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4 CORAZONES
Copyright © 2011
Farías María Ester, fariafaf@yahoo.com.ar
Kachorroski Laura Andrea, laurakach@hotmail.com
Yuge Lucas Oscar, yugelive@hotmail.com
Wdoviak Diego, diegomp1981@hotmail.com

M. Laffitte Ediciones

Todos los derechos reservados conforme a la ley.


Prohibida la reproducción de esta obra,
salvo en segmentos pequeños,
sin la debida autorización de la autora o la editorial.

ISBN 978-987-27230-3-3

Diseño & Diagramación


Estudio Qaio. DG. Pablo Gallo
info@estudioqaio.com.ar

Impreso en Argentina.
Printed in Argentina.
Esta edición se terminó de imprimir en Ghione Impresiones.
Índice
Indice
Farías María Ester ......................................................... 05

Kachorroski Laura Andrea .............................................. 28

Wdoviak Diego .............................................................. 51

Yuge Lucas Oscar .......................................................... 75

3
Carátula María Ester

María Ester Farías


Nací en La Paz, Entre Ríos, el 28 de enero de 1969. Escribo po-
esía desde los 10 años. Estoy radicada en Posadas, Misiones hace 22
años. Soy docente, Lic. en Enfermería y payamédica. Trabajo como
jefa de enfermeras en la Terapia Intensiva del Hospital Provincial
de Pediatría “Dr. Fernando Barreyro” y soy eventual JTP (Jefe de
Trabajos Prácticos) en la Escuela de Enfermería de la UNaM (Uni-
versidad Nacional de Misiones).
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13
13
M A R Í A E S T E R f arías

Voy a morirme de a poquito


sin que puedas darte cuenta.
Voy a hundirme apagando la luz.

Voy a morirme de a poquito


y a dejarte libre sin reproches.
Voy a dejarme ir sin darme cuenta.

Debió ser yeta conocerte


no debió ser tan fuerte.
Todo es un sin sentido.

Parece que falló mi horóscopo,


donde decía que eras mi destino,
un error de imprenta
se comió la “a” de desatino.

Agujero Negro
Agujero N egro
M A R Í A E S T E R f arías

Estamos hechos de momentos muertos.


6 Somos un cúmulo de recuerdos,
que tiemblan cuando la lucidez
nos deja en evidencia.
Por enésima vez me siento en el vacío
y no entiendo el mensaje implícito.
Algo me destruye y me corrompe
y algo me hace fuerte como un muro.
Y ese muro me protege de tu ira
dejándome a salvo en esta isla.

Debería dejar que me tritures.


Me pierdo las estrellas en las ciudades,
te pierdo a vos entre luces de advertencia.
Y me queda este olor a vómito amanecido,
ingeniosa combinación de esencias.

En el borde del espacio-tiempo


mi densidad se convierte en decadencia,
y mi alma ya no es alma,
es un agujero negro tragándose galaxias.

Amor
Amor
M A R Í A E S T E R f arías

Amor,
como duelen tus labios
cuando no me besan.
Como grita mi alma
cuando no te encuentra.
Como tarda el reloj
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en matar promesas.
Amor,
me duele tu ausencia
como tu presencia.
Esta ambivalencia
que ahora te aqueja.
Saber que me amas
pero que me dejas.

Anoche
Anoche
M A R Í A E S T E R f arías

Anoche intenté no llorarte


y he fallado en el intento
porque choqué con tus fotos
y todos nuestros recuerdos.

Hundí mi alma en el álbum


recorriendo nuestra historia
y te besé suavemente
sin que se entere tu boca.

No es que no lo haya intentado


es que no puedo atraparlo,
el olvido me ha esquivado
desde que intento encontrarlo.
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Bruja, Bruuuuja!!
Bruja, Bruuuuja!!
M A R Í A E S T E R f arías

¡Te doy diez minutos


para que te vayas!

Con tus chucherías,


tus plumas baratas,
cucharón de lata,
tus ollas sin tapa,
tus patas de sapo,
ojos de lagarto.

¡ANDATE LAGARTA!

Metete en la bolsa
que embolsa ponzoña
y atate bien fuerte
con hilos de plata.

Yo te doy la plata
para el colectivo
que te lleve a Marte
y un pañuelo sucio
lleno de influenzae
para que la gripe
sea fuerte y te mate.

9
Calma Inquieta
Calma Inquieta
M A R Í A E S T E R f arías

Esta quietud insoportable


que precede a la tormenta,
me derrota cada día,
pone a prueba mi destreza.

Se ha instalado en cada célula,


se desliza por mi piel.
Me provoca a interrumpirla
quiere obligarme a ceder.

Me he quedado sin respuestas


y esta calma que me inquieta
me observa desde la puerta,
me invita a romper las reglas.

Después de Ayer
D espués de Ayer
M A R Í A E S T E R f arías

Que puedo decir que ya no haya dicho


si sabes de sobra que estoy destrozada.
10 Si el sueño bonito que nos construimos
se muere de pena sobre nuestra almohada.
Intento buscarme un nuevo destino,
llegar a mi casa sin esperar nada.
Aceptar el reto de olvidar tus besos,
respirar muy hondo y empezar de cero.

Pero en un suspiro me llega tu aroma,


tu sabor a sexo regresa a mis labios,
mi piel enloquece por sentir tus dedos.

Y entonces recuerdo que ya te marchaste,


que hice la promesa de no molestarte
y me quedo sola escribiendo versos.

El tango de Luis
El tango de Luis
M A R Í A E S T E R f arías

I
Luisito tiene ocho y acaba de ingresar.
Con algo de neumonía y mucho de Poxirán.
Grita, golpea paredes, molesta a los demás.
Es un negrito flaco, despeinado y harapiento.
¡Pero tiene una sonrisa! que nos comienza a comprar.

Aunque ya no hay neumonía, tampoco hay un hogar


y Luisito poco a poco se queda en el hospital.
Le gusta dormir en el piso, siempre en el mismo rincón,
y solo cuando hace frío acepta alguna frazada
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o subirse a un colchón.
La doctora ya le dijo que tendrá que ir a la escuela.
Aparece bañadito, de punta en blanco y peinado.
(y después que me convenzan que no existen los milagros)

El se mira en el espejo, guardapolvo y mochila nueva.


Se despide con un beso y con su sonrisa eterna.
-¡Lo sacamos del infierno!- Comentamos complacidas.
Nos sentimos sanadoras y hasta nos creímos buenas.

Pero Luisito se cansa y no le gusta la escuela.


Con sus diez años cumplidos lo tienta una fumadera.
Se lleva toda su ropa y hasta nuestras billeteras.
Lo adopta otra vez la calle con sus sensaciones nuevas.

II

Una madrugada lo trajo la cana.


En coma y mugriento, con aliento a vómito.
Empapado de orina transpira recuerdos.
Despierta agresivo, falsheado de paco,
pegando a los bultos se ha ganado un Valium.
Cuatro policías lo aprietan con fuerza
mientras la enfermera inyecta su ciencia.

Luisito me mira, no me reconoce,


no ha crecido mucho y ya tiene catorce.
Me quema mirarlo, porque es un espejo
de todas las miserias que llevamos dentro.

Me voy, por no verlo, total no es mi guardia


12 y al llegar a quince no será pediátrico.
Irá a otro hospital, quizás al psiquiátrico.
III

Hace cuatro años me olvidé de él.


Hoy una colega me acercó el diario
- Mira lo que dice: ahí, en “Policiales”,
parece que estaba borracho o drogado
y mato a su amigo de dos garrotazos.
Nombre y apellido, si, es el asesino.

Me quedé en silencio, los puños crispados,


y volví a la imagen de sus ocho años,
cuando se dormía hecho un ovillito
y yo lo tapaba si tenía frío.

¡Flaco pocavida, negro cara dura!


¡Cuánto mal te hicimos! ¡Tanta cobardía!
Si solo bastaba con esa sonrisa.

Espacio
Espacio
M A R Í A E S T E R f arías

El espacio que nos queda,


entre la vida y la muerte,
se nos llena de recuerdos,
y un segundo se hace eterno.

El espacio que me queda,


entre besarte y perderte,
se me llena de dulzuras
13
que se amargan si no vuelves.
No me atrevo a pronunciarte
por el temor de estar viva,
pero apenas tu presencia
me devuelve la alegría.

Y el espacio que tú llenas,


promesa de amor eterno,
se hace invisible en mis pechos
cuando te aprietas en ellos.

No me queda alternativa,
voy cediendo mis espacios,
para que llenes mi alma
y mi cuerpo con tus brazos.

Estaba Claro
Estaba Claro
M A R Í A E S T E R f arías

Intuí que me perdería y me perdí.


Hundida en tus hoyuelos orgullosos
me dio vértigo, y para evitar caer,
me aferré de tus pechos caprichosos.

Mi lengua salió a nadar por tu sonrisa.


Se aventuró por valles y colinas
tratando de atrapar el aroma
que tu juventud trajo a mis días.

14 Te di una tarde y una noche como pedías.


Y la mañana, cuando me despedías,
te di algo más, te di mi vida.
Pero debí entender, estaba claro.
Eso nunca me pediste,
ni pedirías.

Grises
Grises
M A R Í A E S T E R f arías

Grises, más grises y gastados


lijando las nubes de este invierno,
destronando a los grises mas usados
por cuanto poeta triste haya pasado.

Grises que oprimen mi retina


y me provocan ceguera intermitente.
Grises acentuando la neblina
que humedece el alma y que me hiere.

No estoy pensando en vos, no te lo creas.


Solo quiero un día sin sus grises.
Un día en que no seas mi quimera,
ni me tenga de tropiezos esta pena.

15
Hasta aquí llegamos
H asta aquí llegamos
M A R Í A E S T E R f arías

Tenemos que parar.


Aunque ya perdí la cuenta
de las veces que dijimos
¡Hasta aquí! ¡No más!
Sabemos que lastimamos
Y nos lastimamos.
Pero cada día creemos
que tenemos derecho
a otro día más.
La aventura se convirtió
en novelón de la tarde,
cursi, gastado y predecible.
¿O acaso pensaste
que somos originales?
Ni siquiera eso tenemos.
Solo el dolor es
auténtico y verdadero,
porque es nuestro.
Derramo una lágrima silenciosa
sobre el pecho equivocado.
Y me envías un mensaje polizonte
que no puedo contestar.

