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Propuesta de La Ingenieria Nacional para Mejorar La Contratacion en Colombia PDF
Propuesta de La Ingenieria Nacional para Mejorar La Contratacion en Colombia PDF
CARTA PRESIDENTE.......................................................................................................................... 5
PRESENTACIÓN .................................................................................................................................. 8
INTRODUCCIÓN ................................................................................................................................... 9
1.REGISTRO ÚNICO DE PROPONENTES. .................................................................................. 15
1.1.CAPACIDAD RESIDUAL DE CONTRATACIÓN ..................................................................... 16
1.2.ANÁLISIS DE LOS FACTORES PARA DESCRIBIR EL PERFIL DE LOS
PROPONENTES PARA LA CONTRATACIÓN. ............................................................................. 20
1.2.2. CAPACIDAD FINANCIERA. .................................................................................................... 21
1.2.3. CAPACIDAD TÉCNICA. ......................................................................................................... 21
2.INGENIERÍA EXTRANJERA .......................................................................................................... 23
3.MADURACIÓN DE PROYECTOS. ............................................................................................... 24
3.1.ETAPA DE PLANEACIÓN. ......................................................................................................... 24
3.1.1. BANCO DE PROYECTOS. ..................................................................................................... 26
3.1.2. FORTALECER LAS OFICINAS DE PLANEACIÓN A TODOS LOS NIVELES DEL
ESTADO. .............................................................................................................................................. 26
3.1.3. ELEVAR EL NIVEL TÉCNICO DE LAS ENTIDADES CONTRATANTES. ...................... 27
3.1.4. TARIFAS. ................................................................................................................................... 27
3.1.5. ANTICIPOS Y FORMA DE PAGO. ...................................................................................... 28
3.1.6. MANEJO DE LOS ANTICIPOS. ............................................................................................. 28
3.1.7. COSTOS INDIRECTOS ........................................................................................................... 29
3.1.8. ESTIMACIÓN ADECUADA DE PLAZOS Y COSTOS REALES. ...................................... 30
3.2.ESTUDIOS FASE III. ................................................................................................................. 31
4.PLIEGO ÚNICO DE CONDICIONES............................................................................................ 33
4.1.EXPERIENCIA ESPECÍFICA. .................................................................................................... 33
4.2.PROGRAMACIÓN Y EJECUCIÓN. ........................................................................................... 35
4.3.DISCAPACITADOS – PYMES Y MIPYMES. ........................................................................... 35
4.4.MECANISMOS ALTERNATIVOS DE RESOLUCIÓN DE CONFLICTOS. .......................... 36
4.5.PROPUESTA PARA MEJORAR LAS CONDICIONES DE EQUIDAD EN LA
ESTRUCTURACIÓN DEL PLIEGO Y EN LA SELECCIÓN DEL PROPONENTE. .................. 36
4.6.CONSIDERACIONES FINALES ................................................................................................ 37
BIBLIOGRAFÍA .................................................................................................................................... 39
DOCUMENTOS DE REFERENCIA ................................................................................................. 50
En consecuencia, durante los últimos 4 años, hemos realizado un arduo trabajo para discutir
abiertamente el asunto mediante encuentros técnicos y académicos que incasablemente se
han adelantado con el único fin de contribuir en la construcción de país.
Los análisis hechos alrededor de la contratación estatal en los diferentes escenarios y que
han enriquecido permanentemente el conocimiento de la situación, permitiendo generar
propuestas al Gobierno Nacional, son fruto de la acción conjunta de todos nuestros
estamentos técnicos, de las 24 Sociedades Regionales, de las 31 Sociedades y
Asociaciones Correspondientes, de las 15 Comisiones Técnicas Permanentes y de las 17
Universidades con las que tenemos convenio, es así como todos los ingenieros a lo largo y
ancho del país esperan de la Sociedad Colombiana de Ingenieros el acompañamiento y
liderazgo, tal como hemos venido ejerciendo.
Así mismo, muchos de los puntos planteados, a pesar del esfuerzo liderado por el doctor
Juan Manuel Santos Calderón, Presidente de la República, siguen preocupando a la
ingeniería, puesto que aún, no se han convertido en una realidad.
Reconocemos el gran esfuerzo que el Gobierno Nacional ha hecho para robustecer la lucha
contra la corrupción y elevar la competitividad. Sin embargo, para la ingeniería colombiana
existen aspectos de estas políticas, como el decreto 734 del 13 de abril de 2012, que se
deben cambiar con urgencia, debido al impacto negativo que ejercen sobre la “masa crítica”
de profesionales que ejecutan los proyectos que Colombia requiere.
En ese sentido, hoy seguimos luchando por solucionar estas problemáticas y haciendo
énfasis en los aspectos críticos para la contratación que aún no han sido solucionados, por
consiguiente, en los últimos días hemos venido trabajando con la Agencia Nacional de
Contratación – Colombia Compra Eficiente –, con el fin de presentar la visión que tiene la
ingeniería Colombia respecto a los procesos de contratación en el país.
Así mismo, lo analizado apunta a que su contenido no detalla las soluciones determinantes
para los procesos de contratación, no recoge los aspectos claves que hoy día afectan a la
ingeniería colombiana, y simplemente constituye un marco legal general que no aporta valor
agregado respecto a todo lo que ya se ha legislado en la materia, siendo lo más preocupante
que no trata temas fundamentales como: pliegos de condiciones, registro único de
proponentes, costos indirectos, entre otros, que son los elementos que adolecen de
Esto simplemente quiere decir que, el documento generado por la Agencia no constituye una
concertación, y su contenido obedece al buen saber y entender de los funcionarios y
consultores que han participado en este ejercicio, lo cual, a todas luces, es preocupante para
la ingeniería y para la Contratación Pública en Colombia.
