¿Quién tiene el derecho de juzgar las decisiones de una mujer

sobre su cuerpo y su futuro? ¿Quién tiene el derecho de

tomarlas?
Who has the right to judge the desicions of a woman ove her body and
her future? Who has the right of taking them?
Natalia Delgado y Ana María Padilla *

Resumen:
El propósito de este artículo es que el lector se dé cuenta que el aborto no es tan malo, ni es un
homicidio, como todos piensan, cuánto daño le hace a la mujer el que sea ilegal y que ellas tienen
el poder de decidir sobre su cuerpo y su vida. Se mostrarán cifras y estadísticas a cerca del aborto
en el mundo, pero especialmente en Colombia. También “el punto de vista” de la biología, es decir,
desde cuando se empieza realmente a ser humano. Se verá como algunos problemas de Colombia
se podrían evitar legalizando este o dándoles más atención a las mujeres que están en todo su
derecho de pedir ayuda al estado. Se hablará no solamente de las decisiones sino también de las
consecuencias que algunos de los actos pueden tener.

Palabras clave:
Aborto inducido, moral, autonomía, decisiones.

Abstract:
The purpose of this article is that the writer notice that the abortion is not so bad and it’s not a
homicide either, like everyone thinks, the damage that the ilegal abortion can do to a woman and
that they have the power to decide over their bodies and their lifes. It will show numbers and
statistics about the abortion in the world, but specially in Colombia. Also “the point of view” of
the biology, that is to say, since when you become a real human being. We’ll see how some
problems of Colombia could be avoided by legalizing the abortion o giving more attention to the
womans that are in all of the rights to ask for help to the state. It will talk not only about the
decisions but also the consequences that some of the acts may have.

Key words:
Induced abortion, moral, autonomy, desitions

*Estudiantes cursando el grado noveno en el Colegio Teresiano de Bogotá. Correos electrónicos:

nattydelgado11@gmail.com y ana.padilla210113@gmail.com.
Para empezar, se tiene que tener en cuenta
que el aborto no es una medida
anticonceptiva o un capricho para las mujeres
que no tienen precaución a la hora de tener
relaciones sexuales. Antes de juzgar a las
mujeres que toman esta decisión hay que
ponerse en el lugar de ellas, la decisión
tomada, o que se va a tomar, no es fácil, no
son decisiones que se toman de un día para
otro o al azar, tienen un gran debate antes e
incluso después de ser tomadas.
A veces se piensa que prohibir algo va a
hacer que reduzca o pare, pero en este caso
no es así. La tasa de aborto es de 29 por cada
1000 mujeres en África y 32 por cada 1000
en América Latina, regiones donde es ilegal.
En cambio, en Europa Occidental donde se
permite el aborto en general, la tasa es de 12
por cada 1000 según el Instituto Guttmacher
de Nueva York. El instituto señala, así
mismo, que en Colombia se registran
anualmente 911.897 embarazos no
planeados, lo que significa 89 por cada 1.000
mujeres, y cerca del 44% de ese tipo de
embarazos termina en aborto inducido.
El aborto en sí no es riesgoso, se vuelve
riesgoso cuando se hace a escondidas en
lugares clandestinos y por personas sin
permiso y/o experiencia. Cada año más de
131.000 colombianas sufren complicaciones
debido al aborto inducido practicado en
condiciones clandestinas y aproximadamente
70 mueren. Y menos del 0.3 % de abortos
bien hechos se complican. Si el aborto se
llegara a legalizar en Colombia se estaría
cuidando la salud de todas estas mujeres que
llegan a practicar el aborto en condiciones
clandestinas.
Según el concejal de Bogotá, Marco Fidel
Ramírez, los abortos son muy costosos para
el sistema de salud, pero según un estudio
realizado por Elena Prada, Isaac Maddow-
Minnat y Fátima Juárez del instituto
Guttmacher si el aborto se hace bien y a
tiempo cuesta, aproximadamente, 45 dólares
(135.100 pesos colombianos
aproximadamente). En cambio, el costo de
las mujeres que llegan para ser tratadas por
abortos mal hechos equivale a 14 millones de
dólares al año (3 millones de pesos
colombianos aproximadamente).
Aunque en el año 2006 Colombia se unió
a los 17 países de América Latina que
ampliaron las causas bajo las cuales el aborto
puede realizarse legalmente, según
Profamilia el año pasado se realizaron un
total de 398.000 abortos ilegales en Colombia
y muchas mujeres siguen teniendo obstáculos
como la lentitud de procesos legislativos en
el caso de mujeres víctimas de violaciones y
la negación de estos procedimientos por parte
de algunas entidades.
En seis años desde que se aprobó la ley las
instituciones de salud han realizado a penas
1.112 de estos procedimientos. A pesar de las
órdenes de la corte, ninguna autoridad tiene
estadísticas de cuantas solicitudes se han
radicado en Colombia desde 2007. La Mesa
por la Vida y la Salud de las Mujeres señala
que, aunque la sentencia es clara, las mujeres
siguen encontrando trabas legales para
interrumpir voluntariamente su embarazo.
Esa ONG, que ha acompañado 360 casos,
registra que solo seis de cada diez solicitudes
ante el Sistema de Salud terminan en
procedimientos quirúrgicos. Y en esos seis,
siempre ha sido necesario interponer
derechos de petición o tutelas. Según el
ministerio de salud en el 2010 solo 44
mujeres que denunciaron abuso sexual se
practicaron un aborto. Pero ese mismo año
Medicina Legal practicó 16.916 exámenes a
víctimas de violación.
Puede que la causa, en ciertos casos, de
que la mujer no quiera abortar, ya sea porque
es víctima de una violación o por un
embarazo no deseado, o porque le teme al
dolor o a el qué dirán, porque en esta sociedad
el aborto puede ser visto de forma incorrecta
y se ve este acto como homicidio sin saber
que el feto no es capaz de sentir antes de la
semana 22ª-24ª del embarazo. Por lo tanto, la
ciencia considera que este feto llega a ser un
ser humano solo cuando el sistema nervioso
y la corteza cerebral están en condiciones de
adquirir autonomía y puedan ser capaces de
sentir, lo cual sucede en las semanas 28ª a la
30ª, según Jamie Vieyra-Poseck. Se puede
pensar que todavía no se es persona cuando
no se siente y lleva a pensar que aún no se
tiene una responsabilidad total con el feto que
se va a abortar. (Vieyra-Poseck, 2014)
Pero ¿Hasta qué punto tiene libertad de
decidir la mujer? Según la sentencia C-
355/06 sobre el aborto la consecuencia más
importante del derecho al libre desarrollo de
la personalidad y autonomía, es que en las
situaciones donde solo se dañe a la persona,
deben ser decididos por esta misma. Decidir
por ella sería arrebatarle su condición ética,
reducirla a su condición de objeto,
cosificarla, convertirla en medio para los
fines que por fuera de ella se eligen.
La decisión de una mujer de interrumpir
un embarazo no deseado, decisión que tiene
que ver con la integridad de la mujer es un
asunto que sólo le concierne a quien decide
sobre su propio cuerpo. Así las cosas,
penalizar ésta conducta no es coherente con
la doctrina del núcleo esencial al derecho al
libre desarrollo de la personalidad y
autonomía como máxima expresión de la
dignidad humana. En otras palabras, al
considerar a la persona autónoma y libre,
como lo preceptúa la Constitución, se hacen
inviables todas aquellas normas en donde el
legislador desconoce la condición mínima del
ser humano como ser capaz de decidir sobre
su propio rumbo y opción de vida. (Monroy
Cabrera & Escobar Gil, 2006)