16
Buenos días, buenas noches,
¡Siempre te voy a amar!
Y nos creemos el cuento.
Soñamos despiertos,
que no somos cobardes,
que el amor lo vale,
que dejamos todo
por ir tras un sueño.
Pero llega la hora
de volver a casa.
Se esfuma la nube.
Volvemos al mundo
del auto, la casa,
la vida segura.
Donde hallamos todo
incluso ese amor,
que espera confiado.
Y no nos atrevemos
a patear la puerta.
Y cada uno espera
que esta vez sea el otro
el que convencido
diga ¡Hasta aquí!
¡Amor, no debemos!
¡Hasta aquí llegamos!

17
Me enamoré de Vos
M e enamoré de Vos
M A R Í A E S T E R f arías

Me enamoré de vos,
de tu desfachatez
y tu insolencia.
De tu sonrisa burlona
y de tu boca sensual,
que no se detiene ante nada
y besa a todos por igual.

Me enamore de vos.
De lo fácil que sos,
cuando querés.
De la franqueza
con que dices:
te quiero mucho,
pero no esperes más,
y luego imploras
que te vuelva a besar.

¡Pobre alma pasajera!


Irónica paradoja,
que desnuda y entregada
tomes todo sin dar nada.
¿Cuánto mal te han hecho
que a tan corta edad
ya no crees en los sueños?
¿Cuánto mal te haré yo
cuando amanezca y te diga
18 que hasta aquí llegó lo nuestro?
Mentira Impiadosa
M entira Impiadosa
M A R Í A E S T E R f arías

Esto que siento es real, estoy perdida.


Me queman las manos cuando escribo.
No puedo con tu nombre,
las palabras son espinas.
Eres mi secreto peor guardado.
No te cuido, es mentira que lo hago,
Mis ojos gritan lo que siento, si te miro
Mi cuerpo transpira tu olor,
si te me acercas.
Se ríen en mi cara, si te niego.

Miento, robo, te despojo,


me quedo con tu dignidad,
te hecho a los perros,
y me como los pedazos que me dejan.
Soy tu peor idea, tu boleto a la deriva,
y aun así, te animas a mi cama.
Te adueñas de mi cuerpo y de mi almohada.
Te haces gigante entre mis sábanas.
¡Maldita hipócrita, egoísta!
Que no te dejo ir, ahora que puedo.
Es mentira que te amo, soy adicta.
No voy a dejarte ir aunque lo pidas.

19
No corrí
N o corrí
M A R Í A E S T E R f arías

No corrí para abrazarte.


Dejé que cargaras con la culpa.
Te hice sentir tu pequeñez,
te mostré autodominio,
toda mi fuerza y poder.

Fuiste la víctima fatal


que se cobró mi cobardía.
Te vi llorar implorando que te ame.
Rogando por un beso
que te hiciera sentir viva.

Impasible, sin reaccionar,


dejé que te fueras
con las manos vacías,
tendidas hacia mi
esperando encontrar las mías.

Y yo te abofeteé
con mi mirada más fría.
Te dejé bañada en llanto, herida.
Mentí, que tú te lo buscaste.
¡Así tiene que ser!
Me dije convencida.

Ahora, que me encuentro


cómoda y tranquila,
20 tirada en mi sofá
leyendo un libro viejo,
pienso, siento, estoy segura
que ya recuperaste tu alegría.

Entonces, aparece,
va subiendo por mi pecho,
me desgarra la garganta:
no corrí para abrazarte,
no te dije “yo te quiero”,
no tome fuerte tu mano.
… y no hay consuelo.

Perdonarte
P erdonarte
M A R Í A E S T E R f arías

Se me ha hecho una costumbre perdonarte,


no sé si por amor, o por cobarde.
Adivino de antemano tus engaños,
sin embargo nunca trato de evitarlos.

No trates de entenderme, no podrías.


Soy la paradoja de mi propio paradigma.
Busco a tientas un pasaje, una salida,
y otra vez me aprisionan tus caricias.

Son oscuros los caminos de la culpa,


cuando a nadie has confesado tus pecados.
Queman en mis labios los reproches
porque sé, no me es lícito pronunciarlos.
21
Perdona este 20/12/01
P erdona este 20/12/01
M A R Í A E S T E R f arías

Si en todos los niños


que mueren de hambre
a tu semejanza,
sufre nuestra carne.
Perdón por el odio
que nos ha llevado
a cerrar el puño
contra nuestro hermano.
Perdón por negarte
y girar la cara
cuando te encerraron
por decir verdades.
Perdón por los judas
que te han entregado
y por dos monedas
venden tu legado.
Perdón, por callarme
y apagar la tele
cuando vi tu sangre
corriendo en las calles.
Perdón por las bestias
vestidas de hombres
que te atropellaron
sin saber quien eras.
Perdona, Argentina,
22 Si en vez de aprender de tiempos pasados,
erramos de nuevo
y te crucificamos.
Puzzle
P uzzle
M A R Í A E S T E R f arías

Me figuro un puzzle
de tus partes y las mías,
y dejo que comiences con el juego.
Tus manos me desarman y me queman.
Destruyes mi mente y la enredas.
Me conviertes en tu juego de migajas.
Pintas de colores mis pedazos.
Juegas a ser Dios dándome vida,
y me soplas tu aliento en la garganta.
Las piezas con que empiezas no me hallan
y deambulan entremedio de las sábanas.
Poco a poco descubres el problema,
entonces lentamente te desarmas.
Mezclas tus troqueles con los míos
y empiezan a encajar con más sentido.
Por obra de la magia se convierten
en la imagen de los besos postergados.
Lenguas que se extrañan y se enlazan
húmedas de sudores y de lágrimas.
Aleteos corriendo por la espalda.
Sexos inflamados por la urgencia.
Pezones que se ofrecen a los labios.
Músculos crispados por espasmos.
Todo acaba, cuando acaban los orgasmos.
Queda al fin, sobre la cama terminado
nuestro puzzle, perfecto y delicado.
Podría romperse, tan solo con tocarlo,
pero entonces, nos dormimos 23
y queda allí, eternizado.
Que no sepa
Que no sepa
M A R Í A E S T E R f arías

Que no sepa el corazón,


que no se entere,
que estoy tratando de burlarlo,
haciendo que te olvido,
cueste lo que cueste.
Que no sepa mi piel,
que no se dé cuenta,
que son otras las caricias
y las confunda con las nuestras.
¿Qué estoy haciendo amor en esta cama?
Si se que no voy a encontrarte.
De verdad deseo con el alma
despertar un día sin soñarte.

Volver a perder
Volver a perder
M A R Í A E S T E R f arías

De nuevo esta sensación de desamparo


que se repite una y otra vez.
Me quedan los despojos de mi alma,
la magia adormecida sobre la piel.
Se enfriaron las caricias, tu mirada
24 ha perdido el brillo que me iluminaba.
Afuera es primavera ¡qué ironía!
¡Hace tanto frío en esta casa!
Si lo escribo
Si lo escribo
M A R Í A E S T E R f arías

Si no escribo mi pena
te la tengo que gritar.

Si no escribo lo que duele


lo tendría que llorar.

Si no escribo que te amo


no te doy tu libertad.

Si no escribo que estoy sola


te tendría que buscar.

Si lo escribo se hace verso


y escapa a la realidad.

Si lo escribo es soportable
saber que no lo leerás.

Sin querer
Sin querer
M A R Í A E S T E R f arías

Otra boca se alimenta de tu aliento,


otros brazos dan calor a tu cintura.
Pero insistes en decirme que me amas
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y me enredo en los enredos de tu alma.
Mi equilibrio se rompe como escarcha.
Me abandonan la confianza y el orgullo.
El corazón se me llena de silencios
y las dudas se convierten en susurros.

Deambulo, pies descalzos y con frío.


Yo sé bien, fue sin querer que me has herido
y nunca te diré, aunque me muera
que al no mentirme y sin querer, me has destruido.

Tristeza
Tristeza
M A R Í A E S T E R f arías

Mi cielo de estrellas tristes


me recuerda tu canción.
Mi piel se queda callada
escuchando al corazón.

Hace un mes no estás aquí


y aún me duele recordarte.
He intentado resignarme,
lucho por vivir sin ti.

El tiempo que ya ha pasado


no alcanza para olvidarte.
Pero no me quedan lágrimas
26 y ahora lloro sin llorarte.
Yo, pecadora
Yo, pecadora
M A R Í A E S T E R f arías

Me dejas desahuciada,
esperándote sin tiempo.
Me engañas que ya vienes
y luego te arrepientes.

Me pegas en el rostro
con promesas incumplidas.

Te aferras a la letra
de tu canción aprendida.

Me dejas en la nada
colgada de un suspiro
y mis piernas se hacen piedra
que me arrastran a un abismo.

Donde no hay perdón de Dios


para el amor que te tengo.

Donde ya me condenaron
por ser plebeya en tu reino.

27
Carátula Laura Kachorroski

Laura Andrea Kachorroski


Nací el 3 de abril de 1973 en Posadas Misiones. Vivo en Jardín Amé-
rica desde los tres años, donde cursé mis estudios primarios y se-
cundarios. Comencé la carrera de Ciencias Económicas pero me dí
cuenta que no era lo que me gustaba. Me casé hace 18 años y formé
una hermosa flia con Ricardo con quien tenemos 4 varones maravil-
losos. Me considero una adicta a la lectura. Adicción que me sumer-
gió en el mundo de la literatura y que más tarde me permitió escribir
una novela, publicada en mayo del 2011. Recogí excelentes críticas.
Ahora me encuentro escribiendo mi segunda novela. Espero poder
28 continuar escribiendo. Los poemas son un pasatiempo que me en-
canta disfrutar.
Amantes perfectos
Amantes perfectos
L a u ra K a c h o rr o sk i

En la cumbre de mis senos


descansa la brisa de tu respiración.
Dos cuerpos encendidos,
elevados por la tempestad de la pasión.
Y cada abrazo postergado,
cada beso contenido...
se desatan en una tormenta
de lujuria, de candor.
No habrá fuerza en este mundo
capaz de contener este amor.
El silencio se interrumpe...
como las agujas del reloj.
Nada impide que me tomes,
nada cuenta, nada...
¡Es hoy!
Mi cuerpo clama el tuyo
casi... con dolor.
Hazme tuya, hazme plena,
llena el vacío en mi interior
que desesperadamente espera tu presencia
para estallar al fin y … así hundirnos juntos
en un torbellino de emoción.
¡Por fin te siento!
Eres mío y tuya soy.
Dos cuerpos encendidos,
entregados al delirio,
cubiertos de sudor.
Y podrán lapidarnos, 29
desterrarnos…
Más nunca borrar lo que con fuego sellamos.
Amantes,
perfectos,
sublimes…
Simplemente tú y yo.