Así las cosas, la Sociedad Colombiana de Ingenieros como vocera del sector, considera que
la actual construcción del decreto necesita un reforzamiento por parte de nuestro gremio,
ante lo cual, estamos entregando al Gobierno Nacional, a través de la directora de la
Agencia Nacional de Contratación, Doctora María Margarita Zuleta, un documento técnico en
el que incluimos el diagnóstico del actual escenario de la contratación, junto con una serie de
propuestas enfocadas en solucionar los aspectos que realmente están golpeando la
contratación y el ejercicio profesional de miles de ingenieras e ingenieros del país.
Colombia necesita urgentemente de una política nacional que oriente los esfuerzos de la
contratación pública, pues este ánimo de regular lo que ya está regulado no genera ningún
tipo de beneficio para el país.
Por siguiente, analizaron la contratación pública adelantada por los Gobiernos Nacional,
Departamental, Distrital y Municipal, y presenta este documento como una propuesta inicial,
con el fin de fijar un punto de partida sobre el cual todos podamos opinar y contribuir. Este
documento incluye una serie de planteamientos, para lograr la implementación de una
verdadera política de contratación pública en Colombia, ello, con el fin de eliminar la
discrecionalidad en los planteamientos de los requisitos de contratación, buscando la
estandarización de los pliegos de condiciones dentro de características tipo, que permita la
participación masiva de la ingeniería nacional.
Este es un estudio que recopila las sugerencias y el sentir de la ingeniería nacional, puesto
que el tema de la contratación se ha discutido en diferentes escenarios académicos y
técnicos. Además, se ha llevado a cabo una estricta consolidación de documentos
construidos en otros países, que en la actualidad aplican una contratación eficiente, con el fin
de retroalimentar algunos aspectos en los que la Agencia Nacional de Contratación debe
incursionar para lograr en muy corto plazo el establecimiento de una política de contratación
para Colombia.
Las propuestas que se sustentan aquí, tal como se mencionó previamente son un primer
paso y deben considerarse únicamente con carácter orientador, con el objetivo de iniciar una
discusión y poder llegar a una concertación, por el bienestar de los ingenieros colombianos y
la construcción de un mejor país.
Desde 1.993, cuando se promulgó la Ley 80, se definieron los principios básicos para la
contratación, es decir, filosóficamente tenemos una Ley de “principios” pero en la práctica,
tanto ella como los Decretos Reglamentarios y las nuevas Leyes no han satisfecho
adecuadamente las necesidades más sentidas, especialmente para el sector de la ingeniería
y la construcción. En otras palabras, de nada nos sirve tener una Ley de principios, cuando
está demostrado que para su aplicación se necesita reglamentar inteligentemente aspectos
fundamentales como elementos para las buenas prácticas de contratación, los pliegos de
condiciones y el registro de proponentes, entre otros.
También consideramos que sumado a todo lo anterior, es urgente que tanto los funcionarios
públicos encargados de la contratación, como los proponentes, cumplan cabalmente con lo
consagrado en los códigos de ética profesional, con el fin de combatir la corrupción que
genera la manipulación indebida en los procesos contractuales, para empezar desde allí una
gran transformación en beneficio, en este caso, de la gran mayoría de la ingeniería
colombiana.
Una vez más, el Gobierno Nacional nos plantea una reforma a las normas de contratación a
través de la Agencia Nacional de Contratación, con el objetivo de derogar lo consagrado en
el decreto 734 del 13 de abril de 2012, lo cual teóricamente es muy loable pero que
analizado a profundidad no soluciona los problemas de fondo de la contratación y sobre todo
no mejora el sentir de la ingeniería, en particular en los departamentos y municipios de la
patria, que ven como cada día se adjudican contratos con pliegos de condiciones que
impiden la participación equitativa, con exigencias amañadas y requisitos direccionados que
generan inequidad, dejando a una gran porción de proponentes sin oportunidades reales,
“Son fines esenciales del Estado: servir a la comunidad, promover la prosperidad general y
garantizar la efectividad de los principios, derechos y deberes consagrados en la
Constitución; facilitar la participación de todos en las decisiones que los afectan y en la vida
económica, política, administrativa y cultural de la Nación; defender la independencia
nacional, mantener la integridad territorial y asegurar la convivencia pacifica y la vigencia de
un orden justo”.
En la práctica, es necesario reconocer que faltan tareas para garantizar que los colombianos
cuenten con más salud, agua potable, saneamiento, vivienda, modos de transporte, fuentes
de trabajo, infraestructura y en un concepto más amplio “prosperidad general” para el
desarrollo de todas las actividades humanas que se adelantan en el territorio nacional.
Colombia requiere del concurso de toda la ingeniería para desarrollar y atender la actual
situación de la infraestructura y de esta manera enfrentar los grandes retos que implican los
Tratados de Libre Comercio que se han firmado y los venideros.
