Está en la página 1de 14

UNIVERSITASEnero-junio de 2007

SCIENTIARUM
Revista de la Facultad de Ciencias
Edición especial II, Vol. 12, 11-24

HERRAMIENTAS PARA ABORDAR LA RESTAURACIÓN


ECOLÓGICA DE ÁREAS DISTURBADAS EN COLOMBIA

J. I. Barrera-Cataño, C. Valdés-López

Unidad de Ecología y Sistemática (UNESIS)


Departamento de Biología, Facultad de Ciencias,
Pontificia Universidad Javeriana. Carrera 7ª No. 43-82, Bogotá,
Colombia barreraj@javeriana.edu.co cvaldes@javeriana.edu.co

RESUMEN

Este artículo presenta una revisión sobre los temas de la ecología de la restauración, la restauración
ecológica de áreas disturbadas y la aplicación de dichos conceptos para abordar la restauración ecológica
de los ecosistemas disturbados, en especial los terrestres.

Los Andes colombianos comprenden diversos ecosistemas que se encuentran fuertemente sometidos a la
presión antrópica por tratarse de la región más altamente poblada del país. En consecuencia, la coloniza-
ción y establecimiento del hombre en la montaña genera una gran cantidad de disturbios que han dado
origen a un variado y numeroso repertorio de áreas disturbadas, entre las que sobresalen bosques frag-
mentados, parches con ausencia de vegetación, áreas construidas, áreas cultivadas y pastoreadas, áreas
con procesos erosivos, ríos y quebradas con disminución de caudales, suelos y cuerpos de agua contami-
nados, entre otros.

La restauración ecológica de las áreas alteradas obliga al diseño e implementación de tácticas y técnicas de
restauración basadas en conceptos claros y aplicables de la ecología, de tal modo que contribuyan, con el
tiempo, a desarrollar una estrategia de restauración que responda al restablecimiento de ambientes degra-
dados y garantice su sostenibilidad.

Para abordar la restauración ecológica es necesario considerar los niveles de complejidad con un enfoque
jerárquico supraorganísmico que involucre escalas espaciales y temporales del área disturbada; las etapas
a considerar comprenden: a) definición del objetivo del proyecto, b) caracterización del área disturbada,
c) implementación de las técnicas y procedimientos más adecuados y d) la definición de las variables para
realizar el seguimiento.

Palabras clave: ecología de la restauración, restauración ecológica, tensión, disturbio, perturbación.

ABSTRACT

This paper is a revision about different topics related to restoration ecology, ecological restoration of
disturbed areas, and application of concepts to carry out the ecological restoration of disturbed ecosystems,
especially in high mountain ecosystems.

11
Universitas Scientiarum - Edición especial II, Vol. 12, 11-24

Colombian Andes comprises various ecosystems that are seriously exposed to human activities because
this is the most populated area in the country. As a consequence, these mountains present a wide range of
disturbed areas, such as fragmented forests, derelict lands, urban centres, cultivated areas and grazed
areas, areas experiencing erosive processes, rivers and streams with reduced water flow rates, and
contaminated soils and water bodies, amongst others.

Restoration of these areas would require designing and implementing techniques based on applicable
concepts from Ecology, in order to develop an effective restoration strategy to assist the recovery of
degraded environments and ensures their sustainability.

Initiatives on ecological restoration require considering complexity levels. That means a hierarchical
supraorganismic approach involving spatial and temporal scales of the disturbed area. Stages to be
considered are: a) defining the objective of the project, b) diagnosis of disturbed area, c) implementing
the most appropriate techniques and procedures, and d) defining variables to monitor.

Key words: ecological restoration, disturbance, restoration ecology, stress, perturbation.

INTRODUCCIÓN das las experiencias prácticas y los méto-


dos propuestos.
La restauración ecológica de áreas
disturbadas es un tema de mucha actuali- En Colombia el tema de la restauración
dad y al mismo tiempo uno de los más com- ecológica ha sido trabajado desde media-
plejos de abordar, debido a vacíos en el dos de la década de los noventa del siglo
conocimiento sobre las poblaciones, co- pasado y es la Fundación Bachaqueros
munidades, ecosistemas y paisajes natura- quien da los primeros pasos, pero es a fina-
les. Otros componentes adicionales les de esa década y principios de este siglo
fundamentales están representados en lo que el tema se empieza a poner de moda,
social, político y económico, en la medida promovido mediante cursos y seminarios
que constituyen fuerzas responsables de organizados por diferentes instituciones,
alteración y profunda transformación de como la Fundación Restauración de
los ecosistemas. Ecosistemas Tropicales (FRET), el Minis-
terio del Medio Ambiente, el DAMA, el Jar-
En el mundo, los temas de la restauración dín Botánico, la Universidad Nacional
ecológica y ecología de la restauración co- (Departamento de Biología) y la Pontificia
menzaron a ser desarrollados a finales de Universidad Javeriana (Departamento de
la década de los ochenta del siglo XX por Biología - Escuela de Restauración
investigadores como Jordan, Cairns, Ecológica).
Bradshaw y Harper; pero su desarrollo más
importante fue dado, durante la década de Pese a que hoy se han incrementado los
los noventa con el nacimiento de la Socie- escenarios para discutir las bondades del
dad de Ecología de la Restauración (SER), tema y se han escrito algunos documentos,
y con ella la aparición de dos importantes todavía existe bastante confusión entre los
revistas: Restoration Ecology y Ecological técnicos sobre su objetivo y sobre todo de
Restoration, cada una con objetivos muy cómo abordarla, cuando de restaurar áreas
diferentes: mientras la primera está dedi- se trata.
cada a publicar los resultados de las inves-
tigaciones realizadas sobre el tema, la La responsabilidad que tienen los investi-
segunda tiene como objetivo mostrar to- gadores y los técnicos especialistas en el

