Está en la página 1de 6

Universidad Central de Venezuela

Facultad de Humanidades y Educación

Escuela de Artes

Historia de la Puesta en Escena ll

Meininger

Una de las cosas que me pareció más importante de los aportes de la Compañía de

Meininger fue el crecimiento de la figura del director con respecto a lo que se venia ciendo

anteriormente, ya que no solo lo colocaba como intérprete de la visión en el montaje, sino que

también, obligaba a que esta persona tuviese conocimientos en todas las áreas de trabajo. El duque

Jorge II y su esposa, eran considerados intelectuales, conocían de pintura, escultura, música,

poesía, etc… además de esto, el duque, al haber estado en la milicia, también tenía conocimientos

en liderazgo, manejo de grupos, y disciplina, lo cual le permitió dominar y prevalecer como figura

principal del montaje. También esto aporta una minuciosidad a la hora de tomar decisiones con

respecto al montaje, ya que todo tiene que estar acorde a una visión; entonces se buscaba a un

especialista creador para cada área, todos ellos debían entonces lograr un trabajo íntegro y

unificado, al mismo tiempo aportando un potencial total en las diferentes áreas, además de un

estilo fresco y original ya que formaba parte de una mezcla de decisiones. También el implemento

del actor como pieza del montaje y no como figura central de este, lo cual permitía una mayor

libertad -para el director- a la hora de armar el ensamble, lo cual permitía una unificación de las

interpretaciones puesto que existía una estrategia ordenada para el accionar de cada escena.

Entonces empezamos a hablar, por primera vez, de una armonía en todos los elementos

escénicos, lo cual le brinda una importancia mayor a una simple decoración al vestuario, la
escenografía, los movimientos, etc… puesto que todo estaba justificado por una visión acorde y en

conjunto. Y es por esto que al duque de Meininger lo consideran el primer director teatral moderno de

la historia.

En mi montaje de “El día que me quieras”, basándome en la compañía de Meininger, dejaría

el guion tal y como esta. Buscaria un escenógrafo que trabajara un fondo de pintada con utilería

falsa (de carton, anime o plastico), y también a un vestuarista que realizase o buscase los vestuarios

mas exactos posibles con respecto a la época en que habitan (1935), tela, corte, color, etc… La

exactitud también se aplicaría con respecto a su clase social, en donde el fondo y vestuario

concordasen de manera casi exacta. EN lo que respecta a los actores, trabajaría con actores en

dirección a una visión, dejando a un lado muletillas o modismos propios del actante.

Reemplazandolos por cualidades y costumbres propias de la época. Con respecto al personaje de

Gardel, se buscaría a un actor argentino con cualidades de cantante, o en defecto, a un actor capaz

de imitar el acento argentino de manera imperceptible, este también con cualidades de cantante. No

se editaría el texto de ninguna manera, mas allá de los arreglos correspondientes a la exactitud

histórica. Un trabajo de luces sencillo y claro con respecto a la hora del día y el lugar en que la

representación se encuentre, y no apoyaría la representación con ningún elemento audiovisual.


Universidad Central de Venezuela

Facultad de Humanidades y Educación

Escuela de Artes

Historia de la Puesta en Escena ll

Antoine

Metodológicamente, Antoine proponía un trabajo en conjunto, subordinando los divismos

actorales, con la autenticidad. Expandió el movimiento al espacio completo, permitiendo espaldas y

sombras, en cuanto diese mayor veracidad en las intenciones. Además busco la intensidad

emocional buscando que la figura del actor desapareciese por detrás del personaje, al contrario de

lo que proponían los divismos de la época. De esta manera, prefería trabajar con actores

aficionados o modestos para permitir una mayor honestidad profesional. Deseaba que el espectador

fuese testigo de une tranche de vie (un trozo de vida) real y tangible, encerrando a la escena en un

espacio privado, como si el espectador estuviese viendo a través de una cerradura, sin que los

personajes se percatasen de su presencia, permitiendo la naturalidad de los personajes con toda su

sordidez y vulgaridad.

Trasladaria objetos de la cotidianidad reales que chocaría, por ejemplo, con el cartón y pintura

que proponía en la obra de Meininger, alejándome también de los fondos pintados para

ambientación y demás. Algo antiespectacular y verista, trabajando con actores modestos que se

comprometieran a un proceso de eliminación de modismos espectaculares (espaldas, sobre-

proyeccion, falseo de voz y postura, etc) para dar paso a un proceso mas intimo y honesto. Utilizaria

escenografía y utilería real (paredes, copas, incluso pondría un tocadiscos de la época que pudiese

reproducir canciones de vinil), un vestuario igual naturalista en donde la exactitud histórica fuese
una pieza fundamental en la realización. Una iluminación íntima y nada espectacular, alejándome de

colores no naturales y creando una pared entre el espectador y el actor. En esta ocacion, tampoco

intervendría el texto dramático, mas allá de lo que funcione para darle naturalidad a los personajes.

Tampoco añadiría elementos audiovisuales, a excepción de las canciones de Gardel que se

escuchen desde el tocadiscos.


Universidad Central de Venezuela

Facultad de Humanidades y Educación

Escuela de Artes

Historia de la Puesta en Escena ll

Meininger

También podría gustarte