Abanico de Amores
Abanico de Amores
L a u ra K a c h o rr o sk i

Amores descalzos
que sufren el frío
amores sedientos
en veranos violentos.

Amores sin puerto


que navegan en mares de olvido
amores sin rumbo
en caminos perdidos.

Amores fugaces
que no ven el alba
amores eternos
que hacen frente a la muerte.

Amores suicidas
el tuyo y el mío.
30
Cuando emerjas yo estaré
Cuando emerjas yo estaré
L a u ra K a c h o rr o sk i

Fiel compañera
tú que bañas mi piel desnuda
en tus noches llenas.
Tú que eres señora.
Eres bella.
Soberbia y soberana.
Siempre perfecta.
Esta noche, luna
entre nubes negras
con un eclipse
oscurecerán tu grandeza
y me quedaré a oscuras
esperando que retornes
a llenar mi existencia.
Las estrellas serán testigo
de esta coexistencia.
El sol te negará su lumbre
la tierra será su defensa
más no temas amiga mía
estaré esperándote
cuando emerjas
para que juntas veamos
la alborada que se acerca.

31
En el otoño de mi vida
En el otoño de mi vida
L a u ra K a c h o rr o sk i

En la pendiente de mi vida
tú llegaste…
Y los cardos
se volvieron rosas refulgentes.

Trasfundiste con tu aliento


sabor a mi boca
y los campos vacíos
se sembraron de lirios.

Mis años se desvanecieron


como nubes de verano
que el sol cautiva con sus rayos

Mis arrugas se borraron


y el espejo me devolvió
una fotografía del pasado.

El sauce no lloró más mi soledad.


en mis jardines floreciste
y no estuve más sola.

32
Mi cuerpo renunciado
M i cuerpo renunciado
L a u ra K a c h o rr o sk i

En la mansedumbre de un otoño gastado


veo las hojas de los álamos
que inexorablemente
se marchitan,
caen y se rinden
ante un invierno implacable
que acecha y reclama…

En la antesala de mi desesperación…
Lloro una ausencia anunciada

El interior de la casa contrasta


con el gélido aliento de mi alma.

Abandono…
Es el sentimiento que me embarga.

Letargo
de mi cuerpo renunciado

Envidia
por saberte en otros brazos

Soledad
antesala de mi existencia.

33
Final anunciado
F inal anunciado
L a u ra K a c h o rr o sk i

Brisa sutil en el amanecer del mar


horizonte cansado de tanto andar

relojes de arena arrojados al desierto


confunden al tiempo que ya no existe.

Certeza absoluta de un final


que fue anunciado al viento otoñal.

Susurros callados…

Y en la alcoba, arden dos cuerpos

sus volcanes internos a punto de estallar


se funden y confunden en abrazos eternos

bocas que besan y absorben el aliento


de la nada y el todo
de un amanecer muerto.

34
Hasta el borde de tus fuerzas
H asta el borde de tus fuerzas
L a u ra K a c h o rr o sk i

Imagina a través de un vidrio


empañado por el frio
una silueta arcaica que danza
a carcajadas con acordes de nostalgia.

Imagina que mi aliento


humeante por el invierno
es lisonja en el desierto helado
de tu corazón trémulo.

Imagina que eres luna


con aristas luminosas
donde cuelgan sus miserias
las almas laboriosas.

Imagina-te sentado
en el paraninfo de los recuerdos
y ve pasar tu vida proyectada
hacia las sombras
en el baúl de los misterios

Imagina que eres mío,


imagina-te conmigo
imagina que te elevo
hasta el borde de tus fuerzas
donde quedas sin aliento…

35
¿No lloras?
¿N o lloras?
L a u ra K a c h o rr o sk i

Inferiste hombre,
sin clemencia.
Te entregué mi vida,
mi esencia…
Mi destino.

Abrí mis profundidades


para que me conocieras,
más nunca para que me hieras.

Misterios vetustos
encerrados derribaste.
El viento nunca más silbó en mi follaje.

El eco de una motosierra cansada


se escucha a lo lejos
mientras mis entrañas claman.

No seré sombra de tus hijos,


no seré abrigo.
En muebles lujosos
me convertiste,
en papel, en desierto…

Llora el lapacho y la araucaria


llora el yaguareté y el zorzal.
36 Y tú hombre…
¿No lloras?
¿No ves mi agonía avanzar?
Llegará el tiempo hombre
en el que me vas a extrañar.
Y te preguntarás hombre:
y la selva…
¿Dónde está?

El tiempo reclamó
El tiempo reclamó
L a u ra K a c h o rr o sk i

La noche ha muerto…
Las enanas blancas
apagándose están.

La luna menguo- se
hasta acallar los versos
de aquel poeta…

La pluma clavada
al dorso de la melancolía
estalló en un mar de tinta
que oscureció el mar.

Universos ajenos
se sumergen
en agujeros negros.

Sin concesiones…
Negándose al exilio…
El tiempo ha reclamado
37
su libertad.
A los suburbios del escándalo
A los suburbios del escándalo
L a u ra K a c h o rr o sk i

Llévame a las fronteras


de esta pasión
donde el sol
no ha alcanzado el horizonte.
Donde se elevan las montañas
en frenética melodía a las nubes.

Llévame a los suburbios


del escándalo
donde los gritos
no se oyen
donde rompen las olas
de un mar agitado.

Llévame a la locura
del desatado deseo
donde en los espinos
florecen narcisos
donde la lluvia
se ha negado.

Llévame al sosiego
de este amor postergado.

38
Buscando sosiego
Buscando sosiego
L a u ra K a c h o rr o sk i

Llévame contigo,
neblina difusa.

Has que este trago


se disipe en tu bruma.

Porque no podré sola esta noche.

Mis penas calan mi esencia…

Sin tu ayuda me encuentro desnuda,


cubre mi desdicha
neblina amorosa
llévame contigo
neblina celosa
lava mis heridas
neblina en tus sombras
condensa mi desdicha
neblina en tus gotas.

Has que tu poder


se revele en mi angustia
para que al fin encuentre sosiego
mi alma penosa.

39
Ya no estaba
Ya no estaba
L a u ra K a c h o rr o sk i

Ella me miró, de inmediato supe quien era.


Pudiste ocultar tus secretos, más… su mirada te delató.
Ella me miró y me descubrí en sus ojos
los mismos que algún día fueron míos.
Profundos valles de amor y pasión
que alguna vez sentí y que ya no siento.
No sé dónde, ni cómo se perdieron
pero no están.
Tu indiferencia
o… quizás la mía,
durmieron hasta el olvido nuestro universo.
Pensé que había muerto
pero hoy lo descubro en sus ojos.
Ella me miró
y ahí estaba
el infinito mar de pasiones que alguna vez sentimos.
Quise enfadarme,
reclamar lo mío,
pero al instante descubrí que no me importaba.
Me sumergí en las profundidades de mi existencia
buscando una excusa para retenerte
y por más que busqué no la encontré.
Decidí, entonces marcharme,
dejar que seas feliz.
En sus ojos comprendí los tuyos
y en los tuyos ya no estaba yo.
40
Legendarios misterios
Legendarios misterios
L a u ra K a c h o rr o sk i

La ventana se tornó opaca


sudada por los recuerdos.

La humedad en las paredes


esbozaron tu rostro ausente.

Escuché al viento silbar


entre los álamos un te quiero.

Legendarios misterios
que el otoño deshojó.

El invierno consiguió
escarchar mi corazón ardiente
y el duende de los sueños
me cantó al oído una canción de cuna.

Dormiré este tiempo


para depositarte en el olvido
y entonces como el ave Fénix
renaceré a una estación
nueva y renovada.

Como un lirio que se abre


como un colibrí que se posa
en la primavera que se asoma

41
Soberano de mis fuerzas
Soberano de mis fuerzas
L a u ra K a c h o rr o sk i

Mi amor:
como río que corre iracundo al mar
necesita tu remanso para descansar.
Soberano de mis fuerzas
calmas mi ansiedad.

Tibio sol de invierno


retrasas mi letargo
de pasiones olvidadas.
Doblegas mi voluntad
como se rinden las hojas a un día otoñal.

Desperté de un sueño
a la lenta agonía de mi intrínseca vida.
Soy pasado en tu memoria.
Repaso de una noche de verano.

Ausencias descolgadas
hiel amarga
que adelgazan mi existencia
eres presente en mi vida
que aún siente y se estremece.

Gotas de pasión en mi piel


se mantienen, permanecen
en el insomnio que provoca tu partida.

Fugaz amor hiriente


42 duerme, duerme, duerme
solo así aquietarás mis ansias
por tenerte.
Un día
Un día
L a u ra K a c h o rr o sk i

Un día sin preparar el equipaje te fuiste.


No me avisaste
no te despediste.
Tu viaje inesperado...
me dejó vacía
sola
sin guía
todo mi mundo se derribó
todos los colores se tornaron grises
quise marcharme contigo
viajar
pero no hallé el camino
hasta que en la luna encontré tu sonrisa
en las estrellas tu mirada serena
entonces...
recordé cada palabra
todo vino a mí como una marejada
y comprendí…
No estaba vacía
me dejaste llena de tu cognición
de tu amor
de tu valor
y así…
Comprendí
que debía dejarte partir hacia la eternidad.
(Donde algún día nos volveremos a encontrar)

En memoria de Carmen L. Mosqueda de Kachorroski 43


Te amo vieja. Siempre estarás en mi corazón.
Puerto sereno
P uerto sereno
L a u ra K a c h o rr o sk i

Desde las profundidades de mi océano


emergí sobre la cresta de una ola.
Cabalgué sobre ella apasionada
buscando un puerto donde descansar.