12
Enero-junio de 2007

desarrollo del tema y el montaje de las prác- Por su parte, se ha considerado a la “Res-
ticas de restauración ecológica es muy gran- tauración ecológica” como:
de. Se debe evitar a toda costa que un tema
tan complejo y de tanta relevancia para el “el proceso de asistir el recubrimien-
futuro del país sea asumido por quienes no to de un ecosistema que ha sido de-
tienen en consideración que es un gradado, dañado o destruido. En la
ecosistema, como es su composición y su restauración ecológica se tiene
funcionamiento y, sobre todo, que es un como objetivo el restablecimiento
ecosistema alterado y cómo podría resta- de la función y la estructura de las
blecerse. áreas que han sido disturbadas, uti-
lizando como referencia los
El presente artículo pretende colocar a dis- ecosistemas predisturbio” (National
posición de los técnicos (biólogos, Research Council, 1992; SER
ecólogos, manejadores del medio ambien- 2004).
te, ingenieros, arquitectos y sociólogos) al-
gunos de los conceptos claves que son Para fortalecimiento de la ecología de la
utilizados en el abordaje de la restauración restauración en nuestro país se hace nece-
ecológica, así como dar herramientas para sario implementar experimentos que ayu-
el desarrollo de la investigación pura y apli- den a entender cómo se ensamblan y
cada, y los montajes de prácticas de restau- funcionan los componentes de los
ración propiamente dicha. compartimentos de los ecosistemas y, en
general, del ecosistema en proceso de res-
tablecimiento. En este sentido, cuando se
Ecología de la restauración y
desarrolla un proyecto de investigación es
restauración ecológica
indispensable considerar los niveles jerár-
quicos supraorganísmicos, (especie, pobla-
Para hablar del nuevo concepto o tema de ción, comunidad, ecosistema, paisaje y
la “Ecología de la restauración” es funda- bioma) y la escala espacial y temporal. A
mental recordar que se entiende por nivel espacial pueden presentarse eventos
ecología en el contexto de las ciencias pu- que suceden en áreas pequeñas (hasta una
ras y específicamente de la biología. De hectárea) y en áreas grandes (mayores de
acuerdo con Stiling (1996) y Chapman & 10 hectáreas), mientras que a nivel tempo-
Reiss (2001) es definida como “la ciencia ral existen eventos que pueden presentarse
que estudia los organismos vivos, sus en fracciones de segundos, días, meses,
interacciones y las interacciones con el años, siglos y milenios.
entorno”. Por su parte la ecología de la res-
tauración toma los conceptos de la ecología A continuación se plantean algunas de las
básica y los provee de manera clara a los variables que pueden ser consideradas en
técnicos de la restauración, junto con los cada uno de los niveles jerárquicos cuando
modelos, herramientas y métodos se aborda un proyecto de restauración
(Bradshaw, 1993; Cairns Jr., 1993; Clewell, (Hobbs & Norton 1996; SER 2004):
1993; SER, 2004). En conclusión, la
ecología de la restauración puede ser defi-
nida como la rama de la ecología que estu- a) Especie: Formas de reproducción, ci-
dia las áreas disturbadas en proceso de clo de vida, distribución, función en el
restablecimiento de manera natural o asis- ecosistema, estado fenológico, reque-
tida. rimientos básicos para su desarrollo.