La infraestructura ha sido y seguirá siendo el pilar del desarrollo económico y social del país
y ésta no se concibe sin el concurso de la ingeniería; es decir, que el Estado a través del
Gobierno es responsable de la “prosperidad general” y debe propender por fortalecer la
Así las cosas, esta benemérita institución comprometida con Colombia, ha emprendido una
gran cruzada para consolidar los procesos de contratación y ser artífice del cambio necesario
para asegurar el futuro de las próximas generaciones de colombianos, en este sentido, como
breve introducción al presente documento se plantean algunas “Reflexiones de la Ingeniería
para la Competitividad”, pues le corresponde a la ingeniería tomar la iniciativa y promover
acciones para que se geste un cambio profundo en la concepción gubernamental para
realizar las compras con el Estado.
5. Análisis permanente del perfil competitivo del sector. Colombia debe iniciar un proceso
de autoanálisis estricto y continuo, consolidando una serie de indicadores y metas que
propendan por el mejoramiento de la situación actual de la ingeniería, llevándola a
estándares internacionales, haciendo que se aumente progresivamente la competitividad
del país. En este sentido es posible monitorear aspectos como: costo por kilometro de
transporte, rendimientos técnicos de actividades estándares dentro de la ejecución de
proyectos (tiempos y costos), duración de proyectos de similares características,
descripción cualitativa y cuantitativa de tecnologías y maquinaria utilizada en el
desarrollo de actividades estándar, entre otros indicadores.
Este es el primer paso que se debe cumplir para contratar con el Estado, puesto que allí, se
realiza la verificación de las condiciones de los proponentes y su acreditación para ejecutar
los proyectos del país, por ello, consideramos que este tema necesita de un gran cambio de
fondo y no de forma como se ha realizado en los últimos años, para que realmente se
constate la información relacionada con la experiencia, capacidad jurídica, financiera y de
organización. Además, se logre efectuar una verdadera clasificación, que de confianza a las
oficinas de contratación del Estado, usuarios primarios de esta información
Producto del conocimiento histórico que la ingeniería colombiana posee respecto a las
metodologías empleadas para determinar las capacidades de contratación de las personas
naturales y jurídicas, y con el fin de eliminar todo procedimiento de calificación basado en la
valoración y cálculo de una Capacidad Máxima de Contratación centrado en un único criterio,
el del Capital de Trabajo (Reglamentación actual) o definitivamente como resultado de una
sumatoria de factores que individualmente tratados pueden orientar pero que sumados no
ofrecen un indicativo confiable (Reglamentación anterior).
Es necesario decir que este es un tema sobre el cual se requiere urgentemente una
concertación, porque de su implementación depende que los procesos de selección se
adelanten con transparencia, equidad y objetividad.
El Registro Único de Proponentes, debe cumplir con los siguientes principios fundamentales:
c) Aportar información confiable y valiosa para las entidades contratantes, con el fin de
crear credibilidad dentro de los procesos de contratación y de esta forma no vuelva a
solicitar la misma información. Esto evitará que los funcionarios establezcan
requisitos desorbitados para cubrir ampliamente sus decisiones y no incurrir en
errores.
Véase, que el parágrafo primero del Artículo 6 de la Ley 1150 de 2007 modificado por el
Artículo 221 del Decreto Ley 019 de 2012, establece lo siguiente:
A su turno, el Decreto Reglamentario 0734 de 2012 modificado por el Decreto 1397 de 2012,
por medio del cual se modifica el numeral 1 del artículo 6.1.1.2 del Decreto 0734 de 2012,
señala:
A. Los contratos de obra a los que se refiere el decreto son aquellos definidos en el Artículo
32 de la Ley 80 de 1993, es decir, no se tendrán en cuenta, cualquier contrato de obra,
sino solo aquellos que el contratista haya suscrito con entidades estatales según como
la norma que se transcribe:
“(…) Son contratos de obra los que celebren las entidades estatales para la
construcción, mantenimiento, instalación y, en general, para la realización de
cualquier otro trabajo material sobre bienes inmuebles, cualquiera que sea la
modalidad de ejecución y pago. (…)”
Por tanto, si un contratista ha suscrito otros contratos de obra que no se ciñen a esta
definición, no deben tenerse en cuenta para el cálculo de la Capacidad Residual.
B. Según el Decreto 1397 de 2012, que modificó el Decreto 0734 de 2012, para determinar
la Capacidad Residual debe tenerse en cuenta, no solo los contratos de obra que se
encuentren en la etapa de ejecución, sino que además, debe tenerse en cuenta aquellos
contratos de obra que estén vigentes y han sido adjudicados. A esta conclusión se
llega, toda vez que no son arbitrarias las frases: “los saldos de los contratos de obra que
a la fecha de presentación de la propuesta (…) haya suscrito y se encuentren vigentes, y
el valor de aquellos que le hayan sido adjudicados. (…). Sin embargo, nótese que la
Ley 1150 de 2007, ya mencionada, solo habla de los contratos en ejecución.
Al respecto, se deben hacer varias aclaraciones referentes a los varios momentos o etapas
en los procesos contractuales que tienen unas específicas características y en la que se
realizan unos actos específicos que, el Decreto en comento parece confundir. Se hablará
entonces: a) De la conceptualización y diferencias del término de ejecución y el término de
vigencia; y, b) De la conceptualización y diferencias de un Acto de Adjudicación, y el
Contrato Estatal.
Por ello, puede suceder que un contrato esté en ejecución y se encuentre vigente, y
por otro lado, que un contrato ya no se encuentre en ejecución y sin embargo
permanezca vigente.
