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Doctrina social de la Iglesia

La Doctrina Social de la Iglesia es un conjunto de ideas educativas, políticas y sociales a las


cuales cualquier cristiano o persona de buena voluntad de cualquier origen y lugar está
llamada a practicar, que la Iglesia católica funda en el Evangelio, en el magisterio y en la
Tradición. El Compendio de la doctrina social de la Iglesia y el Catecismo de la Iglesia católica la
definen como un cuerpo doctrinal renovado, que se va articulando a medida que la Iglesia en
la plenitud de la palabra de Dios revelada por Jesucristo y mediante la asistencia del Espíritu
Santo, lee los hechos según se desenvuelven en el curso de la historia.

Historia de la Doctrina Social

La expresión "justicia social" fue acuñada por el sacerdote jesuita italiano Luigi Taparelli, en el
libro Saggio teoretico di dritto naturale, appoggiato sul fatto (“Ensayo teórico del derecho
natural apoyado en los hechos”), publicado en 1843, en Livorno, Italia, donde se lee: ..."la
justicia social debe igualar de hecho a todos los hombres en lo tocante a los derechos de
humanidad...". Siendo así unos de los pioneros de la Doctrina Social de La Iglesia. Propiamente
la expresión “doctrina social” sería usada por primera vez por Pío XI en su encíclica
Quadragesimo annonota 1 quien cita a León XIII, aunque reconoce que la preocupación por los
problemas económicos y sociales es anterior a la Rerum novarum.

Los grandes cambios del siglo XIX como la revolución industrial y el consiguiente crecimiento
de las ciudades habían producido graves desigualdades sociales y económicas. Se debatía y se
luchaba por establecer una justa relación entre trabajo y capital y de ahí el problema conocido
como cuestión obrera.

En 1864 el Papa Pío IX en la encíclica Quanta Cura condenó el socialismo y el liberalismo


económico, por lo que hizo un primer esbozo de las enseñanzas que León XIII desarrollará:
denunciaba conjuntamente, por una parte, la pretensión del socialismo del siglo XIX de
sustituir la Providencia Divina por el Estado y, por otra, el carácter materialista del liberalismo
económico que excluye el aspecto moral de las relaciones entre capital y trabajo.

En 1891 el Papa Leon XIII en la encíclica "Rerum novarum" dejó patente su apoyo al derecho
laboral de «formar uniones o sindicatos», pero también se reafirmaba en su apoyo al derecho
de la propiedad privada. Además discutía sobre las relaciones entre el gobierno, las empresas,
los trabajadores y la Iglesia, proponiendo una organización socioeconómica que más tarde se
llamaría corporativismo.

En 1901 el Papa León XIII, con la encíclica Graves de Communi Re rechazó el sindicalismo que
implicaba la lucha de clases.
Cuando en 1931 se cumplen 40 años de la publicación de la Rerum novarum, el Papa Pío XI
publicó la Quadragesimo anno donde, además de repasar la doctrina anterior y aplicarla a la
situación del momento, afrontó los nuevos problemas ligados al crecimiento de empresas y
grupos cuyo poder pasaba fuera de las fronteras nacionales. Recuerda además la condena del
socialismo así como la insuficiencia del liberalismo.2

Pío XII vivió los años de la posguerra con otro orden internacional al que dedicó sus
intervenciones. Incluso no publicó encíclicas sobre temas sociales, no dejó de recordar a todos
a través de sus radiomensajes, la relación que corre entre la moral y el derecho positivo así
como los deberes de las personas en las distintas profesiones.3

Juan XXIII deja dos contribuciones: las encíclicas Mater et magistra y Pacem in terris. En la
primera habla de la misión de la Iglesia por construir comunión que permita tutelar y
promover la dignidad del hombre. En la segunda encíclica, además de afrontar el tema de la
guerra (en tiempos de proliferación de armamento nuclear), afronta el tema de los derechos
humanos desde un punto de vista cristiano.