13
Universitas Scientiarum - Edición especial II, Vol. 12, 11-24

b) Poblaciones: Estructura de la población limitante, disturbio y perturbación han sido


(hembras, machos, juveniles, adultos, manejados, de manera independiente, por
tasa de migración, tasa de reproducción diversos autores, pareciera que las diferen-
y época de reproducción, entre otros). cias respondieran a enfoques diferentes. A
finales de la década de los ochenta se plan-
c) Comunidades: Estructura (la riqueza de
teó todo un debate sobre el concepto de
especies, diversidad, tamaño de las po-
tensión y la estabilidad de los ecosistemas
blaciones, cobertura y su distribución
pero poco se habló del tema de disturbios y
vertical y horizontal), función (el nivel
perturbaciones (Grime, 1989).
trófico de la especie, biomasa, produc-
tividad primaria e interacciones entre
otros). Posteriormente, Beeby (1993) basado en los
trabajos de Grime (op. cit.) y Bender (1984)
d) Ecosistema: Estado sucesional, estruc- definió el término de tensión como un estí-
tura (estado de los compartimentos, di- mulo aplicado que es medido por su capa-
versidad, riqueza), función (producción cidad para desviar algún componente
de biomasa, productividad primaria y viviente del ecosistema de su proceso de
secundaria y el flujo de energía y mate- desarrollo; además, planteó la existencia
ria entre ecosistemas y áreas adyacen- de dos tipos de tensión de acuerdo a la exis-
tes (Ehrenfeld & Toth 1997; Ehrenfeld, tencia del control o no, sobre el sistema
2000; Barrera & Ríos, 2002). afectado: los disturbios y las perturbacio-
e) Paisaje: Conectividad, composición, nes. Mientras los disturbios fueron defini-
heterogeneidad, tipo de matriz, flujos, dos como eventos no planeados que
ecotónos (Hobbs 2002, en: Perrow & afectan la estructura y función de los
Davy 2002), patrones de variación a ecosistemas, las perturbaciones fueron con-
través de la caracterización de la ten- sideradas como manipulaciones planeadas
dencia, amplitud de oscilación, ritmo que son producto de un proceso de experi-
y frecuencia de los disturbios (Forman mentación.
& Grodron 1986; Forman, 1995).
La confusión en la interpretación de las de-
En el abordaje de la restauración ecológica finiciones de tensión y disturbio, radican
de las áreas disturbadas es necesario tener en lo siguiente: 1) que la tensión es defini-
buenos conocimientos sobre ecología bá- da como un estímulo que tiene la capaci-
sica, es decir, cómo se organizan las espe- dad de desviar la trayectoria de un
cies en el tiempo y en el espacio (ensamblaje ecosistema y 2) el disturbio es definido
o asociación), los tipos de interacción en- como un evento discreto que rompe la es-
tre las especies, la importancia del clima en tructura y la función. Cuando se analizan
el repoblamiento y desarrollo de las espe- bien dichas definiciones se termina pen-
cies, y el papel de la topografía y el sando que la tensión es una cosa y el dis-
substrato en dicho repoblamiento turbio es otra, es decir, primero es el
(Temperton et al., 2004). estímulo y luego el evento que genera el
área disturbada. No obstante, la confusión
se hace más evidente cuando plantea que
Tensión, disturbio, perturbación y tanto el disturbio como la perturbación son
limitación dos categorías de tensión (Beeby, 1993).

Los conceptos de tensión, factor tensionan- El hecho es que quienes han hablado o ha-
te, sistema tensionado, limitación, factor blan de tensión (estrés) no tocan el tema de

14
Enero-junio de 2007

disturbio o lo hacen tangencialmente sistemas naturales; mientras que los siste-


(Odum, 1971; Lugo, 1982; Grime, 1989; mas tensionados son aquellos que no pue-
Beeby, 1993; Brown & Lugo, 1994; den desarrollarse normalmente debido a
Rapport & Whitford, 1999) y los que traba- que están sometidos permanentemente a es-
jan el tema de disturbio no tocan el tema de tímulos externos que retrasan o dañan su
tensión o lo hacen muy poco (Mooney & proceso de desarrollo (figura 1).
Godron, 1983; Pickett & White, 1985;
Baker, 1992b; Bornette & Amoros, 1996; Entre los autores que, de una manera u otra,
Turner et al., 1998, White & Jentsch, 2001). han trabajado el tema de los disturbios y
sus consecuencias sobre poblaciones, co-
En este artículo, para efectos de abordar con munidades, ecosistemas y paisaje, se des-
mayor claridad lo que es un proyecto de tacan: Grime (1979), quien define el
restauración ecológica, se hará referencia disturbio como el mecanismo que limita la
al término disturbio como el evento que biomasa de las plantas debido a que causa
genera las áreas disturbadas; y la tensión su destrucción parcial o total; Forman y
como los estímulos generadores o no de Godron (1986), quienes definen el distur-
disturbios para cualquier sistema biológi- bio como un evento que causa un cambio
co. Los términos de factor tensionante y significativo del patrón normal de un siste-
sistema tensionado son considerados como ma ecológico; van Andel y van den Bergh
en Brown y Lugo (1994). Los factores (1987) que explican el disturbio como un
tensionantes son los diferentes tipos de es- cambio de condiciones que interfiere con
tímulo externo que pueden dañar o no los el funcionamiento normal de un sistema

FIGURA 1. Esquema en dos dimensiones que explica el efecto de las tensiones (T) y los disturbios (D)
sobre un sistema.

