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CONTENIDO

UBICACIÓN
Geográfica:
La Ciudad Sagrada de Caral se ubica al
centro-norte del litoral peruano, bañado por el
Océano Pacífico, distante a 182 km. al Norte
de la ciudad de Lima, capital peruana, y a 23
km. al Este de la costa con una altitud
geográfica de 350 msnm.
Se desarrolló a orillas del río

En el contexto cultural mundial

El desarrollo poblacional de Caral fue muy precoz en el continente americano,


comparable a civilizaciones más antiguas del denominado Viejo Mundo, como
el caso Egipto cuando se construían sus principales pirámides, o cuando se
ocupaban las ciudades sumerias de Mesopotamia o crecían los mercados en la
India, en aquellos tiempos en Caral ya se edificaban los edificios piramidales y
en sus plazas se reunían con propósitos religiosos, económicos y sociales;
valdría destacar que mientras en Europa y Asia se intercambiaban entre sí
bienes, técnicas y experiencias, en Caral no hubo igual situación dado la
precocidad de su desarrollo en la región.
ORGANIZACIÓN SOCIOECONÓMICA
La economía de Caral tenía bases agrícola-pesqueras de cuyos excedentes de
Producción fueron dedicados al intercambio comercial e insumos para recursos
tecnológicos y almacenamiento.
Del Océano Pacífico se aprovecharon la pesca de especies como “anchovetas,
choros y machas; y los agricultores del Valle produjeron algodón, mates y
especies alimenticias como frijol (poroto), camote (batata), zapallo, calabaza,
papa, maní, palta, ají, pacae, guayaba, maíz, etc.”
Los instrumentos que se hallaron fueron diversas, a destacar, anzuelo y redes
para la pesca, como así palos cavadores, astas de venado y hachas para la
agricultura, también se evidencian para la caza, boleadoras, puntas de proyectil
y huaracas tejidas de algodón. Construyeron terrazas con la debida estabilidad
estructural y sistema de riego para la producción de sus cultivos.

COMERCIO
Dada la particularidad del Territorio en que se desarrolló Caral teniendo un
corto eje transversal Oeste – Este, es decir del Litoral hacia el Altiplano,
permitió un rápido flujo de productos tanto marinos como agrícolas, como así el
intercambio de otros conocimientos, bienes y hasta aspectos culturales.
Hay evidencias también de intercambios realizados a grandes distancias como
al norte con el Ecuador, como también la utilización de la Sal que se encuentra
en grandes cantidades en los yacimientos de sal de Huacho, ya que se
encontraron restos de sal en las piedras de moler, como uno de 30,5 por 27 cm
hallado en el Edificio Piramidal Mayor.

ORGANIZACIÓN SOCIAL Y POLÍTICA


El Sistema Social de las poblaciones de Caral y su área de influencia marcó el
proceso cultural del mundo andino hasta el Imperio Inca formado 4.400 años
después. “Se caracterizó por:
Una división de trabajo dedicada a la producción de alimentos y los
especialistas encargados de la conducción política y religiosa de la población.
Una distribución desigual de la productividad económica en relación a sus
estratos sociales.
Una organización central de la población, repartidas en otros centros urbanos
conducidos por autoridades políticas”

Glosario de la organización social y política de Caral:


Ayllus: grupos de familias que trabajan una porción de tierra en el Valle y
pertenecen a una pachaca.
Curacas y Principales: cada Pachaca tenía una autoridad llamada Curaca y los
ayllus representados por los Principales, estas autoridades son los que dirigían
las actividades agrícolas, económicas, religiosas y constructivas.
Pachacas: centros urbanos con una economía autosuficiente, tenían sus dioses
y prácticas religiosas en los que sustentaban su identidad, mantenían
ceremonias públicas colectivas cada cierto tiempo.
Sayas: asentamientos a cada margen del río (Supe) en número similar según el
patrón dual de la cosmovisión de la población de Supe.
Huno: por encima de los Curacas estaba el que representaba al Valle, dirigía el
gobierno del Estado y vivía en la ciudad capital”.

VISIÓN IDEOLÓGICA Y RELIGIOSA


La Cosmovisión del pueblo de Caral estaba en armonía con la preservación del
medio geográfico y sus recursos ubicándose como parte de la naturaleza y del
universo, sus actividades estaban asociadas con ceremonias y ritos,
reuniéndose en plazas y salones ceremoniales con fogones de los edificios
públicos y viviendas.
En estas celebraciones participaban músicos con una serie de instrumentos
como las flautas, realizaban ferias, construcciones y remodelación de edificios,
excavaciones y limpieza de canales, festines, danzas, etc., con una
participación masiva de la sociedad.