En términos prácticos, puede ocurrir que un contratista haya cumplido todas sus
obligaciones dentro del plazo de ejecución previsto en el contrato de obra, siendo
cumplidor de sus obligaciones, sin embargo, los saldos que del mismo resulten van a
ser tenidos en cuenta para determinar la capacidad residual de contratación si aun no
se ha liquidado, toda vez que el mismo se encuentra vigente. Hecho, que hace más
lejana la posibilidad para que un contratista, aun siendo un excelente ejecutor de
contratos de obras, le sea adjudicado un contrato.
Así las cosas, puede ocurrir que haya sido adjudicado un contrato, y el mismo, no sea
suscrito por las partes para su ejecución, por ejemplo, cuando sobreviene una
inhabilidad entre el contratista y la entidad contratante. Así como también puede que
exista un contrato, y sin embargo, no se hayan cumplido los requisitos para su
ejecución, como lo enseña la norma con rango de ley, cuando exige que para
establecer la capacidad residual del proponente o K de contratación, se deberán
considerar todos los contratos que tenga en ejecución el proponente al momento de
presentar la oferta.
1
Ley 80 de 1993 Artículo 32.
2
Corte Constitucional, C-227 de 2009, C-805 de 2001, Auto 049 de 2008, Auto 169 de 2000.
3
Constitución Política Colombiana, Artículo 189 numeral 11.
4
Sala Plena de lo Contencioso Administrativo del Consejo de Estado en sentencia del ocho (8) de febrero de dos
mil (2000) C.P.: Javier Díaz Bueno. Radicación número: S-761, sentencia del treinta (30) de Noviembre de dos
mil seis (2006) C.P.: Alier Hernández Enríquez. Radicación número: 13074, y sentencia del catorce (14) de
18 | PROPUESTA DE LA INGENIERÍA NACIONAL PARA MEJORAR LA CONTRATACIÓN PÚBLICA EN COLOMBIA.
incluir formas diferentes a las descritas en la Ley para determinar la Capacidad
Residual o K de contratación de los proponentes? Veamos:
En tratándose del tema que nos convoca, es necesario advertir que el parágrafo
primero del Artículo 6 de la Ley 1150 de 2007, es claro cuando señala que “para
establecer la capacidad residual del proponente o K de contratación, se deberán
considerar todos los contratos que tenga en ejecución el proponente al momento de
presentar la oferta.” Y por esta razón, se considera, que el Gobierno Nacional ha
desbordado su competencia al incluir nuevos presupuestos para determinar la
capacidad residual de los proponentes, que la Ley no tenía, incluyendo para su
cálculo, no solo los contratos en ejecución, sino que además incluye aquellos que se
encuentren vigentes, y los valores de los que apenas se le hayan adjudicado.
C. Los saldos de los contratos a los que se refiere el Decreto que se hayan suscrito en
calidad de sociedad de propósito especial, consorcios o uniones temporales, son
aquellos referentes al contrato de obra, es decir, que para efectos de determinar la
capacidad residual, solo se tendrán en cuenta los contratos de obra del artículo 32 de la
Ley 80 de 1993, que directamente o a través de sociedad de propósito especial,
consorcios o uniones temporales se hayan suscrito y se encuentren vigentes. De tal
manera que puede suceder que un contratista participe en una sociedad de propósito
especial, consorcios o uniones temporales en actividades diferentes a las actividades del
contrato de obra, y estas no deberán ser tenidas en cuenta al momento calcular la
capacidad residual.
2
Corte Constitucional, C-227 de 2009, C-805 de 2001, Auto 049 de 2008, Auto 169 de 2000.
3
Constitución Política Colombiana, Artículo 189 numeral 11.
4
Sala Plena de lo Contencioso Administrativo del Consejo de Estado en sentencia del ocho (8) de febrero de dos
mil (2000) C.P.: Javier Díaz Bueno. Radicación número: S-761, sentencia del treinta (30) de Noviembre de dos
mil seis (2006) C.P.: Alier Hernández Enríquez. Radicación número: 13074, y sentencia del catorce (14) de
Agosto de dos mil ocho (2008) C.P.: Mauricio Fajardo Gómez. Radicación número: 16230.
Debe entenderse como el compendio de todas las Ejecutorias a nivel profesional y/o
Empresarial, en este sentido se destacan dos aspectos, de los cuales es necesario
determinar su forma de evaluación:
La experiencia profesional inicia desde que se expide la tarjeta profesional, Tal como
lo establece la Ley 842 del 2003 en su artículo 12, “Para los efectos del ejercicio de la
ingeniería o de alguna de sus profesiones afines o auxiliares, la experiencia
profesional sólo se computará a partir de la fecha de expedición de la Matrícula
Profesional o del Certificado de Inscripción Profesional, respectivamente. Todas las
matriculas profesionales, certificados de inscripción profesional y certificados de
matrícula otorgados con anterioridad a la vigencia de la presente ley conservan su
validez y se presumen auténticas”.
La experiencia de las firmas inicia desde la fecha desde su constitución, sin embargo,
se deben implementar mecanismos que impidan la tergiversación de este principio,
pues se debe controlar que la experiencia en años de la empresa corresponda al
sector en el cual se quiere participar, pues muchos años de constitución y musculo
financiero no garantizan competencias técnicas.