15
Universitas Scientiarum - Edición especial II, Vol. 12, 11-24

biológico. Existe coincidencia entre algu- bios (mayores de 10 hectáreas), b) medianos


nos investigadores respecto de que el dis- (1 a 10 hectáreas) y c) pequeños (menores de
turbio es un proceso que conduce a un una hectárea). Asimismo, de acuerdo a la
incremento en la disponibilidad de recur- intensidad o daño que ocasionan a los
sos a la que responden los sobrevivientes o ecosistemas, los disturbios se pueden cla-
los nuevos colonizadores (Marks, 1974; sificar en: graves o severos, medianos y le-
Mooney & Godron, 1983; Sousa, 1984; ves.
White & Pickett, 1985; Tilman, 1985;
Denslow, 1987; Runkle, 1989). Con la ocurrencia de un disturbio se pue-
den evidenciar diferentes consecuencias,
De acuerdo con el origen los disturbios pue- tales como: a) la aparición de un claro, b)
den ser clasificados en: 1) naturales (incen- pérdida total o parcial del suelo, c) cam-
dios forestales, huracanes, inundaciones y bios en las condiciones microclimáticas
deslizamientos de tierra, entre otros) y 2) (luz, temperatura, humedad, precipitación),
antrópicos (incendios forestales, tala, ex- d) pérdida total o parcial del banco de se-
tracción de materiales a cielo abierto, uso millas, e) disminución del reclutamiento de
agrícola, uso pecuario, las construcciones plántulas, f) pérdida o disminución en la
urbanas, descarga de sedimentos, descarga riqueza de las especies y g) disminución
de contaminantes). Cada uno de estos ti- del tamaño de las poblaciones (figura 2).
pos de disturbio da origen a un tipo de área
o ecosistema disturbado. Las limitaciones son condiciones propias
de los sistemas debidas a los factores o
De otra parte, tanto los disturbios naturales agentes limitantes, que impiden su normal
como antrópicos, de acuerdo al tamaño, desarrollo. En el caso del suelo se pueden
pueden clasificarse en: a) grandes distur- presentar limitaciones por ausencia de

Figura 2. Efecto del disturbio sobre el proceso de desarrollo del ecosistema. Nótese que se pierde
totalmente la riqueza, abundancia de individuos, productividad y se afecta la organización espacial, entre
otros.

16
Enero-junio de 2007

nutrientes como: fósforo (P), potasio (K), tos del ecosistema y las condiciones
sodio (Na), calcio (Ca), magnesio (Mg), ma- microclimáticas.
teria orgánica (M.O.). De igual manera, se
6) Áreas disturbadas por expansión y uso
pueden presentar limitaciones por valores
urbano. Se afectan todos los comparti-
de pH muy altos o muy bajos, ya que inci-
mentos drásticamente y las condicio-
de de manera directa en la movilidad de los
nes microclimáticas.
nutrientes. Tanto los contenidos muy ba-
jos como muy altos de agua pueden incidir 7) Áreas disturbadas por expansión
de manera negativa en el desarrollo de los agrícola. Se afectan todos los compar-
ecosistemas o de sus componentes timentos del ecosistema. Como conse-
(Terradas, 2001). cuencia de la tumba, quema y siembra.
8) Áreas disturbadas por especies exóti-
cas. Se afectan todos los compartimen-
Características de las áreas disturbadas
tos. En especial se afecta la riqueza de
especies nativas.
Un área disturbada es aquella que ha perdi-
do total o parcialmente sus atributos, o en 9) Áreas disturbadas por procesos
otras palabras su función (productividad, erosivos. Se afectan todos los compar-
interacciones, polinización, regulación timentos, pero principalmente el sue-
hídrica) y su estructura (organización es- lo.
pacial de las especies, número de especies, 10) Áreas disturbadas por descargas de
estado de las poblaciones), existen varios sedimento. Se afecta, principalmente,
ejemplos al respecto: el compartimento suelo y el agua en
los sistemas acuáticos.
1) Áreas disturbadas por la extracción 11) Áreas disturbadas por descarga de
de materiales a cielo abierto. Se afec- contaminantes. Se afectan todos los
tan todos los compartimientos del eco- compartimentos del ecosistema, pero
sistema (suelo, vegetación y fauna) y fundamentalmente el suelo.
las condiciones microclimáticas.
12) Áreas disturbadas por inundaciones.
2) Áreas disturbadas por incendios fo- Se afectan todos los compartimentos,
restales. Se afectan el compartimiento pero principalmente el suelo.
de la vegetación y de la fauna princi-
palmente. Un ejemplo de cómo se afectan los com-
partimentos en los ecosistemas como con-
3) Áreas disturbadas por tala rasa. Se
secuencia de un disturbio, se presentan en
afectan los compartimentos de la vege-
un modelo de un bosque no disturbado y
tación, la fauna y el suelo, y las condi-
disturbado por un incendio forestal (figu-
ciones microclimáticas.
ras 3, 4 y 5).
4) Áreas disturbadas por tala selectiva.
Se afectan parcialmente los comparti- Si el impacto del fuego es intenso, los com-
mentos de la vegetación, la fauna y el ponentes aéreos y superficiales del ecosiste-
suelo, así como las condiciones micro- ma se ven afectados severamente;
climáticas. particularmente, son evidentes los impac-
tos sobre la flora y la fauna. Para el caso de
5) Áreas disturbadas por uso agropecua- la flora, todo el componente aéreo rápida-
rio. Se afectan todos los compartimen- mente se mineraliza bajo el efecto de la