CONOCIMIENTOS CIENTÍFICOS
tecnologías sustentadas en la investigación científica, como así la aritmética y
geometría en el diseño y construcción arquitectónica, estudios astronómicos en
la medición del tiempo y predicción del clima, además de un sistema codificado
en el registro de la información.
Para el registro de información se utilizaron los llamados Quipus anterior al
usado por los Incas, y consta de hilos de algodón de distintas longitudes, con
una serie de nudos donde encierran estos registros.
Tuvieron una gran capacidad de observación e investigación como en el campo
de la Astronomía logrando elaborar su propio calendario anual, de mediano y
largo plazo. Estos conocimientos también se utilizaron para la construcción de
los edificios.
En cuanto a la Medicina se encontraron evidencias del uso de plantas
conocidas por sus propiedades curativas y muchas de ellas entregadas como
ofrendas.
Trabajaron en la manipulación genética de algunas plantas sea de uso
medicinal como alimenticio y de insumo en la construcción, cuerdas, lienzos,
amalgamas etc., permitiendo que la producción sea de mejor calidad y tamaño,
y con mayor resistencia a las plagas, especialmente en el caso del algodón.
Como testimonio del intercambio interregional se encuentra el uso de una fibra
Cachay usada como combustible vegetal.

ESTRUCTURA URBANA Y ARQUITECTÓNICA


“La ciudad Sagrada de Caral ocupa 66 hectáreas, en las cuales se distinguen
dos zonas: una nuclear y otra periférica. En la zona nuclear, los edificios están
distribuidos en dos mitades, una Alta que tiene las construcciones públicas y
residenciales más grandes de la ciudad: siete edificios monumentales, dos
plazas circulares hundidas, dos espacios de congregación colectiva, unidades
residenciales de los funcionarios, así como un extenso conjunto residencial de
especialistas y servidores. La mitad Baja, tiene edificios de menores
dimensiones, como el complejo arquitectónico del Anfiteatro, el edificio del Altar
Circular y un conjunto residencial. La zona marginal, ubicada en la periferia,
contiene residencias agrupadas y distribuidas a modo de archipiélago, a lo
largo de la terraza aluvial que colinda con el Valle”
“Los edificios Públicos de Caral compartieron los siguientes elementos: una
escalera central como eje ordenador de la construcción; terrazas superpuestas
en forma escalonadas; un salón ceremonial en la cima, presidido por un fogón,
ubicado en el centro; un recinto posterior con plataforma en el medio del
espacio, y dos recintos laterales, uno a cada lado; además de otros recintos y
un altar pequeño con fogón alimentado por conductos de ventilación
subterráneos”

Técnicas constructivas:
En los edificios piramidales públicos, las terrazas tuvieron muros con mortero
de arcilla y pachillas o piedras de menores dimensiones de “shicras” con
piedras, que cumplían una función estructural. Hasta el período Medio, algunos
edificios públicos mantuvieron recintos de palos, cañas y barro. En el período
Medio Tardío se generalizó el uso de bloques de piedra cortados. En el caso de
las viviendas, en los primeros períodos, fue construido con muros de armazón
vegetal, hechos con palos de sauce, huarangos y caña brava (figura 7).
En el período Medio utilizaron piedras cortadas de granodiorita, con argamasa
de barro.
La Ciudad Sagrada de Caral presenta una estructura urbana característica, sus
principales edificios: Edificio Piramidales: Mayor; Menor ; La Galería; de la
Huanca; La Cantera y la Central, también contaba con Plazas, Templo del
Anfiteatro, y residencias.

LA CIUDAD SAGRADA DE CARAL


los rasgos que presenta Caral revelan complejidad en el uso del espacio, en el
diseño arquitectónico y en la labor constructiva: una extensión de más de 60 ha
con edificaciones distribuidas siguiendo un patrón determinado; presencia de,
por lo menos, seis volúmenes piramidales mayores, además de otras
construcciones monumentales menores de cinco diferentes tamaños y todos
ellos con su particular grupo de estructuras auxiliares; así como de conjuntos
residenciales, igualmente de variada dimensión, tecnología y material
constructivo.