Tal como se ha planteado al inicio del presente capitulo, es posible establecer un perfil
financiero de una organización, para lo cual es posible utilizar los indicadores que
tradicionalmente se emplean en los procesos de evaluación financiera, como activo
corriente, liquidez, capital de trabajo, nivel de endeudamiento, ingresos operacionales, entre
otros. Con esto será posible establecer una metodología clara, en la que se utilice variables
similares que se pueden conjugar entre si, para dictaminar la situación de una firma respecto
a la particular perspectiva financiera, de igual forma, es conveniente que esta evolución
tenga información de los últimos cinco años, para que dentro de una tendencia, se observe
el comportamiento de una organización, eliminado de esta forma, visiones parcializadas fruto
de una coyuntura particular. Adicional a lo anterior, será posible evidenciar la solidez fruto de
una gestión continua, lo cual a la postre dará confianza a las entidades contratantes.
Esta capacidad puede medirse en función, por una parte, de los equipos, maquinaria y
herramientas con que cuenta una organización para el desarrollo de las actividades técnicas,
esto quiere decir que no todos los activos que se encuentran dentro de un balance general
apuntan a este cometido de hecho parte de estos pueden estar dedicados a actividades
completamente diferentes a la ejecución de proyectos técnicos, así las cosas, el proceso de
verificación de esta información, es mas complejo que una simple radicación y análisis de
unos estados financieros. En este sentido es necesario contar un registro único de
maquinaria y equipo que aporte información para la completa y correcta evaluación de los
proponentes.
De igual forma, debe existir igualdad en los procesos de seguimiento y control, de tal forma
que las firmas extranjeras respondan solidariamente cuando las condiciones así lo requieran,
pues históricamente se han presentado conflictos importantes con firmas internacionales que
sencillamente salen del país y eluden la responsabilidad que les asiste producto de sus
acciones profesionales. Esto de paso hace necesario que se tenga que exigir, por ejemplo,
que los activos y capital de trabajo que muestran las firmas extranjeras estén ubicadas en
Colombia y disponible realmente para la ejecución de los proyectos a los que se
comprometen, pues no es equilibrado que, con tan solo un representante y una pequeña
oficina, se validen todos los papeles, es decir, los documentos son muy importantes, pero la
presencia y la inversión extranjera debe ser real y no ganar los concursos producto de la
disponibilidad de una documentación.
Se deben implementar medidas similares a las que existen en otros países y a las que son
sometidos los profesionales colombianos, en este sentido se debe involucrar al Consejo
Profesional Nacional de Ingeniería en cuanto a la expedición de las matriculas profesionales
y los permisos de trabajo, y al Ministerio de Educación para la convalidación de títulos
profesionales, ya que el nivel técnico de los ingenieros colombianos es excelente, sin
embargo, las disposiciones estatales deben responder, por un lado a la reciprocidad que se
tenga, y por otra parte, a exigencias que demuestren la idoneidad de los profesionales que
ingresen al país.
Lo primero que hay que decir, es que en la maduración de proyectos, la vocación, tradición,
sentido de pertenencia y mentalidad de progreso juegan un papel trascendental de
superación, además, la cultura del desarrollo asociada a los avances tecnológicos, tiene un
peso específico muy importante para determinar los proyectos que una región necesita.
Con visión y conocimiento se van fijando metas de lo que hay que hacer y se debe hacer,
- donde, cuando y como -, para concretar un proyecto que beneficie a una comunidad.
Con esto, estamos significando que cada área de la Ingeniería, involucrada en los diferentes
escenarios de las actividades productivas, tiene su cuota para participar, intervenir y hacer
las cosas bien, con capacidad para anticiparse al futuro y ver lo que Colombia necesita,
priorizando y optimizando los proyectos con diseño a largo plazo y ejecución al más alto nivel
de calidad.
Para cada etapa deben respetarse y tratarse con el mayor rigor científico, las ideas que
nacen de las “bases”, es decir, las que emergen de las necesidades sentidas de los
habitantes de cada región. Nadie mejor que quien está en contacto con su tierra y su ámbito
sea el que, de una manera personal o colegiada, exponga los planes y proyectos de
beneficio para su comunidad.
Es importante entonces, en las Entidades del Estado, tener la habilidad para recoger esas
ideas y empezar a darles “cuerpo”, impulsando su análisis a través de estudios iniciales por
sector para clasificarlas como “Potencialmente Factibles” y concretar lo que se denomina
“Estudios de Pre factibilidad”. Esto se debe adelantar a través de las Oficinas de Planeación
Municipales, Departamentales, Nacionales o de cada Sector y Entidad relacionados con el
tema.
A este nivel entra el Departamento Nacional de Planeación, entidad que con una adecuada
COORDINACIÓN establece cuales proyectos tienen carácter de interés nacional o regional,
para estructurarlos. Luego, viene el Estudio de Factibilidad, con el cual se consigue atraer la
atención de los Gobiernos de turno y de cuyos resultados – Estimación de Costos y
Beneficios - depende su puesta a consideración de un plan de contratación o de
adquisiciones para su aprobación e incorporación dentro del presupuesto de vigencias
futuras.