El Concilio Vaticano II trató en la constitución pastoral Gaudium et spes temas de actualidad


social y económica, como los nuevos problemas que afrontaba el matrimonio y la familia (por
ejemplo, desde las sucesivas facilidades al divorcio concedidas desde el liberalismo
decimonónico y el socialismo), la paz y concordia entre los pueblos (en el escenario de la
llamada Guerra fría), etc.

Con Pablo VI hace su entrada en los documentos del Magisterio el tema del desarrollo en la
encíclica Populorum progressio haciendo hincapié en la necesidad de que ese desarrollo sea de
toda la persona y de todos los hombres. Es en el periodo de Pablo VI, que también se establece
y desarrolla lo que sería el Pontificio Consejo para la Justicia y la Paz.

Juan Pablo II, fuertemente marcado por su experiencia en Polonia, publicó diversas encíclicas
sobre temas sociales. La Laborem exercens presenta una espiritualidad y una moral propias del
trabajo que realiza el cristiano. La Sollicitudo rei socialis retoma el tema del progreso y el
desarrollo íntegros de las personas (publicada con motivo de los veinte años de la publicación
de la Populorum progressio). Finalmente la Centesimus annus —con motivo del centenario de
la publicación de la Rerum novarum— se detiene en la noción de solidaridad, que permite
encontrar un hilo conductor a través de toda la enseñanza social de la Iglesia. Aunque sus
predecesores habían tratado temas sociales como orientaciones para la ética social o para la
filosofía, Juan Pablo II planteó la Doctrina social de la Iglesia como una rama de la teología
moral y dio orientaciones sobre el modo en que esta disciplina debía ser enseñada en los
seminarios.
Benedicto XVI publicó en 2009 la encíclica Caritas in Veritate, en la cual insistía en la relación
entre la caridad y la verdad, a la vez que defendió la necesidad de una "autoridad política
mundial" para dar respuesta adecuada a los problemas más acuciantes de la humanidad.4

Principios de la Doctrina Social de la Iglesia

Dignidad de la persona humana

La justicia social solo puede obtenerse respetando la dignidad trascendente del hombre. Pero
este no es el único ni el principal motivo. Lo que está en juego es la dignidad de la persona
humana, cuya defensa y promoción nos han sido confiadas por el Creador, y de las que son
rigurosas y responsablemente deudores los hombres y mujeres en cada coyuntura de la
historia.

Sollicitudo Rei Socialis, n. 47

Primacía del Bien común

El Bien Común está siempre orientado hacia el progreso de las personas: ‘el orden social y su
progreso deben subordinarse al bien de las personas y no al contrario’ [...]. Este orden tiene
por base la verdad, se edifica en la justicia, es vivificado por el amor.

CIC, n. 1906-9 y 1912

Destino universal de los bienes y Propiedad privada

Dios ha destinado la tierra y sus bienes en beneficio de todos. Esto significa que cada persona
debería tener acceso al nivel de bienestar necesario para su pleno desarrollo. Este principio
tiene que ser puesto en práctica según los diferentes contextos sociales y culturales y no
significa que todo está a disposición de todos. El derecho de uso de los bienes de la tierra es
necesario que se ejercite de una forma equitativa y ordenada, según un específico orden
jurídico. Este principio tampoco excluye el derecho a la propiedad privada.

Compendio de DSI, 171-84

Principio de solidaridad

Es asi que en este mundo dividido y perturbado por toda clase de conflictos, aumenta la
convicción de una radical interdependencia, y por consiguiente, de una solidaridad necesaria,
que la asuma y traduzca en el plano moral. Hoy quizás más que antes, los hombres se dan
cuenta de tener un destino común que construir juntos, si se quiere evitar la catástrofe para
todos. [...] El bien, al cual estamos llamados , y la felicidad a la que aspiramos no se obtienen
sin el esfuerzo y el empeño de todos, sin excepción; con la consiguiente renuncia al propio
egoísmo.