A través de los varios siglos de ocupación de la ciudad de Caral sus


conductores desarrollaron un programa permanente de remodelación de las
edificaciones. Esta innovación de las estructuras, que se tornaron más
complejas, implicaba experimentación y conocimiento, y un manejo
sociopolítico y religioso.
Pirámides, estructuras con plataformas, plazas circulares y el anfiteatro fueron
resaltados en sus diseños por la presencia de monolitos, frisos, nichos y
pinturas de varios colores. El uso del espacio y la dirección del tránsito fueron
formalmente controlados por pasadizos, vanos, mochetas, escaleras, etc.
Esta pasión por la obra arquitectónica se plasmó no solamente en los edificios
públicos, sino también en su vida cotidiana. Las diversas unidades
residenciales, aunque destinadas a un fin cotidiano, presentan finos acabados.
En general, puede identificarse dos grandes espacios o mitades: uno alto,
donde se encuentran los volúmenes arquitectónicos más destacados; y otro
bajo, con las estructuras de menor tamaño.

1) El Templo del Anfiteatro


Es el complejo piramidal más destacado del sector bajo de la ciudad de Caral.
Está compuesto por la plaza circular hundida más grande de la ciudad, una
pirámide de regular tamaño con plataformas superpuestas, un pequeño templo
circular y una vivienda de élite, entre otras estructuras.
La plaza circular hundida se asemeja a un anfiteatro con graderías en la mitad
superior y dos escalinatas de acceso (figura 1). Las paredes internas de la
plaza y el piso tuvieron revoque y pintura blanca. Hacia el exterior muestra dos
plataformas superpuestas en forma concéntrica. La plaza está presidida por
una plataforma alargada, que fue cortada en el lado norte por un aluvión. En los
lados Este y oeste aparece una serie de recintos alineados en forma
intercalada, a modo de nichos.
Las excavaciones revelan que la plaza circular se agregó a la estructura
piramidal ya existente en una fase media. Posteriormente, en una remodelación
significativa, que cambió el diseño original del frontis de la estructura, se
construyó una plataforma rectangular de 6 m de ancho por más de 30 m de
largo y una altura de 2 m sobre la superficie exterior. Esta plataforma fue
cubierta, en la siguiente remodelación, con otra mayor y más elaborada, de 26
m de ancho y 3,2 m de altura, que presentaba grandes nichos dispuestos en
forma paralela en las caras laterales.
En el edificio piramidal se diferencian tres grandes recintos: el atrio, el recinto
central y el recinto sur. El atrio del templo consta de tres plataformas
escalonadas en forma de U que circundan un espacio cuadrangular en cuyo
centro se encuentra un fogón ceremonial. El piso está pintado de un color
negro plomizo. Desde el atrio se accede, por una escalera central, a otra
plataforma elevada con dos habitaciones rectangulares, una a cada lado, y en
donde se aprecia una antigua pared enterrada, muy maltratada, que llevaba
decoración en relieve. Por el centro continúa la escalera al recinto principal,
que es de menores dimensiones y se encuentra a mayor altura que los demás.
En este recinto, dada su ubicación en la parte alta y limitado acceso, debió
estar la divinidad principal del templo y allí se habrían realizado las actividades
ceremoniales más relevantes del grupo social que tuvo bajo su control esta
estructura. El recinto sur pudo funcionar como un patio cuadrangular con una
