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(CRÓNICAS)

Día 2: XV Muestra Regional de Teatro Lima, Ica y Callao 2017

Miércoles 2 de Agosto.

El segundo día, tal como el anterior, empezó por la mañana en la Asociación de


Artistas Aficionados con el taller “Tejiendo Partituras", dirigido por la directora
teatral y docente Guadalupe Vivanco, quien compartió una técnica de construcción
para una muestra escénica, a través de la metáfora de las fases en el tejido de un
telar. Ocho talleristas se ubicaron en el espacio y, para comenzar, trabajaron la
calistenia para la disposición corporal de manera libre y personal, acompañados
de una estimulación sonora elegida por la docente.
Tejer implica el movimiento del cuerpo para lograr un resultado. Esta fue la
finalidad del taller: explorar este tejer y traerlo al escenario para tejer partituras.
Esta práctica milenaria, al pertenecer a nuestros antepasados y estar en nuestros
genes, sirvió como impulso para trabajar a partir de la memoria. El tejer en telar se
da en diferentes fases. El primero es el Rutuy, etapa de selección, donde se
trasquila y elige la lana adecuada para el trabajo; ahora el actor es la lana, y debe
sacar todo lo que le sobra, lo que no es resistencia ni energía. Para ello, se usaron
tres movimientos de base enseñados por la maestra, utilizando una vara que cada
tallerista había preparado, pasando después del trabajo personal a la exploración
en parejas, donde la mirada fija y la concentración jugaron un papel muy
importante; retomando la selección individual cada estudiante eligió su partitura
física, que se mostró ante sus compañeros. El Rutuy fue complementado con la
selección de un elemento, una canción que alguien les haya cantado años atrás,
trabajando así la conexión de ésta con la memoria, y un pedazo de un texto
elegido por la maestra con anterioridad, sea una palabra o frase, que cada uno
había realizado antes de llegar al taller. Con este proceso, cada estudiante hiló
una partitura corporal y vocal unificada.
En el trabajo de la segunda fase, el Tisay puskay, primer hilado sobre una rueca,
esta rueca es representada por el texto, sobre lo que se pone el cuerpo y la voz
que empieza a transformar la partitura para tomar sentido según el texto. Así
pasamos al Tiñi, siguiente fase donde se realiza el teñido natural, donde puedo
teñir mis partituras con la exploración a partir del texto. Por temas de dosificación
de tiempo, concluimos con el k´anty, primer telar sin resistencia, donde el trabajo
se volvió grupal, buscando semejanzas y entre todos tejer una partitura. En esta
fase, la maestra entregó un hilo de color, conformado por una partitura física y una
canción con letra quechua, para que puedan utilizarla de hilo conductor en caso
sea necesario; para el trabajo grupal se dejó total libertad a los talleristas, quienes
se reunieron en círculo para apreciar cada trabajo, debatiendo y explorando en
sus sensaciones y semejanzas encontradas, para así unificar las partes
seleccionadas y hacer una sola partitura que contenga partes de cada uno,
mostrando, finalmente, el resultado del trabajo de estas horas en el escenario. El
taller finalizó con la muestra de un video sobre el tejido de telar en la provincia de
Chincheros, departamento de Cusco, y con la lectura del texto que sirvió de
columna, “Testimonio de Georgina Gamba”.
Horas más tarde, nos volvimos a reunir en el Centro Cultural España para
continuar con la agenda teatral. La primera obra de la noche fue “Plegarias para
Bobby”, una conmovedora historia donde la libertad radica en aceptarse a uno
mismo, presentada por el Espacio Teatro Esencia, con la adaptación y dirección
de Gerardo Fernández. Esta puesta en escena narró la historia de Bobby, un
adolescente considerado como un hijo ejemplar, quien tiene miedo al no poder
controlar los deseos sobre su orientación sexual que va descubriendo en su
interior, refugiándose en la escritura de un diario y en los consejos de su familia,
sumamente creyente, que piensa que la cura está en la palabra del señor y en la
oración. Esto se ve reflejado en textos del padre como “la iglesia es una clínica” y
“vamos a rezar para que Dios te quite esas sensaciones”. El tiempo pasa, los
conflictos avanzan, los deseos y las dudas crecen, y Bobby encuentra parte de su
libertad lejos de su casa viviendo con su prima y hermano, en donde incluso se
enamora; pero las palabras de su padre siempre retumban en su mente: “Dios te
va a castigar”, “Que el espejo te diga si eres hombre o mujer”, “hasta los animales
saben con quién hacerlo”. Este rechazo termina siendo el culpable de la decisión
de Bobby de dejar este mundo para buscar la libertad, dejándole un vacío muy
grande en su familia, un diario con todo su dolor y un padre que buscará
respuestas en otras iglesias para poder saber si su hijo puedo llegar al reino de
Dios.
Esta obra supo tocar de manera trágica el tema de la falta de comprensión de
parte de los padres ante la homosexualidad, considerada como un problema,
enfermedad e incluso como una prueba de Dios para merecer el cielo o ganar el
castigo eterno. Crítica a la religión que condena a las personas por su orientación
sexual sin darse cuenta que es algo normal, cegando a muchos jóvenes que no
les queda más solución que la libertad en otra vida. Acompañado por actores que
destacan con su interpretación, la obra llegó a conmover al público hasta las
lágrimas.
La noche concluyó con Casa de Arte Sinapsis Colectiva que presentó “La Muerte
Roja”, propuesta teatral con una estética impecable, que proyecta la decadencia
del gobierno de nuestro país, presentando a diversos personajes representados a
través de máscaras. Uno de ellos es el presidente, quien da un discurso sincero
sobre la situación de nuestro Perú, lleno de pobreza, violencia y la falta de acción
por parte del estado; y que realizará una fiesta extravagante, llena de lujos, en la
que invita a personas “importantes” con el fin de buscar una solución. Para ello,
manda a construir, además de diversas habitaciones coloridas y lujosas, un cuarto
negro con vitrales rojos que reflejé luz como si fuera sangre.
Durante la espera de la fiesta se da una ruptura de la cuarta pared, que sirve para
compartirnos un poco de nuestra televisión basura, con el fin de demostrarnos la
terrible situación a la que estamos acostumbrados a vivir, junto a gobernantes que
se han burlado de nosotros una y otra vez. “Lo que quiere el pueblo es divertirse”.
Llegada la gran fiesta, el presidente recibe la visita de la muerta roja, quien llegó a
traer justicia ante esta corrupción.

Entre algunas de las frases más destacadas se encuentran: “Locura es hacer la


misma cosa una y otra vez esperando que algo cambie”, “Sin el pueblo seriamos
pueblo” Y “Vota por mí, pero para arreglar al país mínimo necesito unos 20 años”
Esta obra destaca, además, por su trabajo actoral, acompañado por el uso
adecuado de la proyección de elementos audiovisuales, generando en el
espectador cierto grado de reflexión.

Clara Figueroa

Prensa Escrita – TEATRO CLUB

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