17
Universitas Scientiarum - Edición especial II, Vol. 12, 11-24

Modelo básico de un ecosistema

FIGURA 3. Representación de un bosque no disturbado, simbología de Odum (1971).

carbonización a altas temperaturas, afectan- climáticas dentro de las cuales la lluvia y


do las vías de forrajeo y las vías detríticas el viento contribuyen activamente a la re-
dependientes de la necromasa. El compo- moción de cenizas y materiales sueltos, que
nente faunístico se ve afectado tanto por la componen los restos de los componentes
muerte de individuos bajo el efecto del ca- bióticos del ecosistema (figura 5). En con-
lor y el humo, como por la emigración de secuencia, tanto los materiales edáficos su-
los sobrevivientes que logren escapar del perficiales como la gran parte de los
disturbio (figura 4). nutrientes, que rápidamente fueron dispues-
tos por la carbonización de la materia orgá-
Por su parte, el suelo es afectado diferen- nica, pueden ser removidos y transportados
cialmente de acuerdo a su profundidad. a otros ecosistemas a través de los vectores
Hasta los primeros cinco centímetros pue- agua y viento durante la acción combina-
de verificarse el efecto del calor sobre los da de los procesos de erosión pluvial, lami-
principales componentes de este subsiste- nar y eólica.
ma. La materia orgánica, por ejemplo, es
rápidamente mineralizada durante el pro-
ceso de carbonización, y con ello desapa- Cómo abordar la restauración ecológica
rece toda la mesofauna y microorganismos de áreas o sistemas disturbados
asociados; las altas temperaturas superfi-
ciales provocan un desecamiento de la par- Para abordar un proyecto de restauración
te superficial del suelo y la muerte de una ecológica de un sistema disturbado, es fun-
alta proporción de las semillas viables que damental, primero, preguntarse lo siguien-
componen el banco de semillas. te: ¿por qué y para qué se debe restaurar?,
¿cuándo se debe restaurar?, ¿con qué y con
Una vez finalizado el incendio, el suelo quiénes se debe restaurar?, ¿cómo y cuán-
queda expuesto a las nuevas condiciones do se deben realizar los procesos de eva-

18
Enero-junio de 2007

Efecto del fuego sobre el ecosistema

FIGURA 4. Diagrama general de los efectos del fuego sobre los componentes básicos de un ecosistema
(véase explicación en el texto).

FIGURA 5. Representación del compartimento suelo de un bosque de roble disturbado por un incendio
forestal. Simbología de Odum (1971).

19
Universitas Scientiarum - Edición especial II, Vol. 12, 11-24

luación y seguimiento? y por último ¿tie- miento natural del sistema disturbado.
ne sentido establecer experiencias piloto En el momento de la realización de la
de restauración en dicho sistema? caracterización diagnóstica deben
definirse los factores propios y exter-
A continuación se plantean una serie de nos al sistema que podrían impedir o
pasos que deben ser seguidos en un pro- retrasar su restablecimiento.
yecto de restauración ecológica:
5. Definición de los factores potenciado-
res de la restauración. También al mo-
1. Definición del objetivo de restauración. mento de la caracterización diagnóstica
Dicho objetivo será definido de acuer- se deben identificar todos los elemen-
do a las características del área tos internos y externos al sistema dis-
disturbada en el contexto del paisaje, turbado que pueden acelerar su
los recursos económicos con que se restablecimiento (Barrera & Ríos,
cuente y los requerimientos de la co- 2002).
munidad. Puede ser para una restaura- 6. Establecimiento de las prácticas de res-
ción propiamente dicha cuyo objetivo tauración. Deben ser implementadas
es un área de preservación, para una re- con base en el objetivo u objetivos, la
habilitación donde el sistema final ten- zonificación, la caracterización diag-
drá un manejo sostenible o para una nóstica, los factores limitantes, los fac-
recuperación donde el sistema final tores tensionantes y los factores
podrá tener un uso muy diferente al potenciadores. En este paso se deben
predisturbio, por ejemplo un parque de implementar las técnicas y estrategias
recreación pasiva o activa. que permitan asegurar el éxito del pro-
2. Zonificación del área a restaurar. Este yecto.
paso es fundamental previo a la caracte- 7. Montaje del sistema de evaluación y
rización del área disturbada y del sistema seguimiento. De acuerdo con los obje-
de referencia, y debe realizarse cuando el tivos de la restauración y los recursos
área a restaurar presenta dimensiones ma- disponibles, se deben definir las varia-
yores a una hectárea. La zonificación es bles e indicadores a utilizar para valo-
una buena herramienta para la planifica- rar el éxito o fracaso del proyecto. El
ción de la caracterización y de la res- sistema de evaluación y seguimiento
tauración propiamente dicha y debe ser implementado desde el mis-
consiste en la caracterización con cri- mo momento en que sean establecidas
terios climáticos, geomorfológicos, las prácticas de restauración.
edáficos y de cobertura.
8. Participación comunitaria. Para asegu-
3. Caracterización, física, biótica y so- rar el éxito del proyecto de restaura-
cial, del sistema disturbado y del siste- ción ecológica se debe involucrar a la
ma de referencia. Con el propósito de comunidad en todo el proceso, es de-
equivocarse lo menos posible en el pro- cir, desde el diagnóstico hasta la fase
ceso de restauración es fundamental de seguimiento y evaluación. Si no se
tener conocimiento de su composición da la apropiación por parte de la comu-
y su estado, de igual manera, debe su- nidad se habrán desperdiciado todos
ceder con el sistema de referencia. los recursos y perdido los propósitos
4. Definición de los factores tensionantes de la restauración (sería como tirar di-
y limitantes que afectan el restableci- nero a la caneca de la basura).

