismos deben ser cónsonos con la realidad observada en los educandos. En este orden de ideas, la epistemología del currículo debe plantearse desde la preocupación de todos los involucrados en el hecho educativo para el desarrollo de todos los niños, niñas y adolescentes que asisten a las diferentes instituciones educativas en el país, de manera que se tiene que fundamentar y organizar para que cumpla con la planificación del crecimiento y bienestar de los seres humanos desde la infancia hasta que la persona es adulta, entonces se entenderá el fundamento como un contexto del currículo que según lafranceso (2005), consiste en “aquello que permite transformar todas las ideas y preconceptos, leyes, principios y teorías, para lograr la formación de los estudiantes” (p.34). En este sentido, desde lo epistemológico se originan las estrategias en que se basan los gobiernos nacionales y los ministerios de educación para realizar todos los fundamentos asociados al currículo, esto quiere decir que para ejecutar los cimientos sociológicos, psicológicos, filosóficos, entre otros, se debe desarrollar primero el fundamento epistemológico. lafrancesco (2005), plantea que “sin éste los fundamentos mencionados no tendrían sentido ya que el fundamento epistemológico en el currículum nos indica qué contenido forjar en el mismo y a partir de éste las demás disciplinas tomarán la dirección que se requiera para poder llegar a poner en práctica el conocimiento” (p.56). En la actualidad, debido a fenómenos como la globalización existen otras bases que sirven para generar el currículo y consiste en la forma cómo los conocimientos se debe entrelazar, entre sí, para aportarle a la educación la característica de la multidisciplinariedad y también de la interdisciplinariedad, donde es imprescindible que se conjuguen todas las disciplinas posibles para que los estudiantes alcancen a aprender de una manera más profunda o extensa. Es así como Caviedes (2002) hace referencia a que el “Currículo debe tener una perspectiva de interdisciplinariedad, con la cual se podrá lograr una formación integral de los estudiantes como persona responsable y comprometida en su proceso de desarrollo individual y con los demás” (p. 67). En correspondencia con lo planteado, el aprendizaje que se realiza en las instituciones educativas no se produce de manera aislada, sino que debe estar siempre presente en relación a las enseñanzas impartidas por el docente, la interacción con los compañeros y también vinculada con el aula, para ello se necesita asumir la creación del currículo desde la postura de los estilos, enfoques y teorías de la enseñanza y el aprendizaje plasmada por los autores. En cuanto a los estilos, es importante acotar que cada individuo posee su propio estilo de aprendizaje, que tiene como característica formas específicas y relativamente estables de procesar la información, entre éstas formas o estilos de aprendizaje se encuentran cuatro según lo estipulado por Caviedes (2002), a) Convergente: Propio de las personas a las que les gusta solucionar problemas y tomar decisiones, así como aplicar prácticamente las ideas, los conceptos y las teorías. b) Divergente: Característico de personas imaginativas y capaces de ver las cosas desde varias perspectivas; les gusta trabajar en grupo. c) Asimilador: Propio de las personas que prefieren trabajar con ideas y contenidos abstractos, son tolerantes y gustan de la precisión y la exactitud. d) Acomodaticio: Característico de las personas a las que encanta hacer cosas, tener nuevas experiencias y correr riesgos, que se adaptan con facilidad y saben improvisar. En concordancia con lo expuesto por el autor con los estilos de aprendizaje, es necesario que se tome en cuenta los mismos para crear un currículo que por medio del abordaje pedagógico capacite a los educandos en conocimientos, destrezas, valores y saberes que permitan cambiar sus vidas con la finalidad de poder convertirse en seres humanos útiles a la sociedad. También, es importante señalar las teorías que explican el modo como se aprende, debido a que algunos psicólogos y científicos se han encargado de explicar las distintas formas como adquiere el ser humano el conocimiento a lo largo de la historia, Caviedes, (2002), destaca: a) El conductismo: Señala que el aprendizaje se produce a través de estímulos, respuestas y recompensas. Los estímulos se refieren a la enseñanza del profesor y las respuestas, a cuánto aprende el alumno. Donde lo importante es la cantidad de contenidos aprendidos y la cantidad de respuestas que la persona da cuando se le pregunta. En esta teoría el protagonista principal es el profesor. b) El cognitivismo: Se centra en la percepción, la memoria y la formación de conceptos, así como en el desarrollo de habilidades y en el aprendizaje de estrategias para aprender a aprender. Una de las aportaciones más importantes de la psicología cognitiva ha sido la teoría del procesamiento de la información y el estudio de las estrategias de aprendizaje. Esta teoría asigna