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PARA OBTENER UNA CERVEZA ÓPTIMA, ES NECESARIO UN CO2 DE ALTA

CALIDAD

Un alto contenido de oxígeno residual en el CO2 es malo para el sabor de la cerveza y su


periodo de conservación. Por ello, para la fábrica de cerveza más antigua de Francia es
fundamental mantener el O2 en niveles mínimos. Los sistemas en línea de O2 gaseoso y
disuelto de METTLER TOLEDO cumplen sus rigurosos estándares.

Los registros muestran que el historial de la producción de cerveza en Hochfelden, en la


región de Alsacia de Francia, se remonta al año 870. En 1640 se inauguró la fábrica de
cerveza conocida hoy en día como Meteor, lo cual la convierte en la más antigua de Francia
que sigue en activo. Meteor ha resistido la adquisición por parte de grandes grupos y sigue
siendo una empresa familiar independiente que basa su desarrollo en la creatividad y en el
mantenimiento de una elevada calidad.

Importancia del CO2

Durante la producción de cerveza, se utiliza el CO2 en diversos procesos. Se inyecta en la


cerveza, después de la carbonatación, porque la cantidad de CO2 que se produce de
manera natural en la cerveza varía en función de la receta. Por lo tanto, es importante medir
el contenido de CO2 disuelto en la salida de la filtración. El CO2 también se utiliza para
presurizar los depósitos de cerveza acabada. En estos procedimientos, el CO2 está en
contacto directo con la cerveza (CO2 gaseoso en los depósitos y disuelto en la cerveza) y,
por lo tanto, la calidad del CO2 es un factor crítico.

Medición en línea del O2 disuelto y gaseoso

El control de la calidad del CO2 se realiza midiendo el contenido de oxígeno residual del
CO2. El nivel de O2 gaseoso se mide en el CO2 antes de que se distribuya a los diferentes
puntos de utilización (depósitos y después de la carbonatación) y el O2 disuelto en la
cerveza en la salida de la filtración antes de que el producto se envíe a las estaciones de
llenado. Si el contenido de O2 gaseoso o disuelto es demasiado elevado provoca la
oxidación de la cerveza, lo cual puede perjudicar al sabor y reducir el periodo de
conservación.

Elementos básicos del sistema

Dado que el sistema de medición del O2 implementado en Meteor se había quedado


obsoleto y los requisitos de la fábrica de cerveza eran más estrictos, los ingenieros de
producción decidieron sustituirlo. Las características principales que la fábrica de cerveza
buscaba en los nuevos sistemas eran una reducción de la necesidad de mantenimiento y
la posibilidad de ofrecer un servicio posventa de alta calidad. Además, los instrumentos
deberían cumplir los requisitos de las normativas alimentarias, así como los elevados
estándares de Meteor.

Solución propuesta

Meteor preguntó a METTLER TOLEDO si podían suministrar sistemas que satisficiesen


todas sus necesidades. Nosotros propusimos con confianza lo siguiente:

Medición de O2 disuelto:

Sensor InPro 6950


Transmisor M700 con módulo de trazas de O2

Medición de O2 gaseoso:

Sensor InPro 6950 con membrana de gas


Transmisor M700 con módulo de trazas de O2

Utilización sencilla y mantenimiento reducido

Los sistemas instalados cumplen todos los requisitos de mantenimiento y conformidad


solicitados por la fábrica de cerveza Meteor. La facilidad de utilización y el escaso
mantenimiento de los sistemas de medición de oxígeno disuelto y gaseoso y nuestro
servicio posventa de primera clase han convencido a los ingenieros de procesos de la
fábrica de cerveza. Y, lo que es más importante, las mediciones fiables significan que
Meteor puede estar segura de que la cerveza que produce es siempre de alta calidad.

La recuperación del dióxido de carbono de los gases de salida de los recipientes de


fermentación es un proceso importante en la fabricación de cerveza a gran escala, ya que
tiene muchos beneficios de costo y eficiencia. Si el dióxido de carbono producido es de
suficiente pureza puede ser utilizado en otras áreas de la planta, como en post
carbonatación y como gas inerte en líneas de llenado. Si el CO2 es menos puro puede
contribuir a la neutralización del cáustico en la planta de tratamiento de residuos. Por lo
tanto, la medición de la pureza del dióxido de carbono es un procedimiento importante.
Los sensores de oxígeno METTLER TOLEDO para bajos niveles de oxígeno son altamente
efectivos en esta aplicación. Al medir los niveles de concentración de O2 en el recipiente o
tubo, es posible extrapolar la concentración de dióxido de carbono presente. Es esta técnica
la que utiliza una importante cervecería británica en sus procesos de recuperación de
dióxido de carbono.
Límite estricto en el nivel de O2
La cervecería quería monitorear la calidad del CO2 en las líneas de ventilación de los
recipientes de maduración y en los tanques de cerveza brillante. El objetivo era el CO2 con
un nivel de oxígeno no superior a 0,1 % vol. % de oxígeno en la línea de llenado. Si se
sobrepasa este valor, el gas se desviaría automáticamente a la planta de tratamiento de
efluentes.
Sistema fiable de monitoreo de oxígeno
Como se requirió una detección de oxígeno de bajo nivel con una respuesta rápida para
garantizar un monitoreo preciso, se seleccionó el sensor de oxígeno InPro 6950i G de
METTLER TOLEDO. Con una precisión de medición de hasta 0,0005 vol. %, inmunidad a
la interferencia de la humedad y una construcción robusta, el InPro 6950i G es ideal para la
monitorización en línea del contenido de oxígeno en CO2.
El mantenimiento de los sensores es sencillo y requiere conocimientos técnicos mínimos.
Además, los cuerpos internos reemplazables para el sensor evitan la necesidad de un
reemplazo completo del sensor y aumentan la vida útil de cada sensor.
Una solución inteligente
El InPro 6950i G es miembro de la creciente gama de sondas de gestión inteligente de
sensores (ISM) de METTLER TOLEDO. ISM ofrece a las cervecerías una serie de
beneficios valiosos:
Diagnóstico predictivo: Herramientas como el Indicador Dinámico de Vida Útil predicen
cuándo se requerirá el mantenimiento o reemplazo del sensor.
Plug and Measure: Los sensores ISM pueden pre calibrarse y almacenarse hasta que sea
necesario. Al conectarse a un transmisor, el transmisor se configura automáticamente y el
sistema está listo para medir en un instante.
Señal digital: Los sensores ISM convierten la señal de medición de analógica a digital y la
envían al transmisor. Las señales digitales no se ven afectadas por la interferencia eléctrica
o la degradación causada por las largas longitudes de cable; por lo tanto, la señal que deja
el sensor llega al transmisor sin cambios.
Calidad de producto garantizada
Los técnicos de la cervecería de nuestros clientes nos informan que la solución METTLER
TOLEDO funciona muy bien. Tienen una mayor confianza en la pureza del CO2 recuperado
que se está utilizando en las líneas de envasado, ayudando a garantizar la calidad del
producto final. Además, los diagnósticos predictivos de ISM han resultado en menos
mantenimiento.

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