plataforma que abarca casi la mitad del recinto y un acceso ubicado en el muro
sur.
Las otras estructuras que integran este complejo son: la residencia de élite y el
Altar del Fuego Sagrado:
• La residencia de élite. Anexa a la pirámide, tiene
forma cuadrangular y se ubica en la esquina exte-rior sureste del edificio. Los
muros circundantes
están construidos con grandes piedras angulares y
algunos guijarros, unidos con argamasa de arcilla,
color grisáceo y enlucido con otra de color amarillento.
En el interior del recinto hay una plataforma,
asociada a un vano, a modo de banqueta. Un
segundo vano en la esquina suroeste del recinto se
une a un pasadizo, que se prolonga hacia el sur.
• El Altar del Fuego Sagrado. Esta estructura se encuentra
dentro de las murallas que delimitan el espacio
correspondiente al Templo del Anfiteatro y
fue, por tanto, una unidad separada del resto de la
ciudad e integrada a este conjunto. Pero al mismo
tiempo, llegó a tener su propia privacidad, demarcada
por un muro, que la circundó a partir de la
segunda fase. Se hace evidente, por las condiciones
de su ubicación, características, tamaño y control
del acceso, que esta estructura tuvo un carácter
especial, de uso muy restringido (véase Shady
et al., 2000a). Consiste en una unidad arquitectónica
de forma trapezoidal, en la que se diferencian
seis componentes: un muro circundante, un recinto
circular, un ambiente accesorio con plataforma
central, un patio, un acceso principal indirecto y un
silo (figura 2).
El altar circular tuvo paredes de piedra unidas con
argamasa, enlucidas y pintadas, con un techo confeccionado
de cañas amarradas con soguillas. Las
paredes y pisos fueron pintados periódicamente.
El altar habría tenido funciones estrictamente rituales,
muy especiales. El servicio dado por sus
conductores sería reconocido con los bienes entregados
por los usuarios. La demanda exitosahabría hecho necesaria la instalación de
su respectiva
administración, mediante la construcción de
la plataforma y los recintos del Este, y que hubiese
un acceso restringido para mayor control.
El fogón, construido en el centro del altar circular
es de forma oval, de doble nivel, cada uno
demarcado por lajas de piedra en forma de corona,
que posteriormente fue enlucido. El primer
nivel está relacionado con el primer piso de
la plataforma; el segundo, con la elevación de la
plataforma. Cerca del piso del fogón salen dos
conductos de ventilación, que atraviesan toda la
parte central del recinto circular, en dirección
norte-sur, por debajo de la plataforma interna.
La función de ambos habría sido diferente pues
el conducto norte contuvo una gran cantidad de
ceniza, muy blanca; el conducto sur, en cambio,
tenía restos de carbón, material orgánico, fragmentos
de artefactos, mates, huesos y semillas.
Asimismo, las paredes internas de este conducto
mostraban capas de hollín, al igual que las piedras
que formaban su techo. El conducto norte
fue mantenido a través del tiempo, mientras que
el conducto sur fue sellado y quedó fuera de uso
a partir de las nuevas remodelaciones.
Al fogón sólo tendría acceso la persona encargada
de incinerar los alimentos y otros materiales,
ofrendándolos a los dioses.
La ceniza blanca del fogón, muy fina, tiene alto
contenido de carbonato de calcio y fluorapatita
que, en el contexto de Caral, podría corresponder
a la quema en altas temperaturas de conchas y huesos
de pescado, entre otros.