Allí estabas tú…


puerto sereno

Tu faro fue mi guía


me diste sosiego
me diste playa donde reposar.

Esparcí mi espuma blanca


en tus arenas cálidas
te regalé caracolas
que al oído te susurraron los versos más bellos.

Me absorbiste y humedecí tu esencia


fuimos uno en aquella noche sin estrellas
sólo la luna nos baño de perlas
hasta que una gaviota nos anunció el alba
que prometió quitarnos la intimidad.
Entonces… Tú
puerto sereno
me diste la espalda
me echaste al mar.

44 Desechada retorné a mi ola


regresé nuevamente
a las profundidades de mi soledad.
Quisiera
Quisiera
L a u ra K a c h o rr o sk i

Quisiera desnudarte
para saberte más fresca
quisiera ser el dueño
bandido de tu cuerpo.

Caminar en un rayo de sol


y penetrarte con la aurora
saciar a voluntad
mi hombría sin demoras.

Quisiera beber la humedad


de tus manantiales profundos.

Quisiera unirme a vos


en indisoluble elemento.

Ser el pedernal
que encienda tu llama dormida
y así poder perpetuar
esta pasión en el tiempo.

45
Quisiera ll
Quisiera ll
L a u ra K a c h o rr o sk i

Quisiera …
montarme en una gaviota
y recorrer el mar indiferente
hacer nido en un acantilado
y empollar recuerdos perdidos.

Quisiera…
negarme al presente
y hacer todo por tenerte .
dejar mi piel, mi vida
por un minuto ya ausente.

Quisiera
que el pasado
retorne con la brisa
pero el viento
sólo trajo el deseo de tus brazos.

Quisiera
que la gaviota te entregue sus alas
y en la brújula encuentres
mi norte que en soledad
te espera anidando.

46
Quiero
Quiero
L a u ra K a c h o rr o sk i

Quiero convidarte a pasear


caminar sobre las estrellas
detenernos a descansar
sobre la luna llena
respirar el perfume
de tu piel de primavera
embriagarme del néctar de tu boca
navegar tu cuerpo
y encallar en el cálido puerto
de tu centro
amarte sin fronteras
ser el escriba de tus experiencias
con tinta de pasión
con pluma de fuego
y alma de poeta.

47
Tu presencia es un espectro
Tu presencia es un espectro
L a u ra K a c h o rr o sk i

Témpanos de hielo
que flotan en el océano
de mis recuerdos
no logran congelar
mis sentimientos.

Tus caricias me sacuden...


me golpean
como olas que rompen
en acantilados desiertos.

El amanecer me sorprende
trastornada de pasiones archivadas.

Y tu recuerdo se agiganta
con las horas que pasan.

Y tu presencia es un espectro
reflejado en la ventana.

Y su mirada es la daga
que se clava
en los despojos de la nada.

Sólo huesos han quedado


te has llevado mi alma.
48
Amo las huellas de tu rostro
Amo las huellas de tu rostro
L a u ra K a c h o rr o sk i

Una fugaz mirada al espejo


una retrospección…
Necesidad de introducirme
de acariciar mi interior.

Amo tu sinceridad
amo tu mirada honesta
tu cansancio al respirar
y las huellas que en tu rostro
nacieron de tanto amar.

Reflejo de una vida


fotografía de una mujer erguida
ante una vida cargada de antipatía.

De decepciones
pero también de satisfacciones.

Rasgos que denotan fracasos


vestigios de quebrantos
huellas de logros obtenidos
y bien merecidos.

De amores eternos
y de olvidados

Entre risas y llantos


reflejo-me en el espejo
y digo…
49
Te amo.
Tu puño poeta
Tu puño poeta
L a u ra K a c h o rr o sk i

Y el cuaderno se abrió…
y la pluma del poeta transitó…
por valles de eternas libertades
encerradas…
que su alma transparente rescató
de imaginaciones presentes
de añoranzas ausentes
de vidas pasadas
de amores candentes
de anhelos soñados.

Montañas y ocasos
amaneceres y llanos
memorias grabadas
a tinta indeleble
tu puño poeta
es péndola y centella
que acaricia el alma
que hiere la ausencia.

Escribes auroras
y atardeceres
con la gracia atiborrada
de un orfebre…

50
Diego Wdoviak
Nací en Aristóbulo del Valle, provincia de Misiones, tuve una infan-
cia que transcurrió en el campo. Allí se me arraigaron valores, prin-
cipios y educación heredados de una descendencia austríaca, ucra-
niana. Mi adolescencia transcurrió en la ciudad que me vio nacer.
Para terminar estudios me radiqué en Posadas, la capital provincial.
En ese lugar me inserté en una sociedad distinta: con otros princi-
pios, diferentes valores y otro ritmo de vida. Ese cambio necesitaba
ser expresado y encontré un fluido canal en la música, más especí-
ficamente creando letras de canciones que al final nunca se con-
virtieron en tales, pero que terminaron adquiriendo otra faceta y
se convirtieron en lo que hoy es una de mis pasiones: los poemas.
51
En puntas de pie
En puntas de pie
d i e g o w d o v i ak

Si la muerte te vino a buscar


no tengas miedo, vuelve a callar
sal en puntas de pie
soñando que se equivoque otra vez.

Si la suerte te vino a buscar


no le des confianza, vuelve a dudar
pregúntale a cambio que se llevará
cuál es el precio que hay que pagar.

Si fue verte, y fue amor de verdad


un adiós nunca me voy a perdonar
saldré en puntas de pie
soñando alguna vez poder volver.

Yo no me fío del destino


ni de lo que me puedan decir
no es fortuna lo que pido
sino más caminos para elegir.

Si la muerte te vino a buscar


de tu desgracia no me vayas a culpar
te puedo aconsejar tal vez
si es que no tienes nada que perder.

Si la suerte se vino a quedar


52 yo dudaría de esa extraña bondad
se vende como tu salvación
para poder llevarse algo de vos.
Si no verte, ahora me va a condenar
no voy a rogar, voy a intentar
andar en puntas de pie
esperando encontrarte alguna vez.

Yo no me fío del destino


para poder seguir de pie
no es fortuna lo que pido
tan solo poder volverte a ver.

Si la muerte te vino a buscar


de tu suerte no me quieras culpar
sal, sin dudar en correr
soñando poder escapar otra vez.

Si la muerte te vino a buscar


no pierdas la fe, no dejes de confiar
sal en silencio sin mirar atrás
en puntas de pie casi sin pisar.

Cerca estuve
Cerca estuve
d i e g o w d o v i ak

Una vez tuve una flor entre mis manos


pero su tallo tenía espinas
ahora sólo le hablo a la gente
de las flores que lastiman.

Muchas veces intenté y me vencieron


pero estuve muchas veces cerca de ganar
ahora le hablo a mi soledad de todo
53
de mi viejo sueño de querer volar.
Nunca pude volar
Pero jamás dejo de creer
Nunca pude despegar
Pero cerca estuve esta vez.

Es triste pensar en los que no pelean


Porque ya se dieron por vencidos
Ahora hablan al viento de su suerte
De su fracaso y todo el tiempo perdido.

Una vez tuve una flor entre mis manos


Pero acariciarla me dejó heridas
Ahora solo la culpo de mi suerte
De no poder tocarla, de tenerla prohibida.

Es triste pensar en los que se rindieron


Si no podemos ayudar a que se levanten
Ahora hablan de por qué se callan
Nadie tan vencido vuelve a ser como antes.

Una vez te tuve entre mis manos


Pero valió la pena arriesgarse
Ahora le hablo a mi soledad de esto
Para ser feliz quizás hay que lastimarse.

Una vez te tuve entre mis manos


Sabés, valía la pena el sufrimiento
Ahora le hablo a mi soledad de esto
De mis heridas y de que no me arrepiento.

Una vez te tuve entre mis manos


Aunque me causaras tanto dolor
54 Supe que conseguir la felicidad
Depende de cómo se agarre una flor.
Algunas cosas
Algunas cosas
d i e g o w d o v i ak

No sé qué fue de la vida de ella


nunca más la volví a ver
si nos encontramos a lo mejor
ni me recuerde, no sé.

A lo mejor no me reconozca
a lo mejor no me quiera mirar
pero igual yo la recuerdo mucho
quizá más de lo que la debiera recordar.

Algunas cosas no las hice bien


y otras ni siquiera las hice
pero la quise y ahora también
ahora que no puedo con las cicatrices

La recuerdo más de lo que debiera


a pesar de no haberla vuelto a ver
unas derrotas no logré esconder
rendido y arrepentido, sin solución
apunté a pensar que era lo mejor.
(Primero se fueron las certezas)
Imaginé que siempre así se empieza
no se abandona tan fácil un amor
era de presagiar algo mucho peor
sin ella una condena me atraviesa.

No sé qué fue de la vida de ella


nunca más la pude ver 55
a lo mejor la encuentre hoy
y se acuerde de mí, tal vez,
Porque yo la recuerdo mucho
mucho más de lo que debería ser
quizá me arrepentí de muchas cosas
y ahora ya no lo puedo esconder.

Tal vez me arrepentí de mucho


ahora que no tengo para elegir
se desabrocharon sueños que creía
que siempre los iba a poder vestir.

Tal vez me arrepentí de mucho


ahora que es extraño reír
porque que la amaba como nadie
jamás me animé a decir.

A lo mejor me equivoco otra vez


pero hoy ya no alcanza con arriesgar
porque se hilvanaron motivos que dicen
que a esta altura ya no hay oportunidad.

Me quedé solo y sin arriesgarme


con los consejos que nadie debería dar
y se estrellaron sueños que yo creía
que sin ella se podrían hacer realidad.

Quizá me arrepentí de muchas cosas


de algunas cosas que quería hacer
o que solo las hice a medias
y ahora no la puedo volver a ver.

A lo mejor esperé demasiado


56 buscando la mejor oportunidad
ahora tal vez sea muy tarde
para decirle que no la dejo de amar.
Sigue torcida
Sigue torcida
d i e g o w d o v i ak

En resumen, esta recta sigue torcida


y nos recibieron con una falsa bienvenida
siempre estamos rasguñando las despedidas
abrazando el dolor de una nueva herida.

