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Las gatas de mi casa.

Relato semiautobiográfico.-

No solamente he tenido perros en mi casa,sino también gatos.


Especialmente,gatas. Las gatas son muy amorosas con sus dueños. Y
como madres,superan ampliamente la medida de su amor. Había dos
gatas aquí. A una de ellas le dió mastitis,cosa que no podía alimentar a
sus gatitos. Y es que ambas tenían gatos. Entre machos y hembras. La
gata sana los tomó bajo su protección. Y los gatos ajenos mamaban de su
leche sin preocuparse de nada. Y llegó a tal extremo su afán de
protección que,cuando mi mamá dijo que iba a eliminar algunos,ella los
tomó y se lso llevó al entretecho de la casa. Iba la gata con su tesoro
felino,colgando del hocico,a guardarlos por si algo les pasaba. En esto,mi
mamá preguntó:

-¿Y la "Pituca.",dónde está?-,y le respondí:

-Supongo que en el techo.

Mi mamá,a todo esto,sospechaba que la gata hizo funcionar su instinto


maternal,porque se dió cuenta que no había ninguna cría de gato. En el
intertanto,la gata siguió viviendo en el techo,esto durante dos meses.
Hasta que comenzaron a salir los gatos ya criados. Y lo suficientemente
grandes para no ser eliminados. Y es que el amor materno,cuando es
profundo y verdadero, es capaz de todo. Aunque la criatura no sea hijo de
uno.

FIN

Paine,Julio de 2019.

Por:Lorena Lazo L.-

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