Respecto a la posición cronológica, este tipo de


estructura forma parte del grupo de pequeños
edificios con fogones centrales y conductos de
ventilación, identificados en la costa norcentral,
particularmente en el valle de Casma, pertenecientes
al Arcaico Tardío y al Formativo Temprano. Si
bien comparte rasgos con la tradición Kotosh,
expresa una modalidad arquitectónica circular,
propiamente costeña.
2) El Templo de la Banqueta
Es otra estructura arquitectónica, de menor tamaño,
ubicada a unos 150 m al oeste del Templo del
Anfiteatro, en el sector bajo de Caral. Presenta un
recinto central entre un patio anterior y otro posterior.
En el recinto central se pueden distinguir
dos espacios: el atrio y un recinto menor al sur del
anterior (figura 3).
Este edificio muestra unas 14 fases de remodelación;
cada una de ellas fue objeto de un enterramiento
ritual, con incineración de ofrendas, antes de la
construcción de la siguiente estructura.
Es posible que las variaciones en cuanto a la alineación
de las paredes en sucesivas fases haya estado
en relación con determinadas mediciones
astronómicas, efectuadas periódicamente. Se cambiaba,
igualmente, el color de las paredes: blancocrema,
amarillo mostaza y rojo.
El atrio fue acondicionado con la construcción de
plataformas alrededor de un espacio con un fogón
ceremonial en el centro. En las remodelaciones
fue aumentando la dimensión de estas plataformasy se redujo el espacio
central, alterando la
ubicación del fogón. El recinto posterior se separó
formalmente del atrio mediante una pared divisoria
donde se situaba el vano de acceso que los
comunicaba. Este vano presentaba un diseño escalonado.
El recinto posterior se subdividió en tres
ambientes por la construcción de una plataforma
central escalonada.
El patio anterior y el posterior fueron agregados en
las fases medias y también tuvieron remodelaciones.
En el patio posterior se encontraron grandes
cantidades de material orgánico como moluscos,
carbón y vegetales.
3) El Templo Mayor
Es el complejo arquitectónico de mayor extensión
y volumen de la mitad alta de Caral. Está
compuesto por una plaza circular hundida, que
lo preside y una imponente estructura piramidal
escalonada, formada por una serie de plataformas
centrales superpuestas hasta alcanzar los 20
m de altura y otras laterales, que fueron sucesivamente
adicionadas (figura 4). La comunicación
entre todos estos componentes arquitectónicos
se hacía a través de escaleras centrales y laterales.
Por su ubicación, extensión y por la asociación
con la plaza debió ser la estructura principal de
esa mitad, entre las seis pirámides más imponentes
que se edificaron en la ciudad (Shady et al.,
2000b).
La plaza hundida tiene forma circular y se extiende
hacia el norte mediante una plataforma trapezoidal,
con la cual se vincula a la pirámide. Su espacio inter-no presenta un diámetro
de 21 m de sur a norte y
22 m de Este a oeste. El diámetro externo es de
36,5 m de Este a oeste. El espacio entre el muro
externo y el muro interno fluctúa entre los 7 y 7,3
m. Estas dimensiones convertían a la plaza en una
gran plataforma circular elevada hasta el mismo nivel
del piso donde se asienta la escalera central de la
pirámide. Se ha estimado que la altura de los muros
internos llegó a los 3 m, mientras que en los muros
externos alcanzó entre 1 m y 1,6 m.
El muro interno de la plaza presenta, a la altura de
1,40 m, un desplazamiento de 40 cm, que le da un
aspecto escalonado, muy decorativo.
Las paredes, construidas de piedras cortadas, fueron
enlucidas y pintadas. Al pie de las dos escaleras
internas de la plaza se encontraron monolitos
caídos, cuyas dimensiones sobrepasan los 2,5 m
de alto por 60 cm de cara lateral.
Desde la plaza circular se accede a la cima de la
pirámide por una impresionante escalera central
de 9 m de ancho hasta alcanzar una altura de 18
m. En la parte frontal del edificio principal, a ambos
lados de la escalera, se situaban monumentales
plataformas. La cima de la pirámide mide 65
m de largo por 35 m de ancho y contiene una
serie de recintos, aún sin excavar, precedidos por
uno central y principal correspondiente al atrio.
El diseño del atrio es muy semejante al del Templo
del Anfiteatro; está conformado por un espacio
central, donde se ubica un fogón ceremonial,
rodeado de plataformas escalonadas. Desde
este recinto se accede, por las plataformas, siguiendo el eje central, a otra
plataforma elevada
con dos habitaciones rectangulares, una a cada
lado, que tienen fogón central. En el mismo eje
se continúa por una escalera hacia la cima de la
pirámide. En este nivel, por su ubicación más
alta y limitado acceso, se sitúa un gran recinto en
el que destaca la presencia de una gran cantidad
de nichos.
De la misma manera, desde el atrio se podía acceder
a recintos secundarios, ubicados a sus lados Este y
oeste, que cumplían diferentes funciones. En el lado
Este destaca un pequeño altar cuadrangular con fogón
central y un conducto hacia el vano de acceso.
4) Conjunto Residencial A
El sector A contiene varios módulos de arquitectura
residencial, ubicados en la parte alta de la ciudad
de Caral (figura 5). Las paredes fueron elaboradas
con tramados reticulares de carrizo (Phragmytes
australis) y postes de guarango (Prosopis sp.), unidos
con una argamasa gris cubierta por un revoque de
arcilla amarillenta, pintadas de blanco, gris claro,
beige, rojo, amarillo claro, etc.
Los módulos habitacionales funcionaron independientemente,
pero en el transcurso del tiempo y