Nos damos cuenta que estamos solos en esta orgía


no acariciamos nada y ya se está haciendo de día
otra derrota para coleccionar con las que ya había
y nos vamos despidiendo sin conocernos todavía.

Concluyendo, esta razón sigue torcida


nunca nos recibieron de una manera atrevida
aunque no dejemos de rasguñar las despedidas
y de abrazar el adiós de una nueva partida.

Nos damos cuenta que nadamos solos en esta bahía


no alcanzamos nada y el mar no nos da garantías
otra derrota para culpar de nuevo a la misma cobardía
ya nos vamos despidiendo, siempre con las manos vacías.

Terminando, esta vida sigue perdida


se desabrocharon ilusiones mal cocidas
perdimos victorias nunca bien merecidas
y nos llevamos derrotas para toda la vida.

Nos damos cuenta que estamos solos en esta sequía


los chaparrones eran molestos cuando mucho llovía
hoy es necesaria cualquier gota que nos dé una alegría
57
ya nos vamos despidiendo porque otra vez se hizo de día.
Con las manos vacías
Con las manos vacías
d i e g o w d o v i ak

Me envuelve el frío de un atardecer vacío


sin hacer lo que debía haber hecho
mi alma se está cubriendo de rocío
y vuelvo al mundo del que solo me echo.

Borracho de ignorancia y pecador afortunado


el azar es una deuda que nunca pude cobrar
un corazón regalado antes de que lo conquisten
a una mujer malvada que no lo ha querido cuidar.

Hoy vuelve a mi mente el recuerdo de los ausentes


mi corazón cansado no tiene el mismo pulso
amor no correspondido, sin amar lo suficiente
vuelvo a entrar a la cancha y solo me expulso.

Habrá algún premio para el último


quiero asegurarme uno esta vez
habrá algún premio para el ignorante
con las manos vacías no quiero volver.

Me vuelve ese atardecer sin sol que ya conozco


que no me sirve de nada y que jamás lo uso
mi alma desalmada se está cubriendo de polvo
vengo a los lugares donde ya me siento intruso.

Me rodea el frío de un atardecer oscuro


58 se cubre de polvo mi corazón sin estrenarse
apilando recuerdos de amores no correspondidos
vuelve a los besos pero aún sin enamorarse.
A los saltos
A los saltos
d i e g o w d o v i ak

Decir mentiras de verdad no te cuesta


y nunca estarás a la altura de la fiesta
eres de las que para verse más alta
anda a los saltos sin saber cuánto le falta.

¿Qué sabes de lo que a mí me falta?


de las veces que la soledad me asalta
y me quita la fe y me pone en penitencia
las veces que sufro tu ausencia.

Decir adiós más veces que volver


es dejar mucha ausencia en pie
es dejar mucha espera sin resolver
y eso nunca va a sentirse bien.

Las mentiras siempre tienen un final


no creas que nunca se sabe la verdad
eres de las que para poder sentirse bien
anda todo el tiempo en puntas de pie.

Las mentiras tienen caminos en subida


las verdades no juegan a las escondidas
eres de las que para poder ver más alto
anda todo el tiempo a los saltos.

Nunca sabrás lo que acá se siente


desde arriba todo es diferente
eres de las que miente para estar segura
59
anda a los saltos para ganar altura.
Con rabia
Con rabia
d i e g o w d o v i ak

Con rabia porque hay un fusil


que apunta a tu cabeza por si te rebelas
nunca te llevaste bien con el sistema
de zapatos duros y gruesas suelas.

Con rabia porque también sabes


que es el único culpable de tus problemas
se afirma más tu sentimiento revolucionario
porque no te llevas bien con el sistema.

Con rabia porque hay un fusil


que apunta al cielo por si vuelas
nunca te llevaste bien encerrado
además de hacerte caer, quieren que te duela.

La rabia de no poder hacerte a un lado


de ningún tema quieres hablar por las dudas
te sientes presionado por el maldito sistema
te piden más sacrificio y no te dan nada de ayuda.

Con rabia porque hay un fusil


que apunta a tus pies por si te adelantas
pero aguantas, resistes y haces frente
aunque te caigas seguro te levantas.

Con rabia porque hay una bala


60 reservada para destruir tu rebeldía
pero nada podrá hacer frente si:
juntamos tu revolución con la mía.
Basta de todo
Basta de todo
d i e g o w d o v i ak

Basta de historias largas, de pies cansados


me niego a calzarme otra vez zapatos gastados
son evidentes los moretones y los golpes dados
que no llegaron a destino aunque iban cargados.

Basta de historias viejas, de esperas largas


lastima esta gotera de lágrimas amargas
me ilusiono y al despertar todo los sueños se borran
es evidente que no escaparé por mucho que corra.

Basta de historias sin alma y promesas rotas


me niego a calzarme otra vez las mismas botas
son evidentes los callos en mis pies cansados
me harté de caminar yendo a ningún lado.

Basta de historias viejas, de furia loca


de seguirte esperando porque me provocas
vienes con promesas que me ilusionan
pero nunca te quedas, de día me abandonas.

Basta de historias crueles, de furia loca


de espera impaciente por no tener tu boca
es evidente que lo evidente me vuelve loco
buscarte siempre, perderte mucho, tenerte poco.

Basta de historias truncas, estrenando pasos


los reservaba para adelantarme a los fracasos
basta de historias malas con un final triste
61
quiero escuchar que estás y nunca te fuiste.
Ante tus ojos
Ante tus ojos
d i e g o w d o v i ak

Yo me detuve a confiar en tu lado más cobarde


y eso que a mí para todo se me estaba haciendo tarde.
Yo me detuve a explicarle a tu lado ignorante
que a pesar de los fracasos, hay que seguir adelante.

Yo me detuve a escuchar a tu lado más callado


y junto a mi lado callado, hablaron de lo que nadie ha hablado.
Yo me detuve a enseñarle a tu lado estudiante
que a pesar de las arrugas nos queda mucho por delante.

Yo me detuve a hacerle ver a tu lado ciego


que más vale pájaro en mano que cien en vuelo.
Yo me detuve a hacerle frente a tu lado agresivo
ahora agradezco conocerte y agradezco estar vivo.

Yo me detuve a resucitar a tus esperanzas muertas


y eso que el velorio me estaba golpeando la puerta.
Yo me detuve a abrigar a tu corazón vacío
y eso que el mío se estaba muriendo de frío.

Yo me detuve a despertar a tu lado dormido


y eso que mis sueños se estaban durmiendo conmigo.
Yo me detuve ante tus ojos sin muchas razones
más vale un acierto que cien equivocaciones.

Yo me detuve a descubrir tu lado más secreto


62 y descubrí que se puede admirar sin perder el respeto.
Yo me detuve a describir tu lado más hermoso
y no me alcanzaron las palabras para describir tus ojos.
Yo me detuve para hacerte ver que no es mentira
que más vale pájaro en mano que cien en la mira.
Yo me detuve ante tus ojos sin un buen motivo
ahora agradezco conocerte y agradezco estar vivo.

Yo me detuve a intentar animar a tu lado resignado


y eso que vencido yo ya me había declarado.
Yo me detuve a ofrecer compañía a tu lado solitario
porque por ti yo siempre quise hacer todo lo necesario.

Aunque
Aunque
d i e g o w d o v i ak

Aunque sonría, esta alegría tiene huesos de una gran tristeza


aunque pierda, no soltaré todas las cartas sobre la mesa
aunque me veas llorar, esta tristeza tiene razones inconfesables
y cuando tropiece siempre será por las piedras de los culpables.

Aunque sonría, esta alegría tiene piel de durar muy poco


aunque parezca que pienso demasiado, siempre me equivoco
aunque venga un chaparrón, las lágrimas no se confunden
y sigo soñando estar lejos de los barcos que se hunden.

Aunque sonría, esta felicidad solo es una alegría pasajera


aunque esté en pie, mis piernas no siempre están enteras
aunque no veas lágrimas, un chaparrón nunca lavará lo que siento
y cuando consiga lo que quiero, lo que quiero no es sufrimiento.

Aunque sonría esta alegría tiene cara de no ser mía


aunque me equivoque, seguiré buscando mi propia alegría 63
aunque las lágrimas sean muchas, nunca serán suficientes
Yo seguiré soñando con barcos que no le temen a la corriente.
Con una derrota a cuestas
Con una derrota a cuestas
d i e g o w d o v i ak

Ahora que estamos con el fracaso a cuestas


cuesta deshacernos de esta enorme falta de fe
pero nos cuesta dejar archivada la artillería
pues aprendimos que podemos dar lucha antes de correr.

Ahora que andamos con la derrota a cuestas


nos cuesta sacar pecho, nos cuesta mantener la fe
nos cuesta sacar pecho pero no dudamos en hacerlo
igualmente la próxima vez lucharemos antes de correr.

Podemos vivir con una derrota a cuestas


no podríamos vivir sin haber luchado
nuestra guerra nadie la va a pelear por nosotros
nos quedará el orgullo de haberlo intentado.

Ahora que estamos cargando un fracaso


nos cuesta subir la cuesta hasta la fe
sobornar a los escalones no resulta tan fácil
pero aprendimos el valor de luchar antes de correr.

Ahora que estamos cargando una derrota a cuestas,


sobre los hombros llevamos esta enorme falta de fe
la desconfianza nos tocó sin descuento esta vez
es el precio preciso por luchar antes de correr.

Ahora que estamos con un tropiezo a cuestas


64 nos cuesta ofrecerle garantías a nuestra fe
persuadir a la empinada no resulta accesible
tampoco creíamos subirla sin parar de correr.
Ahora que estamos alternando caídas y derrotas
nos cuesta entrar sin antes mirar de costado
podremos convivir con fracasos y decepciones
más no podríamos hacerlo sin haber luchado.

Ahora que andamos cargando una frustración


cualquier tropiezo lastima letal a nuestra fe
los escalones no quieren aflojar pero igualmente
siempre vamos a enfrentarlos antes de correr.

Del cielo de todos


Del cielo de todos
d i e g o w d o v i ak

Es media noche, hora de tomar valor


animarse a dar el paso que no se dio
animarse a perder con la más bella
robarse del cielo de todos, una estrella.

Es media noche, hora de decir adiós


a las excusas que sobornan la situación
tomar el camino corto hacia la fortuna
robarse del cielo de todos a la luna.