20
Enero-junio de 2007

El montaje de experimentos en el marco Los resultados obtenidos de las investiga-


de la restauración ecológica. Aunque no ciones posibilitarán a los técnicos de la res-
es exactamente un paso, a seguir, en el mon- tauración no cometer errores o minimizarlos
taje de las prácticas o experiencias de res- a la hora de desarrollar experiencias o mon-
tauración, su realización es muy clave ya tajes. Es decir, se pueden aprovechar los
que los resultados obtenidos pueden ser re- mejores resultados de los tratamientos con-
plicados o tenidos en cuenta en áreas que siderados en el experimento para su aplica-
presenten las mismas problemáticas. Como ción en extenso en las áreas disturbadas.
cada tipo de área disturbada, en proceso o Permiten además, fortalecer el desarrollo
no de restablecimiento, es un escenario conceptual y metodológico en el campo
óptimo para validar hipótesis sobre restau- de la restauración ecológica.
ración ecológica, sucesiones y ensamblaje
de comunidades, y permiten responder pre-
Seguimiento y evaluación de los
guntas de investigación; deben ser aprove-
proyectos de restauración Ecológica
chados en la medida de lo posible para el
montaje de experimentos. Cada proyecto
de investigación cuenta también con unos El éxito del proyecto de restauración
pasos, como se enumeran a continuación: ecológica para los casos de la restauración
propiamente dicha y rehabilitación será lo-
a) Definición del problema de investiga- grado cuando el sistema en restauración
ción. El éxito de todo proyecto de in- pueda sostenerse sin ningún tipo de subsi-
vestigación radica en la claridad con dio. Si los logros no son los esperados se
que se plantee y defina el problema de debe pensar en un manejo adaptable que
investigación. Para ello el investigador garantice que la restauración vaya por la
cuenta con dos herramientas fundamen- trayectoria esperada (NRC 2004; NAS
tales la información secundaria y las 2004a), este manejo permite hacer los ajus-
visitas de campo. tes necesarios para redireccionar el proyec-
to y obtener finalmente los resultados
b) La pregunta o preguntas de investiga- esperados. A continuación se presentan al-
ción. Surgen del entendimiento del pro- gunas variables que pueden ser útiles para
blema y pueden tener diversos niveles el programa de seguimiento y evaluación
jerárquicos (poblaciones, comunida- del área en restauración.
des, ecosistemas o paisajes) y escalas
(tiempo y espacio) de abordaje. a. Compartimento de la vegetación: ri-
c) Las hipótesis de investigación. Son queza de especies, cobertura, abundan-
planteadas con base en la pregunta de cia, estado sucesional, atributos vitales
investigación y son suposiciones sobre de las especies, número y estado de los
los eventos, los procesos o las interac- grupos funcionales.
ciones a ocurrir en el sistema manipu- b. Compartimento de la fauna: riqueza de
lado. especies, abundancia, tipos de interac-
d) Los objetivos del experimento. Deben ciones, atributos vitales de las especies,
ser claros y deben apuntar a responder número y estado de los grupos funcio-
la pregunta o preguntas de investiga- nales, la estructura de las poblaciones
ción. (estados maduros, inmaduros, hembras,
machos) y distribución.
e) El método o métodos, cronograma y
costos. Deben ser acordes a cada obje- c. Compartimiento del suelo: es impor-
tivo específico del proyecto. tante considerar tanto el componente