Para tener en cuenta uno de cada diez
niños sufre desnutrición crónica en
Colombia, según Unicef. Un niño que sufre
desnutrición crónica presenta un retraso en el
crecimiento (no alcanza la altura
recomendada para su edad) y ve afectadas sus
capacidades cognitivas e intelectuales, lo que
tiene consecuencias irreversibles para el resto
de su vida. Es momento de solucionar los
problemas presentes como el hambre, el año
pasado murieron más de 100 niños de hambre
en Colombia, y las cifras no mejoran.
Por otra parte, en Colombia hay más de
diez millones de niños y niñas que deben ir a
estudiar, sin embargo, de acuerdo con cifras
del Sistema de Matricula Estudiantil de
Educación Básica y Media 1.199.936 niños
no estaban matriculados en ninguna
institución educativa. De acuerdo con el
Ministerio de Educación las razones de que
exista este número de niños que no están
estudiando tienen que ver con factores como
el trabajo infantil, la violencia o la falta de
recursos económicos para acceder a la
escuela.
Lo mencionado anteriormente tiene
relación con el aborto y logra que se tenga
una visión a largo plazo. No solo se tiene que
pensar en el presente, también en lo que va a
venir después de que nazca ese bebe, si se
tiene, ya que hay muchas mujeres que están
en una mala situación económica, que no
tienen el tiempo para cuidar al bebe que va a
nacer, que son abandonadas por el “padre”
del bebé, también se tiene que pensar en la
posibilidad de que si no se tienen fondos para
educarlo puede que termine siendo una
persona que roba o que se droga, que no le
estaría aportando nada a la sociedad.
También se tiene que tener en cuenta que
en Colombia el 20,5 % de las mujeres con
hijos en el país, los tuvieron entre los 15 y los
19 años de edad. Lo que quiere decir que son
embarazos en adolescentes de los cuales el
8% termina en abortos e interrupciones del
embarazo. Según un reporte entregado por El
Departamento Administrativo Nacional de
Estadística (Dane). Esto se debe, en su
mayoría, a que no se recibe una buena
educación sexual.
Es deber del estado brindar una educación
sexual que ayude y enseñe a los adolescentes
sobre el respeto que deben tener ellos mismos
y otras personas sobre su cuerpo porque
según el Ministerio de Educación los
adolescentes en Colombia empiezan su vida
sexual a temprana edad. Según estudios
realizados por la Universidad de los Andes
con un equipo de investigación conformado
por dos psicólogas de la Universidad de los
Andes y tres economistas de la Universidad
del Rosario, nos muestra que cuando las
personas acceden a oportunidades de
educación sexual de buena calidad tienden a
tomar decisiones autónomas con respecto a
su vida sexual y a llevar a cabo
comportamientos de cuidado que les
permiten mantener su bienestar. (Ibarra,
2013) Un claro ejemplo de esto son las
charlas que se pueden dar en las instituciones
haciendo concientizar a los jóvenes de que
todo lo que hagan en el presente les puede
causar consecuencias en el futuro, ya sean
buenas o malas, que dependen de la
responsabilidad y la madurez que tengan para
tomar decisiones. También para que se les
inculque la fortaleza que deben tener ante la
presión social, ya que siempre va a haber una
o varias personas que estarán juzgando
constantemente.
Sin embargo, la responsabilidad de esta
educación sexual no solo reside en el estado
sino también en la familia de los jóvenes.
María Eugenia Rosselli, psicóloga del
Colegio Los Nogales de Bogotá, destacó que
es en la familia en donde el ser humano
construye su identidad. El mayor reto que
tienen los padres es evitar imponerles su
visión sobre la sexualidad.
 Para finalizar, y teniendo en cuenta todo lo
anterior, ya sean estadísticas o puntos de
vista, se pude decir que no es justo que las
mujeres que abortan o quieren hacerlo sean
juzgadas de una manera tan cruel por la
sociedad porque, y siendo lo peor, es que la
mayoría de las personas que lo hacen no
saben lo que en realidad está pasando esta
mujer tanto física como mentalmente, ya sean
mujeres que se cuidan o no, porque claro, no
se puede generalizar y decir que todas las
mujeres son cuidadosas respecto a su salud,
sin embargo, muchos hacen prejuicios en la
actualidad cuando se supone que las mujeres
pueden decidir sobre su cuerpo, se le sigue
juzgando y tratándola como si fuera menos
persona por el simple hecho de no sentirse
segura sobre tener un hijo o no y creen que lo
que están diciendo está bien y que pueden
decidir sobre la mujer sin antes pararse a
pensar que harían estas personas que juzgan
a la mujer, si estuvieran en su lugar, que
harían con toda esa carga mental, con todas
esas decisiones, esas expectativas y esos
prejuicios de la sociedad a la espera de juzgar
hasta el mínimo movimiento que ella haga,
siendo influida siempre por los medios,
diciéndole que está cometiendo homicidio.
Muchas personas no tienen idea del dinero
que se necesita para mantener un niño y que
no le falte comida, educación, un hogar, entre
las necesidades más básicas.
Siempre hay que recordar que no se puede
decidir por las demás personas, nunca se va a
coincidir en la forma de pensar por lo que
siempre se tiene que respetar el punto de vista
de los demás ya sea bueno o malo, lo que
lleva a decir que hay que respetar la decisión
que tome la mujer sobre su cuerpo con tal de
que ésta sea honesta y no haya sido influida
por los demás.
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