Es media noche, hora de la despedida


a las excusas que retrasan que me decida
a aprovechar las oportunidades que nunca tuve
despejar del cielo de todos, cada nube.

Es media noche, es hora de la verdad


tomé el camino sano de no volver atrás 65
si voy a perder que no sea sin que lo intente
bajo el cielo de todos, tenerte eternamente.
Con lo que cuesta
Con lo que cuesta
d i e g o w d o v i ak

Si fuera más fácil pilotear una mentira


tal vez no haría falta decir toda la verdad
con lo que cuesta cobrar una falta en estos días
yo te quise proteger y vos te quisiste lastimar.

Con tanto centro que no llega bien tirado


esta vez ni siquiera me preparé para cabecear
con lo que cuesta llegar solo frente al arco
yo me vine a resbalar justo cuando iba a patear.

Yo quise protegerte de los ángeles asesinos


y vos te pusiste a volar en su presencia
con lo que cuesta hacer pie y mantenerse
yo vine a ilusionarme sin medir las consecuencias.

Si fuera más fácil pedalear una mentira


tal vez no te diría siempre la verdad
con lo que cuesta cabecear bien un centro
me vienen a decir que estaba fuera de lugar.

Acostumbrados a los centros mal hechos


esta vez acostado uno bueno me encontró
con lo que cuesta llegar solo al arco rival
yo me caí justo cuando iba a convertir el gol.

Yo quise protegerte de los ángeles malditos


66 y vos justo te ponés a charlar con ellos
con lo que cuesta curar bien las heridas
obligarte a obedecer siempre será un atropello.
Si fuera más fácil navegar una mentira
no estaría naufragando con esta triste verdad
con lo que cuesta que cobren una falta a favor
estoy viejo ahora y sin tiempo para patear.

Acostumbrado a que los centros lluevan lejos


esta vez me tomó distraído sin hacer pie
con lo que cuesta una gambeta que luzca
me vienen a hacer falta y encima no lo ven.

Yo quise protegerte de los ángeles bandidos


porque vos no reconoces lo bueno de lo malo
con lo que cuesta sacarse la marca de encima
yo llego solo y frente al arco me resbalo.

Si fuera más difícil desvestir una mentira


tal vez no siempre sería tan sincero
con lo que cuesta enamorarse en serio
te alejás porque me presentís traicionero.

Acostumbrado a que los centros vengan por abajo


no me preparé para saltar, se me fue también
con lo que cuesta burlar la defensa del campeón
solo y con el arco vacío me olvidé de mis pies.

Yo quise protegerte de todos los peligros


pero asumo que para vos eso no era importante
con lo que cuesta salir de acá sin lastimarse
perderte así me dejó muchas más heridas que antes.

67
Remediar tu encanto
Remediar tu encanto
d i e g o w d o v i ak

Murmuras tus dudas pero gritas tus convicciones


y a tus sueños altivos los tienes entre algodones
maltratas tus debilidades y acaricias tus fortalezas
escondes tus derrotas de la reprobación triunfante
a tus victorias memorables les pones trajes elegantes
y en una noche permisiva le llenas de promesas.

Vienes con tus conquistas a reprobar mis limitaciones


con tu intuición eficaz desacreditas mis precauciones
que me obligan a alejarte pero tampoco tanto
callas por las dudas si tu coartada tiene complicaciones
mientras yo le hago la guerra a mis contradicciones
me guardo pretextos para remediar tu encanto.

Maquillas tus ideas impresentables y presumes de ellas


sabiendo que desde el alma nunca serán las más bellas
y vienes con tu valentía a corromper mis incertidumbres
malcrías tu racha de buena suerte descaradamente
sacrificas sueños amotinados y premias a los obedientes
me menosprecias para no perder la costumbre.

Para remediar tu encanto conozco tus secretos


de tus noches sin diplomacia, deseos indiscretos
de tu política de darle rienda suelta a las carencias
sé de tus caprichos negligentes y tus antojos sin vergüenza
de tus ganas jugosas, de tus inclinaciones sin recompensa
68 de tu habilidad para manipular nuestras diferencias.
Motivos
Motivos
d i e g o w d o v i ak

Era mendigo, contigo soy afortunado


porque yo sonrío sólo si estoy a tu lado
sabes que vuelvo cada vez que huyo
y que te quede claro, yo soy sólo tuyo.

Muchas veces te pregunté


muchas veces me dijiste tal vez
muchas despedidas fueron
muchos motivos para volver.

Era testigo, acusado estoy contigo


de llevarme la felicidad conmigo
sabes que cada vez que te vas te espero
y que no se te olvide, que yo te quiero.

Muchas veces te encontré


muchas veces nos fuimos también
muchas llamadas fueron
muchas razones para volver.

Soy afortunado, sin ti seré mendigo


porque yo sonrío tan sólo si es contigo
nunca que partimos nos separamos
y que te quede grabado, que yo te amo.

Era acusado, sin ti ni sospecharían


que yo me robé la última alegría
siempre que nos fuimos nos reencontramos
69
y que no te queden dudas, yo también te amo.
Van de la mano
Van de la mano
d i e g o w d o v i ak

Ya no la nombres más en vano


la soledad y la tristeza van de la mano
no lo sabías ni tampoco lo presentiste
ahora estás vacío porque todo se lo diste.

Ya no la recuerdes más te lo pido


es hora de dejar que se la lleve el olvido
hay que resignarse a saber que hay cosas
que son imposibles a pesar de ser hermosas.

Igual la buscas, aunque no te quiera


la soledad y la derrota son compañeras
no lo sabías, quizás no te hiciste caso
te quedaste solo cargando con un fracaso.

Ya no la llores, en vano es tu llanto


hoy sabes por qué olvidar cuesta tanto
hay que resignarse a saber que hay cosas
que son imposibles, solo por ser hermosas.

Ya no la recuerdas, sabes que es en vano


las lágrimas y las despedidas van de la mano
al menos ya sabes cómo son las cosas
ella era imposible tal vez porque era hermosa.

Ya no la buscas como otras veces


70 tanta constancia y lealtad no la merece
ya la peleaste más de lo necesario
el tiempo y el olvido nunca son contrarios.
No es más que una mentira
No es más que una mentira
d i e g o w d o v i ak

No es más que una mentira


la justicia y la libertad no existen
ahora entiendo por qué me miras
los sueños tan solo los pobres los visten.

Esta ciudad está inundada de gente


buena, mala y totalmente diferente
esta ciudad está invadida por gente
culpable, fugitiva y también inocente.

No es más que una mentira


la libertad no es más que un deseo
ahora entiendo por qué me miras
porque en mis sueños nunca te veo.

Igual nada es tan verdadero


sabemos que gente mala siempre hubo
entendí que lo que yo espero
en realidad jamás alguien lo obtuvo.

No es más que un engaño


la justicia y la libertad son solo eso
lo justo no debería hacernos daño
y además siempre estamos algo presos.

Igual todo es muy traicionero


la ciudad gente mala siempre tuvo
entendí que a quien yo espero
71
en realidad conmigo nunca estuvo.
El primer sol
El primer sol
d i e g o w d o v i ak

Este es el primer sol que no vence el frío


atraviesa un rayo, lo que fue un desafío
la casa está vacía desde el último adiós
la única despedida del último amor.

Dime que es peor ahora


mezquinarse un deseo por miedo
o hacer realidad sueños ajenos
dime que es peor ahora
que sabes lo que realmente quieres
y los sueños de otros no son tan buenos.

Las lluvias pasajeras son como antojos


de un mal tiempo que se libera de despojos
el frío viene desde muy adentro mío
este es el primer sol del que no confío.

Me regalo unos minutos, una vuelta más


la rutina tiene las manos heladas de verdad
la casa está vacía desde el último adiós
la última despedida del único amor.

Este es el primer paso sobre el rocío


la lluvia fue un antojo de un corazón frío
el sol tiene que llegar muy adentro mío
los despojos superficiales, descubren el vacío.
72
Caballeros de Arturo
Caballeros de Arturo
d i e g o w d o v i ak

Luchemos por ser libres para ser distintos


no dejemos echado a la suerte el futuro
demos rienda suelta a nuestro instinto
aunque este nos lleve por caminos oscuros.

No le demos pie a la llegada de los fracasos


que a la derrota le cueste la vida encontrarnos
que la suerte se termine ahogando en un vaso
antes de amenazarnos con que puede faltarnos.

Seamos reyes en nuestro territorio


victoriosos, caballeros de Arturo
seamos intérpretes del mejor repertorio
el martillo que romperá todos los muros.

No dejemos ningún cabo suelto a esta altura


pongamos los tornillos a nuestra madera
salgamos de la rutina no solo por aventura
sino en busca de vivir de otra manera.

Que a nuestro martillo no le falten kilos


no le demos oportunidad a que el error sorprenda
seamos desde hoy los que manejemos los hilos
y saquémonos de una vez de los ojos las vendas.

Seamos por fin los que manejemos los hilos


dejemos ya de ser las esclavas marionetas
que nunca nos falte el valor de buscar lo querido
73
que no se nos olvide el camino hacia la meta.
No le demos ventaja a lo que nos mata
no le permitamos la entrada a las dudas
que se quede muda la sospecha ingrata
y que entre nosotros no nos neguemos ayuda.

Que a nuestra espada nunca le falte filo


para poder reducir al que no nos respeta
tomando el lugar de los que manejan los hilos
y no ser nunca más las esclavas marionetas.

Que a nuestra arma nunca le falte carga


que el tren del olvido no nos regale pasajes
que la temporada de las victorias sea larga
y que a las derrotas les deseemos buen viaje.

No le demos lugar a la incertidumbre


que el tren del olvido no nos tenga en cuenta
ganar nunca será una mala costumbre
y que perder no sea el comienzo de una tormenta.

