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Reforma y gobiernos liberales en Guatemala

A la muerte del general Carrera en 1865, fue sucedido por el Mariscal Vicente Cerna y Cerna,
quien no promovió ninguna renovación en el país. Esta circunstancia fue aprovechada por los
liberales, quienes se habían refugiado en el territorio de los Altos (actualmente
Quetzaltenango), y que liderados por Miguel García Granados y Justo Rufino Barrios, quienes
tras recibir ayuda de pertrechos de guerra de México (a cambio de reconocer la federación del
Estado de Chiapas a México, los territorios de la zona sur del Estado de Campeche y
Soconusco como parte de Chiapas) invadieron Guatemala bajo el lema de la Reforma Liberal
de 1871. Miguel García Granados fue presidente provisional tras el derrocamiento de Cerna,
gobernando hasta el 4 de junio de 1873. Su gobierno puso en marcha nuevamente las
reformas anticonservadoras, decretando entre otras cosas la libertad de prensa y la libertad de
cultos, la supresión de los diezmos y de las órdenes religiosas y expulsando a los jesuitas,
además de impulsar la educación laica.
Dos factores económicos importantes ocurrieron en este período: se introdujo la producción a
gran escala del café. Esto obedeció a que los terratenientes liberales de occidente fueron los
principales promotores de la Revolución; y, a fin de recompensar a los militares que
colaboraron con la revolución, se expropiaron las tierras de indios, extensiones de tierra donde
los indígenas guatemaltecos vivían desde la época colonial. Asimismo, se instituyeron las
rotaciones de los indígenas entre las propiedades de los nuevos terratenientes.37
Barrios, mientras tanto, ocupó importantes cargos militares, sucediendo a García Granados
como Presidente de Guatemala. Durante su gestión continuó la política iniciada en la anterior
presidencia, emprendiendo un vasto programa de reformas que abarcaron, entre otros
aspectos, a la Iglesia, la economía y la educación. Fundó el Banco Hipotecario, el llamado
hospital de Oriente, la Escuela Politécnica y mandó construir el Cementerio General de
Guatemala y la Penitenciaría Central de Guatemala. Además, durante su presidencia, en
Guatemala se tendieron las primeras líneas telegráficas y ferroviarias, firmándose el contrato
para la construcción del ferrocarril del Sur. En el orden administrativo y legal, se promulgaron
el Código Penal, el Militar y el Código Fiscal. Asimismo fueron creados los departamentos
de Retalhuleu y Baja Verapaz y se estableció la educación pública gratuita, a través de
escuelas en todo el país, suprimiéndose paralelamente las hermandades y órdenes religiosas.
Barrios también promulgó la Constitución de 1879 y, al año siguiente, fue reelegido Presidente
para un mandato de seis años.
Asimismo, se decreta el Reglamento de Jornaleros, legislación laboral que colocó a la
población indígena prácticamente a la disposición de los intereses de los nuevos latifundistas
cafetaleros, y los tradicionales conservadores.38 Como resultado de este reglamento, hubo un
notable aumento de las exportaciones, y se activó el intercambio con los países capitalistas;
tanto los antiguos conservadores aristócratas como los nuevos terratenientes cafetaleros se
vieron beneficiados con estas medidas.38 Ahora bien, sí hubo un terrateniente conservador
que fue atacado y despojado de los privilegios que había gozado durante el gobierno de los 30
años: la Iglesia Católica. Los liberales cafetaleros se vieron obligados a atacar a la Iglesia por
el poder que tenía y por la fuerte oposición que hacía a compartir el poder con los liberales.38
Por otro lado, Barrios persiguió enconadamente a la oposición, obligando a huir a muchos
guatemaltecos al exilio de las tierras guatemaltecas. Su gobierno se caracterizó por el saqueo
de las arcas nacionales, fortuna que fue disfrutada por su viuda en Nueva York, después de la
muerte del general.39 Barrios también fue objeto de críticas tras la firma, en 1882, del Tratado
Herrera-Mariscal de límites con México, mediante el cual Guatemala renunciaba a toda
pretensión sobre la región de Soconusco y a sus créditos contra México, sin recibir
compensación alguna por ello para el país: había recibido armas mexicanas durante la
revolución de 1871 que utilizó para derrocar a Cerna, pero nada más.