Para los proyectos que ejecutan las entidades públicas, establecer la obligatoriedad de
desarrollar el ciclo de maduración de los mismos, de acuerdo a lo propuesto en la matriz de
maduración de proyectos en el documento titulado “Una política Pública: Maduración de
Proyectos, Matriz de Riesgos, y Buenas Prácticas Contractuales”, elaborado por la Cámara
Colombiana de la Infraestructura, la Asociación Colombiana de Facultades de Ingeniería –
ACOFI- y la Sociedad Colombiana de Ingenieros en el año 2010, en el anexo 1 “Matriz de
información mínima – estudios y diseños-a suministrar a los proponentes en los procesos de
licitación de concesiones”:
Es necesario que las oficinas de las entidades públicas dispongan de planes maestros o
indicativos a mediano y largo plazo, los cuales deben ser de estado y no de gobierno para
blindarlos de intereses políticos, estableciendo un buen gobierno corporativo, articulando las
planeaciones estratégica y operativa a través de una gestión por objetivos; dado lo cual, se
convierte en prioritario lo siguiente:
Debe existir un nivel de competencia mínima, para que los profesionales que actúan en
nombre del Estado, lo puedan hacer con suficientes herramientas, conocimiento y
experiencia, pues en muchos casos se asignan megaproyectos a personas que aún no
tienen la calificación profesional suficiente de acuerdo con su proceso de crecimiento
competitivo.
Los perfiles deben ser únicos y definidos por el Gobierno Nacional para que exista,
uniformidad y profundidad técnica.
Es muy importante que reaparezca la figura de un interlocutor eficaz, con el cual se pueda
llegar a entendimientos razonables sobre la formulación de sanos y lógicos criterios en estos
procesos, para lo cual se insiste en la CREACIÓN DEL COMITÉ DE EXPERTOS para el
manejo de Estudios y Diseños.
En otras palabras, las entidades del Estado deben contar con profesionales idóneos, de
mayor nivel académico y de experiencia, que cuenten con una remuneración digna, en este
sentido es necesario revisar los modelos de vinculación, pues gran parte de esta actividad es
efectuada por contratistas, mal remunerados, lo cual, a la larga, se paga en términos de
calidad y eficiencia.
3.1.4. TARIFAS.
El anticipo se convierte en elemento fundamental para que los contratistas puedan cumplir
con los compromisos contractuales, situación muy diferente a lo que ocurre con el modelo
concesionario o con las Alianzas Público Privadas – APP –, pues en la obra pública el
Estado, dueño del proyecto, es quien debe garantizar la financiación del mismo, mientras la
ingeniería debe preocuparse únicamente por la calidad, avance y cumplimiento de los
procesos constructivos.
Por consiguiente, la determinación del valor del anticipo no obedece a porcentajes estándar
sino al flujo de caja del proyecto. La determinación de este monto satisface las necesidades
financieras de los proyectos, donde cada tiene particularidades que los hace únicos, por lo
que se hace necesario analizarlos de manera particular y especifica para garantizar que el
proyecto se lleve a cabo bajo condiciones financieras optimas.
Por otra parte, administrar los dineros de los anticipos a través de fiducias o de patrimonios
autónomos es una medida que no aporta valor a la gestión contractual, por el contrario, la
evidencia indica que se han aumentado significativamente los costos financieros y los
tiempos de trámite administrativo, sin garantizar el control real de los dineros, pues estas
figuras no garantizan el control de los recursos públicos, lo que a la postre significa que la
contratación esta siendo menos eficiente, con mayores tiempos de ejecución, con mayores
costos y sin ningún beneficio adicional. El único beneficiario de esta medida es el sector
financiero que cobra altas tasas producto de la intermediación realizada.
Una vez analizada la situación, la Sociedad Colombiana de Ingenieros propone que los
anticipos se conserven y su monto se establezca en función de las necesidades financieras
de los proyectos y que el control se ejecute a través de la interventoría, con facultades y
responsabilidades en el manejo de estos recursos a través de una cuenta conjunta
administrada de común acuerdo entre el contratista y el mencionado interventor.
Las Entidades del Estado deberán hacer efectivas las pólizas que se suscriban, frente al
incumplimiento por el inapropiado manejo de los de anticipos, cuando a ello hubiere lugar, lo
cual constituye una garantía de la no perdida, de igual forma, el interventor tendrá que estar
obligado a verificar físicamente su correcta ejecución, pues con su gestión deberá respaldar
El trámite del desembolso del anticipo debe ser muy rápido, porque cualquier retardo e
incumplimiento en su entrega, sobre todo en los contratos de corto plazo, traerá
inconvenientes durante la ejecución del proyecto; el anticipo se convierte en el combustible
que impulsa el desarrollo y garantiza financiación de las actividades.
La Sociedad Colombiana de Ingenieros, propone que para cada proyecto se haga y se exija
un análisis detallado de los costos indirectos y que se elimine el concepto de que se trata
solamente del AIU.
Para lograr este cometido, se plantea la siguiente estructura básica de los costos indirectos,
la cual se propone para iniciar el debate y que a través de la Agencia Nacional de
Contratación, se reglamente el tema para que las entidades realicen la proyección final de la
estructura de costos y gastos de los proyectos.
ADMINISTRACIÓN
Siendo el estudio de precios parte integrante del contrato, se debe volver a exigir un análisis
de los costos administrativos que involucran los costos indirectos necesarios para que un
contrato se celebre y la obra se desarrolle, como son la organización general, transporte de
personal y equipos, campamentos, comunicaciones, dirección, control de calidad, seguros y
los costos de administración propios del contrato, incluyendo gastos de seguridad y bienestar
del personal.
Por otra parte, el flujo de caja se debe convertir en herramienta fundamental para la
administración de los contratos, de tal forma que se presente una formulación del mismo
sobre la base de garantizar un adecuado manejo del financiamiento del consumo.