debido a continuas remodelaciones, varios de ellos
fueron fusionados. En las fases tardías se construyeron
plataformas con muros de contención, elaboradas
con grandes bloques de piedra canteada,
unidas con argamasa de barro, que encerraron a
todo el conjunto. Su ubicación, características formales
y los hallazgos permiten inferir que estos
módulos habrían sido ocupados por unidades familiares básicas, vinculadas
directamente con la clase
dirigente.
El estudio de las fases constructivas indica sucesivas
remodelaciones, clausura de recintos y, posteriormente,
el enterramiento de las estructuras, conjuntamente
con la disposición de ofrendas al momento
de producirse el abandono.
5) Conjunto Residencial NN2
Es un conjunto residencial menor, ubicado en la
parte baja de la ciudad, a 100 m al norte del Templo
de la Banqueta.
Las unidades habitacionales son de forma cuadrangular
y de dimensiones variadas. Cada una contiene
varios recintos con plataformas y banquetas.
Los accesos principales se encuentran orientados
hacia los edificios ceremoniales de este sector.
Los muros de cada unidad residencial se construyeron
con un armazón de postes de madera que
separaban segmentos íntegros de cañas unidas entre
sí por soguillas de totora y junco. Esta armazón
se revestía de barro al que se enlucía y pintaba.
Los muros llegaban a alcanzar 1,80 m de altura y
guardaban un perfil ondulante debido a la presencia
de los postes.
En las excavaciones de estas residencias se ha logrado
recuperar instrumentos de hueso, piedra y madera,
fragmentos de textiles y abundante material
orgánico. El conjunto ocupa un área de 1500 m2. 6) Unidades Residenciales
anexas a la Pirámide B
• Unidad Residencial B1
Esta unidad habitacional se encuentra a unos 20
m al sur de la pirámide B del sector alto. Es una
construcción de piedras cortadas y cantos rodados,
asentados con argamasa de barro, mezclada
con fibras vegetales y piedra menuda. El
acabado de los muros y pisos fue de arcilla fina
y llevó capas de pintura blanca, roja o amarilla
(figura 6).
Los recintos internos ocupan espacios cuadrangulares,
que se comunican entre sí mediante vanos.
Una de las habitaciones tiene una plataforma y una
pequeña banqueta. El módulo ocupa un área de
122,62 m2. Como en los otros casos, presenta una
secuencia de fases constructivas.
Su cercanía a la pirámide, los materiales constructivos
utilizados y el acabado muy elaborado
de la construcción sugieren que esta casa perteneció
a un grupo familiar que ocupaba una posición
elevada en la jerarquía social de la parte alta
de Caral.
• Unidad Residencial B2
Al igual que la anterior unidad residencial, se halla
en la explanada sur de la Pirámide B y está distanciada
de la anterior por apenas 2 m. Las características
constructivas son iguales, diferenciándose
en el diseño y las dimensiones del edificio. El áreade la casa varió a través del
tiempo: de 120 m2 se
redujo a 72 m2.
En el interior de los recintos también se encuentran
plataformas, alrededor de un espacio central
y banquetas. Las continuas remodelaciones
implicaron la destrucción de muros, el sellado de
vanos, la reducción de espacios y cambios en la
técnica de construcción de los muros. Los recintos
presentan sucesivas subdivisiones, que los multiplicaron
y redujeron sus espacios. Al igual que
la anterior residencia, ésta fue ocupada por un
grupo familiar de alto estatus en la jerarquía social.
7) Complejo anexo a la Pirámide I
• Unidad I-2
Este complejo se ubica al sur de la Pirámide I, con
la cual estuvo directamente relacionado. Su área
alcanza los 500 m2. Se pueden distinguir tres módulos
con recintos, uno central y dos laterales.
Como todas las estructuras ésta revela varias fases
constructivas, sobre todo en el conjunto central
que fue el núcleo del complejo. El conjunto
central consta de tres recintos, uno frontal a manera
de patio, un recinto medio con un fogón
ceremonial y uno principal en el extremo posterior,
subdividido a su vez en dos recintos menores.
El recinto medio se comunica al norte mediante
un estrecho pasadizo, con un gran patio
cuadrangular, donde se han registrado eviden-cias de consumo de alimentos.
Hacia el sur se
vincula con un conglomerado de pequeñas habitaciones,
de carácter residencial.
Al suroeste del núcleo se presenta una unidad residencial
mayor con un área de 80 m2. Ella consta
de dos grandes habitaciones, una de las cuales tiene
una plataforma en el vano de acceso central,
rasgo que lo asemeja a uno de los recintos residenciales
anexos a la Pirámide B. Esta habitación
se asocia a dos recintos menores, uno de los cuales
pudo servir de depósito y otro de dormitorio.
En la esquina noreste del conjunto se hallan dos
recintos independientes, ambos subdivididos por
muros y plataformas internos.
Al igual que otras construcciones de la ciudad,
ésta muestra sucesivas remodelaciones y recintos
en varios niveles estratigráficos. Las paredes estuvieron
cubiertas con enlucidos y fueron pintadas,
a través del tiempo, de color crema, amarillo
y rojo.
Hemos observado, por lo menos, ocho edificaciones
superpuestas. En una de las fases, la estructura
fue cubierta con numerosas shicras (bolsas de
fibra vegetal). En otros casos, la shicra está aislada,
colocada en medio del relleno, lo que podría indicar
su carácter de ofrenda.
Esta complejidad arquitectónica, asociada tanto
a los materiales allí producidos como a los provenientes
del comercio interno y externo, ratifican:

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