74
Lucas Oscar Yuge
Nací el 23 de enero de 1986 en Jardín América, Misiones, República
Argentina. En 2003 culminé mis estudios secundarios con orien-
tación hacia la Humanística y Ciencias Sociales además de una Tec-
nicatura en Salud Ambiental. En 2007 obtuve el título de Enferme-
ro en la Universidad Nacional de Misiones, mudándome a la Ciudad
de Posadas donde resido actualmente. A pesar de las distancias entre
Ciencias Exactas y Literatura, opté por escribir ficción. Hasta el mo-
mento he publicado un par de cuentos cortos orientados al terror y
la ciencia ficción, siendo ésta la primera de mis obras en inclinarse
hacia la poética.
75
Los días sin ella
Los días sin ella
L UC A S Y UG E

Los días sin ella se hacen largos,


con el frío invadiendo los rincones del alma,
augurando un rapto de angustia,
que junto al sol de cada mañana me recuerda a la soledad.
Los días sin ella imponen el letargo sobre la ilusión,
ilusión que estancada no puede fluir
a través de la represa del adiós.
Desabridos y apáticos días sin ella,
donde no alcanzo a llenar uno de esos espacios que me dejó,
y el vacío ya inunda otro.
En los días sin ella siento su presencia al dormitar.
Hasta alcanzo a verla en mis sueños.
A veces tropiezo con viejos poemas que le pertenecían.
Lloro al volver al momento en que la besé por primera vez.
Los días sin ella son de fingida risa, y repletos de un amor,
que por más que duerma sepultado en el pasado,
sigue imperante en el pecho y en el corazón.

76
Los días comienzan…
Los días comienzan...
L UC A S Y UG E

Madrugada ya y no quiero abrir mis ojos,


quizás sea por miedo a que lo vivido no haya sido solo un sueño.
De pronto despierto deseando volver el tiempo atrás.
Es la mañana de un nuevo día…
Hoy empiezo a caminar sin ti.

Junto tus cosas negándome a creer lo ocurrido,


necesitando sentir tus manos curando mis heridas,
tersa piel sobre la mía.
Crucé la cocina y creyendo sentir un aroma que no estaba allí.
Salí corriendo por temor a caer en la locura.
En mi alma sonaba solo el silencio,
y nadie respondió a mi terror.
Abandoné el hogar soñando aún volver el tiempo atrás.
El atardecer de un viajante señalaba un nuevo cielo,
donde se mezclaban la noche y el día, la oscuridad y la luz.
En mi… el pasado y el presente, la muerte y la vida.

Abandoné despacio nuestra casa.

-¿¡Nuestra..!?- Pensé…

77
Para toda la vida
La amordazada sensación
L UC A S Y UG E

Quiero mirar otra vez esos ojos que el cielo ilumina,


y despertar junto a ti al amanecer.
Verte seducir, merodear, en mi alma;
y llorar otra vez al pensar que no te volvería a ver.

Será tu piel de blancas arenas la sed de mis labios,


y que entre las dunas el oasis del esplendor,
refrescando el alma en tus aguas
anhelando tus labios y amarte otra vez.

Por siempre serás, por quien pelee,


sonría y muera de amor.
La vida y sus vueltas nos demuestran
que no todo está dicho.
Disfruta al enseñarnos
cuan verdadero es lo que no creímos...

Hoy te puedo soñar, extrañar cada día más,


y llegar a decir… que en tiempos así cuando ya nada quede,
tú estarás aquí aún junto a mí.

“Para toda la vida siempre serás,


por quien pelee, sonría y muera de amor.
Para toda la vida mi alma estará,
a tu pecho abrazada,
porque no creía que a primera vista me podría enamorar...
y entonces te vi.”
78
De brujas y quimeras
De brujas y quimeras
L UC A S yUG E

La amordazada sensación de querer explicar


lo que sentía y gritar quien era,
arañaba mi repulsiva libertad.
Engañaba diciendo que podía expresarme
sin temor al hachazo verdugo de las prejuiciosas mentes,
vaciadas por la televisión.
Recorrí esos lugares que cobijaron nuestros momentos;
donde aquella vez piel con piel,
alma con alma, sellamos en el mismo latir dos corazones.
Y me marché con la nostalgia como sombra
del dolor que llevaba dentro.
Al andar volvían eventos a mi cabeza,
recuerdos de tiempos bellos, su piel perfumada
y labios frescos de rocío,
olvidé la realidad con los destellos del corazón.
Emprendí al fin el camino de vuelta
pero no quise volver a casa, las heridas aún no sanaban.
Mi camarada me recibió afectuosamente
y empatizando con ese dolor
refiriose al desquiciado desvelo:
“Las brujas enamoradas, orgullosas e insumisas,
no resignaran a ser olvidadas.
Aunque persigas huir, intentarán una
y otra vez robar tu corazón.
Metiéndose en tu cabeza, proyectando recuerdos
lanzan su hechizo, metiéndose en tus sueños,
recordándote al despertar que no puedes escapar,
porque suyo es tu corazón”.
79
Hechizo de ensueños
H echizo de ensueños
L UC A S Y UG E

Hoy soñé que reinaba en mi cama otra mujer,


que sus besos me encendían y otra vez,
comenzaba a olvidarte.
En una nueva pasión.
Y soñé, que sus labios recorrían mi cuerpo,
me incendiaban sus caricias y otra vez,
perdía el reflejo de mis actos,
entre cadencias enfermas de deseo.

Y un instante en su boca,
el rojo de sus labios me recordó
que no había nada nuevo entre ella y yo.
Sus besos, sus caricias, y el turgor de su piel.
Esa lengua homicida,
era la misma que me envenenó ayer;
y me hizo tan feliz.

“Y eras Tú…
los mismos ojos, los mismos besos
tu hechizo alcanzó mis sueños
y aún siento el sabor de tu cuerpo.
Y eras Tú…
camuflada en mis sueños.
Un fantasma que volvía, a reabrir viejas heridas
con la guadaña de sus besos.”

Tu hechizo de ensueños me ha hecho prisionero.


80
Necrópolis
Necrópolis
L UC A S Y UG E

Nos conocimos en invierno,


sin embargo mucho tiempo pasó
hasta que tus besos fueran más que un sueño.
Sin darme cuenta ya eras parte de mi vida,
encontrándote cada mañana al despertar.
Los años enseñaron el camino a correspondernos
hasta que las luces de la historia oscurecieron
y tu sol jamás asomó en la alborada.
Te fuiste rápido, sin despedirte,
aún hoy me pregunto ¿Por qué?
Tu ímpetu y fortaleza fueron
quienes no permitieron cuidar de vos misma.
Combatiendo a pecho y sangre
contra las tormentas de la vida,
defendiendo a todos menos a ti.
De tu firmeza supe como abrirme camino en hostilidad.
Pero hubiese querido tenerte aquí y crecer contigo,
aprendiendo a soportar la ausencia
y nostalgia de una cama vacía e invernal.
Cavilando inútilmente en porque no te cuidé lo suficiente.
Clamando con ira mi dolor.
Sintiendo en el aire matutino tu perfume
endulzando mis tristezas, arrancando una sonrisa.
Grité ayer al cielo tu nombre,
si lo oíste por favor haz crecer en mi corazón una flor,
como la que brotó, tan rozagante en tu tumba.
81
Tal vez
Tal vez
L UC A S Y UG E

Tal vez, mi grito de amor desesperado


llegue en el cielo al jardín de flores
del cual hoy tú formas parte.

Tal vez tu corazón,


bajo tierra vuelva a latir
y tome forma de flor
en ese suelo que ayer regué
con lágrimas de resignación.

Tal vez logre sonreír


al probar que la venganza
no se llevará mi dolor.
Y te buscaré en los recuerdos
y en las noches extrañaré tu calor.
Tal vez, me visites entre desvelos
porque sabes que iluminan
mi vida tus recuerdos.”

Tal vez hoy el mundo se entere


que existió una mujer
que me demostró día a día
lo que es amar con el corazón abierto.

…Tal vez el perfume de esa flor que eres tú,


perdure para siempre en mi corazón…
82
Deshojando recuerdos
Deshojando recuerdos
L UC A S Y UG E

Te fuiste en una lejana tarde,


y triturando el sueño de ambos,
me dejaste solo aquí.
Tu partida, cruel recuerdo de las noches,
sigue arañando profundo las heridas.
¿No hay dolor que dure cien años?
Solo un segundo de resignación anhelo.
Y atravesar los abismos negros de la muerte,
tus fotos y el recuerdo.
Buscaré hasta alcanzar un vestigio
de ese amor aquí en la tierra.
Trataré de encontrar,
la llave que me saque de esta ciénaga.
Hoy otra vez, deshojando sueños que nacieron junto a ti,
quemaré las fotos.
Ya me deshice de las mascotas,
sacrifiqué mi alma de un tiro en el placard.
Sabrás o no que tu partida,
cambió mis planes en el mundo.
Pero quiero comenzar de nuevo.
Solo me falta encontrar la manera.
Y hoy sólo deseo oír tu voz, sentir tu piel,
ver tu figura acercarse a mí otra vez.
Sé que al final llegará el día en que te pueda olvidar.
Hoy otra vez, intentando deshojar recuerdos
que nacieron junto a ti…
…las fotos conservé. 83
(No olvides que) Te amo
(N o olvides que) Te amo
L UC A S Y UG E

Frías gotas me hielan el alma,


y mi corazón desnudo desangra.
Corro y me persigue el recuerdo,
haciendo interminable este sufrimiento.
Se hace frío el verano
y solo hay lágrimas a mi despertar,
de acabó lo que creí interminable.
Y hoy busco separar la realidad de la fantasía
lo alcanzable de la utopía.

En esta oscuridad que envuelve


mi alma porque no estás.
Y la soledad de buscarte en los espejos sin hallar.
Sin borrar aquel momento cuando te marchabas,
y decías: Te amo… no olvides que Te Amo.

Muero por tenerte aquí,


porque sé que la distancia no enfrió tu corazón.
Quisiera sonreír y no consumirme a fuerza de dolor
mis ojos están cansados de tanto sufrir.
Sé que no me hará feliz,
rodar por las curvas de otros cuerpos.
Y que la ebriedad me acerca aún más a ese momento,
cuando me abrazabas y decías:
No olvides que Te amo…
Nunca olvides que Te amo…
84
Ocaso
Ocaso
L UC A S Y UG E

El hospital lleno de seres indiferentes


tratando de explicarme, a veces fríos y distantes
u otras compenetrándose conmigo,
que tu alma a este mundo ya no rendiría cuentas.

Tenebroso fue el sol cuando quemó


por fin mi última esperanza.

Y al pasar, te abracé, con un contacto


tan frío como el hielo.

