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TRABAJO PRACTICO

Luis Francis Casas Roque


CASO 1
¿CÓMO DEBE RESOLVERSE EL CASO PLANTEADO?
Los recursos interpuestos por el Ministerio Fiscal permitirán modificar o revocar la
resolución aun a favor del imputado. Cuando el fiscal apela, la Alzada se ve facultada a
resolver desfavorablemente para el imputado. Esta facultad a la que queda habilitada, no
está expresamente prevista en el art. 445, ·sino que surge implícitamente; esto es, cuando
dicho artículo prescribe "aun a favor", implica indirectamente, "también en contra “es
decir, cuando el recurrente es el Ministerio Público, puede confirmar la sentencia,
agravarla si así dicho órgano público se lo solicitase, o revocarla (dejando sin efecto la
condena) en beneficio del imputado, aun cuando el fiscal no lo pidiese. En este último
sentido, se ha dicho que "pese a que el acusado consintió el fallo, es viable la modificación
si lo beneficia.
En los supuestos en que medie recurso fiscal requiriendo un pronunciamiento más
gravoso que el obtenido del a quo, el tribunal ad que1n podrá modificar lo resuelto por
aquél en perjuicio del imputado sin resentir por ello el principio en análisis. De hecho, en
la hipótesis de existir recurso fiscal, nada obsta a que la Alzada modifique o revoque la
resolución a favor del imputado, incluso si se tratase de puntos no tratados estrictamente
en los agravios. He aquí una curiosa e inteligente intención del legislador de, una vez más,
tratar de equilibrar las desigualdades entre acusado/acusador: véase que si el acusado es
el único apelante (por ejemplo, de una condena), al resolver la Alzada se ve limitada ya
que, o resuelve revocando la condena y dándole la razón al recurrente, o la confirma sin
causarle mayores agravios de los que obtuvo en primera instancia. En cambio, en caso de
ser el fiscal quien apela la sentencia de primera instancia, la Alzada ya no se verá tan
limitada en sus facultades resolutivas; de hecho, no sólo podrá confirmar la sentencia
apelada, sino que podrá agravarla en virtud del pedido del fiscal, y también podrá (y aquí
es donde radica la fundamental diferencia), en caso de no estar de acuerdo con él,
revocarla y modificarla en sentido favorable al encausado (en el ejemplo, dejando sin
efecto la condena). Esto es, cuando una sentencia condenatoria es apelada sólo por la
defensa, la Alzada puede únicamente confirmar o modificar la sentencia en su beneficio;
pero cuando el recurrente es el Ministerio Público, puede confirmar la sentencia,
agravarla si así dicho órgano público se lo solicitase, o revocarla (dejando sin efecto la
condena) en beneficio del imputado, aun cuando el fiscal no lo pidiese. En este último
sentido, se ha dicho que "pese a que el acusado consintió el fallo, es viable la modificación
si lo beneficia. Ello en razón de que, habilitado el tribunal a decidir en el caso, su potestad
jurisdiccional no reconoce más límites que el fijado por el principio de la prohibición de
la reformatio in pejus" (precedente máximo tribunal: el fallo "Arce, Jorge Daniel")
 Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos afirmó que "la ley debe
conceder idénticas garantías a todos los que se encuentren en la misma situación
ante los tribunales en materia criminal; los derechos del Procurador General no
son iguales que los del acusado ... ".
CASO 2
¿CONSIDERA QUE LA CAMARA DE CASACION RESULTA VALIDA?
Material para el caso:
 Texto de cafferata nores
 CPP 421 / 435
 Fallo CSJN “olmos”
No es válida porque ello permite afirmar que la falta de interposición de ese recurso por parte del
Ministerio Público contra la primera sentencia, no puede aquí asimilarse al consentimiento del
fallo. En tal sentido, cabe destacar que si bien la pena aplicada fue inferior a la que se había
requerido en el alegato final, la impugnación no era posible por imperio del citado artículo 417
declare la improcedencia del agravio referido a la prohibición de agravar las penas en el juicio de
reenvío ante la falta de recurso acusatorio contra la primera sentencia anulada y, en consecuencia,
confirme lo decidido por el a quo en cuanto pudo ser materia de apelación federal. Fallo olmos
sección IV pagina 10

Por eso mediante el art. 421 2do párrafo que menciona “Los recursos deberán ser interpuestos,
bajo sanción de inadmisibilidad, en las condiciones de tiempo y forma determinadas, con
específica indicación de los motivos en que se sustenten y sus fundamentos.”

Por virtud de este principio, si la calificación estimada correcta por el tribunal de alzada resulta
más grave, éste deberá, en ausencia de recurso acusatorio, limitarse a declarar el encuadramiento
que considera adecuado y mantener la pena aplicada en la sentencia impugnada, disponiendo el
rechazo del recurso. Texto cafferata nores pagina 803

Si el tribunal de Alzada procediera a aplicar penas omitidas por el a quo (o agravara las
efectivamente impuestas sin haberlo así solicitado el fiscal), se sustituiría ilegalmente la voluntad
del recurrente, resolviendo puntos sobre los que no tuvo oportunidad de defenderse, lo que
cercenaría indudablemente el derecho a la defensa

Este representa la garantía del imputado de no ser juzgado dos veces por un mismo hecho. Podría
entenderse que ello sucede cuando un imputado que ya ha obtenido su sentencia absolutoria, se
ve sometido a la revisión de otro tribunal que lo juzgará nuevamente. · Ahora sí, luego de haber
reseñado (lo más brevemente posible) aspectos de los dos pilares fundamentales con los que el
instituto que analizo se relaciona, me veo en condiciones de profundizar en los diversos
presupuestos que se presentan frente a esta garantía de la rejor1n.atio in pejus.

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