21
Universitas Scientiarum - Edición especial II, Vol. 12, 11-24

biótico como abiótico. En el compo- scape ecology. Restoration Ecology, 5


nente biótico variables como riqueza, (4): 318-323.
la abundancia, distribución, número y
estado de grupos funcionales. En el BENDER, E.A.; CASE, T.J. & GILPIN M.E. 1984.
caso de los componentes abióticos es Perturbation experiments in commu-
clave tener en cuenta los nutrientes nity ecology: Theory and practice.
básicos (NPK), CO, elementos menores Ecology, 65: 1-13.
(Mn, Mg, Fe, Ca, Na) y la relación C/N.
La escogencia de las variables depen- BORNETTE, G. & AMOROS, C. 1996. Disturban-
derá de los propósitos de la restaura- ce regimes and vegetation dynamics:
ción. role of floods in reverine wetlands.
Journal of Vegetation Science, 7: 615-
AGRADECIMIENTOS 622.

Los autores agradecen el apoyo de la BRADSHAW, A.D. 1993. Restoration ecology


Pontificia Universidad Javeriana por per- as a science. Restoration Ecology, 1
mitir los tiempos para la escritura del pre- (2): 71-73.
sente artículo, en especial a las doctoras
Ángela Umaña Decana Académica de la BROWN, S. & LUGO A.E. 1994. Rehabilitation
Facultad de Ciencias e Ingrid Schuler, di- of tropical lands: a key to sustaining
rectora del Departamento de Biología. A la development. Restoration Ecology, 2
bióloga Sandra Constantino por la traduc- (2): 97-111.
ción del resumen. Por último, agradece-
mos a los compañeros de la Unidad de CAIRNS Jr. J. 1993. Is restoration ecology
Ecología y Sistemática en especial al pro- practical? Restoration Ecology, 1 (1):
fesor Julio Mario Hoyos por las motiva- 3-7.
ciones constantes para la escritura del
presente artículo. CHAPMAN, J.L. & REISS, M.J.R. 2001. Ecology
principles and applications. Cambridge
University Press. U. K. 327 pp.
LITERATURA CITADA

BAKER, W.L. 1992b. The landscape ecology CLEWEL , A.F. 1993. Ecology, restoration
of large disturbance in the design and ecology and ecological restoration.
management of nature reserves. Land- Restoration Ecology, 1 (3): 141.
scape Ecology. 7: 181-194.
CLEWEL , A.F. & RIEGER, J.P. 1997. What
practitioners need from restoration
BARRERA, J.I. & RÍOS, H.F. 2002. Acercamien-
ecologist? Restoration Ecology, 5 (4):
to a la ecología de la restauración.
350-354.
Pérez - Arbelaezia. No. 13: 33-46.
DENSLOW, J.S. 1987. Tropical rainforest gaps
B EEBY , A. 1993. Applying ecology. First and tree species diversity. Annual
edition. Chapman & Hall., London, Review of Ecology and Systematics 18:
Great Britain. 440 pp. 431-451.

BELL, S.S.; FONSECA, M.S. & MOTTEN L.B. EHRENFELD, J.G.; TOTH, L.A. 1997. Restora-
1997. Linking restoration and land- tion ecology and the ecosystem per-

22
Enero-junio de 2007

spective. Restoration Ecology, 5 (4): M.R. and DAVY, A.J. (eds.). Handbook
307-317. of ecological restoration: restoration
in practice. Cambridge University
EHRENFELD, J.G. 2000. Defining the limits of Press, 24-45.
restoration: the need for realistic goals.
Restoration Ecology, 8 (1) 2-9. HOBBS, R.J. & NORTON, D.A. 1996. Towards a
conceptual framework for Restoration
F ARNWORTH , E.G. & G OLLEY , F.B. 1977. Ecology. Restoration Ecology, 4; 2:
Ecosistemas frágiles. Primera edición. 93-110.
México. Fondo de Cultura Económi-
ca, 381 pp. LUGO A. & MORRIS G.L. 1982. Los sistemas
ecológicos y la humanidad. Secretaría
FORMAN, R.T.T. & GODRON, M. 1986. Land- General de la Organización de los Es-
scape Ecology, John Wiley, New York. tados Americanos. Serie Biología.
619 pp. Monografía No. 23, 77 pp.

Forman, R.T.T. 1995. Land mosaics: the


MARKS, P.L. 1974. The role of pin cherry
ecology of landscape and regions. Cam-
(Prunus pensylvanica L.) in the
bridge University Press. UK. 605 pp.
maintenance of stability in northern
hard wood ecosystems. Ecological
GRIME, J.P. 1979. Plant strategies and veg-
Monographs 44: 73-89.
etation processes. Wiley, Chichester.
222 pp.
MONASTERIO, M.; SARMIENTO G. & SOLBRIG, O.
GRIME, J.P. 1989. The stress debate: symptom 1984. Comparative studies on tropi-
of impending synthesis? en Calow, P. cal mountain ecosystems. Biology In-
and Berry, R.J. (eds.). Evolution, ecology ternational. International Union of
and environmental stress. Academic biological Sciences. Barcelona, Espa-
Press, London, 3-17. ña, 23.

