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24 DESTINO DE JEAN CABIN N Lacstrella de cine noes simplemente un actor i siquiera un ator prticularmente quer por el pblico, sino un héroe de tragedia ode leyenda, encarnando un destino que los guionists y directones deben obedecer, aunque sea inconscientemente. De otra forma, el hechizo entce el ‘ctor y su piblico se vera roto, La variedad de peliculas en las que aparece, y que pueden pare ‘cer agradablemente sorprendentes por su novedad, no debe engaiarnos. Esl confirmacién de un destino, peofundo y esencal, lo que buscamos inconscientements en las continuamente pin, por ejemplo, y, deforma bien interesante, mas sutily secretamente lustrado por una estrella como Jean Cabin, En pricticamente todos aus filmes -al menos desde La bite humaine (Jean Renoir, 1938) hasta Demasiado tarde (Au-dela des giles, René Clément, 1952)- Gabin termina por aleanzar un final violesto que tiene la aparienca, miso menos, de un suicidio, 2No es extra que la ley comer ial de final feliz, que obliga a tantos productoces a afadic finales tan artfcales como aque: los de las comedias de Moliére, no funcione para uno de los mis populares 1s, quien tos deberiamos desear ver felizmente eatado y con un montén de hijs? sila? Puede alguien imaginar quel final de Quai des brames (Marcel Carné, 1938) consiguiera apartar a la pobre Michele Morgan de las garras de Michel Simon y Pierre Brasscur, navegando con ella hacia su futuro en Amétia; 0 ue, volvigndose sensato, prefiriera, cuando rompe el dia en Le jour se lew (Marcel Carné, 1939) entregarse en persona, con ls esperanza de verse exculpado? renovadas hazaias de nuestro actor. Esto es eviente en Cl ¥ simpiticos acto Pero Zpuede verse & Gabin como tn hombs No, imposible, El piblico, que se traga tants afrenta, se sentra indudablemente como sile tomaran el peo silos guonistas se le presentaran con un final feliz para Jean Gabin, Prueba por la reducto ad absurdum:;Que alguien intente matar a Luis Mariano 0 Tino Rossi de la misma manera! {Camo podemos expicarnos esta parado todavia més evdente ya que contradice las invio- lables lees del cine? La explicaién es que Gabi, en los filmes citados, no nos ests dando la interpretacién de una historia entre otras muchas posibles. Es siempre la misma historia, la ya, yuna que debe inevtablemente terminar mal, como la historia de Eclipo ola de Fedea. Ga bin es el héroetrigio del cine contemporsneo, Con cada nuevo filme de Cabin, el cine rebobi na la infernal miquina del destino, exactamente igual queen Le jou se lev, esa noche, como cirda noche, vuelve a sonar la alarma cue irénico eruelrepicar debe ose al amanecer, en la hora dest muerte. Puede resultar muy simple mostrar como, bajo la apariencia de una ingeniosa variedad, los ‘engranajes exencales del mecanismo siguen siendo los mismos. Aqui tenemos un cjemplo. Se dice que, antes dela guerra, Gabininsstia, antes de frmar cualquier contrato, en que la histo 1 desing de Jean Cabin 43 ANABELLA JEAN GABIN Director rin incluyera una de esas explosvas escenas de ra en las que se supers asi mismo, {Era esto el Capricho de una estrella, era el cebo colgando para conseguir su pequeio momento de gloria? ‘Quiz, pero probablemente él mismo sentia, através de su vanidad de actor, que privarse asi ‘mismo de ee momento sri trsicionar su personaje. Efectivamente, es casi siempre en un mo: mento de rabia cuanda Gabin atrae el infortunio sobre si mismo, mordiendo la tampa del des. ‘ino que inevitablemnente Ie llevarda Ja muerte. Adems, en las tagedias y la épica dela an- tigtedad, la rabia no era solo un estado psicoldgico que se puede tratar con una ducha fia 0 un sedate; era un estado especial, una posesin divina, una puerta para los dioses dentro del ‘aundo de ls humanos, a través de la que se dealza el destino. Es un acto de rabia de Edipo, fe camino a Tebas, lo que trae la desgracia sobre I, por dar muerte a un auriga (su pare) 4 quien no reconace, Los diowes modernos que reinan sobre las Tebas suburbanas, com sus ‘Olimpos de fabricasy sus monstruos de acero, también esperan a Gabin en los cruces de cami ‘no del destino. “Todo lo dicho se apica mejor al Gabin de preguerra, de La bite humaine y Le ours live. Ga bin ha cambiado desde entonees; e+ mis viejo, su pelo rubio original es ahora gris su cara ha ‘engordado. En el cine, ee suele deci, el destino no se refleja en un semblante, es el semblante ‘I que revel su destino, Gabin no puede permanecer el mismo para siempre; pero tampoco puede escapar de una mitologia que esti tan sélidamente establecida. 'Y asi significativamente, Aurenche y Bost en Demasiado tarde, siguen donde Jeanson y Pre- ‘vet lo dejaron. Recordemos el sltima plano de Pépé le Moko (Julien Duvivier, 1937): el agoni- zante Gabin aferradoa las rejas de ier alrededor del puerto de Argel, viendo aljarse el basco ‘que se leva todas sus esporanzas. El filme de René Clement comienza donde termina el de Duvivier. Sus titulos podian haber dicho, Supongamos que le han dado a Gabin una oportu~ nidad, podria haber cogido el barco; aqui esta él ahora lotro lado de as rejas. El filme es sim ‘plement el retorno de Cabin ass destino, la cuas-voluntariarenunciaciin al amor y a felici ‘dad, ln asuncin de que el paroxismo de un dolor de muelas y los doses, cuando todo esti dicho ‘ybecho, son las fuerzas mis poderosa de la vida Es verdad que en La Marie du Port (Marcel Carné, 1950), la fuerza dl destino se ha suai ‘alo, Gabin se ha convertido meramente en actor de nuevo, Por primera vez, se eata, (pero ‘puede aleanzar alguna felicidad? Marcel Carné no ha so capaz de escapar de pagar su deuda on el vieo mito, Gabin e ico, es un “triunfalor", a pesar del cul, alo larg de todo filme, ‘sehabla de él como de una nave en dique seco, un barco pesquero que nunca sale afaena, y et ‘como si furamostextigoe del viejo sucHo de Cabin nunca realizado (el suefo de una fuga que funca puede llevar a cabo, una despedida que podsiahacede libre). Asi, su dudosa felicidad presente, su éxito material antes que moral, no es nada més que la confesion de un fracas, la ‘miserable recompensa a un ato de enunciacion, Los dioss se muestranagradecidos con aque: los que renuncian aser heroes! ‘Queda para las socidlogos y los moralstas (especialmente para los moralistascrstianos y {por qué no?, pata los tedlogos) el reflexionarsobee el significado profundo de una mitologia en Ja que, a través dela popularidad de un actor como Gabin, millones de nuestros contempori ‘eos se edescubren 4 si mismos. Quiz un mundo sin Dios se conviertaen el mundo de los loses y de los destinos que dispensan. destin de ean Cabin 45

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