El cálculo de estos costos implica variaciones muy importantes si los contratos son con la
Nación, Departamentos o Municipios; puesto que en cada uno de ellos existen diferentes
tipos de impuestos. Por ello, se propone analizar para cada caso en particular los impuestos
y gastos legales correspondientes, principalmente a los de conmoción interior, retenciones,
estampillas y pólizas, entre otros, para que hagan parte constitutiva de los proyectos.
IMPREVISTOS
En la actualidad se está considerando eliminar el A.I.U., sin embargo, los imprevistos que
aquí se tratan corresponden a los que históricamente se han llamado “imprevistos
previsibles”, porque se refieren a los costos derivados de eventos que “pueden suceder” de
manera razonable, como daños de equipos, accidentes de trabajo, demoras presumibles en
la entrega de suministros, etc., que siempre se presentan y que de acuerdo con el tipo de
trabajo se tiene estadística y valores.
No se debe incluir los riesgos imprevisibles porque estos no pueden preverse, sino que se
refieren a los riesgos previsibles de los que habla el decreto 734 de 2012, el Conpes 3714 de
diciembre de 2011 y la Ley 1150 de 2007, por lo tanto al ser riesgos propios del contratista
no pueden ser objeto de reembolso. Debido a que este tema ha sido de amplia discusión
nacional, la Sociedad Colombiana de Ingenieros propone revisar el concepto emitido por la
Contraloría General de la República al respecto, pues parte importante dentro del desarrollo
de cualquier proyecto de ingeniería donde las condiciones son únicas, y muchas veces
cambiantes por diversos factores.
UTILIDAD
Respecto de la utilidad, será del criterio del ofertante plantear el valor y porcentaje que
espera ganar con la ejecución del contrato, esta estará dada por la complejidad del trabajo,
el nivel del esfuerzo y capacidades invertidas en él, de tal manera que en este aspecto la
Sociedad Colombiana de Ingenieros deja al libre mercado su estimación.
Este punto requiere de un alto grado de evaluación y análisis, puesto que es necesario que
se apliquen prudentemente los siguientes principios:
El proceso de contratación de los estudios y diseños Fase lll, debe garantizar claridad en los
productos requeridos, incluyendo descripción del nivel de detalle necesario para alcanzar los
objetivos del proyecto, esto con el fin de evitar que se presenten controversias con respecto
a la calidad de lo finalmente producido. En este sentido se debe:
Dar plazos pertinentes para que el cronograma técnico no sea forzado a coincidir con
el cronograma político.
Tener disponible la suficiente información para dar inicio a esta etapa, como por
ejemplo las redes de servicios públicos en el caso de las vías urbanas, pues el
trabajo del diseñador no debe concentrarse en “pedir el favor” a las empresas de
servicios públicos para que brinden información y definiciones técnicas.
La entidad debe definir con celeridad los aspectos jurídicos y técnicos que son de su
resorte para que el diseñador pueda avanzar en su proceso creativo.
Un proceso de contratación de diseños Fase lll debe adelantarse cuando se cuente con unas
condiciones básicas mínimas, como por ejemplo cierto nivel de maduración del proyecto,
información fundamental construida en fases previas, referencia de redes, coordinación
institucional con otras entidades que afecten el desarrollo del proyecto, incluyendo las
empresas de servicios públicos, entre otras relaciones, que deben ser reglamentadas para
garantizar el éxito de la futura ejecución.
El diseño debe orientar la gestión del Estado desde una perspectiva técnica garantizando
condiciones óptimas, para que las obras se ejecuten en los tiempos establecidos y
respetando los costos planteados inicialmente. El diseño Fase lll no debe ser puesto en
duda, pues es producto de una gran inversión y del empeño profesional del consultor
avaluado por la interventoría y aceptado por el contratante si se presentan problemas por la
calidad del trabajo del diseñador, es necesario tomar las acciones pertinentes para que este
responda solidariamente en lo que le corresponda, bajo el entendido de que pueden
presentarse imprevistos ajenos a la responsabilidad del profesional, del diseño y la
ejecución.
De igual forma, deben establecerse normas técnicas pertinentes para la ejecución de los
proyectos. La información a este respecto tendrá que ser actualizada con periodicidad no
superior a cinco años, con el fin de lograr que la estructuración de los proyectos obedezca a
las últimas tecnologías, materiales, métodos y procedimientos para contar con productos
modernos y competitivos para el país.
En este sentido, y a manera de ejemplo, la normatividad vigente del Invias para el diseño de
puentes, data del año 1995, lo que dificulta la aplicación de nuevas metodologías y se hace
imposible que Colombia aproveche los beneficios derivados de estas.
Esto permitirá definir unos mejores objetivos y alcances para cada área del proyecto, de tal
forma que se logre con mayor rigor, un producto de altísimo nivel de calidad.
De otra parte, en esta misma materia, se encuentran requisitos disímiles para la ejecución de
objetos contractuales afines. Así las cosas, se requiere estandarización de los criterios
utilizados para eliminar la disparidad y la discrecionalidad de las personas en estos aspectos
tan sensibles para la contratación.
La experiencia es un activo de las personas que hace parte integral del ser, por ello se debe
respetar y no puede perderse, las exigencias que se hacen dentro de los procesos
licitatorios, deben ser razonables de acuerdo con las características del proyecto a
desarrollar sin que ello implique que se extralimite, Estas condiciones contractuales
desproporcionadas vienen acabando con la vida y el ejercicio profesional de miles de
ingeniera e ingenieros que han construidos el país con su trabajo.