Sollicitudo rei socialis, núm. 26


Principio de subsidiariedad

La Iglesia, iluminada por la fe, que le da a conocer toda la verdad acerca del bien precioso del
matrimonio y de la familia y acerca de sus significados más profundos, siente una vez más el
deber de anunciar el Evangelio, esto es, la «buena nueva», a todos indistintamente, en
particular a aquellos que son llamados al matrimonio y se preparan para él, a todos los esposos
y padres del mundo...

Familiaris Consortio n.º 3

Participación social

Tanto los pueblos como las personas individualmente deben disfrutar de igualdad
fundamental… igualdad que es el fundamento del derecho de todos a la participación en el
proceso de desarrollo pleno.

Sollicitudo rei socialis.

Cultura de la vida y de la calidad de vida

El hombre está llamado a una plenitud de vida que va más allá de las dimensiones de su
existencia terrena, ya que consiste en la participación de la vida misma de Dios. Lo sublime de
esta vocación sobrenatural manifiesta la grandeza y el valor de la vida humana incluso en su
fase temporal. En efecto, la vida en el tiempo es condición básica, momento inicial y parte
integrante de todo el proceso unitario de la vida humana. Un proceso que, inesperada e
inmerecidamente, es iluminado por la promesa y renovado por el don de la vida divina, que
alcanzará su plena realización en la eternidad (cf. 1 Jn 3, 1-2).

Evangelium Vitae, nº 2

La existencia de la ley moral

Si no existe una verdad última, la cual guía y orienta la acción política, entonces las ideas y las
convicciones humanas pueden ser instrumentalizadas fácilmente para fines de poder. Una
democracia sin valores se convierte con facilidad en un totalitarismo visible o encubierto,
como demuestra la historia.

Cuestionario sobre tema el trabajo:

1.- ¿Por qué el trabajo tiene un valor objetivo y un valor subjetivo?

 Tiene un valor objetivo porque por el trabajo logra el hombre que la naturaleza se
ponga a su servicio, a través de la técnica. Utilizando músculo, herramientas, máquinas
o la electrónica consigue crear satisfacciones y alcanza también el mejoramiento de la
vida social.
 Tiene un valor subjetivo porque el trabajo vale sobre todo porque quien lo lleva a cabo
es una persona que está hecha a imagen y semejanza de Dios.

2.- Explica la manera cómo el trabajo puede degradarse.

 El trabajo pude llegar a degradarse dependiendo de la forma que este se lleva a cabo
y como lo ejercen los empleadores, según lo explicado en el texto una forma de
degradar el trabajo es poniendo el trabajo sobre el trabajador, caso por el cual se
llega a la explotación que causa que lo trabajado por la persona se devalúe y este
cause conflictos que a la larga solo generaran que el tr4abajador aborrezca su trabajo.

3.- ¿Qué sostiene la Iglesia sobre el sindicalismo?

 El Papa León XIII, en la Rerum Novarum, apoyó al derecho de los trabajadores a


organizarse para defender su legítimo interés y contribuir así a la superación de la
cuestión social.
 Juan XXIII en la encíclica Mater et Magistra aprueba los sindicatos de aspiración
cristiana y anima a los sindicalistas cristianos de todo el mundo a proseguir en su
tarea.
 En la encíclica Laborem Excercens, Juan Pablo II consagró a los hombres del trabajo,
y que redactó en vísperas del atentado sufrido en el año 1981. En esta encíclica señala
que los sindicatos son un elemento indispensable de la vida social, especialmente en
las sociedades modernas industrializadas.
 Según lo anterior podemos comprobar que la iglesia aprueba la creación de
sindicalismo que es una forma en que personas que pertenecen a una profesión en
común puedan trabajar juntas para poder velar por sus derechos y así conseguir
objetivos moralmente correctos.