un papel muy activo al sujeto durante el aprendizaje. c) La teoría contextual, recoge muchos de los aspectos de la psicología cognitiva, añadiendo como un elemento fundamental, el contexto donde se realiza la enseñanza y el aprendizaje. El contexto docente determina la forma en que los profesores enseñan y los alumnos aprenden. d) El humanismo: Esta teoría se basa en la subjetividad de las experiencias vividas por las personas, por la libertad de elección y la importancia del ser humano, donde todos tienen potencialidades por desarrollar, el proceso educativo está centrado en el educando, ser diferencia de las anteriores en que el desarrollo de las actividades escolares están planificadas de acuerdo a los intereses y necesidades de los alumnos. Todas estas corrientes o teorías del aprendizaje, constituyen una base para que los entes gubernamentales, directivos y docentes planifiquen el currículo y las actividades que realizan en los colegios públicos y privados, en concordancia con las insuficiencias y los intereses que requieren los niños, niñas, adolescentes y jóvenes con el objetivo de formar integralmente a los individuos que representarán el futuro en el territorio colombiano. De allí la necesidad de hacer énfasis en la importancia que tiene la educación en la vida de los seres humanos, debido a que su complejidad se consolida cuando se visualiza el entorno social y se logra vislumbrar que la axiología es cada día menos plasmada en los espacios escolares y en los familiares, pues con el pasar de los años se ha descuidado la enseñanza de los principios y los valores en los estudiantes en todos los niveles, siendo ésta una de las razones por las cuales se ha venido desvaneciendo. Por lo tanto Escámez (1987), expone que todos los formadores (padres, representantes, docentes, entre otros) tienen que preguntarse “qué puedo enseñar” y “qué debo enseñar” (p.25). De acuerdo con lo anterior, esta situación que se está generando en la mayoría de los contextos educativos está produciendo un desorden en la sociedad actual, en parte por la forma como se está asumiendo e impartiendo la educación, existe actualmente una manera muy sutil de enseñar que se experimenta en la manera de actuar de los padres, docentes, niños, niñas y adolescentes, plasmado en el modo en que se desempeñan las personas en los distintos contextos, en concordancia con lo señalado, en la Declaración de Derechos Humanos, del Niño, (1978), cita “el currículo, debe converger, con el fin de la educación, la cual, consiste en lograr el pleno desarrollo de la personalidad humana” (p. 39). Entonces, no se está cumpliendo con la finalidad que destaca la Declaración de los Derechos Humanos en los infantes. En este sentido, la implementación adecuada de un currículo en el territorio colombiano, conllevará a los habitantes del país les permitirá proceder correctamente a través de una serie de costumbres, parámetros y normas que incidirán positivamente en la sociedad, por ello es fundamental, que los individuos responsables de la formación intelectual y académica de los niños y niñas puedan emplear todas sus capacidades para lograr un aprendizaje significativo. Para lafrancesco, (2005) “el currículo permite al ser humano, desde los principios y valores, orientar sus actitudes y definir sus comportamientos, de forma ética y moral” (p. 65). Además de ello, el aporte del currículo desde la axiología o la teoría de los valores debe pretender implantar estrategias metodológicas y prácticas que estén relacionadas con las situaciones a las que se enfrenta cotidianamente el estudiante, o prepararlo de manera holística para que esté capacitado para asumir cualquier reto que se le presente durante su vida, adquiriendo un compromiso en relación a situaciones propias de la realidad. Entonces, el currículo desde lo axiológico, para Argos, y Ezquerra, (1999) será, “el conjunto de estudios y prácticas destinadas a que el alumno desarrolle plenamente sus posibilidades” (p. 54). REFERENCIAS
Caviedes, S. (2002). Educación Básica: las reformas pendientes. En: Revista
Iberoamericana de Educación. Brasil: Organización de estados Iberoamericanos.
Champin, M. (2014). Modelos de Evaluación del Aprendizaje en un Currículo
por Competencias: El caso del Currículo por Competencias Destinado a la Formación de Médicos. Disponible en Línea: http://repositorio.uned.ac.cr/reuned/bitstream/120809/984/1/Miriam%20 Mena.pdf. Consulta: Octubre de 2018.
Declaración de los Derechos Humanos. (1978). Énfasis en el Desarrollo del
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Escánez, C. (1989). La profesión docente en momentos de cambios. ¿Qué nos
dicen los estudios internacionales? En: revista Participación educativa. Profesorado y Calidad de la Educación. España.
Iafrancesco, G. (2004). Currículo y Plan de estudio, Estructura y Planeamiento,
Editorial Magisterio, Bogotá.
Iafrancesco, G. (2005). Nuevos fundamentos para la transformación curricular
a propósito de los estándares, Coop. Editorial Magisterio, 2 edición, Bogotá.