Así mismo, la experiencia adquirida durante la vida laboral como funcionario público debe ser
valorada de acuerdo con los años de experiencia específica, pues este tipo de ejercicio,
aporta múltiples perspectivas y conocimientos, que a la hora de ejecutar un proyecto
ayudaran a su materialización, lo importante al final es garantizar la competencia de las
personas, que integren los equipos de trabajo.
Este aspecto se constituye como factor determinante durante la correcta selección de las
firmas.
Con relación a este tema, la Sociedad Colombiana de Ingenieros propone utilizar como
criterios de desempate, en los concursos para consultoría, parámetros que realmente
Con relación a las Alianzas con las MiPymes es urgente la expedición de un decreto
reglamentario sobre la materia, puesto que la ley 1450 de 2011 permite que algunas
empresas con gran facturación se beneficien al unirse con los pequeños, obteniendo puntos
adicionales en las licitaciones, perjudicando a las verdaderas MiPymes por falta de equidad
en los requisitos contractuales. De hecho la propuesta en esta componente de la Sociedad
Colombiana de Ingenieros, consiste en que la contratación se efectué de acuerdo con las
capacidades de las empresas, abriendo concursos en los que se liciten de acuerdo con el
tamaño empresarial donde en los proyectos pequeños intervengan las empresas pequeñas y
en los grandes proyectos participen las empresas grandes. El actual requisito de Alianzas
con una Mipyme no trae beneficio alguno para el tejido empresarial, lo cual en el fondo es el
principio filosófico que se persigue, pero en la práctica con este tipo de requisito, tal como se
ha planteado por parte de los funcionarios de las entidades contratantes, solo consigue la
creación de MiPymes asociadas directamente con grandes firmas. Por ello, la propuesta se
fundamenta en que exista mercado para cada tamaño en el que solo participen los que se
encuentran en las respectivas categorías.
Definición clara de los perfiles necesarios para integrar el equipo humano que
adelantará el proyecto, nivelando los requerimientos de experiencia profesional y del
nivel educativo, estandarizando la validación de doble vía requerida para dar
equilibrio en el desarrollo profesional de las personas.
Las Universidades fueron concebidas para enseñar e investigar, por ello, no deben
ser participes de los proyectos de consultoría ya que por una parte, su estructura y
personal no están diseñados para adelantar este tipo de actividades y en segundo
lugar, está desplazando a los profesionales y compitiendo con el gremio; a través de
convenios interadministrativos lo cual se constituye como un modelo de competencia
totalmente inequitativo; los centros educativos deben realizar investigación que tanta
falta hace en Colombia, pues este aporte llevará al país a nuevos niveles de
competitividad.
Una vez finalizados los estudios y diseños, debería efectuarse una etapa intermedia previa a
la ejecución y construcción, en la que se efectúe la gestión predial, se consoliden las
licencias pertinentes para el desarrollo del proyecto, incluyendo temas ambientales,
servidumbres, permisos, entre otros aspectos. Dado lo anterior es muy probable que se
requiera, ajustar los estudios y diseños en función del trabajo anteriormente descrito, con
esto, será posible abrir el concurso público para la ejecución del proyecto, que podrá iniciar
inmediatamente actividades operativas producto del alto nivel de maduración realizado a
través de todo el proceso de consolidación.
REFERENCIAS
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la Procuraduría Sobre la Existencia de “Carteles de Ingenieros” Pronunciamiento.
Con Dragas de más de 50 Años se Limpiará el Rio Bogotá, (2011, mayo 27). El Tiempo.
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Villegas A. (2012, septiembre), (Interpretación de los Decretos 743 y 1397 de agosto
de 2012). Pp.57, 58
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remuneraciones] Entrevista.
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República.
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RCN Radio. (2011, mayo 04). [German Cardona: Medidas del Gobierno para Blindar
Millonarias Inversiones en Infraestructura] Entrevista.
Siete Ltda., (2012) (Solicitudes de Cambio al Decreto 734 de 2012), (Ramírez, A).
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Ejercicio Profesional.
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Sociedad de Ingenieros del Atlántico (2012 julio) Reflexiones sobre el Decreto 1397 de 2012
Pp. 68-74
Un País en Donde Demorar Obras en Buen Negocio, (2011, marzo 27), El Tiempo.
Un País en Donde Demorar Obras en Buen Negocio, (2011, marzo 27), Portafolio.
DOCUMENTOS DE REFERENCIA
3.1.8 Riesgos
3.1.9.2 Regulación
3.1.9.3 Interventoria
4.1.0 Portafolio
4.1.1 La República
4.1.2 Subcontratación
5.1 Tarifas
5.2 Experiencia
5.3 Subcontratación
10.1 Con urgencia se debe derogar el Artículo 6.1.1.2 del decreto 734 de 2012 y el decreto
1397 de 2012-11-29
11.2 Experiencia
14.1 Flórez D, (2012, junio 01), Ingenieros insisten en anticipos para obras. El Espectador p
13
14.5 Aya A, Buenos Sueldos Bajan la Corrupción, (2012, febrero, 27), El Periódico, p 16
14.10 El Espectador (2012, marzo 05). [Daniel Flórez Pérez: Hay altas responsabilidades
con bajas remuneraciones] Entrevista.