4.- ¿Qué sostiene la iglesia sobre el derecho a la huelga?

 El derecho a la huelga está plenamente aceptado en la enseñanza social de la iglesia.


 En la Constitución Pastoral Gaudium et Spes, la iglesia afirma: “En caso de conflictos
económicos y sociales hay que esforzarse por encontrarles soluciones específicas… se
ha de recurrir siempre primero a un sincero diálogo entre las partes.
 Gracias a esto según la iglesia la huelga es la última opción cuando ya se han agotado
todos los medios de diálogo y negociación, además de que esta tiene que ser bien
fundada es decir que tenga argumentos justos para darse.

5.- Señala las características de un salario justo.

 El salario debe ser suficiente para asegurar el propio sustento.


 Debe ser suficiente para fundar y mantener dignamente una familia y proteger su
futuro.
 Debe ir acompañado de otras prestaciones sociales que miran a:
 Protegerse contra enfermedades.
 Protegerse contra accidentes.
 Atender casos de maternidad.
 Cubrir el seguro de vejez.
 Garantizar el descanso semanal y las vacaciones.

6.- Explique el múltiple significado del sentido del trabajo.


 El múltiple significado del sentido del trabajo se da porque este no puede ser fin de si
mismo sino que tiene otros fines los cuales están dirigidos hacia el sentido personal,
social, cósmico y litúrgico. Cada una de estas relaciones crea al trabajo un sentido para
que sea justificable la ejecución de este, por ejemplo el sentido personal marca como
finalidad del trabajo la subsistencia digna de la persona y su familia, en el fin social, se
justifica el trabajo como medio indispensable para que la economía de una sociedad
pueda darse de manera estable.

7.- Señala los principales derechos y deberes de los trabajadores. ¿Se cumplen en Perú? ¿Se
cumplen donde trabaja tu papá o tu mamá?

 Derecho a un empleo adecuado.


 Derecho a que el trabajo se desarrolle en un marco de condiciones humanas.
 Derecho al salario justo.
 Derecho a asociarse en sindicatos.
 Derecho a la huelga como medio extremo.

Deberes del trabajador:

 Cumplir las obligaciones concretas del puesto de trabajo conforme a los principios de la
buena fe y diligencia.
 Cumplir las medidas de seguridad e higiene que se adopten.
 Cumplir las órdenes e instrucciones del empresario en el ejercicio de su función
directiva.
 No realizar el mismo trabajo para otra empresa que desarrolle la misma actividad.
 Contribuir a mejorar la productividad.
 Los demás que se establezcan en el contrato de trabajo.

Tanto deberes como derechos hoy en día no se cumplen en la sociedad peruana, nos es de
buscar mucho, diariamente hay muchas deficiencias en cuanto a los deberes de los trabajadores
por asi citar tal es el ejemplo de que en la radio diariamente mucha gente se queja de los malos
tratos que se les brinda en el seguro social, en cuanto a derechos tampoco se cumple ya que
podemos tomar como ejemplo las condiciones pésimas en la que se labora en muchos locales
de venta donde la gente trabaja por el método de destajo donde prácticamente la persona tiene
que esclavizarse si desea ganar un sueldo que valga la pena.

Donde trabaja mi madre se diría que solo se cumplen algunos que ella considere, ya que en su
caso es una trabajadora de su negocio propio.

8.- Consigue la última tabla de Salarios Mínimos vigentes, analízala, ¿Qué comentarios te
suscita? Compara el salario legal mínimo en el Perú con el costo de la canasta familiar básica.
Y el salario mínimo vital en el Perú es de S/ 930.00, lo cual no llega a cubrir de ninguna manera
el costo de vida promedio en el Perú como podemos ver en la tabla, a esto se puede hacer la
apreciación que en el Perú no se paga lo suficiente a los trabajadores para que puedan vivir una
vida con las comodidades normales.

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