Guhl, E. 1980. Efectos geoecológicos en la MOONEY, H.A. & GODRON, M. 1983. Distur-
dinámica de la vegetación antropogé- bance and ecosystems. Springer-
nica en los páramos y sus consecuen- Verlag, Berlin and New York, 292 pp.
cias biogeográficas en los Andes
Ecuatoriales. Revista Ecológica. Bo- NAS (National of Academic of Science).
gotá 1: 40-45. 2004a. Adaptive Monitoring and
Assessment for the Comprehensive
HENDERSON, A.; CHURCHIL, S. & LUTEYN, J. 1991. Everglades Restoration Plan. National
Neotropical plant diversity. Nature Academic Press. 122 pp.
531: 21-22.
National Research Council. 1992. Resto-
HERNÁNDEZ-CAMACHO, J. 1984. Vistazo gene- ration of Aquatic Ecosystems: Science,
ral sobre la protección de la naturaleza Technology, and Public Policy. Wash-
en Colombia. INDERENA. Bogotá. ington, D. C. National Academic Press.
Mimeografiado, 75 pp.
NRC (National Research Council). 2004.
HOBBS, R.J. 2002. The ecological context: Adaptive management for water re-
a landscape perspective, en P ERROW, sources project planning. Panel on

23
Universitas Scientiarum - Edición especial II, Vol. 12, 11-24

adaptive management for resource restoration ecology: bridging the gap


stewardship, committee to assess the between theory and practice. Society
U. S. Army Corps of Engineers Meth- for Ecological Restoration Internatio-
ods of Analysis and Peer Review for nal. Island Press. USA. 429 pp.
Water Resources Proyect Planning.
138 págs. TERRADAS, J. 2001. Ecología de la vegeta-
ción: de la ecofisiología de las plan-
ODUM, E.P. 1971. Fundamentals of ecology. tas a la dinámica de las comunidades
Third edition. Saunders, Philadelphia. y paisaje. Barcelona, Edicciones Ome-
ga. 703 pp.
PERROW, M.R. & DAVY, A.J. 2002. Handbook TILMAN, D. 1985. The resource ratio hypoth-
of ecological Restoration, vol. 1. esis of succession. American Natural-
Principles of Restoration. Cambridge ist 125: 827-852.
University Press. 433 pp.
TURNER, G.M.; BAKER, W.L.; PETERSON, C.J. &
P ICKETT, S.T.A. & W HITE, P.S. 1985. The PEET, R.K. 1998. Factors Influencing
ecology of natural disturbance and succession: lessons from large, infre-
pathways of succession. Academic quent natural disturbances. Ecosys-
Press Inc. 472 pp. tems, 1: 511-523.

RAPPORT, D.J. & WHITFORD, W.G. 1999. How VAN ANDEL, J. & VAN DEN VERGH, J.P. 1987.
ecosystems respond to stress. Bio- Disturbance of grasslands. Outline of
Science, 49 (3): 193-203. the theme, in Disturbance in Grass-
lands, Causes, Effects and Processes
(eds. J. VAN ANDEL, J. P. BAKKER and
RUNKLE, J.R. 1989. Synchrony of regenera-
R.W. SNAYDON), Geobotany 10, Junk,
tion, gaps and latitudinal differences
Dordrecht, 3-13.
in tree species diversity. Ecology 70:
546-547. VAN DER HAMMEN, T. 1979. Historia y toleran-
cia de ecosistemas parameros. En M.L.
Society for Ecological Restoration Inter- SALGADO-LABOURIAU (editor). El medio
national Science & Policy Working ambiente páramo. Actas del seminario
Group. 2004. The SER International de Mérida, 55-66.
Primer on Ecological Restoration.
www.ser.org & Tucson: Society for WHITE P.S. & PICKETT, S.T.A. 1985. Natural
Ecological Restoration International. disturbance and path dynamics: an
introduction. En: S.T.A. P ICKETT and
SOUSA, W.P. 1984. The role of disturbance WHITE, P.S. (eds.). The ecology of natu-
in natural communities. Annual Re- ral disturbance and patch dynamics.
view of Ecology and Systematics 15: Academic Press, Orlando, 3-13.
353-391.
WHITE, P.S. & JENTSCH, A. 2001. The Search
for Generality in Studies of Disturban-
STILING, P.D. 1996. Ecology: theories and
ce and Ecosystems Dynamics. Progress
applications. Prentice Hall. New Jer-
in Botany, 62: 399-450.
sey, USA. 517 pp.

TEMPERTON, V.M.; HOBBS, R.J.; NUTTLE, T. & Recibido: 30-11-2006


HALLE, S. 2004. Assembly Rules and Aprobado: 15-05-2007

24

También podría gustarte