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- Al examinado se le entregan (en sus manos), una tras otra, las láminas en posición “a”, a la

vez que se le pregunta​ ​“¿Qué podría ser esto?”


- Presentar la lámina en posición “a” significa que la lámina se encuentra horizontal y con su
base hacia el examinado. Esta posición se reconoce porque el texto escrito al reverso de la
misma (número de la lámina, datos de la edición), queda invertido con respecto al examinador
sentado en frente.
- La persona puede mover y girar la lámina como lo desee.
- La persona debe sostener la lámina en sus manos y la longitud del brazo extendido es la
máxima distancia permitida.
- Se debe tener cuidado que la persona no vea anticipadamente desde lejos las láminas.
- En lo posible, pero siempre evitando cualquier sugestión, se deberá insistir en obtener al
menos una respuesta para cada lámina.
- Se registrarán todas las respuestas en la medida que el sujeto las produce.
- No tiene sentido establecer un tiempo fijo o limitado de exposición para cada lámina. Lo
principal es que la experiencia transcurra, en lo posible, sin coerción.
- En cuanto a la ubicación, consideramos adecuado conservar la tradicional disposición de
examinador/examinado frente a frente, uno a cada lado del escritorio o mesa.
- Evitaremos cualquier forma de intervención o indicación respecto de cómo el examinado debe
proceder.
- Cualquier pregunta o solicitud de ayuda del examinado, deberá responderse del modo menos
directivo posible, diciendo simplemente​ “como guste”​, o ​“como prefiera”​.
- Es importante no usar otra formulación de la pregunta oficial (¿Qué podría ser esto?).
- Resulta adecuado que coloque las láminas apiladas con las figuras hacia abajo y en el orden
en que serán utilizadas (es decir la lámina I arriba, luego la II, etc.) al alcance de su mano
derecha, pero fuera del alcance del examinado. Una vez que hemos terminado con una lámina,
la volvemos a dejar sobre el escritorio (en otro lugar, que no se confunda con las láminas que
aún no se han usado), con la figura hacia abajo, antes de pasar al examinado la lámina
siguiente en sus manos.
- Una vez iniciada la prueba, corresponde al examinador tomar nota, tanto de las respuestas del
examinado, las que anotará textualmente con la mayor fidelidad posible, como de todo otro
hecho, dato u observación que se presente.
- Mucha información relevante para la interpretación proviene de formas de comunicación no
verbales expresadas por el examinado.
- En ocasiones tal vez necesitemos pedir al examinado que se detenga un momento, mientras
terminamos de anotar.
- Antes de pasarle la siguiente lámina, pasamos a hacer el interrogatorio o encuesta de las
respuestas.

Encuesta de las respuestas


1. ¿Cuál es el contenido de la respuesta? Es decir, ¿Qué es lo que vio?
2. ¿Cuál es la localización o área de la mancha a la que se refiere la respuesta? Es decir,
¿Dónde lo vio?
- Pedirle que nos indique con precisión qué parte de la mancha abarca su respuesta,
hacer esto para cada una de las respuestas en que sea necesario.
3. ¿Cuál es el determinante del contenido? Es decir, ¿Por qué le pareció eso?
- Las preguntas deberán ser del tipo ​“¿Qué le hizo pensar que podría ser…?”;​ o ¿En
qué se parece a…?; o ¿Por qué le pareció que podría ser…? O con otra formulación
que no aluda directa o explícitamente a algún posible determinante.

- Si es la segunda lámina, podemos repetir nuestra pregunta inicial ​“¿Qué podría ser esto?”​. Si
el examinado ha entendido la dinámica de la prueba, tal vez no sea necesario repetir la
pregunta con cada lámina, sino simplemente entregársela en la mano.

Notación ad hoc
@​ giró la lámina varias veces.
…​ pausas o latencias
(​Nuestros comentarios u observaciones​)

- Solo si luego de dar su primera respuesta, el examinado dejara la lámina en actitud de haber
terminado, le preguntamos “¿Qué otra cosa podría ser?”​, dando a entender que esperamos
más de una respuesta.
- Si después de responder a la segunda lámina hace ademán de devolverla, sin haberla girado
espontáneamente, le indicamos que puede hacerlo.
- Solo si tanto en la lámina I como en la II hubiese dado exclusivamente respuestas globales,
será cuando de por terminada la lámina II que le aclaramos que ​“sus respuestas se pueden
referir a la figura completa o solo a partes de ella”​.
- De ahí en adelante, no volvemos a insistir sobre esto y dejamos al examinado que continúe
con su estilo personal de responder, ya sea que gire las láminas siguientes o no lo haga.

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