La retención de estudiantes se ha convertido en uno de los temas de mayor
interés investigativo en el ámbito de la formación para el trabajo, debido a las
altas tasas de deserción que se están presentando desde hace varios años. Muchas investigaciones dan cuenta del considerable número de estudiantes que no logran terminar con éxito sus estudios; por ello, estados unidos y algunos países de Europa y América Latina han comenzado a analizar el tema con cierto nivel de profundidad. En Colombia la retención de aprendices ha cobrado cada vez más importancia ya que, a pesar de que en los últimos años se ha registrado un aumento considerable en el número de aprendices que ingresan a la formación para el trabajo, gracias a la política de cobertura con equidad, para las instituciones retener a sus estudiantes se ha convertido en todo un desafío; en especial, porque dado lo novedoso del tema es poca la información que se encuentra en la literatura nacional. Además, las estrategias de retención que utilizan algunas instituciones educativas y que eventualmente podrían servirle a otras son prácticamente desconocidas, lo que impide un avance significativo en el tema. Todo esto, ha llevado a que la retención de aprendices sea incluida como una de las problemáticas por tratar dentro de la agenda pública de la formación para el trabajo.
Creación de un comité de retención en la institución educativa.
Identificación de estudiantes en riesgo de deserción, con base en sus características previas. Identificación de problemas al interior del ambiente de formación, a saber: repitencia de curso, escasa atención, malas calificaciones, baja participación en formación. En términos generales, Seidman (2003), propone identificar a los estudiantes con alto riesgo de deserción desde el momento en que son admitidos, desarrollar diversas estrategias en los cursos y programas y ayudar al estudiante en su proceso de adaptación a la institución. en el siguiente diagrama se presenta su propuesta para la elaboración de una política de retención estudiantil. Vásquez y colaboradores (2008) mencionan igualmente que los estudiantes deben superar una serie de barreras económicas, académicas, raciales, de género, de entorno familiar, entre otras, que pueden impedir su graduación. para resol-ver estos problemas, Pascarella (1986) propone cuatro acciones: Los esfuerzos de retención deben ser sistemáticos y tienen que ser desarrollados por todos los miembros de la comunidad educativa. Caracterizar a los estudiantes a partir de un estudio institucional. Determinar qué factores instituciones son susceptibles de intervenir, a fin de mejorar las tasas de retención. Las estrategias deben ser implementadas, monitoreadas y evaluadas con el fin de conocer sus efectos, directos e indirectos, y poder aplicar correctivos en caso de ser necesario Así mismo, Pascarella destaca la importancia de reconocer a tres actores funda- mentales en el desarrollo de cualquier acción de retención: a) Los estudiantes, quienes deben tener disposición para desarrollar habilidades académicas y no académicas en su proceso de adaptación a la institución; b) Los profesores y el personal administrativo, quienes deben facilitar al estudiante las condiciones necesarias para su adaptación; y c) las autoridades educativas, las cuales deben involucrarse directamente para brindar apoyo a los estudiantes en alto riesgo de deserción.