Con un beso ya extinto y congelado


de un cuerpo sin sangre…

…Se había extinto mi flor…

85
Buscándote
Buscándote
L UC A S Y UG E

Hay algo en tu piel,


que invita a portarme mal,
abrazarte, y en tu pecho acurrucarme.
Necesito agradecerte por visitar mi vida,
a cada minuto yo te siento.
Necesito que vuelvas a ser esa musa desbocada,
azotando mis sentidos.

¡Mi corazón, reclama a gritos tu presencia!


¿Dónde estás?

¿Por qué entraste a mi vida? No lo sé,


Pero de un minuto a otro, te volviste indispensable,
son contigo los minutos, eternidad.
son contigo una eternidad…

¡Mi corazón, reclama agritos tu presencia!


¿Dónde estás?

“No te marchites mi flor,


apaga la sed de mis labios,
llena de risa mi alma,
que ansiosa te sigue buscando.
No te mueras amor,
hoy que al fin te encontré
no quiero perder
86 a la mujer que tanto soñé”.
Quid
Quid
L UC A S Y UG E

Cara o cruz mortal, en un nuevo despertar


de insomnios que destrozan una vez más.
Un largo caminar hacia tierras utópicas,
que abrazan cada noche y florecen con al alba.

Recuerdo los momentos,


sobre todo los buenos,
porque solo eso queda en el final,
los buenos momentos.

Si las relaciones fuesen pesadas en libras


de momentos vividos muchas caerían al vacío.

Momentos buenos y momentos malos,


dos líneas que marcan paralelas
el futuro de un amor.

Momentos colmados de peleas


y momentos colmados de pasión son lo mismo.

La pasión es intuitiva, animal.

El amor que se construye


a razón de los años vividos
y las negociaciones de poder,
en busca de la estabilidad,
perseveran y brindan solidez,
una solidez cual castillo,
87
que resguarda el amor.
Dos líneas que corren paralelas
pero no son la misma.

Y si al final de la historia
sus buenos momentos nada más coinciden
con los instantes de pasión,
entonces fue un fracaso.

Porque el resto fue pelea,fue ilusión.


Tan intangible como el sueño,
tan efímero como un bostezo.

De esos momentos estoy colmado,


pero no tengo fuerzas ni ganas para un balance,
solo circula un soplo de dulce calor en mi mente,
un instante de tierno amor resguardado en el alma.

Ese día, esa hora, esos minutos


eternizados en mi corazón
derribarán las barreras de los siglos.

De eso se trata cuando hablo de cuidar al amor.


Detalles…
…Como aquel primer beso.

88
Como la primera vez
Como la primera vez
L UC A S Y UG E

Sé que no suelo demostrar


que soy recio en aceptar
que una parte de mi extingue
que me siento incompleto cuando te vas.
De vez en cuando miro atrás
para ver como ese primer beso
fue tan mágico y hoy irrepetible
como cuando juntos decidimos
de la mano caminar.

Soportaste, una jauría de emociones


que tantas veces te hizo llorar.
Perdonaste los arrebatos de quien
no sabía lo que era amar
‘Sanaste con tus besos, mi herido corazón
amor de mi vida, desde el alma…’

“Es la primera vez,


que mi corazón restará
para sumarse a ti.
Y por siempre y para siempre
quiero cuidarte y abrazarte
como la primera vez”

89
Vértigo
Vértigo
L UC A S Y UG E

Mi peso cayó bajo la línea de lo normal,


sintiendo cada día más como un espectro.
Sueño de mañana, con perfumes que refresquen,
den forma y endulcen al vencido ánimo.
Percibo al despertar, como tus rasgos desaparecen,
marchándote junto a las neblinas de la noche.
Vampira huyes del sol.
Yo también soy un vampiro,
producto de tus colmillos en mi corazón.
Después de caer en el más profundo hueco,
me levanto y dialogo con Dios,
esperando llegar a un acuerdo.
¿Qué podría entregar para que volvieses
tan solo un día más?
Al no recibir respuestas doblo la apuesta,
deseando contemplar junto a ti solo un último amanecer,
quisiera tenerte solo una hora, luego un minuto
y al final un segundo sería suficiente.
Pero no hay respuestas.

El intrincado engranaje social jamás se detuvo,


la vida me empuja a seguir;
justo allí donde los héroes caen,
me encuentro a mí mismo, firme de pie.

Justo allí donde la gloria nos abandona,


estoy yo… Sin ti.
90
Sosiego
Sosiego
L UC A S Y UG E

Hace días que el orgullo y la ira me abandonaron;


siquiera un ahogado reguero
de pasión ni de amor me queda.
Han pasado los anteriores sentimientos,
siquiera apetezco el sufrimiento
en el corazón de los demás.
Ya no me interesa que sientan un dolor igual al mío.
Abrigo nada más que un profundo aprecio
por aquellos que no me obligaron a ocultar mi dolor,
y no regalaron forzados pésames,
ni solicitaron que no esté abatido.

Los admiro por su tan noble humanidad.


Aún más, a aquellos que me acompañaron con su silencio.

Sucedieron muchas semanas


y se espaciaron las visitas a la tumba,
pues te tengo hoy más cerca que antes.
¿Para qué buscar allí lo que llevo conmigo?
Aunque los demás divulguen el absurdo
de que te he olvidado, yo te llevo conmigo.
En cada paso, en cada sueño,
pero ya sin el sufrimiento del principio.
Me acompañas, me motivas.
Inspiras mi ser entero a seguir,
justo allí, donde la humanidad sucumbe.
91
Tan dentro de mi
Tan dentro de mi
L UC A S Y UG E

¿Porqué todo lo que hago


involucra tu vida?
¿Por qué estas siempre presente?
Si supuestamente ya te olvidé.

Y si el girar de esta vida lleva a decisiones tomar,


imagino que estás viendo,
como alcanzo el éxito sin ti.

Pero aunque sea para odiarte


y que veas que soy feliz sin ti
de una manera u otra,
tu presencia vive en mí.

“Cuanto te extraño, no sé si aún te amo.


Ni porqué tu presencia
sigue estando aquí.
Te dejo a un lado
olvidando tus labios.
Y al final vuelvo a encontrarte aquí,
tan dentro de mí”.

92
A ningún tiempo
A ningún tiempo
L UC A S Y UG E

Recorrí ya un largo trecho...


Y sin querer pasó más de un año.
El dolor es al fin tu cicatriz que persiste,
pero he cesado de sufrir.
Rabia y terror atravesé, negándome a creer tu partida
y hasta creer verte a mi lado otra vez.
Furia, ira... cólera con los médicos que no te salvaron,
saña contigo por abandonarme,
furia con la vida por ser injusta,
rencor conmigo por no cuidarte.
Culpa conmigo por no recuperarte.

Presenciaba tu figura sentada en la cama,


tu aroma, tu risa en la casa... pero no era así.
Y entonces comprendí; que si no soltaba tu mano,
jamás podría seguir.
Allí entendí: que debía dejarte ir.
Cuando al fin abrí mi puño,
y liberé tu alma hacia la eternidad,
la paz volvió a mi pecho,
y aire puro pude respirar.

No fue olvidarte. ¡Eso jamás...!


No fue locura, pues nunca estuve tan convencido
de lo que debería hacer... dejarte partir.
Y en aquel momento tras la desolación de viejas fotos,
ropa tuya y recuerdos a montones,
di las gracias por no haber quemado
93
todas esas hermosas memorias.
¿Habría valido la pena vivir todo aquello,
si al final buscara sepultarlo en el olvido?
¿Habría valido la pena, tanta felicidad
y a la vez tanto dolor, si me encerrara a lamentarte
o quisiera borrarte de mi mente?

Valió la pena. Y te recuerdo como ayer...


tan joven, tan fuerte, enamorada... perfecta.
Y te siento como ayer, rozagante, enérgica.
Eres mi ángel, que guía y observa en momentos difíciles.
Ya no me duele... solo te extraño,
pero sé que me cuidas por las noches.
Solo te extraño, y sé que puedo salir a la vida
para encontrarme conmigo mismo.
Recién allí entendí el porqué de nuestros sufrimientos.
Cuando vi a mi amigo llorar por una pérdida,
igual que yo hace tiempo.
Y pude comprenderlo.

Pude ayudarlo.

94
Desde el cielo escucharás
Desde el cielo escucharás
L UC A S Y UG E

De entre las asperezas del tiempo


surge un río que inunda esos bellos ojos,
quienes tras ver la muerte solo desean
despertar de su sueño.
No hay indicios de resurrección
por eso te estoy llamando.
El correr del tiempo ha escrito en mi corazón
las razones por las cuales hay que seguir viviendo.

Las llamas que lamieron tus huesos


este río extinguirá, preparando en tu corazón,
ese sitio donde siempre vivirán.

Y sé que mirar al futuro es triste,


cuando nada llena su lugar.
Pero el impacto de un fuego asesino,
eternizó el amor que hoy sientes.
Deja al tiempo sanar las heridas,
la vida te impulsa una vez más
y cuando las lágrimas rocen tu mejilla,
desde el cielo escucharás.

“Olvida ya tus heridas


que el tiempo las sanará,
levanta esa mirada caída,
que la vida deberá continuar”
95
Epílogo
Epílogo
L UC A S Y UG E

Los días sin ella transcurren calmos.


Con una cálida marea de recuerdos
ocupando su lugar en mi alma.
Ya no está el vacío, ya no me sabe a soledad.
Los días sin ella apaciguan el tiempo
refrescando el anhelo de continuar creciendo,
animándome cada día a vivir incansable,
porque la vida es breve e impera aprovechar
cada segundo de su belleza.
En los días sin ella disfruto releyendo
esos viejos poemas, esas viejas cartas.
O cuando muestro a alguien nuestras fotos.
Y río, si río, porque insisto que en mi felicidad
también está la suya.
Los días sin ella fueron difíciles,
pero aprendí a soltarla y dejarla ir.
Por supuesto no sólo sigo la rutina de cada día,
sino que seguí creciendo y ya no soy el mismo,
pues quiero que vea en el gran hombre que me convertí.
En estos días sólo deseo que le llegue un pensamiento.
Hubiese querido decirle, estas últimas palabras:

Adiós…
…Que descanses mi tenaz doncella,
extrañaré la bravía garra de tu carácter
y ese exquisito modo de amar.
96

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