Localización de infraestructura energética 1

Se exponen las exigencias vigentes para la localización de infraestructura

energética, dando cuenta del procedimiento que se aplica para disponer su
ubicación en cada uno de los territorios.

El suelo se califica en dos categorías principales, urbanas y rurales, sobre las que se
sobrepone otras zonas de protección del suelo. Luego sobre cada uno de estos
territorios los instrumentos de planificación: planes reguladores e intercomunales,
definen sus usos de suelo y destino, intensidad de ocupación y demás variables que
permiten su utilización.

Las centrales termoeléctricas son calificadas de manera genérica como

“infraestructura” y bajo esta categoría están siempre permitidas, si específicamente
no se han sido prohibidas por el instrumento de regulación. Además se podrán
establecer allí requerimientos específicos, entre los puede encontrarse la calificación
ambiental, que otorga la Secretaria Regional Ministerial de Salud (SEREMI de Salud)
respectiva y que define categorías (Peligroso, insalubre o contaminante, molesto e
inofensivo según lo define la Ordenanza General de Urbanismo y Construcción en su
articulo 4.14.2.

I. Gestión del suelo

El territorio nacional se ordena y califica en urbano y rural. Se entiende por área

urbana al “área territorial destinada a acoger usos urbanos comprendida dentro de
los límites urbanos establecidos por los instrumentos de planificación territorial” 2;
por defecto, el área rural es definida como “área territorial establecida en los
instrumentos de planificación territorial que está fuera de los límites urbanos o de
extensión urbana”3.

En el caso de las áreas urbanas, el instrumento de planificación territorial

correspondiente es el Plan Regulador Comunal (PRC), que define las zonas
existentes en dicho territorio urbano y los usos posibles en cada uno de ellos. Por su
parte, las zonas rurales se regulan mediante instrumentos como el Plan Regional de
Desarrollo Urbano, que orienta el desarrollo de los centros urbanos y por defecto del
área rural y el Plan Regulador Intercomunal (PRI), en el que se contempla la
regulación del desarrollo físico de las áreas urbanas y rurales, de las comunas que
integran una unidad urbana regulada.

1
Verónica de la Paz Mellado, Rodrigo Bermúdez Área Políticas Sociales. Asesoría Técnica Parlamentaria.
Anexo 3907. vdelapaz@bcn.cl. Octubre de 2010. Actualizado por V. de la Paz, marzo 2011.
2
Ordenanza General de Urbanismo y Construcción Articulo 1.1.2.
3
Ídem
 2

Además existen otras categorías de áreas con protecciones especiales, dadas por
sus características específicas como los parques nacionales, monumentos
nacionales, reservas nacionales, santuarios de la naturaleza, áreas de protección
turística, entre otras4.

En general, estas áreas forman lo que se denomina el Sistema Nacional de Áreas

Silvestres Protegidas que, conforme con el artículo 34 de la Ley N° 19.300 de bases
del Medio Ambiente, su administración corresponde al Estado, a través del Servicio
de Biodiversidad y Áreas Protegidas. El objeto de este sistema es, conforme con
este mismo artículo, asegurar la diversidad biológica, tutelar la preservación de la
naturaleza y conservar el patrimonio ambiental.

Con el fin de asegurar esto, conforme con el artículo 10 letra p) de este mismo
cuerpo legal, en aquellos casos que dentro de estas áreas protegidas se permite el
desarrollo de alguna obra, programa o actividad por la legislación, ellas deben
someterse previamente al Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental.

Además, conforme con el artículo 11 letra d) de esta misma ley, deben realizar un
estudio de impacto ambiental aquellos proyectos o actividades cuya localización sea
dentro o próxima a áreas protegidas, sitios prioritarios para la conservación,
humedales protegidos y glaciares, susceptibles de ser afectados.

II. Usos de suelo

Los usos de suelo se agrupan en seis tipos: residencial, equipamiento, actividades

productivas, infraestructura, espacio público y área verde5.

Dentro de las “actividades productivas” se encuentra todo tipo de industrias e

instalaciones de impacto similar al industrial como depósitos, talleres y bodegas;
para las cuales el PRC respectivo podrá establecer limitaciones adicionales al
cumplimiento de las normas ambientales6.

