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8. Los jugadores LA “EDAD DORADA” DEL FOTHOL SEGUN LOS JUGADORES DELOS AROS VEINTE Y TREINTA Enla década de 1920, la prictica del fitbol ya se habia gens ralizado entre los varones porterios. Desde ese punto de vista todos fas. ron jugadores, por lo menos en su infancia y primera juventud, aun {que pocos llegaron a jugar en el fitbol oficial!" En e808 afios ya se habla naturalizado el relato de ese primera expe. riencia, y en las narraciones aparecian reiteradamente frases del tipo “como todos dicen” o “naturalmente yo también me inieié..", Ast der cribfan sus primeras vivencias los j6venes que por entonces tenfan er- tte 20 y 30 aos y ya habian devenido en especialistas ‘No todas ls experiencias fueron iguales, pero todas tuvieron un de ‘nominador comin: la vivencia del fitbol como ejercicio colectivo con ‘escenarios similares —Ia calle, el terreno baldfo—y con un mismo instr» ‘mento ~Ia pelota de confeccin casera-. Esas vivencias se sumaron a la ristalizacién de la tradiciGn masculina del fitbol, a su vez asociada a la aventura y las demostraciones de guapeza, viveza, agilidad y destreza, Sobre nifios y j6venes pesaban mandatos paternos que no solfan in lulr al fatbol. La mayoria de los padres inmigrantes consideraba que el deporte era tiempo perdido ¢ intentaba que sus hijos consiguieran un buen trabajo 0 tomaran la ruta del estudio. Ademas, muchas veces Jos futbolistas en ciernes eludfan la escuela para quedarse jugando -en otras palabra, se hacian “larata’, hecho que les acarreaba fuertes re ‘riminaciones paternas. En ese hotizonte, no haba lugar para un hijo fatbolista, La prictica del fitbol se transformé poco a poco en elemento del ‘apfendizaje social y en componente significativo de Ia educacién senti- ‘mental masculina, que ordeaaba apreciar el talento y Ia guapeza. Luis

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