A principios de la década de 1880, el presidente guatemalteco intentó restablecer
las Provincias Unidas de Centroamérica y, en principio, contó con el apoyo de El
Salvador y Honduras, pero el presidente salvadoreño Rafael Zaldívar decidió luego abandonar
la unión, con el respaldo de México. El presidente mexicano, Porfirio Díaz, temía las reformas
liberales de Barrios y la competencia de un Estado fuerte en América Central, donde el plan
de Barrios había dado sus frutos, por lo que el gobierno mexicano propicio y apoyo la
desmembración de Centro América en pequeñas naciones en las que los Estados Unidos
Mexicanos podía influir y mantener sus intereses geopolíticos. También los Estados Unidos se
opusieron a la unión. Barrios emprendió entonces una campaña militar para restablecer por la
fuerza la unidad centroamericana, obteniendo el respaldo del Presidente de Honduras Luis
Bográn, pero Costa Rica, El Salvador y Nicaragua se aliaron para oponerse a sus
pretensiones. Para poner en práctica sus planes, Barrios invadió El Salvador en marzo de
1885, mientras tropas de Costa Rica y Nicaragua se aprestaban a enfrentarse con las
de Honduras. Sin embargo, la intentona de Barrios terminó súbitamente, ya que el Presidente
guatemalteco murió en la batalla de Chalchuapa, poco después de que sus tropas invadieran
territorio salvadoreño.40
A la muerte de Barrios, y a raíz de la renuncia del presidente provisional Alejandro M.
Sinibaldi, la Asamblea Nacional declara que el segundo designado a la presidencia de la
República asumiera el poder. La persona señalada era el general Manuel Lisandro Barillas
Bercián quien llegó en el instante del sepelio del general Justo Rufino Barrios y exigió que le
fuera entregado el poder, aduciendo que un número regular de tropa venía con él e indicando
que estaba acantonada a inmediaciones de la ciudad. Antes de que Barillas se valiera de
aquel ardid para presionar por la entrada inmediatamente de la presidencia, ocupaba el puesto
de jefe de político de Quetzaltenango. La tropa de la cual hablaba no existía y así marchó al
Palacio de Gobierno para asumir la primera magistratura de la Nación.40 Lo enmarcado dentro
de la ley era que Barillas convocara a elecciones en un tiempo posterior, aspecto que obvió
para quedarse en el poder imponiendo un gobierno dictatorial.
Durante los gobiernos liberales se inició la colonización alemana de la Verapaz; los alemanes
se organizaron en una comunidad muy unida y solidaria. Realizaban sus actividades sociales
en el Club Alemán o Deutsche Verein, en Cobán, fundado en 1888. En sus inicios, este grupo
solo estaba compuesto por socios germanos. El lugar fue remodelado y equipado para dar un
ambiente agradable, donde los alemanes se sintieran como en su país. Contaba con una
biblioteca, con libros y revistas donados por quienes viajaban a Alemania. A día de hoy, donde
antes estaba este club, ahora se encuentra la Sociedad de Beneficencia. Los alemanes
formaron su propio mundo en Alta Verapaz gracias a generosas concesiones otorgadas por
los presidentes liberales Manuel Lisandro Barillas Bercián, José María Reina Barrios y Manuel
Estrada Cabrera.39 Por el creciente número de niños alemanes verapacenses, se formó una
escuela alemana para que la educación académica fuera más fiel al Deutschtum
(alemanización).
El principal proyecto de Reyna Barrios fue la construcción de un ferrocarril interoceánico que
fuera atractivo para inversionistas extranjeros, y para promocionarlo, realizó la Exposición
Centroamericana en 1897. Desafortunadamente, el ferrocarril no pudo terminarse a tiempo y
la exposición fue un fracaso, que dejó a Guatemala con una gran deuda externa,
principalmente con bancos ingleses, y que a partir de entonces se llamó la «deuda inglesa». A
fin de solucionar los problemas del país, quiso extender su gobierno, pidiendo a la Asamblea
que modificara la Constitución de 1879 para tal efecto. Debido al descontento popular causado
por la inflación imperante (debido a la realización de la Exposición Centroamericana, a los
proyectos de embellecimiento y a la entrada de Brasil al mercado del café) se produce
la Revolución quetzalteca de 1897 la cual fue sofocada y saldada con el fusilamiento de
destacados ciudadanos quetzaltecos, entre ellos el alcalde primero de Quetzaltenango,
Sinforoso Aguilar y el filántropo Juan Aparicio, hijo.
En 1898, José María Reina Barrios fue asesinado por un ciudadano británico de origen suizo
llamado Edgar Zollinger (quien había sido empleado y amigo de Aparicio) y quien fue abatido
por la policía sin dar tiempo para que dijera cual fue la causa que lo motivó a perpetrar el
magnicidio. El primer designado a la Presidencia, licenciado Manuel Estrada Cabrera, tras un
hábil juego político se hizo con el poder.4142

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