En el caso del uso “infraestructuras” se refiere a las edificaciones o instalaciones y a

las redes destinadas a transporte, infraestructura sanitaria e infraestructura
energética, entre las que se encuentran centrales de generación y/o distribución de
energía, gas, telecomunicaciones y gaseoductos entre otros no especificados. En
este caso, se entenderán siempre admitidos los trazados de infraestructura que se
requiera, debiendo someterse a las exigencias específicas de la materia.

Para las instalaciones o edificaciones que se requieran para este uso –como las
centrales eléctricas- la planificación correspondiente podrá establecer condiciones o
requisitos específicos, adicionales al cumplimiento de las normas ambientales.

4
Listado de las figuras legales de protección del territorio al año 2005. Disponible en
http://www.parquesparachile.cl/index.php?Itemid=106&id=78&option=com_content&task=view (Marzo,
2011)
5
Ordenanza General de Urbanismo y Construcción Articulo 2.1.24
6
Ordenanza General de Urbanismo y Construcción Articulo 2.1.28
 3

Además, tanto en caso de tratarse de proyectos u obras sometidos al sistema de

evaluación de impacto ambiental como aquellos que no, deberán someterse al
proceso de calificación de la SEREMI de Salud correspondiente para su calificación,
en alguna de las siguientes categorías:7

 Peligroso: el que por el alto riesgo potencial permanente y por la índole

eminentemente peligrosa, explosiva o nociva de sus procesos, materias
primas, productos intermedios o finales o acopio de los mismos, pueden
llegar a causar daño de carácter catastrófico para la salud o la propiedad, en
un radio que excede los límites del propio predio.

 Insalubre o contaminante: el que por destinación o por las operaciones o

procesos que en ellos se practican o por los elementos que se acopian, dan
lugar a consecuencias tales como vertimientos, desprendimientos,
emanaciones, trepidaciones, ruidos, que puedan llegar a alterar el equilibrio
del medio ambiente por el uso desmedido de la naturaleza o por la
incorporación a la biosfera de sustancias extrañas, que perjudican directa o
indirectamente la salud humana y ocasionen daños a los recursos agrícolas,
forestales, pecuarios, piscícolas, u otros.

 Molesto: aquel cuyo proceso de tratamientos de insumos, fabricación o

almacenamiento de materias primas o productos finales, pueden
ocasionalmente causar daños a la salud o la propiedad, y que normalmente
quedan circunscritos al predio de la propia instalación, o bien, aquellos que
puedan atraer insectos o roedores, producir ruidos o vibraciones, u otras
consecuencias, causando con ello molestias que se prolonguen en cualquier
período del día o de la noche.

 Inofensivo: aquel que no produce daños ni molestias a la comunidad,

personas o entorno, controlando y neutralizando los efectos del proceso
productivo o de acopio, siempre dentro del propio predio e instalaciones,
resultando éste inocuo.

Por otra parte, cuando el emplazamiento es en el área rural, es decir, fuera de los
límites urbanos, se establece que en ellas está prohibido abrir calles, subdividir para
formar poblaciones, levantar construcciones excepto aquellas necesarias para la
explotación agrícola y para las viviendas del propietario, sus trabajadores o de
conjunto habitacionales sociales o de viviendas de hasta 1.000 Unidades de
Fomento.

Cuando es necesario subdividir o urbanizar en el área rural, para complementar

alguna actividad industrial, dotar de equipamiento, balneario o campamento
turístico, entre otros, se debe solicitar la autorización de la Secretaria regional
Ministerial de Agricultura y el informe favorable de Secretaria regional Ministerial de
Vivienda y Urbanismo. Este trámite es conocido como cambio de uso de suelo y se

7
Ordenanza General de Urbanismo y Construcción Articulo 4.14.2
 4

encuentra reglamentado según el artículo 55° de la Ley General de Urbanismo y

Construcción.

En el caso especifico de la infraestructura energética, por el solo hecho de la

instalación no se requiere cambio de uso de suelo. Este solo se realiza para poder
disponer del resto de las instalaciones complementarias como son las oficinas, salas
de personal, bodegas etc.